11 ene 2010

Enfrentamiento en Tultitlán


Matan a policía, toman rehenes y huyen
Hasta el momento se desconoce el paradero de los delincuentes y los civiles que se llevaron con ellos
REFORMA / Redacción
Tultitlán, Estado de México (11 enero 2010).- Dos de los sicarios del comando que asesinó a un policía de la Agencia de Seguridad Estatal en una marisquería de este municipio se dieron a la fuga tras tomar a dos civiles de rehenes y robar una patrulla.
La tarde de este lunes, cinco hombres a bordo de una camioneta Ford Lobo negra con placas MCU 6404 iban persiguiendo al conductor de un Jetta con placas 233 SZB, a quien le dieron alcance en la esquina de Benito Juárez y la Vía López Portillo, frente al restaurante, en los límites de Coacalco y Tultitlán.
Los cinco tripulantes de la camioneta bajaron con armas largas, pero policías municipales y estatales que estaban en el lugar intervinieron y trasladaron al conductor del Jetta a bordo de la patrulla TM 76, conducida por el agente municipal de Coacalco, Jesús Mayel.
Mayel condujo por la López Portillo en dirección al DF y dobló a la izquierda en Eje 8, donde un comando armado a bordo de una camioneta gris - cuyas características se desconocen - abrió fuego contra el vehículo oficial.
El detenido falleció en el lugar mientras el agente municipal fue trasladado en helicóptero a la clínica 98 del IMSS, donde también perdió la vida.
Al mismo tiempo, en la marisquería, la discusión entre agentes estatales y los tripulantes de la Ford Lobo comenzó a subir de tono, hasta que los hombres armados se atrincheraron dentro del restaurante, desde donde lanzaron dos granadas de esquirlas.
Aprovechando la distracción, dos de los delincuentes tomaron como rehenes a dos comensales del restaurante, robaron una patrulla y se dieron a la fuga.
En tanto, los agentes de la ASE se acercaron para capturar a los otros tres, pero los sicarios abrieron fuego y mataron al policía Raúl Hernández Contreras antes de ser detenidos.
Los tres sicarios fueron trasladados para iniciar las investigaciones y hasta el momento se desconoce el paradero de los dos que robaron la patrulla, así como de los rehenes.
Hora de publicación: 16:52 hrs.

