¿Es el mayordomo del Papa el "garganta profunda"?

Esta en juego la sucesión papal!

El Papa este miércoles en la plaza de San Pedro con su mayordomo (con corbata) y su secretario personal. / Andrew Medichini (AP)

“El Cuervo” sería el mayordomo del Papa/FA
Aires de sucesión papal.
Paolo -Paoletto-. Gabriele, el mayordomo de Benedicto XVI fue detenido la tarde del jueves 24 de mayo acusado de ser “el cuervo”, el “garganta profunda” que difundió correspondencia privada del Benedicto XVI, el denominado Vaticanleaks.
El mayordomo papal  está acusado de “robo de la correspondencia de un jefe de Estado”, un delito equivalente al de “atentado contra la seguridad del Estado”, penado hasta con 30 años de cárcel.
La prueba la encontró Domenico Giani, el comandante en jefe de la Gendarmería vaticana. Se trata de numerosas fotocopias de la correspondencia privada del Papa: “Cajas repletas de documentos y el aparataje necesario para fotografiar y reproducir documentos”. Y  pese a que las pruebas halladas en “el nido del cuervo” parecen definitivas, nadie cree que Paolo haya sido capaz de urdir en solitario una conspiración de tal magnitud.

La confirmación de la identidad del “topo” fue hecha por portavoz vaticano Federico el sábado 26 de mayo.  Según el sacerdote jesuita, se ha concluido la primera fase de instrucción sumaria, bajo la dirección del fiscal del Vaticano, Nicola Picardi, y se ha abierto el periodo de instrucción formal, a cargo del juez Piero Antonio Bonnet.

Informó que el imputado ha nombrado a dos abogados de su confianza que tienen licencia para actuar ante la justicia vaticana. “Él([Gabriele) goza de todas las garantías jurídicas previstas por los códigos penales y de procedimiento penal en vigor en el Estado de la Ciudad del Vaticano", explica Lombardi.
El portavoz vaticano añadió que las investigaciones proseguirán hasta obtener "un cuadro adecuado de la situación", y agregó "si alguien piensa que se ha resuelto todo, yo digo que no", añadió. Aunque con mucha cautela, insinuó que puede haber novedades.
La prensa italiana y los más reputados vaticanistas están convencidos de que el mayordomo no actuó solo, que puede ser un chivo expiatorio.
"La fase de instrucción continuará hasta que no se haya conseguido un cuadro adecuado de la situación objeto de investigación, tras lo que el juez instructor procederá a la absolución o al envío a juicio", concluye.
De confirmarse la acusación de la filtración y ser juzgado, el mayordomo puede ser condenado hasta a 30 años de cárcel por violación de la correspondencia de un jefe de Estado, como es el Papa, equivalente a un atentado contra la seguridad del Estado.
¿Quién es el “El Cuervo”?
Se trata de un hombre de  buena apariencia, de 46 años, y pertenecía al circulo papal desde el año 2006, era quién lo despertaba todos los días, le ayudaba en el servicio religioso privada, lo acompañaba en el desayuno, el almuerzo y la cena. “Lo acompañaba al caer la tarde en su paseo por el jardín, elegía la menta perfumada para la infusión, le daba las medicinas justas y, en torno a las nueve de la noche, le ayudaba a desvestirse para ir a la cama.” (El País)
Hay tres versiones del porque lo habría hecho
La primera sostiene que la filtración de documentos solo buscaba un interés económico (descartable esa posibilidad, sólo hay que buscarle la pista el dinero), la segunda versión considera que lo hizo por un deseo altruista de ayudar a la Iglesia sacando a la luz casos de corrupción; y la tercer versión- la más creíble-, gira en torno a que el mayordomo solo sería un chivo expiatorio, un instrumento en manos de alguna de las facciones de la Curia vaticana que tratan de desacreditar al actual secretario de Estado, monseñor Tarcisio Bertone, y de paso posicionarse ante la sucesión de Benedicto XVI.
Se esperan más detenciones.
En una hipótesis sin confirmar, el diario “La Repubblica” afirma que entre los«topos» figura una mujer joven italiana, casada, “que trabaja en el Palacio Apostólico y que, sacando a la luz papeles internos de la Santa Sede intenta bloquear algunos cardenales”. Según el diario esta persona formaba parte del equipo que acompañó el pasado mes de marzo al Papa en su viaje a México y Cuba.
Empero, quienes conocen a Paoletto están seguros de que ha sido utilizado y de que, desde luego, no es el «piloto» de la gigantesca y refinada maniobra para derribar al secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone.
Los rumores –sin confirmar y quizá malintencionados- apuntan como posible “piloto” a un cardenal italiano.  Mmm. Son los aires de sucesión que rondan la Ciuria vaticana.
El escándalo de las filtraciones
El pasado mes de abril Benedicto XVI creó una Comisión Cardenalicia para esclarecer los casos de filtraciones de documentos reservados vaticanos a los medios de comunicación. Como titular de la misma nombró al cardenal español Julián Herranz, de 82 años, ex presidente del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos, y como miembros a los también purpurados Jozef Tomko, eslovaco, prefecto emérito de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, de 88 años, y a Salvatore De Giorgi, ex arzobispo de Palermo (Italia), de 82 años.
La comisión se creó después de que una cadena de televisión italiana (La 7) publicara unas cartas enviadas por el actual nuncio en EU y ex secretario general del Governatorato de la Ciudad del Vaticano (Gobierno que gestiona este Estado), Carlo María Viganó, a Benedicto XVI, en las que denunciaba la "corrupción, prevaricación y mala gestión" en la administración vaticana.
El pasado día 19 salió a las librerías el libro 'Sua Santita', del periodista Gian Luigi Nuzzi, con un centenar de nuevos documentos filtrados desde el Vaticano que desvelan tramas e intrigas en el pequeño Estado.