Las FARC ¿un paciente terminal?

Investigación de El Tiempo (www.eltiempo.com)

¿Cuál es la nueva estrategia que están ejecutando las Farc de Alfonso Cano?
Publicado en El Tiempo (www.eltiempo.com), 15 de Febrero de 2009
La fusión de grupos y las acciones de impacto terrorista en ciudades como Bogotá y Cali, cobro de 'vacunas' a todo nivel y el 'marketing' en época preelectoral son sus tácticas para hacerse visibles.
La dosis de acciones terroristas que las Farc le vienen aplicando al país -incluida la denunciada masacre de indígenas awá, el asesinato de seis militares en Cauca y los bombazos en Bogotá, Cali y Neiva- pareciera ir aumento en lo corrido del 2009.
En este mes y medio también reactivaron el cobro de 'vacunas' hasta en el corazón de Bogotá, en donde la alerta fue dada por las autoridades a diez voceros del gran comercio durante una reunión en un local de la familia de un alto funcionario del Gobierno Uribe.
Luego vinieron las declaraciones de algunos de los políticos liberados en las que aseguran que las Farc no están derrotadas y que tienen 20 mil hombres, el doble de lo que calcula el Ejército tras haberles asestado en el 2008 los más duros golpes en su historia.
Y hace unos días, esa guerrilla demostró que pudo interceptar a uno de los aviones inteligentes del Ejército (ver: 'Chuzaron...').
¿Qué pasa? ¿Qué tan vivas siguen? ¿A qué le apuntan ahora? ¿Qué falta para doblegarlas?
Parte de la película de su nuevo juego está en un documento, del 16 de enero, en el que alias 'Julián', miembro de la llamada 'comisión de organización del Bloque Sur', habla de la estrategia de guerra de 'Alfonso Cano'.
Recomposición y 'marketing'
Que los bloques que aún están militar y económicamente fuertes entren a apoyar las estructuras 'heridas de muerte', como la Caribe y la Córdoba; y que las columnas golpeadas -como la 'Téofilo Forero'- vayan a 'hibernar' al Huila, Meta y Caquetá mientras retoman fuerzas (véase: 'Así están hoy, bloque por bloque').
La tercera estrategia es obvia: terrorismo urbano en plena época preelectoral (véase: 'El show de la guerrilla').
"Se vinieron a esconder al Huila, a sus madrigueras", dice Jorge Sánchez, gobernador de ese departamento. Y ganaderos del Caquetá agregan que hace 20 días empezaron otra vez a cobrar la 'vacuna' anual. La única novedad con lo que sucedía en el pasado -antes del Plan Patriota- es que les hicieron una rebajita, lo que confirma que siguen teniendo bloqueado el negocio del narcotráfico y que andan bajos de fondos.
"No están en su mejor momento, pero tampoco acorraladas. Están en las calles, de civil (...) Y un pequeño grupo, resistiendo en la selva, contra grandes y costosas ofensivas del Ejército", dice José Jairo González, experto en el tema (véase: 'Guerrilla de civil...').
Antonio Navarro, gobernador de Nariño, comparte el diagnóstico: "Aquí siguen activas, con 1.500 hombres, pero congelaron su expansión replegándose a la selva y al Pacífico, donde hay coca. Lo que aumentó fue el reclutamiento de afrodescendientes".
Plan 'Renacer'
Para el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, acciones como la masacre de awás en Nariño y la bomba en Cali, hacen parte del plan 'Renacer' con el que las Farc pretenden mostrar algún poderío tras los sucesivos golpes que han recibido.
"Quieren tratar de decirles a la comunidad nacional y a la internacional que están vivas (...) hacer terrorismo es fácil", dijo Santos este viernes.
Al respecto, el director de la Policía, general Óscar Naranjo, admite que aún tienen capacidad de daño, pero asegura que no es estructural ni de control territorial.
Golpe de gracia
¿Qué falta entonces?
El comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla, y el viceministro de Defensa, Sergio Jaramillo, creen que el tema no se resuelve con darles un golpe de gracia, como reclaman algunos.
"Claro que hay un plan para que lleguen a su fin. Pero esto se soluciona con una estrategia de muchas dimensiones. Y los golpes a los cabecillas son solo un aspecto", explica el viceministro.
Y ambos agregan que además de los planes militares al más alto nivel, hay que complementar la acción de la Fuerza Pública con programas de erradicación de coca y más presencia del Estado.
En todo caso, Padilla y Jaramillo insisten en que las Farc son un paciente terminal y que aunque el fin puede ser largo y doloroso, nada de lo que hagan -incluidos actos de de terrorismo- podrá ocultar su estado de descomposición.
