Uno de los sermones más famosos del Papa número 45 de la Iglesia católica, San León Magno (390-461) fue el de la Navidad, cuando dijo: “…Alegrémonos, hoy ha nacido nuestro Salvador. No puede haber, en efecto, lugar para la tristeza, cuando acaba de nacer la vida… disipando el temor de la muerte y llenándonos de gozo con la eternidad prometida”.
En efecto, ¡hoy es un día de alegría para los millones de cristianos del Mundo!, aunque el Sultán de Brunei, Hassanal Bolkiah, prohíba y condene hasta por 5 años a los musulmanes que la celebran…
¡Caray con el sultán...!
Dice el Papa Francisco –con gripe por estos días– que a veces la Navidad es una fiesta ruidosa, por lo que recomienda estar un poco en silencio para escuchar la voz del amor…
Coincidimos con el jesuita.
¿Qué significa la Navidad?
Es la conmemoración litúrgica del nacimiento de Jesús, sin duda, la fiesta más celebrada en el mundo católico-cristiano; se celebra desde principios del siglo IV como cristianización de la fiesta pagana del natalicio del Sol.
La primera vez que se celebró fue en año 379 en Constantinopla.
Resulta interesante la coincidencia con otras culturas -como la de los Mayas- que celebraban en estas fechas grandes fiestas en honor del Sol, como si fuera el principio de la vida.
Por eso me encanta la Navidad, el Sol de distinta manera., es un Sol nuevo…
Mucha gente pregunta si en verdad Jesús el histórico nació por estas fechas.
La verdad es que no se sabe. Incluso es uno de los aspectos más míticos y con menos carácter histórico del Nuevo Testamento en la Biblia; además es imposible demostrar que el nacimiento de aquel hombre que revolucionó el mundo se dio la noche del 24 de diciembre de hace más de 2000 años.
No existen fuentes con rigor científico que atestigüen el lugar y el día: Lo que se puede asegurar que aquel hombre nació bajo el reinado de Herodes, quien murió el año 4 antes de Cristo…
Para ser precisos; en ninguna parte de los textos bíblicos aparece la fecha. Pero eso poco importa. Lo interesante son los motivos y el significado de la Navidad que proceden de los evangelios apócrifos del siglo II, -que por cierto la Iglesia Católica nunca admitió- y de los relatos de la infancia de Jesús, recogidos en los evangelios de Mateo y Lucas.
Significados con un contenido teológico de gran trascendencia y que no siempre es sencillo interpretar; me refiero a la anunciación del ángel, el nacimiento en la ciudad Belén y en un pesebre, el asno y el buey, la visita de los pastores y los reyes magos, la estrella de Oriente, el exterminio de inocentes o la huida a Egipto.
Es Lucas -el evangelista- quien más se aproxima a nuestro concepto de “historiador”.
Desde el mismo prólogo revela una gran preocupación por referir con detalle "la historia de las cosas que entre nosotros han sido ciertísimas".
Y aún cuando él, no había vivido personalmente los acontecimientos (Marcos, Mateo y Lucas redactaron los evangelios entre la segunda y la tercera generación cristiana, el evangelio más antiguo es el de Marcos y data no antes de 35 o 40 años después de los hechos pascuales), trata de proclamarlos tal y como: "nos las enseñaron los que desde el principio las vieron".
Claro que Lucas se preocupó por narrar de manera inteligente y ordenada lo que sabía acerca de Jesús, sin embargo, en sentido estricto, nunca pretendió escribir una biografía, sino simplemente: ¡un evangelio!
El evangelio significa buena nueva.
Dice Lucas en una narración -¡que, subrayó, no es histórica propiamente dicha!-, empero, si ofrece algunos datos de que el nacimiento de Jesús data del año 4 antes de Cristo.
(Véase la versión Reina Valera 1995)
“Aconteció en aquellos días que se promulgó un edicto de parte de Augusto César que todo mundo fuera empadronado”.
Este primer censo se hizo siendo Cirenio gobernador de Siria.
E iban todos para ser empadronados, cada uno a su ciudad.
También José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David, para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta.
Aconteció que estando ellos allí se le cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón”.
Agrega la versión bíblica que “había pastores en la misma región, que vivían en los campos y cuidaban sus rebaños durante la noche”.
Y (ahí) se les presentó un ángel del Señor y la gloria del Señor los rodeó de resplandor y tuvieron gran temor:
Pero el ángel les dijo: “No teman; porque yo os doy nuevas de gran gozo que será para todo el pueblo: Porque os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor”.
“Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre”.
“Repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan y decían”:
“Gloria a Dios en las alturas
y en la tierra paz,
Buena voluntad
para con los hombres...”.
