Informe de labores de la CNDH ante la Permanente

Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, LXIV Legislatura
Versión estenográfica de la sesión de la Comisión Permanente del miércoles 22 de enero de 2020;
La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: El siguiente punto del orden del día es la presentación del Informe anual de labores 2019 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, a cargo de la ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra, presidenta de dicho organismo.

Se designa a una comisión para recibirla, conformada por los siguientes legisladores: diputada Rocío del Pilar Villarauz Martínez, diputado Justino Eugenio Arriaga Rojas, senador Miguel Ángel Lucero Olivas, diputado Jacobo Cheja Alfaro, diputada Carolina García Aguilar y senador Miguel Mancera Espinosa. Se pide a esta comisión cumplir con su cometido.
(La comisión cumple con su encargo)
Ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra, sea usted bienvenida a esta Comisión Permanente, con el fin de presentar el Informe de actividades 2019 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Se informa a la asamblea que el formato para la presentación de este informe se llevará a cabo de conformidad con el acuerdo aprobado en la sesión anterior del 15 de enero. Le pido a la Secretaría dé lectura a este formato.
La secretaria diputada Karla Yuritzi Almazán Burgos: Sí, señora presidenta, le doy lectura. El formato que regulará la presentación del informe referido en el resolutivo anterior es el siguiente:

Primero. La presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos presentará el informe anual de labores 2019. Para ello tendrá una intervención de hasta 30 minutos.

Segundo. Se dará paso a una ronda de intervenciones por parte de los grupos parlamentarios con representación en la Comisión Permanente, en orden creciente, hasta por diez minutos cada uno.

Tercero. Concluida las intervenciones anteriores, la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos hará una intervención final hasta por diez minutos.

Cuarto. La Presidencia de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente dará cuenta de la recepción del informe y dictará su turno a las Cámaras del Congreso.

Quinto y último. La Presidencia de la Mesa Directiva, en representación de la Comisión Permanente dirigirá un mensaje final. Es cuanto, presidenta.

Le doy lectura también al resolutivo tercero y cuarto.

Tercero. En ningún caso se autorizarán las intervenciones distintas a las anunciadas en el presente acuerdo.

Y el Cuarto. Las situaciones no previstas en el presente acuerdo serán resueltas por la Mesa Directiva de la Comisión Permanente.

Los transitorios Primero y Segundo. El primero habla del presente acuerdo... que el presente acuerdo entrará en vigor a partir de su aprobación por el pleno de la Comisión Permanente. Y el segundo, comuníquese y publíquese en la Gaceta Parlamentaria.

Dado en el salón de sesiones de la Comisión Permanente, a los 15 días del mes de enero de 2020. Es cuanto.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: En consecuencia, tiene la palabra la ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra, hasta por 30 minutos, por favor.

La ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra: Buenos días. Ciudadana diputada Laura Angélica Rojas, presidenta de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente del h. Congreso de la Unión.

Ciudadana senadora, Mónica Fernández Balboa y ciudadano diputado Porfirio Muñoz Ledo, vicepresidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente del h. Congreso de la Unión.

Ciudadanas y ciudadano secretario. Ciudadana Rosy Laura Castellanos, Consejera de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Ciudadanas y ciudadanos diputados y senadores de todos los partidos.

Primero que nada quiero agradecer este acto republicano que me permite compartirles mis ideas y escuchar las suyas, y destacar el hecho de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos está trabajando, estamos revisando y renovando día con día en sus prácticas, respondiendo a la vez su responsabilidad constitucional, resolviendo, atendiendo sin ningún retraso ni contratiempo, de tal suerte que los resultados están a la vista.  No hemos dejado de hacer un solo día nuestro trabajo.

A efecto de dar debido cumplimiento al artículo 102, apartado B de la Constitución, así como los artículos 15 y 52 de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, estoy entregando a esta soberanía el informe de actividades 2019, el cual refleja el trabajo realizado durante el período.

A este respecto es necesario señalar que por una peculiaridad de la ley, me corresponde a mí presentar dicho informe, y aun y cuando se trata del último año de actividades, prácticamente de la pasada administración, por lo que en francas sujeción a los principios de máxima transparencia y rendición de cuentas, ya se encuentra disponible el contenido íntegro de este informe en la página institucional para el estudio y consulta de cualquier interesado. Además de la disponibilidad de una versión ejecutiva impresa que va acompañada de una memoria digital con la información completa.

Ahora bien, no puedo dejar pasar esta oportunidad para hacerles partícipes del proyecto que me propongo encabezar, de las premisas y valores que enarbolamos y que serán de ahora en adelante las pautas y medidas, los motivos e ideales que guiarán el quehacer de esta institución.

Decidí impulsar un proceso de transición sin precipitaciones, ni tensiones, porque lo he dicho numerosas veces, mi objetivo es el de fortalecer la institución y garantizar la continuidad del trabajo.

A ello obedeció también la designación de directoras y directores generales adjuntos en funciones de las visitadurías que quedan vacantes por el retiro de los visitadores en la anterior administración, porque esto es parte inevitable de todo cambio institucional, pero también porque estamos en proceso de reestructuración y esta se dará de manera razonada y seria, siempre pensando –reitero– en el interés superior de las víctimas y de quienes están en riesgo de serlo.

Llegamos a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos con un mandato claro de reforma, para mejorar su atención a las víctimas y su capacidad de respuesta, para optimizar recursos y garantizar la eficacia y prontitud a que estamos obligados, para recuperar la credibilidad de la institución y para actuar cerca del pueblo.

Para hacerlo no necesitamos de un inmenso aparato burocrático, ni de cuantiosos recursos, acorde con una visión del servicio público con la que coincidimos y asumiendo como un deber ético el precepto de la eficacia y la probidad. No implican dispendios, ni excesos, nos sometemos a la ley y empezamos por aplicar en la institución íntegramente la Ley Federal de Austeridad Republicana. Por lo que hoy puedo informarles que se retabularon los sueldos de los altos mandos, de manera que no hay ya más en la Comisión ningún salario por encima del presidencial, tal y como lo mandata la norma.

En el ejercicio del gasto privilegiamos la atención de las víctimas directas e indirectas. Con los recursos que se tienen podemos hacer más y mejor, y vamos a transparentar su ejercicio.

Mantenemos una idea de austeridad en el gasto que no puede traducirse en debilidad para la institución, sino por el contrario, en eficientar sus recursos humanos y materiales, redistribuyéndolos de manera que se fortalezcan las áreas sustantivas de atención y servicio. Austeridad arriba para fortalecer el trabajo abajo, de calle, el trabajo directo con las víctimas.

Los ahorros que propongo de un 30 por ciento, aproximadamente, pretendo aplicarlos prioritariamente en las visitadurías, en la Dirección General de Quejas y en específico en la Subdirección de Registro y Clasificación, así como en las Coordinaciones de Procedimientos Internos de las Visitadurías Generales, en la Coordinación de Seguimiento de Recomendaciones y en todos aquellos programas que sean de apoyo directo a la investigación y seguimiento de los casos.

Fortaleceremos, desde luego, el Consejo Consultivo y lo involucraremos en las nuevas tareas con ideas innovadoras de potencia en su papel.

El diálogo con todas y todos será permanente con el objetivo de avanzar en la gran reforma de la Comisión que nos proponemos.

Establecemos una premisa: la comunicación constante y permanente directa con las víctimas de violaciones a derechos humanos, con los colectivos realmente comprometidos con la causa y, desde luego, con la Cámara de Senadores y la Cámara de Diputados.

De manera que, resultado de este amplio ejercicio de análisis y discusión surja una Comisión Nacional de los Derechos Humanos más eficaz, fortalecida en su misión, sustantiva y con más y mejores instrumentos que faciliten la interposición de quejas, aseguren su trámite pronto y expedito, busquen el cumplimiento de sus recomendaciones y observaciones y, sobre todo, trabajar para no repetición de las violaciones.

Al inicio de mi gestión anunciamos un programa de diez acciones inmediatas, que ya está en marcha y que se ha venido fortaleciendo con más acciones complementarias, entre las cuales cabe destacar lo siguiente.

Uno. Sobre el mandato constitucional de protección, abatimiento del rezago y emisión de recomendaciones como prioridad y con objeto de asegurar la eficacia de la Comisión en su atención a las víctimas, estamos revisando los expedientes rezagados para atenderlos y darles curso de inmediato. Pero también las quejas mismas existentes, susceptibles de una recomendación, facilitando el acceso a las víctimas a las investigaciones.

Existe una inadecuada o insuficiente investigación de los casos que tendremos que revertir. Esta situación sostenida institucionalmente por años, se ha manifestado en una baja emisión de recomendaciones mucho menor al número de violaciones denunciadas ya existentes. Esto ha tenido por resultado la falta de criterios públicos y transparentes de calificación, de integración y conclusión de expedientes de quejas que permitan su desechamiento y remisión de manera discrecional, a veces incluso su subcalificación en casos de violaciones graves.

Las personas, además de haber sido víctimas de violaciones de derechos humanos, no deberían de tener que haber enfrentado a posteriores obstáculos en investigación de esas revelaciones en la propia comisión. Esto se corregirá.

2. Revisión y ajustes al procedimiento de quejas. En la actualidad las quejas tardan entre tres y cinco días en ser turnadas a las visitadurías generales, esto es en gran medida porque actualmente no existe un criterio establecido para calificar una queja como urgente, ya que depende del criterio del servidor público que la recibe, o bien porque así lo manifieste el quejoso, lo que ocasiona que no se atienda con prontitud a aquellos que así lo ameritan.

Frente a ello estableceremos criterios específicos para calificar las quejas como urgentes para estar en posibilidades de que se les brinde la atención que corresponda.

Además se hará un mapeo de procesos para el fortalecimiento de la Dirección General de Quejas, en lo general y en lo específico, a la Subdirección de Registro y Clasificación, así como a las coordinaciones de procedimientos internos de las visitadurías generales, a fin de que el trámite sea eficiente, se den mejores mecanismos de coordinación entre las visitadurías generales para la canalización de los asuntos y su clasificación más expedita.

3. La capacitación y actualización del personal de las áreas sustantivas de la comisión. Se precisa de una manera profesionalización para el ejercicio de sus funciones de investigación de violaciones de derechos humanos y atención a víctimas, de acuerdo con los estándares de derechos humanos aplicables conforme al bloque de la constitucionalidad y el control de convencionalidad.

Una capacitación urgente para los visitadores adjuntos requiere establecerse en dos tipos de acciones para la atención e investigación de los casos. Por una parte, sobre mecanismos alternativos de solución de controversias, como son la conciliación y la mediación para la solución pacífica de conflictos, porque muchos casos se podrían resolver por esta vía, siempre y cuando no sean violaciones graves a los derechos humanos.

Por otra parte, sobre los estándares propios de las investigaciones de violaciones de derechos humanos, a fin de que los casos, una vez que estén en la fase de investigación, se indaguen de forma expedita para determinar las violaciones cometidas y la reparación del daño procedente en cada caso.

Adicionalmente será necesaria la capacitación de personal de otras áreas de apoyo, a fin de que los servicios de la Comisión estén plenamente orientados, conforme a los fines institucionales de protección de los derechos humanos.

4. Revisión de los mecanismos de supervisión de las investigaciones, seguimiento de las recomendaciones y de la reparación del daño. Los mejoraremos emprendiendo acciones más rigurosas y sistemáticas que trabajen para su implementación y la protección de las víctimas.

Desde la Presidencia se creará un área específica para supervisar la adecuada investigación de los casos. La determinación de los criterios usados en su resolución, a fin de que los precedentes puedan ser conocidos públicamente. Revisar la formulación de las recomendaciones y los proyectos de recomendaciones que se realicen en las visitadurías generales y la información resultante sobre la voluntad de las autoridades para reparar el daño.

Respecto de la recomendación 15VG/2018 de la gestión anterior, que aborda el caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, puedo decirles que en los puntos recomendatorios no se puede calificar hoy su estado o nivel de cumplimiento, como el resto de las recomendaciones, porque la Oficina Especial del Caso Iguala determinó una forma diferente de clasificarlo, distinta a los supuestos que establece el reglamento interno de la CNDH, lo que de entrada llama la atención. Así que tendremos que estudiarla, valorarla en sus alcances en conjunto con los familiares de los desaparecidos, para encontrar las mejores maneras de avanzar en apoyo a sus demandas.

5. Adicionalmente, como parte de las necesarias actividades de la supervisión de los derechos humanos en el país con el objeto de incidir adecuadamente en las políticas púbicas en materia de derechos humanos, fortaleceremos los instrumentos idóneos para tal efecto como son las recomendaciones generales y los informes especiales.