Sables y utopías de Vargas Llosa

Sables y utopías: visiones de América Latina”, de Mario Vargas Llosa
Por Javier Munguía | Crítica | 11.01.10
Sables y utopías: visiones de América Latina.
Mario Vargas Llosa
Aguilar (México, 2009)
Antes del libro que me ocupa, sumaban siete las compilaciones de artículos periodísticos de Mario Vargas Llosa. Desde Entre Sartre y Camus (1981), hasta el Diccionario del amante de América Latina (2006), pasando por los tres tomos de Contra viento y marea, publicados en los ochentas, Desafíos a la libertad (1994) y El lenguaje de la pasión (2001), el autor peruano ha querido dejar plasmadas en libros sus opiniones sobre diversos temas de actualidad que en ocasiones trascienden su coyuntura histórica para convertirse en reflexiones sin fecha sobre el devenir del mundo, sobre todo de América Latina, en los ámbitos político y artístico.
Entre estas antologías, quizá la menos lograda como unidad, aunque no por ello carente de interés, sea el Diccionario del amante de América Latina. Originalmente publicada en francés, la obra está conformada por un catálogo de entradas organizadas de la A a la Z que abarcan temas muy diversos. El mayor problema del libro es la poca o nula correspondencia entre el nombre de varias entradas y su contenido. Con tal de abarcar todas las letras del abecedario, el compilador cortó y forzó los textos de Vargas Llosa a caber en moldes inadecuados. Así, en la entrada de nombre “Radioteatros” apenas se mencionan éstos; es el mismo caso de “Miami” y de muchos otros. Sin embargo, con este libro los lectores vargasllosianos tuvimos la oportunidad de tener en un mismo volumen, aunque sin su nombre ni su contexto, sino como entradas de diccionario, artículos del narrador peruano que andaban sueltos en revistas y diarios.
Si menciono el Diccionario del amante de América Latina es para contrastarlo con la octava compilación de artículos de Vargas Llosa, recientemente publicada por Aguilar bajo el título Sables y utopías: visiones de América Latina. Con mucha probabilidad, es esta última la mejor antología de textos de opinión del autor. Su mayor mérito consiste en conjuntar en cinco grandes rubros, con un buen orden y sin traicionar la naturaleza de los textos incluidos, algunos de los artículos más significativos del autor peruano, aquellos que definen su pensamiento, sobre todo en cuanto a su ideario político, pero también en el plano artístico. Dichos rubros son: La peste del autoritarismo, Auge y declive de las revoluciones, Obstáculos al desarrollo: nacionalismo, populismo, indigenismo, corrupción, Defensa de la democracia y del liberalismo y Los beneficios de la irrealidad: arte y literatura latinoamericana.
Hay que decir de una vez que Sables y utopías no es un libro más en la larga trayectoria de Vargas Llosa. No sólo es una obra estimulante y apasionada, sino también necesaria para tratar de erradicar varias equívocos en torno a las ideas del autor. Quien quiera entenderlas e ir más allá de los tontos prejuicios, de la información de segunda mano, de las distorsiones malintencionadas, este es su libro. Aquí están, para compartirlos o rebatirlos, los postulados que Vargas Llosa viene defendiendo desde hace algunas décadas. Aquí está, también, su evolución política. No dejará de sorprender a quien reconozca en Vargas Llosa a un paladín acérrimo de la libertad leer sus crónicas de Cuba, fechadas en 1967, cuando aún era un entusiasta de la Revolución encabezada por Fidel Castro y el Che Guevara. En una de esas crónicas, Vargas Llosa se pregunta por qué señalar solamente que en Cuba desapareció la libertad de prensa y no hablar de la alfabetización; del mismo modo, se pregunta por qué lamentar la desaparición de los partidos políticos en la isla y no hablar de la reforma agraria. No tardaría en darse cuenta Vargas Llosa, para no olvidarlo jamás, que la justicia social no es tal sin libertades políticas y económicas; de ahí su filiación al liberalismo, su defensa de la propiedad privada como una manera de que los ciudadanos constituyan una sociedad civil fuerte que pueda poner frenos a los apetitos desmedidos de poder de los gobernantes en turno.
Un momento clave del libro se encuentra en la carta abierta, titulada “Entre tocayos”, que Vargas Llosa envía a Mario Benedetti para responder algunas declaraciones de éste. En ella, el peruano hace alusión a una declaración de Benedetti según la cual el uruguayo se ha resignado a que Vargas Llosa no esté de su lado, sino con ellos en la trinchera de frente. Vargas Llosa se pregunta quiénes son ellos, cuál es esa trinchera, y deduce que, siendo Benedetti un exiliado y una víctima de la dictadura militar, al hablar de tal trinchera debe de sugerir que Vargas Llosa es una de esas alimañas como las que lo han perseguido y maltratado. Más adelante, se lamenta de que si un escritor de las luces de Benedetti no comprende la diferencia entre un demócrata y un fascista, menos la comprenderán quienes, compartiendo sus ideas políticas, carezcan de su cultura, sutileza y sintaxis.
Es este un momento crucial de Sables y utopías porque da cuenta del lugar común, muy extendido por desgracia, de confundir a Vargas Llosa con un hombre que, lejos de buscar el fin de las desigualdades sociales en América Latina, persigue que los ricos conserven sus privilegios. Un derechista, un conservador, le llaman, confundiéndolo con esos políticos de miras cortas que todavía en pleno siglo XXI confunden la Iglesia con el Estado, se escandalizan fácilmente, dictan su moral decimonónica y reprueban la homosexualidad. En realidad, las ideas de Vargas Llosa están en las antípodas: es agnóstico, está a favor del aborto y de los matrimonios entre personas del mismo sexo. Es un convencido, además, de que la mejor opción para América Latina es la democracia y la libertad en todos los ámbitos: en el político, en el económico, en el artístico, en el personal.
Vargas Llosa ataca de manera frontal en el libro los que considera los mayores lastres con los que arrastramos los latinoamericanos, que impiden nuestro progreso: el racismo de cualquier tipo, ya sea de blancos a negros e indios, o de indios a blancos; el nacionalismo, que parte de la falsa idea de una identidad determinada por el país de origen, cuyos valores serían superiores a los de otras naciones, y que ha llevado a verdades catástrofes como los campos de concentración fascistas y nazis; el populismo, una forma perversa de engañar a los ciudadanos exaltando sus pasiones para sacar beneficio; y la corrupción, tan extendida entre nuestros países.
En el último apartado del libro, Vargas Llosa se ocupa de la literatura y pintura latinoamericanas. Por sus páginas desfilan los pintores Frida Kahlo, Fernando Botero y Fernando de Szyszlo, así como algunos de los escritores latinoamericanos más descollantes, como Lezama Lima, Cabrera Infante, Octavio Paz, José Donoso, Borges, Cortázar y García Márquez. Con estos artículos, Vargas Llosa busca mostrar la riqueza del arte latinoamericano, ámbito en el que nadie puede decir que nuestra región está en el subdesarrollo, así como confirmar su idea de que en los terrenos personal y artístico, la utopía y la perfección son posibles, mientras que no lo son a nivel social, pues la felicidad nunca es una ni la misma para todos.
Javier Munguía

Agustinas recoletas

México: Antiguo convento de agustinas recoletas recuperado para museo
Desde hace un siglo era un cuartel militar en Guadalajara
GUADALAJARA, lunes, 11 enero 2010 (ZENIT.org).- Lo que desde hace casi un siglo era un cuartel militar ha sido presentado por la prensa mexicana como “antiguo convento de Santa Mónica, de monjas agustinas recoletas”. La ocasión la ha brindado el contrato firmado por representantes del Ejército mexicano y del Estado de Jalisco por el que el uso del edificio pasa a manos civiles para ser transformado en museo.
Buena parte del patrimonio agustino recoleto forma un continente sumergido que de vez en cuando aflora gracias a trabajos de remodelación de viejos edificios. Es lo que ha ocurrido en Guadalajara, Jalisco, en México.
Se trata de un edificio céntrico, de tres plantas y un hermoso patio central. A lo largo del tiempo el edificio ha sufrido importantes remodelaciones, según los distintos usos: primero convento, luego seminario, y finalmente cuartel, informa la página web de la Orden Agustina Recoleta.
Las monjas agustinas recoletas, que habían nacido en España (1589), se trasplantaron a México un siglo más tarde.
Su primera fundación de 1688 fue realizada en la ciudad de Puebla por el obispo Manuel Fernández de Santa Cruz. Su convento es, desde 1935, el Museo de Arte Religioso de Santa Mónica, único museo en todo México completamente dedicado a la vida conventual femenina.
Del convento madre de Puebla nacieron después el de Oaxaca (1697) y el de Guadalajara (1720). Este último año, exactamente el 19 de febrero, se instalaron en la capital de Jalisco cinco monjas venidas de Puebla. Sin embargo, la construcción del convento no se verá concluida hasta el año 1733.
Durante más de un siglo y cuarto, las monjas vivieron pacíficamente en su convento, hasta que en 1860 fueron exclaustradas por el Gobierno de la Nación. Durante ocho años el edificio fue abandonado, y en 1868 fue puesto a subasta. Lo adquirió el humanista y filántropo Dionisio Rodríguez, que lo cedió a la archidiócesis en usufructo.
Dado que en este tiempo la archidiócesis carecía de seminario al habérselo enajenado el Gobierno, dedicó el convento a este fin. Durante más de medio siglo, el Seminario Conciliar de Guadalajara estuvo instalado en este edificio que fue profundamente remodelado bajo la dirección del ingeniero Antonio Arróniz Topete.
En él se formó una de las bibliotecas más ricas de la ciudad, con cerca de 15.000 ejemplares. Los seminaristas contaban también para su formación con laboratorios de biología, química y física. Y allí funcionaba igualmente el primer observatorio astronómico que hubo en Guadalajara.
Todo se vino abajo el 8 de julio de 1914, cuando las tropas de Álvaro Obregón tomaron la ciudad. El seminario fue convertido en cuartel y la biblioteca arrojada literalmente al arroyo que por allí corría. Desde entonces ha sido una instalación militar.

