13 dic 2006

Trasferencia de militares a la PFP

Dijo el Presidente Calderón, en la Transferencia de Personal de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Secretaría de Marina
¡Y no hay democracia sin leyes y no hay un Estado donde la ley no se respeta y sí se hace respetar1
"Como he dicho antes, cumplir esta tarea no será fácil ni será rápido, pero la sociedad exige resultados y ello nos obliga a actuar de inmediato."

"Un Gobierno que actúa necesita organizar todos los recursos a su alcance, todos los recursos disponibles para hacer frente a la criminalidad y restablecer condiciones mínimas de orden y autoridad."
"Una vez logrado el propósito de fortalecer tanto a la policía como al Ministerio Público Federal en el cumplimiento de su deber estaremos en condiciones de restituir y reintegrar paulatinamente a las Fuerzas Armadas a las labores distintas a las de la coadyuvancia con las autoridades civiles que prevé la ley. ..-, El de cuidar en todo momento la identidad, la formación y, desde luego, la carrera militar de cada uno de los integrantes que coadyuvan en esta labor y, finalmente, de reintegrar paulatinamente al Ejército y la Armada de México los recursos y personal que hoy se pone al servicio del país en la tarea de seguridad nacional una vez que podamos superar la contingencia extraordinaria que en la materia enfrenta el país y que contemos, precisamente, con el apoyo del Congreso de la Unión para hacer ello posible."

"Nuestra política en materia de seguridad se guiará por los siguientes ejes rectores:
Primero. Una mayor coordinación y cooperación entre los tres órdenes de Gobierno; Para el Gobierno Federal queda claro: no podemos permitir que ningún estado de la República sea rehén del narcotráfico, del crimen organizado o de la delincuencia común....

Segundo. Asignaremos más y mejores recursos a nuestras instituciones encargadas de garantizar la seguridad pública.

Tercero. Vamos a modernizar el sistema de seguridad pública, mediante instituciones más eficientes y leyes más adecuadas. Por ello, he instruido al Procurador General de la República y al Gabinete de Seguridad para que, a más tardar en el mes de febrero, presente a la sociedad un programa para reformar los mecanismos de procuración de justicia y de seguridad...."

Hizo uso de la palabra el General Guillermo Galván Galván, secretario de la Defensa Nacional.; el lmirante Mariano Francisco Saynez Mendoza, Secretario de Marina. Y el ingeniero Genaro García Luna, Secretario de Seguridad Pública; estuvo presente Eduardo Medina Mora Icaza.
Genaro García Luna reconoció de "que no hay policías delincuentes, sino delincuentes infiltrados en la policía."

Esta es la ceremonia completa:
Discurso del Presidente Calderón:

Señoras y señores,
Señor Gobernador del Estado de México,
Señores Secretarios,
Distinguidos miembros del presídium,
Personal de las Fuerzas Armadas de México y de la Policía Federal Preventiva:
Salvaguardar la vida, la libertad y la integridad de los ciudadanos es la principal función del Estado, es la primera obligación del gobernante, es la primera misión de un servidor público.
Y no hay democracia sin leyes y no hay un Estado donde la ley no se respeta y sí se hace respetar.
Desde el 1 de diciembre me comprometí a encabezar un Gobierno que contribuya a la construcción de una Nación de libertades, una Nación cuyo progreso se sustente en la paz, en el orden, en el respeto, en la ley y en la justicia.
Una Nación democrática donde las mexicanas y los mexicanos podamos vivir en plenitud esos valores.
Este es uno de mis más altos deberes como Presidente y uno de los mayores retos de México.
En este compromiso con la sociedad y con el país la labor de la autoridad responsable del orden público es fundamental.
Por ello, en primer término, quiero felicitar calurosamente a los miembros de las Fuerzas Armadas y, en particular, a los de la Policía Federal Preventiva que hoy han recibido un justo reconocimiento a su patriotismo y a su entrega y cumplimiento del deber.
Gracias a mujeres y hombres como ustedes, día a día avanzamos en la delicada tarea de brindar a la sociedad la protección y la seguridad que requieren para vivir mejor.
Mi Gobierno está decidido a cumplir su obligación constitucional de salvaguardar las libertades y derechos de los mexicanos.
Como he dicho antes, cumplir esta tarea no será fácil ni será rápido, pero la sociedad exige resultados y ello nos obliga a actuar de inmediato.
El momento que vive México al inicio de esta Administración refleja un clima de preocupación de la ciudadanía debido al incremento de las acciones vinculadas a la delincuencia y, particularmente, a la delincuencia organizada.
Pienso todos los días en las hijas y en los hijos de los mexicanos, en los trabajadores que se ven despojados de su salario, en los padres de familia que son secuestrados, en los campesinos que son vejados.
Pienso también en las familias de los soldados y los marinos de México, pienso en las familias de los mexicanos y veo, precisamente, en el crecimiento de la delincuencia y la criminalidad una amenaza para el país, una amenaza a la seguridad pública, sí.
Pero hoy les digo que debemos evitar a toda costa que esta amenaza a la seguridad pública se convierta en una amenaza a la seguridad nacional, en la medida en que desafía al Estado mexicano.
Esta es la misión que hoy les encomiendo, enfrentar este grave reto de la seguridad pública con toda la fuerza del Estado.
Es mi deber como Presidente y el de todos los servidores públicos comprometidos con la seguridad de los mexicanos el sumar los esfuerzos, el actuar rápido y sin titubeos, el reunir la confianza y los recursos que nos ha depositado en nuestras manos el pueblo de México para actuar en resguardo del pueblo de México.
Un Gobierno que actúa necesita organizar todos los recursos a su alcance, todos los recursos disponibles para hacer frente a la criminalidad y restablecer condiciones mínimas de orden y autoridad.
Para cumplir con este deber fundamental de garantizar la seguridad nacional y, a la vez, la seguridad pública de los ciudadanos; es indispensable fortalecer, y cuanto antes, las labores de la Policía Federal Preventiva para que cumplan su tarea con efectividad.
Esta corporación requiere urgentemente de un mayor número de elementos con más y mejor capacitación y con un firme compromiso de servir a México.
Por ello, a partir de hoy, 10 mil elementos altamente capacitados, profesionales del Ejército Mexicano y de la Armada de México se unirán a los esfuerzos de la Policía Federal Preventiva.
Sé que su labor comprometida con la seguridad y el bienestar de los mexicanos, no sólo fortalecerá a la Policía Federal, sino fortalecerá a México.
En sus responsabilidades de vigilancia, de prevención de delitos, de protección civil y auxilio a la población descansa, precisamente, una buena parte del futuro del país.
Las tareas que habrán de realizar son de la mayor importancia para el bien de la Patria. Hoy, los enemigos de México se refugian, precisamente, en la debilidad institucional del Estado, que esta decisión revierte y fortalece, precisamente, en su vertiente institucional al Estado mismo.
El fortalecimiento de la acción del Gobierno en las tareas de seguridad es fundamental, precisamente, para retomar el camino del desarrollo integral de los mexicanos.
Les quiero hacer un reconocimiento muy especial a la valiosa labor, a la lealtad y al compromiso con México del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea por su colaboración permanente en la lucha contra la delincuencia.
Su lealtad y compromiso con la Patria quedan hoy refrendados en esta colaboración institucional con la Policía Federal.
Al mismo tiempo quiero refrendar mi compromiso de atender de inmediato las condiciones en las que viven el personal de tropa y de Marina.
Es por eso que hoy exhorto al Congreso de la Unión a valorar y a aprobar los apoyos para el personal de menores ingresos de las Fuerzas Armadas que he propuesto ante la Honorable Cámara de Diputados en el presupuesto para el próximo año.
Nuestro objetivo es el de contar con una Policía Federal fortalecida y unificada, capaz de actuar ante cualquier circunstancia, sobre todo en operaciones simultáneas en el país de la misma gravedad.
Una vez logrado el propósito de fortalecer tanto a la policía como al Ministerio Público Federal en el cumplimiento de su deber estaremos en condiciones de restituir y reintegrar paulatinamente a las Fuerzas Armadas a las labores distintas a las de la coadyuvancia con las autoridades civiles que prevé la ley.
Por eso instruyo para que en este proceso se consideren criterios elementales para preservar y en lo posible mejorar las condiciones y el desempeño de su labor de los elementos de la fortalecida Policía Federal Preventiva a la par de los elementos de las Fuerzas Armadas.
El de cuidar en todo momento la identidad, la formación y, desde luego, la carrera militar de cada uno de los integrantes que coadyuvan en esta labor y, finalmente, de reintegrar paulatinamente al Ejército y la Armada de México los recursos y personal que hoy se pone al servicio del país en la tarea de seguridad nacional una vez que podamos superar la contingencia extraordinaria que en la materia enfrenta el país y que contemos, precisamente, con el apoyo del Congreso de la Unión para hacer ello posible.
Al propio tiempo refrendo mi compromiso con lograr que en nuestro México se vivna nuevamente, condiciones de vida segura para las familias mexicanas.
Durante muchos años la falta de seguridad ha minado, hasta un punto verdaderamente preocupante la calidad de vida de los mexicanos y la capacidad de desarrollo del país.
