El caso de Huitzilac/Fred Álvarez
Código Topo # 49 de Excélsior, 1 de octubre de 2012
El caso Tres Marías pudo causar un grave daño a las relaciones diplomáticas de México y EU, pero lo que se creyó una “emboscada”, quedó calificado como una “confusión”
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La mañana del viernes 24 de agosto de 2012, Jesús Hoods Garner y Stan Dove Boss–presuntos agentes de la CIA, así como el capitán Fabian Molina Yera, de la Secretaria de Marina, fueron aparentemente confundidos con delincuentes por policías federales por lo que fueron perseguidos y recibieron múltiples impactos de armas de fuego.
Las balas de los rifles de asalto que se incrustaron en el Toyota Land Cruiser de ocho cilindros, matrícula diplomática BCM-242, penetraron el blindaje número siete e hirieron a los estadunidenses; el marino tuvo sólo leves heridas, fueron atendidos en un hospital de Cuernavaca.
En un radio de 200 metros del sitio donde quedó la camioneta se contabilizaron al menos 40 casquillos percutidos de calibres 7.62 y 5.65, de los que usan los rifles de asalto AK-47, y AR-15
Pudieron salvar la vida gracias a que iban en un vehículo blindado y a la intervención oportuna de otros policías federales que controlaron la tensa situación, una vez que hablaron con los ocupantes e informarles que eran empleados de la embajada de Estados Unidos y un empleado de la Marina, fue entonces cuando un agente gritó a sus compañeros una señal en clave. Entonces dejaron de encañonarlos.