Discurso papal

Benedicto XVI: Paz y respeto a la creación
Discurso con motivo del Año Nuevo, ante los embajadores acreditados ante la Santa Sede, a quienes recibió en audiencia en la Sala Regia del Palacio Apostólico Vaticano.
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Excelencias,
Señoras y Señores
Este tradicional encuentro al comienzo del año, dos semanas después de la celebración del nacimiento del Verbo encarnado, representa para mí una gran alegría. Como hemos proclamado en la liturgia, en el misterio de la Navidad, «el que era invisible en su naturaleza se hace visible al adoptar la nuestra; el eterno, engendrado antes del tiempo, comparte nuestra vida temporal para asumir en sí todo lo creado, para reconstruir lo que estaba caído y restaurar de este modo el universo» (Prefacio II de Navidad). Por tanto, en Navidad, hemos contemplado el misterio de Dios y el de la creación: por el anuncio de los ángeles a los pastores hemos conocido la buena nueva de la salvación del hombre y de la renovación de todo el universo. Por eso, en el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de ese año, he invitado a todas las personas de buena voluntad, a las que los ángeles prometieron precisamente la paz, a proteger la creación. Con este mismo espíritu, me complace saludaros con afecto, en particular a los que participáis por primera vez en esta ceremonia. Agradezco vivamente los sentimientos de los que se ha hecho intérprete vuestro decano, el Señor Embajador Alejandro Valladares Lanza, y os manifiesto de nuevo mi aprecio por la misión que desarrolláis ante la Santa Sede. A través de vosotros, deseo enviar un cordial saludo y mis deseos de paz y bienestar a las Autoridades y a todos los habitantes de los países que dignamente representáis. Pienso también en las demás naciones de la tierra: el Sucesor de Pedro tiene su puerta abierta a todos y desea establecer con todos relaciones que contribuyan al progreso de la familia humana. Desde hace algunas semanas, se han establecido plenas relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y la Federación Rusa, y esto es un motivo de profunda satisfacción. Ha sido también muy significativa la visita que me ha hecho recientemente el Presidente de la República Socialista de Vietnam, país que siento muy cercano, donde la Iglesia celebra su presencia multisecular con un Año Jubilar. Con este espíritu de apertura, he recibido durante el año 2009 a numerosas personalidades políticas de diversos países; he visitado algunos de ellos y me propongo continuar haciéndolo en el futuro, en la medida de lo posible.
La Iglesia está abierta a todos porque, en Dios, ella existe para los demás. Ella, por tanto, comparte intensamente la suerte de la humanidad que, en este año apenas comenzado, aparece todavía marcada por la crisis dramática que ha golpeado la economía mundial, provocando una grave y vasta inestabilidad social. En la Encíclica «Caritas in veritate», he invitado a buscar las raíces profundas de esta situación, que se encuentran, a fin de cuentas, en la vigente mentalidad egoísta y materialista, que no tiene en cuenta los límites inherentes a toda criatura. Quisiera subrayar hoy que dicha mentalidad amenaza también a la creación. Cada uno de nosotros podría citar, probablemente, algún ejemplo de los daños que ella produce en el medio ambiente en todas las partes del mundo. Cito uno, entre tantos otros, de la historia reciente de Europa: hace veinte años, cuando cayó el muro de Berlín y se derrumbaron los regímenes materialistas y ateos que habían dominado durante varios decenios una parte de este continente, ¿acaso no fue posible calcular el alcance de las profundas heridas que un sistema económico carente de referencias fundadas en la verdad del hombre había infligido, no sólo a la dignidad y a la libertad de las personas y de los pueblos, sino también a la naturaleza, con la contaminación de la tierra, las aguas y el aire? La negación de Dios desfigura la libertad de la persona humana, y devasta también la creación. Por consiguiente, la salvaguardia de la creación no responde primariamente a una exigencia estética, sino más bien a una exigencia moral, puesto que la naturaleza manifiesta un designio de amor y de verdad que nos precede y que viene de Dios.
Por eso comparto la gran preocupación que causa la resistencia de orden económico y político a la lucha contra el deterioro del ambiente. Se trata de dificultades que se han podido constatar aun recientemente, durante la XV Sesión de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, que tuvo lugar en Copenhague del 7 al 18 de diciembre pasado. Espero que a lo largo de este año, primero en Bonn y después en México, sea posible llegar a un acuerdo para afrontar esta cuestión de un modo eficaz. Se trata de algo muy importante puesto que lo que está en juego es el destino mismo de algunas naciones, en particular ciertos Estados insulares.
Sin embargo, conviene que esta atención y compromiso por el ambiente esté bien establecido en el conjunto de los grandes desafíos a los que se enfrenta la humanidad. Si se quiere construir una paz verdadera, ¿cómo se puede separar, o incluso oponer, la protección del ambiente y la de la vida humana, comprendida la vida antes del nacimiento? En el respeto de la persona humana hacia ella misma es donde se manifiesta su sentido de responsabilidad por la creación. Pues, como enseña santo Tomás de Aquino, el hombre representa lo más noble del universo (cf. Summa Theologiae, I, q. 29, a. 3). Además, como ya recordé en la reciente Cumbre Mundial de la FAO sobre la Seguridad Alimentaria, «la tierra puede alimentar suficientemente a todos sus habitantes» (Discurso, 16 noviembre 2009, n. 2), con tal de que el egoísmo no lleve a algunos a acaparar los bienes destinados a todos.