6. Fortalecimiento del área de Atención a Víctimas, poniendo a su disposición más recursos humanos y materiales con indicadores específicos y monitoreados desde la oficina de la Presidencia de la Comisión, a fin de que su actuación se circunscriba a los casos de violaciones de derechos humanos conocidos por la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

7. Combate a la impunidad y reducción de los tiempos de respuesta. No permitiremos que ninguna autoridad responsable de violaciones se sustraiga de la acción de la Comisión.

Hasta este momento no existe un término máximo para emitir una resolución en un expediente de queja, por lo que un asunto puede tardar hasta nueve años en resolverse, lo cual se ha agravado por la falta de colaboración de las autoridades o la lentitud para proporcionar la información solicitada mediante oficio.

Para enfrentar este problema crearemos un mecanismo de colaboración con las autoridades, a fin de realizar brigadas de trabajo y comunicaciones eficientes para agilizar la atención de los expedientes de queja.

De igual forma se buscarán fortalecer las facultades de investigación de la Comisión, a fin de que cuando exista una deliberada obstaculización en las investigaciones sea posible proceder de forma efectiva contra las autoridades responsables.

8. Fortalecimiento de las visitadurías generales, poniendo especial énfasis en el papel de los encargados de la atención a víctimas e integración de expedientes de que queja, que actualmente invierten la mayor parte de las horas de trabajo en funciones administrativas que retrasan y obstaculizan las labores de investigación.

Estamos realizando ya una evaluación a través de indicadores respecto a los temas y programas, así como a la cantidad de asuntos recibidos en cada una de las visitadurías generales y del personal administrativo y profesional con el que cuentan, a fin de realizar una adecuada distribución de los recursos humanos y financieros.

Para lo anterior, se considerará la reestructuración del trabajo en el marco de una adecuada implementación de la atención, según se trate de mecanismos alternativos de solución de controversias o de la investigación de casos.

Asimismo, se verificará el marco institucional en que se dará seguimiento a la reparación del daño que realicen las autoridades responsables y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, el CEAV, no solo para la atención de los casos y las víctimas, sino para el conocimiento de la sociedad de cuáles autoridades trabajan para reparar el daño y evitar la repetición de las violaciones de derechos humanos.

Finalmente, se buscará establecer los mecanismos necesarios de manera que las víctimas puedan hacer uso de los resultados de las investigaciones de sus casos para, en su caso, acudir ante otras jurisdiccionales, de igual forma que se les garantizará que puedan tener acceso a las evidencias de su caso, así como a ejercer su derecho a la participación conjunta durante esta.

9. Todas las formas de acercamiento de las CNDH a las víctimas, además de contar con mecanismos más expeditos de acercamiento y acompañamiento a las víctimas, se crearán módulos itinerantes en todo el país, para trabajar por la plena accesibilidad.

Necesitamos fortalecer, sobre todo, los mecanismos de atención de las mujeres, de los periodistas y defensores de derechos humanos, de los migrantes y de los pueblos y comunidades indígenas.

Necesitamos ir más allá del trabajo del gabinete y estar presentes donde la gente necesita que la defiendan y la cuiden. Lo haremos con un espíritu de empatía y solidaridad genuinas, porque entendemos lo que es ser víctima, no solo de las violaciones, sino también de quienes se suponía eran nuestros defensores frente a estas violaciones.

En relación a grupos de atención prioritaria y temas específicos, que sería el punto número 10, revisaremos y fortaleceremos los programas especiales dentro de la CNDH, como son: Agravio a periodistas y defensores civiles. Asuntos de la mujer y de igualdad entre mujeres y hombres. Asuntos de la niñez y la familia. Asuntos de atención a migrantes. Atención a víctimas del delito. Atención a la discapacidad. Personas desaparecidas. Pueblos y comunidades indígenas.

Especial atención precisa el programa de asuntos de la mujer y de igualdad entre mujeres y hombres, adscrito actualmente a la Cuarta Visitaduría General, ya que en ese programa es donde existe una responsable de dar seguimiento y participar en el mecanismo de alerta de violencia de género.

Adicional a lo anterior, se crearán mecanismos de coordinación entre los programas especiales y visitadurías generales, a partir de las metodologías de trabajo interdisciplinario, para garantizar que la atención en las visitadurías de los asuntos que requieren de la participación de los programas especiales, cuenten con la riqueza de enfoques necesarios. Y para tal efecto, es posible crear un mecanismo con personal de cada una de las visitadurías para la atención de quejas, que por su complejidad precisan la articulación de diversas instancias de la CNDH.

11. Protección de los DESCA. Desde su creación, la Comisión ha sido débil, cuando no omisa en la defensa de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales del pueblo mexicano.

Se ha considerado, por lo general, que no es tarea de la CNDH asumir un papel activo en la garantía de los derechos a la salud, al trabajo, a la vivienda, a la educación, al descanso, a la cultura, a la recreación, etcétera.

En esta nueva etapa y en el marco histórico que nos ha tocado actuar, consideramos prioritaria la defensa de estos derechos.

Una parte importante de la violencia que vivimos tiene origen en la desigualdad que se da en el ámbito de su cumplimiento, aquella que vivimos todos los días y culturalmente se ha naturalizado, lo que ha dado lugar a que muchas personas defensoras de estos derechos hayan sido objeto de ataque.

Frente a esto, la CNDH asumirá la promoción, respeto, protección y garantía de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales como eje central del análisis transversal y temático que lleve a cabo la defensa de todos los derechos humanos y también a la superación de las condiciones de pobreza.

Segundo. Sobre los mandatos de promoción y supervisión, en el punto 12, que sería en el área de promoción se precisa construir procesos de participación social más amplia en materia de derechos humanos.

El objetivo es llevar a la CNDH a los espacios de la población, en la vida cotidiana y construir un proceso pedagógico y epistemológico, que en verdad se refleje en una mayor consciencia de los derechos humanos entre los diversos sectores de la población mexicana.

Para ello nos proponemos articular los procesos de promoción y capacitación, que de facto llevan todas las visitadurías con el trabajo de promoción y los que debe realizar el Centro Nacional de Derechos Humanos. Entre otras cosas, mediante programas que acerquen los derechos humanos a los ciudadanos, que hagan más comprensible su entendimiento y caravanas itinerantes, en los cuales se llegue a las plazas, mercados, escuelas, grupos de reflexión, etcétera, procurando establecer un programa de colaboración interinstitucional con las escuelas de educación primaria y media, a través de la Secretaría de Educación Pública... y con emergencia... de Educación Pública, centros de enseñanza, media superior y superior del país, para transversalizar el enfoque basado en derechos humanos en los programas de estudios y en la normatividad de las escuelas y universidades.

También se promoverá la difusión de información relevante sobre derechos humanos y los mecanismos para ejercerlos, a través de medios de comunicación convencionales, alternativos y de redes sociales, favoreciendo la visibilización de las personas que trabajan en sus comunidades para la realización de sus derechos, fortaleciendo así sus propios procesos sociales en la materia.

13. La mejor política de vinculación internacional es la vinculación con las víctimas al interior y la defensa de los derechos humanos de las y los mexicanos.

Cumpliremos nuestros compromisos en materia de derechos humanos ejerciendo mejor nuestras facultades y deberes constitucionales.

Promoveremos la armonización normativa de los derechos humanos con los parámetros universales e interamericanos, apoyaremos para cumplimiento de las recomendaciones y resoluciones de las instancias internacionales de derechos humanos, y favoreceremos el fortalecimiento institucional en la materia.

Todo esto lo haremos sin burocracias, poniendo fin a los gastos onerosos, no vamos a sumar kilometraje en viajes sino en cumplimiento de nuestras obligaciones y responsabilidades.

14. Fortalecer sistemas de información e indicadores georreferenciados de manera que obedezcan al contexto de emergencia nacional en materia de Derechos Humanos, para lo cual es necesario implementar una revisión de indicadores para la identificación de niveles de riesgo, de violaciones de los derechos humanos y mejorar la capacidad preventiva de la comisión referente a atención a periodistas y defensores de derechos humanos, tortura y desapariciones, violencia feminicida y otras violencias de género, salud sexual y reproductiva de las mujeres, población migrante, trata de personas, explotación de niños, mujeres migrantes y personas indígenas, condiciones laborales precarias en el sector agrícola y doméstico, personas con discapacidad y discriminación contra pueblos y comunidades indígenas.

En suma, la visión y objetivo del sistema de información georreferenciado es el que proporcione análisis e inteligencia en tiempo real en materia de derechos humanos para el estudio de riesgos en violaciones de derechos humanos y sirva como una herramienta de análisis, gestión, prevención, planificación y toma de decisiones de esta comisión.

De igual forma, se trabajará para generar análisis del Presupuesto de Egresos con perspectiva de derechos humanos, a fin de que se posibiliten anualmente insumos y propuestas necesarios en la eficientización del gasto público.

15. Armonizaremos la normativa de la CNDH. Nos proponemos revisar políticas, reglamentos y protocolos de actuación a efecto de que se encuentren armonizados con los principios constitucionales e internacionales en materia de derechos humanos para evitar todo tipo de discriminación o violencia.

De igual forma, se buscará incidir en las políticas públicas, empujando y promoviendo la armonización también de las leyes y reglamentaciones secundarias en todo el país.

16. Fortalecimiento institucional del Sistema de Derechos Humanos del país. En México tenemos diversas instituciones cuyas funciones son específicamente de derechos humanos, pero se encuentran desarticuladas. Para que los derechos humanos puedan ser una realidad es necesario que el Estado mexicano articule mejor los diversos esfuerzos que está haciendo de formas separadas. Para lograrlo será necesario promover encuentros, mesas de trabajo, reformas legislativas, etcétera.

La presidencia de la CNDH tendrá el compromiso de impulsar estos trabajos a fin de que las personas de nuestro pueblo tengan las instituciones que necesitan, en relación al estudio y divulgación.

17. Fortalecimiento del Centro Nacional de Derechos Humanos. Se fortalecerá la capacidad de respuesta del centro a las necesidades de la Comisión Nacional para el cumplimiento de sus mandatos.

El planteamiento de no recurrir a la contratación de externos para elaborar investigaciones, proyectos, planes o cualquier tipo de análisis y recomendaciones es para fortalecer el trabajo y la capacidad profesional de los servidores públicos de la Comisión, y junto con todo esto vamos a simplificar los procesos administrativos internos.

No más funciones duplicadas, ni procesos fraccionados en mucho en lo que pueden hacer menos: transparencia, austeridad y optimización de recursos son la premisa. Venderemos los autos blindados y de lujo a cargo de la presidencia y ya estamos eliminando los privilegios de cualquier índole.

En cuanto entró en vigor el presupuesto de este año, retabulamos los sueldos de los altos mandos. Ya nadie en la Comisión gana más, por encima del salario presidencial, tal como prescribe la Ley de Austeridad. Además, eliminamos los bonos, primas y ayudas y falsos estímulos y retiramos los celulares.

Hemos cancelado la plaza ocupada por la chef de la anterior administración –que por cierto gozaba de un salario no de cocinera, sino de homóloga a jefa de departamento– y a sus ayudantes que tenían puestos de analistas, y reduciremos también, y si es posible eliminaremos los onerosos gastos de eventos que absorbían buena parte del presupuesto.

Tampoco habrá viajes al extranjero, salvo aquellos que redunden en el beneficio real para las víctimas de nuestro país, porque queremos que la Comisión no se destaque por ser la más costosa de América latina o una de las más caras del mundo, como lo es hoy, sino por ser la más eficiente en su tarea.

De hecho, desde hace muchos años se ha venido cuestionando la operación y el gasto de la Comisión y se ha planteado seriamente la necesidad de una reestructuración.

Hay infinidad de estudios, análisis e investigaciones serias que documentan lo costoso y, a la vez, inútil del trabajo de la Comisión. Desde 2009 varias organizaciones civiles, nacionales e internacionales, entre otras Human Rights, Fundar y el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez denunciaron que el presupuesto de la Comisión se había incrementado desproporcionalmente desde su creación. Que eso la hacía la oficina de ombudsman más costosa de América latina, más aún que la Corte Interamericana de Derechos Humanos, agravado con el hecho de que era la instancia con los resultados más decepcionantes y pobres.

