La
Santa María y el 3 de agosto de 1492/Alfonso Maldonado, catedrático de Prospección Geofísica en la Universidad Politécnica de Madrid.
Publicado ABC
| Alfonso Maldonado
Hoy,
3 de agosto, hace 523 años, tres pequeñas naves al mando de Cristóbal Colón
partieron del puerto de Palos. No eran tres naves cualesquiera y todos
recordamos hoy sus nombres. Buscaban una ruta occidental a las Indias, pero el
destino las llevó a costas inesperadas; dieron los primeros pasos de la era de
las exploraciones y pusieron en movimiento un encuentro de dos mundos que haría
posible la primera globalización de la historia. Aquellos primeros pasos sobre
el mar llegan hasta nosotros y conformaron el mundo en que vivimos.
Al
mismo tiempo conviene recordar que al principio de la actual legislatura el
ministro de Asuntos Exteriores, García-Margallo, comentaba la necesidad de
impulsar la Marca España considerándola como apuesta prioritaria del Gobierno
actual con una planificación a largo plazo. La Marca España es una política de
Estado cuya eficacia se medirá a largo plazo. Su objetivo es mejorar la imagen
de nuestro país, tanto entre los propios españoles como más allá de nuestras
fronteras. Mejorar la imagen de nuestro país debería comenzar con la
potenciación de los grandes hechos históricos, culturales y científicos que
España ha proporcionado a la Humanidad. El ministro de Educación, Cultura y
Deporte lo remachaba desde estas mismas páginas hace unos días: «Debemos
valorar desde la escuela lo que España ha logrado en la historia».
Como
consecuencia de un siglo XIX en el que nuestro país había perdido prácticamente
las fuentes del conocimiento que le había proporcionado el patrimonio
naturalista de los territorios americanos y quedó apartada tanto del esplendor
científico que experimentó Europa como del reparto de África, España entró en
un período de autocompasión agónica. Pero nuestro aporte a la cultura, a la
historia y a la ciencia es enorme e indiscutible, incluso en el pobre XIX, y
constituye un bagaje que España debe enarbolar. Y con él, una serie de iconos,
de hechos y personas que deben ser recordados y promocionados, recuperándolos
del olvido o del abandono.
Uno
de esos iconos es Cervantes. Por fin, este año, se ha identificado un conjunto
de restos humanos enterrados en el convento de las Trinitarias de Madrid, en un
osario que alberga –con alta probabilidad– los restos óseos de Miguel de
Cervantes y su esposa. El hallazgo coincidió con el 400 aniversario de la
publicación de la segunda parte del Quijote, y el Gobierno, con la
vicepresidenta al frente, acaba de constituir la Comisión que dirigirá en 2016
las celebraciones del cuarto centenario de la muerte del escritor español más
universal. Los británicos han hecho desde antes sus deberes y llevan años
preparando la celebración, también en 2016, del centenario de la muerte de
Shakespeare, cuyos restos se pueden visitar en la iglesia de la Santísima
Trinidad en Stratford-upon Avon.
Como
Cervantes y su personaje Don Quijote, Cristóbal Colón y el Descubrimiento de
América son de las personas y logros más fascinantes de nuestra historia. Ambos
son dos hitos fundacionales de lo español. Digamos que un día como hoy, 3 de
agosto, en 1492, la Marca España fue debidamente instituida, cuando la Pinta,
la Niña y la Santa María levaron amarras en Palos y pusieron proa a Occidente:
«A las cinco de la mañana del día 3 empezó a soplar el terral después de oír
misa en la Iglesia de San Jorge, al lado de la Fontanilla, nos embarcamos para
las Indias», según cuenta el manuscrito de Fray Bartolomé de las Casas.
Aquel
3 de agosto comenzó la mayor aportación de España a la historia universal. Y
uno de los misterios de esta hazaña es saber dónde está la nao capitana, la
Santa María. Un grupo de investigadores estuvo en Haití en 1991 dentro del
programa de actividades en torno al Quinto Centenario. Desgraciadamente, un
golpe militar en septiembre de 1991 derrocó al presidente legítimo de Haití y
la misión tuvo que suspenderse. Colón, una vez más, volvía a tener mala suerte.
Desde
esa fecha, profesores de las universidades madrileñas venimos reclamando que se
ejecute el «Proyecto de la recuperación de la Santa María». No puede ser que el
Ministerio de Cultura, la Agencia de Cooperación Internacional y otros
organismos estén mirando para otro lado y solo el reclamo mediático les haga
reaccionar, como ocurrió en septiembre del año pasado, cuando Barry Clifford
anunció que había descubierto «el pecio de la Santa María» en la bahía Caracol,
al norte del país, y algunos científicos, espoleados por el embajador de España
en Haití (Manuel Hernández Ruigómez) tuvimos que desplazarnos a Puerto Príncipe
para exponer, ante el Ministerio de Cultura de Haití y la Unesco, las hipótesis
científicas españolas respecto a que la Santa María estaba hoy tierra adentro,
en el delta del Grande Rivière, al lado de Puerto Haitiano (la antigua Guarico
de la época Española).
Los
resultados que sostenemos, que hemos demostrado científicamente en nuestros
trabajos anteriores y que se expusieron en Puerto Príncipe, se basan en el
Proyecto Científico que en 1992 se realizó para la Sociedad del V Centenario
del Descubrimiento de América, donde se concluía, por vez primera, que el pecio
de la Santa María y su lastre estarían situados en tierra, en un rectángulo de
500 x 200 metros y a seis metros de profundidad. Por tanto, el pecio de la nao
de la Santa María, o lo que quedara después del acopio que se hizo para
construir el Fuerte de la Navidad en 1492 y su posterior abandono con el
abatimiento y el soterramiento en el mar, está hoy en día en tierra firme, como
confirman los estudios complementarios que hemos realizado actualmente in situ,
teniendo en cuenta la ubicación del poblado de Guacanagarí, Puerto Real y el
punto donde apareció una de las anclas de la Santa María (1780), que junto con
la evolución geomorfológica del Grande Rivière nos permiten situar dentro de
tierra firme esa zona de ubicación del pecio de la Santa María.
Por
tanto, España tiene todavía una importante asignatura pendiente que ya no
debería demorar más, para poder terminar la gesta colombina: «La recuperación
del pecio de la Santa María» que hoy hace 523 años salía del Puerto de Palos y
que necesita ser reintegrada al Patrimonio español y a la imagen de España.
Esperemos
que esta vez Colón y su proyecto encuentren el apoyo oficial necesario.