Quisiera subrayar, además, que la salvaguardia de la creación implica una gestión correcta de los recursos naturales de los países y, en primer lugar, de los más desfavorecidos económicamente. Pienso en el continente africano, que tuve la dicha de visitar en el pasado mes de marzo, en mi viaje a Camerún y Angola, y al que se dedicaron los trabajos de la reciente Asamblea especial del Sínodo de Obispos. Los Padres sinodales señalaron con preocupación la erosión y la desertificación de grandes extensiones de tierra de cultivo, a causa de una explotación desmedida y de la contaminación del medio ambiente (cf. Propositio 22). En África, como en otras partes, es necesario adoptar medidas políticas y económicas que garanticen «formas de producción agrícola e industrial que respeten el orden de la creación y satisfagan las necesidades primarias de todos» (Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2010, n. 10).
Por otra parte, ¿cómo olvidar que la lucha por acceder a los recursos naturales es una de las causas de numerosos conflictos, particularmente en África, así como una fuente de riesgo permanente en otros casos? Por este motivo, repito con firmeza que, para cultivar la paz, hay que proteger la creación. Además, hay todavía extensas zonas, por ejemplo en Afganistán o en ciertos países de Latinoamérica, donde la agricultura, lamentablemente relacionada todavía con la producción de droga, es una fuente nada despreciable de empleo y subsistencia. Si se quiere la paz, hay que preservar la creación mediante la reconversión de dichas actividades y, una vez más, quisiera pedir a la comunidad internacional que no se resigne al tráfico de drogas y a los graves problemas morales y sociales que esto produce.
Señoras y Señores, la protección de la creación es un factor importante de paz y justicia. Entre los numerosos retos que esta protección plantea, uno de los más graves es el del aumento de los gastos militares, así como el del mantenimiento y desarrollo de los arsenales nucleares. Este objetivo absorbe ingentes recursos económicos que podrían ser destinados al desarrollo de los pueblos, sobre todo de los más pobres. En este sentido, espero firmemente que, en la Conferencia de examen del Tratado de no proliferación de armas nucleares, que tendrá lugar el próximo mes de mayo en Nueva York, se tomen decisiones eficaces con vistas a un desarme progresivo, que tienda a liberar el planeta de armas nucleares. En general, deploro que la producción y la exportación de armas contribuya a perpetuar conflictos y violencias, como en Darfur, Somalia o en la República Democrática del Congo. A la incapacidad de las partes directamente implicadas para evitar la espiral de violencia y dolor producida por estos conflictos, se añade la aparente impotencia de otros países y Organizaciones internacionales para restablecer la paz, sin contar la indiferencia casi resignada de la opinión pública mundial. No es necesario subrayar cuánto perjudican y degradan estos conflictos al medio ambiente. Asimismo, se ha de mencionar el terrorismo, que pone en peligro muchas vidas inocentes y causa una difusa ansiedad. En esta solemne ocasión, quisiera renovar el llamamiento que hice el 1 de enero, en la oración del Ángelus, a todos los que pertenecen a cualquier grupo armado, para que abandonen el camino de la violencia y abran sus corazones al gozo de la paz.
Las graves violencias que acabo de evocar, unidas a las plagas de la pobreza y el hambre, así como a las catástrofes naturales y a la destrucción del medio ambiente, hacen que aumente el número de quienes abandonan sus propias tierras. Frente a dicho éxodo, deseo exhortar a las Autoridades civiles implicadas de un modo u otro a trabajar con justicia, solidaridad y clarividencia. Quisiera referirme aquí, en particular, a los cristianos de Oriente Medio. Amenazados de muchos modos, incluso en el ejercicio de su libertad religiosa, dejan la tierra de sus padres, donde creció la Iglesia de los primeros siglos. Con el fin de darles apoyo y hacerles sentir la cercanía de sus hermanos en la fe, he convocado para el próximo otoño una Asamblea especial del Sínodo de Obispos sobre Oriente Medio.
Señoras y Señores Embajadores, hasta aquí he evocado solamente algunos aspectos relacionados con el problema del medio ambiente. Las raíces de la situación que está a la vista de todos son, sin embargo, de tipo moral y la cuestión tiene que ser afrontada en el marco de un gran esfuerzo educativo, con el fin de promover un cambio efectivo de la mentalidad y establecer nuevos modelos de vida. La comunidad de los creyentes puede y quiere participar en ello, pero para hacerlo es necesario que se reconozca su papel público. Lamentablemente, en ciertos países, sobre todo occidentales, se difunde en ámbitos políticos y culturales, así como en los medios de comunicación social, un sentimiento de escasa consideración y a veces de hostilidad, por no decir de menosprecio, hacia la religión, en particular la religión cristiana. Es evidente que si se considera el relativismo como un elemento constitutivo esencial de la democracia se corre el riesgo de concebir la laicidad sólo en términos de exclusión o, más exactamente, de rechazo de la importancia social del hecho religioso. Dicho planteamiento, sin embargo, crea confrontación y división, hiere la paz, perturba la ecología humana y, rechazando por principio actitudes diferentes a la suya, se convierte en un callejón sin salida. Es urgente, por tanto, definir una laicidad positiva, abierta, y que, fundada en una justa autonomía del orden temporal y del orden espiritual, favorezca una sana colaboración y un espíritu de responsabilidad compartida. Desde este punto de vista, pienso en Europa que, con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, ha abierto una nueva fase de su proceso de integración, que la Santa Sede seguirá con respeto y cordial atención. Al observar con satisfacción que el Tratado prevé que la Unión Europea mantenga con las Iglesias un diálogo «abierto, transparente y regular» (art. 17), formulo mis votos para que Europa, en la construcción de su porvenir, encuentre continua inspiración en las fuentes de su propia identidad cristiana. Ésta, como ya afirmé en mi viaje apostólico a la República Checa el pasado mes de septiembre, tiene un papel insustituible «para la formación de la conciencia de cada generación y para la promoción de un consenso ético de fondo, al servicio de toda persona que a este continente lo llama "mi casa"» (Encuentro con las Autoridades civiles y el Cuerpo diplomático, 26 septiembre 2009).