Está también un estudio emitido en 2010 por el Centro de Investigación y Docencia Económica, AC, CIDE, nuestros caros defensores de derechos humanos, de Carlos Elizondo Mayer Serra y Ana Laura Magaloni Kerpel, el cual concluía que el gasto para el funcionamiento de la CNDH es excesivo, demostrativo de un uso opaco y poco cuidadoso de los recursos públicos, documentado detalladamente dicho incremento como una constante del gasto corriente de la institución, acompañada con un incremento también del costo por queja emitida.

Y no solo es eso, en 2015 el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, CIEP, asociación dedicada a verificar el gasto federal y su impacto nacional, denunció que ese año la CNDH había gastado mucho más en sueldos y gastos de representación de funcionarios que para la investigación de abusos contra ciudadanos, una constante desde 2010.

Baste mencionar que en enero de 2015 y junio de 2019 la Comisión gastó más de 8 millones de pesos en comidas, reuniones y 537 viajes, 82 de ellos al extranjero, y que en ese mismo periodo se otorgaron a la Oficina de la Presidencia viáticos por 1 millón 929 mil 490 pesos. Esto...

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Un momento, un momento. Si me permite, por favor, presidenta. Les recuerdo que no hay intervenciones según el acuerdo. Sí, gracias, senador. Le pedimos que concluya, señora titular de la comisión.

La presidenta María del Rosario Piedra Ibarra: Gracias. Ya voy a concluir. Es muy importante que se sepa el informe real de lo que sucede en esta comisión, porque además de todo están los resultados en un país que ha sido descrito como en crisis grave en materia de derechos humanos.

Tal parece que para la CNDH hasta ahora las violaciones son mínimas, de hecho a pesar de tenerse registrados en 2019 48 mil 590 escritos de queja, este año solamente se emitieron 99 recomendaciones, y aunque se trata de un cálculo simplista tomando en cuenta el presupuesto recibido, resulta, por decir lo menos, que las recomendaciones emitidas son muy costosas.

Además es de destacar que aun cuando es notorio el aumento en el número de agraviados de 64 mil 756 en 2015, a 173 mil 937 en 2019, de los 48 mil 590 escritos de queja recibidos este año, solamente se puede deducir en el informe que se resolvieron 11 mil 181 y fue mediante diversas formas, desde por no existir materia de orientación al quejoso evidencia de la discrecionalidad que se usa en las llamadas causales de conclusión de expedientes, advirtiendo el hecho de que varias de estas no tienen una regulación apropiada, por lo que se prestan para mantener prácticas que permiten la conclusión irregular de casos, así como la invisibilización de derechos humanos.

De todo lo anterior puede concluirse que el fracaso de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha sido uno de los más costosos y afrentosos para los mexicanos, porque su dispendiosa estructura burocrática no ha respondido a las necesidades y expectativas ciudadanas ni se ha conducido con transparencia.

Y esta inutilidad no es un problema sólo de personas, es estructural y de la concepción misma con la que se concibió a la comisión en los gobiernos neoliberales: un escaparate para consumo del extranjero, para dar una imagen de derechos humanos favorable al gobierno, pero no más que una pantalla; uno más de esos organismos públicos sólo en apariencia autónomos, estructuralmente diseñados con fines cosméticos, para administrar los problemas de los gobiernos en turno, esconder los abusos de poder y poner en la congeladora conflictos que no eran del interés de los gobernantes o que les resultaban incómodos.

Señoras y señores diputados y senadores, estamos conscientes de la magnitud de la tarea, pero la vamos a hacer, la estamos haciendo. No existe hoy una víctima que se haya acercado a la comisión a la que no se le haya dado atención y respuesta. Entre el 15 de noviembre de 2019 y el 21 de enero de 2020 se han recibido 5 mil 398 expedientes, de los cuales se han atendido 4 mil 778, y se han emitido 52 medidas cautelares.

Vamos a seguirlo haciendo y hacerlo mejor cada día. Vamos a promover, defender y divulgar los derechos humanos reconocidos en la Constitución mexicana, así como aquellos que conforman el derecho humanitario internacional. Y vamos a prevenir las violaciones llevando la cultura de los derechos humanos a las conciencias de las y los mexicanos, porque sólo así será viable una cultura de la paz.

No puedo dejar de referirme, por último, a las propuestas de reforma de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos...

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Concluya, por favor, señora presidenta.

La presidenta María del Rosario Piedra Ibarra: Voy a concluir ya. Que se han venido manejando. Y decirles que en lo personal reivindico la lucha histórica por la real autonomía e independencia de la institución. Lucha de la que incluso fui partícipe en el Comité Eureka, y que tiene el referente de la Procuraduría de Pobres de Ponciano Arriaga, muchos años antes de la creación de la institución del Ombudsperson.

Apelo al compromiso con el pueblo de México de este poder soberano, para que caminemos juntos en una iniciativa que sume voluntades, pero sobre todo que abone a la transformación de la Comisión Nacional.

Comprometo a acercarme, me comprometo a acercarlas las demandas y las necesidades de las víctimas a quienes se debe la Comisión, porque son una convencida de que hoy es tiempo de cambiar y la Comisión será parte del cambio. Más aún, actuará como aceleradora del cambio.

Conocemos las deficiencias y las resistencias a las que nos enfrentamos. La petición de trasformación es unánime, sobre todo por parte de las víctimas. El modelo implementado a partir de la reforma constitucional del 13 de septiembre de 1999 está agotado y nuestro deber es crear algo mejor.

La total apertura y el diálogo permanente serán nuestra divisa. Esta reforma en la que estoy comprometida y que muchos esperan y demandan nos exige una comunicación constante y directa con las víctimas, como con todas nuestras contrapartes y desde luego entre nosotros.

Estoy convencida que podemos iniciar una etapa nueva y mejor imprimiendo un ritmo contundente y definitivo a la prevención y defensa de los derechos humanos en México, a partir de un cambio de enfoque y actuación.

Es indispensable involucrar a las víctimas y a toda la sociedad, es la única manera de asegurar la garantía de no repetición, que no haya más víctimas. El fin último y central de toda la defensoría de los derechos humanos del pueblo que se precie de serlo, más allá de los discursos. Los invito a que...

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Señora presidenta, le rogamos que termine porque todavía va a tener una segunda participación en la que podemos escucharla y ponerle atención.

La presidenta María del Rosario Piedra Ibarra: Los invito a ser parte de este esfuerzo. Queremos justicia, primero las víctimas. Muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Vamos a dar paso a la participación de los grupos parlamentarios hasta por diez minutos. Y tiene la palabra, para iniciar, el senador Miguel Ángel Mancera Espinosa, del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática.

El senador Miguel Ángel Mancera Espinosa: Gracias, presidenta. Compañeras legisladoras, compañeros legisladores, sea bienvenida a este recinto legislativo, maestra María del Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Con su presencia esta mañana se da cumplimiento a lo establecido en el artículo 102, Apartado B, de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, por el cual ambas Cámaras del Congreso de la Unión damos cuenta del trabajo realizado por esta importante institución a su cargo.

Con este ejercicio, el Congreso de la Unión ejerce la atribución de control y equilibrio constitucional, la cual se nutre con el diálogo y la pluralidad que constituye a la Comisión Permanente.

Es indiscutible que la Comisión Nacional de Derechos Humanos ha realizado diversos aportes de valía a la promoción de los derechos humanos en México al documentar, de manera detallada y fundada, violaciones y obstáculos sistémicos al avance de los derechos humanos.

Desde 1990, la Comisión Nacional de Derechos Humanos no ha tenido otra tarea que dar voz a quienes no la tienen, por medio de recomendaciones públicas y autónomas, así como denuncias y quejas ante las autoridades respectivas.

De igual forma, tiene como misión procurar la conciliación entre las instituciones y las personas afectadas en sus derechos, buscando siempre la inmediata solución de un conflicto planteado.

Por ello, estoy convencido que en este proceso de renovación que usted encabeza dentro de la Comisión Nacional, deberá contribuir a transitar una nueva etapa en la defensa de los derechos humanos, a encauzar esfuerzos que desde la sociedad civil se han planteado a este organismo, que no en pocas ocasiones ha llevado, incluso, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a través de las acciones de inconstitucionalidad.

He escuchado con atención el informe que nos ha presentado ante esta soberanía. Rescato sus afirmaciones de estar trabajando y su ánimo de mejorar, de fortalecer la institución, de dar continuidad al trabajo realizado, así como de optimizar recursos. Deseo éxito a su plan de trabajo y estrategia expuesto.

En este plan de futuro, considero que tenemos muchas tareas comunes en la materia. Y tenga por seguro, presidenta, que el Grupo Parlamentario del PRD será aliado en la defensa y en la promoción de los derechos humanos.

Hoy, este documento es el punto de arranque de un periodo de renovación de la Comisión Nacional, pero es también la oportunidad para valorar lo que se ha hecho bien y lo que debe modificarse en beneficio de las y los mexicanos.

Su informe se presenta en un momento pertinente de la coyuntura nacional. Hoy nuestro país requiere autoridades e instituciones de seguridad que actúen con estricto apego a los derechos humanos de todas y de todos, sin importar su nacionalidad o el tipo de estadía que tengan en nuestro país.

Por ello, quiero señalar que sin duda usted tiene, presidenta, varios retos. Uno de ellos, el de acompañar el día a día de la actuación y la implementación plena de una institución muy importante para la seguridad en nuestro país, como lo es la Guardia Nacional.

También tiene el reto y no es menor, de observar el desarrollo, operación e implementación de la política migratoria, tanto en la frontera sur como en la frontera norte de nuestro país. Tema que hoy por hoy acapara los espacios informativos y de atención nacional.

En estas tareas cobra relevancia escuchar las recomendaciones que diversos organismos internacionales en la materia han hecho a México, así como las decisiones judiciales vinculantes para nuestro país en el ámbito de los derechos humanos, como lo son las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Su actuar será fundamental ante cualquier escenario de violencia en cualquiera de las entidades de la República, en el esquema federal, ante la actuación de las instituciones de seguridad y procuración de justicia.

Es un mandato para todas las autoridades que la protección de los derechos humanos reconocidos en la Constitución, se haga conforme al principio de progresividad. Es decir, que no es posible retroceder en la materia de esta protección. Un derecho ganado solo puede transitar hacia su amplificación, nunca a su disminución o pérdida. De ello también será usted garante para el pueblo de México, tanto en el actuar de las autoridades, cuanto en el quehacer legislativo, de todo el andamiaje jurídico, que pudiera ser discutido, debatido y, en su caso, aprobado por las instancias legislativas.

Confío en que este diálogo sea un primer paso en su relación con el Poder Legislativo, presidenta.

A corto plazo también será muy importante su participación para discutir la reforma al Poder Judicial Federal, así como la de la justicia de adolescentes, la que atañe a la justicia cívica nacional, la propia del sistema penal mexicano, tanto en su parte sustantiva, cuanto en la objetiva.

Señora presidenta de la Comisión, tiene usted una gran oportunidad para despejar cualquier sombra de duda de su actuación en la defensa de la independencia y autonomía que debe acompañar en todo momento las actuaciones que día con día realice la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Tiene frente a sí una tarea mayor, no deje pasar la oportunidad de realizar la defensa diaria de los derechos humanos, sin importar colores ni partidos, o factores de poder que quisieran interponerse en su actuar.

Estoy convencido que los hechos de hoy o mañana podrán hablar mucho mejor que cualquier discursiva.

Confiamos que el próximo año su informe nos pueda dar cuenta de los avances que para entonces se hayan alcanzado en la defensa y promoción de derechos humanos.

Nos queda claro que usted imprimirá un estilo propio a su mandato, como titular de los derechos humanos en México, tal cual lo ha expuesto en el informe que ha rendido.

Confiamos en su objetividad para continuar con la agenda pendiente, así como en el profesionalismo, en la construcción de la nueva Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Como lo señaló el novelista francés, Víctor Hugo: “Habéis demolido. Demoler puede ser útil, pero yo desconfío de una demolición con la cual está mezclada la cólera”. Cambio sin cólera.

Escriba usted, presidenta, en las notas de su mandato, los logros que puedan acompañar su actuación, pues de ser así, será porque México ganó en la protección de derechos humanos.

Finalmente dejo constancia, presidenta, de nuestro ánimo de apoyo, y nuestra voluntad de contribuir como grupo parlamentario en la mejora de la defensa y promoción continua de los derechos humanos. Por su atención, muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias senador Mancera.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora el uso de la palabra la diputada Zulma Espinoza Mata, del Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México.

