25 may 2024

Las columnas políticas hoy, sábado 25 de mayo de 2024

Suman 17 mil 901 renuncias en la Guardia Nacional desde su creación

A partir de que entró en funciones la Guardia Nacional el 1 de julio de 2019, hasta abril de 2024, han renunciado 17 mil 901 agentes.

Actualmente, la GN, creada por el presidente López Obrador para responder a la criminalidad en el país, cuenta con 132 mil elementos, de acuerdo con el último reporte de la institución.

En respuesta a una solicitud de información de EL UNIVERSAL, la corporación refiere que el año con mayor número de efectivos que dejaron sus filas fue 2022, con 13 mil 432; 2021 con 2 mil 755; 2023, con mil 408; 2020, con 223; 2024, con 81, y 2019, con sólo dos.

#3#

Tenemos que hablar del Ejército/Salvador García Soto

El Universal, | 25/05/2024 |;

Uno de los temas que más ha evadido definir con claridad la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum, es cuál será su política con respecto al Ejército y la Secretaría de Marina y su desbordada presencia en las actividades del gobierno civil. Ante la insistencia del cuestionamiento, la abanderada de la 4T ha dicho solamente que mantendrá a los militares dentro de las labores de seguridad, pero que “otras tareas” asignadas al Ejército serían “analizadas”. Es claro que Sheinbaum no puede desmarcarse claramente de la militarización en el gobierno federal, por ser una de las prioridades del presidente López Obrador, pero también parece claro que habrá matices en la utilización de los militares dentro de la vida civil.

Para Xóchitl Gálvez, en contraste, la idea de “regresar al Ejército a sus cuarteles” ha estado clara desde que fue precandidata de la alianza opositora del PRI-PAN-PRD, y no sólo apareció en su plataforma de campaña, sino que la ratificó en varios discursos sobre el tema de seguridad y cuando presentó su estrategia para combatir la inseguridad y la violencia del narcotráfico también definió claramente que “las funciones del Ejército serán las constitucionales”. La abanderada de la oposición lo dice con todas sus letras y para que lo oigan los generales que hoy están tan alineados con la 4T: “Al Ejército le toca la seguridad nacional. Hoy, buena parte del territorio nacional está en manos de la delincuencia. Nosotros queremos que el Ejército deje de estar pavimentando carreteras, haciendo trenes, cuidando aduanas”.

Y es que ante el cada vez más cercano cambio de gobierno en México, hablar del actual papel del Ejército y de la Marina y de cómo, por órdenes del Presidente, han ido copando y ocupando tareas civiles en el gobierno, además de administrar recursos multimillonarios del presupuesto público y manejar a discreción las licitaciones de servicios y obras públicas, algo que indudablemente les ha dado a los militares un poder que hace casi 100 años que no tenían en este país: el de llevar a cabo labores de gobierno y sustituir a los civiles en campos que la ley y la Constitución establecen como de estricto carácter civil.

Muchos mexicanos se preguntan si los militares y marinos van a soltar tan fácilmente todo el poder administrativo y económico que les ha otorgado López Obrador como una forma de comprar no su lealtad, que ya tenía por tradición, sino el respaldo de la milicia a su movimiento político y a la obsesión de continuidad que tiene el líder de la 4T. Y la mayoría responden esa pregunta con un rotundo “No”.

Por eso es importante saber con claridad cómo actuarán las candidatas y el candidato presidencial ante el hecho de que las cúpulas militares de este país ya están metidas con medio cuerpo en la administración pública federal y que durante seis años el Presidente repitió como mantra que “tenía que recurrir a las Fuerzas Armadas por que ellos sí son honestos y eficientes para hacer casi de todo”, con lo que a muchos mexicanos y seguro también a los generales y almirantes que hoy dirigen la Defensa y la Armada de México, se les quedó la idea de que “los militares son mejores para realizar muchas tareas”, algo que parece darle supremacía a la capacidad militar sobre el gobierno civil.

Entre los miembros del gabinete de seguridad federal, ese que sesiona todos los días a las 6 de la mañana en Palacio Nacional, se escucha que el general secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval, le dice a quien lo quiera escuchar que “las fuerzas armadas, todas, deben quedar bajo un mismo mando”. Claro que el general se refiere al mando de la Defensa Nacional, a la que tendría que someterse también la Marina Armada de México, y esto lo dice en el contexto de la sucesión presidencial, como si se tratara de una propuesta o un objetivo que le planteará a quién llegue a la Presidencia.

Alguien tendría que recordarle al general la importancia que tiene mantener separadas las fuerzas armadas, como ocurre en todas las democracias del mundo. Porque si de por sí la Secretaría de la Defensa Nacional ha acumulado muchas funciones que no le corresponden constitucionalmente, entregarle el mando único de las Fuerzas Armadas nacionales sería acumular más poder para el Ejército. En una democracia nadie debe tener tanto poder.

