18 dic 2010

La COMED, hoy

COMISIÓN DE MEDIACIÓN ENTRE EL PDPR-EPR Y EL GOBIERNO FEDERAL(COMED)
México, D.F. 14 de diciembre del 2010.
A La Opinión Pública:

En su comunicado del 29 de noviembre pasado, el Partido Democrático Popular Revolucionario- Ejército Popular Revolucionario (PDPR-EPR) se dirige a esta Comisión de Mediación “dejando a su consideración” continuar o no con la tarea de coadyuvar a la búsqueda de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, miembros de esa agrupación, quienes desde mayo de 2007 son víctimas del delito de desaparición forzada de persona.
De inicio, no dejamos de observar y valoramos el hecho de que el PDPR-EPR ratifique su decisión de mantener la tregua que esta COMED le solicitó desde el inicio de sus tareas. Consideramos que ese compromiso no es sólo con esta Comisión, sino con la sociedad en general.
Del análisis que hicimos al documento, interesa destacar lo siguiente: no existen condiciones para la reanudación de la mesa de negociación formal con el Gobierno Federal, dado que no hay muestras de verdadera voluntad política de resolver la desaparición forzada de los integrantes del Grupo armado. Esto queda claramente en evidencia en el documento de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) fechado el 5 de octubre del 2010, que está a la espera de respuestas del gobierno en aquellas recomendaciones que fueron aceptadas. Tratándose de la Procuraduría General de la República, la omisión es especialmente grave, pues ni siquiera ha investigado por desaparición forzada y supuestamente continúa indagando por privación ilegal de la libertad en su modalidad de plagio o secuestro, no obstante que conforme a las leyes nacionales y los parámetros internacionales, en el caso que nos ocupa están acreditados plenamente los elementos del cuerpo del delito de desaparición forzada de persona.
No obstante lo anterior, decidimos continuar con la tarea, por las siguientes razones:
1.- Tenemos profundo interés en contribuir a la localización con vida de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez. Es fundamental conocer la verdad histórica y restaurar la memoria de los dos luchadores sociales.
2.- Es importante conseguir al castigo de los culpables, para romper el círculo perverso de la impunidad y así evitar la repetición de esta conducta violatoria de los derechos de toda la humanidad.
3.- Debe buscarse la reparación cuando los familiares opten por ella. El daño causado a la sociedad en su conjunto debe ser también restaurado.
4.- Se debe avanzar en el ámbito legislativo para asegurar un marco normativo que inhiba estas conductas y que prevea sanciones adecuadas a la gravedad del ilícito.
5.- La COMED se solidariza con los procesos de búsqueda de los familiares, tanto en el ámbito nacional como en el internacional que pudieran intentar.
Es importante destacar que en Oaxaca hay un nuevo gobernador, Gabino Cué Monteagudo, con quien buscaremos una entrevista para plantearle que acepte la Recomendación 7/2009 de la CNDH. Aunque tenemos claro que los alcances de este asunto no se reducen al estado de Oaxaca, sino que abarcan los niveles federales, incluyendo al ejército mexicano, será importante la aportación que se dé a este caso desde lo local.
Llamamos a la opinión pública a seguir apoyando las tareas de esta COMED, que consideramos de importancia para la justicia y la paz en México.
Atentamente.
La COMED: Miguel Álvarez Gándara, Jorge Fernández Souza, Dolores González Saravia, José Enrique González Ruiz, Miguel Ángel Granados Chapa, Juan de Dios Hernández Monge, Rosario Ibarra de Piedra, Gonzalo Ituarte, Gilberto López y Rivas, Carlos Montemayor(+), Pablo Romo Cedano, Samuel Ruiz García
***

Acapulco ensangrentado

La joya ensangrentadaGloria Leticia Díaz y Ezequiel Flores
Revista Proceso # 1781, 19 de diciembre de 2010;

El último año ha sido devastador para Acapulco, joya del turismo mexicano: luego de la muerte de Arturo Beltrán Leyva, tres grupos criminales buscan el control de la ciudad y dispararon la violencia a niveles inconcebibles. La vida nocturna del puerto –básica para su viabilidad económica– prácticamente ya no existe y la población está aterrorizada por los macabros descubrimientos de cada día: cabezas cercenadas y despellejadas, cuerpos descuartizados, narcomensajes, tiroteos constantes y una nueva plaga: los sicarios adolescentes.

ACAPULCO, GRO.- La violenta disputa de la plaza por parte de grupos del crimen organizado cambió el rostro de esta ciudad: su tradicional vida nocturna cedió el paso a las calles vacías; sus habitantes atraviesan episodios de psicosis colectiva y ya se ha generalizado la extorsión a negocios con el conocido pago del “derecho de piso”.
Entrevistado por Proceso el miércoles 15, el presidente municipal interino de Acapulco, José Luis Ávila, atribuye los crímenes a “rencillas entre grupos”; de las víctimas dice que “en 99% de los casos son gente desconocida” que no está vinculada al sector turístico, del que, puntualiza, “depende 75% de los ingresos estatales”.
Desde diciembre de 2009, tras la muerte de Arturo Beltrán Leyva, tres grupos se pelean por el puerto y las zonas que lo rodean, las cuales abarcan prácticamente toda la bahía de Acapulco, alguna vez considerada la joya del Pacífico mexicano.
Uno es el de Héctor Beltrán Leyva, El H, cabeza del cártel del Pacífico Sur; otro lo forman los restos del de Édgar Valdez Villarreal, La Barbie –detenido el 30 de agosto–, cuyo sucesor y suegro Carlos Montemayor, El Charro, El Compadre o El Norteño, fue capturado el 24 de noviembre; el tercero es una escisión de este último que se hace llamar “cártel Independiente de Acapulco”, integrado por operadores y sicarios guerrerenses.
Aún se recuerda el secuestro de 20 turistas michoacanos en el fraccionamiento Costa Azul, el pasado 30 de septiembre, y el posterior descubrimiento de los cadáveres de 18 de ellos en la comunidad de Tunzingo, el 3 de noviembre.
Hasta ahora no han sido castigados los presuntos responsables, entre ellos mandos policiales de este ayuntamiento presumiblemente ligados a La Barbie y El Charro y que son mencionados en videos recuperados por la Procuraduría General de la República.
Ahora en Acapulco no hay día en el que no aparezcan cadáveres con huellas de tortura. Las zonas suburbana y rural del municipio se han convertido en un tiradero de cadáveres. En dos de las siete agencias del Ministerio Público, Coloso y Renacimiento, sólo el mes pasado hubo 40 y 35 levantamientos de cuerpos, respectivamente.
Al acabar la segunda semana de diciembre ya eran más de 400 los asesinatos de este tipo en Acapulco (el año anterior se cerró con poco más de 300), revela a Proceso un funcionario de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Guerrero que pidió el anonimato. “Hay casos que no se registran. Es frecuente que después de los enfrentamientos entre los grupos delincuenciales o entre éstos y la policía o el Ejército, aquéllos recojan a sus muertos para que no sean identificados”, detalla.

Psicosis

Los autores de este reportaje recorrieron Acapulco entre el lunes 13 y el viernes 17. El miedo y la paranoia de la gente se perciben fácilmente. Pese a ello abundan los testimonios de quienes han visto o padecido algún hecho violento. La población ha sido víctima de la psicosis generalizada producida por rumores de boca en boca o difundidos en las redes sociales o por correo electrónico.
El pasado 10 de noviembre, por ejemplo, padres de familia corrieron a las escuelas –desde primarias hasta prepas– para llevarse a sus hijos por el rumor de que habría atentados contra los estudiantes.
Los servicios de emergencia recibieron decenas de llamadas por “supuestas amenazas en contra de alumnos de diferentes niveles educativos” de Acapulco, dice la tarjeta informativa 2057 enviada por el secretario de Seguridad Pública de Guerrero, Heriberto Salinas Altés, al gobernador Zeferino Torreblanca el mismo día en que se esparció el rumor.
Correos electrónicos firmados por el cártel del Pacífico Sur pedían a la población no salir de sus casas los días 19, 20, 26 y 27 de noviembre porque, decían, Acapulco se convertiría “en escenario de guerra”.
“Vamos a llegar con todo nuestro poder y armamento les decimos de nuevo no salgan por favor, este ves si va enserio no queremos matas y mutilar a gente inocente” (sic), alertaba el mensaje también impreso en volantes y repartido en las calles.
Hubo un antecedente: el pasado 25 de octubre, hombres armados recorrieron las calles de la unidad habitacional El Coloso para pedir a los vecinos que se refugiaran en sus casas y a los comerciantes que cerraran sus negocios, porque iba a producirse un enfrentamiento.
Y ese aviso anticipó dos horas y media de persecuciones y disparos con saldo oficial de cuatro muertos, aunque vecinos de El Coloso aseguran que hubo muchos más caídos que fueron recogidos por los delincuentes.

