31 oct 2009

Personas que triunfan

Los más listos no triunfan siempre/FRANCESC MIRALLES
Publicado en El País Semanal, 01/11/2009;
Muchos ilustres de la historia han sido malos estudiantes. Para alcanzar el éxito, la curiosidad y ser inmune al desánimo son tan importantes como los títulos.
La historia de la ciencia y de la cultura está llena de malos alumnos que de adultos destacaron por sus logros. Entre los peores de la clase, en algún momento de su formación, estaban Albert Einstein, Charles Chaplin o Alejandro Amenábar. Miguel de Unamuno suspendía la asignatura de literatura, y Marguerite Yourcenar nunca pasó por la escuela.
¿Cómo lograron salir adelante y alcanzar la cima de su profesión? ¿Eran demasiado inteligentes y les aburría lo que se enseñaba en clase?
En el otro extremo del aula, el publicista Paul Arden explica en su libro Usted puede ser lo bueno que quiera ser que, a menudo, los más listos de la clase no triunfan en la vida. A continuación veremos por qué.
Expertos en pasado o en futuro
"La educación es lo que queda después de que uno ha olvidado lo que aprendió en la escuela" (Albert Einstein)
Arden lo explica de este modo: en la escuela se aprende sólo el pasado, los hechos conocidos. Cuantos más hechos se recuerdan, mejores son las notas. Los que fracasan en la escuela no están interesados en el pasado, tal vez porque piensan en clave de futuro. O simplemente no tienen buena memoria. Pero esto no significa que no puedan tener éxito.
Lo único que demuestra el fracaso escolar de estos niños es que la educación académica no ha sabido estimular su imaginación. Por tanto, según esta hipótesis, los primeros de la clase dominan el pasado, mientras que muchos malos estudiantes son especialistas en imaginar el futuro, que es donde se encuentran sus éxitos. Por muy malas notas que hayan cosechado, si tienen un objetivo en la vida, encontrarán las fuerzas y los recursos para alcanzarlo. Para ellos, el mundo exterior es la verdadera escuela que les pone a prueba y les procura grandes lecciones.
En una sociedad que promueve la comparación hay personas que sufren un complejo de inferioridad por el hecho de no tener una carrera universitaria, especialmente si frecuentan un ambiente de licenciados. Sin embargo, basta echar una mirada a las biografías de grandes empresarios, intelectuales y artistas para comprobar que muchos de ellos no terminaron sus estudios.
Mantener viva la curiosidad, aprovechar las oportunidades y saber rodearse de las personas adecuadas son elementos mucho más decisivos para alcanzar el éxito que un título académico, por muy brillante que sea el expediente. También parece demostrado que hacer algo que nos guste -o lograr que nos guste lo que hacemos- es un ingrediente esencial para triunfar. Más allá de la inteligencia con la que estamos equipados, una actitud constante e inmune al desánimo completaría el kit básico de las personas que aspiran a la excelencia en su área de trabajo.
Mal de escuela
"Siempre me ha encantado aprender. Lo que no me gusta es que me enseñen" (Winston Churchill)
Volviendo a los últimos de la clase, el escritor Daniel Pennac habla en su ensayo Mal de escuela sobre la educación desde el punto de vista de los malos alumnos como él. En un relato apasionante, mezcla de recuerdos y reflexiones sobre la pedagogía, este autor hace hincapié en el sentimiento de frustración que embarga a este tipo de estudiantes:
"Todo nace de una primera incomprensión, de un problema de inhibición provocado por la timidez, el azar o cualquier otra causa. Y se acumula y se interioriza. Te dices a ti mismo que eres idiota, un cretino, que no hay nada que hacer contigo. Si te consideras idiota, entonces quedas liberado de cualquier esfuerzo. Lo tuyo es irreparable. (...) Sin embargo, en todo el tiempo que trabajé como profesor de alumnos de bachillerato nunca me topé con ningún muchacho idiota. Los padres pueden, podemos ser idiotas, la televisión, los libros y los grupos también, pero los chavales no lo son. Los hay más vivos, más atrevidos, más rápidos, pero ninguno es idiota".
Uno de los tormentos de la etapa escolar que analiza Pennac es el de la memoria. Los adultos recordamos las penosas jornadas de estudio en las que sudábamos para recordar fórmulas, verbos conjugados, nombres geográficos y fechas. Los alumnos peor aconsejados se quemaban las cejas tratando de reproducir un párrafo de los apuntes de historia al pie de la letra.
No obstante, se trata de una información que el alumno olvida inmediatamente después del examen. Y lo peor de todo es que puede llegar a reproducir el párrafo sin haber entendido el sentido del texto. Éste es un error que Pennac se esforzó en no cometer en su etapa como profesor: hacer entender a los alumnos que la memoria no es cuestión de acumulación, sino de comprensión. Aun así, asegura que "cuando se habla de violencia en la escuela no hay que olvidar que la escuela es, per se, el lugar de todas las violencias. Es el lugar donde se entrechocan el conocimiento y la ignorancia. Enseñar es violento, es violentar al otro".
Los grupos de Wallach y Kogan
"Cada persona es un genio al menos una vez al año. Los verdaderos genios simplemente tienen ideas más a menudo" (G. C. Lichtenberg)
Ya hemos visto que muchas personas brillantes recibieron suspensos y mostraron una actitud de rebelión. A menudo son sujetos por los que nadie daba un céntimo, por "tener la cabeza llena de pájaros" o porque eran incapaces de seguir unas normas.
Teniendo en cuenta que España es uno de los países europeos con una mayor tasa de fracaso escolar, ¿significa que vivimos en un país de genios? Si miramos el amplio elenco de pintores, arquitectos, cocineros y deportistas de fama mundial, podemos pensar que es así. Pero en el reverso de la moneda tenemos un país líder en desempleo, con una economía que se ha basado en el poco creativo mundo de la promoción inmobiliaria.
Dejando de lado los tópicos, en cualquier cultura hay diferentes grupos humanos, según se combinan la creatividad y la inteligencia. De acuerdo con el test desarrollado por Wallach y Kogan, éstos son los siguientes:
a) Mucha creatividad y mucha inteligencia. Son personas con una alta capacidad de atención en sus tareas. Suelen ser populares en su entorno y poseen una gran autoestima.
b) Poca creatividad y poca inteligencia. Como no les gusta correr riesgos, se refugian en los convencionalismos. Buscan la seguridad en las cosas y personas conocidas. Acostumbran a ser tímidos y con baja tolerancia a las críticas.
c) Mucha creatividad y poca inteligencia. Su problema es que poseen una capacidad de atención muy reducida. Tienen buenas ideas, pero se dispersan demasiado fácilmente. Se caracterizan por un alto nivel de autocrítica y tienden a aislarse.
d) Poca creatividad y mucha inteligencia. Confían mucho en sí mismos, pero necesitan trabajar en un entorno ordenado y previsible. Destacan por su alto rendimiento laboral y académico. Acostumbran a ser extravertidos y sociables.
El arte de la resiliencia
"El fracaso es un episodio, nunca una persona" (W. D. Brown)
Dado que es innegable que muchos alumnos reproducen el fracaso escolar en el mundo laboral, la cuestión es: ¿por qué algunos niños logran superarse y triunfar, mientras que otros arrastran su frustración toda la vida adulta?
Según el neurólogo y psiquiatra Borís Cyrulnik, el factor diferenciador se llama resiliencia: la capacidad de realizarse y ser feliz, independientemente de lo traumático que haya sido el pasado de cada persona. Él mismo es un vivo ejemplo, dado que durante el nazismo sufrió la muerte de sus padres en un campo de concentración del que como niño logró huir. Pese a tan terrible punto de partida, logró estudiar sin contar con medios económicos hasta convertirse en una autoridad de talla mundial.
En su ensayo Los patitos feos, este autor apela al cisne que vive en el interior de toda persona que alguna vez se ha sentido excluida, incomprendida o fracasada. El protagonista del cuento tiene algo que lo hace diferente a sus compañeros. La clave es entender esta diferencia como algo positivo, ya que le va a permitir realizar cosas extraordinarias.
Para que el patito feo se convierta en cisne debe proyectarse hacia el futuro. Si hay una meta y ganas de alcanzarla, la metamorfosis es sólo cuestión de tiempo.
Un buen ejemplo de esto lo encontramos en una vivencia del también neurólogo Víktor Frankl, quien sufrió una experiencia equiparable a la de Cyrulnik. El impulsor de la "logoterapia" cuenta que cuando estaba preso en un campo de concentración, un día, mientras transportaba material, desfalleció. Postrado en el suelo, oyó cómo un guardia nazi se le aproximaba, lo cual significaba la muerte segura. En vez de aceptar su destino, en aquel momento se imaginó a sí mismo como futuro conferenciante que explicaba al mundo las barbaridades de los campos de exterminio. Esta misión personal le bastó para sacar fuerzas de flaqueza y levantarse. Eso le salvó.
Del mismo modo, muchos niños y niñas que han sido patitos feos en el aula han logrado convertirse en cisnes y triunfar en la vida porque tenían planes ambiciosos más allá de los muros de la escuela.
La vida es la gran maestra
“Más importante que la inteligencia es la alegría de ver que uno es capaz de vencerse y ponerse metas y cumplirlas. Una persona con voluntad llega en la vida más lejos que una persona inteligente. Y esto lo vemos, de entrada, en el panorama del estudio, ya que éste es un termómetro que registra muchas cosas concretas de la conducta de un joven. Muchos de los que han abandonado sus estudios se han dado cuenta después de que su problema no era de cabeza, sino de método. (…) Cada uno se educa a sí mismo a través de sus experiencias personales. La vida enseña más que muchos libros. La vida es la gran maestra. Lo que sucede es que, en ocasiones, ese conocimiento es tardío y ya sólo va a tener aplicación inmediata”. Enrique Rojas
Para volver a la escuela
Libros
Usted puede ser lo bueno que quiera ser’, de Paul Arden (Phaidon).
‘Mal de escuela’, de Daniel Pennac (Mondadori).
‘Los patitos feos’, de Borís Cyrulnik (Gedisa).
Películas
‘La piel dura’, de François Truffaut (20th Century Fox).
‘Rebelión en las aulas’, de James Clavell (Columbia).
‘La clase’, de Laurent Cantet (Cameo).