Por eso decimos que en el próximo gobierno, gane quien gane las elecciones del 2 de junio, se tiene que hablar del Ejército y de cómo desmantelar todo el aparato militar y naval que se ha montado encima del gobierno civil y de sus funciones constitucionales.

NOTAS INDISCRETAS…

A ver quién le entiende a los morelenses. Porque con el pésimo gobierno de Cuauhtémoc Blanco, cualquiera esperaría que los electores estuvieran rechazando a los partidos que arroparon al gobernador saliente y que hubiera un voto de castigo fuerte contra el mal gobierno del exfutbolista. Y aunque lo del voto de castigo aún no puede descartarse porque sólo se verá el domingo 2 de junio, las encuestas en Morelos, en la recta final de las campañas, le dan a Margarita González Saravia, la candidata por Morena, PT y PVEM una ventaja que ronda entre los 18 y los 12 puntos, sobre su más cercana contrincante que es Lucía Meza, candidata de la alianza PRI-PAN-PRD. Los últimos sondeos de Consulta Mitofsky, de Roy Campos, le dan a González Sarabia una preferencia bruta de 44.8 por ciento, contra 32.2 de Meza; y el De las Heras Demotecnia, de Rodrigo Galván de las Heras, registra una preferencia de 55 por ciento contra 33 por ciento. En el papel y en el momento la derrota se ve irremontable para Lucy Meza, pero los números reales los tendremos en 2 de junio…Después de las primeras versiones que apuntaban a un nombre y una empresa de un tal Alexander Bremen, como encargada del montaje del escenario que se derrumbó en el cierre de campaña de Jorge Álvarez Máynez, y que provocó la muerte de 9 personas y más de 100 heridos, ayer se confirmó que el nombre real de la empresa contratada por MC para ese evento masivo es Proaudio, con sede en Tampico y en Monterrey, que es propiedad de Víctor Gutiérrez y que el enlace para la contratación fue la candidata emecista a alcalde de Monterrey, Lorenia Canavati. Lo que falta ahora es que la Fiscalía de Justicia de Nuevo León avance en sus investigaciones y deslinde las responsabilidades penales que conlleva la muerte de 9 personas en un evento público autorizado por las autoridades municipales y, por ley, supervisado y validado por las áreas de Protección Civil del estado y del municipio. Porque mientras 9 familias lloran su pérdida y el gobernador Samuel García se apresuró a sacar la chequera para intentar comprar el dolor de los deudos, el deslindadero y las autoexculpaciones están a la orden del día entre las autoridades neoleonesas y de San Pedro Garza. El primero en tratar de zafarse de cualquier sospecha fue el gobernador García que, apenas ocurrida la tragedia, negaba que hubiera habido una alerta del Servicio Meteorológico Nacional de la Comisión Nacional del Agua. La alerta de “tormenta, con ráfagas de viento de entre 50 y 70 kilómetros” fue emitida y publicada al menos en tres ocasiones en el sitio on linedel Meteorológico desde temprano la tarde del miércoles, desmintiendo claramente al gobernador que dijo que fue “inesperada” la fuerte lluvia y los vientos que derribaron el escenario y provocaron la tragedia. Luego salió el director de Protección Civil del Estado, Erick Cavazos, a decir también que no recibieron ninguna alerta de la tormenta con fuertes ráfagas de viento, y al unísono el alcalde independiente de San Pedro Garza, Miguel Treviño, se desmarcó de las posibles responsabilidades penales y dijo que “nunca recibimos las alertas de Protección Civil del Estado. Un empresario que tiene una empresa de organización y logística de eventos, cuya identidad se reserva, dice en un audio que nos envió que las alertas se activaron, que los reportes existieron pero que Protección Civil debió suspender el evento ante el pronóstico de lluvia fuerte, y se pregunta quién dio la orden de que, a pesar de las malas condiciones, el evento continuara. Aquí les transcribo textual la opinión de este empresario del ramo: “Yo tengo un escenario ‘gran support’ no se lo presumo, se lo cuento, yo organizo ferias y aparte mi escenario lo rento para eventos musicales y si me piden algún evento político, lo llevo. A nosotros, Protección Civil, a la sola presunción de llovizna, no de lluvia, de llovizna, no de tormenta eléctrica ni de vientos, Protección Civil me avisa horas antes de que no debo prender los juegos mecánicos y bajar la lona y quitar el gran soporte, el techo, para que me entienda, del escenario. ¿Quién no hizo caso? ¿Por qué se decidió seguir el evento? ¿Quién tomó la decisión de seguir el evento? Estoy seguro que Protección Civil les avisó, es más ni siquiera los de Protección Civil te dan el VoBo. de arrancar, en eventos privados de conciertos y expoferias, ni si quiera te deja arrancar ese día. Aquí había un aviso horas antes. Se lo repito con conocimiento de causa: ¿quién ordenó seguir el evento? ¿El coordinador de Lorenia (Canavati), el coordinador de la agenda del candidato Máynez?, ¿el timing político de ‘a huevo, cierre de campaña’? el no perder el dinero que se le dio al grupo musical, porque el grupo musical si suspendes, ellos como quiera cobran. ¿Quién ordenó que a pesar de que ya había empezado a llover siguiera el evento? No, señores, aquí la responsabilidad y esta tragedia tiene un color”, dice el empresario en su opinión compartida por audio. ¿Se referirá al color fosfo-fosfo?...Se cierra una semana difícil. Los dados nos regalan una Escalera Doble. Buen fin de semana para los amables lectores.