Nuevas técnicas del horror

El miedo no es gratuito. Lo que ha visto la sociedad acapulqueña es estremecedor.
Apenas el lunes 13, el puerto amaneció conmocionado por una escena macabra: sobre un puente que conduce a Tunzingo fueron tiradas tres cabezas humanas sin piel ni cuero cabelludo; también estaban las manos de las víctimas a las que les amarraron cartulinas con narcomensajes dirigidos, entre otros, a “la suegra de La Barbie” y firmados por “mi APA”. Los restos de dos de las víctimas estaban amarrados de los pies y colgados bajo el mismo puente; uno más quedó en el lecho del río.
Ocho días antes habían localizado los restos de dos personas en el mismo lugar, mutiladas de la misma forma y con un mensaje dirigido a Carlos Montemayor.
Un criminalista de la PGJ, quien pidió mantener su nombre en reserva, cuenta que al perito que levantó los cuerpos y las cabezas desolladas le desconcertó no encontrar en los manuales y protocolos oficiales las palabras para describir el hallazgo.
Tras recordar que las primeras decapitaciones con intención de transmitir mensajes a grupos criminales ocurrieron en Acapulco en 2005, el especialista considera que “la violencia del crimen organizado ha evolucionado de una forma muy drástica y refleja que los ejecutores tienen una personalidad psicótica y sádica”.
“Los primeros ejecutados tenían signos de tortura: lesiones punzantes, quemaduras, golpes. Después los criminales empezaron a decapitar y a quemar con llantas; siguieron con las amputaciones de penes, luego aparecieron cuerpos cortados en pedazos; más tarde sólo eran cercenados miembros superiores e inferiores; cortaban dedos, luego la lengua y ahora la modalidad es quitar la piel del rostro de la víctima.”
Recuerda que cuando Arturo Beltrán controlaba la plaza, muchos de esos cuerpos mutilados o quemados aparecían acompañados de mensajes que hacían suponer que la víctima era un asaltante, violador o secuestrador:
“Favorecieron la disminución de delitos como el robo o la violación; de 10 peritajes diarios que teníamos que hacer para la investigación de algunos de esos delitos, pasamos a uno diario e incluso cero; a partir de diciembre del año pasado, cuando fue asesinado Beltrán, regresamos a los niveles de 10 peritajes diarios por esos delitos.”

Semana ajetreada

Del lunes 13 a la tarde del viernes 17 aparecieron ocho ejecutados en las afueras del puerto, mientras que los cuerpos ya descompuestos de tres personas –dos mujeres y un hombre– fueron exhumados de una fosa clandestina a 20 metros del camino que va al poblado de La Testaruda.
La mañana del miércoles 15, la Policía Municipal recibió reportes de que hombres armados con fusiles AK-47 que viajaban en ocho camionetas irrumpieron en las colonias Emiliano Zapata y Unidos por Guerrero. El saldo: un taller mecánico incendiado, dos casas baleadas, dos autos quemados y presuntamente cinco levantados.
La noche del jueves 16, de acuerdo con una tarjeta informativa de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), se recibió una llamada anónima a las 22:15 horas en la que se denunciaba que “sujetos fuertemente armados y cubiertos del rostro” sometieron a clientes y trabajadores del Canta Bar Secrets, en el bulevar Vicente Guerrero.
El documento de la SSP destaca que los encapuchados obligaron a la gente a tirarse al piso “amenazándola y apuntándole con armas de fuego” y después se llevaron a 11 trabajadores.
La psicosis de los acapulqueños fue alimentada además por versiones de balaceras en el centro de Acapulco.
Isaac, un taxista con 22 años en el oficio, asegura que esas versiones son diseminadas por gente de su gremio implicada con la maña (así llaman a los grupos de la delincuencia organizada).
“Quieren asustar a la gente para que no salga y obligarnos a los que no estamos con ellos a ponernos a su servicio. Te ofrecen 500 pesos diarios y un teléfono celular pero les pagas mil 800 al mes por el permiso de circular. A cambio les tienes que llamar cuando veas un operativo del Ejército o la Marina. Hace tres años más o menos eran 26 los compañeros que se fueron con la maña, ahora ya son 486. Los distingues porque ya no traen placas, nomás el número del taxi.”
Rodolfo, otro trabajador del volante, añade que además el crimen organizado cobra 20 pesos diarios a los taxis y 10 a los colectivos para dejarlos circular. El cobro del “derecho de piso” lo padecen también los vendedores ambulantes y hasta las prostitutas, a quienes les exigen entre 100 y 200 pesos diarios.
Los comerciantes y empresarios no se salvan. José Cedano, presidente del Colegio de Licenciados en Turismo, dice a Proceso:
“Desde hace un año se dan extorsiones telefónicas para pedir cuotas mensuales; yo he recibido amenazas, pero cuelgo el teléfono y ya. Según el sapo es la pedrada: amigos me han dicho que les piden 50 mil, 35 mil o 5 mil pesos. Conozco a 10 amigos pequeños empresarios que por las extorsiones tuvieron que irse de Acapulco.”

“Leyendas urbanas”… pero de sangre

El jueves 16 este semanario constató que a partir de las ocho de la noche la gente que transitaba por la zona costera y céntrica de Acapulco caminaba con prisa, desesperada por llegar a sus domicilios. Dos horas más tarde las calles, los restaurantes y los centros de entretenimiento estaban vacíos.
“La gente tiene miedo de que los paren los encapuchados”, confía un taxista que prefiere no dar su nombre. “Todo el día se ven, pero en la noche da más miedo. Los encapuchados andan en camionetas de lujo y con las armas de fuera; si tienes la mala suerte de que te paren, te sacan del vehículo, te hincan, te apuntan con sus armas y te preguntan quién eres y a dónde vas.
“Un compa taxista tuvo la mala suerte de pasarse el alto de la Vía Rápida a la Costera; aquéllos lo alcanzaron, lo bajaron a golpes y le gritaban ‘¿Tienes mucha prisa o qué?’ El amigo está en la casa, se le subió (bajó) el azúcar.”
Es frecuente escuchar testimonios como el anterior. Hay ciudadanos que han visto no sólo interrogatorios sino que a plena luz del día los encapuchados levantan a transeúntes o automovilistas.
Hay quienes afirman que policías municipales han presenciado esos abusos y no intervienen, como asegura un prestador de servicios turísticos que no quiso identificarse.
Un fin de semana de noviembre, sobre la Costera Miguel Alemán, frente a plaza Bahía, un par de Hummer impidieron el paso de una familia de turistas, un hombre de unos 50 años, su esposa y tres adolescentes.
“El señor y uno de los chamacos le mentaron la madre a los de las Hummer porque casi los atropellan cuando iban a atravesar la calle. De una de las camionetas se bajaron tres armados, dos encañonaron a la señora y a los muchachos, y otro golpeó con la cacha de la pistola al señor; lo hincó y le puso la pistola en la cabeza y le gritaba ‘¿Te quieres morir? ¿No que muy cabrón?’ Otros turistas que andaban por ahí le gritaban y hacían señas a una patrulla que estaba estacionada afuera de plaza Bahía, pero los policías hicieron como que no veían nada y se fueron.”
Para saber cómo actúan los policías basta describir los hechos posteriores a un enfrentamiento entre criminales el pasado 16 de octubre, reconstruidos por varios testigos.
Tras el combate, poco antes de las cuatro de la tarde en el libramiento Paso Texca, quedaron cuatro cadáveres, dos en una camioneta y los otros tirados en el asfalto. Uno de ellos estaba encapuchado y tenía un fusil AR-15. Llegaron dos policías federales, cuatro estatales y 18 municipales. También acudieron periodistas y algunos curiosos.
Simultáneamente arribaron tres Hummer a las que les abría paso un taxi del que bajó un hombre de unos 30 años, robusto y armado. Sin voltear a ver a nadie le quitó la capucha al cadáver, le tomó una foto con el celular y se llevó el arma.
“Cuando agarró el arma la metió al taxi y en eso los policías federales reaccionaron y le gritaron que no se la llevara; se la quitaron; el tipo sacó un pistolón, encañonó al policía y de una de las Hummer se bajó otro chavo que traía un cuerno de chivo.
“Los que andábamos por ahí y los municipales corrimos, nomás se quedaron los cuatro estatales y el federal; todos sacaron sus armas. De repente el primer sicario empezó a hablar en clave con los federales, les decía a gritos quiénes eran sus jefes. Los dejaron ir.”
A algunos como Viridiana, una joven veinteañera, y a Jesús, un automovilista, que se han topado con caravanas de sicarios lo que les ha sorprendido es la edad de algunos de ellos.
El 10 de diciembre, Viridiana y su mamá circulaban por una calle del puerto y a plena luz del día vieron cómo jóvenes menores de edad con cuernos de chivo tenían hincados a otros dos adolescentes a los que les apuntaban. La mamá de la muchacha aceleró y por el retrovisor vieron cómo los adolescentes eran levantados.
Jesús circulaba la noche de un viernes y se encontró con una caravana de ocho camionetas de lujo por cuyas ventanillas asomaban los cañones de los fusiles. Uno de los vehículos se le emparejó.
“Bajaron el vidrio y que veo a un chavo de unos 18 años que me saludó con la mirada. Al otro día me acordé que fue mi compañero en una clínica de Alcohólicos Anónimos; ya entonces me decían que era sicario y yo no lo creía, pensaba que era un chamaco pendejo. Salió de la clínica el chavo y no lo volví a ver hasta esa noche.”
Personal de la PGJ reconoce que a partir de octubre de este año la mayoría de los cadáveres tirados en las calles después de los enfrentamientos son de jóvenes de entre 14 y 18 años.
“Hay indicios de que en Acapulco está operando un grupo de entre siete y ocho menores de edad a los que se identifica como sicarios. No sabemos si son ellos los responsables de las últimas decapitaciones que tanto han impactado, pero por lo menos coincide su aparición con esas situaciones.”
El funcionario de la PGJ lamenta no poder ubicar a qué cártel sirven esos jóvenes: “Desgraciadamente en la procuraduría no podemos hacer mucho, porque si te esfuerzas por investigar un caso, cuando se lo presentas a los jefes, éstos van y lo archivan”.
El alcalde Ávila niega saber de caravanas de gente armada que patrulla las calles de Acapulco, que agreden a la población y mucho menos dice tener quejas de que policías municipales no atiendan a la población agredida. “Sin desmentir a nadie, eso son leyendas urbanas”.
Tras sostener que los niveles de ocupación hotelera los fines de semana están a 70% u 80%, asegura que el puerto se mantiene vigente como centro turístico y que lo único que puede dañar su imagen son “las notas periodísticas”.
José Cedano, director también de la Asociación de Promotores de Clubes Vacacionales del Estado de Guerrero (Asproclub), difiere: “Los niveles de ocupación altos se dan sólo cuando se organizan eventos culturales o turísticos, como los festivales de la Nao o de Cine Francés; pero cuando no ocurre eso el promedio es de 40%”.

