Los
medios impresos hoy, 24 de marzo
EL
UNIVERSAL: Oceanografía, sin tinte
político: PGR
El
procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, asegura que no existe
ninguna implicación política en el caso del escándalo por un presunto fraude de
casi 500 millones de dólares y lavado de dinero, en el que está involucrada la
empresa Oceanografía, una de las principales proveedoras de Petróleos Mexicanos
(Pemex). "No veo ninguna (implicación política). Lo que hasta este momento
se ha determinado es que es un asunto cometido en el último trimestre del año
pasado contra un banco por una empresa, no le veo la implicación política por
ningún lado", dice el procurador. Hay todo un debate en torno a esto, hay
quienes argumentan que se está hablando de responsabilidades de funcionarios de
la administración pasada.
INBA paga renta
de casi $34 millones
Las
oficinas generales del Instituto Nacional de Bellas Artes que se encontraban en
los edificios San Antonio Abad 130 y Av. 5 de Mayo 19, desde septiembre de 2013
ocupan los 28 pisos del edificio llamado Torre Prisma, en Av. Juárez 101,
delegación Cuauhtémoc, centro de la ciudad de México. Entre el 1 de diciembre
de 2012 y finales de 2013, la Dirección de Recursos Materiales del INBA celebró
ocho contratos para arrendamiento, equipamiento, rehabilitación y acabados del
edificio Prisma por 46 millones 505,900 pesos, de acuerdo con información del
Portal de Obligaciones de Transparencia del Instituto Federal de Acceso a la
Información (IFAI).
Reclaman
legalidad 'asesores' de plagios
"No.
El dinero no sale", ordenó Manuel, negociador de secuestros. El padre y el
esposo de Mireya (nombre ficticio) se quedaron paralizados por unos segundos.
Su mente en blanco. "¡Que salga el pago!", dijo desesperado el padre
de Mireya, contraviniendo al negociador. "Cuando llegas a la escena de un
secuestro es muy difícil, muy duro, porque entras en un mundo, en una familia
donde está sucediendo una desgracia. Todo es muy tenso”, dice Manuel en
entrevista para El Universal, que se realiza bajo las condiciones que él
impone: que guardemos su anonimato, que le distorsionemos la voz para el video,
que las fotografías sean a contraluz y que antes de comenzar nos identifiquemos
con credenciales. Ellos utilizan el eufemismo de "asesores" en secuestros
y la mayoría prefiere operar desde el anonimato, por su seguridad, y en la
clandestinidad, ya que hay un vacío legal sobre su trabajo. "Somos un mal
necesario", reconoce Manuel, quien se dedica desde hace seis años, de
manera privada, a esta "profesión"