13 ene 2012

¡Bienvenida a la elección Isabel!

Sobre Isabel Miranda de Wallace: reacciones, algunas solamente
Posicionamiento de AMLO, al cuestionarle qué opinaba sobre la candidatura de Isabel Miranda de Wallace a la Jefatura de Gobierno, dijo que es legítima, sin embargo, advirtió que la izquierda volverá a ganar en la Capital.  "Todos tenemos derecho a votar y ser votados, respeto mucho a la señora", añadió. Manifestó su respeto a la Sra. de Wallace, pero señaló que las cosas sólo van a cambiar si la gente participa en el proceso electoral. "No tengo nada que decir sobre la señora, la respeto pero considero que va a volver a ganar la izquierda en la ciudad de México", aunque avaló que dirigentes sociales apuesten por transformar al país y sean tomados en cuenta para cargos de representación popular.
Muchos a favor, otros la critican. en fin.
¡Bienvenida a la elección Isabel seguro que le pondrás alma a la eleción!

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La elección de la señora Wallace/Pablo Hiriart
La razón, 13 de enero de 2012
 Con su candidatura a Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Isabel Miranda de Wallace tomó una de las decisiones más importantes de su vida: eligió entrar a la política activa. Eso trae consecuencias.
De ahora en adelante todo lo que diga, las críticas y los elogios que formule, pasarán por el tamiz de su etiqueta partidista.
La señora Miranda de Wallace, tan estimada por un servidor, se lanzó a la contienda electoral por el partido en el poder. Y ella era una importante voz de la sociedad frente a ese poder. Ahora está del lado del poder.
En su campaña criticará la impunidad que existe en el Distrito Federal y la mala calidad de los ministerios públicos en la administración perredista. Tendrá razón.
Criticará a gobernadores priistas por su tardanza en profesionalizar las policías, evaluar a sus agentes y culpar a la federación de todos sus males en materia de seguridad. También tendrá razón.
Pero esa crítica, razonable y compartible, habrá perdido peso moral: la mueve un interés partidista y un propósito electoral.
Nada hay de ilegítimo en lo anterior, pero no podrá arrogarse la representación de la ciudadanía agraviada por la criminalidad y la negligencia de las autoridades porque ella va como candidata del partido que gobierna el país.
Su llegada a la candidatura del PAN al Distrito Federal fue obra de una decisión cupular. Ella se la debe al poder. Al mismo que le reclamaba negligencia ante la ola criminal que nos azota.
El PAN está en su derecho de postular por dedazo a la señora Miranda de Wallace y dejar sentados en una curul o en una banqueta a los que trabajaron durante tres años para alcanzar esa candidatura.
Se trata de un asunto interno de Acción Nacional y mientras cumplan con sus reglas, nadie les puede impugnar tal decisión.
Hasta ahí todo está bien. Pero que no vengan a decirnos que ellos sí son democráticos para elegir a sus candidatos y que los demás partidos no.
En la designación de Isabel Miranda no hubo elección interna, ni una encuesta indicativa ni tampoco un acuerdo político entre los aspirantes. Eso lo permiten los estatutos del PAN y tampoco hay nada de ilegal en ello.
Sin embargo su discurso de que ellos preferían perder tiempo en una elección interna con tal de oír la voz de su militancia, no era verdad.
La sociedad ha perdido a una luchadora por los derechos de los ciudadanos ante la clase política. Ojalá que hayamos ganado a una política eficiente para que siga sirviendo a la comunidad, ahora desde el otro lado del mostrador.
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Columna JAQUE MATE/Sergio Sarmiento
Lucha por el DF
En Reforma, 13 Ene. 12
"Política. f. Lucha de intereses disfrazada de conflicto de principios". Ambrose Bierce
 El Partido Acción Nacional recurrió a un dedazo para escoger a su candidata al gobierno del Distrito Federal. La decisión recayó en un personaje muy respetado, la señora Isabel Miranda de Wallace, pero que carece de experiencia política o en administración pública. La pregunta es si con esta decisión el PAN está aceptando que no puede ganar la elección y busca simplemente mantener su presencia electoral en la Ciudad de México.