La diputada Zulma Espinoza Mata: Con la venia de la Presidencia. Buenos días compañeras y compañeros legisladores, señora presidenta maestra María del Rosario Piedra Ibarra, muchas gracias por su mensaje y sea usted bienvenida a esta asamblea para dar cumplimiento a lo que dispone el artículo 15, fracción V de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Antes que nada, quiero felicitarla por haber sido electa por el Senado de la República como titular de la Comisión de los Derechos Humanos.

Coincidimos en que su nombramiento es en cierta forma un acto de justicia para los defensores de los derechos humanos y activistas sociales en nuestro país y, desde luego, también para las miles de personas que han sufrido la desgracia de tener un familiar desaparecido.

Difícilmente se puede encontrar en la actualidad un perfil más idóneo para encabezar la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que de alguien que ha sufrido en carne propia el dolor de no saber el paradero de un hijo, de una hija, de un hermano o una hermana, de un esposo o una esposa, de un padre o una madre. De no tener la certeza de si están vivos o muertos. De no tener un lugar donde orar por ellos.

Más de cuatro décadas de búsqueda, de brindar soporte y acompañamiento a otras personas, de luchar por hacer visible la tragedia de los desaparecidos y sus familias, de enfrentarse al poder y a sus resistencias, de sufrir con la indiferencia y la falta de apoyo gubernamental y, a pesar de ello, tener la fuerza para seguir adelante con suficiente experiencia y legitimidad para ser ombudsperson en este país, en donde la cifra de víctimas de desaparición forzada ha alcanzado niveles escandalosos, lo cual se ha convertido en uno de nuestros principales pendientes en materia de derechos humanos.

Recibimos con gusto el informe que usted ha presentado, un informe que si bien se refiere a la gestión anterior, habla de los esfuerzos que entre todas y todos los mexicanos hemos realizado para la construcción de un Estado democrático y de derecho, que aspira con el firme compromiso, con el respeto a la dignidad de las personas y a la protección de los derechos humanos. Que se expresa en sus leyes, va más allá y se traslade a los hechos, a la realidad cotidiana de miles de personas que lamentablemente siguen siendo vulnerados en sus derechos.

Un reto de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos consignados en favor de las personas es, sin duda alguna, una tarea colectiva que no corresponde de manera exclusiva a las autoridades obligadas a ello por mandato de ley en su respectivo ámbito de competencia, sino a todos y a cada uno de quienes formamos parte de la sociedad.

Todos debemos aportar a la consolidación de la cultura de respeto a los derechos humanos para que esta crezca y sea más fuerte su arraigo en nuestro país. Se trata de conocer nuestros derechos, de promover que los conozcan quienes no los conocen, pero, sobre todo, de no ser indiferentes cuando estos son vulnerados. De denunciar las injusticias y las violaciones a los derechos de las personas y de exigir justicia para quienes las padecen.

Quiero aprovechar para reconocer y agradecer al maestro Luis Raúl González Pérez y a todo ese equipo del Consejo Consultivo de las Visitadurías de la Secretaría Técnica de la Comisión, por su labor y esfuerzo para tutelar los derechos humanos en nuestro país durante los últimos cinco años.

No era fácil afrontar la compleja situación de los derechos humanos en la que se encontraba México a finales del año 2014, cuando iniciaron su encargo, y aun así pusieron todo su empeño para consolidar las capacidades, recursos y procedimientos institucionales de la CNDH, además de atender puntualmente las crisis que se presentaron durante su gestión.

A finales del año pasado dio comienzo un nuevo ciclo de la CNDH, de la cual los mexicanos esperan que en los hechos conserve su autonomía, para que sus recomendaciones mantengan la misma fuerza y legitimidad a la que aspiraba hace 30 años cuando nació, con el propósito de convertirse en el poder de la gente.

Es también necesario que la CNDH sepa comunicar a la sociedad su importancia, a través de una mayor cercanía a las víctimas. Resulta fundamental que todos entendamos que la CNDH es una institución imprescindible para el Estado mexicano, pero ello depende en buena medida de que esta promueva y defienda los derechos humanos con más sensibilidad hacia quienes representan su razón de ser. Es decir, los más desamparados de este país.

Confiamos en que de la mano de su nueva titular la Comisión podrá avanzar en este sentido. Por su atención, muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, diputada Espinoza.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora la palabra la diputada Carolina García Aguilar, del Grupo Parlamentario del Partido de Encuentro Social, hasta por cinco minutos.

La diputada Carolina García Aguilar: Con su venia, presidenta. Compañeras y compañeros legisladores, maestra María del Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, cualquier tarea o acción para defender los derechos humanos es fundamental para una sociedad que se desenvuelve en un Estado de derecho. De hecho, las instituciones que velan por esa defensa son un contrapeso real ante cualquier exceso por parte del poder del Estado.

Las cuestiones aquí tratadas, por tanto, competen también a cuestiones históricas que tienen sus raíces en las más amplias contradicciones de este tiempo.

Maestra Rosario Piedra, al estar conscientes de su trayectoria en la vida civil y académica, así como de sus acciones a favor de los familiares de las y los desaparecidos y perseguidos políticos, sabemos que los retos que tiene usted en el importante papel que le toca vivir son titánicos y que se acrecientan en el contexto histórico de estos tiempos.

La agenda con la que ha tomado la presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos debe, por ende, responder cabalmente a los requerimientos de la nación y del pueblo de México y no a una ideología o a un sector político.

Creemos que esta premisa básica la compartimos todos los aquí presentes. En el PES respaldamos la independencia institucional que tiene que poseer la comisión que usted preside.

La paz social, como objetivo y como un elemento vertebral en cualquier enfoque de bienestar, deberá de ser una meta y un proceso integral y permanente al que todos nos debemos sumar.

En Encuentro Social luchamos por la democracia, por la igualdad social, por la equidad, por los principios de la libertad; y, por tanto, apoyamos y acompañamos a la Comisión Nacional de Derechos Humanos en todos sus frentes.

Desde esta trinchera legislativa el Grupo Parlamentario del PES está comprometido con el Estado de derecho y por la defensa ante cualquier injusticia que padezca cualquier habitante de nuestro país, e incluso con la competencia del derecho internacional más allá de nuestras fronteras.

La imparcialidad, la objetividad y la legalidad, son principios del derecho positivo que asiste y nutre al derecho público.

Trabajar transversal y horizontalmente con una visión histórica y global  para alcanzar los ideales de nuestro tiempo, significa abonar en lo sustantivo para lograr regenerar y consolidar el tejido social y el bienestar, sobre todo, de los más vulnerables, de los que menos tienen. Lo ratificamos aquí ante ustedes.

El Estado de bienestar se debe de construir con los derechos sociales, con los derechos humanos, con el acceso universal, efectivo y de calidad a los servicios que constitucionalmente están a cargo del Estado mexicano.

Los rubros de salud, educación, de empleo, de justicia, por ejemplo, llevan aparejados serios retos en donde todos debemos trabajar coordinadamente para que nadie se quede atrás. Y esos retos obligan a todos y cada uno de los poderes del Estado mexicano, a todos los niveles de gobierno.

Hay que fortalecer a nuestras instituciones a través de incorporar las recomendaciones que emergen de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para lograr un trabajo unitario de todos los frentes, para acabar con la impunidad y la corrupción, para terminar con la insensatez de formas anacrónicas de gobernar y de administrar lo que es de todos.

Con ello fortaleceremos a las instituciones y a nosotros mismos. Es cuanto. Muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, diputada Carolina.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora la palabra la senadora Eunice Renata Romo Molina, del Grupo Parlamentario del Partido Encuentro Social, hasta por cinco minutos.

La senadora Eunice Renata Romo Molina: Muchísimas gracias. Con su venia, presidenta.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Adelante.

La senadora Eunice Renata Romo Molina: Maestra Rosario Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, sea usted bienvenida.

Compañeras y compañeros, la importancia de este informe anual radica no en satisfacer un requisito formal para justificar el dispendio de una onerosa pero inherente institución, como solía hacerse, sino radica en el valor y en el compromiso que se asume de manera genuina para transformar este país.

No habrá entre nosotros quien pueda negar la delicada realidad presente en materia de derechos humanos en México. Sabemos, quienes impulsamos desde hace un tiempo una transformación nacional, que la población de este país entero ha padecido violaciones a sus derechos fundamentales de manera brutal y cotidiana.

No puede enorgullecernos a nadie el hecho de que algunos de los casos más vergonzosos de violación a los derechos humanos que haya visto el mundo en los últimos años han tenido lugar en nuestra geografía, sobre nuestra población y las más de las veces sobre los más vulnerables de los mexicanos.

Nadie tampoco debería presentarse a politizar un tema que nos afecta y nos compete a todos. Es triste ver que no todas las fracciones aquí presentes tengan alguna claridad en ese sentido, pero eso lo dejaré para la conciencia y empatía de cada quien.

Quisiera mencionar sólo algunas de las asignaturas pendientes, las más graves, con el afán únicamente de guardar memoria y hacer presentes a las víctimas. Me permito ante esta tribuna pronunciar nombres como Acteal y Aguas Blancas, Ayotzinapa, Pasta de Conchos, ABC, Tlatlaya, Apatzingán. Muchos de estos son graves casos por parte de agentes federales. Y por el honor, siempre con las víctimas, no dejaré de nombrar la reciente masacre de nueve mujeres y niños en una carretera del desierto de Bavispe, en los límites entre Chihuahua y Sonora.

De igual forma no deja de afligirnos el purgatorio que viven miles de migrantes mexicanos y de otras nacionalidades, que cruzan el país buscando un sueño que representa para ellos nada más y nada menos que una opción de vida. Tampoco podemos dejar de mencionar la situación que vivimos las mujeres día con día, que además nos remite al reciente feminicidio de la artista y activista Isabel Cabanillas, en Ciudad Juárez, Chihuahua. Ante lo cual volvemos a decir: Ni una menos.

Me refiero a estos tristes acontecimientos únicamente con el fin de recordarlos y hace conciencia de que este país llamado México no podrá existir más si no desagraviamos hechos tan lamentables, si no destituimos esa realidad.

Estoy plenamente consciente del problema que enfrentamos. El derecho a la vida es el primero de los derechos humanos, pero también lo son el derecho a la paz, a la salud, a la educación, a la no discriminación, a la igualdad, a la dignidad, al agua y a un ambiente sano, a la alimentación, a la integridad, al trabajo, a las libertades, pero sobre todo a la verdad.

Generar las condiciones para satisfacer estos derechos para todas las personas es una tarea de todas y de todos, en la que la sociedad y un gobierno en conjunto debemos tomar parte. Por ello invito a los legisladores aquí presentes a sumarnos a esta tarea, a que dejemos las descalificaciones y la confrontación por el bien de la patria. Las víctimas por violación de derechos humanos lo merecen.

Quienes aquí somos representantes populares o que hemos tenido encargos políticos, debemos ser responsables ante ello y como tal habremos de responder.

La misión de la CNDH como ninguna otra, no puede estar sujeta a los cálculos político-electorales. El empeño que tenga esta nueva comisión será fundamental, como también lo será la labor que pongamos los demás poderes constituidos, sumando al acompañamiento de la sociedad en su conjunto para impulsar la mayor fortaleza que debe tener el Estado frente a las víctimas, resarcir los daños y para todo hacer verdad la garantía de la no repetición.

Estimada maestra Rosario Piedra, hace apenas dos meses que encabezas la titular de la CNDH, sabemos que el reto que asumiste es enorme y que las condiciones y el contexto en que encuentras la Comisión no fueron las más favorables para trabajar en favor de las víctimas, sin embargo, es notable la fortaleza, la franqueza y la humildad que te caracteriza y creo que ello representa un buen augurio para enfrentar los agravios vividos y que vale más que no vuelvan a suceder.

Cuenta con el apoyo de la fracción de Encuentro Social para legislar en favor de los derechos humanos. Confiamos y estamos atentas a tu digna labor. Es cuanto, presidenta.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, senadora Romo.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora el uso de la palabra el senador Juan Zepeda, del Grupo Parlamentario del Partido Movimiento Ciudadano.

El senador Juan Manuel Zepeda Hernández: Gracias, presidenta. Compañeros legisladores, compañeras legisladoras. Bienvenida la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos a nuestro país, Rosario Piedra Ibarra.

¿En qué momento se da esta comparecencia? En un momento, por supuesto, crítico en nuestro país, en el tema de los derechos humanos. Usted tomó protesta hace unos meses y sería injusto para nosotros reclamarle todo el informe o atribuírselo a su gestión, porque prácticamente son un par de meses. Pero usted sí puede responder por lo que ha ocurrido este último mes y en su informe no encontramos un solo argumento de una mea culpa de lo que está pasando hoy en nuestro país.

