El presidente de la Fundación Nacional Cubanoamericana (CANF) Francisco "Pepe" Hernández, negó lo que publicó este lunes el periódico La Jornada, que vinculó al grupo de Miami con un cartel de tráfico de drogas y contrabando de inmigrantes cubanos.
Francisco "Pepe'' Hernández, el presidente de la FNCA, declaró a The Miami Herald - nota de Roberto Koltun- que la información no era probablemente más que "desinformación'' plantada por el gobierno cubano para desacreditar a la organización miamense.
En su edición del lunes, La Jornada alegó que fuentes cercanas a una investigación federal en México habían dicho que los fiscales mexicanos tenían información que vinculaba a la FNCA con el Cartel del Golfo.
Francisco "Pepe'' Hernández, el presidente de la FNCA, declaró a The Miami Herald - nota de Roberto Koltun- que la información no era probablemente más que "desinformación'' plantada por el gobierno cubano para desacreditar a la organización miamense.
En su edición del lunes, La Jornada alegó que fuentes cercanas a una investigación federal en México habían dicho que los fiscales mexicanos tenían información que vinculaba a la FNCA con el Cartel del Golfo.
En una alegación específica, La Jornada citó que sus fuentes aseguraban que dos hombres ahora detenidos en México -Nairobi Claro y Noriel Veloz- dijeron a los investigadores que pertenecían a la FNCA.
Las fuentes también aseguran, según la publicación, que el dinero que Claro y Veloz recibían de los inmigrantes cubanos se usaba para sobornar a las autoridades mexicanas, comprar documentos falsos de inmigración y pagar a los Zetas del Cartel del Golfo para que protegieran a los inmigrantes.
"Esa historia es ridícula'', dijo Hernández en una entrevista telefónica al Miami Herald. "Buscamos con todo cuidado en nuestros archivos y no encontramos relación alguna con esos hombres'', afirmó Hernández.
Los archivos públicos muestran que Claro y Veloz tienen direcciones en La Pequeña Habana.
Un hombre que contestó la puerta en la dirección de Claro, y que se negó a dar su nombre, dijo que Claro había vivido allí dos años y se había ido a México hacía unos dos meses. Nadie salió a la puerta en la dirección de Veloz, pero los vecinos dijeron que no lo conocían.
Hernández hizo notar que La Jornada nunca llamó a la Fundación antes de publicar la nota para verificar si Claro y Veloz pertenecían a la organización.
Una persona que contestó el teléfono en la redacción de La Jornada dijo que solamente el reportero que escribió el artículo, Alfredo Méndez, podía comentar sobre las afirmaciones de Hernández. Méndez no contestó su extensión y la persona que respondió el teléfono en La Jornada se negó a dar mensaje alguno a Méndez.
Los archivos públicos muestran que Claro y Veloz tienen direcciones en La Pequeña Habana.
Un hombre que contestó la puerta en la dirección de Claro, y que se negó a dar su nombre, dijo que Claro había vivido allí dos años y se había ido a México hacía unos dos meses. Nadie salió a la puerta en la dirección de Veloz, pero los vecinos dijeron que no lo conocían.
Hernández hizo notar que La Jornada nunca llamó a la Fundación antes de publicar la nota para verificar si Claro y Veloz pertenecían a la organización.
Una persona que contestó el teléfono en la redacción de La Jornada dijo que solamente el reportero que escribió el artículo, Alfredo Méndez, podía comentar sobre las afirmaciones de Hernández. Méndez no contestó su extensión y la persona que respondió el teléfono en La Jornada se negó a dar mensaje alguno a Méndez.
La nota de Alfredo Méndez de La Jornada, 23 de junio de 2008;
■ Organización con sede en Miami mantiene vínculos con el cártel del Golfo desde hace tres años
Anticastristas contratan a Los Zetas para introducir cubanos al país
■ Polleros detenidos en Cancún revelan a PGR la forma de operar de la banda; temen ser ejecutados
■ Desde 2005 el Cisen tuvo conocimiento de los reportes del caso, enviados desde La HabanaLa Procuraduría General de la República (PGR) cuenta con elementos para considerar que la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), organización anticastrista de cubanos residentes en Miami, por lo menos desde hace tres años mantiene vínculos con el cártel del Golfo y con la banda de sicarios Los Zetas, para fortalecer el tráfico de migrantes isleños y centroamericanos que pasan por territorio mexicano en su pretensión de cruzar a Estados Unidos.