Otra opción es que negocien pero las declaraciones de esta semana del presidente Uribe, en las que endurece su posición ante un eventual intercambio humanitario, parecen alejar, por ahora, esa vía.
'Chuzaron' al Ejército
"Al primer dígito le resta uno y al segundo, cuatro (...) Hay que mirar los puntos para que sean fotografiados".
La conversación, entre la base militar de Tres Esquinas y 'Júpiter', avión de inteligencia del Ejército, fue interceptada por las Farc, el primero de febrero, cuando la guerrilla alistaba la liberación de cuatro uniformados y el Ejército la rondaba desde el aire.
Pero más allá del contenido -que casi frustra la entrega- lo que queda en evidencia es que el arma que el Ejército ha usado para golpear a las Farc está en poder de su enemigo. Es más, el ministro Juan Manuel Santos ya ordenó nuevas medidas para blindar las comunicaciones
A finales del 2008, una agencia de inteligencia preveía que eso podía pasar. Es más, hizo un informe en el que dice que el robo de equipos de Compartel -telefonía regional por satélite- es uno de los métodos para adquirir esa tecnología.
Compartel cree que la única opción para usar sus equipos es tener plataformas y frecuencias específicas. Pero un analista oficial dice que basta con colgarse al satélite de un país vecino.
Las Farc tampoco se han quedado quietas en el tema de la adquisición de armas.En una carta de 'Tirofijo', de marzo del 2008, se habla de la compra vía Panamá y de "ofrecimientos de materiales del amigo Ortega".
Si se trata de Nicaragua, el mito de que ese país sigue vendiendo lo que le sobró de la revolución, es falso. Datos divulgados esta semana desde Managua, indican que la importación de armamento se disparó a la par con la venta a ilegales.
No en vano hace tres semanas la CIA interrogó al paramilitar 'El Alemán', para que contara cómo introdujo a Colombia fusiles AK-47 del Ejército nica. Y no en vano 'Cano', dijo en agosto disponer de 6 millones de dólares para material de guerra y comunicaciones. Aunque no se sabe si era parte del 'marketing' para hacerse más visibles.
La opinión de las autoridades
General Freddy Padilla, comandante de las FF.MM.: "Insisto en que estamos en el fin del fin de las Farc; en el peor momento de su historia, debilidatas en su estructura de comando y control. Han tenido que volver a la guerra de guerrillas, sin enfrentar a la Fuerza Pública y sembrando minas como único medio para impedir el progreso de las tropas".
General Óscar Naranjo, director de la Policía: "Lo que vemos es que las Farc aún tienen capacidad de daño, pero no una capacidad estructural ni de control territorial. Cada vez son más débiles en sus fuentes de financiación y en su capacidad de combate. Recurren al terrorismo pero es una expresión de irracionalidad y al mismo tiempo de desespero".
Antonio Navarro, gobernador de Nariño: "Aquí, el frente 29, y las columnas Mariscal Sucre y Daniel Aldana siguen activas, con 1.500 combatientes, pero congelaron su expansión. Se replegaron a la selva y a la Costa Pacífica, donde tienen cultivos de coca, negocio con el que se financian. Lo que sí ha aumentado es el reclutamiento entre afrodescendientes".
Luis Jorge Sánchez, gobernador del Huila: "La guerrilla volvió acá, a sus madrigueras históricas. El departamento tiene una ubicación estratégica, por ello cada vez que hay presión en otras zonas del país, las Farc terminan en Huila. No olviden que Marquetalia, donde nacieron, limita con diez de nuestros municipios, incluida la capital del departamento".
Edilberto Endo, secretario de Gobierno del Caquetá: "Las Farc se replegaron hacia San Vicente y Cartagena del Chairá, y cambiaron su accionar. Operan en grupos pequeños, de civil. Siembran minas y queman carros. Dependiendo del número de reses o del tamaño del negocio cobran 'vacunas', entre 10 y 50 millones por año; antes pedían hasta 100 millones".
UNIDAD INVESTIGATIVA
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Así está hoy la guerrilla de las Farc, bloque por bloque
Desde agosto, 'Alfonso Cano' ordenó reacomodar la estructura de las Farc -en términos de ubicación, mando y hombres- para nivelar fuerzas e ingresos entre los bloques menos golpeados, como el Sur, y los casi liquidados, como el Caribe y del asesinado 'Iván Ríos'.
"Llegaron los reemplazos para la dirección de las columnas y los francotiradores", notificó hace menos de un mes alias 'Julián', miembro del Bloque Sur.
