BANDERAZO/Carlos Elizondo Mayer-Serra /
Reforma, 7 de junio
¿Cuál es la racionalidad de dar un banderazo de salida a un tren grafiteado de 1973 en el momento de mayor contagio de la pandemia? No lo sé.
Tras la cancelación del aeropuerto de Texcoco supimos que para AMLO la racionalidad técnica no era lo suyo.
Para él todo está en función de la lógica del poder. Mostrar quién manda.
No le iba a construir su aeropuerto al 30 por ciento. Menos si podía hacer enojar a esa élite que primero lo ninguneó, luego intentó impedir su llegada al poder, y ahora le hacía la barba.
Estuvo dispuesto a pagar el costo económico y financiero de su manotazo.
Pero irse de gira cuando estamos en el pico de la enfermedad es más difícil de entender.
¿Se trata de mostrar que el soberano está por encima de las reglas de su propio gobierno?
¿Es un teatral esfuerzo de demostrarle a su base electoral que está dispuesto a sacrificarse por su proyecto?
¿Se trata de un político desesperado porque su aprobación va a la baja y necesita arrancar la precampaña rumbo a las elecciones del 2021?
¿Es adicto a las giras y su ego requiere entrar con los brazos abiertos a un evento, aunque no haya gente? ¿O simplemente no le gustó eso de trabajar en los detalles para coordinar a un gobierno en el que cada uno va por su lado?
El banderazo parece haber sido el de salida de muchos mexicanos a las calles. Si esto lleva al repunte en los contagios, a muertos adicionales y a la necesidad de volver a confinar a la población y, por tanto, a sumar un daño económico adicional, será su responsabilidad.
No había necesidad de salir. Pero optó por hacerlo. Es muy reveladora su resistencia al tapabocas. Usarlo es sobre todo para cuidar al otro. AMLO no está cuidando a los mexicanos.
Hoy ya estamos viendo cuáles gobiernos actuaron bien y cuáles no. Quienes se guiaron por la ciencia y decidieron con frialdad, como Merkel en Alemania, domaron la pandemia.
En donde predominó el escepticismo sobre el coronavirus y el capricho como método de gobierno, les ha ido mucho peor. Quienes hoy encabezan la lista en muertes diarias por Covid-19 son Brasil, Estados Unidos y México.
Esto según los datos oficiales. Hay otro mundo: el de las muertes no registradas por coronavirus, el de quienes se murieron en casa para no pasar por la pesadilla de buscar una de esas camas disponibles que el gobierno reporta, pero parecen existir sólo en las estadísticas.
¿AMLO de veras no se da cuenta del enorme daño en términos de muertes, familias desmembradas, desempleados y en el aumento en el número de pobres?
Él sigue moralizando: "Estar bien con nuestra conciencia, no mentir, no robar, no traicionar, eso ayuda mucho para que no dé el coronavirus".
No entiendo cómo puede estar con la conciencia tranquila. En estas circunstancias, uno esperaría ver al jefe del Ejecutivo trabajando intensamente para asegurarles a los mexicanos la mejor calidad posible de servicios de salud y el mayor apoyo posible a quienes perdieron sus ingresos.
Él está en lo suyo, en disfrutar del poder.
O en lo que él cree que le conviene políticamente, aunque insisto, no entiendo cuál es esa rentabilidad política. Que alguno de sus defensores me explique.
La única lógica -perversa, por cierto- sería que cree que ganará electores en un mundo de pobres.
Frente al coronavirus AMLO se siente moralmente superior e inmune, pero al mexicano de a pie, y sobre todo a esos pobres por quienes dice estar preocupado, no les basta con no mentir, no robar y no traicionar.
Se están contagiando. Se están muriendo. Se están quedando sin ingresos.
Su banderazo de inauguración de las obras de un tren que probablemente nunca se termine, y si se logra acabar, estará fuera del alcance de esos millones de mexicanos que creyeron en él para ahora estar más pobres, será la imagen que resuma la indiferencia de un gobierno irresponsable.
Ego sum qui sum; analista político, un soñador enamorado de la vida y aficionado a la poesía.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Hoy es el recorrido de "La novia de Culiacán"
Guadalupe Leyva, o mejor conocida como «Lupita, la novia de Culiacán» es una leyendas de de la capital del estado. Este domingo 22 de dicie...
-
Socorro Romero Sánchez: "La Señorita, u na empresaria mexicana impulsada por su fe". Socorrito vive en el corazón de Tehuacán, viv...
-
Un general, Secretario de Seguridad Pública de Quirino Dice semanario Rio Doce, a 27 de diciembre de 2016 Genaro Robles Casillas ...
-
Carta de pésame/ Guadalupe Loaeza Reforma, 20 septiembre 2011 Querida Antonieta: Esta es la segunda vez que te escribo; la primera fu...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario