
Las deflagraciones han dañado 12 hospitales y centros de salud y varias escuelas, de modo que 120 mil personas carecen de atención primaria sanitaria y 55 mil menores no podrán acudir al colegio, según cálculos de Unicef.
Empero, afortunadamente este domingo se ha celebrado una Conferencia Internacional de donantes que ha comprometido 252,7 millones de euros en ayudas para cubrir las necesidades humanitarias a corto plazo.