23 dic 2022

Es un timbre de orgullo que se le declare a nuestro embajador persona non grata: AMLO

  Conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador del 23 de diciembre de 2022

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: 

Y también está con nosotros el embajador de México en el Perú, Pablo Monroy Conesa, con el subsecretario para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes Zúñiga. Y Pablo nos va a contar cómo están las cosas en Perú y a qué atribuye que hayan tomado esta medida extrema de declararlo persona non grata, siendo nuestro embajador en Perú, desde luego, cumpliendo él su misión y con estricto apego a lo mejor de nuestra política exterior, que es garantizar el derecho de asilo, el salvar la vida a perseguidos de cualquier nacionalidad.



Eso es una labor que se logró, es un mérito, se dejó en alto el nombre de México y el prestigio de su política exterior, sobre todo en lo que tiene que ver, repito, con el derecho de asilo.

(...)

PABLO MONROY CONESA, EMBAJADOR DE MÉXICO EN PERÚ: Bueno, con su permiso, señor presidente. Muy buenos días a todas y a todos. Señor gobernador del estado de Tabasco, señores secretarios, señor subsecretario y también saludo al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, desde aquí.

Bueno, en primer lugar, señor presidente, yo quiero agradecerle el alto honor que me hace el recibirme aquí en su estado natal tras mi retorno de Lima, Perú, luego de que fuera declarado persona non grata (indeseable) y señalar un plazo de 72 horas para abandonar el país. También agradezco las generosas palabras que ha tenido para conmigo, las cuales tomo con toda humildad y en nombre del equipo de la embajada.

Señor presidente y compañeros, los retos que ha tenido que enfrentar la embajada de México en Perú en los últimos 16 días no han sido fáciles, pero creo que conforme a las instrucciones que nos dio el presidente de la República y el secretario de Relaciones Exteriores hemos podido cumplir los objetivos principales y estos han sido tres, sobre los cuales les quiero dar cuenta.

En primer lugar, y de manera prioritaria, pues ha sido por supuesto velar por la seguridad y el bienestar de todas las personas mexicanas en el Perú luego de los acontecimientos, de los desarrollos políticos que se desataron en el país a partir del 7 de diciembre. Desde ese mismo día, todo el equipo de la embajada estuvo muy pendiente de la comunidad mexicana en Perú, en todas las ciudades del Perú, tanto de turistas, como de personas que son residentes temporales o permanentes en el país.

Habilitamos un registro en un primer momento, habilitamos un registro para tener conocimiento sobre cuántas eran las personas mexicanas que estaban en el país, cuál era su situación, su localización y cuáles eran sus necesidades. En ese registro llegamos a tener a más de 500 personas mexicanas registradas y más del 50 por ciento, más de la mitad se encontraban en la zona de Cuzco, evidentemente, como lo ha reportado el canciller, por ser uno de los principales destinos turísticos de Perú.

Así que, bueno, conforme a los protocolos que se tienen en la Secretaría de Relaciones Exteriores, en las representaciones en el exterior, procedimos a entrar en contacto con todas las personas que se habían visto afectadas por el cierre de aeropuertos, como sucedió en la ciudad de Cuzco y en otras ciudades turísticas, por bloqueos carreteros, más de 63 carreteras fueron bloqueadas en el país; o por suspensión de vuelos, si bien algunos aeropuertos permanecían abiertos, se suspendían vuelos o se reducían frecuencias.

Entramos en contacto con todas y cada una de las personas que se registraron, y pudimos pues eso, asistirlas en función de las necesidades, fuimos caso por caso analizando cuáles eran las necesidades y pudiendo responder a cada una.

Finalmente, el viernes, hace una semana, se abrió, después de cinco días, se abrió el aeropuerto de Cuzco, así que pudimos ya llegar a Cuzco, que era nuestra zona de principal atención para brindar protección a las personas ahí. Pudimos entregar apoyos para aquellas personas que ya no tenían recursos y que necesitaban alimentos, necesitaban atención médica, necesitaban medicinas o bien habían perdidos sus vuelos y no los habían podido reprogramar, y pudimos ayudarlos a regresar.

Al día de hoy nuestro cálculo, nuestra estimación es que ya más del 90 por ciento de este universo del cual les platicaba de más de 500 personas ha podido regresar a México, o bien se encuentra en Lima próxima a regresar a México o quedándose unos días más en condiciones de seguridad. Entonces, ese primer objetivo de estar cerca de nuestra comunidad, de protegerlos, de asistirlos, pudimos cumplirlo.

El segundo objetivo de la embajada tras los sucesos del 7 de diciembre fue, por supuesto, honrar la larga tradición de asilo por parte de México, de asilo político para aquellas personas extranjeras que tengan temor por su vida, por su integridad física o por su libertad. Una de las tradiciones más humanistas, más pacíficas, más nobles de la política exterior mexicana, y así lo pudimos hacer.

