8 nov 2010

Hace limpia a tribunales

Hacen limpia a tribunales de BC
Víctor Fuentes, reportero
Reforma 8 noviembre 2010.- El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ha emprendido una limpia de los tribunales en Baja California ante una oleada de alegatos de corrupción y favoritismo a litigantes locales.
Fuentes oficiales informaron que el CJF desintegró un tribunal colegiado de circuito de Mexicali, dos de cuyos magistrados llevaban 24 años en el puesto, mientras que un juez de distrito de Tijuana fue suspendido para investigar acusaciones de actos deshonestos y maltrato a sus empleados.
Otra investigación deriva de los amparos otorgados por un secretario del juzgado primero de distrito en Mexicali, quien en las pocas semanas que reemplazó al titular, benefició a cuatro importadores que han introducido al país más de 240 mil autos usados desde Estados Unidos en lo que va de 2010.
En una acción pocas veces vista en el Poder Judicial Federal, los tres magistrados que integraban el Primer Tribunal Colegiado de Circuito en la capital bajacaliforniana fueron readscritos a otros estados, por acuerdo dictado el 29 de septiembre por el CJF.
Pedro Fernando Reyes y Eduardo Rodríguez Álvarez, dos de los magistrados readscritos, impugnaron ante la Suprema Corte de Justicia su traslado a tribunales de Saltillo y Tepic, mientras que Miguel Ángel Morales no cuestionó su cambio porque está cerca de jubilarse.
Reyes y Morales fueron asignados a Mexicali en 1986 y nunca fueron cambiados, lo que según las fuentes, facilitó generar una red de relaciones con la comunidad relativamente pequeña de litigantes de esa ciudad.
De hecho, 6 de los 14 magistrados que actualmente integran el Décimo Quinto Circuito llevan más de una década en su tribunal, y varios superan los veinte años.
También hay una magistrada que fue separada del cargo en 2007 por negarse a someterse a exámenes médicos para verificar posibles trastornos mentales, pero que fue reinstalada por la Suprema Corte en 2008.
El Consejo de la Judicatura Federal busca una renovación total y ha enviado a cuatro magistrados nombrados en el último año, amén que los dos coordinadores del circuito también tienen poco tiempo en Mexicali.   

Velasio de Paolis

Mons. Velasio De Paolis pronto será cardenal
Los Legionarios de Cristo y el Regnum Christi acogen la noticia con alegría.
Roma, 20 de octubre de 2010. Esta mañana, al concluir la audiencia general en la Plaza de San Pedro, el Santo Padre anunció la celebración de un consistorio público para la creación de 24 nuevos cardenales que tendrá lugar el próximo 20 de noviembre.
Entre los nuevos cardenales se encuentra también Mons. Velasio De Paolis, C.S., Presidente de la Prefectura para los Asuntos Económicos de la Santa Sede y, desde el mes de julio, también Delegado Pontificio para la congregación de los Legionarios de Cristo y el movimiento Regnum Christi.
El hecho que Mons. De Paolis será incluido entre los miembros del colegio cardenalicio subraya su alta responsabilidad como Presidente de la Prefectura para los Asuntos Económicos de la Santa Sede y el extraordinario servicio que ha prestado a la Iglesia a lo largo de su vida. Los Legionarios y miembros del Movimiento acogemos la noticia con alegría y aseguramos al futuro cardenal la compañía constante de nuestras oraciones por todas sus intenciones.

