10 mar 2008

¿Ahora a pagar?


El Fiscal general de Colombia Mario Iguarán aclaró que "hay una serie de investigaciones contra Pablo Montoya Alias Rojas "él por rebelión, terrorismo y masacres", pero no por la muerte del miembro del secretariado de las Farc: Iván Ríos.
En tanto, el Procurador Edgardo Maya, por su parte, anunció que su despacho vigilará el proceso de la entrega de la recompensa y dijo que el análisis se ocupará de las condiciones bajo las que se ofrece la entrega del dinero. En concreto, si el llamado del Estado es a quien entregue a los jefes guerrilleros vivos o muertos.
En tanto, el Presidente Uribe, señaló que se debe esperar a o que digan las autoridades judiciales. El Jefe de Estado manifestó que su Gobierno seguirá estimulando el pago de recompensas que permita a las autoridades dar con el paradero de los delincuentes, pero que Colombia es un Estado de derecho, que no estimulará masacres.
El dilema con Rojas/ EDITORIAL, periódico
El Tiempo on line, fechado el 11 de Marzo de 2008.
Redactor de EL TIEMPO.
La recompensa a la que, en principio, tiene derecho 'Rojas', el jefe de seguridad de 'Iván Ríos', por haber cobrado para las autoridades la segunda baja del más alto nivel de las Farc, plantea al Gobierno -y a la sociedad- una compleja disyuntiva jurídica, política y moral.
Basta pensar en lo que está en juego. Si se paga la recompensa de 5.000 millones de pesos -oficialmente prometida a cualquiera que contribuya a capturar a un miembro del secretariado de las Farc- se estaría premiando a un hombre que ha cometido un homicidio y ha dicho él mismo que cortó la mano del cadáver para demostrar que se trataba de 'Ríos'. ¿Puede un Estado de Derecho amparar semejante conducta, aun con la justificación de que el muerto es uno de los jefes de una organización que ha causado infinito daño?
Pero si no se le paga, ¿no se les estará enviando a miembros de la guerrilla eventualmente dispuestos a hacer algo similar para entregarse el mensaje de que el Estado no cumple las recompensas que anuncia, y limitar así las posibilidades de que procesos de desmoralización dentro de esas organizaciones culminen en traiciones tan elocuentes como la protagonizada por 'Rojas'?
Más allá de la obvia importancia que tiene desde el punto de vista militar, recompensar este tipo de actitud plantea dilemas políticos y morales para un Estado de Derecho. Es perfectamente legítimo premiar la delación para combatir organizaciones ilegales, pero este caso plantea una situación sui géneris, que la ley no previno. Fomentar el asesinato (para no hablar de la mutilación) como fórmula para combatir a la guerrilla no solo resulta 'políticamente incorrecto', sino que envía al conjunto de la sociedad un mensaje ambiguo y peligroso. Estas inquietudes tienen sin cuidado a terroristas que ponen bombas, secuestran y siembran minas, pero el Estado no puede deslegitimarse en su lucha contra el terrorismo. Así como hay métodos que las sociedades civilizadas han aceptado que no valen en la guerra, igualmente hay conductas que no se deben estimular. Y debe quedar claro a quienes incurren en ellas que, si bien ellos mismos pueden no vacilar en cuanto a los métodos y los límites, hay umbrales que el Estado y la sociedad no aceptan franquear. Para diferenciarse, precisamente, del enemigo que combaten.
Si el Gobierno quiere ser consecuente con su política de recompensas, que viene impulsando desde el 2002, debe pagar. Pero, si quiere ser consecuente con los principios básicos de una democracia, algún mecanismo debe mostrar que no es lo mismo delatar que matar, así se haga en nombre de la lucha contra enemigos armados del Estado.
A 'Rojas' habría, pues, que pagarle, pero él, a su vez, debe pagar. Corresponde a la Fiscalía asumir la investigación por lo que hizo y establecer si concurren atenuantes como la legítima defensa (él mismo ha alegado que estaban cercados, sin abastecimiento) u otras circunstancias. Como en cualquier homicidio. Y un juez debe dictaminar la pena a que haya lugar. No hay quizá otra forma de conciliar la política de recompensas -que en casos extremos puede ser un aliciente para conductas como la de 'Rojas'- con la de que matar se castiga en cualquier sociedad civilizada.
En todo caso, es una lección lo sucedido. Para las Farc, ante todo: que un miembro de su máxima dirección muera como cualquier bandido, a manos de sus propios hombres, habla mucho de la descomposición de esa organización. Y también, de la degradación general a que ha llegado nuestro conflicto armado: en pocos países se presenta alguien con una mano cortada a reclamar un premio estatal.

Es necesario ser honestos: Donald Kerr

Donald Kerr, el segundo funcionario más importante de la inteligencia de EE UU - y que por cierto, recientemente estuvo en México-, admitió qque "en la comunidad de inteligencia no estamos ganando los corazones y las mentes. Ni siquiera lo estamos intentando. Y eso es lo que más me preocupa".
Kerr intenta restablecer la confianza pública en una comunidad de inteligencia mancillada por sus propias acciones y por denuncias de fechorías cometidas en secreto.
Y es que durante los últimos años, las agencias de inteligencia norteamericanas han ofrecido bastantes elementos para que se escriban historias negativas. Por ejemplo, El "waterboarding" (submarino) es tal vez el más prominente. Se trata de una técnica de interrogatorio que consiste en cubrir el rostro de un detenido con una tela, y arrojarle agua encima para que tenga la sensación de que se está ahogando. La técnica es conocida desde hace varios siglos, y la hizo famosa la Inquisición española.
También se practican el espionaje electrónico sin autorización de jueces, el envío de detenidos a países donde se tortura y la destrucción de videograbaciones de interrogatorios, a los cuales se suman enormes fracasos de espionaje, como la aseveración de que Saddam Hussein había almacenado arsenales de armas de destrucción masiva. Una vez invadido Irak, en marzo de 2003, se comprobó que esas denuncias eran falsas.
Kerr dijo que "hemos permitido a nuestros detractores formular el debate nacional para que nos consideren unos villanos". Por lo tanto, es necesario "ser honestos y abiertos , pero sin revelar fuentes y métodos".
En el curso de una cena la semana pasada patrocinada por la Alianza de Inteligencia y de Seguridad Nacional, Kerr señaló que un secreto excesivo era conveniente cuando se organizaron agencias de inteligencia en Estados Unidos hace 60 años. Pero que ahora, ese excesivo secreto resulta inconveniente.