##

Xóchitl, o el estallido/Jorge Volpi 

REFORMA, 25 mayo 2024; 

Vibrante. Enjundiosa. Nerviosa. Desde que decidió buscar la candidatura de la alianza opositora -una senda cuesta arriba sembrada de obstáculos-, no parece haberse detenido a respirar. Nada la define como esa imagen en la que, enfundada en su casco, la vemos pedalear sin pena: pura energía, a veces desbocada, sin que ella misma sepa adónde habrá de conducirla. Si su rival es una corredora de fondo, disciplinada y obsesiva, incapaz de mirar hacia otro lado (la próxima semana intentaré dibujarla), Xóchitl prefiere los sprints, los atajos y la invención -no siempre afortunada- de rutas alternativas.

Su mayor baza es su talón de Aquiles: no es, y al mismo tiempo sí, parte de la clase política que, a regañadientes, no tuvo más remedio que apoyarla, como la luz que a veces es onda y a veces partícula. Hasta hace poco nadie habría pensado que una empresaria de origen indígena, que se define de centroizquierda -aunque su perfil muta día tras día-, habría podido encabezar la variopinta, por no decir anómala e incoherente, oposición a López Obrador. Su carrera es, sin duda, admirable: de un pueblo de diez mil habitantes en Hidalgo -una zona de lacerante pobreza, debida a los inagotables gobiernos del PRI que ahora la apoya- a la antesala de Palacio.

Las anécdotas sobre sus esfuerzos para estudiar en la UNAM, pese a las burlas clasistas, exceden la estrategia lacrimógena: en un lugar con estirpes políticas incombustibles, ella no le debe nada a ninguna. Y, frente a Sheinbaum, que proviene de una familia que posee el único otro elemento de ascenso social en nuestro país, la riqueza intelectual, ella se forjó a sí misma, y eso no es poco. Elegida por Fox cuando -aunque los jóvenes no puedan creerlo- este representaba la esperanza, inició su tortuoso paso por la política, que podría haberla llevado tanto al PAN como al PRD (y luego a Morena). Frente al cúmulo de ultraderechistas enfebrecidos que pululan por doquier, es un respiro que una mujer como ella, el reverso de la radicalidad, encabece la segunda fuerza del país. Solo por ello deberíamos celebrar su aventura: en un universo paralelo, Lilly Téllez ocuparía su lugar.

Cuando al fin los partidos tradicionales doblaron las manos para cobijarla -valiéndose de los chanchullos de costumbre-, Xóchitl ya era un cohete. Su estallido revitalizó a los detractores de la 4T y provocó el justificado temor de López Obrador, y luego su furia: acaso él ya no sea otra cosa que furia concentrada. Para enfrentarse a su primero los pobres (que en realidad ha sido: primero los pobres y los ricos, y al último la clase media), aparecía una mujer de una clase social mucho más modesta que la de su candidata. Su desparpajo y tozudez parecían capaces de entorpecer su culto transexenal y desde entonces AMLO se ha dado a la tarea de derruirla con todas las herramientas del Estado: justo lo que Fox o Calderón hicieron en su contra.

Estallar no es, sin embargo, perdurar. La valentía de Xóchitl ha estado a la altura de su inconsistencia: una cosa es ser moderada, otra decirle a cada cual lo que quiere oír. Funciona unos días, luego cansa y decepciona. Optó por seguir adelante sin saber cómo seguir: de allí sus tropiezos, sus dislates, su distracción. Así como Claudia defiende una agenda que ya poco tiene de izquierda, Xóchitl es la fachada de tres partidos que -como revelan sus lapsus- representan algo que ella jamás habría querido encarnar. No hay remedio: ellos hacen como que la respetan, ella como que les cree. Al final, su discurso es un batiburrillo sin programa, repleto de ocurrencias y gracejadas.

Tarea difícil la suya: oponerse a la militarización lopezobradorista con Calderón a cuestas y denunciar la corrupción de la 4T con Alito al lado. Muchos -tanto los intelectuales que llamaron a votar por ella como los dirigentes panistas y priistas- asumen que se trata del mal menor. Es poco probable que ello baste para que su deslumbrante vuelo no acabe por los suelos. Solo algo parece seguro: si -como se prevé- termina derrotada, sus incómodos aliados serán los primeros en abandonarla. Ella, en cambio, seguirá pedaleando.

@jvolpi