El dedazo deja en el camino a un grupo de panistas que legítimamente habían trabajado durante mucho tiempo por la candidatura de su partido: José Luis Luege, Gabriela Cuevas, Mariana Gómez del Campo y Carlos Orvañanos. Queda también descartado el externo Demetrio Sodi, jefe delegacional en Miguel Hidalgo, a quien las encuestas colocaban como puntero en la competencia interna panista. Por mucho que el PAN haya repartido otras candidaturas y canonjías, parece inevitable que el método de selección de la candidata tenga un costo político y disminuya el entusiasmo de los grupos que apoyaban a los aspirantes.
No hay duda de que la señora Wallace es una buena candidata, conocida y aceptada por buena parte de la población. Pero ¿podría ser una buena gobernante en caso de ganar la elección?
El PRD y sus aliados, mientras tanto, se preparan para las encuestas que este 14 y 15 de enero seleccionarán al candidato de los partidos de izquierda a la Jefatura de Gobierno. Alejandra Barrales y Miguel Ángel Mancera son los favoritos de conformidad con las encuestas que se han dado a conocer en las últimas semanas. La ventaja de las encuestas es que los grupos de poder, como el de René Bejarano, no podrán maniobrar para imponer a su candidato. La gran sorpresa ha sido la renuncia de Carlos Navarrete, vinculado con el grupo de Los Chuchos, para apoyar a la lopezobradorista Alejandra Barrales.
En el PRI, Beatriz Paredes, quien hasta este momento es la única posible precandidata, ha mantenido un perfil bajo. Si bien la ex presidenta nacional del partido está en primer lugar en las encuestas, sabe que necesita lograr las paces en el interior de su partido, que en el Distrito Federal ha vivido momentos de enorme tensión. Las diferencias entre Cuauhtémoc Gutiérrez, el líder de los pepenadores, y la senadora María de los Ángeles Moreno vienen ya de lejos. Preocupante fue recientemente la golpiza que el dipuhooligan Cristian Vargas le propinó a Rosario Guerra, la ex secretaria de Finanzas del partido. Una nueva explosión de violencia podría poner en jaque las posibilidades del triunfo priista.
El Distrito Federal tiene una importancia política que va más allá de su población de alrededor de 9 millones de personas, cifra muy por debajo de los 15 millones del Estado de México. La concentración de la comunidad política y de los medios nacionales de comunicación les da una mayor proyección a los candidatos, funcionarios y actos políticos que tienen lugar en la capital federal.
Para el PRD, en particular, el Distrito Federal se ha convertido en su único verdadero reducto político. Las derrotas en Michoacán, Zacatecas y Baja California Sur han sido golpes muy importantes al partido. En otros lugares el partido participa en alianzas. El de Guerrero no parece un gobierno propiamente perredista.
La batalla por el DF apenas empieza. Es demasiado pronto para ofrecer alguna predicción del resultado. Lo que es claro es que pronto empezarán lo cuestionamientos y las descalificaciones. La elección promete ser muy reñida.
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 La señora Wallace/Julián Andrade
La Razón, 13 de enero de 2012
 La señora Isabel Miranda de Wallace es un activo de la sociedad civil. Demostró, con su valentía, que se puede obligar a las autoridades a hacer el trabajo al que les obliga la ley.
La señora Wallace, que es como se le conoce más, es bastante sensata en los temas legales; a diferencia de muchas víctimas del delito, ella tiene una clara visión de conjunto y sabe que el objetivo de cualquier Estado democrático es el hacer justicia, con los malos y con los buenos.
No tiene ocurrencias, sino más bien estudia los asuntos y los pasa por el matiz de su propia experiencia.
Por eso creo que es un error el que haya aceptado ser candidata del PAN para la Jefatura de Gobierno de la ciudad de México.
Las candidaturas son asunto de partidos, la ciudadanización es una fantasía, porque quienes son postulados asumen proyectos, diagnósticos y propuestas de las organizaciones políticas.
Es más, cualquier candidatura independiente tendría que instrumentar procesos similares a los de cualquier partido, lo que, por cierto, no tiene nada de malo.