Las dos sicilias

Viaje tardío a las dos Sicilias (I)/Gregorio Morán
Publicado en LA VANGUARDIA, 01/03/2008;
Este sí que es un país para viejos. Sicilia. Son viejas las tierras, las gentes, las costumbres, las muertes, las escrituras. También los monumentos, y hasta los niños. Lo más nuevo y luminoso en Sicilia es lo que queda por nacer. Y lo que está ahí desde hace mucho tiempo. Por eso recomiendo ir muy joven. Cuanto más joven se viaje a Sicilia, mejor. Los países buenos para viejos deben contemplarse con otra mirada. La gente mayor tiene una tendencia biológica a la complicidad y el acomodamiento; basta que les faciliten los transportes y que los camareros los llamen por su nombre de pila.
¿Por qué creen ustedes que Goethe dijo que aquí había empezado todo? Porque tenía 37 años cuando llegó a Palermo el lunes 2 de abril de 1787, y a esa gozosa edad uno puede hablarle de tú al pasado. No es imprescindible ser Goethe, pero conviene ser joven.
Cuando descubrí que Sicilia era otra asignatura pendiente, ya habían cerrado el plazo de matrículas por razones de edad. Se me permitía, eso sí, asistir a los cursos, como oyente, una fórmula antigua que no sé yo si aún se mantiene oficialmente y si tiene algún valor. Las enseñanzas viejas exigen oídos jóvenes. Fíjense sino en la gran literatura siciliana. Un festival.
Es imposible encontrar otro lugar donde haya tanto en tan poco espacio. Pero todo es espléndidamente viejo. ¿Qué es El Gatopardo de Lampedusa sino una demoledora visión derrotista de la vida? ¿De la siciliana? ¿Acaso hay otras?, preguntaría el príncipe de Salina. Mucha gente cree haber leído esa novela, triste como una balada para derrotados, simplemente por el hecho de haber visto la película de Visconti. Fuera del argumento, no hay nada entre ambas. Visconti era un aristócrata tronado que se preparaba para seguir siéndolo en la nueva clase emergente del proletariado ilustrado por el Partido Comunista Italiano. Bastaría leer su breve intercambio de cartas con Palmiro Togliatti, el legendario líder del PCI, para captar la complicidad entre ambos comentando algo tan aparentemente banal como la duración del baile palaciego y el vals entre Burt Lancaster y Claudia Cardinale. La novela de Lampedusa no deja resquicio al optimismo, ni siquiera el autor tiene la posibilidad de seducir a Alain Delon, como hizo inútilmente el viejo maricón que era Visconti. Giuseppe de Lampedusa era impotente, sin más, y había logrado un matrimonio blanco con una hermosa dama, algo fondona, pero exótica y culta, y con algún numerario para sumar a las menguadas rentas familiares. ¡Qué viejo es el príncipe de Salina lampedusiano!
No es extraño que los editores de los años cincuenta rechazaran el manuscrito sobre la vieja Sicilia de Lampedusa. Sólo un raro como Giorgio Bassani, boloñés, formado en la cálida y vieja burguesía de Ferrara, podía apreciar la esplendidez de ese texto que rezuma moho palermitano. Se le reprocha a otro grande de la literatura italiana, siciliano militante, Elio Vittorini, que su neorrealismo no le permitiera apoyar la edición de El Gatopardo.Una frivolidad. En Vittorini está parte de la mejor literatura italiana de posguerra, más brillante, en mi opinión, que Pavese y con mejor sentido de la narración; una prosa rica, por más pegada al terreno que estuviera. El problema es otro, no apto para diletantes, porque en el tema se iba la vida. La Sicilia de El Gatopardo,que nos emociona, nos conmueve, nos hace pensar, nos envejece, era un disparo por la espalda a las gentes como Vittorini, primero, y Sciascia y Bufalino luego, y hasta para el creador del chulo aburrido de El bello Antonio,de Brancati, profesor de instituto en Catalnissetta, el culo del mundo de no ser porque tenía de alumno a Leonardo Sciascia. Un magistral disparo por la espalda, irrepetible en su diana perfecta. Y lo sabía, vaya si lo sabía el amable y distante Lampedusa. Lo dijo sin decirlo, a la manera siciliana, ese modo que describía el gran Verga, un siciliano forzado, que los sufría en cada línea. Se desesperaba Verga, el gran autor de Los Malavoglia,que tradujo en España por Los Malasangre Cipriano Rivas Cherif, cuñado de Manuel Azaña. Contaba Verga que las clases aristocráticas sicilianas, las de Catania que eran las que mejor conocía, constituían una tortura para un escritor: “Nunca dicen lo que quieren decir, y si lo dicen es de una manera diferente; si están arruinados, afirmarán que les duele la cabeza. Pero ellos no podrán decir que les duele la cabeza, sino que tienen migrañas”. ¡Migrañas! La larga evolución del retorcimiento semántico desde la ruina económica a la jaqueca.
Bien, pues eso lo resumía sin apenas darse cuenta Lampedusa ante una novela trascendental de la literatura siciliana, Los Virreyes,de Federico De Roberto - hay traducción española de este monumento gracias a Mario Muchnick; quizá esté hoy descatalogado, como casi todo-, la crónica de los Uzeda, señores de Sicilia, desde los Borbones a la monarquía parlamentaria, pasando por Garibaldi. ¿Saben cómo la resumió ese canallita de palabra afilada, que parecía no matar una mosca, en Sicilia, donde las moscas debe ser el único animal protegido? “Es la crónica de unos señores, contada por el criado”. Entiendan entonces que se dieran por aludidos todos aquellos sicilianos que sentían en su cogote el aliento fétido de esa alta burguesía palermitana, de raíz española, que fotografió con la precisión de un buril Letizia Battaglia, la fotógrafa de la mafia aristocrática del sarao y del crimen.
Las dos Sicilias. No aquellas que decían los reyes y nobles españoles para referirse al reino, que sumaba también Nápoles, y definían con grandilocuente pereza De las Dos Sicilias, sino las dos Sicilias reales, vivas, contrarias, volcánicas. No creo que haya otro lugar del planeta donde haya tal cantidad de magníficos escritores - si fuera sólo de escritores, sin adjetivar, yo propondría Catalunya- que cubren toda la gama, distintos e imposibles de amalgamar. Aquí, que somos tan dados a la taxonomía generacional, los catedráticos de universidad tendrían que trabajar mucho, porque lo gregario alivia y lo individual excita. Cada siciliano es una isla, escribió Sciascia. La Sicilia creadora y la Sicilia atávica, la del talento y la del asesinato. La de la belleza y la de la sangre. Todos los reclutas de la identidad están obligados a visitar Sicilia, la única literatura que conozco que tiene el secreto del prodigio, la mezcla alquimística de escribir desde lo suyo hacia todo lo demás; con dos premios Nobel tan dispares y sicilianos como Pirandello y Salvatore Quasimodo. Dos Sicilias que viven encontradas, desgarradas también. Por eso he decidido empezar por la literatura, porque todo está en la literatura y lo que no está es quizá porque no merezca la pena.
Dos Sicilias. Me reconozco apasionado de Pirandello. Su lectura enladrilló mi adolescencia hasta el punto de que hay personajes que aún pienso si los leí en él o eran de la familia buscando aún al autor. Entre los sueños de mi vida estuvo preparar una versión de los Seis personajes… que probablemente no tendré oportunidad de hacer nunca y que quedará ahí como otra invención pirandelliana. Pero voy a otra cosa. Fue ahora, preparando y asimilando este viaje tardío a las dos Sicilias, cuando gracias a Andrea Camilleri, otro siciliano, me enteré de que el maestro Pirandello se había casado en 1894 con una mujer a la que apenas conocía - “en mes y medio me han dejado ver a la prometida dos veces”-. Un matrimonio pactado, por dinero, entre don Stefano Pirandello y don Calogero Portolano, padres de los cónyuges. En él, el más internacional de los dramaturgos, estaban las dos Sicilias, la de la creación y la atávica.
Gesualdo Bufalino, un tipo raro que llegó tarde a todo, incluida la literatura, en la que alcanzó el magisterio casi póstumo, dejó escrito: “Es cierto que la Sicilia son muchas y que nunca acabaré de contarlas todas”. Murió sin terminar de numerarlas, en un accidente de automóvil. Como conductor también era tardío.
La próstata de Bernardo Provenzano/
Gregorio Morán
LA VANGUARDIA, 08/03/2008;
Para averiguar la trascendencia de una próstata mafiosa es menester un viaje tortuoso. Empezar, apenas se aterriza en Sicilia, enfilando la autovía que lleva a Palermo. En el lateral de entrada encontrará una especie de monolito alado que recuerda una voladura histórica. Es el lugar donde asesinaron, el 23 de mayo de 1992, con suficiente explosivo como para mover una montaña, al juez antimafia Giovanni Falcone, a su esposa y a tres guardaespaldas honorables. Si va usted en taxi le sugiero que pregunte, por más que le harán repetir la pregunta un par de veces como si no le hubieran entendido. Cuando el taxista le responda indicándole el lugar del atentado, ese es el momento en que tiene que insistir para conseguir la respuesta del millón: “¿Y dónde estaba Brusca?”. Porque esta historia, sin Giovanni Brusca, sería imposible. (Guardo diferentes retratos de Brusca, uno de los ejecutores más crueles de la historia de la mafia; hoy convertido en un renegado colaborador de la justicia, pero ayer capaz de disolver en ácido a los parientes de sus adversarios, niños incluidos.) El taxista, impávido, le señalará, con un gesto de distanciamiento, hacia un pequeño edificio de una sola planta recientemente encalado, una especie de depósito donde Brusca, el jefe de sicarios, recibió la señal a partir de la cual los coches del juez Falcone y sus policías acababan de pasar la última curva e iban hacia el cadalso. Y pulsó el mando a distancia.
El mando a distancia. Esa es la razón por la que saltamos de la autovía que lleva a Palermo desde el aeropuerto, hasta Mesina, en el extremo oriental de Sicilia, pero conviene detenerse 30 kilómetros antes, en una población de nombre para nosotros llamativo, Barcellona Pozzo di Gotto. Lo de Barcellona le viene, aseguran, de los catalanes del siglo XVI, y Pozzo di Gotto, de una aldehuela; se juntaron y quedó Barcellona Pozzo di Gotto, una población que cuando tenía 60.000 habitantes, tal que ayer, gozaba de singularidades tan propias como disponer de cien iglesias y seiscientos abogados. Sicilia es uno de los lugares donde menos se respeta la ley pero la paradoja la convierte en un auténtico hormiguero de letrados. Y es que buena parte de ellos están para eso, para garantizar legalmente la vulneración de la ley. La fina ironía siciliana, poco dada al sarcasmo pero muy aguda, concede a Barcellona Pozzo di Gotto tres historias llamativas. La del heladero que ganó un concurso mundial de helados que se celebra en Las Vegas, Estados Unidos; conseguir que una señorita de la ciudad alcanzara el estrellato de Miss Italia, cosa imposible sin la mafia; y, sobre todo, entrar en el cómputo del lugar más discreto y notable de Cosa Nostra cuando se supo que el mando a distancia que manejó Brusca y que voló a Falcone y a los suyos, procedía de la ciudad.
Aquí nació Attilio Manca, protagonista principal, aunque demorado, de nuestra historia. Un muchacho de familia asentada, padres profesores, que se dedicó a la medicina y que se convirtió con veintitantos años en un cirujano urólogo excepcional, por su formación, sus conocimientos y su edad. Estudió en Roma y París, y se instaló en la romana Viterbo. Un siciliano egregio que gustaba de volver a casa con frecuencia; hacia la madre, los amigos y las viejas amistades. Para quienes le trataron fue un tipo de excepción, culto, sensible, atractivo, soltero sin demasiadas ganas de dejar de serlo. Pero la vida es un sorteo y como a casi nadie le toca nada que no sea volver a jugar, los amigos de Attilio Manca, como media Barcellona Pozzo di Gotto, viven colaborando con la mafia. Y la mafia en la época que le tocó vivir a Attilio Manca, tenía un nombre. Bernardo Provenzano.
Hasta su reciente detención, en abril del 2006, Provenzano llevaba viviendo en clandestinidad 43 años. Culturalmente, sabemos que su fundamental fuente de saber era la Biblia; por lo demás, se trataba de un semianalfabeto, capo mafioso, responsable de innumerables crímenes y de todos los tráficos posibles; tráfico de droga, extorsiones y las dos actividades que más fondos reportan a la mafia: las obras públicas y la sanidad. La profesión médica es una fuente hasta ahora inagotable de fondos y colaboraciones mafiosas. (La historia de jefes mafiosos, y al tiempo médicos ejercientes, es amplia en Sicilia.) Pero ya fuera porque desconfiara del ilustre gremio del juramento hipocrático, ya fuera porque prefería las clínicas francesas, Provenzano se hizo operar en Aubagne, cerca de Marsella, población famosa por dos instituciones muy francesas y muy del espectáculo, la Legión y Marcel Pagnol. Gracias a la familia mafiosa que se ocupó del asunto, ahora convertida en colaboradora de la justicia, sabemos casi todo de la enfermedad de Provenzano. La próstata, la maldita próstata.
Esa era la especialidad de Attilio Manca y por más que haya múltiples sospechas y ninguna prueba, debió de ser requerido por alguno de sus amigos de la adolescencia, que incluía parientes cuya colaboración con la mafia está probada. Se tiene constancia de que, coincidiendo con el internamiento clínico del capo Bernardo Provenzano en la clínica La Casamance, Attilio Manca telefoneó a su madre, nervioso, excitadísimo, con toda probabilidad consciente de que debía hacer algo, supervisar quizá la intervención quirúrgica, que le podía costar la vida. Nadie tiene de paciente a un jefe mafioso que no pueda garantizar la fidelidad o la muerte. Lo cierto es que desde aquellas fechas fatídicas, Attilio Manca, que no era más que un cirujano con mucho futuro y escaso presente, se convirtió en un tipo esquivo y críptico en sus frases de doble sentido. Lo encontraron una mañana, en su apartamento de Viterbo, muerto por sobredosis de heroína, y con la evidencia de que la casa había pasado antes por un concienzudo limpiado de armarios y pertenencias. Sólo cometieron un error sustancial. El pinchazo de caballo estaba en el brazo izquierdo, y Attilio era zurdo.
En principio sus padres asumieron la catástrofe con esa resignación de quien no entiende nada pero sabe lo suficiente del destino como para conocer su condición de ciego, pero luego, conforme descubrieron algunos detalles, iniciaron una campaña, que aún prosigue, para saber la verdad sobre el homicidio de su hijo. Y entonces ocurrió algo muy significativo en Barcellona Pozzo di Gotto, y es que mientras había que dar el pésame por un hijo drogadicto, todo el mundo se mostraba amable y comprensivo, pero cuando el fantasma de la mafia apareció en el horizonte todo cambió y los amigos solidarios desaparecieron, por más que aparecieran otros, y las autoridades se mostraron esquivas y los jueces temerosos y nada diligentes. Empezó el aislamiento y las amenazas.
Y aquella ciudad modesta, con una burguesía pródiga en bienes, concentró la atención de muchos que hasta entonces no le habían prestado la suficiente importancia. La muerte de Attilio Manca echó sobre ellos una mirada que siempre había pasado de largo, y descubrió que era uno de los centros más importantes de la Sicilia mafiosa y que la discreción que compartía con el capo di capi Bernardo Provenzano podía consentir esa acumulación sorprendente de capitales, sin producción alguna y con grandes excedentes monetarios. Y todo lo que había empezado por el mando a distancia que había manejado Brusca y que se tradujo en el asesinato del juez Falcone y sus acompañantes, había sido decidido por Provenzano, quién sabe si en la propia Barcellona Pozzo di Gotto. La desasosegante historia del cirujano Attilio Manca y de su muerte, y muchas cosas más, están contadas con algunos pelos y muchas señales en un libro estremecedor que acaba de aparecer en castellano, El enigma siciliano de Attilio Manca (Editorial Cahoba), obra de un gran conocedor de Sicilia y de la mafia, el catalán de Barcelona sin Pozzo di Gotto Joan Queralt. Allí puede leerse esta reflexión de brutal actualidad: “No es fácil ser pariente de una víctima de la mafia, porque el coraje conduce a la soledad”.