Humberto Moreira

Un minicapo para la misma mafia Arturo Rodríguez García
Revista Proceso # 1781, 19 de diciembre de 2010; El gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, sabe combinar sus habilidades de bailarín con la política y concitar el apoyo de la cúpula del PRI; ahora se perfila para sustituir a Beatriz Paredes en la presidencia de ese partido. Lo dejó entrever incluso cuando rindió su quinto informe, a principios de noviembre; desde entonces ha estado en todos los actos de sus pares y aun en la toma de posesión de sus correligionarios en otras entidades. Además, varios aspirantes le allanaron el camino recientemente al anunciar que no competirían por ese cargo.
SALTILLO, COAH.- La cita fue el 4 de noviembre en el Coliseo Centenario, construido recientemente en Torreón e inspirado en la monumental obra de Roma. Ese día la clase política priista y otros personajes acudieron al quinto informe de gobierno de Humberto Moreira Valdés.
Y aun cuando no se presentó ahí ningún gladiador, el acto fue una apoteósica cargada, como en los tiempos en los que el PRI era el partido hegemónico. Ahí estaban los sectores de ese partido, sus organizaciones, así como empresarios y miembros de la farándula. Los militantes llegaban en oleadas y poco a poco llenaron las gradas.
Según los cálculos, acudieron al llamado alrededor de 7 mil personas. Aguantaron todo: el espectáculo político, empezando por el discurso del anfitrión, para después relajarse con las canciones vernáculas interpretadas por Joan Sebastian.
El gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto compartió el espacio con el senador Manlio Fabio Beltrones; la dirigente de su partido, Beatriz Paredes, y los aún gobernadores Mario Marín, de Puebla, y Ulises Ruiz, de Oaxaca. 
También estuvieron el dirigente de la CNOP, Emilio Gamboa Patrón, y el tabasqueño Roberto Madrazo… En fin, fueron 23 los gobernadores, así como 140 diputados federales y senadores los que acompañaron a su correligionario Humberto Moreira. Junto a ellos se vio a directivos de medios, como Juan Francisco Ealy Ortiz, de El Universal, y a magnates, como Ramón Iriarte, fundador de Grupo Lala. 
El acto político-musical fue el marco propicio para que la cúpula priista comenzara a hablar del relevo en el partido; algunos comentaron incluso que el mandatario coahuilense dejará el cargo la primera semana de enero. Además, el veracruzano Fidel Herrera y el hidalguense Miguel Osorio Chong, quienes habían manifestado su interés por suceder a Beatriz Paredes, declinaron, con lo que le allanaron el camino a Moreira.
Los Moreira Valdés 
Un mes después, el sábado 4, Humberto Moreira dejó entrever que anticipará su renuncia al gobierno de Coahuila, la cual legalmente concluye el 30 de noviembre de 2011; dio a entender que lo hará entre el 4 y el 6 de enero.
La convocatoria para la elección del nuevo presidente del PRI, prevista para el miércoles 22, se adelantó para el viernes 17. Hasta ahora todo parece indicar que Moreira, ungido entre otros por el mexiquense Peña Nieto y amigo de la dirigente magisterial Elba Esther Gordillo desde hace muchos años, será el sustituto de Paredes. De ser así, recibirá su constancia de mayoría el 14 de enero y el 4 de marzo asumiría como dirigente nacional del PRI, precisamente el día en que el partido cumple 81 años.
En el gobierno estatal algunos empleados aseguran al corresponsal que Jorge Torres López, quien hoy dirige la Secretaría de Desarrollo Social, será el sustituto de Moreira. Según los priistas consultados, Rubén Moreira, hermano del actual gobernador y presidente del PRI en Coahuila, aprovechará para postularse como candidato a la gubernatura en las elecciones de septiembre de 2011.
De ganar la contienda, Rubén recibiría el gobierno estatal de manos de Torres López, no de su hermano Humberto, como el mes pasado observó Miguel Ángel Granados Chapa (Proceso 1775). De hecho, el jueves 2 Rubén Moreira pidió licencia como diputado ante la LXI Legislatura federal, en la que se desempeña como presidente de la Comisión de Derechos Humanos desde septiembre de 2009.
Hasta el momento los estudios de opinión le otorgan a Rubén Moreira un amplio margen de ventaja entre los aspirantes de su propio partido y frente a los de las otras organizaciones políticas.
En marzo pasado Rubén atrajo los reflectores, luego del pacto entre el PRI y el PAN para subir impuestos a cambio de que este último partido no se aliara con el PRD en las elecciones de 2011 en el Estado de México. En esa ocasión Rubén subió a la tribuna y calificó de espurio a Felipe Calderón porque, dijo, no ganó los comicios presidenciales de 2006, por lo que su gestión no era legítima.
Uno de los pocos que cuestionan a Rubén Moreira por sus afanes de convertirse en gobernador de Coahuila es Andrés Manuel López Obrador, quien el pasado 24 de noviembre dijo durante su visita a Saltillo: “La gente está harta del PRI y del PAN, y ya ven ustedes lo que sucede aquí en Coahuila, donde el gobernador que se va quiere dejar a su hermano, algo que nunca ha pasado en la historia de nuestro país”.
Otro de los Moreira Valdés, Carlos, es un activo líder magisterial. De 2004 al 17 de diciembre, por ejemplo, estuvo al frente de la Sección 5 del SNTE. Al día siguiente tomó protesta como dirigente de la Sección 38 del SNTE. Y Álvaro, otro de los hermanos de Humberto, se desempeña como director de Desarrollo Social en el ayuntamiento de Saltillo.

Familia magisterial

En los ochenta, Humberto Moreira comenzó a destacar en la política como dirigente estudiantil en la Normal de Saltillo, donde cursó la carrera magisterial. Hijo de una familia de maestros, sus padres, Rubén Moreira Flores y Evangelina Valdés, también fueron normalistas; ella es una de las precursoras de la educación preescolar en Coahuila.
En 1988 ocurrió uno de los conflictos más famosos en la historia de la Sección 38 del SNTE. Humberto jugó un papel relevante en el llamado Movimiento Reivindicador, que abogaba por una elección democrática dentro del gremio magisterial.
Surgido tras el deceso de su dirigente Eliseo Lorea, los integrantes de ese movimiento debían nombrar al sucesor mediante el procedimiento estatutario, pero las reglas no se respetaron. Finalmente se impuso a Antonio Chaires Costilla, tutor político de Humberto Moreira, fallecido en diciembre de 1989 en un accidente automovilístico aún no aclarado.
Tras la muerte de Chaires el movimiento se disolvió y sus simpatizantes fueron expulsados del SNTE. Humberto Moreira decidió trasladarse a la Ciudad de México, donde ocupó diversos cargos en el sector educativo hasta convertirse en secretario particular de Gilberto Guevara Niebla, subsecretario de Educación durante la administración de Ernesto Zedillo.
Moreira regresó a Coahuila 10 años después como delegado del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), de donde saltó al Instituto Nacional de Educación para Adultos (INEA).
En esa dependencia Moreira diseñó una estructura electoral a partir de los círculos de estudios en barrios populares. En 1999 apoyó la postulación de Enrique Martínez y Martínez, quien ganó la gubernatura de Coahuila. En reciprocidad, el mandatario lo designó secretario de Educación.
En 2002 Moreira declinó competir por la alcaldía de Saltillo. Tres años después se postuló para la gubernatura y derrotó con amplio margen a su rival más cercano, el panista Jorge Zermeño Infante, actual embajador en España. Desde entonces el grupo de Zermeño mantiene una abierta confrontación con el mandatario.
Los panistas conocen los devaneos de Moreira. Uno de ellos es su simpatía hacia el sandinismo. Según ellos, cuando Daniel Ortega llegó al poder en Nicaragua en 2006, el mandatario publicó un desplegado en varios periódicos de ese país centroamericano para felicitarlo.
Además, Moreira tiene en sus oficinas de gobierno fotos en las que aparece con el líder cubano Fidel Castro y suele jactarse del intercambio de programas de educación y salud con la isla caribeña; su castrofilia da pie a sus rivales para comparar a Humberto y Rubén con los hermanos Fidel y Raúl Castro.