¡Esa parte de Lucas lo dice todo!
¡Ah! y veamos que en el portal de Belén no habías asnos, mulas ni bueyes. Pero eso poco importa. Como tampoco los árboles…, y otros adornos de la navidad como Los Villancicos.
Todos tienen una razón de ser…
¿Y de dónde salió el gordo de la Navidad… o sea Santa Claus, tan popular hoy?
Quizá la tradición de ese personaje tenga algo que ver con Nicolás de Mira o San Nicolás de Bari, también llamado papa Noel. Es el santo patrono de Rusia, Grecia y Turquía y también el santo de los niños, los marineros, los viajeros. Es venerado en ciudades de Italia, Holanda, Suiza, Alemania, Austria Y Bélgica.
Al tratarse de un santo de los primeros siglos poco se sabe con certeza de él. Salvo que nació en Licia (actual Turquía), y llegó a ser obispo.
San Nicolás murió un 6 de diciembre, pero no sabe con exactitud si fue en el año 345 o en el 352.
En el siglo VI, el emperador Justiniano construyó una Iglesia en Constantinopla (hoy Estambul) en su honor, y se hizo popular en todo el cristianismo.
En 1087 sus huesos fueron rescatados de Mira, que había caído bajo invasión musulmana, y se llevaron a Bari, en la costa adriática de Italia. Por esto es llamado San Nicolás de Mira o San Nicolás de Bari. Sus reliquias reposan hoy en la Iglesia de “San Nicola de Bari”.
San Nicolás por haber sido prelado se le representa con un vestido rojo. Además de que su devoción se propagó mucho en Alemania y quizá, quizá como en Alemania se llama “Sankt Niklaus” le empezaron a llamar Santa Claus.
(ver imagen),
De ahí el personaje se trasladó a EU con los inmigrantes holandeses quienes fundaron la ciudad de Nueva Ámsterdam, más tarde llamada Nueva York.
En 1809 el escritor Washington Irving escribió una sátira, Historia de Nueva York, en la que deformó al santo holandés, Sinterklaas, en la burda pronunciación angloparlante Santa Claus. Y todavía más en 1821 se publicó el libro de litografías para niños "Sante Claus, el amigo de los niños" en el que se presentaba a un personaje que llegaba del Norte en un trineo con renos voladores. Esa publicación hizo aparecer al personaje cada Nochebuena y no el 6 de diciembre, día de la fiesta del santo obispo.
Dos años después el poeta Clement Clarke Moore publicó en 1823 un poema donde dio cuerpo al actual mito de Santa Claus, basándose en el personaje de Irving. Fue entonces cuando Santa adquirió la actual fisonomía de gordo barbudo bonachón con la que más se le conoce.
Años después en 1863 el caricaturista Thomas Nast comenzó a dibujar a Santa con los rasgos que ahora le atribuyen: gorro rojo, abundante barba blanca y un abultado vientre. Nast diseñó este personaje para sus tiras navideñas en Harper's Weekly.
Casi 60 años después, -en 1920- el personaje se hizo famoso al aparecer por primera vez en un anuncio de Coca Cola, y después Holywood lo hizo propio.
No sabemos si la imagen tenga derechos de autor…
¿Y Los Reyes Magos?
Mmm…
También es un invento de la tradición. Dice Federico Fernández que la tradición quiso que fueran tres, que fueran Reyes y que uno fuera negro, para que nadie se sintiese discriminado. Melchor, Gaspar y Baltasar, que así se mencionan desde el siglo VI. Sólo el evangelista San Mateo los menciona (Mt. 2,1-12).
“Nació Jesús, nació en Belén de Judá en el tiempo en que Herodes era rey del país. Llegaron por entonces a Jerusalén unos magos de Oriente que se dedicaban al estudio de las estrellas, y preguntaron:
- ¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle.
El evangelista ofrece datos cronológicos y geográficos. De los Reyes no dice apenas nada.
Sólo que “llegaron del Oriente unos magos a Jerusalén”.
La expresión “magos“, del latín y por remisión del griego, significa sacerdotes y sabios de la religión zoroástrica, que tuvo gran predicamento en los imperios medo, persa y asirio e influjo en religiones posteriores.
Sin duda los magos eran respetados por su saber religioso y conocimiento científico. No se sabe cómo llegaron.
Sólo sabemos que fueron 3, y se coincide que llevaron regalos al Niño,
En México, por algún motivo pegaron más Los Reyes Magos que el gordo de Holywood.
Aprovecho para desearles a los amigos de LSR ¡Feliz Navidad, y sinceramente buen año 2016!
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