Elio Spitzer




Revelación de diario The New York Times.
El gobernador de Nueva York, casado y padre de tres niños involucrado en un escándalo de prostitución
Eliot Spitzer no reconoce su participación en el caso, pero pide disculpas a su familia y a los neoyorquinos: "He actuado de una forma que viola mi obligación hacia mi familia y viola mi sentido, así como cualquier sentido, de lo correcto o lo incorrecto", ha dicho Spitzer, quien apareció acompañado de su esposa Silda, en su oficina de Manhattan.
"Pido disculpas en primer lugar, y el más importante, a mi familia. Pido disculpas al público a quien prometí hacerlo mejor. He decepcionado y fracasado en estar a la altura de los estándares que se esperaban de mí. Ahora debo dedicar algún tiempo a recuperar la confianza de mi familia".
El gobernador demócrata se enteró de que había sido implicado en la investigación sobre la red de prostitución cuando un funcionario federal contactó a su personal el viernes pasado, según la fuente citada por el NYT.
El gobernador, fue electo en 2006 y en funciones desde 2007,
Las autoridades de Nueva York anunciaron el viernes pasado el desmantelamiento de una red de prostitución internacional que hacía pagar hasta 5,500 dólares por una hora de servicios.
Cuatro personas permanecen detenidas.
Ya los los republicanos del estado amenazan con iniciar un proceso de 'impeachment' si no renuncia al cargo, algo que podría ocurrir en las próximas horas.
La posibilidad de que tuviera que enfrentarse a cargos por su implicación en el escándalo ha elevado la presión sobre Spitzer, que durante sus años como fiscal general del estado alcanzó fama por sus intervenciones contra 'peces gordos' de Wall Street acusados de irregularidades.
"Si no renuncia en las próximas 24 o 48 horas, prepararemos el 'impeachment' para destituirlo", dijo James Tedisco, líder de la minoría republicana en la Asamblea de Nueva York.
Según informa la edición digital de 'The Wall Street Journal', el gobernador podría dimitir este mismo martes.

Golpe a las FARC

La revista SEMANA No 1349, 03/08/2008, señala que:
La manera como murió Iván Ríos mostraría que la guerrilla se está quebrando moralmente.
Lo que no esperaban era que su propio jefe de seguridad lo matara mientras dormía, le cortara una mano y se presentara con ella ante el Ejército tres días después....,
Quedan preguntas Aún no se sabe muy bien qué estaba pasando en el campamento de los guerrilleros en estos días. Lo único que 'Rojas' ha dicho, según las autoridades, es que la muerte de Raúl Reyes, en un bombardeo sobre su campamento en Ecuador, lo quebró tanto sicológicamente, que el martes pasado decidió matar a su jefe, Iván Ríos, y entregarse al Ejército.
Lo que los militares han informado es que el jueves en la noche llegó hasta un puesto militar, con un fusil al hombro y dos pistolas al cinto, con un computador portátil, un pasaporte y con la mano derecha de Iván Ríos como prueba de que le había dado muerte.
Quedan por responder algunos interrogantes de cómo y por qué lo hizo. Por ejemplo:
¿Son suficientes tres semanas de presión militar para que se quiebre de tal manera un guerrillero de 15 años de militancia en las Farc?
¿Cómo disparó su arma sin que el Ejército lo detectara?
¿Por qué si estaba cercado, se tomó dos días en acercarse a las tropas?
¿Qué pasó con los otros guerrilleros que estaban en el campamento?
¿Por qué o para qué decide cortarle la mano a su jefe?
¿Por qué considera que tiene que llevar esa prueba?
Punto de inflexión
Con la muerte de Raúl Reyes se rompió el mito de que las Farc eran invencibles. Ahora, con la muerte de Iván Ríos, muchos se atreven a decir que ha llegado un punto de quiebre de la guerra.
Hace tres años el profesor Eduardo Pizarro había pronosticado en su libro Una democracia asediada, que el punto de inflexión llegaría por la superioridad de las Fuerzas Militares y, sobre todo, por los errores políticos de las Farc y su tendencia a criminalizarse. Al parecer, no se equivocó. La guerrilla pregonaba hasta hace poco tiempo que a pesar de la ofensiva militar del gobierno y de los miles de millones que se invierten en ella, su estructura estaba intacta. Pero los últimos meses eso ha cambiado. Las Farc están mucho más debilitadas de lo que ellas mismas piensan.
Hace por lo menos 10 meses ha empezado a quedar claro que uno de los problemas más graves que enfrentan las Farc es el de comando y control. Las fracturas internas, como la que posiblemente ocasionó la muerte de los 11 diputados del Valle; deserciones de mandos medios y masivas, como las que han ocurrido en Vichada; la sensación de que están infiltrados o permanentemente monitoreados, como ha ocurrido en los golpes a sus principales jefes; los errores garrafales que les han costado caro, como la pérdida de Emmanuel y de las pruebas de vida de Íngrid y los demás secuestrados, muestran ya no a una organización monolítica, sino caótica y fracturada.
Pero de todos estos hechos, el más significativo es que un hombre del Secretariado sea asesinado por uno de sus propios guerrilleros. Porque demuestra ya no sólo una fractura en el comando y en el control que tienen los jefes sobre sus propias tropas, sino que adentro se ha perdido el horizonte de la victoria. Y ese es siempre el principio del fin de una organización armada.
Si las Farc han sobrevivido durante cuatro décadas no es por el dinero, sino por el mito que encarna 'Tirofijo'. Manuel Marulanda encarna la leyenda de que las Farc son invencibles. Varias generaciones de guerrilleros han crecido a su lado convencidas de que los gobiernos pasan, pero las Farc siguen. De que los golpes nunca llegaban al corazón. De que cada vez que eran atacados, podían volver a replegarse y sobrevivir. Y esa sensación de invulnerabilidad se convirtió en la principal fortaleza de esta guerrilla. Si en el transcurso de los próximos días se ratifica la manera como se produjo el asesinato de Ríos, habría que hablar de una herida en la siquis de las Farc. Y este es el tipo de heridas del que es difícil recuperarse. Después de un episodio como éste, suelen venir purgas internas, mayor desconfianza, inconformismo y, como en todo círculo vicioso, más deserciones, nuevas traiciones y un mayor debilitamiento. En la guerra, la victoria consiste en quebrar la voluntad de lucha del enemigo. El momento de ese quiebre parece haber llegado en las Farc.
¿Está cerca el fin de la guerra? Es difícil saberlo. Lo deseable es que la actual correlación de fuerzas conduzca a un escenario de negociación que termine en un pacto de paz. Pero también existe la posibilidad de que el conflicto arrecie más en un intento de las Farc por mostrarse fuertes. A pesar de que su violencia no sea sino otra prueba de debilidad. Semana.com ©2000.

Más información en la computadora incautada

Los secretos del PC de Reyes/ revista colombiana SEMANA
La información que guardaba Raúl Reyes en su computador es cada vez más sorprendente. A medida que las autoridades han logrado descifrar sus tres portátiles, surgen comprometedoras evidencias de las relaciones de las Farc con Ecuador, Venezuela y traficantes de armas y drogas.
16 cartas más.
Las Farc y el narcotráfico
Hace un año, Jorge Briceño, alias ‘Mono Jojoy’, le dice a Raúl Reyes que él tiene guardado el dinero del narcotraficante de Buenaventura Jorge Asprilla Perea, condenado en febrero de 2007 a 30 años de cárcel por un juez de Nueva York.
Marzo 22 de 2007
Camarada Raúl.
Lo saludo cordialmente.
...El dinero es una parte del que le tengo guardado a Asprilla, el negro que extraditaron para Estados Unidos. Eso indica que no le vamos a devolver los dólares y que esa plata es de las Farc. ...La mayoría con los que tenemos acuerdos económicos intentan siempre tumbarnos. Les va nuestro abrazo.
Jorge (‘Mono Jojoy‘)
Todos los documentos
http://www.semana.com/wf_InfoArticulo.aspx?idArt=110107

The FARCs Guardian Angel

The FARC’s Guardian Angel/By Jackson Diehl
THE WASHINGTON POST, 10/03/08;
Latin American nations and the Bush administration spent the past week loudly arguing over what censure, if any, Colombia should face for a bombing raid that killed one of the top leaders of the FARC terrorist group at a jungle camp in Ecuador. More quietly, they are just beginning to consider a far more serious and potentially explosive question: What to do about the revelation that Venezuelan President Hugo Chávez forged a strategic alliance with the FARC aimed at Colombia’s democratic government.
First reports of the documents recovered from laptops at the FARC camp spoke of promises by Chávez to deliver up to $300 million to a group renowned for kidnapping, drug trafficking and massacres of civilians; they also showed that Ecuadoran President Rafael Correa was prepared to remove from his own army officers who objected to the FARC’s Ecuadoran bases.
But in their totality, the hundreds of pages of documents so far made public by Colombia paint an even more chilling picture. The raid appears to have preempted a breathtakingly ambitious “strategic plan” agreed on by Chávez and the FARC with the initial goal of gaining international recognition for a movement designated a terrorist organization by both the United States and Europe. Chávez then intended to force Colombian President Álvaro Uribe to negotiate a political settlement with the FARC, and to promote a candidate allied with Chávez and the FARC to take power from Uribe.
All this is laid out in a series of three e-mails sent in February to the FARC’s top leaders by Iván Márquez and Rodrigo Granda, envoys who held a series of secret meetings with Chávez. Judging from the memos, Chávez did most of the talking: He outlined a five-stage plan for undermining Uribe’s government, beginning with the release of several of the scores of hostages the FARC is holding.
The first e-mail, dated Feb. 8, discusses the money: It says that Chávez, whom they call “angel,” “has the first 50 [million] available and has a plan to get us the remaining 200 in the course of the year.” Chávez proposed sending the first “packet” of money “through the black market in order to avoid problems.” He said more could be arranged by giving the FARC a quota of petroleum to sell abroad or gasoline to retail in Colombia or Venezuela.
Chávez then got to the plans that most interested him. He wanted the FARC to propose collecting all of its hostages in the open, possibly in Venezuela, for a proposed exchange for 500 FARC prisoners in Colombian jails. Chávez said he would travel to the area for a meeting with the FARC’s top leader, Manuel Marulanda, and said the presidents of Ecuador, Nicaragua and Bolivia would accompany him. Meanwhile, Chávez said he would set up a new diplomatic group, composed of those countries and the FARC, plus Mexico, Brazil and Argentina, for the purpose of recognizing the FARC as a legitimate “belligerent” in Colombia and forcing Uribe into releasing its prisoners.
In “the early morning hours,” the FARC envoys recounted in a Feb. 9 e-mail, Chávez reached the subject of whether the release of Ingrid Betancourt, a former Colombian presidential candidate who is the FARC’s best-known hostage, would complicate his plan to back a pro-FARC alternative to Uribe. “He invites the FARC to participate in a few sessions of analysis he has laid out for following the Colombian political situation,” the e-mail concluded.
Assuming these documents are authentic — and it’s hard to believe that the cerebral and calculating Uribe would knowingly hand over forgeries to the world media and the Organization of American States — both the Bush administration and Latin American governments will have fateful decisions to make about Chávez. His reported actions are, first of all, a violation of U.N. Security Council Resolution 1373, passed in September 2001, which prohibits all states from providing financing or havens to terrorist organizations. More directly, the Colombian evidence would be more than enough to justify a State Department decision to cite Venezuela as a state sponsor of terrorism. Once cited, Venezuela would be subject to a number of automatic sanctions, some of which could complicate its continuing export of oil to the United States. A cutoff would temporarily inconvenience Americans — and cripple Venezuela, which could have trouble selling its heavy oil in other markets.
For now, the Bush administration appears anxious to avoid this kind of confrontation. U.S. intelligence agencies are analyzing the Colombian evidence; officials say they will share any conclusions with key Latin American governments. Yet those governments have mostly shrunk from confronting Chávez in the past, and some have quietly urged Bush to take him on. If the president decides to ignore clear evidence that Venezuela has funded and conspired with an officially designated terrorist organization, he will flout what has been his first principle since Sept. 11, 2001.