Los amigos del gobernador 

A lo largo de la gestión de Humberto Moreira en Coahuila, Proceso ha documentado la forma en que el mandatario ha beneficiado al sector empresarial de la entidad. La mayor parte del acero para la construcción de puentes y obras viales, por ejemplo, proviene de Altos Hornos de México, que preside Alonso Ancira Elizondo. Hoy, el empresario es uno de hombres de negocios más prósperos y también uno de los amigos más cercanos del mandatario.
Al sector automotriz, en plena crisis económica en 2008, Moreira le regaló recursos para el pago de nómina durante los paros técnicos; además, el 5 de febrero de 2009 anunció que su gobierno aportaría 1 millón y medio de dólares a la empresa General Motors y que reclamaría al jefe del Ejecutivo federal un apoyo semejante para las tres plantas de esa firma trasnacional instaladas en la zona (Proceso 1684).
La administración de Moreira también le otorgó 80 millones de pesos al Grupo Modelo para que instalara una planta en Nava. Además aportó 140 millones de pesos para el estadio Territorio Santos Modelo en Torreón, de los cuales 100 fueron para la construcción y 40 para obra complementaria (Proceso 1665 y 1723).
Sin embargo, aun cuando sus detractores del PAN acusan a Moreira por el despilfarro y califican su política social de populista, clientelar y electorera, militantes panistas de prosapia en La Laguna, como Luis Gurza, han respaldado al gobernador.
A principios de noviembre el Comité Directivo Estatal del PAN, encabezado por Carlos Ulises Orta Canales, denunció que la administración de Moreira tiene una deuda de 7 mil 700 millones de pesos. El mandatario respondió que en realidad es de 3 mil 500 millones de pesos; el resto, 3 mil 700 millones de pesos más, dijo, son avales para los municipios.
Dichos programas van desde la introducción de servicios básicos hasta la Tarjeta de la Gente –donde se deposita dinero a familias de escasos recursos–, la instauración de seguro de gastos médicos a todos los estudiantes o, más recientemente, el anuncio, aún no cumplido, de regalar computadoras portátiles a 30 mil universitarios.
La oposición a los Moreira –que apenas tiene siete diputados del PAN y uno del PRD, frente a 21 del PRI, que además gobierna en 33 de 38 ayuntamientos– se ha mostrado ineficaz para frenar los desplantes del mandatario. Y él se ha esmerado por enquistar a sus incondicionales en la administración coahuilense.
En febrero de 2010, por ejemplo, el Congreso estatal aprobó la desaparición de la Secretaría de Finanzas para crear la Tesorería del estado y el Sistema de Administración Tributaria del Estado de Coahuila (SATEC), este último es el responsable de las tareas fiscales en la entidad.
El mandatario pretendía que el titular del SATEC durara 12 años, pero en junio los panistas protestaron y lograron que el periodo se redujera a seis, aun cuando lo consideran demasiado largo. El titular de la dependencia es Javier Villarreal, quien dejó la Secretaría de Finanzas para asumir su nueva encomienda, que terminará en 2016.
Otro caso es el de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia que asumieron en noviembre de 2008. Su cargo será de 15 años, luego de una reforma legal aprobada sin demasiada oposición.
Por esas fechas también se aprobaron varias reformas, entre ellas las que permitieron la fusión de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y la Procuraduría General de Justicia para crear la Fiscalía General del Estado (FGE). El entonces procurador, Jesús Torres Charles, se convirtió en fiscal general en marzo de 2009 y, conforme a las reformas, durará en el cargo hasta 2017.
La diputada panista Esther Quintana, quien se opuso a la creación de la FGE, asegura que la dependencia es ineficaz a pesar de todas las facultades que tiene.
Pero el mandatario se defiende. Responsabiliza al gobierno federal de la violencia desatada en el país, en especial la de la comarca lagunera. Dice que el presidente Felipe Calderón lanzó “su guerra” sin convocar a los gobernadores y luego los dejó solos (Proceso 1757).
Desde 2006 la inseguridad en esta región lagunera se caracteriza por dos factores: los vínculos de policías municipales con los cárteles y la impunidad en cientos de homicidios, secuestros y extorsiones. Hoy, funcionarios cercanos a Jesús Torres Charles, como el exdelegado de la fiscalía Carlos Centeno, son sospechosos por los presuntos nexos con las organizaciones criminales.
A los coahuilenses les pesa que las autoridades no capturen a los delincuentes. Y enumeran los que consideran los hechos de mayor impacto en la entidad durante la administración de Moreira: los ataques a bares de Torreón, la desaparición del jefe antisecuestros, Enrique Ruiz Arévalo, en 2007; del estadunidense Félix Batista, negociador de secuestros, ocurrida en diciembre de 2008; del periodista Rafael Ortiz, en julio de 2006, y el asesinato del periodista Valentín Valdez en enero pasado. 
En contraste, la Coparmex difundió el martes 7 un estudio en el que expone que Coahuila es el estado fronterizo más seguro. Y Moreira ha sabido sacar ventaja de la situación. 
A principios de 2006 cobró relevancia nacional tras la tragedia en la mina Pasta de Conchos, al mostrarse solidario con los deudos de los mineros. Sin embargo, su figura se opacó en junio pasado cuando la policía estatal se lanzó contra deudos y activistas en la mina.
Pese a las descalificaciones, Moreira ve hacia delante. Sus críticas a los presidentes panistas Vicente Fox y Felipe Calderón, así como su estilo desenfadado y frontal, lo han posicionado en el PRI, a cuya presidencia aspira. 
También sabe explotar su amistad con los cubanos Fidel y Raúl Castro; con el expresidente Carlos Salinas de Gortari, de quien ha sido anfitrión, y de recibir en fastos magisteriales a Elba Esther Gordillo, quien suele elogiarlo a la menor provocación.
El 4 de noviembre Moreira fue el campeón del Coliseo Centenario, pues en su afán por convertirse en dirigente nacional de unidad reunió a los priistas más influyentes del país.
Y aun desde antes de que se emitiera la convocatoria, Moreira había asumido un papel protagónico. En las últimas semanas ha asistido a todos los informes de gobierno en las entidades priistas.
El nuevo dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, al referirse al gobernador coahuilense por su conocido estilo de baile cholo-colombiano, dijo que aun cuando a Moreira le guste bailar, “tendrá que hacerlo también con la más fea”.
Y el mandatario le contestó, el jueves 9, en el sexto informe de su correligionario Eugenio Hernández Flores, de Tamaulipas (a quien Moreira intentará colocar en el Comité Ejecutivo Nacional del PRI): “Sí, me gusta bailar… y me lo voy a bailar a él y a su partido”.  l
La socia
José Gil Olmos
Cuatro años y medio después de ser expulsada del PRI, Elba Esther Gordillo está preparando una nueva ofensiva política. No se trata de su retorno como militante de su antiguo partido, sino de su transformación en pieza clave en la lucha por la dirigencia priista y en la elección presidencial de 2012, para lo cual apoya a dos de sus principales socios políticos: los gobernadores Humberto Moreira y Enrique Peña Nieto.
La expresidenta nacional del PRI Dulce María Sauri Riancho precisa que Gordillo nunca ha dejado de estar presente en el partido y, ahora que vuelve a tener fuerza el PRI y probabilidades de ganar en 2012, será un factor en la toma de decisiones, aunque supone que no buscará recuperar su militancia.
“Es una mujer de poder y si algo sabe es otear, sabe oler en el ambiente político hacia dónde van las corrientes de poder. Tuve ocasión de observarla en 2000 y en 2006 y ahora no me parece equivocada la observación de que estará nuevamente presente en el PRI a través de las alianzas que, por cierto, nunca se rompieron”, sostiene la exgobernadora de Yucatán.
Dirigente nacional priista en 2000, cuando su partido perdió la Presidencia de la República y Gordillo participaba en la campaña a través de su hija Maricruz Montelongo en la Red de Mujeres por Francisco Labastida, Sauri precisa que con la líder vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) tuvo un trato político “de respeto mutuo”. 
“La reconozco como una mujer que cumple sus compromisos y eso en la política es muy valioso –comenta Sauri–. Lo que está pasando es absolutamente explicable: es una mujer con un enorme instinto de poder y el hecho de que haya abandonado al partido no significa que hayan terminado las relaciones establecidas a partir de su larga estancia partidista. Las rupturas nunca se dan del todo: muchos militantes priistas se han ido a otros partidos y esas relaciones nunca se rompen por el cambio de militancia partidista. Y menos cuando las relaciones están basadas en el poder.”
Para el senador potosino Carlos Jiménez Macías es muy difícil que Gordillo pueda retornar al partido en el que hizo su carrera política, porque ya tiene muchos enemigos ahí. No obstante, considera que tratará de hacer sentir su presencia mediante dirigentes con quienes mantiene buena relación política y amistosa, como Humberto Moreira, que salió de las filas del SNTE y aspira a dirigir el PRI, y con Peña Nieto, a quien considera el candidato presidencial.
“Lo que ella está buscando es ser un factor de negociación en el futuro”, precisa Jiménez Macías, uno de los diputados que actuaron contra Elba Esther cuando coordinaba la fracción parlamentaria del PRI hasta lograr que fuera relevada en 2004.
De acuerdo con varios integrantes de la dirigencia priista, Gordillo ya empezó a construir puentes con distintos políticos priistas a los que se había enfrentado, entre ellos Manlio Fabio Beltrones, a quien en 2005 declaró públicamente como su “enemigo número uno” cuando se inició su proceso de expulsión del partido por apoyar a Felipe Calderón.
Las fuentes consultadas afirman que Gordillo tomó distancia del gobierno calderonista y principalmente del secretario de Educación, Alonso Lujambio, a quien el 3 de septiembre acusó de estar más preocupado por la candidatura presidencial que por la educación. Atribuyen este deslinde a que le ve pocas posibilidades al PAN de conservar la Presidencia. 
Igualmente, señalan los priistas consultados, ella se dio cuenta de que el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, tiene escasas oportunidades de ser el candidato presidencial de la izquierda ante Andrés Manuel López Obrador.
Rafael Olvera, profesor normalista desde hace 36 años, miembro de la disidencia del SNTE en Baja California y uno de los críticos más agudos de la iniciativa de reformar la ley del ISSSTE, dice que en el proyecto político de Gordillo es importante convertirse en un factor principal en la disputa de la dirigencia nacional del PRI y la candidatura presidencial de 2012.
“Ahora está sacando toda su experiencia para mover sus piezas políticas clave. En los hechos, con el gobernador (de Coahuila) Humberto Moreira la maestra Gordillo regresa al PRI porque es su alumno; lo hizo dentro del SNTE, lo mismo que a su hermano Carlos Moreira, que se quedará a cargo del sindicato de maestros en la entidad, y a su otro hermano Rubén, quien es el aspirante más fuerte a la candidatura a gobernador de la entidad”, señala Olvera.
Recalca que Moreira es parte del proyecto político de Elba Esther Gordillo y del expresidente Carlos Salinas de Gortari, quienes están detrás de la campaña permanente de Enrique Peña Nieto.

