Aristegui/Jorge Zepeda Patterson.
El Universal, 13 de febrero de 2011
Inexplicablemente a Los Pinos no se le ocurrió que el despido de Carmen Aristegui sería visto como un manotazo presidencial. El cese inmediato de cualquier periodista líder de opinión por hacer un cuestionamiento al soberano es, aquí o en China, un acto autoritario y predemocrático.
Inimaginable en Francia, Estados Unidos o España. Una reportera de Al-Jazeera buscó a Aristegui para entrevistarla al respecto, como lo hicieron todas las agencias internacionales presentes en su rueda de prensa el miércoles pasado. Salvo los egipcios que andaban ocupados, supongo que el resto del mundo árabe pudo enterarse de que también en México se cuecen habas.
En lo personal, no creo que Felipe Calderón tenga un problema de alcoholismo, pero sí creo que tiene un problema de intolerancia.
Inexplicablemente a Los Pinos no se le ocurrió que el despido de Carmen Aristegui sería visto como un manotazo presidencial. El cese inmediato de cualquier periodista líder de opinión por hacer un cuestionamiento al soberano es, aquí o en China, un acto autoritario y predemocrático.
Inimaginable en Francia, Estados Unidos o España. Una reportera de Al-Jazeera buscó a Aristegui para entrevistarla al respecto, como lo hicieron todas las agencias internacionales presentes en su rueda de prensa el miércoles pasado. Salvo los egipcios que andaban ocupados, supongo que el resto del mundo árabe pudo enterarse de que también en México se cuecen habas.
En lo personal, no creo que Felipe Calderón tenga un problema de alcoholismo, pero sí creo que tiene un problema de intolerancia.