¿Puede el mundo ayudar a que Venezuela revierta su trágica caída libre?/
Abraham F. Lowenthal, profesor emérito en la Universidad del Sur de California, fue el director fundador de la organización Inter-American Dialogue y del Programa de América Latina del Wilson Center; además, es coeditor, junto con Sergio Bitar, de Democratic Transitions: Conversations With World Leaders.
La semana pasada, con la decisión del Tribunal Supremo de Venezuela de usurpar las funciones de la Asamblea Nacional elegida democráticamente, Venezuela tomó otro giro negativo, aunque la sentencia haya sido parcialmente rescindida unos días más tarde.
Esta decisión fue solo el ejemplo más reciente de que el gobierno venezolano está atacando a la oposición y la disidencia. Ha encarcelado a algunos líderes políticos opositores e intimidado a otros; impidió el referendo revocatorio constitucional; pospuso indefinidamente las elecciones municipales y gubernativas, y anuló sistemáticamente la separación de poderes… todo mientras el deterioro económico y social del país se agrava cada día. El ataque del gobierno a la Asamblea Nacional podría ayudar a que la oposición promueva la protesta popular, pero es difícil saber cuánto tiempo durará y cuánto puede lograr.
En este momento, es urgente que los venezolanos consideren si la influencia externa podría ayudar a revertir la caída libre del país, y de qué manera lo haría. La participación internacional a veces puede facilitar la resolución pacífica de conflictos nacionales aparentemente incorregibles, pero esto requiere una estrategia clara y un esfuerzo continuo.