Continuando con nuestra reflexión, es preciso señalar la complejidad del problema del medio ambiente. Se podría decir que se trata de un prisma con muchas caras. Las criaturas son diferentes unas de otras y, como nos muestra la experiencia cotidiana, se pueden proteger o, por el contrario, poner en peligro de muchas maneras. Uno de estos ataques proviene de leyes o proyectos que, en nombre de la lucha contra la discriminación, atentan contra el fundamento biológico de la diferencia entre los sexos. Me refiero, por ejemplo, a países europeos o del continente americano. Como dice San Columbano, «si eliminas la libertad, eliminas la dignidad» (Epist. 4 ad Attela, in S. Columbani Opera, Dublin, 1957, p. 34). Pero la libertad no puede ser absoluta, ya que el hombre no es Dios, sino imagen de Dios, su criatura. Para el hombre, el rumbo a seguir no puede ser fijado por la arbitrariedad o el deseo, sino que debe más bien consistir en la correspondencia con la estructura querida por el Creador.
La salvaguardia de la creación comporta también otros desafíos, a los que solamente se puede responder a través de la solidaridad internacional. Pienso en las catástrofes naturales que a lo largo del año pasado han sembrado muerte, sufrimiento y destrucción en Filipinas, Vietnam, Laos, Camboya y en la Isla de Taiwán. ¿Cómo no recordar también Indonesia y, muy cerca de nosotros, la región de los Abruzzos, golpeadas por devastadores temblores de tierra? Ante dichos acontecimientos, nunca debe faltar la asistencia generosa, pues está en juego la vida misma de las criaturas de Dios. Pero la salvaguardia de la creación, además de solidaridad, requiere también la concordia y estabilidad de los Estados. Cuando surgen divergencias y hostilidades entre ellos, para defender la paz, deben perseguir con tenacidad la vía de un diálogo constructivo. Esto es lo que sucedió hace 25 años con el Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile, concluido gracias a la mediación de la Sede Apostólica y del que se derivaron abundantes frutos de colaboración y prosperidad que, en cierta manera, beneficiaron a toda Latinoamérica. En esta misma parte del mundo, me alegra el acercamiento que Colombia y Ecuador han emprendido tras muchos meses de tensión. Más cerca de aquí, me alegro por el entendimiento logrado entre Croacia y Eslovenia a propósito del arbitraje relativo a sus fronteras marítimas y terrestres. Me alegro asimismo por el Acuerdo entre Armenia y Turquía con vistas a la reanudación de las relaciones diplomáticas y deseo también que a través del diálogo se mejoren las relaciones entre todos los países del Cáucaso meridional. Durante mi peregrinación a Tierra Santa, hice un llamamiento acuciante a Israelíes y Palestinos a dialogar y respetar los derechos del otro. Una vez más, alzo mi voz para que el derecho a la existencia del Estado de Israel sea reconocido por todos, así como a gozar de paz y seguridad en las fronteras reconocidas internacionalmente. Asimismo, que el pueblo palestino vea reconocido su derecho a una patria soberana e independiente, a vivir con dignidad y a desplazarse libremente. Quisiera, además, pedir el apoyo de todos para que sean protegidos la identidad y el carácter sagrado de Jerusalén, cuya herencia cultural y religiosa tiene un valor universal. Sólo así, esta ciudad única, santa y atormentada, podrá ser signo y anticipo de la paz que Dios desea para toda la familia humana. Por amor al diálogo y a la paz, que salvaguardan la creación, exhorto a los gobernantes y ciudadanos de Iraq a superar las divisiones, la tentación de la violencia e intolerancia, para construir juntos el futuro de su país. Las comunidades cristianas quieren también ofrecer su aportación, pero para ello es necesario que se les asegure respeto, seguridad y libertad. Pakistán ha sido también golpeado duramente por la violencia en los últimos meses y ciertos episodios han afectado directamente a la minoría cristiana. Pido que se haga todo lo posible para que dichas agresiones no se vuelvan a repetir y que los cristianos puedan sentirse plenamente integrados en la vida de su país. Por otra parte, a propósito de la violencia contra los cristianos, no puedo dejar de mencionar el deplorable atentado que en los últimos días ha sufrido la comunidad copta egipcia, precisamente cuando celebraba la fiesta de Navidad. En cuanto a Irán, espero que, a través del diálogo y la colaboración, se encuentren soluciones comunes tanto a nivel nacional como en el ámbito internacional. Deseo que el Líbano, que ha superado una larga crisis política, continúe por la vía de la concordia. Espero que Honduras, después de un tiempo de incertidumbre y agitación, se encamine hacia la recuperación de la normalidad política y social. Deseo que, con la ayuda desinteresada y efectiva de la comunidad internacional, suceda lo mismo en Guinea y Madagascar.
Señoras y Señores Embajadores, al final de este rápido recorrido que, debido a su brevedad, no se puede detener en todas las situaciones que lo merecerían, me vienen a la mente las palabras del Apóstol Pablo, para quien «la creación entera está gimiendo con dolores de parto» y «también nosotros gemimos en nuestro interior» (Rm 8, 22-23). En efecto, hay muchos sufrimientos en la humanidad y el egoísmo humano hiere a la creación de muchas maneras. Por eso mismo, el anhelo de salvación que atañe a toda la creación, es todavía más intenso y está presente en el corazón de todos, creyentes o no. La Iglesia indica que la respuesta a esta aspiración está en Cristo «primogénito de toda criatura; porque por medio de Él fueron creadas todas las cosas: celestes y terrestres» (Col 1, 15-16). Fijando mis ojos en Él, exhorto a toda persona de buena voluntad a trabajar con confianza y generosidad por la dignidad y la libertad del hombre. Que la luz y la fuerza de Jesús nos ayuden a respetar la ecología humana, conscientes de que la ecología medioambiental se beneficiará también de ello, ya que el libro de la naturaleza es único e indivisible. De esta manera, podremos consolidar la paz, hoy y para las generaciones venideras. Os deseo a todos un feliz año.
[©Libreria Editrice Vaticana]
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Actualmente ascienden a 178 los Estados que tienen relaciones diplomáticas plenas con la Santa Sede, según un comunicado publicado este lunes por la Oficina de Información de la Santa Sede.