Velasio de Paolis

Santiago Orol

Columna PLAZA PÚBLICA
Santiago Oriol, ex legionario
Miguel Ángel Granados Chapa
Reforma, 8 Nov. 10;
El padre Santiago Oriol anunció su renuncia a los Legionarios de Cristo. Deja también la dirección del exclusivo colegio Everest. Pero no abandonará el sacerdocio, sino que se incardinará en la diócesis de Getafe. Deja atrás una larga trayectoria en la congregación fundada por Marcial Maciel. Su marcha no será inocua. Se irán con él varios profesores del establecimiento que dirigía, equivalente al Instituto Cumbres de México, con aires aristocráticos. Ubicado a las afueras de Madrid, entre Pozuelo de Alarcón y Majadahonda, una de las zonas más caras de los alrededores capitalinos, en sus aulas se preparan los hijos de las familias sobresalientes de España, que luego estudian en el Centro Universitario Francisco de Vitoria.
La decisión de Oriol calará hondo en la Legión de Cristo. Su gesto es una desautorización, casi expresa, inequívoca, a la lenidad del Papa Benedicto XVI que pasó de una rotunda condena a la congregación fundada por Maciel, manifestada en su célebre comunicado del 1o. de mayo, al conformismo que rezuma la carta de su delegado, el futuro cardenal Velasio de Paolis, que el 19 de octubre pretendió dar por concluida la misión que le encomendó el sumo pontífice. El modo de hacerlo, que supone cerrar los ojos a las complicidades de sus colaboradores inmediatos, con las que Maciel pudo desarrollar su doble o triple vida, decepcionó a quienes esperaban una intervención severa del Vaticano en la estructura de la Legión. Hubo quienes, ingenuos parecen ahora, creyeron que el comunicado del 1o. de mayo era apenas el comienzo de un proceso que podría llegar al desmantelamiento de la congregación. Pero son muchos los intereses dentro y en torno de la Legión como para que la condena vaticana a Maciel se extienda también a quienes heredaron su poder y su patrimonio.
La carta del delegado papal fue escrita para serenar a los nuevos jefes legionarios, por si acaso sus ánimos se habían inquietado. El director general de la organización, Álvaro Corcuera, y el vicario de la congregación, Luis Garza -cuyos apellidos denotan su pertenencia a familias mexicanas opulentas y tradicionales- no sólo no rendirán cuentas de sus ligas con Maciel, sino que son depositarios de la autoridad que permitió al fundador consolidar su imperio educativo, financiero y eclesiástico. Quienes tengan alguna queja, algún reproche, alguna duda sobre sacerdotes de la Legión, podrán exponerlas ante los jerarcas mexicanos, que al escucharlas podrán cancelarlas como hizo su maestro y testador.
Contra esa situación se rebeló Oriol, sin tener que decirlo. Tampoco tiene que asumir los efectos que su decisión puede generar en la congregación. Si caben las gradaciones, puede decirse que Oriol era el legionario principal en España. Miembro de una familia aristocrática, él mismo, cuatro de sus hermanos y una hermana pertenecen a esa organización que al llegar y ser bienvenida en España fincó una de sus vertientes más poderosas.
Ignacio María Oriol y Urquijo, de familia de banqueros, fue padre de Santiago, Ignacio, Alfonso y Juan Pedro, legionarios todos ellos, así como de Malen, integrante consagrada de Regnum Christi, la organización de seglares de la Legión. Las consagradas son una suerte de monjas, pues están sujetas a votos de obediencia, pobreza y castidad. Malen Oriol ha dirigido en México el colegio Del Bosque, situado precisamente en Bosques de las Lomas, una escuela que con el Irlandés, el Cumbres y el Cedros están en la primera línea del sistema de enseñanza de los legionarios, que culmina con la Universidad Anáhuac.
El padre Juan Pedro Oriol escribe artículos en la prensa mexicana, hasta hace algunos años en cerrada defensa de Maciel. Rendido después a la evidencia de su carencia de escrúpulos, pidió perdón por esos pecados, como si los cometiera él mismo. Lo hizo, sin embargo, "unido al padre Álvaro Corcuera, nuestro director general". Bajo el título "Sí, soy legionario", reafirmó a partir de febrero del año pasado su pertenencia a la Legión. Su hermano Santiago, en cambio, ha ido más allá.
Con su retirada, Santiago Oriol quizá trace una línea de crítica interna en la congregación. No necesariamente tendrá seguidores en su decisión de hacerse sacerdote diocesano. Puede ser que ni siquiera su familia lo acompañe en ese camino. Pero por su ubicación en la jerarquía legionaria su renuncia no puede ser inocua. Al momento mismo de anunciar su resolución a los padres de familia del Everest, el 27 de octubre, generó una inquietud que acaso repercuta en las relaciones de la Legión con sectores adinerados españoles. Además de los Oriol, que cuentan entre sus inversiones mayores las que poseen en Iberdrola, con gran presencia en México, Maciel se aproximó a la familia Botín, propietaria del Banco Santander, que patrocina un programa de aliento a la enseñanza superior pública y privada bajo el nombre de Universia.
En México la comunidad de negocios cercana a los legionarios parece no haberse inmutado ante los sucesos que afectan a la congregación. El poderoso y acaudalado Carlos Slim ha dicho de modo expreso que continuará apoyando esa causa, como si no hubiera habido la condena del 1o. de mayo. El patronato de Investigación y estudios superiores, SC se muestra en la misma línea, no expresamente solidaria con la Legión sino adherida a ella como en los tiempos en que Maciel era puesto como ejemplo para la juventud por el Papa Juan Pablo II. Y ya se sabe, inequívocamente, que estaba lejos de serlo y mintió y destrozó vidas.
Cajón de Sastre
En el tono desolado y digno que recuerda al de El Diario, de Ciudad Juárez en circunstancia semejante, el periódico de Matamoros El Expreso se duele así de la muerte de su reportero Carlos Alberto Guajardo Romero, caído el viernes en un enfrentamiento entre sicarios y fuerzas federales, del que daba noticia: "¿A quién reclamar? Si la intención del reclamo es obtener respuestas, sale sobrando. Desde hace ocho meses que en el noreste del país han sido rebasados todos los niveles de gobierno, y sus instituciones, quebrantadas y desplazadas, han dejado de cumplir sus deberes elementales... Queda sólo una alternativa: expresar con coraje una enérgica protesta y seguir adelante en el ejercicio de nuestro oficio". En la balacera murió también un militar, cuyo nombre no fue dado a conocer por las autoridades.