Los testimonios rendidos ante autoridades ministeriales y judiciales de Cancún, Quintana Roo, por dos cubano-estadunidenses detenidos el pasado 8 de junio, acusados como presuntos responsables de la introducción ilegal a México de 33 cubanos, –mismos que un comando rescató hace dos semanas cuando eran trasladados a una estación migratoria ubicada en Chiapas–, son reveladores.
Según fuentes judiciales cercanas a la indagatoria, Nairobi Claro y Noriel Veloz declararon que forman parte de la organización anticastrista FNCA, y que con el dinero que recibían como pago de los migrantes sobornaban a autoridades mexicanas, adquirían documentación migratoria apócrifa y contrataban los servicios de sicarios del crimen organizado que operan en la zona del Golfo de México, con el propósito de garantizar el traslado de los cubanos a Estados Unidos.
Rechazan libertad bajo fianza
Los dos detenidos se han negado a aceptar el beneficio de la libertad provisional bajo fianza y permanecen recluidos en un penal de Cancún por temor a ser ejecutados si salen a la calle.
En días pasados, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), que encabeza las pesquisas por este asunto –identificado por las autoridades mexicanas y estadunidenses como un tema de seguridad nacional, según consta en el documento Evaluación de las amenazas en 2008, elaborado por el National Drug Inteligence Center, del Departamento de justicia de Washington y que ya es del conocimiento del gobierno de Felipe Calderón–, ofreció a Nairobi Claro y Noriel Veloz acogerse al programa de “testigos protegidos” de la PGR para que se les brinde seguridad personal mientras colaboran con las investigaciones.
Los declarantes están siendo procesados ante el juzgado cuarto de distrito con sede en Cancún por su presunta responsabilidad en los delitos de violación a la Ley General de Población, bajo la causa penal 38/2008.
Las fuentes consultadas añadieron que los dos detenidos aseguraron en sus declaraciones preparatorias que desde 2005 forman parte de una banda de polleros que contrata los servicios de Los Zetas para que indocumentados –predominantemente cubanos– crucen territorio mexicano, desde la península de Yucatán hasta Tamaulipas –bastión del cártel del Golfo–, para luego internarse en el vecino país del norte.
El penal en el que se encuentran los polleros es vigilado las 24 horas por elementos de la Agencia Federal de Investigación ante el temor de que algún sicario contratado por la FNCA intente asesinarlos para que dejen de revelar información confidencial de la “mafia de Miami” a las autoridades mexicanas.
A Nairobi Claro y Noriel Veloz los detuvo la Armada de México frente a las costas de Isla Mujeres cuando en una embarcación trasladaban a 33 cubanos a Quintana Roo.
De acuerdo con informes del gobierno de Cuba, que desde 2005 han sido del conocimiento del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) en México, la FNCA no sólo apoya a bandas de traficantes de indocumentados isleños que están vinculados con algunas organizaciones criminales mexicanas, sino también se dedican al tráfico de drogas y al lavado de dinero de procedencia ilícita.
Anticastristas contratan a Los Zetas para introducir cubanos al país
■ Polleros detenidos en Cancún revelan a PGR la forma de operar de la banda; temen ser ejecutados
■ Desde 2005 el Cisen tuvo conocimiento de los reportes del caso, enviados desde La HabanaLa Procuraduría General de la República (PGR) cuenta con elementos para considerar que la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), organización anticastrista de cubanos residentes en Miami, por lo menos desde hace tres años mantiene vínculos con el cártel del Golfo y con la banda de sicarios Los Zetas, para fortalecer el tráfico de migrantes isleños y centroamericanos que pasan por territorio mexicano en su pretensión de cruzar a Estados Unidos.
Los testimonios rendidos ante autoridades ministeriales y judiciales de Cancún, Quintana Roo, por dos cubano-estadunidenses detenidos el pasado 8 de junio, acusados como presuntos responsables de la introducción ilegal a México de 33 cubanos, –mismos que un comando rescató hace dos semanas cuando eran trasladados a una estación migratoria ubicada en Chiapas–, son reveladores.
Según fuentes judiciales cercanas a la indagatoria, Nairobi Claro y Noriel Veloz declararon que forman parte de la organización anticastrista FNCA, y que con el dinero que recibían como pago de los migrantes sobornaban a autoridades mexicanas, adquirían documentación migratoria apócrifa y contrataban los servicios de sicarios del crimen organizado que operan en la zona del Golfo de México, con el propósito de garantizar el traslado de los cubanos a Estados Unidos.
