Chuytoño, el declive del súper policía

Columna Malecón (institucional) de Noroeste.

Martes 11 de agosto de 2015.

Chuytoño, el declive del súper policía

A pesar de que no aprobó el examen de Control y Confianza y de que en 2010 la PGR ofreció una recompensa de 5 millones de pesos por su captura, Jesús Antonio Aguilar Íñiguez ha sido defendido por el Gobernador Mario López Valdez y por el Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Castro, como un policía efectivo que hasta "duerme con el uniforme".

 "Chuytoño" es un personaje que se hizo muy popular en la Dirección Ministerial del Estado en el sexenio de Juan S. Millán, por su efectividad y por una personalidad que le da aún ascendencia sobre sus agentes y hasta sobre algunos reporteros de la fuente policial.

 Su obesidad, baja estatura y delgada voz no se lo impiden.

 Pero su nombre trascendió aún más, luego de que dejó la PME para huir, pues la autoridad federal comenzó perseguirlo luego del asesinato de Rodolfo Carrillo Fuentes y esposa en la plaza Cinépolis, crimen que dejó al descubierto la protección que personal de "Chuytoño" le daba a narcotraficantes.

 En el lugar, donde se aprecia el cenotafio con flores secas, fue arrestado Pedro Pérez López, jefe de Investigaciones de la PME y quien está recluido en el Penal de Puente Grande por nexos con el narco.

 Llegó Malova y rescató a Chuytoño.

 Argumentaron que el policía había sido absuelto de la acusación.

Policía de otros tiempos

 Jesús Antonio Aguilar Íñiguez también se hizo famoso por sus métodos con los cuales lograba la efectividad que presumían, y presumen sus jefes.

 Ninguno público, por supuesto, pero sí conocidos en los corrillos policiales, como las detenciones arbitrarias, tortura, confesiones forzadas y no poner a los detenidos a disposición de la autoridad.

 Pues bien, la reforma al sistema de justicia penal, en la que el corazón son los Derechos Humanos, viene a poner fin a la era dorada del "súperpolicia".

 Ayer, el Juez Cuarto de Distrito puso en libertad por violaciones al debido proceso a Miguel Ángel Castillo Carrillo, vinculado al secuestro del empresario restaurantero Ernesto Valdez, quien habría sido asesinado por uno de sus captores.

 De acuerdo al Juez, el sobrino de Amado Carrillo fue puesto en libertad debido a que elementos de la Policía Ministerial del Estado violaron sus garantías, al tardar más de 14 horas en ponerlos a disposición del agente del Ministerio Público.

 Este caso se suma al de Fernando Valenzuela Rodríguez quien fue dejado en libertad el 13 de marzo luego de ser absuelto por un juez del asesinato de la activista Sandra Luz Hernández, ocurrido el 12 de mayo de 2014.

 Entonces, el juzgado Noveno determinó que hubo falta de pruebas. La PGJE apeló y el Procurador Marco Antonio Higuera hasta acusó en la prensa (no en su PGJE) que en el Poder Judicial hay tráfico de influencias.

 Estos dos casos son los recientes, sin ahondar en la tortura confirmada a Yesenia Armenta, a quien la Procuraduría acusa del asesinato de su marido Alfredo Cuén. Y el de Juan Carlos Cristerna, quien también salió tras un año y siete meses en prisión acusado por el homicidio de Perla Lizeth Vega.

 La defensa probó ante los jueces que su declaración ministerial carecía de valor porque fue obtenida mediante la tortura del detenido.

 Los tiempos de "Chuytoño" se van, pues, con la reforma de justicia penal.

 La pregunta es si Malova inisistirá en mantenerlo a pesar de los fracasos en los juzgados por las malas prácticas de la PME.

Muchas y caras

Las famosas placas chinas que nos costaron 383.7 millones de pesos siguen dando de que hablar a más de 2 años que fueron contratadas sin licitación, con el pretexto de que la empresa que las vendió tenía la patente de un sistema de información holográfica.

Según la Secretaría de Gobierno, a cargo de Gerardo Vargas Landeros, Accesos Holográficos, socia de la oriental Cangnan Riwong Craft Logo Co. Limited, tenía la patente de los códigos QR en las láminas, por lo que no se licitó.

No había otra empresa en el planeta que les diera el servicio que buscaban.

La Auditoría Superior del Estado, sin embargo, si halló opciones.

Y como Noroeste lo publicó en su momento, resulta que el Gobierno de Sinaloa compró placas a sobreprecio.

"(De los) resultados se obtuvo a cinco proveedores que ofrecen menor precio al contratado con la empresa Cangnan Riwong Craft Logo Co. Limited", concluyó el órgano fiscalizador en el Informe de Resultados de la Revisión y Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del Segundo Semestre de 2014.

La ASE detectó pues a cinco empresas que ofrecen el mismo producto y a menor precio.

Por ejemplo, ubicó a Waldale de México, proveedor anterior del Gobierno de Sinaloa, y Coformex, quienes ofrecen el paquete por 340 millones 814 mil 728 pesos; mientras que Troqueles y Autoplacas, y Formas Inteligentes, solicitaron 381 millones 384 mil 800 pesos.

Pero bueno, en Noroeste estamos locos.