Los cárteles

Columna JAQUE MATE: Los cárteles
Sergio Sarmiento, columnista
Reforma, 8 Nov. 10;
"La sociedad prepara el crimen, el criminal lo comete".
Henry Thomas Buckle
Después de una batalla de horas de duración fue abatido en Matamoros el 5 de noviembre Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta. Se decía que era el capo del cártel del Golfo desde la captura y extradición de su hermano Osiel.
No es ésta la primera vez que cae un capo de esta magnitud. Juan García Ábrego, fundador del cártel del Golfo en colaboración con Juan Nepomuceno Guerra, fue detenido en 1995 y extraditado a Estados Unidos. Esto no debilitó a la organización, que quedó bajo el control de Osiel Cárdenas. Tras su detención en 2003, y posterior extradición a la Unión Americana, su hermano mayor, Tony, se quedó con el control. Ahora que Tony ha muerto seguramente se endurecerá la guerra que el cártel del Golfo mantiene con Los Zetas para el control del norte de Tamaulipas.
Otros cárteles han sufrido también la pérdida de sus capos. Ernesto Fonseca, Don Neto, fundó con Miguel Ángel Félix Gallardo y Rafael Caro Quintero el cártel de Guadalajara, que tenía operaciones en el occidente del país y en Ciudad Juárez. Don Neto fue detenido en 1985 en Puerto Vallarta y Caro Quintero el mismo año en Guatemala. Félix Gallardo cayó en manos de las autoridades en 1989. La afirmación de que en el pasado no se detenía a los capos es, como vemos, una mentira.
El desmantelamiento del cártel de Guadalajara no redujo tampoco el tráfico de drogas, pero sí aumentó la violencia. La organización se dividió en dos poderosos nuevos cárteles: el de Sinaloa, de Joaquín (El Chapo) Guzmán y Héctor (El Güero) Palma, y el de Tijuana, de los hermanos Arellano Félix, sobrinos de Miguel Ángel Félix Gallardo.
El Chapo fue detenido en 1993, pero escapó de un penal de alta seguridad en 2001. Al Güero Palma se le aprehendió en 1995 tras caer a tierra su avión privado en un aparente accidente. Ismael (El Mayo) Zambada es al parecer, junto con El Chapo, el principal operador hoy del cártel de Sinaloa.