Entrevista a Pablo Montoya Alias Rojas


José Antonio Sánchez entrevista en exclusiva a Alias 'Rojas' (cuyo verdadero nombre es Pablo Montoya), para el periódico:
El Tiempo, Marzo 10 de 2008 on line,
EL TIEMPO: -Usted cree que se van a presentar otros casos de guerrilleros que entreguen a sus jefes?
Alias 'Rojas': -Yo estoy seguro de eso, hermano. Estoy seguro el ciento por ciento, porque le ha cambiado la historia a las Farc, las Farc se han partido en dos en este momento, es que es real. Yo sé que muchos jefes están pensando eso de los subalternos y muchos guerrilleros están pensando eso de los jefes.
Lo que sigue para las Farc
-Y después de Jojoy, quién cae?
-El que no quiera continuar con el plan de reinserción. Yo soy real, porque ya estoy aquí y soy una persona que analizo y entiendo.
-Está el fin de las Farc cerca, o qué va a pasar?
-Hombre, creo que es el momento... por eso le estamos diciendo a las Farc: ya!, ya!
-Por qué se ha partido la historia de las Farc en dos?
-
Porque han sucedido dos hechos que en la historia de Colombia, en 60 años de guerra, no habían sucedido: la muerte de 'Reyes' y la muerte de 'Iván'.
Lo asesinó por "desconfianza"
-Cuánto tiempo llevaba usted con 'Iván Ríos'?
-Cuatro meses.
-Quién lo mandó a cuidarlo?
-Nadie. Él me recogió.
-No lo envió 'Karina', la guerrillera?
-
No, eso es negativo.
-Pero en la guerrilla hay órdenes y se deben obedecer, quién le dio la orden de cuidarlo?
-No, a mí nadie me dijo, ni él mismo me dijo: 'usted va a ser jefe de seguridad mío'.
-Entonces, cómo fue?
-Me dice que me quede con él y la información que tengo es que me pensaba hacer consejo de guerra y me iba a matar.
-Por qué?
-Por ser yo supuestamente un enemigo.
-Cómo era 'Iván Ríos?
-Creo que era un radical.
-Cómo empezó él a desconfiar de usted?
-No lo puedo entender.
-Los castigaba?
-
Creo que con sus expresiones siempre ofendía.
-Qué ofensa recuerda más? ¿Cuál lo mortificó más?
-Siendo oficial de servicio no le mandé el tinto y me dio a entender que si lo blanqueaba de desayuno ya sabía qué me pasaba.
-Qué le podía pasar?
-
No, será que me mochaba la cabeza como estaba planeado.
-Él tenía planeado mocharle la cabeza a usted?
-Posiblemente.
-En qué falló 'Iván Ríos'?
-Falla porque va y se me asoma muy ofuscado y me dice: 'Me dejó blanquear de tinto, ahora me deja blanquear de desayuno y ya sabe qué le pasa'.
-El le expresó que le iba a hacer un consejo de guerra?
-
No, por su actitud y de pronto por la vigilancia que uno veķa...como ciertos celos.
-Cuando usted ve esa desconfianza, ¿qué empieza a pensar y maquinar?
-
Sucedió lo que sucedió para poder salvar mi vida, primero que todo, y la presión que ejercía la Octava Brigada contra nosotros también. Un bloqueo económico total, el hostigamiento de la Fuerza Aérea, todo lo que uno estaba viendo, me llevó a tomar la decisión y especialmente para salvar la vida de mi compańera y otro compańero más.
-Cuando usted se da cuenta que 'Iván Ríos' lo quiere matar, entra en contacto con el Ejército?
-No, porque yo tomé mi decisión solo. Ya cuando al ver como eran las cosas y lo que veía de la presión que se venía encima y que cada día mįá se incrementaba, tocó tomar la decisión.
-Así mató a 'Ríos'

-Cómo planeó el crimen? æCómo ocurrieron los hechos?
-No, yo nunca planee nada, nunca... lo hice por mi defensa propia.
-Pero, ¿cómo lo hizo?
-
No creo necesario dar detalles, porque no....
-Pero lo hizo con otros compańeros o cómo fue?
-No, yo tomé mi decisión solo para salvar mi vida y salvar la de otros dos.
-Usted les dijo a los demás compańeros de la guerrilla muévanse hacia tal sector que yo me encargo de 'Iván Ríos'?
-
Eso fue algo que tomé la decisión y cuando el hecho dije, nos vamos.
-El lugar del crimen es una cueva?
-No, un campamento normal en el monte.
-Estaban los dos solos?
-
No, con toda la tropa.
-Y los otros no reaccionaron en contra suya?
-
No, yo les dije que se abrieran (se fueran) porque sabían que existía la presión de la tropa hacia nosotros y eso podía suceder un bombardeo o podía suceder un asalto. Entonces, cada uno salió y yo salí a presentarme a la tropa que estaba más cercana.
-Qué le dijo usted a 'Iván Ríos' cuando le estaba apuntando?
-
No, yo no dije nada. Bueno, dejemos así.
-Qué le dijo 'Iván Ríos' antes de morir?
-
Bueno, dejemos así.
-Por qué toma la decisión de cortarle la mano y con qué le corta la mano?
-
No hablemos de eso.
-Por qué no se quiere referir a esos detalles?
-
No es necesario, no quiero que hablemos de eso.
-La baja de 'Raúl Reyes' lo estimula más para asesinar a 'Iván Ríos'?
-
Hombre, si queremos cambiarle la cara a Colombia, tienen que suceder todos estos casos hasta que de verdad entiendan y creo que en las Farc es el momento que entiendan que ya ese capítulo ha terminado.
-¿Cómo podría usted ayudar para que el Ejército capture o dé de baja a 'Karina'?
-Yo, primero que todo, no quiero que muera mįs gente. Todo el mundo tenemos derecho a la vida, por eso le hago un llamado a todos los integrantes de las Farc, especialmente al 47 Frente, al Jacobo Arenas y al Noveno Frente...
-En el caso de 'Karina', le digo: entréguese, busque, mande, no vaya ella, mande otro pelado o pelada que vaya donde el coronel tal o el teniente tal. Si le toca vaya por un cura, pero yo sé que le damos todas las garantías. Yo me encargo de recogerla donde ella diga.
Entró a las Farc por decisión propia
-Todos los conocemos como 'Rojas', ¿cuál es su verdadero nombre?
-Rojas. Alias Rojas.
-Cuánto tiempo llevaba en las Farc?
-16 ańos.
-Cómo entró?
-
Pedí ingreso.
-A qué se dedicaba antes?
-
A las labores campesinas.
-A quién le pidió ingreso?
-
Al frente 47.
-Cómo se ganó la confianza de los jefes al punto de convertirse en el jefe de seguridad de Iván Ríos?
No, creo que con...cómo se dice....
...disciplina, paciencia, trabajo?
...No, ser subordinado. Correcto, ser un hombre disciplinado.
-'Rojas', ¿usted cree que le deben pagar la recompensa de los 5 mil millones?
-
Creo que sí, porque es una política del Estado y yo lo creo a Uribe. Le creo al ministro de Defensa Juan Manuel Santos y le creo al general Montoya y a todos los generales de la República.
-Le teme a la venganza de las Farc?
-
Soy claro de eso y sé que la represalia contra 'Rojas' va a ser mucho más que contra el mismo presidente Uribe.
-Qué pide para que esa venganza no se vaya a concretar?
-
Pido la protección, que es un deber del Estado y un derecho que tengo que reclamar.
JOSÉ ANTONIO SáNCHEZ
Redacción EL Tiempo,