La amistad con Moreira

La relación entre Moreira y Gordillo es vieja. Desde que estaba en el SNTE el gobernador de Coahuila siempre tuvo afinidad con la dirigente del sindicato y a través de ella escaló en el Congreso de la Unión hasta llegar al Ejecutivo estatal.
En su quinto informe de gobierno, que se llevó a cabo el pasado 4 de noviembre en Torreón, Moreira rechazó que la maestra esté detrás de su aspiración de dirigir el PRI, pero adelantó que si consigue su objetivo buscará una alianza con el Panal.
“Yo no sé si algún gobernador no es amigo de Elba Esther. Es amiga del presidente, (de) gobernadores… Es cierto, somos maestros, nos conocemos, somos amigos, como es amiga del resto de los gobernadores y de muchos miembros del gabinete federal, y de Marcelo Ebrard también”, dijo en entrevista.
Como su relación es inocultable, el mandatario coahuilense intentó delimitar su territorio: “No tendría por qué consultarle a ella; cuando platicamos lo hacemos de otras cosas: yo no me meto en las cosas del SNTE y ella no se mete en cuestiones de mi gobierno; ni yo me meto a hablar del Panal ni ella del PRI”.
En esa ocasión Moreira lució poder de convocatoria: asistieron a su informe 21 gobernadores electos o en funciones y exgobernadores priistas. Acudieron también Beatriz Paredes, Manlio Fabio Beltrones, Francisco Rojas y Emilio Gamboa. 
Al más viejo estilo, Moreira reunió en el Coliseo a más de 6 mil priistas y, en medio de la algarabía, Enrique Peña Nieto y Roberto Madrazo le manifestaron su apoyo para que sustituya a la diputada Beatriz Paredes como presidente nacional de su partido. 

Red de alianzas

El 13 de julio de 2006 la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI notificó que Elba Esther Gordillo quedaba expulsada por apoyar a Felipe Calderón y crear al Partido Nueva Alianza (Panal) como un instituto antagónico al priismo. 
La comunicación le fue entregada a la maestra a las 17 horas y en su casa por el secretario de acuerdos de dicha comisión, José Antonio Pérez Parra, pero la recibió el portero del edificio. 
Sin embargo, técnicamente la maestra no fue expulsada del partido porque no se cumplió el procedimiento reglamentario, que consiste en una especie de juicio en el cual ella se defendería. Antes que eso, decidió renunciar y a partir de entonces comenzó a jugar por su cuenta. Como lo hizo en el gobierno foxista, colocó a sus principales colaboradores en la administración de Felipe Calderón, a quien le levantó la mano como presidente electo. 
Algunas de sus piezas siguen actuando en el gobierno calderonista, como Alejandro Poiré, quien fue el responsable de la Dirección Ejecutiva de Prerrogativas y Partidos en el Instituto Federal Electoral (IFE) de 2003 a 2005 y ahora es el secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional (CSN), que antes ocupó otro elbista, Roberto Campa. 
Asimismo, su yerno Fernando González es subsecretario de Educación Pública; Benjamín González Roaro sigue a la cabeza de la Lotería Nacional, y hasta hace unos meses Miguel Ángel Yunes Linares era director general del ISSSTE.
Al mismo tiempo, la dirigente magisterial comenzó a preparar el terreno para las alianzas con el PRI desde mediados de 2008, cuando tuvo encuentros con la presidenta del partido, Beatriz Paredes. Con ella acordó mantener dentro del priismo la fuerza del magisterio.
Noé Rivera, exoperador político de Gordillo y fundador de la Asociación Ciudadana del Magisterio, reveló en entrevista que Paredes y la maestra negociaron también algunas candidaturas a diputaciones federales y decidieron colaborar para frenar las aspiraciones presidenciales de Manlio Fabio Beltrones (Proceso 1644).
Dos años más tarde, en el ocaso del gobierno calderonista, la maestra vuelve a colocar sus piezas, en esta ocasión dentro del PRI. Se espera que la dirigencia de éste se renueve en marzo próximo y hasta hace poco los más claros aspirantes al cargo eran Emilio Gamboa y Humberto Moreira. Sin embargo, Gamboa, dirigente de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), rechazó pelear por la dirigencia, previendo que la lucha interna desgaste a los grupos de poder. 
Ante esta circunstancia, Gordillo manifestó su apoyo irrestricto a Moreira para que encabece el PRI, pero también promueve para la secretaría general a su paisana, la senadora chiapaneca María Elena Orantes. 
Al mismo tiempo fortaleció sus relaciones con los gobernadores priistas de Nayarit, Ney González; de Hidalgo, Miguel Osorio Chong; de Aguascalientes, Carlos Lozano de la Torre; de Veracruz, Javier Duarte; igual que con los de la alianza PAN-PRD en Oaxaca, Gabino Cué, y en Puebla, Rafael Moreno Valle. 
En el caso de Nayarit, la maestra tiene a su hija Maricruz Montelongo en la representación de ese estado en el Distrito Federal; y en Oaxaca logró colocar en la Secretaría General de Gobierno a Irma Piñeiro, quien fue candidata a gobernadora por el Panal y que al final de la campaña declinó a favor de Gabino Cué.  l

Krauze a CSG

Nuevo intelectual orgánico del PRI /Enrique Krauze
Revista Proceso # 1781, 19 de diciembre de 2010;
Olvidando que en la política mexicana todo puede pasar, la familia priista siente que ha superado la pesadilla de 2000 y 2006: se retrata en alegres convivios alrededor de su visible precandidato, goza su predominio parlamentario y se dispone a renovar su dirigencia con una nueva generación. Pero algo falta en el cuadro, un elemento fundamental de legitimidad: un soporte ideológico. ¿Qué es el PRI? Ni ellos mismos saben. Beatriz Paredes confesó en una asamblea: “Nuestra indefinición nos coloca como un partido gelatina, porque nos amoldamos al poder en turno” (La Jornada, 2 de marzo de 2007).
En sus orígenes remotos, el PRI fue un partido “Nacional Revolucionario”, y esa ideología tuvo el consenso de varias generaciones. El consenso se rompió en 1968 y empezó a formarse otro contra el PRI y a favor de la democracia. Ser un intelectual del PRI se volvió embarazoso. Ahora el PRI se siente (se sabe) huérfano de intelectuales. Para llenar ese vacío, Carlos Salinas de Gortari se presenta con un kilo de ideas en un libro que confirma su conocido peso intelectual.
Quiere salir en la foto, y se comprende. Debe ser muy difícil ser rico e inteligente, seguir siendo relativamente joven y resignarse a la penumbra después de haber sido tan poderoso. Peor aún, resignarse al tenaz descrédito nacional. Sumándose a la cargada triunfalista de la posible vuelta al viejo régimen, ofreciéndose como ideólogo del PRI y presentándose como autor, piensa reivindicar su posición en la historia, vengarse de todos los que en su momento lo criticaron, revertir la condena pública y hacerla caer sobre su Némesis, Ernesto Zedillo. Tras haber publicado ya dos gruesos volúmenes que penosamente (quizá por la incomprensión de los lectores) no alcanzaron una segunda edición, este tercero recicla el “liberalismo social” con una portada tricolor y un título extraño: Democracia republicana. Ni Estado ni mercado: una alternativa ciudadana.
Salinas sabe que los intelectuales contribuyeron al derrumbe del viejo sistema autoritario que él representó. Por eso los ataca. (Insidiosamente, por ejemplo, se refiere a mí como “ingeniero” y “empresario”. Soy ambas cosas, a mucha honra. Desde 1977 he estado en la iniciativa privada haciendo una obra cultural.) Salinas se hace las ilusiones de ser el intelectual que contribuya al derrumbe de la transición. Hasta se ha puesto a leer a Gramsci, de quien toma la definición de los “intelectuales orgánicos”: “son aquellos cuya labor central consiste en abonar argumentos a favor de ciertas ideas y ciertos proyectos para convertirlos en dominantes...”. Esa cita define sus aspiraciones. Se apunta como aspirante a “intelectual orgánico” del PRI.
Por años, Salinas ha insistido en que su gobierno convirtió a México en una potencia económica, en que gracias a él nuestro país transitó a la democracia, en que su hermano era un hombre honesto. Millones de personas se han negado a creerle. ¿Puede presentarse como un “demócrata republicano” el hombre por quien “se cayó el sistema”, el que gestionó la quema de las boletas de la elección de 1988, el que “no veía ni oía” (pero sí reprimía) a la oposición de izquierda, el que presumía de haber hecho “la perestroika sin la glasnost”, el que sondeó seriamente la posibilidad de reelegirse, el que abandonó a Colosio? Con ese pasado a cuestas, está por verse si ahora le creen y lo leen. Y, lo más importante para él, está por verse si la familia del PRI, piadosa como es, se suicida convidándolo a la foto.