 ellos hay que añadir la Unión Europea, la Soberana Orden Militar de Malta y una Misión de carácter especial: la Oficina de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).
En cuando a Organizaciones internacionales, la Santa Sede está presente en la ONU en calidad de “Estado observador”, y es miembro de siete organizaciones o agencias del sistema ONU, observador en otros ocho, y miembro u Observador en cinco organizaciones regionales.
El comunicado de este lunes repasa los pasos dados por la Santa Sede durante el año 2009 en este ámbito.
Así, recuerda que el 9 de diciembre de 2009, estableció relaciones diplomáticas con la Federación Rusa, a nivel de Nunciatura apostólica por parte de la Santa Sede y de Embajada por parte de la Federación Rusa.

PRD evade confrontación con las iglesias

Nota y entrevista
PRD evade confrontación con Iglesia por bodas gay
Nota de Horacio Jiménez
El Universal On line, Ciudad de México Lunes 11 de enero de 2010
El líder nacional perredista, Jesús Ortega, expresa que ya no demandarán a la jerarquía católica por los ataques en contra del sol azteca, pero sí le pidió prudencia
La dirigencia nacional del PRD reconsideró su postura, y aseguró que ya no tiene intención de presentar una denuncia contra la jerarquía católica por la campaña de descalificaciones que ha emprendido en su contra.
En entrevista, el líder nacional del PRD, Jesús Ortega, dijo que ya no demandarán a la Iglesia por los ataques en contra del sol azteca, pero sí les pidió prudencia, a pesar de que hace una semana amago con denunciarlos si no cesaban la campaña en su contra tras la aprobación de matrimonios entre personas del mismo sexo y la posibilidad de adoptar niños en la capital del país.
"Yo no tengo hoy intención de demandarlos, los llamo a la sensatez y a la prudencia a todos los ministros religiosos, a recordar la historia y los acontecimientos que tanto daño nos hicieron cuando se quiso mezclar la religión con asuntos públicos y es ha hecho mucho daño al país".
El perredista comentó que su partido político no quiere ninguna confrontación con la Iglesia por ningún tema.
"No queremos ninguna confrontación, y llamamos a que podamos encontrar un punto de encuentro en el marco de las leyes que nos rigen en nuestro país".
El líder perredista, llamó al PRI y al PAN, y especialmente a la Secretaría de Gobernación, pronunciarse en torno a las declaraciones del cardenal, Norberto Rivera, quien advirtió que la Iglesia católica no se va a replegar ni a dejar de expresar sus opiniones sobre la aprobación de matrimonios entre personas del mismo sexo y criticó a todos aquellos que quieren prohibirles "hablar en nombre de Jesucristo".
Ante esto, manifestó que el PRD no tiene intención alguna de delimitar la libertad de expresión, ni si quiera de las Iglesias, pero la Carta Magna es muy clara y las leyes en el país prohíben el proselitismo a favor o en contra de partidos o candidatos. fml
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Lunes, 11 de Enero de 2010 22:18 - ¿Qué precisa de este frente de las Iglesias en torno a estas reformas al Código Civil…?