Peruanos y las FARC


El informe del domingo
PENETRACIÓN BOLIVIANA
Acusan de terrorismo a 24 vinculados con chavismo
Según la policía, algunos ex terroristas del MRTA que integran la Coordinadora Continental Bolivariana habrían recibido entrenamiento de las FARC y financiamiento de Venezuela" Por Óscar Castilla C. / Nelly Luna Amancio, reporteros.
El Comercio de Perú, 9/03/2008;
Han pasado cuatro años, pero 'Archi', como lo conocían en los predios judiciales, aún es recordado por su sonrisa pretenciosa. Entonces, durante las primeras semanas del 2004, estaba tras las rejas recordando en juicio público su participación en el secuestro del ex ministro y empresario boliviano Samuel Doria Medina en La Paz, hace nueve años. Ese 1 de noviembre de 1995, Roque Gonzales La Rosa, ex militante aprista e integrante del MRTA, cerró con una camioneta Cherokee al auto del hombre de negocios mientras que un grupo de encapuchados armados con FAL lo secuestró.
Tenía 24 años cuando inauguró su prontuario policial, según el expediente 51-96 de los juzgados antiterroristas. Por estos hechos el confeso subversivo y estudiante de sociología fue detenido y encarcelado desde 1996 hasta mediados del 2004 cuando, luego de ser condenado a 15 años de prisión, ganó la calle gracias al beneficio de la libertad condicional. Vivía entonces junto a su pareja, Damaris Velasco Huiza (32), en la modesta casa de su madre ubicada en Comas, donde esporádicamente apoyaba en los trabajos de carpintería de su hermano mayor.
COORDINADORA BOLIVARIANA
Apenas dos años después, su vida cambió. En febrero del 2006 alquiló una oficina en el jirón Camaná 631 e inauguró la sucursal peruana de una organización extranjera apenas conocida en el Perú, pero que resonaba entre los agentes de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote) y de la Dirección de Inteligencia de la Policía (Dirin): la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB). Cuando esto ocurrió, dicho colectivo -que agrupa a diferentes movimientos terroristas como las FARC y el MRTA y a radicales de izquierda en la región--, impulsado y financiado por Hugo Chávez, ya tenía dos años de existencia.
Según fuentes de inteligencia, esta organización --que tiene como presidentes honorarios a Manuel Marulanda (jefe de las FARC) y a Víctor Polay (cabecilla del MRTA preso)-- es el brazo político y militar de la llamada revolución bolivariana que pregona el comandante Hugo Chávez y que busca exportar a toda Latinoamérica. En Lima, Roque Gonzales preside el capítulo Perú de la CCB.
En el país, esta coordinadora ha generado una inusitada aglomeración de agrupaciones políticas vinculadas tradicionalmente a la izquierda. Organizaciones antes irreconciliables como el Movimiento Nueva Izquierda (MNI), Patria Roja, el Partido Socialista, e incluso grupos terroristas como el MRTA, sesionan ahora juntos en marchas y congresos. Lo mismo ocurre con agrupaciones más jóvenes como el Partido Nacionalista (PN) de Ollanta Humala, cuyas autoridades elegidas --entre alcaldes, regidores y presidentes regionales-- participan activamente en la formación de las denominadas casas del ALBA.
ACUSADOS POR TERRORISMO
Pero, de todos estos grupos hay uno que sobresale en las investigaciones policiales. Se trata del colectivo Todas las voces, encabezado por Guillermo Bermejo (32), Luis Paredes Morales (27) y Giancarlo Trinidad Abarca (26). Todos ellos se encuentran acusados por sus presuntos nexos con organizaciones subversivas extranjeras y por recibir financiamiento foráneo para cometer atentados terroristas entre el 2007 y el 2008.
La historia de sus problemas con la policía empezó el 29 de diciembre del 2006 cuando la Dircote capturó a Bermejo Rojas y a Paredes Morales por su supuesta participación en un atentado contra la casa del embajador de Estados Unidos. Dichas detenciones provocaron gran revuelo en su momento porque la policía no sustentó las mismas adecuadamente y los dejó libres. Un año después --y mientras la atención está centrada en Roque Gonzales La Rosa (detenido en los calabozos de la Dircote)-- El Comercio ubicó el atestado 001 -2008 elaborado por la División de Terrorismo Internacional de la policía en contra de nueve integrantes del movimiento Todas las voces (cuatro de ellos de entre 18 y 21 años).
Dicho documento fue validado por la fiscalía y viene siendo evaluado por Omar Pimentel, titular del Segundo Juzgado Supraprovincial. Diversas fuentes informaron que existe gran presión de parte de la Procuraduría Antiterrorista y de la Dircote para que se les abra proceso a los nueve inculpados. Revelaron también que dicho atestado está tipificado por el delito de terrorismo, cuando lo ideal hubiera sido que se consignara por los delitos "de actos preparatorios para acciones subversivas o financiamiento nacional o extranjero para realización de atentados terroristas". Sin embargo, estos últimos no están contemplados en la legislación peruana, por lo que recomendaron modificar la normativa antiterrorista.
¿Pero qué dice el atestado antes citado?
En resumen --y aquí lo alarmante-- se menciona que Bermejo Rojas y Paredes Morales recibieron adiestramiento militar en campamentos de las FARC entre febrero y mayo del 2006 y que fueron acompañados por el ex emerretista Roque Gonzales. Según la Dircote ellos viajaron por tierra hasta Aguas Verdes (Tumbes), ingresaron a Ecuador y luego habrían llegado a Colombia. En los reportes migratorios, sin embargo, no aparece el nombre de Roque Gonzales con viajes a Ecuador o Colombia por aquellos días. Los inculpados negaron esto, pero sí admitieron haber recibido dinero del Gobierno Venezolano para viajar a dicho país y asistir a un encuentro político.
La Dircote acusa también a Bermejo, Paredes y a Trinidad Abarca de obtener un saco de úrea, fertilizante utilizado en la agricultura, para someterlo a un proceso artesanal de destilación y utilizarlo como un explosivo en el atentado contra la casa de embajador de Estados Unidos. Esta técnica la habrían aprendido en su adiestramiento con las FARC. La policía también encontró en la agenda de Trinidad Abarca los nombres, teléfonos y correos electrónicos de personas de nacionalidad colombiana, ecuatoriana y venezolana, como Virly Torres (entusiasta funcionaria de la embajada de Venezuela que promueve la CCB en el país) y a un sujeto conocido como Valentín, concejal de Táchira.
QUIEREN FUERZA MILITAR
La Dircote está elaborando otro atestado luego de que el juez penal de Zarumilla (Tumbes), Augusto Falla, ordenara hace una semana la detención de 15 personas por ser integrantes del capítulo Perú de la CCB, algunos de ellos ex integrantes del MRTA. La Policía, sin embargo, solo logró detener a siete de ellos, Roque Gonzales y su pareja Damaris Velasco, entre otros, que asistieron a fines de febrero al II Congreso que realizó en Quito la CCB. Todos son acusados de "convocar a organizaciones subversivas con la finalidad de adiestrar militarmente a jóvenes en los campamentos de las FARC", dice el parte N° 077-2008-Dircote-Diviti que se elaboró para justificar las detenciones.
Basta con leer una de las conclusiones del congreso de la CCB para entender que más que un movimiento estrictamente político, la coordinadora aspira a una movilización subversiva: "en los (países) que existen fuerzas civiles insurgentes hay que potenciarlas y desarrollarlas para contribuir al viraje y garantizar la defensa frente a las fuerzas intervencionistas del imperialismo... (y realizar) contraofensivas electorales, protestas sociales, huelgas, paros, cortes de ruta, acciones de desobediencia civil, movilizaciones, jornadas cívicas coordinadas en todo el continente", sostienen para luego concluir que es necesario "acumular fuerzas políticas y militares antiimperialistas".
ENEMIGOS ÍNTIMOS
Sin embargo, la iniciativa de corte militar de la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB) y su sucursal en el Perú, considerada como el brazo militar de la penetración chavista en nuestro país, no es lo único preocupante. Un informe de inteligencia al que accedió este Diario señala que el brazo social de la revolución bolivariana en el Perú lo constituyen las tan mentadas casas del ALBA, que promocionan las denominadas misiones. En Puno, la primera en activarse fue la 'Misión Milagro' (operación de la vista) y ahora último impulsan el 'Yo sí puedo', un programa de capacitación docente con metodología cubana.
Actualmente existen nueve de estas en el país: en Puno, Juliaca, Cusco, Lambayeque, Ayacucho, Madre de Dios, Tumbes, Tacna y Áncash, en su mayoría registradas en Sunarp y con integrantes de Partido Nacionalista Peruano (PNP) de Ollanta Humala. Es más, inteligencia policial ha registrado que 15 alcaldes provinciales y distritales viajaron a Venezuela en octubre del 2007, luego de haber sido invitados por el gobierno de Hugo Chávez.
La policía sostiene que el financiamiento venezolano es evidente y constante. El periodista venezolano y director de "Tal cual digital", Teodoro Petkoff, insiste que este es un tema peligroso porque Chávez aspira a formar un bloque regional contra Estados Unidos y para ello se apoya en el ingente ingreso presupuestario con el incremento del precio del petróleo. "Una parte del gasto en Venezuela es secreta y está destinada a financiar los movimientos políticos y militares que le son afines.
¿Cuánto es el monto?
No creo que alguien lo sepa. Pero Chávez financia 'piqueteros' en Argentina, una serie de organizaciones en Bolivia y Nicaragua. No es la influencia política lo que preocupa, sino el financiamiento económico a agrupaciones subversivas y violentistas", advierte Petkoff.

Manlio, es quien gana

Columna Itinerario Político/Ricardo Alemán
El Universal, 9/03/2008;
“Amputado su brazo derecho”, Calderón queda en las redes del PRI
Nadie sabe para quién trabaja; “el legítimo” lo hace para el tricolor
Ya es posible realizar un primer balance del más reciente choque entre el gobierno de Felipe Calderón y su acérrimo adversario y crítico, el señor Andrés Manuel López Obrador.
Y es que, en efecto, en casi todos los frentes se puede decir que el gran ganador de la contienda resultó ser el autodenominado presidente legítimo. ¿Por qué? Porque fiel a una de sus más depuradas habilidades políticas, en importantes sectores sociales consiguió sembrar la duda de que en el gobierno del presidente Calderón su equipo compacto no es más que un puñado de pillos.
Porque más allá de que el señor Mouriño sea o no culpable por el delito de tráfico de influencias que se le imputó —y que los documentos exhibidos muestran que existe algún tipo de culpa—, la batalla terminó no sólo por “amputar el brazo derecho” de Felipe Calderón, sino por sembrar entre una gran parte de esos ciudadanos la duda sobre la complicidad y hasta impunidad entre el Presidente y el señor Juan Camilo Mouriño, y anidar la certeza de que las instituciones no sirven para nada.
Pero, además, en el bando contrario, entre los que aún creen en el gobierno de Calderón, está viva la idea de que mediante las peores artes posibles, el lopezobradorismo sólo busca derribar al gobierno constituido, lo que confirma que en una democracia electoral incipiente como la que vivimos, también vivimos en una permanente pelea por el poder, a costa de lo que sea. Y dígalo si no, que vivimos el octavo año consecutivo de lucha político-electoral, sin contar los cuatro años por venir.
