Busca
Texas a 166 narcos mexicanos
Benito
Jiménez
Reforma, (10 abril 2013).- La justicia
texana busca a 166 narcotraficantes mexicanos por trasiego de drogas.
La
mayoría de ellos pertenece a cárteles mexicanos que, a decir de un estudio del
Departamento de Seguridad de Texas, han expandido sus operaciones de tráfico y
violencia por el control de rutas.
Desde
las ciudades tamaulipecas de Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo y en Ciudad
Juárez, Chihuahua, la delincuencia brinca a las carreteras de Texas para,
posteriormente, trasladar la droga a los estados ubicados en la zona este.
La
agencia de lucha contra el tráfico de drogas (DEA, por sus siglas en inglés)
indica en su página web que de los 166 mexicanos prófugos, al menos 50
radicaron en condados texanos como Edinburg, Brownsville, San Antonio, McAllen,
Nuevo Laredo, Austin, Houston, Dallas y El Paso para coordinar los pagos,
envíos y distribución de la droga a otras ciudades de Estados Unidos.
Algunos
de los narcotraficantes mexicanos requeridos por la justicia son Joaquín
"El Chapo" Guzmán e Ismael "El Mayo" Zambada, líderes del
Cártel del Pacífico.
A
Zambada se le acusa de traficar cocaína y mariguana a los Estados Unidos, vía
Texas, de utilizar empresas legales para dicho fin, lavado de dinero, secuestro
y homicidio.
Guzmán
y Zambada están acusados en una Corte de El Paso.
También
figura entre los acusados en Texas Mario Ramírez Treviño, "El Pelón",
uno de los presuntos líderes del Cártel del Golfo, organización que pasa por
una crisis interna sobre la definición de liderazgos.
Además,
destaca Miguel Ángel Treviño Morales, "Z-40", presunto cabecilla de
Los Zetas, quienes mantienen una guerra contra los cárteles del Pacífico y del
Golfo por el control de los puentes fronterizos con Texas.
Ramírez
Treviño y Treviño Morales son requeridos por la Corte de Houston.
Dominio
de rutas
Jaime
González Durán, "El Hummer", uno de los fundadores de Los Zetas,
mantuvo hasta 2008 el control de las rutas de ese estado norteamericano, de
acuerdo con fuentes ministeriales.
El
dominio lo ejercía desde Reynosa, donde a la postre fue detenido en noviembre
de 2008 con más de 400 armas y 200 granadas.
Esa
baja elevó el poder del Cártel de Pacífico en Texas, coinciden las fuentes
consultadas.
La
pugna entre el Cártel del Golfo y Los Zetas en 2010 favoreció aún más a la
organización de "El Chapo".
Las
autoridades de Texas han documentado que el flujo de drogas, una vez
introducidas en territorio estadounidense, parte de El Paso, Laredo, McAllen y
Brownsville, a San Antonio, Austin, Houston y Dallas.
No
obstante, también han alertado una escalada de violencia por las batallas entre
los cárteles de la droga, unos para recuperar territorios y otros para
defenderlos.
Desde
noviembre de 2012, las autoridades texanas han solicitado al Gobierno de Barak
Obama un mayor apoyo para enfrentar la inseguridad provocada por las
organizaciones criminales mexicanas, cuyos integrantes viven y operan en Texas.
Fuentes
militares en Reynosa indicaron que Los Zetas se han trasladado a El Paso, ruta
controlada por el Cártel del Pacífico, para "calentar" la plaza.
Diversos
medios de ese estado norteamericano han registrado reyertas entre esas dos
organizaciones y de ambas con las Policías texanas locales.
Los
enfrentamientos se han reportado en el Condado Hidalgo, El Paso, Pinal, cerca
del Fort Hancock, McAllen, Houston y Dallas, de acuerdo a los reportes de
prensa texanos.
Desde
2011, Steven C. McCraw, jefe del Departamento de Seguridad Pública de Texas
(DPS, por sus siglas en inglés) alertó que las organizaciones delictivas han
corrompido a los jóvenes de ese estado para enrolarse a las filas del
narcotráfico.
La
policía de Texas ha efectuado desde 2007 más de 300 detenciones de integrantes
del crimen organizado, tanto mexicanos como estadounidenses, derivado del
tráfico de drogas, principalmente cocaína, mariguana y metanfetaminas.
Alerta
en vías terrestres
En
el trasiego de droga, los cárteles mexicanos operan en cinco corredores
carreteros de Texas y roban vehículos comerciales con registros oficiales para
trasladar enervantes, armas y dinero.
En
ello coinciden los informes de la agencia antidrogas estadounidense DEA y el
reporte 2013 de amenazas a la seguridad de la oficina de Seguridad de Texas.
Las
autoridades de aquella entidad estadounidense detectaron cinco rutas de la
droga dominadas por los narcotraficantes de México en la red de carreteras
estatales y federales.
En
2011, la Policía giró alertas para 307 vehículos comerciales robados y fueron
hallados en ellos cargamentos de droga.
Sólo
de mariguana se decomisaron 228 toneladas ese año en transportes sustraídos de
empresas legales, asienta el Resumen 2013 de Amenazas a la Seguridad.
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