Una de las cosas que no nos han salido tan mal es precisamente la construcción de un sistema de partidos, que ha generado, entre otras cosas, elecciones competidas y pluralidad.
Pero a la señora Wallace la necesitamos más insistiendo en las cosas que están mal, dando a conocer la simulación de algunos gobiernos y la mala actuación de ministerios públicos y policías.
Además, en el tema de la seguridad el asunto es más delicado, porque es difícil empatar la visión que se tienen desde la sociedad, con la que se forma a través de los instrumentos y la información que proporciona el poder.
Aunque hay que decir que la señora Wallace coincide, en términos generales, con la estrategia del presidente Felipe Calderón de combate al crimen organizado.
Pero, como en todo, hay dos caras de la moneda.
Gustavo Madero, el presidente del PAN, actuó bien y reclutó a la que puede ser una candidata con mejores expectativas que las que habrían tenido con un panista de cepa.
Si bien la señora Wallace en este momento no cuenta con un alto posicionamiento, es evidente que puede crecer y mucho, porque tampoco tiene opiniones desfavorables y que son las que suelen dar al traste con cualquier aspiración política.
El PAN ganó un gran activo, pero es probable que a nivel de la sociedad se pierda uno de los referentes obligados en el tema de la seguridad y en el compromiso con las víctimas de los delitos.
Se ve difícil, sin embargo, que el panismo pueda derrotar al PRD en la capital del país. La izquierda construyó, en la última década, una estructura bastante afinada y en la recta final de la elección de quien los abanderará hay dos buenos candidatos: la presidenta de la Asamblea Legislativa, Alejandra Barrales, y el ex procurador Miguel Ángel Mancera.
Al menos hay que aceptar que la elección en la ciudad de México va a ser todo menos aburrida.
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Venga, Isabel!/ Joaquín López-Dóriga
Columna En Privado, 13 de enero, de 2012
Siempre he tenido una admiración profunda por la señora Isabel Miranda de Wallace, que a la desaparición de su hijo, en 2005, inició una cruzada para encontrarlo y exhibir a las autoridades encargadas de procuración de justicia en México. Encabezó mítines, marchas, protestas, pagó espectaculares para denunciar la injusticia y acusar a los secuestradores y asesinos. De no haber sido por eso, los culpables, como en la mayoría de los casos, seguirían libres.
La señora Wallace, con el dolor inimaginable de perder a un hijo más la tortura de no conocer su destino, comenzó su tarea investigando, denunciando, señalando, descubriendo, creando todo un movimiento que creció desde la indiferencia hasta formar una causa.
A partir de ahí, de su tesón indomable, construyó no sólo una figura personal respetable y con credibilidad, sino un movimiento del que ha sido motor y combustible, superando la ruindad de las descalificaciones y calumnias en su contra.
Así, a veces con más coraje y emociones que razones, creció en proyecto y reconocimiento social hasta ser considerada un pilar ciudadano en el combate al crimen, pero más allá, a la corrupción, a la impunidad, a la colusión, causas de la inseguridad y la delincuencia.
Isabel Wallace fue ayer presentada como precandidata única del PAN al gobierno del Distrito Federal, en una decisión felizmente sorprendente.
Sus opositores partidistas podrán hablar de carencias políticas, que sin duda las tiene, y hasta de lo difícil de una victoria electoral.
Pero su presencia en las campañas al Gobierno del Distrito Federal dará una frescura y un atractivo que ninguno de los y las aspirantes le puede dar.
Ayer mismo supe quiénes la apoyarán desde la sociedad, lo que no son buenas noticias para el Movimiento Progresista ni para el PRI.
A ver.
Retales
1. SALUD. Muy delicado el estado de salud de Alonso Lujambio, agobiado por el cáncer y la insuficiencia renal severa. El miércoles por la noche, el presidente Calderón lo visitó en el hospital y ante el parte de que no mejoraba, se tomó la decisión de trasladarlo a un hospital en Estados Unidos con una esperanza;
2. ¿JUNTAS? Carlos Navarrete tomó una decisión sorprendente: renunciar a la precandidatura del Movimiento Progresista al Gobierno del Distrito Federal y declinar a favor de Alejandra Barrales. ¿Le están empezando a echar montón a Miguel Ángel Mancera? Mañana la encuesta, y
3. PRECIOSO. Mario Marín, el góber precioso, confirmó que será candidato del PRI al Senado. No sé cómo va a manejar Luis Videgaray, que revisa las listas, este caso al que se suman los del Niño Verde, la hija y el yerno de Elba Esther, y ahora el de la esposa de Jorge Hank.