Mi Gobierno tiene la prioridad de poner un freno a la delincuencia y devolver la tranquilidad a la ciudadanía y para cumplir con nuestra delicada tarea, nuestra política en materia de seguridad se guiará por los siguientes ejes rectores:
Primero. Una mayor coordinación y cooperación entre los tres órdenes de Gobierno; vamos a fortalecer la presencia del Estado en las ciudades y poblaciones donde existe mayor inseguridad.
Vamos a decirle con hechos al ciudadano que no está solo y que, precisamente, el Gobierno, las Fuerzas Armadas y la Seguridad Pública están con ellos y para ellos.
Que entendemos que nuestra labor es, precisamente, el servir al ciudadano.
Estableceremos, también, mecanismos de coordinación efectiva con las autoridades de las entidades federativas y de los municipios.
Todas nuestras acciones de combate a la delincuencia y crimen organizado deberán estar coordinadas y se realizarán con absoluto respeto a las atribuciones de cada orden de Gobierno.
Un ejemplo de ello es el Operativo Conjunto Michoacán puesto en marcha el día de ayer, al que le hemos dado el inicio de manera coordinada con el gobierno de este estado.
Con este operativo estamos ya proporcionando apoyo a las autoridades estatales para combatir el narcotráfico y la delincuencia y, sobre todo, para recuperar la seguridad de los michoacanos.
Estoy bien consciente que nuestro deber debe extenderse a todas las entidades federativas que así lo requieran
Y para ello no podría cumplirse con esa tarea sin este paso adelante que damos, precisamente, todos el día de hoy hacia ese fin.
Para el Gobierno Federal queda claro: no podemos permitir que ningún estado de la República sea rehén del narcotráfico, del crimen organizado o de la delincuencia común.
Es así como focalizaremos los esfuerzos de los tres órdenes de Gobierno para restablecer la seguridad pública en todo el país, particularmente, en las poblaciones más afectadas.
La corresponsabilidad será la clave para enfrentar con eficacia y contundencia a la criminalidad.
Yo estaré personalmente trabajando con los gobiernos estatales, con las instancias del Ministerio Público Federal y Seguridad Pública Federal y con las Fuerzas Armadas para conocer a fondo los problemas que enfrentan en esta materia, a fin de brindar el apoyo necesario.
La prioridad es garantizar la seguridad y tranquilidad de las familias mexicanas, de todas las familias mexicanas y, para ello, no hay tiempo que perder.
Segundo. Asignaremos más y mejores recursos a nuestras instituciones encargadas de garantizar la seguridad pública.
La semana pasada presenté al Honorable Congreso de la Unión el Proyecto de Presupuestos de Egresos de la Federación para el año 2007.
El Ejecutivo a mi cargo ha propuesto al Poder Legislativo un incremento del 12.4 por ciento real al gasto público destinado a la seguridad y de esta propuesta debe destacar un incremento del 58 por ciento a las tareas de seguridad pública regidas por la Secretaría del ramo y de casi 20 por ciento a las Fuerzas Armadas en términos reales.
He dicho que el Gobierno Federal será austero, y de ahí el Decreto de Austeridad del cual hemos exceptuado, precisamente, a las Fuerzas Armadas y a las áreas responsables de la seguridad.
Pero nuestra tarea de garantizar la seguridad de los mexicanos es tan fundamental que en ella no sólo no vamos a escatimar esfuerzos y recursos, sino vamos a reunir todo el Estado de fuerzas disponible para hacer frente a la criminalidad.
Utilizaremos toda la fuerza del Estado para devolver a nuestra sociedad la paz y la tranquilidad que demanda.
Tercero. Vamos a modernizar el sistema de seguridad pública, mediante instituciones más eficientes y leyes más adecuadas.
Por ello, he instruido al Procurador General de la República y al Gabinete de Seguridad para que, a más tardar en el mes de febrero, presente a la sociedad un programa para reformar los mecanismos de procuración de justicia y de seguridad.
Impulsaremos su modernización para garantizar mayor eficacia, para que los delitos sean perseguidos y castigados de manera expedita, pronta, con total transparencia y absoluto respeto a la ley y a los derechos humanos.
Parte importante de este esfuerzo de modernización consiste, precisamente, en dotar y de manera inmediata a la Policía Federal de un Estado de fuerza y capacidad operativa que le permita actuar desde ahora y enfrentar de manera simultanea distintas circunstancias que comprometen a la seguridad de los mexicanos y el cumplimiento de la ley.
Distinguidos miembros del presídium, señoras y señores:
Los derechos y las libertades son tales, que sólo pueden ser garantizadas por el Estado.
Creo firmemente que todos los mexicanos, a pesar de la adversidad, podemos construir una Nación de libertades, una Nación en la que cada niña, cada niño, independientemente de su condición social, origen étnico, credo religioso pueda caminar libremente por cualquier calle y por cualquier camino del país.
Y cada mexicana y cada mexicano pueda, precisamente, vivir en México con la seguridad de ser un ser libre.
Una sociedad donde los delincuentes estén tras las rejas y los ciudadanos libres y, precisamente, en sus casas, en las calles, en sus trabajos, en sus escuelas.
Aspiro a que nuestro México sea una Nación de orden, de paz, de libertad, de justicia, de democracia; un México más seguro, un México más limpio, un México más justo, un México más libre y a final de cuentas ese ha sido el anhelo de nuestros héroes, de nuestros fundadores.
Por eso vamos a trabajar hombro con hombro con nuestras fuerzas encargadas de la seguridad nacional y de la seguridad pública.
A todos ustedes que se incorporan a estas labores de coadyuvancia con la Policía Federal Preventiva, les ordeno trabajar sin descanso para garantizar la seguridad de las personas, dedicarse a su labor con lealtad, con patriotismo y entrega.
Como Comandante Supremo instruyo para que sirvamos a la Patria con justicia, con valentía y compromiso, con integridad, rectitud y profesionalismo.
Mi Gobierno, con el apoyo de sus policías y de las Fuerzas Armadas de México, va a combatir con mano firme a la delincuencia organizada y a todo criminal.
Haremos que prevalezca el derecho por encima de la violencia, haremos retroceder a la delincuencia.
No permitiremos que los criminales sigan obstruyendo el camino de México a un futuro de mayor prosperidad y desarrollo.
Lo vamos a hacer por nosotros y por los que vienen, por nuestros hijos; lo vamos a hacer porque es nuestro deber y también porque queremos entrañablemente a México.
Lo vamos a hacer por el bien de la Patria que, al final de cuentas, es la vocación que a todos hoy nos tiene reunidos este día.
Muchas gracias.
MODERADOR: Hará uso de la palabra el ciudadano General Guillermo Galván Galván, secretario de la Defensa Nacional.

