Moisés Sánchez Cerezo

El 2 de enero de 2015, Moisés Sánchez Cerezo fue secuestrado por un grupo armado en su casa, en la comunidad de El Tejar, municipio de Medellín de Bravo. Desde entonces nadie sabe de su paradero.

Es un reportero ciudadano que además trabaja como activista social en su colonia y también es taxista.

'El Fiscal del Estado de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras, reveló que las investigaciones que se hacen en torno a la desaparición del reportero, Moisés Sánchez Cerezo, dieron un giro y pasaron de tener como principal sospecho al alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz Reyes, a vincular el secuestro con una banda de asalta taxistas en la región.

El Procurador acudió al Juzgado Quinto de Primera Instancia, en la ciudad de Veracruz, para hablar con el juez que casualmente acaba de consignar a una banda de asaltantes que intento robar a un trabajador del volante, hiriéndolo de varios disparos, en el municipio de Medellín de Bravo.

Ahí, el Fiscal aseguró que en las indagatorias por el caso de Moisés Sánchez, han encontrado vínculos con otros hechos de violencia de los cuales el periodista dio cuenta a la población a través de las redes sociales.

“Al margen de la investigación del caso de Moisés, surgieron en investigaciones, que el propio Moisés denunció, públicamente, sobre hechos violentos que ocurrieron en Medellín, dígase algunos taxistas que ustedes mismos dieron nota de los homicidios de taxistas y atentados”.

Sin embargo, minutos después, el hijo del activista desaparecido, el joven Jorge Sánchez Ordoñez, rechazó de manera categórica que su padre informara acerca de violencia en contra de operadores de taxi, oficio que la víctima también ejercía para sostener a su familia.

“Yo no recuerdo que allá tomado ataques a taxistas, porque no eran como los temas que él manejaba, él no manejaba la nota roja, manejaba inseguridad pero no manejaba la nota que dijera ‘mataron a taxista’, él casi no lo manejaba, no le gustaba, esto pareciera que se quiere sacar algo de la manga”, dijo.

Sin embargo, el Procurador Luis Ángel Bravo, dejó ver que no tiene pruebas para confiscar al alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz Reyes, como responsable del secuestro, como lo acusa la familia del desaparecido.