Como ustedes saben, el presidente Castillo solicitó asilo. Por supuesto que había la disposición de México de ofrecerlo, pero, bueno, fue capturado previo a que pudiera llegar a los locales de la embajada. Pero pudimos dar protección y resguardar a su familia, a la señora Lilia Paredes y a los dos hijos menores de la familia. Ellos ingresaron a la residencia oficial de México el jueves 8 de diciembre y desde entonces permanecieron con nosotros sanos y salvos, y pudieron salir finalmente el 20 de diciembre pasado.

Yo le quiero decir, señor presidente, yo soy nieto de refugiados, a quienes México les dio una segunda oportunidad de vida, así que defender el derecho de toda persona de buscar y de recibir asilo para mí es una prioridad, y así lo hicimos, cumplimos con esa instrucción y con esa tarea, con ese objetivo.

Y el tercer gran objetivo, la tercer gran labor que teníamos en la embajada era, por supuesto, pues mantenernos muy atentos al desarrollo de la situación política en el Perú, el poder mantener los canales de diálogo abiertos con todos los interlocutores, con todos los actores políticos, con personas de todos los sectores, de modo que tuviéramos información fidedigna, información confiable sobre el desarrollo de la situación política, información que por supuesto también analizábamos en la embajada y transmitíamos a la Secretaría de Relaciones Exteriores y en general al Gobierno de México.

Esta fue una tarea que obviamente se daba momento a momento y que requería de muchas conversaciones, requería de verificación de, por ejemplo, cuáles eran los pasos que tenían que seguirse en tales procedimientos y cuál en tales otros. Yo estoy convencido, señor presidente, de que estos tres objetivos los hicimos:

Uno, primero, sabiendo que somos servidores públicos y que nos debemos a nuestros conciudadanos, que esa es la razón de ser de nuestra función.

Dos, también honrando, insisto, esta tradición y este sentido humanista del Gobierno de México de proteger a personas que se encuentran en situaciones de riesgo y sobre todo sabiendo, señor presidente, y colegas, que en una situación como la que atraviesa Perú, donde todo tiene un cariz político, es muy importante proteger a estas personas y sobre todo cuando México considera como sagrado también el principio de presunción de inocencia, es decir, aquí nadie es culpable hasta que no se le demuestre ello. Entonces, hay que brindar esa protección.

Y tres, señor presidente, logramos estos objetivos con la firme convicción y apostando siempre a la diplomacia y al diálogo como herramientas, como medios para manifestar las preocupaciones que tenemos, manifestarlas de manera respetuosa y sin intervenir en los asuntos internos, pero no dejar de manifestar preocupaciones legítimas que se tienen sobre una situación política, como la que sucede en Perú y tratar de resolver aquellas diferencias que pueda haber, y eso es algo que siempre ha hecho la embajada de México en el Perú y por supuesto la cancillería, el Gobierno de México.

En cuanto a las preocupaciones, bueno, nosotros confiamos que, en el Perú, en efecto, se respeten, se observen todas las normas de derechos humanos internacionales y, por supuesto, conforme a la legislación peruana, que la actuación de todas las autoridades sea ajustada a estas normas y estos estándares de derechos humanos.

Ahora ha habido, como ustedes saben, muchas manifestaciones y movilizaciones en las que puede haber en algunas situaciones violaciones a derechos humanos. No nos corresponde a nosotros determinarlo, corresponde a las propias autoridades, pero sí hay preocupación sobre ello.

También hay, por supuesto, una preocupación legítima que compartimos muchos países sobre todos los procesos judiciales o de procuración de justicia y judiciales que se siguen en el Perú se respete el debido proceso, se respeten todos los derechos procesales de las personas acusadas, de las personas imputadas, en particular por supuesto del presidente Castillo.

Así que son todas estas situaciones a las que hemos dado seguimiento, insisto, en el marco del derecho internacional, lo hemos hecho en el marco de los principios rectores de la política exterior mexicana, es decir, la no intervención en los asuntos internos, el respeto y promoción de los derechos humanos, la autodeterminación de los pueblos.

Lo hemos hecho en el marco de la legislación mexicana y de la legislación peruana, pero no podemos dejar de tener estas preocupaciones y dialogar con el gobierno peruano respecto de ellas. Yo creo que aquí hay que apostar al diálogo para ello.

Entonces, seguiremos muy pendientes de estas cuestiones porque lo que no queremos es que haya violaciones a derechos humanos. Externaremos en la medida de lo posible esto al gobierno peruano. Ha habido algunos procesos en los cuales… O ciertos actos, por ejemplo, en el Congreso de la República, en los que podría haber duda sobre si siguieron los procedimientos que marcan las leyes. Por ejemplo, el retiro de la inmunidad de la que goza el presidente, los presidentes en el Perú, este es un procedimiento que se llama antejuicio, tiene que suceder un antejuicio para poderle retirarle la inmunidad a los presidentes y entonces proceder a investigarlos y juzgarlos. Hay ciertas interrogantes sobre si esto se cumplió al pie de la letra, con lo cual nos mantenemos dando seguimiento, entendiendo los procedimientos y externando las preocupaciones cuando así sea necesario.

