Los sicarios de Morelia ¿y los jefes?

Los presuntos autores del atentado en la Plaza Melcho Ocampo de Morelia, que costó la vida de ocho personas, dijeron ser “sólo tropa” y que actuaron por órdenes de un patrón de una organización criminal que les pagó por realizar el ataque

Confesaron que fueron a una casa donde les entregaron las granadas y acordaron el pago.

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Yo aventé la granada”
Redacción El Universal (www.eluniversal.com.mx)27 de septiembre de 2008;

Ve directamente a su interlocutor. No tartamudea. No duda al detallar la forma en que lanzó la granada contra los asistentes a la celebración del Grito en Morelia.
En su testimonio ante el fiscal, Juan Carlos Castro Galeana relata: “(la granada) la apreté y la oculté con mis manos y me dio escalofrío. Saqué el seguro, botó el candado y la aventé”. Acepta que causó “muchas muertes y una tragedia de magnitud irreparable”.
Se le pregunta si vio los daños causados por la explosión, a lo que respondió que no se acercó porque estaba hecho “una bola de nervios”.
Otro de los detenidos el jueves en Apatzingán, Julio César Mondragón, cuenta que llegó al zócalo de Morelia a las 10:00 de la noche y lanzó la granada aproximadamente una hora más tarde. Mientras, se comió “un totopo y una hamburguesa”.
Dijo también que recibió instrucciones de tirar la granada en donde no hubiera gente, pero que el sitio estaba lleno. Luego se dirigió a las cercanías de la Catedral y le lanzó el proyectil a una camioneta que, creyó, era una patrulla.
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Godoy: error del subprocurador
Azucena Silva Corresponsal, El Universal Sábado 27 de septiembre de 2008;

Gobernador afirma que versión de amenaza busca politizar caso
MORELIA, Mich.— Leonel Godoy, gobernador de Michoacán, culpó al secretario particular del Procurador de Justicia por confundir la fecha y lugares de la advertencia del atentado que realizaron sicarios del crimen organizado en la ceremonia del Grito de Independencia en Morelia que costó la vida de ocho personas.
Ayer, EL UNIVERSAL informó que Froylán León, secretario particular del procurador, Miguel García Hurtado, advirtió a los subprocuradores de Lázaro Cárdenas, Zitácuaro, Apatzingán, Uruapan, Zamora y Morelia, a través del oficio SPM2572008, que el grupo delictivo denominado La Familia lanzaría granadas durante la fiesta, y les instruía a proteger a su personal y oficinas del gobierno.
Godoy dijo que el documento dado a conocer por EL UNIVERSAL era de carácter interno y en él hubo una confusión porque la amenaza era para el desfile del 16 de septiembre, y la del 15 en Lázaro Cárdenas.
“El documento se puede interpretar de varias formas. Pero en el C4 todos los días se reciben amenazas, algunas de bromistas macabros que siempre distraen a la fuerza pública”.
Sin embargo, entrevistado por la periodista Adela Micha el 18 de septiembre, el gobernador declaró que estaba enterado de amenazas contra el desfile militar del 16, y después de los atentados se le informó que se recibieron advertencias sobre un posible atentado en el Grito en Morelia, Huetamo y Lázaro Cárdenas.
Para Leonel Godoy, la versión de que se recibieron advertencias es una estrategia de quienes pretenden politizar el caso. “No es sano para el país querer politizar un evento tan condenable y lamentable y querer enfrentar a instituciones de cosas que no son así, donde hay coordinación absoluta entre gobierno federal y estado”, señaló.
En el transcurso del día, los secretarios de Gobierno, Fidel Calderón Torreblanca; la de Seguridad Pública, Citlalli Fernández, negaron haber recibido amenazas para el 15 de septiembre, aunque sí para el desfile del 16.
El procurador García Hurtado fue el primero en achacar la confusión a su secretario particular, versión que más tarde fue repetida por el gobernador.
Los funcionarios michoacanos aseguraron que notificaron de las amenazas al desfile a la Procuraduría General de la República (PGR), sin embargo, el delegado de la dependencia en la entidad, Rolando López Villaseñor, negó tener entre el 1 y 15 de septiembre algún reporte oficial sobre amenazas.
López Villaseñor fue sustituido ayer por Álvaro de la Peña Angulo, quien ya fue delegado en Guerrero, Oaxaca y en 2007, en Querétaro.