Nos vemos el martes, pero en privado.
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Así no era, querida Isabel/ Ciro Gómez Leyva
Columna La historia en breve, en Milenio , 13 de eenero de 2012
Antes que nada, mis mejores deseos para Isabel Miranda de Wallace. Merece que le vaya bien en donde esté. Pero, se lo dije ayer por teléfono después de que diera la noticia: no me gustó su decisión.
Isabel teme un triunfo arrasador del PRI y por eso ha aceptado la invitación para ser candidata del PAN al Gobierno del DF. Porque cree que un PRI mayoritario revertiría conquistas sociales y políticas obtenidas con esfuerzos enormes, como el suyo desde que en 2005 secuestraron y mataron a su hijo Hugo Alberto.
Los argumentos y motivaciones serían inobjetables. El problema es que transforma a su maravilloso personaje. Hasta ayer era la admirable mujer que, como dijo Denise Maerker alguna vez, combatía con resultados y sentido ético los filamentos que encienden el miedo que carcome a México. Ahora será otra luchadora social que quiere el poder, el manejo de las instituciones y los recursos públicos.
Son malas noticias para la de por sí maltrecha credibilidad de los liderazgos sociales. Cuesta mucho tener una Isabel Miranda de Wallace para verla transmutada en candidata a gobernadora.
Además, y a juzgar por su objetivo y los números a la mano, los votos para Isabel difícilmente provendrán de los priistas. Tendrá que arrebatárselos, entonces, al candidato de la izquierda y pelearlos entre los indecisos. Es decir, para vencer al PRI tendría primero que debilitar a quienes las encuestas ponen hoy por delante del PRI: Miguel Ángel Mancera o Alejandra Barrales.
No entiendo la ecuación. Se vulnera la credibilidad de uno de los mejores personajes que ha producido México en años para mandarlo a una batalla con baja probabilidad de éxito.
Por eso creo que no era así, Isabel. No era sí.
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Un pasito del PAN, el gran salto de Isabel/Carlos Marín
Columna El asalto a la razón en Milenio 2012-01-13
Isabel Miranda de Wallace es, simplemente, encantadora.
A partir del asesinato de su hijo Hugo Alberto (mediados de 2005), ha dedicado sus mejores afanes al combate del secuestro y la inseguridad pública.
Experta como se ha vuelto en asuntos de procuradurías y tribunales, Isabel encanta por la sencillez de su comportamiento y su confiable naturalidad al hablar.
Gustavo Madero tiene razón, comparándola con los panistas que aspiraban a ser postulados para el Gobierno del DF, al definirla como “más competitiva”.
Sin embargo, el fuerte de la señora, lo suyo lo suyo, es la seguridad pública y, si bien ésta es la principal responsabilidad de un gobernante, Isabel carece de experiencia de gobierno.
Otra mujer legendaria en la lucha por los desaparecidos en la llamada guerra sucia, Rosario Ibarra de Piedra, viuda también de hijo, hizo a un lado lo suyo lo suyo por la política y hasta soñó con alcanzar la Presidencia de la República.
No valió la pena para Rosario, quizá tampoco lo valga para Isabel
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Mujeres divinas /Ricardo Alemán
Excélsior, 13 de enero de  2012
Son muchos los indicios de que el sexenio político que arrancará con el proceso electoral del 1 de julio próximo, se convertirá en el sexenio de las mujeres en México.
Y es que las mujeres mexicanas que se dedican a la política, podrán participar en dicho proceso electoral, como no había ocurrido en comicios anteriores. Es decir, que estarán presentes en las boletas de las contiendas a los más importantes cargos de elección popular.