Pero acaso uno de los saldos más graves del choque entre López Obrador y Calderón Hinojosa está en otro lado. No sabemos si como parte de una iniciativa deliberada, de un fatal error de cálculo o porque a eso que se le conoce como “la izquierda radical”, no le importa nada que no sean sus muy personalísimas ambiciones de poder, lo cierto es que desde un poderoso sector de los amarillos se pavimenta el camino para afianzar los amoríos políticos entre los azules y los tricolores, y se construyen los puentes para que en julio de 2012 el nuevo huésped de Los Pinos sea, otra vez, el PRI.
Y eso, claro, sin tomar en cuenta que en ese proceso lo que se provoca de manera acelerada e irresponsable es la destrucción del más importante esfuerzo unificador de lo que con matices y todo, hoy es conocido por todos como la izquierda mexicana, el PRD. Y, en efecto, no es casual que lo más atrasado y corrupto del viejo PRI esté hoy en la primera línea del grupo político que encabeza Andrés Manuel López Obrador —y que ese puñado de corruptos pretendan quitarle el partido al otro sector que por lo menos sí tiene un origen de izquierda—, en tanto que el otro PRI, el dueño de la franquicia de origen, no menos corrupto y atrasado, tenga en sus manos el más claro cogobierno con el PAN.
Golpe a la credibilidad
Después de 10 días de hostilidades —de que el legítimo exhibió documentos que presumen tráfico de influencias cometido por el secretario de Gobernación— nadie puede negar que el golpe pegó directo en la credibilidad del gobierno del presidente Calderón y en su capacidad para procesar una embestida como la que fulminó a su amigo Juan Camilo Mouriño. Y pueden decir lo que quieran en la casa presidencial y en la casona de Covián, pero lo cierto es que hoy existen más dudas que hace un par de semanas, sobre las “manos limpias” del Presidente y de su grupo más cercano de colaboradores.
Además, y a pesar de las desesperadas campañas mediáticas que ha emprendido por todos lados el secretario de Gobernación, queda claro para todo aquel que lo quiera ver a la luz del día, que sin anestesia al presidente Calderón “le amputaron el brazo derecho” en la pasada escaramuza, le quemaron a su principal operador político y debilitaron hasta el extremo la capacidad del gobierno para sacar adelante una de las reformas que han sido concebidas como fundamentales: la energética.
Pero en Los Pinos, más que reaccionar a partir de una concepción de Estado —en la que pudieron sacrificar al fusible fundido antes de que las chispas salieran por todo el cuarto de máquinas— respondieron bajo la lógica de la pandilla política. Es decir, reaccionaron igual pero en sentido contrario a lo que hicieron sus propios adversarios. Y, en efecto, si los amarillos le apuestan a derribar al gobierno por todos los métodos posibles —sean legales, morales o políticos—, y si el escándalo Mouriño es parte de esa estrategia, en la casa presidencial dijeron algo así como: “No nos van a sacar”, cueste lo que cueste, “porque vienen por nosotros como pandilla”.
Todos tenemos claro que el pleito es político, de fuerza, y es evidente también que el señor López Obrador está empeñado en vengar su derrota político-electoral —lo cual en el extremo podría ser cuestionado en el método, pero no en su legitimidad—; pero, en el otro bando, el de Felipe Calderón, también todos tienen claro que no se pueden comportar como una pandilla que defiende a uno de los suyos por sobre las instituciones, en general, y la democracia, en particular.
Una perla que ejemplifica el caso. ¿Qué hicieron el PAN del propio Felipe Calderón y el PRD del propio Andrés Manuel López Obrador con el segundo secretario de Gobernación del entonces presidente Ernesto Zedillo? ¿Qué no le hicieron entonces la guerra al señor Emilio Chuayffet, en términos similares a los que hoy le aplicó AMLO al señor Mouriño? ¿Y cómo reaccionó el siempre petulante Zedillo? Pues sí, debió aceptar una realidad tan contundente como pragmática: cambiar el fusible reventado, el brazo amputado o el operador apestado. Así de simple.
En el caso de Juan Camilo Mouriño, de su jefe Felipe Calderón y de la embestida lanzada por Andrés Manuel López Obrador, todo indica que apareció —acaso por primera ocasión— el carácter irascible y el sentido vengativo de Felipe Calderón: no darse por vencido y reaccionar igual que sus adversarios, como una pandilla que los quiere sacar de la casa. ¿Y a quién le importan las instituciones? ¿Cómo queda la credibilidad de las instituciones, la confianza en la justicia, en la transparencia y el combate a la impunidad? Ni a Mouriño ni a Calderón parece interesarles.
En brazos del PRI
Pero el más grave de los saldos, como señalamos arriba, es que el escándalo Mouriño es una más de las cuentas de un rosario que puede concluir en 2012 con el regreso del PRI al poder presidencial. ¿Por qué esa percepción? Porque como ha ocurrido desde el mismo lunes 3 de julio de 2006, el PAN encontró en el PRI a un aliado que le resultaba indispensable para sobrevivir durante la emergencia postelectoral, y que a los pocos meses resultó ser un verdadero tanque de oxígeno para el segundo gobierno de la derecha.
Sí, cuando el PRD y su líder “indestructible” le declaran la guerra al gobierno de Calderón, los amarillos no sólo aparecieron como el partido del “no”, de la destrucción de las instituciones, de los resentidos y los rijosos, sino que en el otro extremo solidifican la alianza del PRI con el PAN. A pesar de ello —y gracias al olfato del sector moderado del PRD— ese sector de la izquierda logra meterse en la discusión de asuntos fundamentales para su causa —y de un grave retroceso para la democracia electoral— como la reforma electoral, de la que resulta ganancioso.
Sin embargo, la radicalización, el extremismo y la intención de los amarillos por derribar el gobierno de Felipe Calderón han convertido al PRI en un factor cada vez más importante: en el salvavidas del gobierno de Calderón, de su gabinete, de su proyecto de gobierno y de sus reformas, al grado de que el verdadero y gran ganancioso ha sido el PRI. El de Manlio Fabio Beltrones, por supuesto. Y el escándalo Mouriño no podía ser la excepción a esa regla. Apenas el pasado viernes, en sus habituales giras de proselitismo, el señor López Obrador se quejó de que el PRI “reculó” y salió a defender a Camilo Mouriño.
El grito en la plaza, más que un señalamiento de censura o una acusación que confirma la “perversa” alianza del PRI de Beltrones con el presidente Calderón, debe ser interpretado como un lamento de derrota. ¿Por qué? Porque si bien fue el dardo envenenado de López Obrador el que en los hechos derribó a Juan Camilo Mouriño; el que atrapó a la presa, la defendió ante las fieras que la perseguían y con ello le salvó la vida y elevó el costo de su alianza fue el PRI del poderoso senador Beltrones. ¿Y qué con eso, podría preguntar algún intrigado? Buena interrogante.
Pues resulta que sí, que salvarle la vida a Mouriño, que apuntalar al gobierno de Calderón, bien valdrán una reforma energética. Y esa reforma será la reforma de Manlio. Es decir, que ese chivo en cristalería en que se ha convertido el señor Obrador para buena parte de los amarillos, no sólo sacó al PRD de la reforma energética, sino que la persecución contra el señor Mouriño prácticamente firmó el pacto entre el gobierno de Calderón y el PRI, en torno a una reforma energética en la que el gobierno y los azules pagarán los costos, y todos los beneficios se los llevará el PRI.
“Nadie sabe para quién trabaja”, dice el refrán popular. Y sí, si el señor legítimo estuviera en las filas del PRI no lo haría tan bien para que ese partido siga siendo el gran ganador del segundo gobierno del PAN, y en ser exitoso en su estrategia para regresar al poder presidencial. En el fondo, queda claro que los azules se enfrentan a las dos versiones del viejo PRI, a la versión rancia y atrasada de López Obrador y a la versión negociadora y pragmática —no por ello menos transa— del señor Beltrones. Una de las dos llegará al poder en 2012. Está claro que será la segunda, en tanto que en su historial el señor López Obrador cargará con la responsabilidad de ser el destructor del más importante partido de la izquierda mexicana. Y sí, aunque sean muchos los enojados, al tiempo.
En el camino
Y a propósito del regreso de lo más atrasado del PRI, también en los días que corren presenciamos el regreso de lo más cuestionable, rancio, monopólico y hasta fascista del sindicalismo oficial —que para no variar también se adorna con la bandera de la izquierda— y que abiertamente amenaza con perseguir a sus críticos. Nos referimos —con toda la tristeza que significa que un gremio como el de los electricistas hayan llegado a ese nivel de corrupción política e ideológica— al Sindicato Mexicano de Electricistas, uno de los más costosos, ineficientes y antidemocráticos monopolios, resabio de los viejos controles corporativos del PRI, otrora emparentado con las causas de la izquierda mexicana y que ahora se ha convertido en perseguidor de un diario, el periódico Reforma.
Resulta que el periódico de la familia Junco ha sido un crítico consistente de la tragedia en que se ha convertido la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, la segunda empresa pública productora de energía eléctrica del país, y que desde hace décadas está en quiebra por una combinación de factores entre los que se encuentra la depredación de una casta divina, privilegiada y corrupta, escondida detrás de las banderas de un sindicato otrora histórico y hoy depredador que defiende prestaciones ofensivas para los millones de mexicanos, reclamos demenciales para cualquier democracia que se respete.
Y esa casta divina de líderes corruptos y trabajadores convertidos en verdaderas pirañas del dinero público ahora se han corrido al extremo del fascismo sindical. Pues sí, han iniciado una persecución contra el diario Reforma, al que hicieron llegar amenazas, al que calumnian y amagan con retirarle la energía eléctrica —como si fueran los dueños de un bien público y propiedad del Estado—, por cometer el pecado de cuestionar al grosero monopolio del SME, una cueva de corruptos que se han enriquecido al amparo del dinero público, de la ineficacia y de gobiernos a los que les tiembla la mano para acabar con ese y otros monopolios.
Cada año, desde hace más de 15, se prenden los focos rojos respecto a la tragedia que es la Compañía de Luz, en tanto que cada fin de año los consumidores vemos incrementar el costo de la energía eléctrica porque a los intocables del SME se les ocurre que todos debemos pagar jugosas prestaciones. Y, a cambio, el servicio es cada vez peor, más deficiente, más caro y... por si fuera poco, a todo aquel que se le ocurra protestar, le mandan recibos escandalosos. ¿Hasta cuándo? Señores legisladores, señores dirigentes de partidos, señores del gabinete... señor Presidente, es tiempo de que le pongan un alto a ese escandaloso robo generalizado, a esa casta divina, a esa sangría del dinero público. Y, claro, nadie quiere asumir los costos.
Y no falta, por supuesto, los que también defienden a ese monopolio y a sus pillos disfrazados de sindicalistas.
Pero en la semana que inicia también hay buenas noticias. Resulta que el próximo miércoles 12 de marzo, a las 13:00 horas, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM (aula Dr. Guillermo F. Margadant) será presentado el más reciente título del doctor Jorge Carpizo McGregor y de Diego Valadez, Derechos Humanos, aborto y eutanasia, que profundiza en los aspectos jurídicos, científicos y sociales de dos temas de la mayor actualidad y alta sensibilidad para la sociedad mexicana contemporánea. Dicen los que saben que se trata de uno de los más rigurosos estudios sobre los dos temas, que se han realizado en México.
aleman2@prodigy.net.mx

