Saliendo al paso a las recientes especulaciones, Castro recibió el miércoles a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, de visita en Cuba, y difundió un artículo sobre el encuentro, también aprovechó para referirse a Barack Obama.
Dudó que pueda estar vivo cuando el presidente Obama termine su primer mandato en el 2013, y pidió a los dirigentes de la isla seguir adelante ante su eventual muerte.
"He tenido el raro privilegio de observar los acontecimientos durante tanto tiempo. Recibo información y medito sosegadamente sobre los acontecimientos. Espero no disfrutar de tal privilegio dentro de cuatro años, cuando el primer período presidencial de Obama haya concluido'', expresó Castro en la segunda "reflexión'' suya dada a conocer en menos de 24 horas tras romper un silencio de cinco semanas.
Castro aseguró que no quiere estorbar al gobierno y le pidió seguir con su trabajo aunque agrave o muera.
"Yo estoy bien, pero insisto, ninguno de ellos debe sentirse comprometido por mis eventuales Reflexiones, mi gravedad o mi muerte'', afirmó en el comentario publicado en la página digital Cubadebate al referirse a los dirigentes del Partido Comunista y del Estado.
Castro, de 82 años y retirado del poder desde julio del 2006, explicó también que decidió disminuir este año la frecuencia con que publica sus comentarios en la prensa "a fin de no interferir ni estorbar a los compañeros del Partido y el Estado en las decisiones constantes que deben tomar'' frente a la crisis mundial.
En el artículo titulado El undécimo presidente de Estados Unidos, Castro retomó su defensa de Obama y aseguró que "nadie podría dudar de la sinceridad de sus palabras cuando afirma que convertirá a su país en modelo de libertad, respeto a los derechos humanos en el mundo y a la independencia de otros pueblos''.
Pero lo cuestiona. "Sin embargo, a pesar de todas las pruebas soportadas, Obama no ha pasado por la principal de todas. ¿Qué hará pronto cuando el inmenso poder que ha tomado en sus manos sea absolutamente inútil para superar las insolubles contradicciones antagónicas del sistema?"
Saliendo al paso a las recientes especulaciones, Castro recibió el miércoles a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, de visita en Cuba, y difundió un artículo sobre el encuentro, pero hasta el cierre de esta edición no se habían publicado fotos como ocurrió en otras ocasiones en que recibió a dignatarios.
En el artículo dedicado a la presidenta argentina, también aprovechó para referirse a Obama.
Castro aseguró que no quiere estorbar al gobierno y le pidió seguir con su trabajo aunque agrave o muera.
"Yo estoy bien, pero insisto, ninguno de ellos debe sentirse comprometido por mis eventuales Reflexiones, mi gravedad o mi muerte'', afirmó en el comentario publicado en la página digital Cubadebate al referirse a los dirigentes del Partido Comunista y del Estado.
Castro, de 82 años y retirado del poder desde julio del 2006, explicó también que decidió disminuir este año la frecuencia con que publica sus comentarios en la prensa "a fin de no interferir ni estorbar a los compañeros del Partido y el Estado en las decisiones constantes que deben tomar'' frente a la crisis mundial.
En el artículo titulado El undécimo presidente de Estados Unidos, Castro retomó su defensa de Obama y aseguró que "nadie podría dudar de la sinceridad de sus palabras cuando afirma que convertirá a su país en modelo de libertad, respeto a los derechos humanos en el mundo y a la independencia de otros pueblos''.
Pero lo cuestiona. "Sin embargo, a pesar de todas las pruebas soportadas, Obama no ha pasado por la principal de todas. ¿Qué hará pronto cuando el inmenso poder que ha tomado en sus manos sea absolutamente inútil para superar las insolubles contradicciones antagónicas del sistema?"
Saliendo al paso a las recientes especulaciones, Castro recibió el miércoles a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, de visita en Cuba, y difundió un artículo sobre el encuentro, pero hasta el cierre de esta edición no se habían publicado fotos como ocurrió en otras ocasiones en que recibió a dignatarios.
En el artículo dedicado a la presidenta argentina, también aprovechó para referirse a Obama.