Margarito Montes

Comando ejecuta al líder agrario Margarito Montes y a 14 más
LA REDACCIóN
HERMOSILLO, Son., 30 de octubre (apro).- El líder de la Unión General Obrero, Campesino y Popular (UGOCP), Margarito Montes Parra, y otras 14 personas más fueron ejecutados esta tarde por un comando en Cajeme, Sonora.
Según los primeros reportes de la Procuraduría de Sonora (PGJE), la matanza se perpetró en el rancho "Los Alamitos", ubicado en el kilómetro 26 de la carretera Hornos-Tesopaco, en el municipio sonorense de Cajeme.
De acuerdo con la PGJE, el reporte se dio a las 15:50 horas, cuando se pidió el apoyo de elementos policiacos y Cruz Roja debido a que había personas heridas de bala.
Al llegar los socorristas de la Cruz Roja, encontraron a más de 18 personas lesionadas con proyectiles de armas de fuego, de las que 15 fallecieron en el ataque.

Narcomantas en Guerrero

Colocan 9 narcomantas en Guerrero

Los mensajes aparecieron en Pungarabato, Tecpan de Galeana y Petatlán
REFORMA / Redacción
Acapulco, México (31 octubre 2009).- Al menos nueve mantas con mensajes en contra del Secretario de Seguridad federal, Genaro García Luna y de las Policías municipales y estatales fueron colocadas la madrugada de hoy en diferentes municipios de Guerrero, según autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR).
De manera casi simultánea a las 6:00 horas se vieron los mensajes firmados por el supuesto Cártel de "La Familia Guerrerense", en las que señalan a García Luna de proteger al grupo de "Los Zetas" y a la organización criminal de los hermanos Beltrán Leyva.
Los primeros cuatro mensajes fueron vistos sobre el bulevar que comunica a Ciudad Altamirano con Coyuca de Catalán, y una más en el Zócalo de Altamirano, Municipio de Pungarabato, región de la Tierra Caliente de Guerrero.
"Nuestro respeto al Ejército mexicano porque mientras ellos combaten de igual manera a todos por igual, los delincuentes con placa (sic) Genaro García Luna se sientan a comer con zetas y beltranes, en varias plazas del país.
"Por eso te reto a pelear en guerrero, también ustedes estatales y municipales vendidos atte. La F.G. y la F.M.", se lee en las mantas.
En tanto, también colocaron otras en la comunidad de Papanoa, Municipio de Tecpan de Galeana, y en San Jeronimito, Municipio de Petatlán, en la Costa Grande del Estado.
Asimismo, en la comunidad del Súchil, perteneciente al Municipio de Tecpan de Galeana, fueron encontradas dos mantas más, con otro narcomensaje.
"La Familia guerrerense ya está en todo Guerrero y vamos por ti Chava Granados y por todos los que están contigo, policías federales, estatales y municipales. Atte. La F.G. apoyada por la F.M.", se lee.
Las mantas fueron recogidas por personal de la Policía Estatal Preventiva, Policía Federal y del Ejército.
Hora de publicación: 14:21 hrs.
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Colocan 9 narcomantas en Guerrero
Los mensajes aparecieron en Pungarabato, Tecpan de Galeana y Petatlán
REFORMA / Redacción
Acapulco, México (31 octubre 2009).- Al menos nueve mantas con mensajes en contra del Secretario de Seguridad federal, Genaro García Luna y de las Policías municipales y estatales fueron colocadas la madrugada de hoy en diferentes municipios de Guerrero, según autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR).
De manera casi simultánea a las 6:00 horas se vieron los mensajes firmados por el supuesto Cártel de "La Familia Guerrerense", en las que señalan a García Luna de proteger al grupo de "Los Zetas" y a la organización criminal de los hermanos Beltrán Leyva.
Los primeros cuatro mensajes fueron vistos sobre el bulevar que comunica a Ciudad Altamirano con Coyuca de Catalán, y una más en el Zócalo de Altamirano, Municipio de Pungarabato, región de la Tierra Caliente de Guerrero.
"Nuestro respeto al Ejército mexicano porque mientras ellos combaten de igual manera a todos por igual, los delincuentes con placa (sic) Genaro García Luna se sientan a comer con zetas y beltranes, en varias plazas del país.
"Por eso te reto a pelear en guerrero, también ustedes estatales y municipales vendidos atte. La F.G. y la F.M.", se lee en las mantas.
En tanto, también colocaron otras en la comunidad de Papanoa, Municipio de Tecpan de Galeana, y en San Jeronimito, Municipio de Petatlán, en la Costa Grande del Estado.
Asimismo, en la comunidad del Súchil, perteneciente al Municipio de Tecpan de Galeana, fueron encontradas dos mantas más, con otro narcomensaje.
"La Familia guerrerense ya está en todo Guerrero y vamos por ti Chava Granados y por todos los que están contigo, policías federales, estatales y municipales. Atte. La F.G. apoyada por la F.M.", se lee.
Las mantas fueron recogidas por personal de la Policía Estatal Preventiva, Policía Federal y del Ejército.
Hora de publicación: 14:21 hrs.