-SECRETARIO GUILLERMO GALVÁN GALVÁN: Ciudadano licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas.
Distinguidos miembros del presídium.
Ciudadanos generales, jefes, oficiales y tropa de la 3/a Brigada de Policía Militar.
Damas y caballeros, compañeros de armas:
La seguridad es un bien común de todos los mexicanos, es una aspiración arraigada en la voluntad colectiva de la ciudadanía.
Es constitucionalmente una función a cargo del Estado que tiene como fines salvaguardar la integridad y derechos de las personas, así como preservar la libertad, el orden y la paz pública.
Es un imperativo para responder a las necesidades gregarias del hombre y está orientada a ofrecer condiciones de estabilidad y las relaciones cotidianas del quehacer nacional, preservando ante todo el interés social.
Fue la protesta de fortalecimiento de la seguridad pública uno de los ejes rectores de la campaña presidencial de nuestro mando supremo, cuya materialización continúa hoy con este acto de transferencia de siete mil 500 hombres que constituyen la III Brigada de Policía Militar a los activos de la Policía Federal Preventiva.
En este acto, el Ejército Mexicano cumple las directivas del Ejecutivo Federal al proporcionarle una fuerza organizada y preparada para desempeñar tareas en beneficio de la sociedad y sus instituciones.
Nuestro Comandante Supremo, el Presidente de la República, licenciado Felipe Calderón Hinojosa, nos ha instruido de manera expresa y enfática para que hagamos de la colaboración institucional una de nuestras prácticas sistemáticas de operar.
Así, el Ejército y Fuerza Aérea mexicanos concurren en uno de los retos fundamentales del Estado mexicano como lo es el de proporcionar la seguridad que se requiere de manera impostergable en todo el territorio nacional las 24 horas del día para el bienestar y consolidación de los afanes y empeños de la sociedad en su conjunto.
El Ejército y Fuerza Aérea son brazos armados fuertes y capaces del Estado mexicano y sienten en la Policía Federal Preventiva y la Secretaría de Seguridad Pública dos versiones del mismo cometido, elevado y trascendente.
Somos parte del mismo poder legítimo, del mismo orden constitucional y de la misma vértebra ética.
Por eso hoy coadyuvamos con el mismo horizonte institucional y con un objetivo común al integrar esta Unidad de Policía Militar a los operativos, estrategias y acciones que instrumentará la Policía Federal Preventiva en este nuevo e intenso impulso de gobernabilidad y certidumbre plenas que encabeza nuestro Comandante Supremo para dar confianza a la sociedad y mayor viabilidad al desarrollo nacional.
Estoy convencido, porque conozco a nuestros soldados y porque me enorgullezco de ser parte de esta vertiente institucional de la República que porta con orgullo el uniforme de la Patria, que ustedes, integrantes de esta brigada, sabrán desempeñar con honor, valor y vigor las tareas que se les encomienden.
La preparación física, intelectual y de valores de cada integrante de esta brigada de Policía Militar son garantía de trabajo, empeño y entrega a las misiones que tendrán que realizar en pro de la sociedad.
Esta no es la excepción, sino una oportunidad más de poner a prueba nuestro entrenamiento, vocación de servicio y temple de soldados al llamado de la Nación.
Los mexicanos estamos obligados a colaborar sin restricciones en todo lo que a México beneficie.
El futuro de la Patria está marcado en la grandeza de su gente.
Muchas gracias.