Marisela Escobedo Ortiz

Tristeza, rabia, impotencia...Marcela Turati
Revista Proceso # 1781, 19 de diciembre de 2010;
Solidarias, enardecidas, muchas activistas sociales acudieron en la capital de Chihuahua al funeral de la madre que durante dos años señaló al asesino de su hija, la adolescente Rubí Marisol, sin que nadie escuchara su clamor de justicia. La tardía destitución de tres jueces negligentes que habían puesto en libertad al homicida no calma la indignación generalizada, toda vez que ahora Marisela Escobedo, la madre asesinada frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, se convirtió en una víctima más de la indolencia y el cinismo...
CHIHUAHUA, CHIH.- Las coronas de flores llegaron al Palacio de Gobierno del estado el viernes 17 y fueron colocadas en la fachada. Una veladora encendida en la banqueta, frente a la puerta donde entra el gobernador, daba cuenta del asesinato ocurrido ahí en la víspera. Decenas de ciudadanos indignados lloraban su rabia y su tristeza. Un grupo de mujeres vestidas de negro hacían guardia de honor en la plaza ubicada frente al palacio; justo en la Cruz de Clavos donde se suma y se llora cada nuevo feminicidio. 
Esta vez no agregaron a la lista a una de sus hijas desaparecida sin rastro, o una cuyos restos fueron encontrados en un terreno baldío después de haber sido violada y mutilada. Ésta llevaba el nombre de Marisela Escobedo Ortiz, una mamá valiente que se dedicó dos años a exigir castigo al asesino de la más pequeña de sus hijos, Rubí Marisol, de 16 años, y cuya última decisión fue plantarse en las narices del gobierno hasta que detuvieran al homicida que ella ya tenía ubicado.
“No me voy de aquí hasta que no detengan al asesino”, advirtió Marisela cuando tendió su campamento en la Plaza Hidalgo de Chihuahua, frente al despacho de gobierno y la Procuraduría Estatal de Justicia, y que tapizó el parque con las fotos del homicida: Sergio Rafael Barraza, y con mantas que cuestionaban por qué la justicia nada más sirve a los poderosos (¿por qué encontraron en cuatro meses al asesino del gobernador y en 15 días a los del hermano de la exprocuradora?, se preguntaba). 
Marisela también colgó tendederos con mensajes de amor hacia la joya preciosa que le arrebataron, como el que incluye fragmentos de su biografía: Era una bebé hermosa y saludable, juguetona y alegre, tierna y dulce como una muñequita con su vestidito de terciopelo azul (…) bella y radiante como capullito en flor (…) a los 14 años con sus ilusiones y sueños de adolescente conoció un hombre y le entregó su corazón de niña (…) Rubí Marisol procreó una bebé con él, tenía sólo 15 años y el amor por su hijita era algo que todos podían ver (…) la vida que vivió con ese hombre acabó el amor que ella le tenía, quiso dejarlo, alejarse, ¡salvarse! Por unos días se escapó de él. ¡Lo intentó!
El jueves 16 llegó al campamento donde estaba Marisela un sicario y la persiguió hasta las puertas del palacio, donde le disparó a quemarropa. La difunta fue velada simbólicamente el viernes 17. “No se puede descartar ninguna línea de investigación, incluida la de un crimen de Estado, pues Marisela no iba a parar”, decía la circular firmada por el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres y Justicia para Nuestras Hijas, las organizaciones que coadyuvaban en el caso de Rubí. La gente congregada coreaba a gritos “¡Ni una más, ni una más!”.
Repudiaban así la muerte de la señora Escobedo, el equivalente a la famosa señora Wallace, sólo que esta madre justiciera norteña no tenía dinero ni el respaldo de autoridad alguna.