Ramón Arellano Félix cayó muerto en Mazatlán en 2002 por un contingente de policías ministeriales. Francisco Javier Arellano Félix fue detenido en 2007. Luis Fernando Sánchez Arellano, El Ingeniero, sobrino de Ramón, es al parecer el capo actual de Tijuana.
Los cárteles de Sinaloa y Tijuana han estado en guerra desde principios de la década de 1990. En un enfrentamiento entre ellos, el 24 de mayo de 1993 en el aeropuerto de Guadalajara, murió el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo.
Amado Carrillo, el Señor de los Cielos, sobrino de Don Neto, fundó el cártel de Juárez. Murió en 1997 tras someterse a una cirugía plástica en la Ciudad de México para cambiar su apariencia. Su muerte no disminuyó el tráfico de drogas, pero sí generó guerras con otros cárteles. Hoy el cártel de Juárez es aparentemente dirigido por Vicente Carrillo Fuentes, hermano, y Vicente Carrillo Leyva, hijo de Amado.
Otros cárteles son más jóvenes y han surgido de los anteriores, usualmente tras la muerte o detención de algún capo. Los Beltrán Leyva emergieron del cártel de Sinaloa del Chapo Guzmán. Los Zetas, militares de fuerzas especiales que desertaron del Ejército, trabajaron originalmente para el cártel del Golfo, pero después han tratado de quitarle el mercado. La Familia Michoacana es una división de Los Zetas.
La muerte de Tony Tormenta el viernes es una nueva gran victoria de las autoridades mexicanas. Si el propósito de la guerra fuera matar capos o meterlos en la cárcel, el Estado mexicano parecería encaminado al triunfo. El problema es que la detención o abatimiento de los grandes capos no afecta el tráfico y en cambio sí genera nuevas luchas violentas entre los cada vez más numerosos grupos de narcotraficantes.
Masacre
Se confirmó que los 18 cuerpos hallados en una fosa de Tunzingo, en Acapulco, pertenecen al grupo de 20 michoacanos secuestrados el 30 de septiembre. Aun no hay claridad sobre por qué fueron asesinados estos turistas.