30 oct 2009

Rio de Janeiro

Río de Janeiro. Ciudad de Dios y del diablo

BERNARDO GUTIÉRREZ
Publicado en El País Semanal,  25/10/2009
Brasil ha logrado los Juegos Olímpicos 2016 para Río de Janeiro con una candidatura que emocionó y logró superar su principal punto débil: la inseguridad. Entramos en un infierno de 700 favelas, en un 'campo de batalla' entre policías, paramilitares y narcotraficantes, con casi 20 asesinatos diarios.
Favela Vila Aliança, zona oeste de Río de Janeiro. Yashmina Barbosa, de tres años, revolotea en el parque alrededor de su abuela, Rosângela da Silva. La Bahía de Guanabará se oculta allá entre un mar de antenas. El paraíso de arena de Copacabana queda lejos. La niña, ajena, juega cerca de la cárcel de Bangú, a la que llaman "la fábrica de monstruos". En algunas paredes alguien ha escrito frases religiosas, evangelistas: "Dios cambia a quien quiere ser cambiado". Abunda la basura desparramada. Rosângela observa cómo el 14º Batallón de la Policía Militar acaba de aparecer. Y, de repente, su nieta yace en el suelo. Todo sucede demasiado rápido. Un proyectil de 7,62 milímetros a 850 metros por segundo entra por la espalda de la pequeña. Cuando llega al hospital Albert Schweitzer, está muerta.
Yashmina es una más. Un nombre/número que pasará pronto a la estadística/olvido. Su caso (del pasado 29 de abril) ocupó algunos párrafos en los diarios de Río. Otra víctima de las denominadas "balas perdidas", proyectiles que alcanzan a cualquiera sin detenerse a medir su grado de inocencia. En los últimos tres años (hasta finales del pasado mes de mayo) se han contabilizado 739 balas de tal calibre en Río de Janeiro, según el Instituto de Segurança Pública. Y han segado la vida a 56 personas que, como la niña Yashmina, estaban o pasaban por allí en mal momento.
Nada nuevo. Sólo la punta del iceberg de una estadística brutal: según la Secretaría de Seguridad del Estado, 7.089 personas fueron asesinadas en el Estado de Río de Janeiro el pasado año. Es decir, casi 20 homicidios diarios. Más de un millar, muertos a manos de la Policía Militar. Ya lo decía bien claro el grupo musical Planet Hemp, cuando popularizó aquello de "Sarajevo es una broma, esto es Río de Janeiro".
Y los datos oficiales no reflejan el cuadro completo; ocultan algunas esquinas. Una de ellas, la de los desaparecidos: nada menos que 25.025 entre 1993 y 2007, según la Policía Civil. "Y este año han aumentado", afirma Marcelo Campos, de la Red de Movimientos contra la Violencia. ¿Quién los mata o entierra u oculta?
Habitar en esta "Ciudad Maravillosa llena de encantos mil", tal como Carmen Miranda le cantaba antaño en sus conciertos, significa enfrentarse a uno de los más complejos puzles de violencia del mundo. Significa comprender por qué al trecho de una calle que sube hasta el Morro dos Prazeres (dominada por el Comando Vermelho, la principal facción de narcotraficantes) la llaman "la Franja de Gaza". Por qué el periodista Zuenir Ventura escribió sobre esta ciudad partida donde la Policía Militar vigila las favelas como "si estuviesen en la torre de un campo de concentración". Cualquier día/noche aquí puede convertirse en un infierno. Y no sólo en las zonas de chabolas; también en los barrios de clase media la guerra puede estallar al otro lado de tu ventana. A primera vista, la ecuación es incomprensible. Por un lado, los grupos de traficantes, que forcejean entre sí y luchan contra las fuerzas de seguridad. Por otro, la Policía Militar -corrupta, violenta-, que combate el crimen con técnicas de guerra sin importar la muerte de civiles. La milicia -grupos paramilitares que suplen el gran vacío en seguridad- completa el cóctel.
favela fallet, favela rocinha
Calle del Almirante Alexandrino, barrio de Santa Teresa. Dos de la madrugada. Varios coches de la Policía Militar suben hacia la favela Fallet. Las metralletas sobresalen, como es habitual, fuera de las puertas. Llevan varios M16 (el arma favorita del Ejército estadounidense) y algunos FN LAN (usados en la guerra de Angola). Decenas de jóvenes corren. Otros caminan agachando la cabeza. Los tiroteos son tan intensos que es difícil incluso hablar en el interior de los apartamentos. Algunos vecinos esperan insomnes en la calle. "El Comando Vermelho, la principal facción de traficantes, intenta invadir Fallet, dominada por sus enemigos los Amigos dos Amigos", comenta Ricardo Beliel, uno de ellos. En el trecho de Almirante Alexandrino, que sube hasta la favela dos Prazeres (la citada "Franja de Gaza"), el amanecer llega muchos días con silbidos de plomo.
La geografía/escenario de la guerra carioca se explica bien en Ciudad de Dios, el libro de Paulo Lins que inspiró la famosa película de igual título: "Allí arriba", los morros, las colinas, los pobres. "Allá Abajo", la ciudad, "el asfalto". El libro describe una urbe extrema: el lujo de la zona sur convive con los barrios deprimidos. Por ejemplo, la Gavea chic -donde algunos pagan mil euros al mes para que sus hijos estudien en la Escuela Americana- está cercada por la Rocinha, una de las mayores favelas del mundo. No hay cómo escapar. Y Paulo Lins no contó en su obra que la "ciudad del demonio" no se encuentra en la rica zona sur. Ni en sus favelas. El infierno de esta urbe de seis millones de habitantes (casi doce en el área metropolitana) se alza en Río Norte. Un complejo de complejos de chabolas (Maré, Alemão...) que el vecino de la zona sur ni loco pisa. Las subciudades de Río raramente se tocan. Conviven escindidas.
tres jóvenes sin cabeza
Giuseppe, un profesional independiente, vecino de Santa Teresa, nunca imaginó que el robo de su coche en 2007 se convertiría en la peor pesadilla de su vida. El comisario le llamó para comunicarle que el vehículo había aparecido. Al llegar a comisaría, a Giuseppe casi le da un infarto. Dentro del auto había tres jóvenes sin cabeza. La tapicería, ensangrentada. Casi tres años después, este italiano sólo quiere olvidar. Sacó una conclusión: "Mi coche sirvió de bonde do caixão (equipo de ataúd), una señal para que la facción rival no invada su territorio".
Algunas (nunca todas) claves del susto de Giuseppe y de la bala perdida de Yashima se encuentran en el mapa de la violencia que ha elaborado el equipo de Fernando Gabeira, el candidato ecologista a las elecciones de 2008. El mapa está incorporado a Googlemaps (http://gabeira.com/gabeira43/?tag=violencia). Con un sólo click, los puntitos de colores salpican la geografía de Río. En cada favela tomada por los paramilitares (88) hay un puntito azul. En las dominadas por el narcotráfico (71) hay un color para cada facción. Puntito rojo para el Comando Vermelho. Verde para el Terceiro Comando Puro. Amarillo para Amigos dos Amigos. En la calle/vida, cualquier combinación de colores es mortal.
Así, los tres descabezados de Giusseppe se explican por un choque entre el amarillo (Morro Mineira, Coroa) y el rojo (Fallet). Hasta hace muy poco, el Gobierno de Río no publicaba las estadísticas sobre violencia. Por eso el diseñador André Dahmer lanzó en febrero de 2007 un contador de muertos virtual, Rio Body Count, inspirado en el Irakbodycount que contaba soldados caídos en combate. "O Globo sólo publica un muerto si vive en la zona sur, la sociedad vive de espaldas a la violencia, a sus causas", confiesa Dahmer. El impacto de Rio Body Count fue profundo. André lo desactivó, porque cumplió su objetivo. El Gobierno, desde entonces, publica las cifras de muertes.
Pobreza profunda
Mediodía. Calor abrasador. Las calles del Complexo da Maré -un conjunto de 16 favelas de Río Norte- son un amasijo de polvo, casas de ladrillo y niños descalzos. María da Silva (seudónimo) -mulata, ojeras, camiseta fucsia chillón- habla sollozando: "El otro día estuvimos en el suelo horas, el tiroteo fue pesado". En una cocina desmantelada y sucia, corretean varias ratas. Su hijo, de siete años, mete los dedos en los agujeros de balas de la pared. Juega. "En la Maré no hay paz", susurra. El Comando Vermelho disputa cada calle con el Terceiro Comando. El puntito rojo, en Nova Holanda. Muy cerca, en la favela Timbau, el verde. Las fronteras son móviles. Y los tiroteos, también. La muerte no sorprende a nadie. "Un día mataron a nueve personas, ajuste de cuentas", matiza María. Pero ella nunca denunciaría a los traficantes. Le dan gas cuando no tiene. O "golosinas para los niños". El Estado no existe. La ley es verde. O roja. Tiene nombre de comando.
El ácido escritor Rubem Fonseca anticipaba hace tres décadas en El cobrador la guerra civil que calcina la Ciudad Maravillosa. El protagonista odia a los ricos. Y gritando: "Come caviar, que tu día va a llegar", asesina y se cobra las deudas que la sociedad tiene con él. Bang, bang. Y Fátima Guedes popularizaba entonces una samba-profecía: "Once tiros y no sé por qué tantos, los tiempos no están para niñerías, la realidad no rima". Bang, bang. En el siglo XXI, la realidad, más que no rimar, desafina. Los más de 113.000 habitantes del Complexo da Maré "viven secuestrados por la pobreza y la violencia", según Raquel Willadino, del Observatorio de Favelas. El Índice de Desarrollo Humano (IDH) de la Maré es de 0,722. En Ipanema, que vio nacer a aquella "garota" de "dulce balanceo camino del mar", presumen de estadísticas nórdicas: un IDH de 0,962. En Maré, la esperanza de vida es de 66,8 años. En Ipanema, de 80. "Aquí no hay opciones de ocio, no hay empleo", explica Raquel.
los Traficantes han cambiado
Hace tres años, cuatro traficantes de la favela de Salgueiro apuntaron sus metralletas Kaláshnikov hacia este reportero. Pertenecían al Comando Vermelho. El amanecer tejió un cadáver al borde del morro, un homicidio común. Pero la policía invadió Salgueiro. La guerra estalló. El músico Catra, todo un antihéroe urbano, solucionó la situación con una frase: "Estamos con la comunidad, hermano". Comunidad, sinónimo de favela para sus habitantes, fue la palabra clave para salvarnos.
Llegar a hablar con los traficantes no es fácil. A veces, el contacto apropiado, las frases/palabras adecuadas, se cristalizan en un salvoconducto. Hace dos años, tres adolescentes armados recibieron a este periodista en una favela de Río Norte. Rostros cubiertos, ojos vidriosos en un cuarto claustrofóbico. Uno, que sujetaba una bolsa con droga, se justificaba: "¿Qué vamos a hacer si no hay trabajo?". No tenía más de 15 años. En su brazo, un tatuaje de una serpiente. Su voz era bronca, dura. Pero hueca, forzada, como si tentase aparentar 25 o 30 años. Entró en el tráfico con 11. Su primer asesinato, a los 12. "Yo he perdido la cuenta de a cuántos maté", afirmaba otro con sarcasmo. Todos reían casi al unísono. Un tercero -delgado, fibroso, más silencioso- presumía de ropas caras, de marca, mientras revelaba cuánto cuesta sobornar a la policía: "25.000 reales (unos 7.000 euros) por semana".