-MODERADOR: Escuchemos las palabras que dirigirá el ciudadano Almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza, Secretario de Marina.
-SECRETARIO MARIANO FRANCISCO SAYNEZ MENDOZA: Ciudadano licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas; distinguidas personalidades de la Administración Pública Federal y estatal que nos honran con su presencia; generales, jefes oficiales y tropa de la 3/a Brigada de Policía Militar; damas y caballeros; compañeros de armas:
El señor Presidente de la República y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas ha destacado que el desarrollo nacional es uno de los principales retos que México enfrenta en la actualidad y será prioridad en la nueva etapa que México inicia con su Gobierno.
En este contexto el desarrollo humano pleno exige, también, garantías de seguridad, es decir, requiere certidumbre para que la gente pueda desarrollarse en forma libre y segura con la tranquilidad de que en el futuro no perderá los logros alcanzados.
Desarrollo y seguridad son aspiraciones genuinas de nuestro pueblo y para llegar a esta condición la orden del señor Presidente Calderón, contempla el mantenimiento del Estado de Derecho como el primero de los cinco ejes rectores que dan sustento a su acción de Gobierno.
Nuestro país enfrenta amenazas a la seguridad cuya neutralización implica el concurso decidido de la totalidad de las instituciones con responsabilidad de garantizarla y la Secretaría de Marina, Armada de México, como parte de ellas, emprende con gran disposición dentro de sus facultades legales las acciones necesarias para alcanzar los objetivos trazados por su Comandante Supremo y exigidos por nuestra sociedad.
Los hombres y mujeres que forman la Armada diariamente entregan el mayor de sus esfuerzos en la defensa de los objetivos e intereses nacionales.
Y en esta ocasión lo harán apoyando las vitales responsabilidades de la Secretaría de Seguridad Pública, facilitando el ejercicio de sus atribuciones en la solución de los problemas que aquejan al país.
El personal que pasa a comisionado temporalmente sigue perteneciendo a la Armada de México y la institución verá por ellos en todo momento en lo relacionado con sus percepciones, prestaciones, seguridad social y entrenamiento naval.
El contexto que conformará la base de transferencia definitiva se encuentra en proceso y tendrá como pilar fundamental la decisión personal de cada elemento y su convencimiento para continuar prestando servicio en la Armada de México o ingresar permanentemente a las filas de la Policía Federal Preventiva.
Las instituciones responsables de la seguridad del Estado mexicano debemos alcanzar un nivel operativo que nos permita en forma conjunta alcanzar los niveles de eficiencia que demanda la sociedad en la totalidad del territorio nacional.
Con lealtad y efectividad hemos de responder ante la gran responsabilidad que la ley nos señala; para hacer frente a estos retos contamos con un liderazgo firme, fuerte, comprometido y capaz de un Presidente que lucha por crear las condiciones que impacten positivamente en la calidad de vida de la población.
Y con estas acciones, estamos ya comenzando a construir el escenario para un desarrollo que afiance a México en el control de su destino.
Históricamente, la Armada de México siempre ha estado ligada a las mejores causas nacionales.
Desde la Independencia misma, los marinos militares han actuado en defensa de la Nación al enfrentar las amenazas a su sociedad y auxiliándola ante la presencia de desastres naturales, y así seguirá siendo en el futuro.
Nuestro actuar será siempre en defensa de los intereses nacionales, contribuiremos sin autoritarismos y sin titubeos a conformar ese liderazgo sólido que se requiere para impulsar las grandes transformaciones del país, que habrán de conducirnos a consolidar de manera exitosa una democracia fuerte que proteja cabalmente la libertad y el patrimonio de los mexicanos.
Muchas gracias.

