Huyen pobladores de Texcaltitlán por miedo a represalias
Dzhoara Limón y Abimael Chimal, reporteros..
Reforma, 17 de diciembre de 2023
Decenas de pobladores han huido de la comunidad de Texcapilla, en el Municipio de Texcaltitlán, por temor a represalias de La Familia Michoacana.
En este poblado del sur del Estado de México, sus habitantes le hicieron frente el viernes 8 al grupo criminal que llevaba al menos siete años extorsionándolos, con un saldo de 10 delincuentes y cuatro agricultores muertos.
Texcapilla cuenta con mil 447 habitantes, pero muchos de ellos ya no están.
Ante el riesgo de una reacción por parte del cártel, abandonaron casas, negocios y la vida que habían construido en este pequeño poblado.
"Aquí, todo está vacío, ya no hay nadie, mucha gente del pueblo ya se fue, quedamos nada más como la mitad de la gente, no sabemos cuándo van a regresar los demás, o si van a regresar, tienen miedo a que ellos (los delincuentes) regresen", dijo un poblador, quien prefirió el anonimato por temor a represalias.
Otros siguen ahí porque no tienen a donde ir o porque así creen honrar la memoria de sus cuatro familiares y vecinos que murieron baleados por los mismos criminales que les imponían precios de los productos de la canasta básica y que les cobraban hasta por tener animales, cortar madera o realizar fiestas.
"Tengo un tío balaceado, entonces yo digo que no es justo que nos vayamos y dejemos en el olvido la voluntad de ellos que tuvieron para salvarnos a muchos, y no es justo que los dejemos ahora, sino que seguir luchando contra esas personas", expresa una mujer.
"No puede ser posible que los demás se hayan ido. ¿Por qué nos abandonaron? ¿Por qué la gente se fue? Es cuando nos debemos de unir más, estar juntos para apoyarnos unos a los otros, pero desgraciadamente la gente no lo piensa así".
Parece un pueblo fantasma, consumido por el terror, mismo que se acrecentó tras conocer que habitantes de Texcaltitlán, más de 10, según el Gobierno del Estado de México, desaparecieron tras el enfrentamiento.
Nueve de ellos son integrantes de una familia que habría sido interceptada en un retén de La Familia Michoacana en la Carretera La Puerta-Sultepec, según la versión de sus parientes.
En el campo de futbol de Texcapilla siguen las huellas de la batalla. Nadie removió las cenizas de los tres vehículos de los criminales que terminaron calcinados. También hay restos de ropa, suelas de zapatos y casquillos.
En las paredes de las dos casas cercanas y en una camioneta se aprecian las perforaciones de las balas que dan cuenta del nivel de violencia.
Alrededor, los comercios tienen las cortinas abajo y en las escuelas no hay clases, tampoco hay gente caminando por las calles, la iglesia permanece cerrada y los sembradíos lucen desolados.
La propietaria de una tienda se fue de la comunidad y le encargó el establecimiento a una de sus vecinas. Ella mantiene cerrado y sólo vende los productos que quedan, si alguien toca la puerta o la contacta directamente, para evitar que cualquiera pueda entrar.
Por ahora, el lugar se mantiene vigilado. La Gobernadora Delfina Gómez prometió la construcción de una compañía de la Guardia Nacional, con 120 elementos y un helipuerto, y el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, anunció el envío de un mando especial para la zona sur del Estado de México.
Los habitantes de Texcapilla ya no se imaginan una vida sin presencia de policías y militares.
"Personas hay, esa gente (del crimen organizado) siempre está, pero esperemos que por un buen tiempo estén estos (policías) estatales, el Ejército y la Marina, incluso, ¿para qué?, para que nos sintamos protegidos y tengamos una vida normal, porque ya sale uno con miedo de que algo le vaya a pasar", reconoce la mujer.
Un hombre que padece cáncer debía acudir a una cita médica a Toluca y sus familiares pidieron el apoyo del Ejército. Los militares accedieron a la petición, pero les solicitaron reunir a más pobladores que tuvieran la necesidad de salir para escoltarlos en un convoy.
Lo mismo hizo un grupo de campesinos que quería llegar a la capital mexiquense a vender el poco producto que pudieron cosechar.
Esa es la nueva normalidad de Texcapilla.
'Desaparecidos, no secuestrados'
Durante cinco días, el Gobierno del Estado de México omitió en sus informes que pobladores del Municipio de Texcaltitlán desaparecieron después del enfrentamiento con la Familia Michoacana.
El viernes 8 de diciembre, horas después de los hechos de violencia registrados en la comunidad de Texcapilla, la Administración estatal, encabezada por Delfina Gómez, reportó un saldo preliminar de 14 personas fallecidas, cuatro heridas y dos desaparecidas.
Sin embargo, un día después, el Secretario de Seguridad estatal, Andrés Andrade, y el Fiscal de Justicia mexiquense, José Luis Cervantes, dieron a conocer una actualización: 14 muertos, 10 de ellos presuntos delincuentes y cuatro pobladores, además de siete lesionados, de los cuales cinco son civiles y dos probables criminales.
A partir de esa conferencia de prensa del 9 de diciembre, ninguna autoridad habló de desaparecidos.
Las versiones sobre pobladores no localizados surgieron en los siguientes días y la Gobernadora lo aceptó hasta el jueves 14 de diciembre, cuando visitó por segunda vez Texcapilla para entregar apoyos sociales.
"Son desaparecidos, ahorita se va a dar el reporte, pero no secuestrados", dijo Gómez.
El Secretario de Seguridad también lo confirmó, sin dar una cifra precisa.
"Arriba de 10 personas son las que todavía tenemos no localizadas y estamos analizando cuál es el estatus, si hay alguna situación delictiva o es un tema de sustracción voluntaria por la situación que vivieron", declaró Andrade.
REFORMA entrevistó a una mujer que afirmó que nueve de sus familiares, entre ellos cuatro menores de edad, desaparecieron la misma noche del 8 de diciembre, tras presuntamente ser interceptados en un retén del grupo criminal sobre la Carretera La Puerta-Sultepec, a la altura del Municipio de Temascaltepec.
Se trata de su padre, su hermano, dos cuñadas y cinco sobrinos.
La mujer relató, con base en lo que le informaron otros familiares, que su hermano acudió a la reunión con La Familia Michoacana en el campo de futbol de Texcapilla, a donde se trasladó desde la comunidad Nueva Santa María, ubicada a unos dos kilómetros.
En el enfrentamiento, el hombre resultó herido de bala. Como no era de gravedad, sus familiares decidieron trasladarlo por medios propios a un hospital de Toluca.
De acuerdo con la mujer, el grupo salió en dos vehículos; el primero, en el que iban más familiares, logró pasar la zona en la que estaban los delincuentes, pero el segundo habría sido retenido. En esa unidad, dijo, se trasladaban las nueve personas que, al cierre de esta edición, no han sido localizadas.
"Quisieron ir todos porque iban a llevarlo (a su hermano) al hospital y querían comprar comida, que porque se iba a poner muy fea la situación. Lo único que sí sé es que los agarró la maña porque en el carro que iban mis otros familiares sí lograron pasar.
"El retén fue en el lugar que se llama El Capulín (Temascaltepec), cerca de otro lugar que se llama Raíces (Zinacantepec), y de ahí mi hermano y con los que iba ya no los dejaron pasar, porque mi hermano iba herido de una pierna. Los nueve iban ahí", aseguró.
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