Se acaban de dar a conocer las cifras lamentables del secretariado de seguridad pública nacional, donde acabamos de vivir –atribuible ya, eh, a este nuevo gobierno– el año más triste de la época contemporánea para nuestro país, con más de 35 mil asesinados a lo largo y ancho de nuestro territorio. De esos más de 35 mil, poco más de mil mujeres asesinadas por un tema de odio, que se tipifica feminicidio.

Recordarle, maestra, que el principal derecho fundamental del ser humano es la vida y no hemos escuchado una sola recomendación o un solo pronunciamiento de parte de usted, como garante y vigilante, que el gobierno haga cumplir esos derechos. Ni uno solo, eso sí ya es imputable a este par de meses que lleva al frente de esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Si no se pronuncia sobre este principal derecho fundamental del ser humano, qué nos esperamos de otro derecho fundamental que es la libertad y la libertad entendida como el derecho a tener la libertad de buscar un trabajo o la libertad de optar por un mejor futuro para la persona o su familia. Me refiero, la libertad para migrar del ser humano.

Estamos viviendo otro episodio lamentable para nuestro país, donde se está terminando con ese prestigio internacional que por décadas caracterizó a nuestro país en materia de brazos abiertos para la migración.

México abrió los brazos a los judíos en la Segunda Guerra Mundial, y fueron recibidos aquí. Ejemplos loables de embajadores mexicanos en países europeos que se jugaron la vida y la libertad para recibir a judíos y trasladarlos aquí a nuestro país, donde reiniciaron una nueva vida, huyendo de una muerte segura.

México abrió los brazos en la Guerra Civil española, recibiendo a miles de españoles, niños muchos de ellos, que vinieron a enriquecer la vida académica, política, científica, cultural de nuestro país.

Abrió los brazos cuando el golpe de estado en Chile y recibimos a miles de chilenos.

Y qué decir del conflicto, del golpe militar en Argentina, la guerra en Centroamérica. Y en Centroamérica hoy somos la vergüenza en política exterior.

Para quienes hicieron esos gestos, aquí tienen un ejemplo de congruencia. Ahí está Porfirio Muñoz Ledo, que defiende lo que hace bien su gobierno, pero también es capaz de levantar la voz y decir que no es correcto lo que este gobierno hoy está haciendo en materia de migración.

Quién en su sano juicio, realmente, reivindicando este derecho... Miren, yo cada que me paro aquí a hablar de estos temas, me siento con la total autoridad. Yo fui migrante, yo estuve 12 años fuera de mi país. Sé lo que es pasar a un país que no es de uno y sé lo que es vivir en carne propia el racismo, la discriminación y el maltrato. Y no lo hace uno por gusto, lo hace por necesidad. Qué triste papel está jugando México.

Además, haciéndole su campaña política a Donald Trump. Si estamos preocupados porque se va a reelegir, pues cuidado eh, porque estas imágenes de la detención de migrantes están difundiéndose a lo largo y ancho de Estados Unidos y, ¿saben a quién se lo están atribuyendo como éxito? No a nuestro país, a su propio gobierno. Y no hemos escuchado, presidenta, un solo pronunciamiento de su parte, ni uno solo.

Acabamos de pasar una crisis en salud. Buenas intenciones sí, sí, sí, seguramente. Pero ya ha costado vidas. El derecho a la salud también es un derecho humano y hoy hay deficiencias y no se está garantizando. Y no hemos escuchado una sola recomendación o un solo pronunciamiento de parte de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Usted recordará, fue en el Senado. ¿Cuándo se va a borrar la imagen de violencia en torno a su nombramiento? Incluso forcejeos de su propio compañero de Morena, levantándole la mano para que tomara protesta, violentando el mismo procedimiento.

Ojalá y la premura o la prisa fuese porque tenían un plan para garantizar los derechos humanos. Hoy nos damos cuenta que no es así. Bueno, ni siquiera se han nombrado muchas de las visitadurías locales o estatales.

Y qué triste que, por ejemplo, en el tema de salud es mejor la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Querétaro, una estatal que se está pronunciando, que está emitiendo recomendaciones. Pero, la nacional, nada.

Reconozco en la Cámara de Diputados que han tenido gestos para abrir el espacio, la tribuna a esos grupos que han sido víctimas.

Hace poco una familia se masacró en los límites de Chihuahua y Sonora, la familia LeBarón. Un tema que trascendió a nivel internacional, y hace poco, el Grupo Parlamentario al cual pertenezco, Movimiento Ciudadano a través de su coordinador aquí, Tonatiuh Padilla, presentó un punto de acuerdo, lo sometió a consideración de la Cámara de Diputados y quiero felicitar y agradecer, se aprobó por prácticamente todos los coordinadores de los grupos parlamentarios aquí en la Cámara de Diputados, y ¿saben qué solicitaba aquí? Que el próximo martes 28, que va a ser la última sesión de la Comisión Permanente, se recibiera a un integrante a nombre de la familia LeBaron para que se escuche, como se escuchó hace meses también acá, a los padres de los 43 desaparecidos de la normal de Ayotzinapa.

Qué bien que aquí se esté prestando oído a estos familiares de las víctimas. Víctimas ellos mismos de la violencia que está ocurriendo en el país, pero qué creen, triste para el Senado porque una vez que se aprobó aquí en la Cámara de Diputados, el argumento es que no pueden venir a que se les escuche porque Morena, en el Senado, se está negando a que así sea.

Yo quiero hacer público esto, para que ojalá Morena, en el Senado, reflexione, y que la próxima semana, el 28, se le dé el espacio para que se escuche a este familiar de las víctimas.

Quiero concluir haciéndole esta serie de preguntas. No las anote, se las voy a entregar, presidenta.

Pregunta número 1. Sobre su silencio respecto a la actuación de la Guardia Nacional en la frontera sur, ¿cuál es su plan para evitar violaciones a los derechos humanos?

2. ¿Cuántos visitadores estuvieron presentes en el ingreso de la última caravana donde vimos violencia para estos migrantes?

3. De verdad, ¿no tiene ninguna recomendación sobre la forma en que deben actuar los elementos de la Guardia Nacional?

4. Si no se publicado el protocolo de uso de la fuerza de la Guardia Nacional, ¿qué opinión tiene para ese uso de la fuerza con los migrantes?

5. ¿Qué opinión le merece un presidente de la República que desprecia las actividades de los defensores de derechos humanos de la sociedad civil, un gremio, por cierto, al que usted hasta hace poco pertenecía y que el presidente se niega a recibir?

6. ¿Qué opina de un presidente y que al sufrimiento de las víctimas les hace llamar, no los escucho, no quiero hacer un show?

Concluyo. 7, supuesto debido a su innegable cercanía política con el partido en el poder, del cual fue usted candidata en el último período electoral, ¿cómo salvaguardará la autonomía de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos frente a la voluntad del Poder Ejecutivo federal, para negar que continúa la escalada de violaciones a los derechos humanos?

Y la última pregunta, y aquí se las voy a entregar. Por su declaración tan lamentable, desconociendo el tema. ¿Cuántos periodistas asesinados durante el actual sexenio reconoce la Comisión Nacional de Derechos Humanos y qué medidas cautelares se han implementado para salvaguardar la integridad de las personas que se dedican al periodismo en el país?

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Concluya, por favor, senador.

El senador Juan Manuel Zepeda Hernández: Es cuanto. Gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora el uso de la palabra, la diputada Mary Carmen Bernal Martínez, del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo.

La diputada Mary Carmen Bernal Martínez: Muchas gracias, senadora presidenta. Con el permiso de la Presidencia, de la Mesa, compañeras y compañeros legisladores. En cumplimiento de la obligación prevista en el artículo 102, Apartado B, párrafo noveno de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en el artículo 15, fracción V de la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, se ha recibido el informe anual de actividades que la presidenta de la Comisión presenta ante esta representación del Congreso mexicano.

Antes de iniciar con el documento que preparamos como grupo parlamentario para hacer algunas observaciones respecto al informe, me gustaría precisar una información que hace un momento nos dio quien representa hoy a la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Ella comentaba en el informe que hoy entrega, en su mensaje, que todas las visitadurías aún no están nombradas porque recordemos que está en un proceso de una reingeniería de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Considero que no lo debemos perder de vista, porque para muchos la creación de estos organismos descentralizados durante administraciones anteriores la veíamos como para delegar funciones que le correspondían al Ejecutivo, a otras dependencias.

Es más, muchos de nosotros incluso perdimos la confianza a estas instituciones porque considerábamos que muchos de los que las representaban pues solamente estaban por cumplir.

En este caso entendemos y estamos claros que tienen que ser las cosas diferentes, y que para que las cosas sean diferentes es necesario una reingeniería. Porque si no, tendríamos más de lo mismo y entonces no estaríamos viendo una transformación de fondo en este tipo de organismos descentralizados.

Esperamos y estamos seguros en el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo que esa reingeniería se va a dar a la brevedad, porque sabemos que se necesita y porque sabemos que hay muchos temas pendientes que atender.

También me gustaría destacar algo del mensaje que nos compartió hace un momento, es que se pretende que se establezca la diferencia entre qué asuntos se consideran que sean atendidos de manera urgente.

Estoy segura que para todos aquellos que acudimos en su momento a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para una atención, estamos seguros de que cuando vamos es porque consideramos que estos asuntos son urgentes y que deseamos una atención pronta y expedita, como se supone que debe ser la justicia en nuestro país.

Me parece muy buena la propuesta, sin embargo, hay una línea muy delgada entre qué asunto debe ser atendido con urgencia y qué asunto no. Sin embargo, estoy segura de que las decisiones que tome quien actualmente representa la Comisión Nacional de Derechos Humanos van a ser las acertadas.

¿Por qué? Porque ha vivido y vive en carne propia muchos o ha vivido algunos sucesos de muchas de las víctimas en nuestro país y eso va a ayudar bastante. Eso va a ayudar porque se necesita estar en el lugar de los demás, en los zapatos de los demás para poder entender de manera correcta su circunstancia.

Y entrando ya en materia de lo que tenemos preparado, me gustaría comentar que es necesario enfatizar que para el Estado mexicano el respeto a los derechos humanos de toda persona que se encuentre en territorio nacional constituye una prioridad.

En el caso del Poder Ejecutivo y de las dependencias y entidades federativas que integra la administración federal, el presidente de la República ha sido enfático en instruir a los colaboradores que sean respetuosos de estos derechos.

También nos comentaban hace un momento que tiene muy poquito al frente de la dependencia y que, sin embargo, a pesar de ello, le toca venir a dar el informe a esta Comisión Permanente.

Sin embargo, me gustaría destacar algunas actividades que se vieron durante 2019 y que seguramente son materia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Por ejemplo, han dado acompañamiento a las caravanas migrantes que en diferentes fechas ingresaron a nuestro territorio nacional.

El Estado mexicano ha respetado sus derechos dentro de México, pero no puede hacer nada para propiciar el deseo de todos quienes la conforman que quieran ingresar a los Estados Unidos de Norteamérica.

También es importante destacar que, a diferencia de otras administraciones, durante el 2019 no se cometieron violaciones a los derechos humanos mediante el uso de la fuerza pública en perjuicio de la población civil.

Cierto es, y eso nadie pretende ocultarlo, que se han dado múltiples homicidios dolosos con armas de fuego, pero quienes critican al gobierno por el incremento de estos delitos, no se preguntan que durante gobiernos anteriores estas armas entraron ilícitamente a nuestro país, y que por la omisión de otras administraciones en salvaguardar nuestras fronteras, hoy esas armas se usan para cegar la vida de nuestros compatriotas.

Durante esta administración en las indagatorias ante la anterior Procuraduría General de la República, y la que hoy es la Fiscalía General de la República, no se usa la capacidad investigadora del Estado para crear culpables que luego en los procedimientos de amparo son liberados porque se acreditan las violaciones al debido proceso.

En el periodo que comprende el informe, el gobierno mexicano ha impulsado una amplia política social en beneficio de quienes menos tienen.

En el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo estamos ciertos que la política social está orientada a proteger el derecho humano a la alimentación, la educación, la salud y la vivienda, tan solo por señalar algunos temas que son de prioridad para nuestro gobierno.

Es cierto que hay temas sumamente sensibles como la aparente falta de medicamentos para la atención de los niños con cáncer. Sin embargo, es necesario mencionar que mediante el esquema de compras consolidadas instrumentado por el gobierno federal, se ha logrado adquirir el medicamento que garantizará la cobertura en todos los centros hospitalarios, porque la salud de los mexicanos es una prioridad del presente gobierno, pero el combate a la corrupción era un imperativo impostergable.

