La Reina Silvia y el papa Francisco

 La Reina Silvia de Suecia, acompañada por algunos familiares, fue recibida la mañana de este lunes 27 de abril por el papa Francisco en la biblioteca privada del Palacio Apostólico.

 También estaban presentes la princesa Magdalena, con su marido y su hija de un año, Leonor, con los que el Santo Padre ha departido con gran afecto.

 La conversación se desarrolló en español, idioma que la reina domina muy bien. Su Majestad ha informado al Pontífice de las actividades que promueve en Suecia, en particular en favor de los niños. El papa aprovechó para expresar su gratitud por la acogida que brinda Suecia a los refugiados y prófugos.
 El país nórdico tiene 9 millones y medio de habitantes y ha acogido este año a 80 mil refugiados. 
Ninguna de las naciones de la Unión Europea acoge a tantos refugiados. “Creo –dijo la reina Silvia a la sección alemana de la Radio Vaticana– que es algo que Suecia tiene en el corazón. Se trata de recibirlos humanamente y de darles una nueva casa. Se trata de enseñar a los niños en sus lenguas, para facilitar la reinserción en la escuela en caso de que vuelvan (al país de origen, ndr.). Se trata de ser generosos y se trata de ayudar. Pero el número aumenta demasiado!.
 Entre los regalos que la reina llevo al papa se encuentran tres pequeños devocionarios suecos, adaptados también para los niños, porque la soberana se ha preocupado siempre de la educación religiosa de sus hijos; un hecho por el que el Papa ha manifestado su vivo aprecio.

 La reina Silvia participó enla tarde en la sede de la Academia Pontificia de las Ciencias en un seminario sobre la lucha contra el tráfico de seres humanos, en especial de los niños, organizado por ese organismo junto con la embajada de Suecia ante la Santa Sede.
En la delegación sueca también estaba la ministra Asa Reger, responsable de los Niños, Ancianos y la Igualdad de género.
 La presidenta de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales, la británica Margaret Archer, agradeció a la reina Silvia por haber ilustrado problemas mentales y físicos que marcan a los niños que fueron víticmas de tráfico humano, y subrayó que el modelo escandinavo es extremadamente eficaz en la disminución de mujeres obligadas a prostituirse. 
En la mesa redonda moderada por el embajador sueco Lars-Hjalmar Wide, participaron Margaret Archer, Asa Regner, Anna Skarhed, Martin Ingvar y sor Eugenia Bonetti.
  La reina Silvia fundó en 1999 una organización caritativa, la World Childhood Foundation, que promueve iniciativas a favor de los menores, con más de 100 proyectos en 16 diferentes países del mundo,.