Finaliza el secuestro de una niña de cuatro años tomada como rehén por su propio padre tras entregarse éste sin ofrecer resistencia
La alerta comenzó el sábado por la noche, cuando un coche irrumpió en una de las pistas del aeropuerto de Hamburgo en Alemania; saltó la barrera de acceso y, tras efectuar disparos al aire y lanzar artefactos explosivos, detuvo el vehículo negro junto a un avión de Turkish Airlines con pasajeros en su interior. Y allí se quedó estacionado con su hija como rehén durante dieciocho horas que se hicieron eternas para la madre de la niña y para la Policía.
La policía alemana anunció el domingo que puso fin al secuestro tras detener "sin resistencia" al hombre.