En el caso de las inconformidades presentadas respecto de la cancelación de los apoyos para guarderías infantiles, es necesario destacar que el Estado mexicano avanza al establecer en la reforma al artículo 3o. constitucional que la educación inicial forma parte de la educación básica y, por tanto, obligación del Estado su prestación.

De igual forma en la Ley General de Educación, publicada en el Diario Oficial el 30 de septiembre del año pasado, se regula lo referente a este nivel educativo.

En el Partido del Trabajo somos firmes impulsores de la educación inicial. El Partido del Trabajo tiene una amplia experiencia y conocimiento que aportar en esta gran apuesta nacional por nuestros niños. La evidencia acredita que los niños formados en los Cendis del Partido del Trabajo desarrollan una gran capacidad cognitiva que les permite insertarse adecuadamente en niveles educativos superiores.

Desde nuestra trinchera exhortamos a la maestra Rosario Piedra Ibarra a que, más allá de las críticas infundadas que se suscitaron con motivo de su designación, continúe con su compromiso personal de profundizar en el respeto a los derechos humanos de los gobernados y de propiciar su reparación cuando éstos sean violentados o vulnerados.

Estamos ciertos de que el lamentable caso de los estudiantes normalistas de Ayotzinapa sigue siendo una herida abierta para todos los mexicanos. Más allá de verdades históricas prefabricadas, nos interesa conocer la verdad de lo sucedido y que se deslinde las responsabilidades penales a los autores intelectuales y materiales de este avieso crimen en contra de nuestros jóvenes.

Concluyo. En el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo de la Cámara de Diputados y del Senado encontrarán un importante grupo de mexicanas y mexicanos que son sus aliados en el imperativo de la defensa de los derechos humanos de todas y todos los mexicanos. Es cuanto, senadora presidenta. Muchísimas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, diputada Bernal.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora el uso de la palabra el diputado Enrique Ochoa Reza, del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional. Adelante, diputado.

El diputado Enrique Ochoa Reza: Compañeras y compañeros legisladores. Maestra Rosario Piedra Ibarra, sea usted bienvenida a esta sesión de la Comisión Permanente.

Y déjeme empezar por el final. Nosotros deseamos que usted tenga éxito al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y que alcance los altos objetivos que nos ha presentado en su informe. Lo hacemos porque somos parte de un partido que gobierna 12 entidades federativas, directamente a 43 millones de habitantes. Luego entonces, trabajamos para que a México le vaya bien. Legislamos con ese valor en mente y como oposición parlamentaria, nuestro pecho no es bodega. Y por eso señalamos lo que nos parece que se puede hacer mejor.

Le proponemos trabajar juntos para que la defensa de los derechos humanos pueda sobrepasar importantes retos y algunos nubarrones que vemos en el horizonte.

Un principio fundamental para entender la importancia de los derechos humanos en una democracia es la progresividad. La progresividad es el principio que hace imposible revertir los avances logrados en derechos fundamentales una vez que estos forman parte de nuestra Constitución.

Amparados en la progresividad ante una posible reforma de justicia penal, los derechos humanos pueden ser ampliados, los derechos humanos pueden ser profundizados, pero no pueden ser revertidos ni pueden ser removidos de la Constitución. De hacerlo estaríamos incurriendo como legisladores en violaciones graves a los tratados internacionales de los que México forma parte.

En este sentido, es vital garantizar el pleno respeto y la puntual observancia de los derechos humanos ante posibles retrocesos. Los derechos humanos no son trofeo ni bandera de un gobierno en particular, son el blindaje permanente que goza todo individuo para evitar el ejercicio abusivo del poder, de cualquier autoridad, de cualquier nivel de gobierno en todo momento y a lo largo de todo el territorio nacional.

México es un país dinámico, donde su marco jurídico evoluciona para entender el conjunto de asimetrías que se van gestando a lo largo del tiempo. De hecho, dos de las más grandes reformas constitucionales de este siglo han tenido que ver con el sistema de justicia.

La primera en 2008 directamente impactando al sistema de justicia penal con la ambiciosa propuesta de cambiar el sistema de justicia opaco, escrito e inquisitivo, propio de sociedades no democráticas, y transitar hacia un sistema de justicia transparente, acusatorio y oral.

La segunda reforma de gran calado fue en 2011 en materia de derechos humanos, impactando en todos los rubros de la vida pública y por supuesto en nuestro sistema de justicia.

Un sistema de justicia debe de mantener el más alto estándar de respeto a los derechos humanos, puesto que tutela los derechos fundamentales más íntimos de una persona como son la vida, la libertad y la propiedad.

En dicho contexto, distinguida presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, vivimos un momento fundamental para defender los derechos humanos ganados por los ciudadanos frente a cambios legislativos recientes que están cuestionados ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por su posible inconstitucionalidad.

Acción de inconstitucionalidad que inició, por cierto, la Comisión Nacional que usted ahora dignamente encabeza, ejemplo de ello es el riesgo que amenaza al derecho humano de la propiedad privada frente a los excesos de la Ley de Extinción de Dominio que pueden afectar a ciudadanos inocentes en su patrimonio, incluso antes de ser escuchados por un juez o a pesar de ser declarados inocentes del delito que se les acusa.

Abuso al derecho humano de propiedad también puede existir en un sistema jurídico, donde un acto de autoridad pueda congelar el patrimonio bancario de un ciudadano, sin la supervisión previa de un juez, sin juicio de por medio o sin que el acto esté debidamente fundado y motivado, como lo establece el artículo 16 de nuestra Constitución sobre los actos de autoridad que afectan el patrimonio de las personas.

Este asunto fue ampliamente debatido en la Cámara de Diputados y la mayoría votó de manera correcta a favor de los derechos humanos. La minuta ha pasado al Senado de la República y usted, como presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, podrá interponer una acción de inconstitucionalidad si usted considera que el Legislativo, en la última versión aprobada, afecta o viola los derechos humanos.

También existe una amenaza al derecho humano del debido proceso legal y a la presunción de inocencia frente al establecimiento de la prisión preventiva oficiosa, que ha sido cuestionada por múltiples organismos nacionales e internacionales en materia de derechos humanos.

Tiene razón Luigi Ferrajoli cuando señala que, y cito: “todo arresto sin juicio ofende el sentido común de la justicia, al ser percibido como un acto de fuerza y de arbitrio no existe, en efecto, ninguna resolución judicial y tal vez ningún acto de poder público que suscite tanta inseguridad y socave tanto la confianza en el derecho como el encarcelamiento de un ciudadano sin proceso, en ocasiones, durante años”, cierro la cita de Ferrajoli.

En particular, la prisión preventiva oficiosa supone una afectación grave al principio de presunción de inocencia, que exige que exista una diferencia clara entre la persona que es imputada por la presunta realización de un delito y la persona que ya ha sido sentenciada y deba hacer frente a una pena privativa de la libertad.

Por eso es que nuestra Suprema Corte de Justicia de la Nación ha devenido, como una de las vertientes de la presunción de inocencia, la regla de trato procesal, a partir de la cual los jueces deben impedir, en el mayor caso posible, la aplicación de medidas que en los hechos impliquen una equiparación entre diputado y culpable, lo cual conllevaría una anticipación de la pena, misma que resulta incompatible con la preservación de la presunción de inocencia.

La misma Corte Interamericana de los Derechos Humanos enfatiza que la aplicación de la prisión preventiva debe tener un carácter excepcional, en virtud de que se encuentra limitada por los principios de legalidad, presunción de inocencia, necesidad y proporcionalidad.

Por otra parte, la imposición con carácter oficioso de la prisión preventiva choca con la autonomía que deben de tener nuestros jueces en el sistema de justicia. En el fondo, la oficiosidad de la prisión preventiva es una expresión de desconfianza hacia los jueces y hacia el sistema de impartición de justicia.

La solución propuesta por organismos internacionales y organismos nacionales de derechos humanos, es cambiar en nuestra Constitución la prisión preventiva oficiosa para poner en su lugar la prisión preventiva justificada, para que sean los jueces quienes determinen su aplicación al valorar las pruebas del caso, respetando la presunción de inocencia.

Un sistema efectivo que respete, observe y proteja los derechos humanos debe tener como piedra angular un Poder Judicial imparcial, autónomo y con presupuesto suficiente para llevar a cabo sus funciones.

Compañeras y compañeros legisladores, distinguida presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, una sociedad democrática se construye a partir del esfuerzo multigeneracional de mujeres y hombres. La institución que usted encabeza es ejemplo de ello.

Ha sido producto de decisiones ejecutivas y actos parlamentarios a lo largo de casi tres décadas de trabajo, durante gobiernos de tres partidos políticos distintos. Y se ha beneficiado del intenso debate plural que se da en el Parlamento mexicano, con pluralidad política.

La consolidación de un sistema jurídico en un Estado democrático de derecho debe ser respetuoso de los derechos humanos, del debido proceso, de la presunción de inocencia y del principio pro persona.

Todo sistema de justicia es perfectible, y el nuestro que tanto esfuerzo, tiempo y consenso nos ha costado construir no es la excepción.

Cualquier modificación que se crea necesaria al sistema de justicia, debe tomar en consideración la experiencia, la práctica y el conocimiento que día a día se lleva en todos los juzgados penales de nuestro país. Necesariamente debe contar también con el más amplio consenso social posible, incluyendo la amplia participación de expertos en derechos humanos, de jueces, académicos, abogados, víctimas, colectivos de la sociedad civil organizada y la ciudadanía que de manera amplia quiera participar.

Como país democrático, con un robusto catálogo de derechos fundamentales en nuestra Constitución, estamos llamados a unir esfuerzos todas y todos, para la promoción, defensa y respeto a los derechos fundamentales.

Desde su creación, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha demostrado ser una institución fundamental para la evolución de nuestra democracia y ha sido un avance grande para nuestra nación.

Profundizar en reformas y en los avances en materia de derechos humanos, no sería compatible con el restablecimiento de un sistema penal inquisitivo, en donde se permita la presentación de pruebas con vicios de origen, o donde la figura de arraigo aplique para cualquier delito.

Consideramos que el sistema acusatorio y oral representa grandes avances y ha costado muchos recursos y esfuerzos de los impartidores de justicia.

Nos proponemos a consolidar la división de Poderes, en donde el Poder Judicial y sus integrantes cuenten con las garantías plenas para el ejercicio de su importante labor. Un Poder autónomo, independiente y libre para autogobernarse.

El respeto a los derechos humanos debe ser el eslabón permanente en toda la cadena de actuación de la autoridad. Lo contrario nos convertiría en víctimas en nuestra propia casa.

Más allá de las ideologías, de las visiones personales, se debe salvaguardar en todo momento la autonomía e imparcialidad de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Sigamos construyendo todo un organismo garante, que sirva a las y los mexicanos frente a los abusos del poder, ante la arbitrariedad de las autoridades. Nada ni nadie por encima de la Constitución. Todas y todos iguales frente a la ley. Muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, diputado Ochoa.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora la palabra el senador Gustavo Enrique Madero Muñoz, del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional.

El senador Gustavo Enrique Madero Muñoz: Con el permiso de la Presidencia. Compañeras y compañeros legisladores, maestra María del Rosario Piedra Ibarra, con todo respeto, como dice con frecuencia nuestro presidente, su nombramiento quedó registrado como una de las páginas más tristes de la historia del Senado. Hoy nos preocupa que su gestión también se marque como un capítulo oscuro de la historia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Los integrantes del Grupo Parlamentario de Acción Nacional promovimos un juicio de amparo contra su designación. Por lo que usted no cuenta con el aval de todas las fuerzas políticas que representamos la pluralidad en nuestro país.

El Poder Judicial de la Federación ya ha ordenado admitir el trámite del juicio que promovimos para determinar si su designación cumple con los parámetros constitucionales. También otros involucrados y aspirantes han presentado recursos y amparos.

El cuestionamiento de los requisitos que usted no cumplió para su cargo, ahora también se aplican a los nombramientos que usted está haciendo al interior de la comisión. José Martínez Cruz, director general de la Primera Visitaduría; Carlos Fazio, director general de la Segunda Visitaduría; y Édgar Sánchez Ramírez, director general de la Sexta Visitaduría, ninguno de ellos cumple con el requisito de ser visitador general de acuerdo al artículo 25 de la ley que establece como requisito que sea título de derecho, licenciado en Derecho.