María, la reina de la casa agujereada, tenía razón. Los traficantes no son como los de antes, "gente que nos respetaba". Personas como William da Silva, El Profesor, el intelectual izquierdista que fundó en los sesenta el Comando Vermelho con un fuerte componente social. No quedan personajes como Marcinho VP, que garantizó en 1996 la seguridad de Michael Jackson en la grabación del videoclip They don't care about en la favela Santa Marta. Marcinho se convirtió en el Robin Hood de los pobres y protagonizó el documental Historia de una guerra particular, de João Moreira Salles: "Fue lo único que encontré para defender a mi pueblo de la opresión".
Moreira Salles, un intelectual de clase alta, da más detalles sobre Marcinho VP: "Nacido en otras circunstancias, habría sido un líder popular. Quién sabe si un líder revolucionario...". Salles afirma que Marcio dejó el tráfico y marchó a México para conocer al subcomandante Marcos. Llegó a afirmar que fundaría el Movimiento Social Revolucionario pela Favelania. Pero murió asesinado en 2003 en la cárcel de Bangú.
adolescentes atrapados
Marcinho fue una excepción. Un estudio del Observatorio de Favelas, realizado entre los adolescentes del tráfico de la Maré, revela que el 70% no tiene interés político. Ya se acabaron los tiempos en los que se podía hablar de las guerrillas de pensamiento marxista; ahora han sido sustituidas por las violentas mafias de la droga. Eso es lo que son. Sin más vueltas. Y se alimentan de la espiral de extrema pobreza de la gente. "Sus sueños son consumistas", afirma Raquel Widallino, una de las directoras del observatorio. Ni política ni inquietudes sociales. El progresista diputado Fernando Gabeira piensa que los "traficantes ni siquiera tienen fuerza ideológica".
Talys Motta -40 años, vendedor de libros- es el hombre/excepción: conoce los dos Ríos paralelos. Sabe cómo y cuándo entrar en las favelas. Frecuenta fiestas pijas de la zona sur. Pero conoce los códigos de Río Norte. Incluso frecuenta la verdadera "Franja de Gaza", en Manguinhos, mucho más cruda que la de Santa Teresa. De noche, no para en semáforos en rojo. A veces, afirma, "en área de traficantes, la clave es apagar y encender rápidamente las luces". A bordo de su coche destartalado, Talys explica cómo los niños entran en el tráfico como olheiros (vigilantes) o fogueteiros (lanzan cohetes de aviso cuando llega la policía). Evolucionan a vapores (vendedores). "Muchos se quedan en el camino", dice. Durante los dos años que duró el estudio del Observatorio, 45 de los jóvenes fueron asesinados. "Empiezas en el crimen", remata Talys, "y no consigues salir".
Las líneas de separación son casi imperceptibles. Jamaica, un joven negro de la favela Fallet, encarna como nadie al adolescente-que-acaba-delinquiendo. Pisó durante años el "asfalto" de Santa Teresa para vender pantalones, camisetas, objetos robados. De repente, vendía marihuana y cocaína. Jamaica desapareció con 10 reales prestados "para comprar pañales para su hijo". Nunca más dio señales de vida.
Las cifras impresionan: se calcula que unas 100.000 personas trabajan para los narcotraficantes en Río.
Tropa de élite con calavera
Alberto Pinheiro -44 años, ropa negra, brazos corpulentos- es policía militar desde hace 25 años. Habla con energía. Es el comandante del Batallón de Operaciones Especiales (BOPE), "un grupo de 400 policías especializados en el combate al crimen en áreas urbanas". Tropa de Élite, ganadora del Oso de Oro de Berlín en 2008, popularizó este cuerpo. Y creó una gran polémica en Brasil. El BOPE es el héroe de la película. Parte de la clase media comenzó a defender la represión policial. Pinheiro asegura que la cinta "muestra que la vida criminal no tiene glamour y que abominamos de la corrupción". Niega además cualquier abuso: "Quien diga que el BOPE entra en la favela disparando no conoce la verdad".
La palabra de la discordia es caveirão (calaverona). Así bautizaron en Río a los carros a prueba de balas usados por el BOPE, que llevan una calavera pintada. El informe de Amnistía Internacional Ellos llegan disparando denuncia los excesos cometidos a bordo del caveirão: insultos por los altavoces, jóvenes asesinados colgados en los ganchos del vehículo... Tim Cargill, de Amnistía Internacional, afirma desde Londres que "el caveirão criminaliza a toda la población con su presencia". Critica, sobre todo, a la Policía Militar. "Uno de cada siete homicidios los comete un policía". Las cifras/realidad le dan la razón. En 1993, la policía de Río de Janeiro mató, según la Secretaría de Seguridad del Estado, a 1.195 civiles, el doble que todas las policías de Estados Unidos y Europa juntas. La cifra, desde entonces, supera los mil muertos por año.
El sociólogo Ignacio Cano, del Laboratorio de Estudios sobre la Violencia de la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ), probó con un informe que el 65% de los asesinados por la policía tenía al menos un disparo por la espalda. "Les llaman autos de resistencia, pero son ejecuciones", indica. Tim Cargill da una pista importante: "Los autos de resistencia blindan a la policía, no se investigan las muertes".
En todo este caldo, 2006 fue un año decisivo. El presidente Lula afirmó que a los traficantes "no se les combate con pétalos de rosa". Y autorizó el envío de militares a las favelas de Río. El punto de inflexión fueron los Juegos Panamericanos (PAN), en julio de 2007. Unas semanas antes de su inicio, la Policía Militar invadió con 1.300 hombres el Complexo do Alemão, uno de los lugares más pobres de la ciudad. La operación se saldó con 30 muertos y 60 heridos. La Secretaría de Derechos Humanos (SEDH) confirmó que varias de las muertes fueron "ejecuciones arbitrarias". Al PAN se le recuerda en Río como el Pandemonio.
"el taxi del más allá"
Antonio conduce el rabecão, una furgoneta de los bomberos militares de Río. El teléfono sonó hace un rato, como cada hora. La Policía Militar le informó dónde recoger el muerto. "Tenemos 40 minutos para retirar los cadáveres de la vía pública", dice. Tiene 30 años. Hace seis que recoge muertos casi a diario. "Viví rebeliones en prisión, masacres". Todavía no sabe que hoy le espera un cuerpo totalmente quemado con un olor insoportable. Hace unos días fue peor: una mujer embarazada con dos tiros en la espalda.
Varias veces al día, "el taxi del más allá" de Antonio (como llaman al rabecão) entra en el Instituto Médico Legal, en la céntrica calle del Riachuelo. Las paredes de la morgue están forradas de fotos de desaparecidos. Marcelo Sampaio, 26 años. Alex Alves, 17 años. Hay anuncios de funerarias 24 horas. "Llegan entre 20 y 30 todas las noches", confiesa un hombre que lleva 18 años repitiendo su ritual: esperar "el taxi del más allá". Empujar el presunto (jamón), como llaman a los muertos. Y dejarlo en el depósito de cadáveres, en fila, a la espera de una autopsia.
milicia, poder paralelo
El sociólogo Ignacio Cano, que ha participado en el libro Seguridad, tráfico y milicias en Río de Janeiro, no duda al acusar a la milicia de fomentar el "neofeudalismo". Para despejar la tercera incógnita de la violentísima ecuación carioca basta con teclear en el Googlemaps de la violencia. La zona oeste está forrada de puntitos azules. Cada favela-milicia, un punto azul.
Vila Sapê, 15.00 horas. Renata -piel negra, mirada incisiva, decidida- camina cerca del portón que separa la favela (punto azul) de la avenida de Bandeirantes. Hay hombres vigilando. Y un graffiti-síntesis: un policía y una frase: "24 horas vigilados". Renata da detalles de cómo funciona la milicia: "Cobran por la seguridad. También por la salud. La televisión por cable pirata (gatonet) cuesta 20 reales. Por las noches, prohibido salir de casa". Esta mujer, que perdió al marido en un tiroteo, explicaba cómo hace dos años la Policía Militar pintó los muros de blanco y conquistó el territorio a los traficantes.
Cano afirma que la milicia representa una privatización perversa de la seguridad pública: "Ha caído el mito de que proporcionan seguridad. Tenemos más de 300 denuncias de tráfico de drogas en área de milicia". Pero nadie como Marcelo Freixo, el diputado que dirigió la comisión de investigación de las milicias, para hacer un perfil del paramilitar made in Río de Janeiro: "Son grupos criminales. Agentes públicos, policías, ex policías, bomberos...". A Freixo, su lucha contra las milicias le ha salido cara. A finales de mayo, la operación Leviatã 2 que desarticuló el grupo del ex policía Fabrício Fernandes se saldó con 18 detenidos. Y desveló un plan para asesinar a Freixo. "Mi vida ha dado un vuelco, mi familia está en crisis", confesaba cuatro días después de saber que estaba marcado para morir.
La ley del silencio. De la mordaza. La milicia no perdona. Freixo destaca que muchos milicianos "son elegidos en las elecciones legislativas". Eduardo Paes, actual alcalde, ganó las elecciones defendiendo al poder paramilitar. El policía Alexandre de Sousa justifica la milicia "por los bajos salarios de la policía". La media está en torno a 1.100 reales, menos de 400 euros mensuales. "Por ello existe la corrupción", explica. Un total de 1.245 policías militares corruptos han sido expulsados desde 2002 hasta marzo de 2008. Implicados en el tráfico de drogas. En la venta de armas a traficantes. En fundar grupos paramilitares para lucrarse.
Río boca abajo
La ecuación está casi completa. El Río Norte tomado por los traficantes. La zona oeste, conquistada por las milicias. En las favelas elevadas de la zona sur, algunos puntos de tráfico. En toda la ciudad, la población pobre a merced de los abusos de uno y otro lado. El vídeo que el Gobierno de Río entregó al Comité Olímpico Internacional ocultaba las favelas. Hasta la histórica Mangueira, pegada al estadio Maracaná. El vídeo no mostraba los muros que están siendo construidos en 13 favelas de Río, "para proteger la naturaleza" (versión oficial). No es que no se haga nada; hay algo de inversión social. En Santa Marta, por ejemplo. Y en la defensa de la candidatura olímpica en Copenhague, el gobernador Sergio Cabral comprometió 2,5 millones de euros para "entregar los Juegos más seguros". "Pero la policía sigue intimidando con armas", afirma Daniel Luz, de la ONG Viva Río. Hasta Jorge Bittar, secretario de Vivienda de la ciudad, confiesa que Santa Marta es sólo una favela. Una de muchas. La Ciudad Maravillosa tiene más de 700 (hace 20 años eran 300). Lo cierto es que en 2009 todo sigue parecido. La clase media, cheirando pó (esnifando cocaína) en las fiestas de la zona sur mientras el rapero MV Bill entona sus rimas afiladas desde la favela de Ciudad de Dios: "Compras cocaína de mis manos, luego me insultas en la televisión". La mayoría de los cariocas mira para otro lado, no quiere hablar de la violencia. P

