A poco más de un año de los trágicos sucesos ocurridos en el Colegio número Uno en Beslán, Osetia del Norte donde perdieron la vida 331 personas ahora resulta que nadie - ni las fuerzas especiales, ni los soldados, ni el grupo de altos funcionarios que dirigieron la operación para liberar a los rehenes-, "cometieron errores" en su actuación. ¡Esa es la conclusión de expertos de la fiscalía que investigó los trágicos sucesos!El secuestro de más de 1,200 personas que se prolongó por espacio de 52 horas, concluyó con la muerte de 331 personas, entre ellas 186 niños, y doce efectivos de las fuerzas de seguridad.
El asalto a la escuela se produjo después de que en el interior del gimnasio, donde los terroristas habían encerrado a los rehenes, estallase una de las bombas que había instalado el grupo de chechenos separatistas. Nunca quedo claro qué fue lo que produjo esa explosión, si las acciones de los que querían liberar a los escolares o las de los terroristas. Empero, la organización Madres de Beslán, la más crítica con la actuación de las autoridades rusas, mantiene que muchos niños murieron carbonizados o víctimas del fuego cruzado entre los secuestradores y las fuerzas de seguridad.
El asalto a la escuela se produjo después de que en el interior del gimnasio, donde los terroristas habían encerrado a los rehenes, estallase una de las bombas que había instalado el grupo de chechenos separatistas. Nunca quedo claro qué fue lo que produjo esa explosión, si las acciones de los que querían liberar a los escolares o las de los terroristas. Empero, la organización Madres de Beslán, la más crítica con la actuación de las autoridades rusas, mantiene que muchos niños murieron carbonizados o víctimas del fuego cruzado entre los secuestradores y las fuerzas de seguridad.