Al no contar ninguno con esta profesión, esta deficiencia la ha llevado a usted a omitir los nombramientos como visitadores y, por lo tanto, está afectando gravemente el funcionamiento de la comisión.

Por eso, hasta el día de hoy, ninguna de sus seis visitadurías generales tiene titular o encargado de despacho, quienes son los únicos facultados para exigir a las autoridades que apliquen las medidas cautelares, y por esta carencia de visitadores, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha quedado imposibilitada para emitir medidas cautelares.

¿No le preocupa a la defensora de los derechos humanos que esté paralizada así la institución?

Las medidas cautelares son una de las principales herramientas que tiene la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para prevenir violaciones a los derechos humanos, en casos que van desde agresiones a periodistas hasta posibles desapariciones forzadas o uso excesivo de la fuerza pública en contextos de protestas sociales.

Por eso la gente se pregunta hoy ¿dónde está la Comisión Nacional de los Derechos Humanos? ¿Alguien ha visto a Rosario Piedra Ibarra? ¿Trabaja como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos? ¿Ejerce el cargo? Ese es el título del artículo que publica hoy Manuel López San Martín.

Toc, toc, toc, Rosario Piedra, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, ¿algo qué decir sobre la violación a los derechos humanos que está cometiendo la Guardia Nacional? Tu silencio sepulcral sugiere que fuiste colocada ahí para ayudar al poder, en vez de denunciar sus abusos. Denise Dresser.

El año que vivimos en peligro, el año más violento de la historia reciente desde que se contabilizan los homicidios. ¿Dónde está la Comisión Nacional de los Derechos Humanos? ¿Qué ha hecho frente a los 5 mil 184 personas desaparecidas durante los primeros 13 meses de la actual administración?

¿Dónde está la Comisión Nacional de los Derechos Humanos? ¿Qué ha dicho? ¿Qué ha hecho ante los mil 124 cuerpos encontrados en los últimos 13 meses en las 873 fosas clandestinas?

¿Qué ha hecho para denunciar los 34 mil 582 homicidios dolosos registrados en esta administración, el año más violento de la historia de México? ¿Qué ha hecho para defender las mil 6 mujeres fallecidas por el delito de feminicidio en esta administración? ¿Qué ha hecho frente al repunte del 35 por ciento en las extorsiones, 7 mil 358 en el 2019?

¿Qué ha hecho frente al crecimiento del 15 por ciento en los delitos de trata de personas, 555? ¿Y qué ha hecho frente al alza de casi el 10 por ciento en materia de secuestros, mil 392? ¿Qué acciones, medidas o recomendaciones ha emitido la Comisión Nacional de los Derechos Humanos?

¿Qué ha hecho para garantizar los derechos humanos de los pueblos originarios y exigir una verdadera consulta previa, libre e informada, de buena fe y culturalmente adecuada, y no los remedos o simulaciones que la actual administración realiza frente a las megaobras como ejercicios de consulta popular, pero no defendiendo los derechos humanos de los pueblos originarios?

¿Qué ha hecho la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para proteger el derecho a la salud, que también se encuentra vulnerado por la improvisación para iniciar la operación de un nuevo sistema de salud sin reglas, sin abastecimiento, sin presupuesto, que pone en riesgo la vida de las personas más vulnerables y que hoy en esta administración, en los centros  hospitalarios de primero y segundo nivel no tienen medicamentos, los derechohabientes del IMSS o el ISSSTE no encuentran en sus farmacias los medicamentos que necesitan? ¿Qué ha hecho en este sentido la Comisión?

Hoy los papás de niños con cáncer, que han sido muy tolerantes, hasta el extremo, han decidido manifestarse nuevamente y se movilizan desde hoy, a las 12 horas de este día tomando varios edificios públicos, entre ellos, la Secretaría de Salud.

¿Dónde está la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para la defensa de los derechos de las personas con discapacidad? La actual administración ha desatendido a las personas con discapacidad y pretende resolver la problemática con asistencialismo, sin realizar acciones tendientes al cumplimiento de la convención de los derechos de las personas con discapacidad.

Esta administración no busca la inclusión social de las personas con discapacidad sino volverlas clientela política, porque son puros apoyos directos, pero no combate la discriminación y no desarrolla capacidades ni garantiza su accesibilidad frente a las barreras físicas que imposibilitan su desplazamiento en los espacios públicos.

¿Cómo ha atendido a las personas con discapacidad frente al desmantelamiento institucional de esta administración, como la Conadis, los programas y organismos establecidos para protegerlos?

El muro de contención antimigrantes que ha ordenado el titular del Poder Ejecutivo federal, so pretexto de evitar posibles represalias económicas del gobierno de Estados Unidos. Esta decisión ha ocasionado que México atraviese una verdadera crisis humanitaria en materia de migración.

En nuestra frontera sur han sido detenidos y confinados 169 mil migrantes, 50 por ciento más que el año anterior. Y como lo señala la organización a favor de los derechos humanos en las Américas, México se ha convertido en el muro humano del muro de Trump.

Y que, a pesar de las preocupaciones generalizadas sobre el hacinamiento, las malas condiciones de salud y las denuncias de maltrato, la actual administración sigue restringiendo el monitoreo independiente de las condiciones de las estaciones migratorias.

Ante esta situación que ha recomendado la Comisión Nacional de Derechos Humanos a la actual administración, ¿cuántas visitas ha realizado a las estaciones migratorias y en qué condiciones ha encontrado a los migrantes?

Desalienta también que en una de sus primeras entrevistas que ofreció manifestara su desconocimiento sobre la problemática de la violencia frente a los periodistas. México es el país más peligroso para el ejercicio periodístico y tan solo en 2019 se registró el 40 por ciento de todos los homicidios de periodistas que en el mundo se dieron durante esta administración en México.

El año que termina perdieron la vida Jorge Celestino Ruiz, Rogelio Barragán Pérez, Norma Sarabia Garduza, Omar Iván Camacho, Francisco Romero, Telésforo Enríquez, Santiago Barroso, Jesús Ramos, Rafael Murúa y Édgar Alberto Nava López.

Quizás estas ejecuciones son las que hoy pongan en duda su acreditación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos frente a la Alianza Global de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos, y en diciembre pasado varias organizaciones de la sociedad civil y personas defensoras de derechos humanos solicitaron a la Alianza Global la revisión del estatus A, por contradecir los Principios de París en cuanto a la selección y nombramiento de la persona titular del organismo defensor de los derechos humanos.

También es importante señalar que próximamente la comisión ocupa dos posiciones en el Comité de Evaluación, que es el encargado de integrar la lista de aspirantes a ocupar las vacantes del Ifetel y la Cofece, y tiene el deber de designar personas que reúnan por lo menos requisitos de honestidad y competencia profesional, independencia y sin sesgos de partido o ideología.

Hasta ahora se han confirmado las sospechas que acompañaron su nombramiento, una comisión Nacional de los Derechos Humanos que sea todo menos autónoma e independiente, y que calle frente al gobierno que la puso donde está.

Su obligación es defender a las víctimas, no defender a la actual administración. Por eso y por su atención, pero sobre todo por sus respuestas, muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Tiene ahora el uso de la palabra la diputada Erika Vanessa del Castillo Ibarra, del Grupo Parlamentario de Morena, hasta por cinco minutos.

La diputada Erika Vanessa del Castillo Ibarra: Con el permiso de la Presidencia. Compañeras y compañeros legisladores, le damos la bienvenida a María del Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Sea usted bienvenida a este Palacio Legislativo.

Pues hoy estamos escuchando preocupaciones de algunas personas que estuvieron a cargo por 12 años en el gobierno, y no hicieron más que convertir a este país en la fosa más grande del mundo. Total, la sangre que corría no era la de sus hijos, la de sus familiares; era la del pueblo.

Hoy, en esta cuarta transformación estamos haciendo cambios profundos, y no solamente cambiar de colores. Ustedes nunca se atrevieron. Dónde estaba la Comisión de Derechos Humanos cuando había violaciones de derechos. Desde su creación, hace 30 años, esta comisión no ha hecho casi nada. Una y otra vez la comisión ha dejado de impulsar a las instituciones del Estado a reparar los abusos que ha documentado. No entregaba ni difundía información que poseía sobre casos de violación de derechos humanos. No les daba seguimiento a las víctimas para el cumplimiento de sus recomendaciones. En México vivimos una crisis humanitaria generalizada y sistemática, producto de décadas de abuso, encubrimiento, corrupción e impunidad desde el poder.

El actual subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas, y Karla Quintana, titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, informaron que actualmente en México existen 3 mil 24 fosas clandestinas. Del 2006 al 2019, el gobierno federal tiene contabilizadas 60 mil 637 personas desaparecidas. Existen al menos 281 mil 400 desplazados forzosos, según el informe de la misma Comisión Nacional de los Derechos Humanos no hace mucho.

Desde el pasado 2000 a la fecha han sido asesinados al menos 154 periodistas. La CNDH debe tener un estricto compromiso para promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos. Esa es su labor, y lo vamos a exigir.

La CNDH ha realizado aportes a la promoción de los derechos humanos en México, los cuales no han trascendido por no darles el debido seguimiento.

Se realizó una investigación exhaustiva después de la represión en Guadalajara en el 2004 y en Atenco en el 2006, y publicó un relato detallado de las severas violaciones de derechos humanos cometidas.

En el 2006 hizo una evaluación pormenorizada del sistema penitenciario en el país, y ha buscado superar las dificultades que existen para documentar abusos sufridos por migrantes.

Ha hecho campañas activas para ampliar la libertad de prensa en México. En el 2006 logró que se aprobara el congreso en una legislación con el objetivo de proteger a los periodistas de revelar sus fuentes, así como despenalizar la difamación en el 2007.

Sin embargo, cuando se trata de impulsar medidas para mejorar el historial de violaciones de los derechos humanos en México, a través de asegurar un recurso efectivo a las víctimas y promover reformas estructurales a la actuación de la CNDH, ha sido pobre y decepcionante.

La CNDH representa casi el único recurso que les quedaba a las víctimas que buscaban obtener un resarcimiento por los abusos sufridos. Por eso que quede claro, que se escuche fuerte y que se escuche lejos por aquellos que reclaman: nadie quiere sumisión ni que se encubran ni que se sigan solapando violaciones de los derechos humanos en México.

Esperamos autonomía frente al poder, sea quien sea y sin importar al partido que pertenezca. La autonomía constitucional es un logro de la sociedad civil, no una concesión graciosa del poder. Se ganó después de largas batallas de huelgas de hambre, marchas, mítines y plantones y discusiones.

Hoy sabemos que esta presidencia, estoy convencida que nuestra compañera que hoy representa Rosario Ibarra, que viene también de familias que han sido víctimas de derechos humanos, de violaciones de derechos humanos, sabremos que podrá conducir esta comisión. Ante todo, muchas gracias. Es cuanto.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Gracias, diputada Castillo. Tiene ahora la palabra la senadora Martha Guerrero Sánchez, del Grupo Parlamentario de Morena, hasta por cinco minutos.

La senadora Martha Guerrero Sánchez: Muy buenas tardes. Toc, toc, toc. Yo pediría, que con qué autoridad moral viene Acción Nacional y nos dice lo que es bueno y lo que es malo en la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Recordemos el periodo concretamente de Felipe Calderón y tengamos claro que es ahí cuando es un periodo de baño de sangre en nuestro país, donde el presidente Borolas, en un ambiente de decir que va a combatir a la delincuencia organizada, hoy publicaciones oficiales nos dicen que había toda una correlación con la delincuencia organizada.

Toc, toc, toc. Genaro García Luna, es el ejemplo, lo tenemos en Estados Unidos, secretario de Seguridad. Pido respeto, Xóchitl. Secretario de Seguridad en Estados Unidos, lavado de dinero, vinculado a la delincuencia organizada.

Toc, toc, toc. También tenemos una situación bien clara, se habla de que no se ha atendido el problema de la migración. Es una gran mentira. Desde que tenemos este problema, desde hace varios meses, el presidente de la República dio indicaciones de manera inmediata, mandó al subsecretario de Trabajo, que es el licenciado Horacio Duarte, a atender el problema. Se han estado estableciendo albergues y se ha estado atendiendo el problema. Eso es una grave mentira para aquella persona que dijo que no se está atendiendo. Yo no dudo que hay problemas, pero esos se están atendiendo.

Yo hubiese querido, presidenta, que el escenario hubiera sido otro. Mi respeto, presidenta Rosario, pero como anécdota, que era lo que yo venía a meter de manera inicial, yo tuve oportunidad de estar en la Comisión hace algún mes, mes y medio, pensé que me iban a recibir allá por Anillo Periférico Sur y me encuentro con la sorpresa de que la presidenta está atendiendo aquí en República de Cuba, número 60.