Es probable –o altamente probable-, que en la contienda presidencial participe de manera destacada y con posibilidades reales de triunfo, una mujer. ¿De quién estamos hablando? Todos lo saben, de Josefina Vázquez Mota.
De acuerdo con el más reciente paquete de encuestas, la señora Vázquez Mota sigue con una tendencia a la alza. Es decir, su popularidad continúa creciendo, sus negativos siguen bajando, y cuando se pregunta a los potenciales electores militantes del PAN, y/o a los votantes en general, cada vez un mayor porcentaje la prefieren como la candidata del partido azul.
De hecho, abundan las opiniones en distintos sectores de Acción Nacional, en el sentido de que ante la contundencia de las encuestas, ya resulta ocioso llevar a cabo el proceso interno de selección previsto para el 5 de febrero. ¿Por qué esa percepción?
Porque la señora Vázquez Mota tiene en su nómina al 50% de las preferencias, sean simpatizantes, militantes y/o adherentes de Acción Nacional. Es decir, que aun sumados los porcentajes de quienes simpatizan con Santiago Creel y Ernesto Cordero, prácticamente nada tienen que hacer en la contienda.
Por eso no resulta descabellado suponer que probablemente en los próximos días, los señores Creel y Cordero realicen un acto de contrición política, y concluyan que le hacen más bien a su partido tirando la toalla. Aunque eso sería un asunto de grandeza, lo que no es muy usual entre la clase política contemporánea.
Por lo pronto, todo indica que, por primera vez en la historia electoral mexicana, una mujer participará en la contienda presidencial con posibilidades reales de triunfo. ¿La dejarán llegar?
El DF es de la mujeres
Pero el caso de Josefina Vázquez Mota no es el único de relevancia político electoral en el que estará presente una mujer.
Resulta que “los astros” parecen conspirar a favor de que en la capital del país, la disputa por el gobierno del DF se produzca entre tres mujeres, lo cual resultaría mucho más que un inédito; sería un hecho histórico.
En el primer caso, todos saben que en el PRI la candidata se llama Beatriz Paredes; militante del tricolor por más de tres décadas, legisladora por muchos años, gobernadora de su natal Tlaxcala y profunda conocedora de los intríngulis de la política mexicana.
Por razones que pocos se explican, la señora Beatriz Paredes encabeza todas las encuestas. Unos dicen que se debe a la caballada flaca del PAN y del PRD, otros señalan que se trata del “fenómeno Peña”, mientras los de más allá especulan que los capitalinos “están hasta la madre” de los gobiernos de izquierda.
Lo cierto, es que la señora Beatriz Paredes será la candidata a vencer. Por eso, la dirigencia nacional del PAN recurrió al clásico de Nicolás Maquiavelo. ¿Por qué?
Porque los “jefes del PAN” no encontraron en sus distintos establos ningún cuadro capaz de hacer un papel mediano en la contienda por el Distrito Federal. Ni Demetrio Sodi, ni Gabriela Cuevas, ni José Luis Luege Tamargo, ni Carlos Orvañanos ni Mariana Gómez del Campo. ¿Pero qué creen?
Sí, para ello están las organizaciones civiles. Los azules convencieron a la señora Isabel Miranda de Wallace –activista renombrada contra el secuestro-, para que por primera vez en su vida se vistiera con los colores azul y blanco del panismo y, casi nada, se convirtiera en candidata al GDF.
Lo azules creen que “para que la cuña apriete” la candidata a la capital debe ser una mujer. Con todo y que eso implique pervertir las causas sociales y a sus líderes.
Al más puro estilo del viejo PRI y del oportunista PRD, el PAN acudió por el “cascajo” de las causas sociales. En otras palabras, utilizó la ambición sin límite que significa el segundo cargo más importante de elección en México, para doblegar la convicción de una mujer, como Isabel Miranda de Wallace, que nada tiene que hacer en la boleta de los aspirantes al GDF, y que no tiene la menor idea de lo que significa la política y la lucha por el poder.
Acción Nacional comete un gravísimo error. Que con su pan se lo coman.
¿También los amarillos van por una mujer?