Pues eso sería todo por mi parte. De nuevo, muchísimas, muchísimas gracias, presidente.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Bueno, agradecer mucho la destacada labor del embajador Pablo Monroy. Es un timbre de orgullo el representar a México en una situación de conflicto y poner en alto el principio del derecho de asilo, el que se proteja a quienes son perseguidos, a quienes corren peligro, que se les protejan sus derechos humanos. Esto ha caracterizado, lo hemos dicho varias veces y es de lo que más se sabe de política exterior en México y en el mundo, la actitud siempre consecuente de México para garantizar protección y asilo a perseguidos en los distintos países del mundo.

Es una tradición que data de muchos años, que tuvo su mejor época durante el gobierno del general Lázaro Cárdenas cuando se dio protección, asilo a españoles, también a judíos. Y en los años 70, cuando se llevaron a cabo muchos golpes de Estado en América del Sur, en casi todos los países de América del Sur.

Lo más conocido y doloroso fue lo sucedido en Chile en 1973, pero en ese tiempo pasó lo mismo en Argentina, en Uruguay, en Bolivia, en Ecuador, en todos esos países, y México protegió a quienes necesitaban asilo.

Esto lo hicimos también cuando corría peligro la vida del presidente Evo Morales y se ha vuelto a hacer ahora en este caso del Perú.

De modo que nuestro reconocimiento al embajador Pablo Monroy.

Ayer expresaba yo que la esposa, los hijos del presidente Castillo van a contar con nuestro apoyo. Ya están a salvo en la Ciudad de México, y vamos a estar pendientes de ellos, ayudándolos, apoyándolos. No están solos, ese es el mensaje para el presidente Castillo y para todos los ciudadanos del Perú.

Es un timbre de orgullo que se le declare a nuestro embajador persona non grata por estar cumpliendo la misión de salvar vidas y de hacer valer nuestra política exterior, lo mejor de nuestra política exterior, que, repito, es el derecho de asilo.

Vamos a tener una reunión con el embajador y con Maximiliano el día de hoy. Y vamos a seguirles reconociendo por su gesto patriótico en el caso del embajador Pablo Monroy, es su homenaje esta visita a nuestro estado.

(...

PREGUNTA: Buenos días, presidente.

En el caso de Perú, el nuevo gobierno peruano ha informado que le pasaron a México el expediente judicial de Lilia Paredes. Quería pregunta si ya lo han revisado. ¿Y qué pasaría si el nuevo gobierno pide a México la extradición?

PRESIDENTE: Pues nosotros vamos a defender el caso. No sé qué información tenga Pablo sobre eso, que quiera ampliar.

PABLO MONROY CONESA: Gracias, presidente.

En efecto, el mismo día, en el mismo acto en el que le entregaron la nota declarándome persona non grata y nos entregaron los salvoconductos para que la esposa del presidente y sus hijos menores pudieran viajar con toda la seguridad hacia México, nos entregaron también un expediente sobre las actuaciones judiciales que se siguen en contra de Lilia Paredes, sobre la investigación en la que está involucrada.

Pero aquí también creo que es muy importante decir y recordar que fue el jueves mismo, una sala penal en el Perú declaró infundada o rechazó la medida de comparecencia que se había fijado en contra de Lilia Paredes. Es decir, ella tenía que comparecer cada cierto tiempo frente a las autoridades para verificar que estuviese en el Perú; bueno, esa medida se levantó porque la sala de cuestiones penales no encontró que la decisión hubiese estado bien motivada.

Entonces, es un expediente que por su volumen lo traje yo conmigo y será entregado, por supuesto, será procesado en la cancillería y entregado a las autoridades competentes del Gobierno de México.

INTERLOCUTOR: ¿Podría ser extraditada en caso de que hubiera solicitud?

PABLO MONROY CONESA: Pues habría que recibir una solicitud de extradición, pero el asilo político que ha otorgado México tiene efectos amplios.

INTERVENCIÓN: ¿El presidente de Perú mantiene su petición de asilo?

PABLO MONROY CONESA: ¿Disculpe?

INTERVENCIÓN: ¿El presidente Castillo mantiene su petición de asilo?

PABLO MONROY CONESA: Por lo menos la petición que hizo el mismo 7 de diciembre me fue ratificada a mí verbalmente el día 8 de diciembre.

INTERVENCIÓN: Embajador, ese asilo, ese efecto que usted dice que es amplio ¿podría estar arriba de una solicitud de extradición?

PABLO MONROY CONESA: Recordemos que la etapa en la que está el caso de la señora Lilia Paredes es en investigación, no ha habido todavía una consignación, no ha iniciado un proceso y eso es muy importante.

También, si nosotros vemos la convención sobre asilo diplomático de 1954, dice que en principio no se le puede conceder asilo a las personas que son imputadas por un delito o que son ya sentenciadas. Ahorita estamos en una etapa de investigación.

Y además de todo, independientemente de eso, es México como Estado asilante el que determina la naturaleza de los delitos que se le imputan a la persona que solicita asilo; es decir, si para México se trata de un delito político, bueno, el Estado peruano tiene que aceptarlo así.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: En pocas palabras, está iniciando el proceso, y corresponde a México decidirlo.

No hay comentarios.: