El papa Francisco bendecido por evangélicos

El papa Francisco bendecido por evangélicos/FA

Publicado en La Otra Opinión, 5 de junio de 2013.

A partir de esta semana se muestran imágenes -la mayoría inéditas- del Cardenal Jorge Bergoglio SJ del fotógrafo argentino Jorge Cangas denominada: "Francisco: servidor en Buenos Aires, servidor para el mundo". Las imágenes fueron capturadas durante casi una década y hoy pueden verse desde ayer y hasta el 28 de junio, en el convento de  Santa Catalina en Buenos Aires.

¡Una de ellas es sorprendente, lo bendicen pastores evangélicos!

 Las imágenes fueron capturadas durante casi una década y hoy pueden verse desde ayer lunes 3 y hasta el 28 de junio, en el convento de Santa Catalina, en San Martín 705de la ciudad de Buenos Aires.

“Mi objetivo es mostrar que las actitudes y los gestos del papa Francisco que hoy asombran al mundo y abren una etapa de esperanza para toda la iglesia, son una continuación de lo que demostró en Buenos Aires durante su ministerio pastoral como arzobispo de la ciudad”, cuenta Jorge Cangas, quien tuvo la oportunidad de retratar al cardenal en decenas de oportunidades, durante encuentros, charlas, misas, peregrinaciones y múltiples actividades.

Su participación en las tradicionales marchas de Corpus Christi junto a los jóvenes porteños, sus encuentros con los hermanos evangélicos en el Luna Park, sus gestos de cercanía con la feligresía de Buenos Aires, su tenacidad y humildad para trasmitir la palabra de Dios en innumerables homilías y charlas, son algunas de las escenas que reflejan las imágenes de la muestra.

Orando por Francisco:

 Cuando el colegio de cardenales nombraron a Francisco aquella tarde del miércoles 13 de marzo, un líder evangélico en México. me habló por teléfono y me dijo que por alguna razón -algo vio-, le había gustado el designación de ese hombre llamado hoy Francisco, y que habían orado por el; me comento incluso que muchos católicos podrían regresar de nuevo a los templos católicos si lograba contaminar con esa sencillez y humildad  de pastor.

Me sorprendió que me haya dicho eso. Por cierto, nunca me dijo que habían orado por Benedicto XVI, o por Juan Pablo II . Semanas después, el ex sacerdote brasileño Genésio Darci Boff –más conocido como Leonardo Boff – y uno de los mayores críticos de la curia papal y concretamente de Benedicto XVI-, afirmó en una entrevista que "con el nuevo papa no habrá olor a altares, sino olor a pueblo”. El emblemático teólogo de la liberación aseguró que Francisco será un renovador tras dos pontificados que califica de “fundamentalistas”.

Escribí sobre el tema emocionado por la posibilidad de un cambio en la iglesia católica, sobretodo por la llegada del papa número 266, el primer americano, el primer jesuita en la historia del papado. (Francisco: Jesuita, americano, culto y humilde/Fred Alvarez, revista Código Topo de Excélsior, 1 de abril de 2013 y otros más en La Silla Rota).

-¿Aceptas tu elección canónica para sumo pontífice?-, le pregunto Giovanni Battista Re, cardenal sustituto en funciones al Decano del Colegio Cardenalicio durante el Cónclave.

Una vez recibido el consentimiento, le preguntó de nuevo:

-¿Con qué nombre quieres ser llamado?”

-¡Francisco!-, respondió.

¡Y hasta el nombre nos sorprendió!

Y también muchas de sus acciones. 

Por ejemplo, aquella insólita  llamada telefónica que le hizo al prepósito general Adolfo Nicolás Pachón SJ, su ex superior en la Compañía de Jesús:

-Buenos días, soy el Papa Francisco, quisiera hablar con el Padre General.

El portero respondió frio: -¿De parte de quién?

El papa Francisco entendió que el joven portero italiano no le creía –como es normal-, y le repite dulcemente: -No, de verdad, soy el Papa Francisco, ¿y usted cómo se llama?"

La charla es maravillosa por original.

http://www.lasillarota.com/index.php?option=com_k2&view=item&id=63031:una-sorprendente-llamada-papal-al-padre-general-de-los-jesuitas

La sencillez de Francisco

Y aunque pudo habitar el aposento papal en el tercer piso del Palacio Apostólico, decidió no mudarse y prefirió quedarse alojado en una habitación sencilla en la Domus Sancta Marthae, la residencia vaticana en la que estuvieron todos los cardenales electores durante el Cónclave y en la que normalmente se alojan algunas docenas de sacerdotes y obispos que están de servicio en el Vaticano. Incluso todas mañanas, Francisco celebra el servicio religioso de las 7 de la mañana en la Capilla de la Domus, y lo hace en compañía de los huéspedes habituales de la residencia.

He seguido de cerca lo que hace, como vive, que dice, sus homilías, a quien recibe, pero hoy estoy sorprendido con la imagen tomada el 19 de junio de 2006 el Tercer Encuentro Fraterno de la Comunión Renovada de Evangélicos y Católicos, que tuvo lugar en el estadio Luna Park de Buenos Aires, Argentina, y donde asistieron 5, 000 personas.

 Ese encuentro surgió de una reunión en la Universidad Gregoriana Pontificia en Roma, donde el líder católico del Movimiento de Renovación Carismática conoció a protestantes que le invitaron a predicar en sus templos.

Me vino a la mente lo que me dijo el pastor evangélico en México, que había orado por él; no sabía lo que había sucedido en Luna Park.

En aquella reunión de junio de 2006, el cardenal jesuita se había sentado en la parte alta de las gradas, casi en el fondo, pero en un momento, los evangélicos animadores del encuentro proponen a los asistentes abrazar al "hermano" sentado a su lado y orar en su oído pidiendo a Dios por él.

En ese instante Cangas pudo tomarle la foto e inmortalizó a un Bergoglio apoyando su cabeza en el pecho de un joven que oraba en su oído.

Estuvieron presentes además de Bergoglio –hoy papa Francisco-, el Predicador de la Casa Pontificia, P. Raniero Cantalamessa, y el punto culminante de la reunión fue cuando el cardenal argentino se arrodilló para recibir la bendición de unos veinte “pastores” protestantes.

Se puede distinguir al “pastor” protestante, Carlos Mraida, con la mano sobre la cabeza de Bergoglio; a la izquierda de Mraida en la foto está el “pastor” Norberto Sarraco de la Iglesia Pentecostal de Argentina. El fraile con barba que está de espaldas a la cámara es el P. Cantalamessa, con el hábito capuchino.

Un jueves Santo diferente.

También es significativa la primera foto que Cangas hizo a Bergoglio lavando los pies de los enfermos en el hospital Tornú de Buenos Aires, un gesto que Francisco repitió en su primera semana Santa como papa.

En efecto, ese jueves Santo – 28 de marzo de 2013-, Francisco llegó al Instituto Penal para menores de Casa del Marmo -un centro de reinserción social para menores infractores- a bordo de un vehículo cerrado con placas del Vaticano; fue recibido por una multitud. El lugar fue blindado por los Carabinieri, la policía local y los servicios de protección civil; el cuerpo de seguridad de la Gendarmería vaticana y la guardia Suiza, fue discreto.

Y justo a las 17:30 horas de Roma, el papa celebró  un servicio religioso Misa de la Cena del Señor,“in Coena Dominis”, principio del Tridúo Pascual.

En total había unas “120 personas, la mayoría eran los jóvenes de la Casa Marmo.

No se permitió la entrada de cámaras de televisión, por respeto a la privacidad de los internos menores.

Y lo insólito. El papa argentino lavó los pies a 12 de los jóvenes reclusos – dos de ellos mujeres- por cierto de diferentes nacionalidades y confesiones religiosas;.

Algunas voces criticaron a Francisco debido a que le lavó y besó los pies a dos mujeres –una de ellas musulmana.

Con ello se convirtió en el primer pontífice que celebra la misa de la última cena en un centro penitenciario para menores, fuera de la solemnidad de la Basílica de San Juan de Letrán.

Como sabemos el rito del lavado de los pies busca recordar el momento en el que, según cuenta el Evangelio de San Juan, durante la última cena Jesús de Nazareth se arrodilló ante sus discípulos y les lavó los pies, en un signo de profunda humildad.

Han sido muchos papas que han llevado a cabo ese rito en el día de jueves Santo, pero siempre en la Basílica de San Juan de Letrán y nunca lavándole los pies a reclusos o marginados sociales. Francisco lo hizo. El único medio que transmitió el servicio religioso fue Radio Vaticano. 

Fue una misa con muchos cantos acompañados de guitarras.

Así es este hombre. 

¿Logrará contaminar con su sencillez a sus cinco mil obispos?

Ojalá- que significa quiera Alá, o quiera Dios- 


Perfil de Francisco.

 ¿Cómo es él?

 Es un hombre austero en su forma de ser, de gran espiritualidad; es un hombre de oración profunda, ha sido un buen pastor. Tiene buen sentido del humor, es simpático, tiene chispa e ingenio.

Cuando era el arzobispo dejaba la Curia, tomaba el Metro y se dirigía a visitar barrios de la ciudad. Subía a un colectivo y se presentaba a bendecir nuevos comedores populares, a administrar el bautismo, a celebrar la fiesta del santo.


De joven le gustaba bailar el tango, en especial la milonga, y jugar al baloncesto

En literatura sus favoritos son los argentinos Jorge Luis Borges – por cierto, recientemente le entregaron sus obras-, y Leopoldo Marechal. También Dostoievski y otros clásicos.

Se levanta todos los días a las 4: 30 horas y justo a las siete de la mañana celebra un servicio religioso ante un pequeños grupos de fieles, despiertan cada día más interés porque son directos, con un lenguaje sencillo, pero abarcan los temas centrales de la vida católica y el mundo moderno.

Es originario de Buenos Aires, Argentina; nació en el barrio de Flores, el 17 de diciembre de 1936, en una típica familia de clase media baja

Jorge Canga, el fotografo del papa.