La batalla de Matamoros

Columna Estrictamente personal/ Raymundo Riva Palacio
La batalla de Matamoros
11/8, 2010;
Ejecentral.com
El viernes pasado en Matamoros, ciudad gemela de Brownsville en la frontera tamaulipeca con Estados Unidos, sucedió el suceso más paradigmático en los 47 meses de lucha contra las drogas. Fue la operación donde murió Ezequiel Cárdenas Guillén, conocido en el Cártel del Golfo como “Tony Tormenta”, en la cual se dio la primera batalla formal que muestra cómo esta, que ahora define el gobierno de Felipe Calderón como “lucha contra la delincuencia”, es una guerra real.
Empezó hacia las 10 y media de la mañana del viernes en el centro de Matamoros, en una operación quirúrgica de comandos especiales de la Marina contra Cárdenas Guillén, hermano de Osiel, quien reclutó a 33 desertores del Ejército Mexicano y creó su brazo armado Los Zetas. “Tony Tormenta” nunca pudo reclamar el título de jefe de ese cártel cuando su hermano fue detenido en 2003, y siempre fue relegado a un segundo nivel de mando en la organización criminal tamaulipeca.
Buscado en México y Estados Unidos –donde había una recompensa de cinco millones de dólares por su captura-, los marinos, que reciben su información de inteligencia de la DEA, tenían tres días acosando a Cárdenas Guillén y cerrando el círculo para conseguir su caída. Como sucede generalmente con los comandos de la Marina, no hubo sobrevivientes. Cuando llegaron a la bodega en donde se encontraba escondido, los recibieron con fuego. Respondieron con fusiles de asalto y granadas, con lo que abrieron un boquete de casi dos metros de diámetro, y lo mataron a él y al menos a otras cuatro personas en su interior.
La guerra real no lo muestra esa acción punitiva sino la operación en su conjunto. La descripción de los reporteros en el lugar hablaron de enfrentamientos en diversas partes de Matamoros, con cientos de militares actuando en acción simultánea, helicópteros sobrevolando zonas específicas de la ciudad, y con un número de muertos que oficialmente se ubica en 10, incluido a un editor y reportero de policía del periódico Expreso de Matamoros.
A partir de la información pública y la oficial se puede reconstruir lo que sucedió. Un total de 150 marinos participaron en el operativo dentro de lo que llama la Secretaría de Marina “el primer círculo”. Es decir, son quienes fueron eliminando al perímetro de seguridad de Cárdenas Guillén y se fueron abriendo paso hasta llegar a la bodega. Al menos otros 450 marinos participaron en un segundo círculo, con el propósito de ir neutralizando al perímetro de seguridad externo de “Tony Tormenta” -incluidos francotiradores que fueron anulados-, y evitar que pudieran acerarse al núcleo del enfrentamiento.
Una breve introspección de lo que sucedió en las calles de Matamoros quedó registrado en los videos caseros de ese día. Las crónicas de los periodistas y los mapas que al día siguiente publicaron algunos periódicos de los puntos donde se dieron enfrentamientos, muestra que ninguno de ellos estuvo cerca de la bodega donde murió Cárdenas Guillén, a donde llegaron los marinos a las 15:30 horas –varias horas después de haber iniciado la batalla de Matamoros-. Esto se explica porque hubo un tercer círculo a cargo del Ejército, que estableció una especie de cordón sanitario alrededor del primer plano de operaciones de la Marina.
De acuerdo con información pública y la escasa información oficial al respecto, el Ejército sirvió como muro de contención para los refuerzos que el Cártel del Golfo intentó desplazar hacia la bodega en la que se encontraba “Tony Tormenta”. El enfrentamiento en el punto neurálgico de la batalla se prolongó durante 125 minutos, según el recuento oficial, lo que explica porqué hubo tantos bloqueos y choques armados en otros puntos periféricos del centro de Matamoros.
Los refuerzos del Cártel del Golfo no pudieron acercarse al centro de la ciudad al ser contenidos por el Ejército. En uno de esos enfrentamientos es donde cayó abatido en un fuego cruzado el periodista del Expreso, Carlos Alberto Guajardo, quien se estaba alejando del foco de la batalla en busca de mayor información en las dependencias oficiales. Su muerte dibuja cómo se fueron moviendo militares y narcotraficantes, donde periodistas sin experiencias en guerras, como Guajardo, y la ciudadanía en general, están en alto riesgo.
Guajardo, reportero de policía, hizo lo que tenía que hacer, de acuerdo a la mecánica de su trabajo: acudió a donde se enfrentaban policías y ladrones –esta es la cobertura convencional que predomina en la prensa- y una vez recogido visto lo que sucedía y recopilado la información de campo posible, fue por más datos. Lo que nunca supo, porque pocos se han tomado en serio que esto es una guerra, es que en el momento que se da una operación militar del tipo de la de Matamoros, toda la ciudad entra en movimiento.
Al iniciarse la operación contra “Tony Tormenta”, los militares asumieron que habría batallas en toda la ciudad, que explica los diferentes perímetros de seguridad que establecieron los militares, que se fueron reubicando en la medida en que iban rechazando a los enemigos o establecían nuevos frentes de batalla. Guajardo no sabía que en esos momentos la ciudad era totalmente insegura, por lo que no pudo descifrar lo que se veía en las calles –una situación extremadamente volátil- como se aprecia en los videos caseros, y extremar su seguridad.
Durante unas seis horas y media Matamoros se convirtió en una verdadera zona de combate, que en términos militares se le denomina “teatro de operaciones bélicas”. No hay duda alguna de que eso es lo que sucedió el viernes pasado, acéptelo o no el gobierno del presidente Calderón. La negación, sin embargo, es relevante. No es lo mismo preparar a una ciudadanía para la guerra y trabajar sociopolíticamente en ello –hay naciones que aceptan esa realidad y actúan en consecuencia-, que decirle que está luchando meramente contra la inseguridad pública, y dejarla inerme ante situaciones como las que llevó a Guajardo a la muerte.
La batalla de Matamoros es un modelo clásico de guerra irregular. Aceptarlo tiene costos y consecuencias políticas. Pero no admitirlo eleva las probabilidades de que los daños colaterales sigan subiendo en la medida en que la mentira oficial les ofrece una narrativa maniquea e irresponsable. El costo de largo plazo de esta mentira será mayor que el encubrimiento de esta realidad en la cual los únicos que están sin herramientas para protegerse, mediante medidas precautorias, son los ciudadanos.

twitter: @rivapa