Reporte y testigos señalan que la columna Téofilo Forero -grupo élite que operaba en el centro del país- está replegada en Huila y Caquetá. En este último departamento y (aprovechando el respaldo del Bloque Sur) se está fortaleciendo a punta de cobro de vacunas a comerciantes de Puerto Rico y San Vicente del Caguán.
Y aunque ha sido golpeada por Policía y Ejército, su cabeza, Hernán Velásquez, 'Óscar Montero', artífice de golpes como el secuestro múltiple en el Edificio 'Miraflores' de Neiva, sigue viva.
A 'Fabián Ramírez', jefe del Bloque Sur, le ordenaron reestructurar el golpeado frente 16 y fusionar el 1 con los 37 y 9 para recomponer al José María Córdoba, el bloque de 'Ríos', 'Rojas' y 'Karina'. La situación actual de esa facción se refleja en el frente Aurelio Rodríguez que pasó, en seis años, de 400 a 60 hombres.
Otro movimiento importante es el de 'Iván Márquez' que saltó del Caribe a la Comisión Internacional y que tiene como misión reimpulsar el apoyo exterior que quedó debilitado y expuesto tras las revelación de los correos de 'Reyes'.
Y a 'el Médico', ahora al mando del Caribe, le asignaron la retoma de Urabá.
Aunque reportes oficiales han dado casi por aniquilada a esa facción -luego de golpes de gracia, como el bombardeo en el que murió 'Martín Caballero'- desmovilizados dicen que sigue teniendo nueve frentes y un total de 600 hombres: "El Ejército les ha dado, pero no les han tocado a las milicias de Barranquilla y Cartagena".
Un fenómeno similar se registra en los municipios de Colombia y Baraya (Huila), en San Vicente y en la zona del río Güejar, en Caquetá.
El Bloque Occidental, el de 'Cano', ahora es manejado por 'Catatumbo', nuevo miembro del secretariado y del Movimiento Bolivariano. Y el Oriental, sigue al mando del 'Mono Jojoy', a pesar de que tiene cáncer de estómago.
Su objetivo: la retoma del Sumapaz, recuperado por el Ejército entre el 2002 y el 2004. En la Personería de Viotá ya hay denuncias sobre su regreso, con amenazas y extorsiones, aunque el general Padilla dice que está controlado.
Finalmente, en el Comando Conjunto Central (CCC) -'intervenido' por el secretariado debido a irregularidades en su manejo- siguen operando las columnas Jacobo Prías Alape, con 250 hombres; el frente 25, con 400 hombres; y el frente Tulio Varón que quedó con solo 30. Y aunque diezmados, continúan activos el frente 21, con 1.500 hombres; el 29 y 7 y la columna Jacobo Arenas.
Del bloque intelectual de las Farc, del que habla el Gobierno, nadie da razón.
En cualquier caso, en las propias entrañas de las Farc hay escepticismo en torno a la estrategia de 'Cano'.
"Si los que llegan son nuevos, no conocen el área y no tiene experiencia y mando, va a ser difícil cumplir los planes", dice 'Julián'. Y otros ya hablan de los roces entre 'Cano' y 'Jojoy'. Este último, dicen, ha tomado decisiones sin la bendición de su nuevo jefe.
u.investigativa@eltiempo.com
Con reportería de Jorge Quintero, corresponsal de EL TIEMPO en el Huila
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"La guerrilla no ha desaparecido, tan solo está actuando de forma distinta", dicen funcionarios
En los últimos seis años, desde que se gestó el Plan Patriota -ahora Consolidación-, las Fuerzas Militares lanzaron una ofensiva sin precedentes contra las Farc.
La única zona donde se obtuvieron resultados tangibles fue Cundinamarca, donde la operación 'Libertad Uno' (2003) desterró a 13 frentes.
Bogotá y municipios cercanos eran la despensa del secuestro, mientras la guerrilla se fortalecía económicamente con la droga del Guaviare, el Meta y el Caquetá.
Fue en estos departamentos donde se sintió la mayor presión, pues allí, según inteligencia militar, estaban cinco de siete miembros del secretariado. Y aunque ninguno cayó, la guerrilla se replegó.
Los guerrilleros se concentraron en lo profundo de la selva, donde están aguantando el embate militar, según testimonio de desmovilizados.
Sin embargo, el repliegue y debilitamiento del que habla el Gobierno, parecen estar llegando a un punto muerto.
Las Farc reactivaron su presencia en corredores estratégicos de tráfico de armas y coca.
EL TIEMPO habló con funcionarios de municipios en los que tuvieron el control en los últimos 40 años.
En Calamar (Guaviare), su alcalde, el padre Henry Cárdenas, dice que los guerrilleros se han mezclado con la población. Añade que muchos se han replegado a la zona rural, donde aún controlan el narcotráfico.