La tercera en discordia en la competencia por el GDF, podría ser la señora Alejandra Barrales; sobrecargo, líder sindical de su gremio, legisladora y también poseedora de una ambición sin límite para llegar al gobierno capitalino.
Sin embargo, la historia, en el caso de las izquierdas, aún no termina de escribirse. En unas horas comenzará el levantamiento de una batería de tres encuestas para seleccionar a la candidata de las izquierdas a la capital del país o, en su caso, al candidato. Los números son favorables para la señora Barrales, a menos que por primera vez, desde que es Jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard reclame sus territorios y consiga empujar como candidato, a su plan B, Miguel Ángel Mancera.
Resulta, como todos saben, que según los acuerdos para convertir a Andrés Manuel López Obrador en candidato presidencial por segunda ocasión, correspondería a Marcelo Ebrard seleccionar al que sería su sucesor. En otras palabras, que Marcelo Ebrard habría declinado sus aspiraciones presidenciales –luego de las famosas encuestas-, a cambio de mantener el control en la capital del país.
En un ejercicio elemental de memoria, seguramente recordaremos que el propio tabasqueño anunció que Marcelo Ebrard tendría prioridad en la sucesión, lo que todos entendieron como un pago por la “lealtad” del Jefe de Gobierno.
Pero la realidad ha resultado totalmente distinta. Apenas el pasado miércoles, el “chuchista” Carlos Navarrete declinó sus aspiraciones a la jefatura de Gobierno y se sumó a Alejandra Barrales.
Es probable que esa declinación y el amarre con grupos afines a Martí Batres y a Gerardo Fernández Noroña, hagan el milagro y, al final de cuentas, las encuestas digan que la candidata al GDF se llama Alejandra Barrales. ¡Mujeres divinas! ¿Cara o Cruz?
¿Se acuerdan?
Debido al receso navideño de la pasada elección presidencial, la semana del 7 al 13 de enero de 2006, fue el último momento de calma antes de la tempestad electoral.
Durante esos días, los 5 aspirantes a la presidencia se registraron ante el IFE.
A Patricia Mercado la acompañaron las dudas y los cuestionamientos de sus correligionarios, mismos que estuvieron cerca de tirar su candidatura.
Con Roberto Campa estuvo la sombra de Elba Esther Gordillo que, aunque aseguró no haberlo impuesto, para nadie es un secreto que nada se mueve en el Panal sin el consentimiento de “la maestra”.
A lado de Roberto Madrazo estuvieron sus “cuatro generales” Mariano Palacios Alcocer, Manlio Fabio Beltrones, Enrique Jackson y Jorge Emilio González.
Andrés Manuel López Obrador estuvo flanqueado por sendos representantes de la izquierda como los ex gobernadores Amalia García y Zeferino Torreblanca.
Y finalmente, a Calderón se unieron Juan Camilo Mouriño, Santiago Creel y Josefina Vázquez Mota. La terna que, en ese entonces, se esperaba persiguiera la candidatura azul en 2012.
ricardo.aleman@24-horas.mx | @ricardoalemanmx
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Y Se suma Isabel, cambian fichas en el PRD/Jorge Fernández Menéndez  
Columna Razones en Excélsior, 13 de enero de 2012
En unas pocas horas el proceso electoral en el Distrito Federal tomó rumbos que parecían inéditos, pero que también harán de los comicios capitalinos unos de los más competidos e interesantes de este 2012.
Sorpresivamente, Carlos Navarrete decidió abandonar la búsqueda de la candidatura, para apoyar a Alejandra Barrales. El senador, que representa a la corriente más numerosa del PRD, Nueva Izquierda, que tiene la presidencia del partido con Jesús Zambrano, estaba tercero en ese proceso. Participó incluso en el debate entre los precandidatos y, terminado éste, anunció que apoyaba a Barrales.