De enfermera a detective

Marisela Escobedo era un alma serena, una enfermera jubilada y alegre que disfrutaba la compañía de sus cinco hijos y de sus nietos, hasta que se percató de que Rubí Marisol, su hija quinceañera, que se había obstinado en casarse con su novio y se estrenaba como mamá, tenía problemas en su matrimonio.
“El hombre la tenía controlada, escondida, no quería que me le acercara, le decía que yo le metía ideas de que ella estudiara. Cuando yo la buscaba, él comenzaba a contradecirse, hasta que un día me dijo que ella lo dejó. Yo sospechaba que algo estaba mal y puse el reporte a la Unidad de Personas Extraviadas”, narró a Proceso en junio pasado la propia señora Escobedo.
Ese mes la señora expuso su caso al enviado de la oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Alberto Brunori: “Me tuve que ir a vivir al Departamento de Personas Ausentes para que la procuraduría me hiciera caso. Hice la investigación, recabé datos. Contra lo que siempre ocurre, logré comprobar quién es el asesino, pero los jueces lo dejaron en libertad y nos devastaron, nos aniquilaron. Ahora vivimos con miedo”. 
El diplomático italiano se conmovió con su testimonio.
De ama de casa, Marisela se convirtió en investigadora. Rastreó los escondrijos del asesino: la primera vez que lo encontró lo llevó a juicio, logró que confesara su crimen y dónde dejó los restos de Rubí, pero eso no le valió para que los tres jueces del nuevo Sistema de Justicia Penal lo consideraran culpable. Lo absolvieron por “falta de pruebas”. La segunda vez que la señora lo ubicó, en Fresnillo, Zacatecas, la policía local lo dejó escapar y la procuraduría de Chihuahua tampoco mandó a tiempo la orden de aprehensión; la tercera, hace unas semanas, ya nadie –ni siquiera el nuevo gobernador, César Duarte– la quiso escuchar.
“Mi madre siempre buscó por lo legal, por lo bueno, porque mucha gente nos ofreció sus servicios para hacernos ‘trabajitos’ contra el hombre que mató a mi hermana, pero mi mamá siempre tenía confianza en que la justicia lo iba a resolver”, relató, dolido, Juan Frayre Escobedo, el hijo mayor de Marisela, mientras esperaba con sus tres hermanos y sus tíos el cadáver de su mamá para enterrarla en Juárez.
Enseguida de él desayunaba su sobrina de dos años, la hija de Rubí, la chiquita a la que Marisela trató como si fuera su sexta hija, quien era su compañera inseparable, que estuvo presente en la plaza al momento de su asesinato. La niña se ve tranquila.
“Mi mamá no pudo guardarle luto a mi hermana, siempre andaba de arriba pa’bajo, de un lugar a otro. En junio, en la caminata que hicimos, llegamos a Fresnillo, Zacatecas, y nos enteramos de que ahí andaba el asesino, pero cuando convencimos a los policías de que lo capturaran, diciéndoles que la recompensa era de 250 mil pesos, ya cuando llegaron lo vimos correr por la azotea. Y todavía la procuradora (Patricia González) dijo que mi mamá lo había inventado. 
“Y una tercera vez lo volvimos a ubicar, la semana pasada mi mamá ingresó a un evento del gobernador (Duarte) y se presentó. Expuso en público por qué estaba ahí, y él se molestó, le dijo que no traía datos consistentes. Ella decidió entonces quedarse a dormir afuera del palacio el tiempo que fuera necesario hasta que la tomaran en cuenta”, comenta el hijo, y comienza a llorar al ver en la televisión las imágenes que los noticiarios muestran sobre su madre.
Entre las imágenes que repitieron los noticiarios están las que captó la cámara de seguridad en las que se ve cuando el asesino se baja de un auto blanco compacto y se dirige a ella y la encañona, pero se le encasquilla la pistola. Ella trata de defenderse, cruza la calle y corre a las puertas del palacio de gobierno, él la persigue y le dispara en la cabeza. Ella muere a las puertas de la casa de gobierno; a unos metros de la procuraduría. Nadie interviene. 
En el lugar queda el tendido de mantas de amor hacia su hija y en las que exigía la destitución del trío de jueces que exoneraron al asesino.
El hijo de Marisela, acompañado por sus hermanos, cada tanto hace pausas en la entrevista. Sobre todo cuando en los noticiarios aparece el gobernador Duarte, quien anuncia que –ahora sí– pedirá la destitución de los jueces corruptos y –ahora sí– atrapará al asesino.
La destitución se concreta el viernes 17, y aunque “el gobernador dice que habrá un proceso de desafuero para los jueces que propiciaron la impunidad, faltan los otros culpables: los ministeriales que no llevaron a cabo las pesquisas; la unidad para personas desaparecidas también falló, y también la comisión interinstitucional que se creó para ver su caso”, señala Lucha Castro, directora del Cedhem y abogada coadyuvante en el caso de la adolescente.
Añade: “Se debe sancionar a los ministerios públicos y a los policías que no hicieron las indagatorias o que no llevaron a cabo las órdenes de aprehensión, o a los que no habían mandado los oficios a Fresnillo para que allá lo atraparan (al asesino de Rubí Marisol); además de la responsabilidad del gobierno actual, que conocía el caso y no hizo nada”. 
La familia de Rubí Marisol considera que el sicario que mató a Marisela no fue enviado por Sergio Barraza, el asesino confeso de Rubí, sino que viene de altas esferas. 
“Ese tipo qué se iba a arrimar acá, si lo que quería era esconderse. Mi mamá ya estaba presionando mucho al gobierno, evidenciando que no hacen nada, evidenciando que las tres veces que ubicamos su paradero no quieren detenerlo. Por eso le hicieron esto: sabían que ella no se iba a ir de ahí y que sólo iba a dejar de buscar si la mataban”, expresa Juan, el hijo mayor de Marisela.
La lucha contra la impunidad
La gente congregada el viernes 17 en la plaza de armas de Chihuahua para la ceremonia fúnebre tenía algún recuerdo de Marisela: para unos era la mujer que todos los días marchaba de la Subprocuraduría de Justicia a la Ciudad Judicial, empujando la carriola de su nieta, en una protesta silenciosa en busca de justicia; la que recorrió el país a pie, y que en su viaje de Ciudad Juárez al Distrito Federal iba entregando pósters del yerno homicida, dando conferencias de prensa sobre el caso y preguntando en cada delegación de la PGR y de las procuradurías si hasta ahí había llegado alguna notificación de captura al homicida; la que exigía al Ministerio Público que le pagaran los gastos por hacer el trabajo que correspondía a ellos; la que acampó con otras mamás en el Hemiciclo a Juárez, de la Ciudad de México, y pidió audiencia con el presidente Felipe Calderón y con el procurador Arturo Chávez Chávez, quienes nunca la recibieron; la que aguó la despedida del gobernador Reyes Baeza y cuya presencia disgustaba a su sucesor, César Duarte.
Entre los discursos del viernes 17 sorprendió el de un muchacho que se presentó como Eduardo Frayre, hijo de Marisela. Él dijo: “Quiero decir al señor Duarte que se dice gobernador que no sirven para nada, que aquí no hay gobierno; sólo veo muros y piedras… Ahí está la sangre de mi mamá, la acabo de tocar. Y mi mamá, gracias a Dios, ya está bien: con mi hermana. ¡Quiero que recuerden este 16 de diciembre como el día de la señora que luchó por la justicia; será recordado (también) como el día del gobierno inepto!”.
Entre los aplausos se escucharon gritos pidiendo que el gobernador saliera de sus oficinas. “¡Que dé la cara Duarte, que salga!”. 
Muchos de los presentes lloraron, en especial unas mujeres vestidas de luto que minutos después hicieron guardia de honor alrededor de la Cruz de los Clavos y que agregaron el nombre de Marisela junto al de Rubí y al de centenas de nombres de mujeres asesinadas. 
Vestidas de oscuro, las mujeres se decían familiares de la difunta. Su parentesco no era biológico, las hermanaba la tragedia; ellas son otras madres que buscan a sus hijas, unas asesinadas, otras desaparecidas; todas en la sala de espera de la justicia que nunca llega. 
“Los asesinos de todas nuestras hijas siguen libres. Como nos matan y no pasa nada, siguen asesinando sin temor. Y estoy segura que no los agarran porque gozan de la protección de la autoridad”, dijo entre llantos Norma Ledezma, mamá de Paloma Escobar, la joven de 16 años asesinada hace ocho años en esta ciudad y fundadora de la organización Justicia para Nuestras Hijas.
Sus acompañantes se dijeron igual de devastadas. La mamá de Julieta Marleng, otra joven de 16 años desaparecida en 2001, lloraba cuando decía que a Marisela la mataron sólo por exigir lo menos que puede pedir una madre: justicia.
“¿Con esto qué nos esperamos las demás madres que estamos pidiendo justicia? Ya su hija va para 10 años que desapareció y no han hecho nada, no hay respuesta. De perdida las demás compañeras ya encontraron a sus hijas, aunque sean sus huesitos, ¿verdá? Pero yo todavía pienso todos los días: ‘M’ija, ¿dónde estás?, ¿te mataron?, ¿qué te hicieron?, ¿te golpearon mucho?...”. No pudo continuar la frase sin llorar de angustia.
“A Marisela la mataron por el amor a su hija, por exigir que se esclarezca su crimen y no se vale. ¡Ahora tendremos que cuidarnos de un golpe o un balazo porque nos quieren quitar del camino!”, señala a su lado la mamá de Neyra Azucena Cervantes, otra adolescente de 19 años asesinada en 2003.
“Marisela es de nuestra familia, de esta familia que no es de sangre, es de lucha y de dolor, esta familia de padres que han perdido a sus hijas”, comenta otra.
“Esto no nos va a silenciar, nos da motor. Si vienen por más mamás y nos quieren acabar, aquí estamos, No traemos escoltas ni seguridad, sólo venimos con el deseo, la necesidad de buscar justicia para nuestras hijas”, agrega Ledezma.
Con la vista clavada en la casa de gobierno, como hablando sola, la señora Lourdes Hernández, mamá de Pamela Leticia Portillo, de 23 años, desaparecida en julio pasado, expresa con rabia: “¡Están equivocados si creen que nos van a detener por miedo; aquí vamos a seguir! Yo pregunto: ¿Cuál mamá sigue? ¿Por qué nos hacen esto y enfrente del Palacio de Gobierno? ¡No puede ser! ¿Es una burla para los del gobierno o ellos se burlan de nosotros? Les agradecemos este ‘regalito’ de Navidad que nos dieron”.