Ofrenda de día de muertos


Ofrenda a los muertos
"Morir sólo es morir. Morir se acaba.
Morir es una hoguera fugitiva.
Es… cruzar una puerta a la deriva
y encontrar lo que tanto se buscaba.
Acabar de llorar y hacer preguntas;
ver al Amor sin enigmas ni espejos;
descansar de vivir en la ternura;
tener la paz, la luz, la casa juntas
y hallar, dejando los dolores lejos,
la Noche-luz tras tanta noche oscura."
Estas líneas fueron escritas -antes de fallecer, en junio de 1990-, por el sacerdote y poeta José Luis Martín Descalzo.
La muerte es la realidad más dolorosa, más misteriosa y, a la vez, más inevitable de la condición humana, y es que "el hombre es un ser para la muerte", dice un célebre filósofo alemán del siglo XX.
Estos días son de tradición por el día de muertos. Se trata de un popular y bien sentida fiesta cristiana, una forma de celebrarlos, además de ir al camposanto, es colocando una ofrenda a los que se adelantaron en el camino.
Instalar una ofrenda para los que saben es cosa de niños, pero para los que no, se necesita un guía, un especialista; si queremos cumplir con lo que establece la tradición.
Además, el ¡el lugar donde se pone la ofrenda se convierte en un lugar sagrado!
La arqueóloga Alicia Luján Delgadillo de la universidad Veracruzana nos da las siguientes instrucciones:
Sobre él altar se depositara la ofrenda, el arco engalanado será la entrada por donde las almas de los muertos pasarán a morar por breve tiempo y disfrutará de las viandas preparadas en su honor.
Sobre la mesa – dice la profesora- se confeccionarán dos a tres escalones a manera de pedestal, se cubrirá todo con un mantel blanco y encima se pondrá papel china picado, en los escalones se colocará enseguida una lámpara de aceite, veladoras, un vaso con agua; se distribuyen en la mesa panes de ajonjolí y de huevo con manteca, tamales rancheros en hoja de plátano o de papantla, tamalitos de pollo, de pipían con fríjol gordo y de dulce con pasitas en hojas de totomoxtle, atole de guayaba o de piña, champurrado, chocolate, y alguna bebida predilecta –cerveza o aguardiente-, cigarros y fósforos. Además mole con carne de gallina, arroz y tortillas de maíz calientitas.
Con carrizos se forman dos arcos, uno atrás y otro al frente con sus travesaños correspondientes, va recargado sobre la pared donde penderán en su mayoría las imágenes que son de devoción familiar.
Los arcos pueden ser en forma de media campana o rectangulares, se forran con rama tinaja, tepejilote y palmilla, se alterna alrededor flores amarillas (cempoalxoxhitl), manitas de plátanos “campechanitos”, berenjenas silvestres, nísperos, canastitas, banderitas, jaras y cortinas confeccionadas con papel china con rehiletes.
A las doce del día y por la noche del día primero de noviembre – día de todos santos; a saber, santos anónimos, desconocidos, los santos del pueblo, los santos de nuestras familias; se incluyen amigos, paisanos, conocidos y familiares- hay rezos y el término de éstos las almas de los muertos se deleitan con lo ofrendado.
Al día siguiente; el dos de noviembre, la mayoría de los habitantes de la ciudad visitan cementerios, llevando agua bendita, flores naturales y coronas de flores de papel encerado. Ahí pasarán con sus muertos la mayor parte del día.
Esa tradición, con algunas variantes, se reproduce – afortunadamente- en gran parte del territorio nacional.