La pregunta es cómo se está alineando Nueva Izquierda en el proceso interno del PRD nacional. Por la relación que esa corriente tenía con Marcelo Ebrard, se hubiera podido suponer que el apoyo de Navarrete sería hacia Miguel Mancera. Pero no fue así, al contrario, quienes dicen que apoyarán al ex procurador capitalino son los que se suponía que serían sus adversarios: los grupos de René Bejarano y Dolores Padierna. Y entonces queda pendiente otra pregunta: ¿cómo se mueven estas fuerzas en torno, o no, de Andrés Manuel López Obrador? Porque hay que recordar que en el equipo de campaña del tabasqueño no hay un solo integrante de Nueva Izquierda. Una cosa es cierta: para esa candidatura se presentan cinco aspirantes, pero sólo hay dos que compiten, Barrales y Mancera.
Mientras tanto, consecuencia de una caballada que se veía demasiado flaca para enfrentar a los rivales que le pondrían enfrente el PRD y el PRI, el PAN decidió optar por una candidatura ciudadana que lo sitúa en condiciones de real competencia en la capital: Isabel Miranda de Wallace es una magnífica candidata. Una mujer que ha labrado su propio destino, que ha trascendido desde su hogar hasta alcanzar un lugar de preeminencia en los movimientos sociales que luchan por la seguridad del país. Luego del secuestro de su hijo Hugo, que fue asesinado por sus captores, Isabel se enfrentó a las autoridades que no habían hecho nada por localizarlo; buscó a los secuestradores, los localizó, luchó hasta que todos fueron encarcelados y, luego, cuando se enfrentaron con sentencias increíblemente indulgentes, volvió a luchar para que esas sentencias fueran rectificadas. Y también lo logró. En el camino sacó, junto con otros activistas, como Alejandro Martí y María Elena Morera, una ley antisecuestro que es uno de los muy pocos avances legislativos que se han dado en la lucha contra la inseguridad.
Isabel será una magnífica aspirante, sobre todo si el PAN procede en consecuencia y su candidatura ciudadana se convierte en un movimiento también ciudadano; si el PAN se abre a distintas opciones y posibilidades y no se la engloba a Isabel en una estructura, como la panista en la capital, muy cerrada y pequeña con relación a la del PRD y el PRI, que llevará al frente en el DF a otra muy buena aspirante,  Beatriz Paredes.
Habrá que ver cómo quedan las cosas pero lo cierto es que en el DF tendremos la posibilidad de una contienda entre tres mujeres: Isabel, Beatriz y Alejandra. Depende de la encuesta perredista de mañana. Si en lugar de Barrales queda Mancera, el debate sobre temas de seguridad entre el ex funcionario y la activista social, que tienen un buena relación personal entre ambos, dará mucho de qué hablar.
Mientras tanto, en el ámbito nacional, Enrique Peña Nieto presentó su equipo de campaña y no hubo sorpresas. La coordinación quedó como estaba desde el principio, en manos de Luis Videgaray. En las vicecoordinaciones, hay una posición para Beatriz Paredes en Jorge Carlos Ramírez Marín, y otra para Manlio Fabio Beltrones en Felipe Solís Acero. El primero, con buena relación con legisladores y, el segundo, un especialista reconocido en temas electorales. Sorpresas, insistimos, no hay. Videgaray me decía que la intención es que la campaña se lleve de la mano con el PRI: las oficinas del candidato y del equipo de campaña estarán en el mismo edificio de Insurgentes Norte. Habrá que ver cómo les resultan las cosas: en el primer mes de campaña real, entre noviembre y diciembre pasados, a la estructura anterior no le salieron bien las cosas y se cometieron varios errores: este equipo tendrá que velar por que no se repitan. Dice mi buen amigo Héctor Aguilar Camín que las encuestas de esta semana revelaron una gran estabilidad y que lo que reflejen las de febrero, cuando ya esté definida la candidatura panista, podrían mantenerse estables hasta julio. Puede ser, pero no lo creo: son demasiados los imponderables, demasiada la posibilidad de acierto y error.
En el PAN se preparan con miras al debate interno del martes, y Ernesto Cordero fue a Monterrey, una plaza clave para el panismo. Ahí, el alcalde Fernando Larrazabal encabezó a los corderistas, ¿pero qué aporte le puede dar Larrazabal a Cordero?, ¿ya se olvidaron de Adalberto Madero, del Casino Royale, de los sobornos de Jonás Larrazabal, de las divisiones internas en el panismo local provocadas por el equipo del alcalde?

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