María Amparo Casar, corrupta. Y sus datos personales/Por Federico Arreola
SDP, mayo 04, 2024
Si es cierto lo que ha dicho el director de Pemex, Octavio Romero, y me parece innegable que se trata de la verdad, entonces se ha beneficiado de la corrupción —en una empresa del Estado— la directora de una asociación civil que se supone combate la deshonestidad en el gobierno.
Conste, aunque ella me ha calumniadlo en algún estudio bobo sobre publicidad oficial en medios de comunicación, no tengo interés en acusar de nada a María Amparo Casar, líder formal del grupo Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, que tiene como dirigente real a Claudio X. González.
A la señora Casar quien la acusa, porque considera que tiene la obligación legal de hacerlo, es un funcionario público importante, el director de Pemex. Para la mayor desgracia de la señora Casar, el gobierno de México ha exhibido pruebas contundentes que la condenan, si bien al hacerlo ha difundido datos personales que no debieron salir de los archivos de la empresa paraestatal. Datos personales, en efecto, que no teníamos por qué conocer, pero ya los conocimos y son contundentes: María Amparo es corruptona, en el mejor de los casos corruptilla; lo que sea, la etiqueta de chueca no se la va a quitar.