Margarito Montes

Ejecutan a Margarito Montes Parra, líder de la Unión General Obrera y Campesina.
Según la Procuraduría de Sonora, la ejecución ocurrió en un rancho de la comunidad de Hornos, al sur del Estado
REFORMA / Redacción
Hermosillo, México (30 octubre 2009).- El líder de la Union General Obrera Campesina y Popular (UGOCP), Margarito Montes Parra, y otras 14 personas más fueron ejecutadas por un comando en Cajeme, Sonora.
La Procuraduría General de Justicia de Sonora reveló que Montes Parra es el único identificado hasta el momento, y que hay otras 14 personas muertas.
De acuerdo con informes preliminares de la Procuraduría, la ejecución ocurrió en un rancho de la comunidad de Hornos, al sur de Sonora.
Se indicó que un comando emboscó al grupo de Montes Parra, un reconocido líder priista.
La Procuraduría añadió que aún no se tienen mayores detalles ni se conocen las causas de los hechos.

Gómez Mont en Puero Vallarta

Discurso del Secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, durante la clausura del Sexto Foro Internacional Desde lo Local.

Puerto Vallarta, Jal., a 30 de octubre de 2009
Les ofrezco ahorrarles repetir la mención de todos y cada uno de los distinguidos miembros de esta mesa.
Los doy por presentados y ellos saben, cada uno de ellos, que los saludo con afecto y con respeto.
Y a ustedes también, señoras y señores.
El nombre de este foro no es ni puede ser casual, es el signo de los tiempos en términos de la comunicación y de la consistencia.
A raíz de lo global, a raíz de la posibilidad de comunicar múltiples experiencias cercanas y lejanas, cada uno de nosotros amplía sus opciones y sus alternativas; es capaz de entender y conocer mejor cuáles son los ámbitos, los costos, los riesgos, las oportunidades, los beneficios de las decisiones a tomar.
A partir de la reflexión con muchos, a partir de la conexión con una red del pensamiento, de la reflexión, de la preocupación y de la visión podemos decidir realidades concretas. El signo de la modernidad es actuar localmente y pensar globalmente. Asumir que hay respuestas en todas partes, que la experiencia humana es comunicable y que todo el tiempo podemos aprender a hacer las cosas mejor.
Y uno puede tener la mejor disposición para solucionar los problemas y uno tiene el deber de accionar hacia la solución de los problemas, pero que no está solo ni tiene que estar solo, que es parte de una comunidad cada vez mejor comunicada.
Y así, comunidad y comunicación parten de la misma raíz: Yo con el otro; nosotros.
Es por ello que esta es una ocasión importante para repensar qué podemos hacer cada uno de nosotros en su comunidad y hacerlo beneficiándonos de las experiencias de los demás.
Hoy es cierto -y se ha dicho aquí- el país vive una crisis importante; las expectativas futuras son mejores en términos del crecimiento de la economía.
Pero para mitigar mucho el impacto social de esta crisis mundial los gobiernos han tenido que enviar los recursos y las provisiones que tenían reservadas y han tenido que hacer un esfuerzo considerable, a fin de generar actividad económica, trabajo, que permitiera mitigar la caída de demanda internacional de muchos de nuestros productos.
Muchos conocen que zonas del país que fueron el eje de su fuerza hoy se volvieron vulnerables; que buena parte de la economía que había sido un motor de desarrollo, se encontró postrada ante la falta de demanda.
Pero había otra parte de México que estaba allí para apoyar y existió el fruto del trabajo de muchos años, listo para actuar en un momento oportuno.
Hoy es tiempo de reorganizar la manera en cómo todos nosotros tenemos que administrar la riqueza que se genera, a fin de articular el esfuerzo común.
Es tiempo que desde el espacio concreto que cada uno de nosotros administramos y sobre el que tenemos responsabilidad, articulemos respuestas comunes para hacernos más fuertes. En varios temas esto es esencial.
Aquí el Gobernador del estado nos ha dado ejemplos de comunicación y de comunidad.
Siendo el municipio la primera autoridad y la más próxima a cada uno de los habitantes, no tiene que estar solo, puede trabajar con otros los problemas comunes.
En materia de seguridad pública, por ejemplo, hoy las habilidades y las capacidades del Estado mexicano se ven vulneradas por la dispersión.
La intermunicipalidad o inclusive la estatalidad de los cuerpos de seguridad pública es un ejercicio que nos permite concentrar fuerzas, para resistir a los violentos y a aquéllos que aquejan la paz y la tranquilidad de las personas.
Como es posible, por ejemplo, que tres personas puedan hacer más que 10 personas; si las 10 personas están dispersas, allí van los tres uno por uno, uno por uno y uno por uno.
Pero si se saben articular fuerzas, si se saben comunicar, si el celo territorial puede ser sustituido por la corresponsabilidad, se pueden encontrar mejores soluciones.
No hagamos de la dispersión nuestra debilidad. Desde lo local hagamos esfuerzos solidarios y comunes.
Otro punto que es fundamental es el fortalecimiento de las finanzas municipales. Pero este ya no se puede ni se debe hacer estrictamente sobre la base de pedir más recursos de los centros de distribución de recursos.
Al fin en México buena parte de la recaudación de recursos públicos es federal y desde allí se distribuye. Pero los municipios tienen puentes de ingresos propios, pero los municipios pueden ser motor que detone crecimiento y actividad económica, y desde allí poder aumentar sus ingresos.
Los municipios son y deben ser socios de sus habitantes en el desarrollo y al hacerlo multiplicar sus oportunidades, consolidar las ventajas regionales y pensar en términos comunes.
Al final el ingreso que más importa es el ingreso que le podemos dar a todos y cada uno de los habitantes, mediante el trabajo y mediante la labor productiva, y allí los municipios pueden detonar o contener la actividad económica.
Mucho del crecimiento pasa por la transparencia y la rendición de cuentas.
El buen gobierno es socio de sus habitantes, para generar desarrollo y seguridad. El gobierno opaco se puede volver un obstáculo y un costo al crecimiento y a las oportunidades.
Ningún gobierno puede ser opaco ni debe ser opaco frente sus ciudadanos, pero menos el que le es más cercano.
Y a fin de afianzar esa cercanía hoy tenemos que discutir ya con seriedad el refrendo popular de los presidentes municipales; el alargar sus periodos de gobierno, mediante la reelección.
Esto no es nuevo ni es anuncio que se hace ahora; esta es una discusión que ya se viene dando en los últimos meses, en los espacios constitucionales de la República.
Existen iniciativas al respecto y yo al comparecer ante la Cámara de Diputados dije: México necesita aclarar ya, si en este año de refundación histórica como es el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución, podemos dar pasos adelante, a fin de darle mayor fortaleza y estabilidad a las instituciones municipales, así como a las instituciones legislativas.
El municipio está en el centro de la reflexión de lo que es México hoy.
Nuestra capacidad de consolidar y fortalecer a la autoridad para que pueda cumplir con sus funciones, pasa por una lógica democrática, pero también por una lógica económica.
El ejercicio de la libertad responsable está en el centro de las esperanzas de México.
Ya no se puede hablar de derechos en primera persona y de la responsabilidad en tercera persona: A mí denme mis derechos y el que tiene que responder es otro.
Hoy todos construimos la realidad de México y la institución se construye desde la primera autoridad.
Yo los felicito por hacer este ejercicio de comunicación, por no aislarse, por intercambiar sus experiencias, por querer ser mejores para los suyos, por buscar vivir la vida política con honor, con honradez, con sencillez. Yo los felicito por asumir su responsabilidad frente a los demás.
El que aspire a la política pone a la responsabilidad antes que a cualquier derecho.
El que ve a la política como una oportunidad para sí y no como un espacio para los demás, traiciona los fundamentos de la política.
Yo los felicito por reiterar en esta ocasión de servir y ser útiles a los demás y permítanle a ellos ser útiles con los demás.
Que la autoridad no sofoque o no suplante la energía social; que la autoridad sea espacio y plataforma para crecer en libertad; para que los derechos sean de todos y los deberes sean de todos.
Para que México recupere sus fortalezas mucho más rápido la solución tendrá que ser desde lo local.

