4 dic 2008

Escobar Gaviría ¿un hombre bueno?


Pablo Escobar Gaviría ¿un hombre bueno?
El martes 2 de diciembre fue un día de celebraciones religiosas en Medellín, Colombia; justo ese día se cumplieron 15 años de la muerte del capo más temido y odiado, mas respetado y admirado: Pablo Escobar, muerto hace 15 años víctima de una alianza heterogénea de sus muchos enemigos y ex amigos: narcos, policías y paramilitares.
Y, quince años despues su familia busca resarcir su ''oculto rostro de bondad'' con la venta de camisetas y recorridos en donde se cuentan sus secretos.
Su hermana Luz Marina Escobar Gaviria, llegó el martes al mediodía -vestida de negro- hasta el cementerio Montesacro, en Medellín, para arreglar minuciosamente la tumba de Pablo. Antes se habían celebrado por lo menos seis servicios religiosoas, en donde hermanos, primos, tíos y sobrinos del mayor narcotraficante en la historia de Colombia, y tal vez del mundo, lo recordaron con bondad.
''Hoy fue un día de tristeza y mucho dolor por la ausencia de Pablo. Estuvimos donde familias amigas que nos invitaron a celebrar misas. La única celebración pública fue en la iglesia de La Candelaria, pero allí, como en casi todas nuestras actividades diarias, tuvimos que pasar de incógnito'', dijo, su hermana a la agencia AFP.
En entrevista con Césara Sabogal, la mujer admite que su hermano ''hizo muchas cosas malas'' y por ello pide perdón en su nombre. ''El fue un hombre bueno, pero luego se torció su estrella. Su error fue haberse metido en la política'', enfatizó. ¿Caray? ¿Ahora resulta que si pecado es haber sido congresista?
Hay que recordar que Pablo Escobar llegó a poner de rodillas al gobierno, al aparato de la justicia y al parlamento colombianos; hasta el punto de que, mediante el soborno y el asesinato ("la plata y el plomo", como se decía en esos años) cambió leyes, financió campañas electorales, y pcontroló a magistrados, dirigentes políticos, periodistas, reinas de belleza, deportistas, oficiales de la Policía y del Ejército, jerarcas de la Iglesia católica. También en su época se asesinaron en Colombia a más de 40 jueces, 500 policías; hubo cientos de secuestros y otras tantas ejecuciones. Uno de las cosas graves fue en 1989 cuando terroristas a su mando hacen estallar un avión de Avianca en pleno vuelo; 197 personas murieron.
Dice su hermana que "ahora, el compromiso de nosotros es sacar a flote el oculto rostro de bondad de Pablo. Tenemos el compromiso de mostrar que él no fue el monstruo que quisieron presentar. Que fue un hombre bueno, un hombre con ambiciones pero también con mucho corazón'', añadió.
En ese propósito, la familia de Escobar planea, según la mujer, montar una fábrica de camisetas para "mostrar las muchas facetas de Pablo: el Pablo como líder comunitario, el Pablo amante de la naturaleza, el Pablo padre, hijo y amigo, el Pablo narcotraficante y, por qué no, el Pablo violento''.
Y bueno gracias a la figura del capo se organizarán recorridos turísticos donde se contará la "verdadera historia" dePablo.
''A Pablo no lo mataron. El se quitó la vida. Siempre le dijo a mi madre que no hay mafioso que muera de muerte natural ni que muera de viejo'', concluyó la mujer tras pedir que en la entrevista se diga que ella ""pide mil perdones por todo lo malo que hizo él''.
La casa donde Escobar fue abatido por la policía colombiana estuvo abandonada durante muchos años, y este martes, al cumplirse el 15 aniversario de su muerte, los medios locales informaron que recién fue vendida a un particular que tendría la intención de convertirla en un museo en su honor.
Su fama como gatillero, político inescrupuloso e implacable narcotraficante, fue tan grande para sus detractores como su lado ''altruista'' lo fue para humildes habitantes de la ciudad, para quienes se convirtió en poco menos que su redentor. En 1986 hizo construir 500 casas, en la que llamó 'Ciudadela Medellín sin Tugurios', y alojó allí a indigentes que vivían en un vertedero público. En ese sector, no se permite hablar mal de 'El Patrón', como le siguen llamando. Es rara la casa que no tenga una imagen del capo.
Fernando Botero le hizo un retrato póstumo (ilustración) representando su muerte a balazos en los tejados de Medellín.
Fuente: Entrevista de César Sabogal de la agencia AFP, publicado en El Nuevo Herald, 4 de diciembre de 2008;

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