ENTREVISTA AL PRESIDENTE NACIONAL DEL PRD, JESÚS ORTEGA MARTÍNEZ, AL TÉRMINO DE LA CONFERENCIA DE PRENSA OFRECIDA POR EL FRENTE DE ORGANIZACIONES DE IZQUIERDA: DIÁLOGO PARA LA RECONSTRUCCIÓN DE MÉXICO (DIA).

-Yo reitero que el PRD no tiene ninguna intención de generar una confrontación o de ser parte de una confrontación con alguna de las Iglesias. Todas al PRD nos merecen el mayor de los respetos, pero no podemos avalar que se pretenda revivir debates que hace más de un siglo fueron superados.
El papel de la Iglesia en una sociedad plural y diversa tiene que ser en el marco de un Estado laico. Eso se resolvió en 1857, y cada vez que se intenta revivir ese problema, suceden conflictos políticos serios. No revivamos un problema que ya ha sido resuelto.
En México, las leyes que establece la Constitución son las que deben de respetarse y no hay por sobre la Constitución nada.
Respeto las visiones de las Iglesias, pero todas las Iglesias deben de respetar lo que la Ley establece. No es cierto que algún ciudadano mexicano tenga que respetar su visión moral por sobre las leyes; esa es una contradicción falsa, no existe.
Se respeta la Constitución porque es la norma que rige la convivencia entre una sociedad plural como es la sociedad mexicana.
-¿Pero Gobernación no quiere hacer nada?
- Ahora, yo quiero que Gobernación y todos los demás partidos, el PRI y el PAN, se manifiesten sobre la idea de que las leyes en México son secundarias. Debería la opinión pública, conocer si por sobre la Constitución hay criterios religiosos. A mi juicio, no.
La Constitución es la ley suprema en el Estado laico mexicano, respetando las opiniones de todas las religiones.
-¿Pero Gobernación debería de actuar?
-Por eso digo, quisiéramos conocer la opinión de Gobernación sobre estas declaraciones últimas, y quisiéramos conocer la opinión del PRI y del PAN porque creo que la mejor forma para garantizar una convivencia civilizada en México, es a través de un Estado laico.
-Gómez Mont ya dijo que tienen libertad de expresión las Iglesias, que están en su derecho…
-Yo también creo que tienen libertad de expresión, yo no voy a limitar la libertad de expresarse de nadie, tampoco de los ministros de culto religioso, pero hay límites que establece la Constitución, y yo lo que digo es simplemente que esos límites deben de respetarse.
Por ejemplo, no tienen los ministros la posibilidad de expresarse a favor o en contra de un partido político, no puede hacer proselitismo a favor o en contra de un partido político, eso lo dice la Constitución. Solamente eso es lo que establecemos.
Desde luego que los ministros de culto tienen libertad de expresión, son mexicanos con los mismos derechos que todos los demás, según lo establece la Constitución General de la República, y la Constitución establece el límite a esa libertad.
-Ayer el discurso que era en contra del PRD era entre líneas, es decir, con frases de la Biblia, y el vocero afirma que lo van a hacer así para que si el PRD busca demandarlos, demanden a Cristo también.
-Yo no tengo hoy la intención de demandarlos, yo más bien los llamo a la sensatez y a la prudencia a todos los ministros religiosos, a recordar la historia de nuestro país, a recordar los acontecimientos que tanto daño nos hicieron cuando se quiso mezclar asuntos de la religión con asuntos públicos, y eso ha provocado mucho daño en el país, por eso es que yo…, no es un asunto de formalidad, es un asunto de obligada sensatez para que el país ataque los verdaderos problemas y no nos metamos en un conflicto que, francamente, en el siglo XXI no tiene razón de existencia.
- Jesús, ¿consideras que Gobernación es parcial o tibia con esta…?
-No, no tengo ninguna opinión, vamos a ver qué dice la Secretaría de Gobernación, pero sí me parece que debe de expresarse con toda claridad la Secretaría de Gobernación frente a este asunto.
P. Inaudible.
JOM. No lo sé.
-¿Cuando se manifiesta en contra del PRD, la Iglesia ya está haciendo proselitismo?
-Si hubiera expresiones en contra del PRD –como las ha habido-, pues me parece que se está violentando la Constitución. Debe de respetarse el punto de vista de todos los ciudadanos y no inclinar las simpatías de la Iglesia a favor de ningún partido.
Pero, de verdad que no queremos ninguna confrontación y llamamos a que podamos encontrar un punto de encuentro que sea necesariamente en el marco de las leyes que nos rigen en nuestro país.

Accidente: muere la familia Saba

Alberto Saba Raffoul no murió.- GDF
La familia Saba confirmó la muerte de cinco personas que viajaban en el helicóptero
Nota de Ilich Valdez
Reforma on line, Ciudad de México (11 enero 2010).- Alberto Saba Raffoul no viajaba en el helicóptero que se desplomó ayer en la noche en la Delegación Cuajimalpa, informó el Secretario de Protección Civil capitalino, Elías Miguel Moreno Brizuela.
Moreno Brizuela indicó en entrevista que, en un principio, dos bitácoras de vuelo señalaban que en la aeronave viajaba Alberto Saba Raffoul, por eso la confusión sobre su presunta muerte.
Sin embargo, a las 3:00 horas la familia Saba confirmó la muerte de cuatro de sus integrantes y no de cinco, como se informó en un principio, además del piloto.