Por primera vez vi una Comisión con las puertas abiertas, con gente sencilla y eso es una buena señal. Yo fui varias veces a la Comisión Nacional y siempre, un enrejado nunca nos permitió tener trato con la Comisión.

Hoy veo una oficina sencilla, veo, y te voy a recordar mis palabras, presidenta, o más bien, tus palabras: “mi política de trabajo va a ser atender a la gente”. No lo olvides, presidenta, porque eso es lo que necesita el pueblo de México, una presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos que escuche a todas aquellas personas que nos hemos sentido indignadas, ofendidas, agraviadas por tanta impunidad que hemos visto en nuestro país.

Esto no es diplomacia, es lo que verdaderamente nosotros hemos recogido, los que caminamos en las calles, el sentir de la gente cuando se ve que no se le resuelven sus problemas de derechos humanos.

Yo quiero decirte, presidenta, Morena te apoyó, votó a tu favor, no nos decepciones, en ti depositamos una confianza terrible, sabemos qué es limpiar la casa de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, no será fácil.

Y tenemos bien claro que va a haber gente que todo el tiempo subirá pancartas, que descalificará, pero no está sola presidenta, porque el pueblo de México está contigo, es cuanto. Toc, toc, toc, cinco minutos.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Diputado Porfirio Muñoz Ledo, como usted sabe, en la sesión anterior se aprobó un acuerdo por el que se establece el formato para recibir el Informe de la Presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

En su resolutivo tercero se establece que no habrá intervenciones distintas a las acordadas. Tampoco se establecen intervenciones para rectificación de hechos. Por lo que su solicitud, en opinión de esta Presidencia no es procedente.

Sin embargo, sin embargo, tal y como lo establecen los artículos 18 y 19 del Reglamento del Gobierno Interior del Congreso, se consultará a la asamblea si autoriza que se le otorgue el uso de la palabra.

En consecuencia, consulte la Secretaría a la asamblea, en votación económica, si autoriza que se le dé el uso de la palabra al diputado Porfirio Muñoz Ledo, para rectificación de hechos hasta por tres minutos.

La secretaria diputada Karla Yuritzi Almazán Burgos: Sí, señora presidenta. Se consulta a la asamblea, si es posible se le dé la palabra al diputado Porfirio Muñoz Ledo, por tres minutos, para rectificación de hechos. Las legisladoras y los legisladores que estén por la afirmativa sírvanse manifestarlo (votación). Las legisladoras y los legisladores que estén por la negativa sírvanse manifestarlo (votación). Mayoría por la negativa, presidenta.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Lo lamentamos. Señor diputado, le quiero pedir que nos permita continuar con el orden del día, porque ahora se le tiene que conceder la palabra a la ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra, hasta por diez minutos, en su segunda intervención.

El diputado Porfirio Muñoz Ledo: Perdón, hablé con la presidenta y está de acuerdo en que quiere conocer los hechos en esa pantalla... La verdad no es de un partido...

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: No, la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos no manda en esta Comisión Permanente, aquí se deciden las cosas por el pleno de la Comisión Permanente y han votado porque no se rompa el Reglamento que se aprobó.

El Reglamento es muy claro. No hay ninguna censura, ustedes acordaron un Reglamento, ustedes acordaron los tiempos, ustedes acordaron todas las participaciones por unanimidad. Es mi deber poner a consideración de este pleno si respetan el Reglamento o no. Ha votado la mayoría por respetar este Reglamento que fue aprobado, tenemos que continuar con la sesión.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Le pido a la ciudadana María del Rosario Piedra Ibarra, que tome la palabra, hasta por diez minutos, en su segunda participación.

La presidenta María del Rosario Piedra Ibarra: Buenas tardes nuevamente. Sí, respondiendo aquí algunas de los cuestionamientos que me han hecho algunos de los diputados y senadores. Bueno, quiero decirles que en ningún momento hemos dejado de atender ninguno de los casos de quejas de ciudadanos, de periodistas, de personas desaparecidas, de quejas contra ciudadanos que no han recibido los servicios de salud. En fin, en ningún momento lo hemos hecho.

En mi gestión se han emitido 12 medidas cautelares para salvar la vida y la integridad de periodistas.

También, durante mi gestión, tenemos registrado, o sea, tan solamente, mi gestión es de dos meses, se los recuerdo. Dos meses a partir del 15 de noviembre a la fecha. Y en mi gestión tenemos solamente registrado el caso de un periodista, y que perdió la vida. Y del 2000 al 2020, son 154 periodistas muertos, y de 2005 a la fecha, 21 desaparecidos. Estamos muy pendientes de que esto no siga sucediendo, pues esto no solo vulnera el derecho la vida, sino que también vulnera la libertad de expresión.

Traigo aquí todos las medidas cautelares que se han emitido a diferentes autoridades, nueve al Instituto Mexicano del Seguro Social; cuatro al Instituto de Seguridad de Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, el ISSSTE; cinco a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana; tres a la Secretaría de Salud; uno a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, a la Universidad Nacional Autónoma de México, a Petróleos Mexicanos, a la Fiscalía General del estado de Chihuahua, a la Fiscalía General del estado de Baja California; a la Fiscalía General del estado de Oaxaca; a la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México; a la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Jalisco; a la Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa; a la Secretaría General del gobierno de Chihuahua, a la Secretaría General del gobierno del estado de Guerrero; a la Secretaría de Educación del estado de Coahuila; a la Secretaría de Salud del estado de Chihuahua.

En fin, esto todo está en el informe que se les puede proporcionar por escrito de todo lo que se me ha cuestionado aquí.

También quiero decir que los hechos violatorios han sido muchos, ha sido el omitir suministrar medicamentos, que también aquí se me ha cuestionado. Ya lo hemos hecho. El faltar a la legalidad, honradez en el desempeño de funciones. El omitir proporcionar atención médica, ese sería uno de los hechos violatorios.

Otro sería el omitir, perdón, a faltar a la legalidad. Aquí vienen las cantidades en este informe de todas estas acciones que ha emitido la Comisión Nacional de Derechos Humanos durante mi gestión.

Yo no puedo hablar por la gestión anterior, aunque está ahí en el informe, yo no estoy defendiendo lo que se ha hecho durante mi gestión.

Y sería mucho, aquí lo tienen ustedes por escrito todo lo que se ha hecho. También decirles que desde el primer momento hemos estado acompañando las acciones de la Guardia Nacional y vamos a estar muy pendientes de la actuación de la Guardia Nacional.

En cuanto se me pregunta si no he defendido el derecho a la vida, que no se ha mencionado, creo que va implícito en todas las declaraciones que he dicho. El derecho a la vida se defiende no con declaraciones, se defiende en los hechos.

Creo que uno de los compromisos de mi persona y de esta Comisión es que durante más de 40 años el Comité, del que aún formo parte y del que voy a seguir formando parte, porque de ese no voy a ver esa desvinculación, porque es parte de la esencia de esta lucha, hemos defendido la vida. La vida no solo de nuestros familiares, sino de miles de ciudadanas y ciudadanos en este país.

Y yo preguntaría a quienes me han estado cuestionando, ¿qué hicieron cuando miles de ciudadanos de este país reclamábamos que se hiciera justicia en el caso de la desaparición forzada? Que lamentablemente hemos seguido padeciendo, pero que estamos luchando por erradicar y por mencionar, y hacer lo que sea necesario en emitir recomendaciones, exhortos, medidas cautelares, en fin, y en dotar de mejores herramientas jurídicas a esta Comisión para que no queden como en el pasado, en simples recomendaciones. Por abolir de esta situación, en esta nuestra querida patria, nuestro querido México, las violaciones a los derechos humanos.

Yo les digo que tengan confianza, yo cuando salgo a las calles de este país tan hermoso, me recuerdo de una frase que decía José Martí: “El sol alumbra con la misma intensidad que quema”. Y yo veo que este país está alumbrado por un nuevo aire de esperanza, de confianza. Que el miedo de los ciudadanos empieza a desaparecer, a pesar de la adversidad y de todas las lacras que hemos heredado.

Yo siento que el pueblo de México es el agradecido, que se queda con ese nuevo sol que hoy alumbra y del cual esta Comisión quiere seguir siendo parte para impulsar ese cambio en nuestro país. Y yo veo que son muchos los que se quedan con esas manchas que queman. Ojalá que cada vez vayan siendo menos, porque vamos a contribuir en eso.

Les pido esa confianza y que tengan la seguridad de que yo soy independiente de cualquier gobierno, pero sobre todo también de algo que se oculta aquí y que no se ha dicho mucho en esta patria: los poderes fácticos que quieren seguir ejerciendo el poder y propiciando que se sigan violentando los derechos humanos, que no exista la justicia y que este país no prospere.

Entonces, les pido estar vigilantes. Sí, de mi comportamiento, pero estar vigilantes como sociedad de que los mecanismos que se propongan, de que los exhortos que se lleven a cabo por esta Comisión se cumplan y que no tengamos obstáculos.

Los invito a trabajar conmigo a todos ustedes y que este México sea un México plural donde las decisiones se tomen democráticamente y donde nosotros con los únicos que vamos a tener siempre partido y con los que no vamos a renunciar es son los humillados y ofendidos de siempre, con las víctimas de este país, con las víctimas de cualquier autoritarismo que pueda seguir prevaleciendo. Muchas gracias.

La presidenta senadora Mónica Fernández Balboa: Honorable asamblea, maestra Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, queremos agradecer tu presencia ante esta Comisión Permanente con motivo de la presentación ante el Poder Legislativo federal del Informe Anual de Actividades.

Asimismo, damos una cordial bienvenida a todos los que son o han sido parte del Consejo Ciudadano de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en el periodo que se informa. De igual manera hacemos un reconocimiento a todo el personal que labora en este órgano autónomo por la entrega y resultados en el desempeño de su trabajo.

Con el presente ejercicio usted ha dado cumplimiento a los artículos 102, apartado B, noveno párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y a los artículos 15 y 52 de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

El informe del que usted ha dado cuenta nos muestra las principales acciones realizadas por este órgano autónomo para la protección y defensa de los derechos humanos en nuestro país y las que deben hacerse en el futuro inmediato.

Este informe que usted nos ha entregado se turna a las Comisiones de Derechos Humanos de la Cámara de Senadores y de la Cámara de Diputados.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos es una institución noble del Estado mexicano, cuya función primordial es la defesa de los derechos humanos y procurar que no se vulneren las garantías individuales y sociales de colectivos o personas.

La CNDH se ha consolidado como una de las instituciones fundamentales de nuestro régimen democrático como órgano constitucional autónomo, y a partir de septiembre de 1999, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha evolucionado hasta convertirse en un organismo insustituible para proteger, observar, promover, estudiar y divulgar los derechos humanos en nuestro país.

El informe que se presenta ante esta Comisión Permanente registra la actividad de una institución que durante los primeros 10 meses del año del 2019 estuvo a cargo del maestro Luis Raúl González Pérez, a quien le expresamos reconocimiento por su labor durante el lapso 2014-2019.

Su actual titular fue electa por el Senado de la República a finales de octubre del 2019. Sabemos que es responsable de una gran encomienda y tiene la obligación resguardar, de proteger y de defender los derechos humanos de las mexicanas y de los mexicanos. Esa es una gran responsabilidad.

Los grupos parlamentarios, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, analizaremos con detenimiento el contenido del informe y valoraremos con toda objetividad cada una de las observaciones y los señalamientos que en él se hace.

A la Presidencia del Senado de la República le fue comunicada por escrito la renuncia de cinco consejeros integrantes del Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Al respecto deseo informar que, una vez iniciado el segundo periodo ordinario de sesiones, esa soberanía atenderá lo dispuesto en el párrafo sexto del apartado B del artículo 102 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Y, de conformidad con lo estipulado en los artículos 17 y 18 de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, procederá a implementar la auscultación a los sectores sociales, a fin de completar la integración del consejo consultivo.

Maestra María del Rosario Piedra Ibarra, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, como una institución del Estado, independiente de gobiernos, partidos, intereses políticos o de cualquier otra índole, tendrá en los integrantes del Congreso de la Unión un firme aliado para que México vuelva a ser un país donde la vigencia del orden jurídico tenga plena aplicación. Muchas gracias por su presentación. Buenos días.

Pido a la comisión de cortesía que acompañe a la maestra Piedra Ibarra en el momento que desee abandonar este salón.

(La comisión cumple su cometido)