-MODERADOR: El ciudadano ingeniero Genaro García Luna, Secretario de Seguridad Pública, hará uso de la palabra.
-SECRETARIO GENARO GARCÍA LUNA: Licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos; General Guillermo Galván Galván, Secretario de la Defensa Nacional; Almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza, Secretario de la Marina y Armada de México; licenciado Eduardo Medina Mora Icaza, Procurador General de la República; representantes de medios de comunicación; señoras y señores:
Buenas tardes.
Hoy es un día histórico para la seguridad pública en México, la transferencia de siete mil 500 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de mil 500 elementos de la Armada de México forman parte de una estrategia del Gobierno Federal para responder a su obligación de mantener y de establecer el orden y la paz pública.
Esta medida contribuye a potenciar la capacidad de respuesta de la Policía Federal en el combate al delito, así como para actuar en apoyo a entidades federativas que así lo requieran.
Estamos conscientes de que para volver a garantizar la seguridad a millones de mexicanos necesitamos de una policía eficiente y profesional, consciente de que es un honor y un privilegio el servir a su país, a su Patria.
Es en la suma de esfuerzos y capacidad de los agentes de orden público donde el país encuentra la tranquilidad en sus calles.
Reconocer en toda su magnitud el valor y el sacrificio de nuestros buenos policías es una deuda que tenemos como sociedad.
Esta ocasión es propicia para reconocer a todos aquellos policías federales que entregaron lo más valioso que tenían: sus vidas.
Noventa policías federales entregaron sus vidas por un sueño, por su anhelo de vivir en un país cada vez mejor.
A sus familiares y amigos les decimos que el sacrificio de nuestros compañeros no fue en vano.
A nuestros colegas, que sufren discapacidad por lesiones en el cumplimiento de su deber les aseguramos que vamos a darle seguimiento a su esfuerzo y no les vamos a fallar.
Tengo la convicción de que no hay policías delincuentes, sino delincuentes infiltrados en la policía.
Por todos los policías caídos en cumplimiento de su deber, por las víctimas de la delincuencia, por un mejor futuro para México y para todos combatiremos con energía y decisión a los corruptos.
Estamos unidos por un gran esfuerzo en la lucha contra el crimen y la delincuencia.
Es motivo de satisfacción reconocer el esfuerzo, la entrega y el desempeño de 791 policías federales que se han distinguido en el desempeño de sus funciones.
Señor Presidente:
El seguimiento a sus superiores instrucciones, está en marcha la reingeniería al modelo de combate al crimen en nuestro país.
La Secretaría de Seguridad Pública reitera su compromiso de servir y proteger a la sociedad con honestidad.
Gracias.