Rechazan libertad bajo fianza
Los dos detenidos se han negado a aceptar el beneficio de la libertad provisional bajo fianza y permanecen recluidos en un penal de Cancún por temor a ser ejecutados si salen a la calle.
En días pasados, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), que encabeza las pesquisas por este asunto –identificado por las autoridades mexicanas y estadunidenses como un tema de seguridad nacional, según consta en el documento Evaluación de las amenazas en 2008, elaborado por el National Drug Inteligence Center, del Departamento de justicia de Washington y que ya es del conocimiento del gobierno de Felipe Calderón–, ofreció a Nairobi Claro y Noriel Veloz acogerse al programa de “testigos protegidos” de la PGR para que se les brinde seguridad personal mientras colaboran con las investigaciones.
Los declarantes están siendo procesados ante el juzgado cuarto de distrito con sede en Cancún por su presunta responsabilidad en los delitos de violación a la Ley General de Población, bajo la causa penal 38/2008.
Las fuentes consultadas añadieron que los dos detenidos aseguraron en sus declaraciones preparatorias que desde 2005 forman parte de una banda de polleros que contrata los servicios de Los Zetas para que indocumentados –predominantemente cubanos– crucen territorio mexicano, desde la península de Yucatán hasta Tamaulipas –bastión del cártel del Golfo–, para luego internarse en el vecino país del norte.
El penal en el que se encuentran los polleros es vigilado las 24 horas por elementos de la Agencia Federal de Investigación ante el temor de que algún sicario contratado por la FNCA intente asesinarlos para que dejen de revelar información confidencial de la “mafia de Miami” a las autoridades mexicanas.
A Nairobi Claro y Noriel Veloz los detuvo la Armada de México frente a las costas de Isla Mujeres cuando en una embarcación trasladaban a 33 cubanos a Quintana Roo.
De acuerdo con informes del gobierno de Cuba, que desde 2005 han sido del conocimiento del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) en México, la FNCA no sólo apoya a bandas de traficantes de indocumentados isleños que están vinculados con algunas organizaciones criminales mexicanas, sino también se dedican al tráfico de drogas y al lavado de dinero de procedencia ilícita.
Precisión de la PGR:
En el correo Ilustrado de La Jornada, 26/06/2008;
Aclaración de la PGR
En referencia a la nota “Anticastristas contratan a Los Zetas para introducir cubanos al país”, publicada el 23 de junio en la página 3, firmada por el señor Alfredo Méndez, la cual refiere que: “La Procuraduría General de la República cuenta con elementos para considerar que la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), organización anticastrista de cubanos residentes en Miami, por lo menos desde hace tres años mantiene vínculos con el cártel del Golfo y con la banda de sicarios Los Zetas, para fortalecer el tráfico de migrantes isleños y centroamericanos que pasan por territorio mexicano en su pretensión de cruzar a Estados Unidos”, es importante precisar que la información publicada es falsa, ya que en la Procuraduría General de la República no existe ningún documento ministerial que consigne que la FNCA mantiene vínculos con el cártel del Golfo o con la banda de sicarios denominada Los Zetas.
Por lo anterior, la presente tiene como objetivo aclarar la información que difunde su medio para evitar confusiones en la opinión pública.
Atentamente.
Fernando Castillo Tapia, director general de Comunicación Social, PGR
En referencia a la nota “Anticastristas contratan a Los Zetas para introducir cubanos al país”, publicada el 23 de junio en la página 3, firmada por el señor Alfredo Méndez, la cual refiere que: “La Procuraduría General de la República cuenta con elementos para considerar que la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), organización anticastrista de cubanos residentes en Miami, por lo menos desde hace tres años mantiene vínculos con el cártel del Golfo y con la banda de sicarios Los Zetas, para fortalecer el tráfico de migrantes isleños y centroamericanos que pasan por territorio mexicano en su pretensión de cruzar a Estados Unidos”, es importante precisar que la información publicada es falsa, ya que en la Procuraduría General de la República no existe ningún documento ministerial que consigne que la FNCA mantiene vínculos con el cártel del Golfo o con la banda de sicarios denominada Los Zetas.
Por lo anterior, la presente tiene como objetivo aclarar la información que difunde su medio para evitar confusiones en la opinión pública.
Atentamente.
Fernando Castillo Tapia, director general de Comunicación Social, PGR