Leer el texto de Fidel y ver su firma:
Reflexiones del compañero Fidel: EL UNDECIMO PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS
2009-01-22
El pasado martes 20 de enero de 2009 asumió la jefatura del imperio Barack Obama como el Presidente número once de Estados Unidos, desde el triunfo de la Revolución Cubana en enero de 1959.
Nadie podría dudar de la sinceridad de sus palabras cuando afirma que convertirá a su país en modelo de libertad, respeto a los derechos humanos en el mundo y a la independencia de otros pueblos. Sin que esto, por supuesto, ofenda a casi nadie, excepto a los misántropos en cualquier rincón del planeta. Ya afirmó cómodamente que la cárcel y las torturas en la Base ilegal de Guantánamo cesarían de inmediato, lo cual comienza a sembrar dudas a los que rinden culto al terror como instrumento irrenunciable de la política exterior de su país.
El rostro inteligente y noble del primer presidente negro de Estados Unidos desde su fundación hace dos y un tercio de siglos como república independiente, se había autotransformado bajo la inspiración de Abraham Lincoln y Martin Luther King, hasta convertirse en símbolo viviente del sueño americano.
Sin embargo, a pesar de todas las pruebas soportadas, Obama no ha pasado por la principal de todas. ¿Qué hará pronto cuando el inmenso poder que ha tomado en sus manos sea absolutamente inútil para superar las insolubles contradicciones antagónicas del sistema?
He reducido las Reflexiones tal como me había propuesto para el presente año, a fin de no interferir ni estorbar a los compañeros del Partido y el Estado en las decisiones constantes que deben tomar frente a dificultades objetivas derivadas de la crisis económica mundial. Yo estoy bien, pero insisto, ninguno de ellos debe sentirse comprometido por mis eventuales Reflexiones, mi gravedad o mi muerte.
Reviso los discursos y materiales elaborados por mí a lo largo de más de medio siglo.
He tenido el raro privilegio de observar los acontecimientos durante tanto tiempo. Recibo información y medito sosegadamente sobre los acontecimientos. Espero no disfrutar de tal privilegio dentro de cuatro años, cuando el primer período presidencial de Obama haya concluido.
Fidel Castro Ruz
22 de enero de 2009
6 y 30 p.m.
2009-01-22
El pasado martes 20 de enero de 2009 asumió la jefatura del imperio Barack Obama como el Presidente número once de Estados Unidos, desde el triunfo de la Revolución Cubana en enero de 1959.
Nadie podría dudar de la sinceridad de sus palabras cuando afirma que convertirá a su país en modelo de libertad, respeto a los derechos humanos en el mundo y a la independencia de otros pueblos. Sin que esto, por supuesto, ofenda a casi nadie, excepto a los misántropos en cualquier rincón del planeta. Ya afirmó cómodamente que la cárcel y las torturas en la Base ilegal de Guantánamo cesarían de inmediato, lo cual comienza a sembrar dudas a los que rinden culto al terror como instrumento irrenunciable de la política exterior de su país.
El rostro inteligente y noble del primer presidente negro de Estados Unidos desde su fundación hace dos y un tercio de siglos como república independiente, se había autotransformado bajo la inspiración de Abraham Lincoln y Martin Luther King, hasta convertirse en símbolo viviente del sueño americano.
Sin embargo, a pesar de todas las pruebas soportadas, Obama no ha pasado por la principal de todas. ¿Qué hará pronto cuando el inmenso poder que ha tomado en sus manos sea absolutamente inútil para superar las insolubles contradicciones antagónicas del sistema?
He reducido las Reflexiones tal como me había propuesto para el presente año, a fin de no interferir ni estorbar a los compañeros del Partido y el Estado en las decisiones constantes que deben tomar frente a dificultades objetivas derivadas de la crisis económica mundial. Yo estoy bien, pero insisto, ninguno de ellos debe sentirse comprometido por mis eventuales Reflexiones, mi gravedad o mi muerte.
Reviso los discursos y materiales elaborados por mí a lo largo de más de medio siglo.
He tenido el raro privilegio de observar los acontecimientos durante tanto tiempo. Recibo información y medito sosegadamente sobre los acontecimientos. Espero no disfrutar de tal privilegio dentro de cuatro años, cuando el primer período presidencial de Obama haya concluido.
Fidel Castro Ruz
22 de enero de 2009
6 y 30 p.m.