3 nov 2013

México-Venezula, buenas relaciones con EPN


Descongela Peña relación'
Para el Embajador Hugo José García Hernández, México y Venezuela deben redefinir cómo van a conducir sus relaciones económicas y comerciales.
Entrevista de Silvia Garduño

Reforma, Ciudad de México  (3 noviembre 2013).- 
Entrevistado tres meses después de haber presentado sus cartas credenciales, el diplomático venezolano, con trayectoria militar, reconoce que las relaciones estuvieron congeladas 12 años.
Ahora, dice, hay un vínculo renovado que presenta avances, como la visita del Canciller venezolano a México, Elías Jaua, este lunes.


Según Hernández, Peña ha dado buenas señales de su interés por Venezuela, como su presencia en los funerales de Hugo Chávez, en Caracas; el reconocimiento de la elección en la que salió triunfador Nicolás Maduro, y su negativa a reunirse con el candidato de la oposición, Henrique Capriles.
A pesar de pronunciamientos contra la Alianza del Pacífico, por parte de países de la Alianza Bolivariana (ALBA), afirma que no hay ningún enfrentamiento y que, los bloques más que antagónicos, son complementarios.
-Usted ha dicho que la relación ha mejorado...
Vamos por buen camino. La Subsecretaria Vanessa Rubio visitó Venezuela. Yo coincidí, tuvimos una reunión muy productiva, establecimos una pre-agenda de trabajo, ahora tenemos la visita de nuestro Canciller.
Los dos sexenios anteriores habían estado medio congeladas las relaciones, producto de aquello de Mar de Plata, en 2005, cuando pretendía imponer el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas) a todos los países latinoamericanos, y hubo líderes que se opusieron (Chávez).
Se llegó a manifestar que el ALCA era un instrumento más de dominación de Estados Unidos en América Latina, y hubo un pequeño enfrentamiento entre el Presidente Chávez y el Presidente (Vicente) Fox, y entre el Presidente Bush y el Presidente Kirchner. En el segundo sexenio nuestras relaciones tampoco fueron de lo mejor.
-Pero se restablecieron...
-Se restableció, pero no hubo nunca nada activo y hubo cierta separación. El Presidente Peña Nieto abrió las puertas, visitó nuestro país en aquellas horas tristes de la desaparición física del Presidente Hugo Chávez, hizo la guardia de honor respectiva ante el féretro de nuestro Primer Mandatario, y posteriormente fue uno de los primeros que reconoció la legalidad de las elecciones.
 -Aún no se designa Embajador de México en Venezuela...
 -Está designado un Embajador, ya recibió el beneplácito de nuestro país, va a estar presente en esta reunión de trabajo que tenemos prevista para el 4 de noviembre. Preferiría guardar la reserva de su nombre. Es una persona conservadora, un hombre de nivel, estamos muy complacidos.
 -¿Cuáles son los temas más importantes de la pre-agenda?
 Se necesita un marco jurídico para darle legalidad a cómo se van a conducir las actividades económicas y comerciales. Se hablará de algún problemita de algunas empresas mexicanas en Venezuela que quieren regresar al país a través de formas, como lo establece el Gobierno, a través de empresas mixtas, o privadas, pero ajustadas a una legislación propia, soberana de Venezuela.
 Está el área política, es importante estudiar la posibilidad de una visita del Presidente Peña Nieto a Venezuela, y viceversa.
Desde la parte jurídica habría que hacer arreglos en el área de inmigración, la situación de los privados de libertad.
En el área social, y de solidaridad, porque nuestro proceso político es en esencia solidario, queremos traer a la Misión Milagro, que hace operaciones de cataratas, de glaucoma, a personas con escasos recursos; tenemos el Hospital Cardiológico Infantil Latinoamericano, donde pueden ir niños con problemas congénitos del corazón, de la parte cardiovascular.
 En el área cultural, se va a discutir si es posible que pueda venir la Orquesta Sinfónica Juvenil Simón Bolívar, que ha dado extraordinarios resultados al sustraer niños de escasos recursos de la criminalidad y las drogas.
 Han habido pronunciamientos del ALBA contra la Alianza del Pacífico, en la que está México...
 Los miembros de la Alianza del Pacífico son tan interesantes para nosotros como cualquier otro. Están en su derecho de buscar una alianza u orientaciones económicas hacia otros países. Venezuela mantiene y mantendrá relaciones armoniosas con todos los países del mundo, siempre y cuando se respete la soberanía y la autodeterminación de los pueblos.
 No nos vamos a alejar de Colombia, de Perú, de Chile o de México, por el hecho de que ellos estén en la Alianza del Pacífico, al contrario, vamos a seguir manteniendo las relaciones y, a lo mejor, conseguimos beneficios.
 No se debe considerar en la Alianza del Pacífico, como enemigos del ALBA, de UNASUR o de la CELAC, no son antagónicos, pueden ser complementarios.
 -¿Cuál es el futuro del ALBA tras la muerte de Chávez?
 -El ALBA va más allá de lo económico, que es la solidaridad y la complementariedad entre los países. Por ejemplo, nosotros tenemos algunos problemas de abastecimiento, Nicaragua tiene una buena producción de ganado, nosotros les proporcionamos unas cosas, Nicaragua nos proporciona otras a precios solidarios, tratando de que haya no aquella ambición de ganar y obtener ventajas sobre la otra parte, sino complementarse.
¿Qué decir de la situación económica por la que atraviesa Venezuela?
En Venezuela se han venido ejecutando dos guerras nefastas: la económica y la mediática. En 2002 pararon la industria petrolera y dijeron "el gobierno se cae", y no se cayó. Ahora están haciendo lo posible por afectar a las personas que verdaderamente son el apoyo del proceso revolucionario. Los mismos que dieron el paro petrolero, son los que están en la guerra económica, y más cuando vamos a elecciones de alcaldías. Es una guerra económica con intenciones políticas.

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