El personero, Edwin Monrroy, corrobora lo que dice el alcalde: "Ahora hay milicianos de civil entre la población". También señala que la extorsión, el secuestro y los asesinatos no han parado.
En Mapiripán, la alcaldesa Maribel Mahecha señala que aunque ahora se respira un clima de tranquilidad, en el área rural aún se sienten hostigamientos del frente 44.
Por el contrario, en Cartagena del Chairá (Caquetá), el alcalde Orlando Arteaga dice que allí el ambiente de tranquilidad y mejoramiento del orden público es evidente.
"El negocio de la coca esta casi exterminado", sostiene.
Entre tanto, el secretario de Gobierno de Paujil, afirma que la presencia de las Farc ha disminuido, pero ahora están aplicando el plan pistola.
Sin excepción, los funcionarios consultados concuerdan en que a la política de Consolidación le hace falta más impulso en las áreas rurales y en las zonas más apartadas.
Ahora, dicen, unos pocos guerrilleros hostigan y amenazan. Están en las zonas rurales y han obligado a campesinos a renunciar a programas oficiales, como familias en acción y guardabosques.
Sólo en este año en Paujil se han recibido más de 60 declaraciones de desplazados de las veredas, cuando el año pasado no pasaron de 30.
"A pesar de la mejoría en algunos cascos urbanos, el Gobierno no se puede quedar tranquilo", dice un funcionario.
REDACCIÓN JUSTICA

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El 'show' de la guerrilla/ RODRIGO PARDO Director de CAMBIO
El convencimiento general, a finales de 2008, era que las Farc estaban acorraladas. Que habían perdido capacidad de acción militar y habían caído en un profundo desprestigio: incluso en la comunidad internacional, aunque con un rezago frente a una opinión pública interna que mucho antes las catapultó como el peor de los males. Las Farc se estaban volviendo invisibles. Pero en las primeras semanas de 2009, se volvieron noticia y el escenario cambió. Con un mensaje positivo se tomaron los medios durante el proceso de liberación de secuestrados. Filtraron un video con un ladrillado mensaje de 'Cano' a las bases, publicado en Semana.com. y el jefe máximo le concedió una entrevista a la revista Cambio 16.
Como resultado de las liberaciones se inició una controversia sobre la eventual conveniencia de un acuerdo humanitario, o incluso de abrir un proceso de paz. Y hubo reseñas también de acciones criminales, sobre todo en el sur del país. Las Farc volvieron a aparecer.
Hay dos razones que explican el cambio. La primera es que ha pasado un tiempo, después de las muertes de 'Marulanda' y de 'Reyes', y 'Cano' ya está sentado en la silla y busca una línea de acción política que reemplace la nefasta etapa del secuestro. Con tacto, para no quedar frente a las bases como un blando que traiciona el legado de 'Tirofijo', irá buscando espacios más políticos. La segunda es la pre campaña electoral: un momento adecuado para sacar la cabeza, porque los candidatos hablarán de ellas. Las harán visibles los aspirantes del uribismo, que echarán mano del argumento de que "la culebra está viva" para argumentar que se necesita la continuidad de la seguridad democrática. Y también les darán pantalla los pocos aspirantes que defenderán el acuerdo humanitario o una negociación política. Aún si el debate se concentra en asuntos como el desempleo y las recetas contra la crisis económica, las Farc van a ser noticia en los próximos meses. Al grupo guerrillero le gusta la visibilidad y por eso la están buscando. Le dan oxígeno a quienes tienen puntos de vista diferentes a los de Gobierno, le dan motivos al uribismo para hablar de ellas -aunque sea en contra-, y acuden a la violencia para enviar el mensaje de que no están acabadas. Eso explica su aparente contradicción: hablan de intercambio humanitario y sueltan secuestrados a la vez que asesinan indígenas.
El protagonismo público de la guerrilla se considera, con frecuencia, sinónimo de oxígeno político. Lo cual es una equivocación: los meses del Caguán, en la historia de las Farc, fueron a la vez su momento de mayor visibilidad y de peor desgaste: la guerrilla se devalúa en la medida en que se conoce más. El mito de un poder y un misticismo que no tiene, siempre será más rentable que la realidad de la naturaleza delincuencial y de sus nexos con el narcotráfico.
Pero en ese error caen todos: el Gobierno, con sus sobrevuelos y sobrerreacciones, prefiere quedar como enemigo de las liberaciones para controlar el 'show mediático' de la guerrilla. Y las Farc, que hacen cualquier cosa por una visibilidad que las desnuda y que se convierte en cuchillo para su propio pescuezo. Lo cierto es que las Farc serán mucho más protagonistas en 2009 que lo que fueron en 2008.