Las FARC: El Universal


Presunto líder de las FARC labora en Conacyt
Reporte de inteligencia lo identifica como Mario Dagoberto Díaz Orgaz
Nurit Martínezy Juan José Arreola
El Universal, Lunes 10 de marzo de 2008
Mario Dagoberto Díaz Orgaz, a quien llaman Dagoberto, ha sido identificado por el gobierno federal como el presunto dirigente del Núcleo Mexicano de Apoyo a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en México y operador financiero de esa organización en nuestro país, según un reporte de inteligencia.
Este hombre es a quien el 5 de marzo a las 18:25 horas se ubicó merodeando el hospital militar donde está internada Lucía Andrea Morett Álvarez, revelaron servicios de inteligencia del gobierno mexicano.
Ante el señalamiento, Dagoberto Díaz Orgaz se sorprendió al saber que figura entre los mexicanos sobrevivientes al ataque del Ejército colombiano en la frontera con Ecuador, hace más de una semana.
El investigador del Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi) de Conacyt, en Querétaro, rechaza tales versiones. “No conozco Ecuador”, argumentó.
En entrevista con EL UNIVERSAL en la ciudad de Querétaro, Díaz Orgaz desmiente que en alguna ocasión hubiera visitado Ecuador, pese a que la ficha del servicio de inteligencia —con copia de su fotografía de pasaporte y que coincide con la que exhibe el Cidesi como responsable de la Gerencia de Metrología Dimensional— señala que al menos ha hecho dos viajes a ese país, el primero en 2007 y el segundo, ahora, en 2008.
Respecto a los hechos en Ecuador, comentó no saber mucho del tema e indicó que establecería contacto con las autoridades para determinar qué procedía si sus datos personales hayan sido utilizados por otra persona.
De acuerdo con información de este diario, Dagoberto fue ubicado por servicios de inteligencia de México en Quito, Ecuador, luego de sobrevivir al ataque militar colombiano al campamento de las FARC donde hasta ahora se ha señalado que murieron otros tres connacionales.
Como señaló el vicepresidente de Colombia, Francisco Santos, estos universitarios viajaron con el fin de entrenarse con las FARC en la selva ecuatoriana limítrofe con Colombia.
Según la ficha de inteligencia, Dagoberto Díaz Orgaz —que nació 15 de enero de 1960— está presuntamente vinculado con “movimientos disruptivos y antisistémicos” como los frentes Popular Revolucionario y Popular Francisco Villa Independiente, el Bloque de Fuerzas Proletarias, el Movimiento Bolivariano de los Pueblos en México y el Partido Comunista de México Marxista Leninista, entre otros.
A Dagoberto se le tienen identificadas cinco cuentas bancarias con saldos promedios de 800 mil pesos mensuales en los últimos dos años, y en 2007 recibió por una transferencia 20 mil dólares desde Panamá.
Es originario de Cuba, naturalizado mexicano en 2003, estudió Ingeniería Mecánica en el Instituto Politécnico Vladimir, en Rusia, y cursos de especialización en Cuba.
En el Cidesi tiene el nivel B de investigación en Metrología. Este centro tiene como fin promover y apoyar la modernización tecnológica del sector productivo a través de la investigación aplicada, el desarrollo experimental y la formación de personal.
Según el reporte de inteligencia del gobierno federal, en 2004, cuando viajó a México una delegación de venezolanos miembros de las FARC-EP se entrevistaron con Dagoberto como responsable de la parte financiera de esa guerrilla en México. Al año siguiente, el 28 de mayo, Dagoberto Díaz Orgaz participó de forma activa en la organización del Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, en agosto, en Caracas, Venezuela.
Estos festivales se organizan desde 1947 y se orientan al debate político de izquierda; después se vincularon a organizaciones que se han declarado movimientos antiimperialistas y pacifistas, refiere la página en internet de estas reuniones.
Preocupa en Filosofía destino de desaparecidos
Nurit Martínez, reportera.
El Universal, Lunes 10 de marzo de 2008;
Entre los estudiantes simpatizantes de los colectivos localizados en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) “hay preocupación” porque entre siete y 10 jóvenes de la cátedra Simón Bolívar “no han aparecido”.
Sin embargo, al insistirles sobre las identidades de quiénes podrían haber viajado a Colombia junto con Lucía Andrea Morett, y que son integrantes de dicha cátedra —señalados como simpatizante de las FARC—, dicen que al menos tres de los jóvenes responden a los apodos de El Vago, El Chack y El Chopas.
Los jóvenes, integrantes de varios de los colectivos, afirman que en la Facultad existe un “clima de incertidumbre”, “enrarecido”, más aún por la presencia de “mucha gente extraña”, porque se ha señalado que los estudiantes fueron a “recibir entrenamiento de las FARC”.
Además de Lucía, Francisco Franco Delgado, Verónica Natalia Velázquez y Juan González del Castillo, los jóvenes que participan en ese colectivo que coordina la cátedra Simón Bolivar, “sólo tienen el interés de estudiar a ese personaje y abordarlo como un proceso histórico al cual hay que reivindicar”, dice una de las integrantes del colectivo Carlos Marx.
Se trata de un trabajo de más de dos años, que es extracurricular y aborda los movimientos y la postura de izquierda en América Latina; para tal efecto. se organizan foros, mesas redondas y debates.
Otra de las muchachas refiere que antes de hacer acusaciones contra los estudiantes, las organizaciones de derechos humanos y estudiantiles “deberían estar exigiendo al gobierno de Felipe Calderón asuma una posición al respecto, porque antes que otra cosa se cometió una masacre de estudiantes mexicanos.
“Se violaron garantías individuales de los universitarios, así como su derecho a la libertad de expresión, de pensamiento e ideología”, argumentó otra de las jóvenes que organizan para hoy un homenaje a sus compañeros en la Facultad.
Columna Itinerario Político/Ricardo Alemán
El Universa, 10 de marzo de 2008;
México y las FARC; la doble moral
Desde la segunda mitad de los 60, las universidades públicas solapan a grupos estudiantiles radicales
Existen sectores que promueven esa forma de lucha como la solución; algunos en el PRD, corifeos del ‘legítimo’
Sin duda que algo está mal, si no es que muy mal, cuando nos enteramos que un puñado de cinco jóvenes mexicanos —de los que habrían muerto cuatro— se encontraban en un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) emplazado en territorio de Ecuador, cuando fue atacado por el gobierno colombiano y resultó abatido el número dos de ese grupo guerrillero.
Algo debe estar mal, cuando círculos de la llamada izquierda mexicana —incluidos los medios de comunicación afines a ese sector— guardan un silencio harto sospechoso y nada casual respecto del hecho y de presuntos vínculos de sectores mexicanos con la guerrilla más antigua del continente —pero también la más cuestionada por sus prácticas criminales y porque en todo el mundo se le identifica como un grupo narcoterrorista— y con círculos bolivarianos, el instrumento continental de la dictadura de Hugo Chávez.
Algo anda mal, cuando autoridades de instituciones educativas como la UNAM, Chapingo y el IPN se hacen desentendidas frente a ese ridículo secreto a voces que todos conocen —que en esas y otras instituciones se solapan células vinculadas, ya sea con las FARC, con el EPR, con tal o cual grupo radical, a las que también usan como porros para mantener el control político de los planteles—, pero del que pocos quieren hablar. Es decir, que frente a los ojos de todos se mueven las células que captan simpatizantes para los grupos radicales, de dentro y de fuera del territorio mexicano, y que al mismo tiempo son sectores de golpeo y presión al servicio de los poderes formales en las instituciones educativas.
Y sin duda que algo está bastante mal, cuando ninguno de los otrora guerrilleros de los años 60 y 70, ni de los líderes del 68 se atreve a decir “esta boca es mía”, respecto a la persistencia de sectores estudiantiles vinculados a grupos guerrilleros como las FARC, y otros. ¿Por qué a nadie parece interesarle el fenómeno político, social, educativo y de poder?
Un par de preguntas que no son ociosas, pero cuya respuesta nos podría dar algunas pistas: ¿Dónde están los hijos de los guerrilleros que sobrevivieron al PRI gobierno en los 60 y 70? ¿Dónde están los hijos de los líderes y activistas del 68 y el 71? Está claro que ninguno de esos hijos o nietos está vinculado a las FARC y menos al EPR, en general a grupos de esa naturaleza. Es más, muchos de esos muchachos ni siquiera pisaron una escuela pública. Y existen casos de hijos de ex guerrilleros y ex militantes del 68 que fueron mandados a estudiar a las más caras escuelas privadas de Estados Unidos y/o Europa.
Pero no se malinterprete cuando proponemos que “algo está mal” o “muy mal” en México —en su sistema político, de partidos, educativo, laboral...—, a partir del descubrimiento de vínculos de jóvenes mexicanos con las FARC y de la muerte de por lo menos cuatro de ellos en el ataque de la Policía y el Ejército colombianos al campamento de las FARC. No, no se trata de escandalizarse por que en algunos de los centros de educación pública más importantes del país se expresen y practiquen en toda su pluralidad y sus tonalidades las ideas y afinidades políticas.
En efecto, desde los años 60 las instituciones públicas de educación superior, sobre todo la UNAM y el IPN han sido las más importantes canteras para reclutar cuadros —no sólo para el PRI, el PAN y antecedentes de lo que hoy es el PRD en la actividad político partidista, sino de grupos radicales de derecha y de izquierda, como el Muro, Dhiac, Yunque, en el caso de los primeros, y para los grupos guerrilleros emparentados con la izquierda, en el de lo segundos —, como también está claro que la derecha y la derecha extrema crearon sus propias universidades para formar sus cuadros, que de tanto en tanto aparecen, no en campamentos guerrilleros al sur del continente, sino como jefes de poderosos corporativos multinacionales que, al mismo tiempo, son guardianes celosos de su ideología.
El problema no está en el derecho que tiene todo joven o estudiante universitario de creer y poner en práctica la tendencia ideológica, partidista o religiosa que le plazca, le convenza o le convenga. Tampoco está en cuestión el viejo dilema de la libertad de cátedra, o el asunto de la gratuidad educativa. Y menos se discute si cinco o 50 jóvenes son pocos o muchos para estar en una causa como la de las FARC, y/o morir por esa causa. No, el problema está en esa doble moral que muestran los actores políticos y sociales vinculados con el asunto, y el engaño colectivo que pretenden recetarle a la sociedad, una vez descubierto lo que es un secreto a voces.
Primero, todo aquel que haya cursado la preparatoria, la vocacional, o una carrera de nivel superior en la UNAM o el IPN, sabe que desde la segunda mitad de los años 60 y hasta la fecha, esas instituciones han tenido y tienen —solapan y patrocinan— grupos estudiantiles radicales vinculados con sectores guerrilleros. No pocos de esos grupos son utilizados para fines políticos y/o partidistas. ¿Alguien se ha preguntado, por ejemplo, por qué se mantienen bajo control los conflictos universitarios en la UNAM y el IPN? Pues sí, porque se reparten cuotas, posiciones y hasta espacios físicos. Las FARC, el EPR y otros grupos tienen sus representaciones en facultades y escuelas, a los ojos de todos.
¿Por qué vincularse con las FARC o con los círculos bolivarianos?, cuando todos saben que en el primer caso se trata de un grupo terrorista que vive del narcotráfico, que nada tiene que ver con una concepción de izquierda democrática; mientras que el segundo, no es más que un dictador aldeano. Pues jóvenes como los que murieron en el campamento de las FARC en Ecuador se vinculan con las FARC y el chavismo porque en México existen sectores que promueven, patrocinan y difunden esa forma de lucha como la solución a los problemas de millones de pobres. Y sí, algunos de esos sectores están en el PRD y son corifeos del legítimo.
Algo está mal, sin duda, porque son muchas las señales de que algunos sectores nos quieren llevar al pasado. Y el predominio de esa tendencia no es más que una señal de que no está lejos el posible fracaso de la democracia en México. Y eso no es poca cosa.
aleman2@prodigy.net.mx

Las FARC: Milenio diario



Reporte de las investigaciones en México sobre la guerrilla colombiana
Las FARC tienen ligas con todos los cárteles: PGR
Pesquisas de la subprocuraduría especializada en delincuencia organizada revelan que el grupo guerrillero realiza negocios lo mismo con los criminales de Tijuana que con los de Sinaloa, Juárez y el Golfo.
Milenio Diario, 10-Marzo-08; Pp
Rubén Mosso, reportero
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia han tejido una red que alcanza a todas las agrupaciones delictivas mexicanas, pues lo mismo realiza negocios con el cártel de Tijuana que con el de Sinaloa, Juárez y el Golfo, e incluso con grupos menores, esto de acuerdo con investigaciones de la Procuraduría General de la República.Si bien es cierto que en el pasado sólo se conocía la relación entre dicho grupo y los hermanos Arellano Félix, hay datos que revelan que los colombianos se abastecen de armas a cambio de cocaína, y una prueba de ello es la detención del narcotraficante Ricardo Tamez Alanís, El Richi, miembro del grupo de Los Mellizos, liderado por los hermanos Víctor y Manuel Ángel Mejía Munera, organización ligada a las FARC.


