Caso
Monreal: el eslabón perdido/Informe Confidencial
En La Silla Rota, 8 de abril de 2013
Juan
Carlos Guardado desapareció la madrugada del 3 de febrero de 2011, hace más de
dos años. La historia de su familia había sido por años cercana a la de los
Monreal, especialmente a David, actual senador, y a Ricardo, diputado federal,
todos ellos ligados con Fresnillo, Zacatecas. Esa historia, en sus aspectos
conocidos y en otros ignorados hasta ahora, estuvo a punto de concluir con el
asesinato de los legisladores federales, la semana pasada.
El
paradero de Juan Carlos es una incógnita desde aquella mañana fría en que se
trasladaba en una camioneta junto con su chofer, Javier Vázquez, con destino a
Mazatlán. Su círculo cercano diría después a las autoridades que Juan Carlos
tenía una reunión de negocios en el puerto sinaloense la mañana de ese mismo
día 3. Hacia las 0:02 horas de esa fecha, él envió a una persona muy cercana un
mensaje escrito mediante su celular, en el que anunciaba: “Estoy entrando a
Durango”. Sería la última comunicación que alguien sostendría con él.