Respuesta al gobernador Moreira

Respuesta institucional al gobernador del Estado de Coahuila, Humberto Moreira, acerca de la estrategia del combate al crimen organizado del Gobierno Federal, la Secretaría de Gobernación manifiesta lo siguiente:
· Las acciones en contra del crimen organizado fueron abordadas por el Presidente Calderón desde su campaña electoral y han estado presentes a lo largo de toda su administración ya que buscan poner un alto al proceso degenerativo de las instituciones municipales, estatales y federales, derivado de la penetración de las bandas delictivas.
· No es con descalificaciones, ni con acusaciones falsas e infundadas como se enfrenta al crimen organizado. El aumento desmedido de la violencia y de los delitos que afectan de manera directa a la sociedad, como la extorsión, el secuestro, y los homicidios, motivaron a las autoridades locales a solicitar la presencia de las fuerzas federales, por lo que es inadmisible que se diga que la violencia fue generada por la intervención del Gobierno Federal.
· A través del Grupo de Coordinación Operativa Coahuila (GCO Coahuila), en el ámbito de sus atribuciones y facultades, las Secretarías de Gobernación, Seguridad Pública, Defensa Nacional y la Procuraduría General de la República planean, acuerdan y ejecutan acciones en coordinación con la Fiscalía del Estado de Coahuila.
· En 2009, el GCO Coahuila se reunió en 35 ocasiones (encabezando el propio Gobernador Moreira las del 17 de abril y del 30 de octubre), destacándose los siguientes acuerdos:
-Instalación de dos Unidades Táctico Operativo (UNITO) en Saltillo y Torreón.
-Consolidación de Grupos de Coordinación “Coahuila Seguro” en los principales municipios de la entidad. En 2009 se tuvieron 44 reuniones en Monclova; 39 en Saltillo; 36 en Acuña; 26 en Piedras Negras; 25 en Sabinas; 22 en Allende y 16 en Torreón.
-Instalación de una Base de Operaciones Mixtas en Saltillo en la que participan todas las corporaciones policiales.
· Si bien es cierto que la lucha por recuperar la seguridad del país es una decisión de Estado en la que la Federación, estados y municipios deben de sumar esfuerzos, también es fundamental que los gobiernos estatales avancen y profundicen en la depuración y fortalecimiento de los cuerpos policíacos y de procuración de justicia.
El Gobierno Federal ha impulsado y continuará impulsando una política de cooperación solidaria y subsidiaria con todas las autoridades locales del país, sin distingo alguno de filiación partidista. Como se ha demostrado en Coahuila y otros estados del país, aquellas autoridades locales comprometidas con la lucha contra la delincuencia organizada cuentan con el apoyo del Gobierno Federal.
Fuente: CS de la SEGOB Boletín No.010-10/01/2010

Posicionamiento de Leon Panetta

The CIA is proud to be on the front lines against al-Qaeda
By Leon Panetta, director of the Central Intelligence Agency
THE WASHINGTON POST, 10/01/10;
The horrible news Dec. 30 that a suicide bomber had taken seven American lives in Afghanistan may have been for some a stark reminder that we are at war. But the men and women of the CIA, whose colleagues these seven were, needed no reminder.
The main lesson from this attack is that, like our military, CIA officers are on the front lines against al-Qaeda and its violent allies. They take risks to confront the enemy, gathering information to destroy its networks and disrupt its operations. This is a vicious foe, one that has struck our country before and is determined to do so again.
As an agency, we have found consolation in the strength and heroism of our fallen colleagues and their families.
We have found no consolation, however, in public commentary suggesting that those who gave their lives somehow brought it upon themselves because of “poor tradecraft.” That’s like saying Marines who die in a firefight brought it upon themselves because they have poor war-fighting skills.
This was not a question of trusting a potential intelligence asset, even one who had provided information that we could verify independently. It is never that simple, and no one ignored the hazards. The individual was about to be searched by our security officers — a distance away from other intelligence personnel — when he set off his explosives.
Our officers were engaged in an important mission in a dangerous part of the world. They brought to that mission their skills, expertise and willingness to take risks. That’s how we succeed at what we do. And sometimes in a war, that comes at a very high price.
The CIA cannot speak publicly about its major victories — the plots foiled, the terrorists neutralized. In the past year, we have done exceptionally heavy damage to al-Qaeda and its associates. That’s why the extremists hit back. And it is all the more reason why we intend to stay on the offensive.
The safety of our officers is critical. If we find lessons from Forward Operating Base Chapman that will make us even stronger in what will always be a deadly battle, we will, of course, apply them. But let’s be clear: When you are fighting terrorists, there will be risks.
We constantly adapt and refine the tools we use to accomplish what is, under the best circumstances, an exceptionally complex and difficult mission. No one should mistake the remote spots of South Asia for the capitals of Cold War Europe. In a very different environment, against a very different enemy, our tradecraft is tailored to a battlefield. In the barren landscape outside Khost, Afghanistan, things such as “safe” houses — a staple of traditional espionage — are not easily found.
Our focus now is on these seven American heroes and those wounded beside them. They knew the value of their work against terrorism and did it with talent, energy and a full appreciation of the risks involved. In the days since this tragedy, many family members have told me that, in Afghanistan, their loved ones were where they wanted to be. They were no strangers to hardship. If the CIA was not in that rugged outpost and many more like it, obtaining information that could save American lives, the agency would not be doing its job.
On the day our fallen returned to Dover Air Force Base on their long journey home, the CIA’s senior staff meeting began with a moment of silence. It was followed by a powerful commitment to continue our aggressive counterterrorism operations. We do more than mourn those taken from us. We honor them, in part by pushing forward the work they did, work to which they were absolutely devoted. Their colleagues form a deep bench of expertise and courage, and they are committed to playing their vital role in this war we must win.