Teoría impertinente de la lectura

Teoría impertinente de la lectura/Luis García Montero, escritor
Publicado en EL PAÍS, 16/08/09;
Es agosto y la playa está llena de gente. Observo a mi hija mientras lee tumbada en una hamaca, en medio de los gritos, los bañistas, los paseantes, las cometas y los vendedores de patatas fritas. El acto de leer delimita para ella un espacio propio, un reino singular de soledad y absoluta pertenencia. Siento lo mismo que cuando veo a alguien leer en el metro, en los aeropuertos o en el banco de una plaza. Aunque soy de los que prefiere refugiarse en el ámbito de una butaca familiar, reconozco la sigilosa intimidad que traza las fronteras personales del lector callejero entre la multitud.
Mi hija está allí con una certeza impertinente, con una autoridad singular que desafía al mundo. Lo curioso es que también sé que no está allí. Como yo le he dejado el libro en el que ahora vive, estoy convencido de que se encuentra en Venecia, observando con ojos de persona mayor la belleza de un adolescente.
La verdad es que resulta curiosa la afortunada flexibilidad de los asuntos reales. Mis ojos de hombre maduro observan en una playa de Andalucía la belleza de una adolescente que reafirma con una misteriosa autoridad su presencia, su forma de estar aquí, mientras se encuentra muy lejos, en otro mar, observando con ojos de persona mayor los baños de un adolescente.
A veces siento que el ser humano no se caracteriza por su capacidad de pensar, sino por su capacidad de dividirse, de hacerse presente o de borrarse según las necesidades de su deseo y su conciencia. Por eso me parece decisiva la operación de leer como metáfora de una reivindicación decente de la modernidad. Copio unas palabras de Edward W. Said, de su libro Humanismo y crítica democrática (Debate, 2008): “La realidad de la lectura es, ante todo, un acto de emancipación e ilustración humana, quizá modesto, pero que transforma y realza nuestro conocimiento en aras de algo diferente del reduccionismo, el cinismo o el estéril mantenerse al margen”.
Las formas del dogmatismo actual, más allá de las ideologías totalitarias, tienen mucho que ver con la reducción de los matices del mundo a breves titulares que sirven para imponer opiniones y simplificar la realidad, haciendo imposible un verdadero uso de la conciencia individual. Los dogmas de hoy dependen con frecuencia de las nuevas velocidades de la información. La invitación al cinismo, el deseo de relativizarlo todo, suele ser el camino de las inteligencias que juegan a destruir las ilusiones colectivas.
Como hacía el poeta Campoamor contra el liberalismo romántico, los cínicos, más que defender sus ideas reaccionarias, se limitan a ridiculizar las apuestas optimistas. Confieso que el cinismo, como disfraz del pensamiento reaccionario, me molesta incluso más que la pretendida pureza de los que se mantienen al margen y se lavan las manos. A los puros, es decir, a los inquisidores actuales, no les preparan el terreno los sacerdotes, sino el cinismo.
No es, por tanto, asunto menor la reivindicación de la lectura si sirve para defender la emancipación humana en contra de los dogmáticos, los cínicos y los puros. Hay que tomarse en serio una pasión de entrega atenta a las palabras del otro, que tiene como resultado último la confirmación independiente de la realidad personal. Observo a mi hija mientras lee. Está aquí y en otro lugar, es ella más que nunca, porque descubre sus sentimientos, y es al mismo tiempo otro. Cada lector se ha formado gracias a las palabras de muchos autores, que también llegaron a conocerse a sí mismos cuando organizaron sus palabras, sus ideas y sus sentimientos para establecer un diálogo con sus lectores. ¿A qué se parecen las operaciones de leer y escribir? A ponerse en el lugar del otro, quiero decir, por ejemplo, a cuidar a una hija o a un familiar enfermo. Sólo descubrimos lo que hay en nosotros mismos cuando nos desdoblamos para cuidar al otro.
Bernhard Schlink contó en su novela El lector la historia de un adolescente alemán que vivió una historia apasionada de amor con una mujer madura. Todos los días, antes de ir a la cama, la mujer le pedía a su joven amante que leyese en voz alta algunas páginas de un libro. Rota la historia de amor y pasados los años, el protagonista de la novela, ya estudiante de Derecho, se reencuentra por sorpresa con su antigua amante en un juicio, acusada de haber participado en uno de los horrendos crímenes del nazismo. La práctica jurídica adquiere entonces para el estudiante otra dimensión. No justifica de ninguna manera un crimen que lo conmociona por dentro, pero tampoco puede limitarse a juzgar desde fuera. El lector necesita comprender lo ocurrido, meterse en el drama, ponerse en el lugar del otro.
Nos ponemos muy pesados con nuestras identidades. Parece que no hay términos medios. Cuando no pretendemos imponer nuestras identidades como marco único de la totalidad, nos vamos al extremo contrario y diluimos nuestra conciencia individual en el mar ideológico de un todo que fijan las consignas y las costumbres de los otros. Por eso es decisiva la metáfora en la lectura, el sigilo con el que mi hija aprende a borrarse un poco para estar en la ciudad de sus personajes, sin renunciar a ella misma, descubriendo su propio rostro en las aguas de Venecia. Ninguna operación me recuerda tanto a la apuesta del contrato social, la otra metáfora con la que el pensamiento moderno quiso organizar los intereses privado y los públicos, las identidades y los vínculos.
La pérdida de prestigio social de las humanidades ha provocado un sentimiento de culpa entre sus disciplinas y un deseo de imitar a las ciencias. Una sucesión de pretendidos métodos científicos marca desde hace años los rumbos de las teorías literarias. Los métodos nacen, crecen, se reproducen y mueren con la pretensión de aportar una verdad científica al conocimiento de la literatura. Se sienten fuertes al aplicar un protocolo y utilizar un vocabulario tecnológico de muy dudoso gusto.
Estoy convencido de la importancia de la teoría literaria, pero estoy convencido también de que ninguna pretensión científica es más importante que la capacidad personal de lectura, la solitaria pasión con la que Leo Spitzer, Roman Jakobson, Roland Barthes, Dámaso Alonso o Fernando Lázaro Carreter supieron leer. No los admiro por científicos objetivos, sino porque con una soledad cuidadosa supieron hacer en su despacho, ante una página de Garcilaso o Baudelaire, lo mismo que ahora hace mi hija con sus ojos adolescentes.