-MODERADOR: A continuación, el ciudadano Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, hará entrega de reconocimientos y estímulos; así como vehículos y equipo al personal de la Policía Federal Preventiva por su destacada labor al servicio de la Nación.
Reciben de manos del ciudadano Presidente de la República, reconocimiento y estímulos familiares del personal caído en el cumplimiento de su deber.
Señora Josefina Palacios Carrasco, viuda del que fuera inspector General Miguel Ángel Villanueva Escobar.
Señora Marcela López Plata, viuda del que fuera Sub-oficial Luis Antonio Palacios Tepos.
El personal que a continuación se cita recibe reconocimientos y estímulos por su destacada participación en actividades de su especialidad:
Inspector Aldo Galeasi Hidalgo, Subinspector Ricardo Moreno Sandoval, Subinspector Jaime Rivera Rangel, Subinspector Julio Fernando Segura González.
Asimismo, se otorga promoción especial del grado de Oficial a Subinspector a José Escamilla Robles.
De igual manera, recibe de manos del Comandante Supremo mención honorífica, el ciudadano General de Brigada Álvaro Moreno Moreno, en reconocimiento a la 3/a Brigada de Policía Militar.
De forma simbólica se hace entrega de llaves de vehículos patrulla al personal que a continuación se cita:
Suboficial Ilya Vladimir Alonso López, Suboficial José Ignacio Gómez Delgado.
En representación del personal de la Policía Federal Preventiva se hace entrega en forma simbólica de chalecos antibalas, como equipo de seguridad a los suboficiales Joaquín Barbosa Pérez, Luis Miguel López Benítez.
Fuente. Presidencia de la República.

No hay comentarios.:

Fuera de Agenda / Los lastres de Sinaloa

Retrato del general Mérida…, el que se fue!, se tardó  Columna de Juan Veledíaz El Sol de México,  5 DE DICIEMBRE DE 2024 Fuera de Agenda / ...