Comunicado del EPR

República Mexicana, 14 de diciembre de 2010
Grupo: Partido Democrático Popular Revolucionario-Ejército Popular Revolucionario
AL PUEBLO DE MEXICO
A LOS PUEBLOS DEL MUNDO
A LOS ORGANISMOS NO GUBERNAMENTALES DEFENSORES DE LOS DERECHOS HUMANOS
A LAS ORGANIZACIONES SOCIALES, POLÍTICAS Y REVOLUCIONARIAS
AL MUNICIPIO AUTÓNOMO DE SAN JUAN COPALA
¡HERMANAS, HERMANOS, CAMARADAS!
La historia de las organizaciones sociales de izquierda, así como las organizaciones revolucionarias que se han propuesto enfrentar al Estado tiene muchas aristas, las hay que en el intento terminan enmarañadas en los huecos legales del mismo Estado convirtiéndose en acto seguido en oportunistas del movimiento social haciendo de éste un modus vivendi, un modo de conseguir por medio del chantaje prebendas y migajas que el sistema les da ya que ello representa un instrumento paliativo para contener el descontento social y un obstáculo para el desarrollo de las fuerzas progresistas.
Así tenemos que algunos que se dijeron ser luchadores sociales y otros ser revolucionarios terminaron en organizaciones legales, que hoy comen, conviven, justifican y defienden a los que decían combatir y peor aun, los hay que por frustración y a falta de una preparación política ideológica vendieron su movimiento convirtiéndose en traidores que hasta la fecha trabajan para el Estado.
La lucha de clases en nuestro país tiene nombre y apellido y aunque muchas voces pregonan que tenemos libertad, que tenemos democracia y que por tal motivo la lucha armada no tiene cabida, nosotros decimos lo contrario, la lucha de clases es más vigente que nunca y como consecuencia la lucha armada.
Las condiciones de vida son cada vez más deplorables, las ejecuciones extrajudiciales en contra de los luchadores sociales siguen en ascenso, el enemigo a enfrentar tiene cuerpo y forma: es el Estado con todas sus instituciones empezando por la Suprema Corte de Justicia cuando “gracias” a sus fallos libra a Mario Marín de los delitos cometidos en contra de Lidia Cacho protegiendo también a pederastas de la talla de Kamel Nacif y Miguel Angel Yunes Linares, en Puebla o exonera a Ulises Ruiz responsable directo, precisamente, de las ejecuciones extrajudiciales de Willy Brand y los activistas y luchadores sociales de la APPO que perdieron la vida, de dirigentes sociales, populares, magisteriales y campesinos e indígenas como también es el caso particular de Timoteo Alejandro; del encarcelamiento y vejaciones a más de 500 activistas también de la APPO. Hechos que hemos mencionado una y otra vez en comunicados o artículos de nuestro periódico El Insurgente el cual les invitamos que lean con más frecuencia para que estén enterados porque también para nosotros “nada humano nos es ajeno” nos referimos con esto a que no hay injusticia que no nos duela empezando con la muerte de niños e inocentes ya sea por hambre, enfermedades curables, por caer entre fuego cruzado o por motivos políticos ya que la injusticia es producto del sistema y los sujetos que hoy gobiernan a México.
En este sentido les decimos que nuestro partido y ejército es parte del pueblo, que luchamos con el pueblo, no luchamos “por” el pueblo y cada día nos esforzamos por aprender a defendernos de los embates del sistema, no defendemos a cada persona en particular ni tampoco hacemos la tarea que le corresponde porque somos el pueblo los que tenemos que aprender a defender nuestros derechos y a conocer al enemigo de clase, para nosotros no cabe duda de las capacidades y la creatividad que tenemos como pueblo, porque somos quienes nutrimos nuestras filas insurgentes en el Ejército Popular Revolucionario y nuestro Partido Democrático Popular Revolucionario sin que exista una diferencia sustancial en nuestra organización.
Por lo mismo no mistificamos al campesino, al indígena o al obrero, ya que no existe la pureza ni la inocencia por el simple hecho de ser clase, ya que puede caer en los mismos vicios y se padece el mismo cáncer que el sistema ha incubado. Como en un momento dado pueden ser la deshonestidad, el egoísmo o la ambición de poder que es fomentada y alimentada por los gobiernos y el Estado como parte de su estrategia de Contrainsurgencia o de Guerra de Baja Intensidad para evitar a toda costa la unidad de los pueblos que hoy por hoy permanecemos en lucha contra el sistema o las injusticias pero no hemos podido remontar nuestras diferencias que la mayoría de las veces son de forma más que de fondo y que aunque fueran de fondo, es decir, estrategias diferentes perseguimos un mismo objetivo, por lo que estamos obligados a buscar los caminos que nos lleven a converger, estamos obligados a diferenciar cuando se trata de provocaciones armadas por el gobierno como en el caso del grupo paramilitar priísta UBISORT que tiene fatales consecuencias como son la pérdida de valiosas vidas, de ubicar cuando se trate de viejas rencillas personales producto de desacuerdos, supuestos maltratos, envidias, resentimientos que buscan venganza y arrastran a los más influenciables sin tomar en cuenta que se entra en el juego de la GBI al convertirse en un obstáculo más para la unidad en el que el gobierno ya ni siquiera necesita intervenir porque ya tiró la piedra y escondió la mano.
No mistificamos a nadie, en cada sector del pueblo existen quienes luchan con principios y quienes luchan sin principios, no es una lucha entre buenos y malos, por lo tanto:
1. Con respecto a por qué tanta indignación por el asesinato de Heriberto Pasos Ortiz y del hecho que ustedes tienen una larga lista de muertos que no merecieron de nuestra parte ni siquiera una palabra de repudio (dicho por ustedes), les decimos que para nosotros y para nuestro pueblo es dolorosa la muerte de un ser humano por motivos políticos y sociales realizada a manos del Estado y nos es aun más doloroso cuando se da entre los mismos compañeros de clase ya sea por ignorancia y lo más grave aun cuando se da por una incomprensión de la lucha y la falta de capacidad para dar las alternativas recurriendo a la división, calumnia y la venganza, hechos que en nada ayudan a la unidad de nuestro pueblo en su emancipación política.
2. Les decimos que en nuestro artículo titulado “San Juan Copala y el paramilitarismo” en el periódico El insurgente número 127 pagina 15 y 16, del mes de mayo, mencionamos que: “…el grupo paramilitar UBISORT… Son los actores directos de la agresión a la caravana de activistas que se dirigía al municipio de San Juan Copala, teniendo como resultado el asesinato de Beatriz Alberta Cariño y del finlandés Jyry Antero Jaakkolaa y otros heridos entre ellos un fotógrafo de la revista contralinea.” En otro de los párrafos dice… “El objetivo de la actuación de dichos grupos paramilitares en San Juan Copala obedece a una maniobra policiaca para golpear militarmente a quienes se organizan de manera independiente en función de la defensa de sus derechos; a la vez que endereza una campaña de difamación para desprestigiar a la organización del MULT, pretendiendo crear así las condiciones para golpear a dicha organización, en especial a sus líderes aplicando la táctica contrainsurgente Israelí, la de golpear en los dirigentes de las organizaciones.” En otro artículo titulado “Ulises después de la derrota” en El insurgente número 129 pagina 31 y 32, del mes julio y agosto, decimos… “Los asesinatos contra la población de San Juan Copala a cargo de los paramilitares de UBISORT a las órdenes de URO inculpando de estos hechos con perversidad a la gente del MULT para generar un clima de lucha fratricida con los del MULTI. Desgraciadamente no nos equivocamos ya que no cesaron en acusar junto con UBISORT al MULT como responsables de los asesinatos.
3. En nuestro lineamiento político uno de los principios es reconocer todas las formas de lucha que emanen de la creatividad del pueblo en función de su emancipación, en lo particular en nada nos molesta su proyecto, lo único que señalamos es que se debe ser muy cuidadoso para no servir como instrumento del gobierno y debido a contradicciones secundarias poner en charola de plata a luchadores sociales independientemente de la organización en que militen, como en este caso en el que tanto el MULTI como el MULT pertenecen a LA OTRA CAMPAÑA. Ya basta de protagonismos sin sentido, la unidad del pueblo es lo primero, los invitamos a trabajar en función de ello. Consideramos que las contradicciones existentes se pueden superar con la discusión política, despojándonos de prejuicios y esforzándose por elevar las miras.
4. No mencionamos a Beto Pazos porque exista una razón “especial” o estemos “contra ustedes” sino porque fue un luchador social más, asesinado. Lo que nos ha llamado la atención es precisamente la facilidad con que el Estado puede involucrar a organizaciones o a miembros de ellas en una lucha fratricida y como al amparo de “usos y costumbres” es el deseo de venganza y no de justicia el que orienta los pasos de una conducta.
5. Así también nos llama la atención del por qué ustedes no se han pronunciado por la desaparición forzada de los luchadores sociales, y mucho menos de nuestros compañeros Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez.
6. Jamás nos referimos a quienes los acompañan dijimos que “… algunos personajes de Izquierda, organizaciones y medios de comunicación tenían alguna responsabilidad por omisión o comisión…” por el simple hecho de hacerle el juego a la campaña del Estado. Nuestra intención jamás es la de intimidar, de que se queden solos como ustedes mencionan, más bien el aislamiento se da al estar lejos de la realidad, al no estar enterados del contexto de la lucha a nivel nacional, cuando no nos esforzamos en estudiar los pronunciamientos de las organizaciones hermanas y caer en reclamos reactivos, la discusión se debe dar con base en principios, con una metodología y un lineamiento político, teórico y práctico de por medio; sin eso toda discusión será estéril y sin sentido.
Para nosotros está claro que el asesinato de Beto Pazos, como los de muchos luchadores sociales incluidos los de su dirigente Timoteo Alejandro en San Juan Copala y de Beatriz Alberta Cariño Trujillo y Jyry Jaaekkolaa, así como la desaparición forzada de nuestros compañeros Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez son responsabilidad directa del Estado Mexicano y sus funcionarios, Ulises Ruiz Ortiz hoy ex gobernador, esto no quita que en algunos casos haya traidores, entregadores y los que caen en la trampa del gobierno para realizar dichas ejecuciones extrajudiciales.
Compañeros, queremos decirles que es así como los consideraremos ya que también están sufriendo los embates del Estado y sus corifeos, no nos dejemos llevar por supuestas o reales contradicciones, busquemos el camino de la unidad, esa debe ser nuestra tarea unida a la entrega con la que los luchadores sociales se han caracterizado toda su vida.
Para terminar nos preguntamos ¿Quién asesinaría al maestro Julián Martínez Ramírez también del MULT el viernes tres de diciembre? Seguramente URO, o ¿Ustedes qué dicen?
Por lo tanto, esta es la primera y última vez que les demos una respuesta de este tipo y lo lamentamos.
¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!
¡A EXIGIR LA LIBERTAD DE TODOS LOS PRESOS POLITICOS Y DE CONCIENCIA DEL PAIS!
¡POR LA PRESENTACION DE TODOS LOS DETENIDOS DESAPARECIDOS!
¡POR LA REVOLUCION SOCIALISTA!
¡VENCER O MORIR!
¡POR NUESTROS CAMARADAS PROLETARIOS!
¡RESUELTOS A VENCER!
¡CON LA GUERRA POPULAR! ¡EL EPR TRIUNFARA!

COMITÉ DE PRENSA Y PROPAGANDA
DEL
PARTIDO DEMOCRATICO POPULAR REVOLUCIONARIO
EJERCITO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR-EPR
Año 46.
República mexicana, a 14 de diciembre de 2010.