Entre
los rivales de Scola surge Ouellet
Mañana
los cardenales entrarán a la Capilla Sixtina. El arzobispo de Milán comienza
como favorito, pero no hay nada dicho...
Comentario de ANDREA
TORNIELLI para El Vatican Insider.
«La
vez pasada había una figura de espesor, tres o cuatro veces más superior que el
resto de los cardenales. Era un teólogo único. Estamos hablando de Joseph
Ratzinger. Ahora no es lo mismo. Por eso la decisión tendrá que pasar por uno,
dos, tres, cuatro… doce cardenales. Por el momento no sabemos nada, tendremos
que esperar los resultados del primer turno».
Estas
palabras significativas las pronunció ayer el arzobispo de Lyon, el cardenal
Philippe Barbarin, y ofrecen una “fotografía” muy significativa de la situación
a un día del Cónclave que elegirá al sucesor de Pedro número 266. Es evidente que el purpurado no
habría dicho nada si ya hubieran identificado a un candidato fuerte, capaz de
alcanzar los 77 votos necesarios para convertirse en el nuevo Papa. Pero sus
palabras son como un eco de las que ya había pronunciado el arzobispo de París
hace unos días, el cardenal André Vingt-Trois, que se refirió a «una media
docena de candidatos». También diferentes cardenales de todo el mundo, durante
los coloquios informales de estos últimos dos días, indicaron que consideran
abiertas muchas posibilidades.
Pero
hay un dato que parece ya claro: a partir de mañana por la tarde, cuando se
reunirán “bajo llave” por primera vez los 115 electores en la Sixtina, un buen
número de votos irá al arzobispo de Milán, Angelo Scola (hay quien dice 35
votos; otros, 40). Con el apoyo de algunos estadounidenses, el purpurado
ambrosiano podría llevar nuevamente a Italia al papado, después de 35 años con
la elección de Juan Pablo I. Otro candidato que podría obtener un apoyo
consistente es el arzobispo de Sao paolo Odilo Pedro Scherer, brasileño con
mucha experiencia en la Curia. Las indiscreciones a poco tiempo de la primera
elección (evidentemente hay que tomarlas con “pinzas”) indican que podría
obtener unos 25 votos.
Otro
cardenal que podría obtener una cantidad consistente de votos en la primera
elección es el canadiense Marc Ouellet, ex prefecto de los Obispos, quien
podría asignarse los votos de los cardenales latinoamericanos y
estadounidenses, que sumarían alrededor de unos 15.
Otros
candidatos fuertes son el arzobispo de Boston, el capuchino Séan O’Malley, o el
arzobispo de Nueva York, Timothy M. Dolan. No hay que excluir al arzobispo de
Colombo, Malcom Ranjith Patabendige Don, que podría obtener algunos votos en la
primera elección. Así como tampoco a los “outsiders” Jorge Mario Bergoglio
(arzobispo de Buenos Aires) y Luis Antonio Tagle (arzobispo de Manila): ambos
pronunciaron discursos muy aplaudidos durante las Congregaciones generales.
A
pesar de los evidentes problemas relacionados con la gestión de la Curia, los
electores del Papa eligen al Papa no a un Secretario de Estado. Por este
motivo, aunque el tema del gobierno y de la colegialidad son muy importantes y
han estado presentes en el debate, la prioridad sigue siendo la de la
Evangelización.
Es
lo que se deduce de las palabras que pronunciaron dos cardenales africanos que
celebraron la misa en las parroquias romanas bajo su jurisdicción ayer por la
tarde. «Debemos traer alegría a este mundo –dijo el arzobispo de Abuja
(Nigeria), John Onaiyekan– que está lleno de cosas feas, pero es nuestro mundo;
los ángeles sin pecado están en el paraíso, nosotros debemos traer la paz entre
los pecadores». En cambio, el cardenal Peter Turkson, de Ghana, dijo: «La
Iglesia existe para acompañar a la humanidad».
Ayer
hubo muchos encuentros informales entre los purpurados, entrevistas discretas,
invitaciones a comer… para intercambiar ideas. Hoy por la mañana comienza una
nueva Congregación general para que puedan hablar los cardenales que no lo han
hecho. Mañana por la tarde será la primera votación bajo los frescos del Juicio
Universal de Miguel Ángel.
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