Le quiero preguntar sobre este tema del presupuesto, porque ya hay una oposición que se ha conjuntado para no aprobar esta propuesta.
¿Ustedes han valorado, más allá de esta postura de los partidos sin que haya una modificación a la ley, que ustedes puedan modificar la aplicación del presupuesto una vía jurídica alterna a esta?
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Sí, pero lo que queremos es hacerlo como nunca se ha hecho: con apego a la legalidad y con transparencia.
¿Qué es lo que pasaba antes?
Que se aprobaba un presupuesto y el Ejecutivo hacía lo que le daba la gana, así. Les he puesto ejemplos de cómo autorizaban una partida de tres mil millones para publicidad y ejercían 15 mil, como que se iban un poco para arriba, o sea, aumentaba, como que no hacían buenas proyecciones. Y eso que estamos hablando de los tecnócratas, hasta formados, universidades también de mucho prestigio.
En Gobernación lo mismo, hay una partida, Seguridad Pública salía aprobada 500 millones y se gastaban 15 mil y así.
Entonces, ¿qué estamos nosotros planteando?
Hay una circunstancia especial, tenemos que hacer una adecuación al presupuesto original, por ejemplo, tenemos que reducir aún más el gasto corriente sin afectar a los trabajadores, eso significa que si en gastos de operación íbamos a ejercer 50 mil millones, ahora vamos a ejercer 20 mil porque necesitamos ahorrar 30, por poner un ejemplo.
Y eso es lo que les estamos pidiendo, autorización, no les estamos pidiendo autorización para endeudarnos.
¿Cómo le hacían antes?
Con todo respeto, ni leían lo que les enviaban ni debatían, lo que pasa es que son cuestiones, vamos a decir, en el mejor de los casos, políticas.
INTERLOCUTORA: Pero, y si no se lo aprueban, ¿qué va a hacer?
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: No hay problema, tenemos nosotros márgenes para poder, dentro de la ley, hacer los ajustes, pero lo que queremos hacer es mandarles el nuevo presupuesto que ellos conozcan cómo estamos pensando enfrentar la crisis sanitaria, la crisis económica, dándole atención prioritaria a los más necesitados, a los pobres.
¿Cómo vamos a cumplir lo que ya está en la Constitución, también en el artículo 4º, que se tiene que entregar apoyos, pensiones a adultos mayores, a niñas, niños con discapacidad, que se tienen que entregar 11 millones de becas a estudiantes de familias humildes, pobres, que se tiene que garantizar el derecho a la salud?
¿Saben que han padecido en algunos países porque no sonó la alarma a tiempo, como sucedió aquí afortunadamente, que triunfo el movimiento democrático y paramos las privatizaciones? En otros lugares se fueron de largo, privatizaron todo el sistema de salud o los sistemas de salud en algunos países y ahora, ante la epidemia o pandemia, tienen problemas. Aquí nosotros podemos garantizar a todos, porque el sistema de salud es público.
Entonces, queremos que se apruebe nuestra iniciativa. Y otra cosa que también queremos que se apruebe es la extinción de los fideicomisos y los fondos que había al por mayor, porque todos esos fideicomisos y esos fondos se fueron creando para manejar el presupuesto de manera discrecional sin ningún control.
Entonces, queremos que Hacienda recoja todo ese dinero que es del pueblo y que se utilice para reactivar la economía, para el bienestar de la gente. Eso es lo que estamos pidiendo, eso es lo que les estamos planteando.
Hay una situación también que se tiene que tomar en cuenta. Ya va a ser muy difícil que voten una propuesta nuestra los opositores porque ya vienen las elecciones, entonces ya todo se politiza, aún estamos viendo que en la emergencia sanitaria ahí andan deseándole mal al gobierno, quieren que nos vaya mal.
Eso sí, en su discurso demagógico vienen a decirme -o antes, porque ahora por la sana distancia ya no me puedo acercar mucho- venían a decirme: ‘Estamos con el presidente, porque si le va bien al presidente nos va bien a todos’. Pura demagogia.
Muchos, no muchos, pocos, deseando que nos vaya mal. Ya no quiero repetir, pero andaban buscando que se murieran las primeras personas cuando empezó lo de la pandemia. Pero me acuerdo, no se me va a olvidar, una noche, yo creo que venías tú en el avión, que fuimos a la Costa Chica, que llegamos, yo creo hasta sabían que venía yo en el vuelo porque llegando, como nunca, en el aeropuerto así de periodistas y con las cámaras lampareándome: ‘¿Qué nos dice?, ya hubo el primer muerto del coronavirus’. Yo apenas estaba viendo la información que habían difundido, me quedé callado. ‘Pero ¿qué opina?, ¿no le importa?, ¿no le va a enviar un pésame a los familiares?’
Decía: Mañana hablamos, mañana hablamos. Y me acosaron hasta el carro. Hay veces que meten la cámara, el micrófono y ya con paciencia, cabeza fría, corazón caliente, vámonos. Llego aquí, ya tenía yo el informe de que no había fallecido el señor, qué bueno que no falleció.
Imagínense, ya primero el hecho del acoso, el querer que haya una desgracia, que nos vaya mal, primero eso.
Imagínense también el ridículo que iba yo a hacer nada más por la presión, por no resistir y les digo: Pues sí, envié un pésame por la presión y porque además a quién se le niega un pésame, pero al día siguiente no se murió y el presidente hasta les envió un pésame a los familiares, o sea, ¿la investidura presidencial cómo iba a quedar?, el descrédito.
Entonces, eso está sucediendo mucho...
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