Palabras del Presidente Felipe Calderón, a su llegada al Aeropuerto Internacional de Jerez de la Frontera
Cádiz, España, 16 de noviembre de 2012
Muy buenos días.
Es para mí un honor el participar en esta edición de la Cumbre Iberoamericana.
En esta ocasión con un significado tan especial, como realizarse en esta histórica ciudad y región de Cádiz, donde tuvo lugar la discusión y suscripción de la Carta Magna que dio origen a las libertades de Iberoamérica.
Paradójicamente, la Carta Magna que generó el inicio de la soberanía para todos los pueblos, incluyendo desde luego el pueblo de España, pero que dio origen, a la vez, al despertar de la soberanía y, consecuentemente, de la Independencia y de la Constitución de nuevos países en toda América Latina.
Esta cumbre tiene un significado muy especial, dado que se celebra en el marco del Bicentenario de la Constitución de Cádiz.
Sin duda alguna, el actual entorno de la crisis económica y financiera global plantea enormes retos a las naciones iberoamericanas.
Por eso, es más que nunca necesario profundizar en el diálogo político y en la cooperación de nuestros gobiernos.
En esta cumbre habré, por lo mismo, de reiterar a España y a Portugal la solidaridad del pueblo y del Gobierno de México, y nuestra firme disposición para respaldar las medidas que les permitan, en el contexto global, superar más rápidamente la adversidad de la actual crisis económica.
En el plano personal, esta cumbre, además, tiene un significado muy especial, dado que será la última cumbre internacional en la que participaré como Presidente de México y podré agradecer personalmente a mis homólogos iberoamericanos su apoyo a lo largo de seis años de Gobierno.
Desde la creación de la Conferencia Iberoamericana, en 1991, particularmente en México, en Guadalajara, nuestro país ha jugado un papel preponderante y muy participativo en este foro de diálogo, concertación y cooperación política que agrupa a 22 países.
Seguiremos trabajando con los pueblos de Iberoamérica, como lo hemos hecho con los pueblos del mundo en diversos foros internacionales, donde México ha tenido una política exterior responsable y activa.
En estos años, México volvió a ser protagonista en temas globales, gracias a la dinámica de participación que tuvimos en foros tan importantes, como la COP16, el G20, el Grupo de Río, el Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas y, desde luego, esta cumbre.
Nos propusimos que hubiera más México en el mundo y más mundo en México, y lo logramos. Y hoy asistimos a esta cumbre satisfechos de ver a nuestro país más hermanado y con lazos de cooperación más sólidos que nunca con las naciones de toda Iberoamérica.
Muchísimas gracias.
Y estoy seguro que la Cumbre Iberoamericana de Cádiz será todo un éxito, y una Cumbre digna de celebrar el Bicentenario de tan singular e histórico acontecimiento, como fue la Constitución que le dio la luz, la libertad y la soberanía a todos nuestros pueblos.
Muchas gracias.
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