Alanís, quien hace un par de semanas solicitó la protección de la justicia al juez Tercero de Distrito de Amparo en Materia Penal contra un posible cambio de prisión a una de máxima de seguridad, era el encargado de abastecer del alcaloide a Arturo Beltrán Leyva, dirigente del cártel de Sinaloa, así como a Delia Patricia Buendía Magaña, MaBaker, esta última dirigente del cártel de Nezahualcóyotl, organización responsable de la muerte de funcionarios de primer nivel de los ámbitos federal y local.
La droga la recibía en Monterrey, Nuevo León, a través de Juan Pablo Rojas, El Halcón, para después ordenar su envío a New Jersey, en Estados Unidos, donde la entregaba a Heriberto Santos, El Pichón, no sin antes pasar por Tamaulipas, donde una parte era dejada al cártel del Golfo.
En enero de 2004, Juan Pablo Rojas fue detenido en las inmediaciones de la delegación Iztapalapa con dos toneladas de cocaína, tras dos años de investigaciones; dicho personaje era el responsable de la recepción y distribución del alcaloide procedente de Colombia, y encargado de fijar el precio en el mercado negro de la Ciudad de México y municipios conurbados.
La droga era abastecida por los hermanos Carlos y Mauricio Jaramillo Correa, operadores de las FARC en Medellín, según las declaraciones de Juan Pablo Rojas, quien comenzó su carrera delictiva en los años 80, cuando se vinculó con miembros del cártel de Medellín que operaban en México, por órdenes del colombiano Miguel Ángel Willis, además conoció a Pablo Escobar Gaviria.
Sin embargo, perdió contacto tras la muerte de Escobar y se mantuvo sin enlaces directos hasta 2002, cuando fue reclutado por los hermanos Munera, quienes lo incorporaron a la organización como su representante en México.
A fines de diciembre de 2007, la juez Cuarto de Distrito con sede en el Reclusorio Oriente, Taissia Cruz Parcero, sentenció a 15 años de prisión a Tamez Alanís por ser penalmente responsable del delito de delincuencia organizada.De acuerdo con las pesquisas de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), Los Mellizos se dedican al trasiego de droga desde Colombia, pasando por Panamá, México y Estados Unidos, además es considerada la estructura criminal más peligrosa tras la muerte de Escobar Gaviria, líder del cártel de Medellín.
No obstante, no es la única organización colombiana ligada a las FARC. También está el cártel Norte del Valle, que se ha visto disminuido en su capacidad operativa luego de la captura de su principal líder,Diego León Montoya, Don Diego, ocurrida el 10 de septiembre de 2007.- Claves
Narcoterroristas•
Las FARC están clasificadas por Estados Unidos y el Consejo de la Unión Europea como un grupo narcoterrorista, pronunciamiento al que se ha sumado México, donde ese grupo colocó oficinas de relaciones públicas desde fines de 2003.
• El control del tráfico de la cocaína en el mundo fue asumido por la organización rebelde, por lo que ahora los cárteles mexicanos se deben entender con ese grupo, o por intermediarios que laboran para las organizaciones criminales de Colombia.
Entrevista: Jorge Castañeda Gutman
• Ex secretario de Relaciones Exteriores
“O los mexicanos se entrenaban o asociaban con la guerrilla”“
¿Qué diablos andaban haciendo los estudiantes en el campamento rebelde?”, pregunta quien fuera canciller en el sexenio de Vicente Fox; “me cuesta bastante trabajo creer que hacían investigaciones”, señala el diplomático.
Juan Pablo Becerra-Acosta, periodista.
El canciller mexicano durante el sexenio de Vicente Fox, Jorge Castañeda, al hablar de la crisis desatada por el bombardeo del gobierno de Colombia a un campamento guerrillero de las FARC en territorio de Ecuador —incursión armada durante la cual se ha confirmado que murieron dos mexicanos y una estudiante de la UNAM quedó herida—, no anda nada diplomático durante una entrevista con MILENIO. Sin matices, dice cosas como éstas: Acerca de los jóvenes masacrados:
“La pregunta es: ¿Qué diablos andaban haciendo 10, 15, 20 estudiantes mexicanos en un campamento (el día de la entrevista, el viernes pasado, se hablaba de hasta 10 mexicanos en el lugar), en un santuario guerrillero de las FARC? ¿Qué demonios estaban haciendo ahí? Todos tenemos que lamentar su trágica muerte, sobre todo por tratarse de jóvenes, pero insisto: si tú vas a los campamentos de Al Qaeda a entrenarte, pues es muy probable que te maten, ¿eh?”
—¿Usted cree que esa gente se estaba entrenando ahí?
—Mira, yo no sé si se estaban entrenado, pero la verdad, que haya cinco o diez estudiantes de la UNAM ahí… Si eran diez, había más estudiantes que guerrilleros. Es absurdo. Eso simplemente no concuerda. Yo creo que, o bien estaban entrenándose, o estaban asociándose, o alguna cosa… Yo puedo creer que uno o dos estaban investigando, pero si son tantos, pues ya me cuesta bastante trabajo creerlo. Ahora, aun investigando, ellos sabían en lo que se estaban metiendo: en un campamento guerrillero…
—Eso suena duro. No estamos seguros si estaban recibiendo entrenamiento, o si estaban haciendo un documental, o realizando una tesis, pero suena casi a: “Si estaban en el campamento de las FARC, que se jodan —se le comenta al ex canciller, recula un poco, pero arremete de nuevo.
—Tanto como que se jodan, no… Es una tragedia que lamentar y le extiendo mis condolencias a las familias de estos jóvenes, pero no estaban visitando la sede de un partido político. ¡No! Estaban en un campamento guerrillero, santuario de una organización criminal terrorista reconocida como tal por los países de la Unión Europea y, por cierto, expulsada de México en 2002 por los mismos motivos. Así que, bueno, cada quien sabe en qué se mete: si alguien va como corresponsal, como guerrillero, o como alumno a un campamento de Hamas, o de Al Qaeda, en Irak, o en Palestina, o donde tú quieras, pues tú sabes a queéte metes…
Acerca del papel del gobierno mexicano en la crisis: “Es una situación incómoda para el gobierno del presidente Calderón porque implica definiciones, y a este gobierno las definiciones le dan urticaria.
Por un lado, Calderón sí tiene una afinidad importante con Álvaro Uribe, y dudo que le tenga la más mínima simpatía a las FARC, pero por el otro lado quiere seguir quedando bien con Chávez, quiere seguir quedando bien con Correa, quiere seguir quedando bien con La Habana, y pues todas esas cosas son cada día más incompatibles.
La solución de Calderón parece ser un paso hacia la izquierda y un paso hacia la derecha. México se opuso en la OEA a que hubiera una condena a Colombia, lo cual es correcto, pero por otro lado Calderón no ha querido ser muy claro en censurar la utilización de las FARC del territorio ecuatoriano para atacar al gobierno democráticamente electo de Colombia. Entonces, es dubitativo, indeciso, ambivalente, porque estas crisis obligan a definiciones, y a este gobierno eso no le gusta.
Dice Castañeda que Calderón debe definirse ya:
“Yo creo que el tema central es si México quiere tomar partido claramente en esta lucha que ya es de ‘fuera máscaras’, porque ya no tienes simulaciones: varios gobiernos —el de Cuba, el de Venezuela, el de Ecuador, el de Nicaragua, el de Bolivia y, en menor medida, el de Argentina— luchan por extender su influencia en todo el continente combinando todas las vías posibles: la vía armada, la vía electoral, los dineros, las armas, etcétera. ¿Eso se vale, sí o no? ¿Se acepta, sí o no? Se va a combatir eso con las ideas o no se va a combatir. Hay una lucha frontal de tesis en América Latina, y ahí hay que tomar ya partido: estás con los gobiernos democráticos o no…”
Sobre Colombia:
“Efectivamente, Colombia violó la integridad territorial de Ecuador, de eso no hay duda ni se puede discutir, pero las FARC son el hampa que está buscando derrocar al gobierno de Álvaro Uribe. Entonces no debe extrañarnos que su gobierno no se deje. ¿Qué quieren? ¿Que Uribe diga: ‘No, pues sí muchachos, adelante, vengan a derrocarnos porque, la verdad, ya nos dio hueva estar gobernando?’”.
De las FARC:
“El gobierno mexicano debe ver a las FARC como lo que son: un narcoejército que se dedica solamente al negocio y a la sobrevivencia. Está comprobadísima la relación de las FARC con el narcotráfico. Eso ya no es objeto de duda o discusión, como no lo es que la Unión Europea las tiene catalogadas como una organización terrorista. Es un grupo armado sin programa, sin agenda, financiado por el narcotráfico, por los secuestros; un grupo armado con reclutamiento forzoso de niños-soldados de 7, 10, 12 años, y que además pone bombas indiscriminadamente, como lo vimos en la toma de posesión de Uribe hace dos años en Bogotá, cuando mataron a más de 100 personas. Si eso no es terrorismo, entonces yo no sé qué es el terrorismo…
Y de Ecuador:
“Quizás la pregunta que habría que hacerse es ¿qué garantías tuvieron estos muchachos mexicanos del gobierno ecuatoriano de que no les pasaría nada?. Fueron pensando que no habría ningún peligro para filmar, para estudiar, para entrenar, para lo que tú quieras, pero se sentían muy seguros porque el gobierno de Ecuador les dijo: “No’mbre, no hay ningún problema, adelante muchachos”. ¿Qué hacía ese campamento ahí? ¿O realmente el gobierno ecuatoriano no sabía nada? ¿Nos va a hacer creer que no sabía?
El ex canciller Jorge Castañeda, nada diplomático…
Juan Pablo Becerra-Acosta M.
Reportaje: Informe del gobierno ecuatoriano; Diego Osorno, reportero, enviado a Quito.
• Incursión en el acantonamiento destruido
Otros mexicanos habían estado en el campamento
En las semanas previas al bombardeo del asentamiento de las FARC en Ecuador, grupos de connacionales, así como de italianos, peruanos y belgas, entre otros, acudían al lugar y permanecían ahí “uno o dos días”.
Mileni Dario, 10-Marzo-08;
Soren, Fernando, Juan y Natalia, los estudiantes que se encontraban en el campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia destruido el pasado fin de semana por el Ejército de Colombia en Ecuador, no fueron, junto a la sobreviviente Lucía Morett, los únicos mexicanos que visitaron el asentamiento rebelde en la selva de Sucumbíos.
Durante las semanas previas a la incursión colombiana, “otros grupos de mexicanos, italianos, peruanos, chilenos y belgas” acudieron de manera regular al acantonamiento clandestino desde donde operaba el dirigente guerrillero Raúl Reyes, asienta un reporte del Ministerio de Defensa de Ecuador al cual tuvo acceso MILENIO.
En el documento se hace un parte oficial de la situación encontrada en la selva ecuatoriana por una Unidad del Grupo de Operaciones de la Selva, la cual fue enviada por el Presidente Rafael Correa a realizar una investigación de lo sucedido.
El anfitrión Según se explica, desde principios de este año acudieron a reunirse con la guerrilla delegaciones conformadas, en promedio, por cinco civiles extranjeros que pasaban de “uno a dos días” en la zona, y que luego volvían al poblado de Lago Alto, sin conocer nunca la ubicación exacta del lugar donde habían estado. En el documento se asevera también que “todo indica que los visitantes eran simpatizantes y no integrantes armados del grupo guerrillero”. De acuerdo con el testimonio brindado por la estudiante Lucía Morett Álvarez, ella llegó junto a sus cuatro compañeros mexicanos al campamento guerrillero la noche del 29 de febrero, apenas unas horas antes del ataque colombiano, ocurrido en la madrugada del 1 de marzo.
Su anfitrión, el comandante Raúl Reyes, cuyo nombre real era Édgar Devía, además de ser considerado por analistas de la región como uno de los dirigentes “menos militaristas” de las FARC, se encargaba de las relaciones internacionales del grupo guerrillero. En la agenda pública de Reyes figuraban periodistas de diversos países latinoamericanos y políticos extranjeros que han tratado de mediar en el conflicto colombiano, como Beatriz Paredes, actual presidenta nacional del PRI, quien siendo gobernadora de Tlaxcala recibió a una delegación de las FARC, la cual buscaba un acuerdo de paz con el gobierno de Colombia en los años 90.
El campamento
En la descripción de lo encontrado en el campamento guerrillero se enumeran camas, radios de onda corta, refrigeradores, reproductores de CD, cafeteras, antenas de televisión satelital, televisores de plasma, generadores de luz, rifles de madera (para entrenamiento) y 37 fusiles de asalto.
Asimismo, se reporta el hallazgo de cartas personales de los guerrilleros, diarios de algunos de ellos, el libro Poemas con piel de oveja, de Euler Granda, textos del poeta Pablo Neruda, ejemplares de la revista Condorito, análisis sobre la Asamblea Constituyente de Bolivia, notas periodísticas sobre el muro que construye Estados Unidos en su frontera con México y biografías de Simón Bolívar.
Los militares ecuatorianos reportan que el acantonamiento abarcaba 2 hectáreas y tenía cerca de 5 meses de haber sido construido con madera de los árboles de la zona. Una bodega de armas, un área con dormitorios, una cocina, lavanderías, una granja y un campo de entrenamiento lo conformaban en su totalidad.
Manuales
Pero además de revistas de historietas, entre los documentos encontrados por los militares ecuatorianos se anexan manuales de adiestramiento para el uso de rifles, de tácticas de combate y los “Estatutos de régimen disciplinario y normas internas del Comando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia del Ejército del Pueblo (FARC-EP)”.
Este último folio guerrillero incluye tres apartados divididos en “Estatutos”, “Reglamento” y “Normas Internas”. En el apartado de Estatutos se indica que la estructura de las FARC está dividida en “Escuadras, Guerrillas, Compañía, Columna, Frente y Bloque de Frentes”.
En el reglamento del grupo guerrillero se estiman como faltas graves de los milicianos “intento de homicidio, pereza, cobardía, irresponsabilidad, el juego de azar, la simulación de enfermedad, compra o venta de material de guerra, la deserción y la embriaguez”.
Según el escrito, cualquiera de estas faltas puede ser sancionada con un regaño o con un fusilamiento. “Norma 14: Los mandos y combatientes deben tener en cuenta que los ajusticiamientos sólo se pueden hacer por delitos muy graves de los enemigos del pueblo y con autorización expresa de cada caso por parte de las instancias superiores de dirección de cada organización”
También se encuentran escritos dirigidos al Partido Comunista Marxista Leninista de Ecuador, en los cuales, las FARC comentan: “es un gran aliciente y nos llena de ánimos y esperanzas saber que a nivel de toda América Latina y el Caribe están en auge las luchas de las masas, no sólo por sus reivindicaciones particulares sino también por el cambio del sistema imperante, y que existen partidos comunistas como el de ustedes a la vanguardia, dirigiendo la confrontación clasista. Como organización hermana nos satisface gratamente la identidad política e ideológica que nos une y es motivo de mayor compromiso internacionalista al saber que estamos encaminados correctamente”.
Diego Osorno/enviado, Quito, Ecuador
Columna Trascendio/
Que transcurrió el fin de semana y en el gobierno federal no había claridad sobre qué decir en torno de la presencia de jóvenes mexicanos en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
De no haber un pronunciamiento firme este lunes, se podrá deducir que terminaron imponiéndose quienes proponían “dejar pasar” ese asunto y reducirlo al caso de “unos cuantos jóvenes desorientados...,