Papa Francisco regresó a Roma procedente de Estonia tras cumplir una visita apostólica de cuatro días por los países bálticos - Lituania, Letonia y Estonia-, en lo que fue su viaje apostólico # 25 de su pontificado....
Partió del Aeropuerto Internacional de Tallin luego de presidir una Misa en la Plaza de la Libertad ante unos siete mil fieles, a quienes llamó a dejar el temor de evangelizar en un país donde el 54% por ciento de la población se declara no creyente y donde los católicos son solo el 1.2%, según las cifras de Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Bergoglio inició su visita apostólica el sábado 22 de septiembre al llegar a Lituania, país que junto a Letonia Y Estonia integraron la extinta URSS desde 1940 hasta 1991.
Una característica común de esta visita fue el homenaje que e Francisco ha hecho a las víctimas de la dictadura comunista y de la invasión nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Poco después de las 20 horas el avión que transportaba procedente de la localidad estonia de Talin aterrizó en el aeropuerto Roma-Ciampino y éste inmediatamente se trasladó a la basílica Santa María la Mayor.
Como es tradición antes y después de todos sus viajes internacionales, Jorge Mario Bergoglio visitó brevemente la imagen de la patrona de la capital italiana, la Virgen “Salus Populi Romani”, ante la cual rezó unos instantes.
Horas antes ante los periodistas de la fuente que lo acompañaron Francisco abordó varios temas, uno de ellos su histórico acuerdo con China que pone fin a 70 años de conflicto, el tema de años los abusos a menores.