Ante la certeza de los dogmas y la homologación de las conciencias, tal vez haya que darle hoy su completo significado histórico a la emoción del lector. La soledad compartida de alguien que lee unos versos o una narración, alguien que pide tiempo para vivir cada palabra hasta hacerse dueño de sus propias opiniones, es la mayor ofensa que podemos hacerle a un economicismo desalmado que cuenta con poderosísimos mecanismos tecnológicos de control de las conciencias y que liquida los espacios públicos, suprimiendo los textos y las plazas, es decir, los lugares donde los individuos, sin renunciar a ser ellos mismos, borran un poco sus identidades concretas para convertirse en ciudadanos.

Oponerse al progreso de la ciencia y la tecnología es simplemente reaccionario. Pero eso no significa olvidar el sentido de las humanidades, o asumir una definición tecnológica del futuro. La ciencia no puede perder la raíz de su pacto humanista. Quizá ser moderno, más que llenar las costumbres de vocabulario desarrollista, consista es ser capaces de volver a formular un contrato social adaptado a los nuevos tiempos. Y para firmar un contrato conviene leerlo todo, hasta la letra pequeña de los documentos. Así lo siento cuando pienso en el futuro, mientras observo la impertinente soledad de mi hija que lee, rodeada de gente, en una playa del sur.

Libertad de Jacobo Silva Nogales

Recobran su libertad exdirigentes del ERPI
Nota de REGINA MARTíNEZ
JALAPA, Ver., 29 de octubre (apro).- Luego de diez años de prisión, este jueves recobró su libertad Jacobo Silva Nogales, exdirigente del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), quien purgó una condena en el penal federal de máxima seguridad conocido como "El Rincón", ubicado en Tepic, Nayarit.
Apenas anoche su esposa, Gloria Arenas Agís, la coronel Aurora del ERPI, también fue excarcelada del penal mexiquense de Chiconautla, después de haber ganado dos amparos a la justicia federal.
Al salir del penal, a Arenas Agis la esperaba una comisión de integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de San Salvador Atenco, encabezados por María Trinidad Ramírez, doña Trini, esposa del líder encarcelado del movimiento campesino Ignacio del Valle Medina.

El vocero Carstens

Carstens corrige a Calderón: "La mayoría de las empresas pagan sus impuestos"
Nota de CARLOS ACOSTA CóRDOVA
MÉXICO, D.F., 29 de octubre (apro, agencia).-Por segunda ocasión, en siete días, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, tuvo que hacerla de apagafuegos. El jueves 22 debió calmar –junto con el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont-- el berrinche del priismo luego de que el presidente del PAN, César Nava, le imputó la aprobación de un paquete fiscal "incompleto e insuficiente".
Este jueves, tuvo que salir a calmar a los airados empresarios, a quienes el presidente Felipe Calderón acusó en dos ocasiones de no pagar impuestos, o de que rara vez lo hacen y con pagos ínfimos al fisco.
El personal de Comunicación Social de Hacienda tuvo que movilizarse para citar, con carácter de urgente, a los medios informativos, pues el secretario haría un "pronunciamiento" público en torno del paquete fiscal.

El Presidente Calderón "suaviza" las críticas

El presidente Calderón suavizó hoy sus críticas contra las grandes empresas evasoras de impuestos, al afirmar que sus señalamientos a éstas no es porque "estén contrariando la ley", y dijo que si el marco regulatorio para que cumplan sus obligaciones genera desigualdad, entonces tiene que corregirse.

Al participar en el XVI Congreso del Comercio Exterior, que se realiza en Querétaro, Calderón señaló que si la regulación existente demuestra que "ese esfuerzo no es parejo o genera inequidades o privilegios, lo razonable y responsable es que el gobierno y todos contribuyan a corregir esos desequilibrios".
Añadió: "El señalamiento no es que se esté evitando o contrariando la ley; eso lo entiendo perfectamente. Por eso mi reconocimiento a quienes pagan conforme a la ley".
En los últimos días, Calderón afirmó que los grandes corporativos "rara vez pagaran impuestos".
Durante el 41 Foro Nacional de la Industria Química, acto realizado en un hotel de Polanco, Calderón dijo ayer: "Lo que me parece inaceptable es que haya grandes corporativos que le exigen al gobierno que recorte su gasto y el gobierno lo recorta; que le exigen al gobierno que ponga impuestos sobre alimentos y medicinas de la gente más pobre. No obstante, a la hora de ver sus cifras, en promedio pagan 1.7 por ciento de impuestos durante varios años. Eso ya no puede ser".
Hoy, ante el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior. Calderón hizo un reconocimiento a todos los que pagan impuestos, "desde pequeñas empresas, médicos, profesionistas y todos quienes contribuyen con lo que marca la ley.
En el acto, Valentín Díez Morodo, presidente de ese organismo, afirmó que las empresas pagan sus impuestos como lo marca la ley y llamó al Congreso para que "actué en función del país, porque no es momento de provocar confrontaciones".
Señaló que, desde hace años, los mexicanos han demandado una reforma fiscal que beneficie al país, así como la simplificación de trámites para las empresas.
"Año con año vemos que hay modificaciones respecto de los trámites y los formatos y a las obligaciones fiscales, sin que haya coherencia alguna entre lo que se persigue y lo que se obtiene", dijo.
Señaló: "Las empresas pagan lo que por ley tienen que pagar, cumpliendo con nuestras obligaciones fiscales y contribuyendo de esta manera al desarrollo del país. Pero desgraciadamente los resultados de tanta miscelánea que han pretendido implementar, complican cada vez más su aplicación y entendimiento.
"Adicionalmente tenemos que señalar que el incremento de la carga que tienen todos los sectores puede ser compensado en gran parte por ese comercio informal, la que podemos emplear en algo que es lema de este consejo, enfocado a algo que es en desarrollo de tecnología", agregó.
Además, Díez Morodo destacó la lucha de Calderón contra el crimen organizado y encomió la disolución de la compañía de Luz y Fuerza del Centro, cuyas deficiencias, dijo, se trasladaban a las empresas y les obligaban a aumentar sus costos
Calderón dijo que, "efectivamente, no son tiempos de generar confrontaciones, sino de pensar en México", por lo que insistió en la necesidad de buscar coincidencias.
***
Parte del discurso del Presidente Calderón:
Saludo al licenciado Valentín Díez Morodo, Presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología, el COMCE; le agradezco mucho, Valentín, su invitación a este Congreso.
Saludo también y le doy la bienvenida al querido amigo el doctor Enrique Iglesias García, Secretario General de la Secretaría General Iberoamericana y buen amigo de México.
Al ingeniero Armando Paredes Arroyo, Presidente del Consejo Coordinador Empresarial.
Al licenciado Gerardo Gutiérrez Candiani, Presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana, a COPARMEX, a quien también le deseo el mayor de los éxitos al frente de su gestión.
Saludo, desde luego, al licenciado Miguel Marón Manzur, Presidente de CANACINTRA
“En ese esfuerzo, amigas y amigos, hay que reconocer, efectivamente, a quienes cumplen con el país. Y ahí mi reconocimiento es a las empresas y a los contribuyentes que pagan con mucho esfuerzo sus impuestos.
A los médicos, a los empleados que les retienen las empresas y que enteran esos impuestos. A los profesionistas, a las Pequeñas y Medianas Empresas que con enorme sacrificio buscan un contador amigo que les ayude, precisamente, a hacer sus declaraciones.
A quienes van puntualmente y hacen mes a mes sus provisionales. A todos los mexicanos y las mexicanas que cumplen con el país, empresas o contribuyentes, que son la abrumadora mayoría, mi reconocimiento a nombre de los mexicanos.
Y a quienes evaden impuestos, a quienes no los pagan, cometen una injusticia con todos: con los que cumplen y también con una abrumadora mayoría de mexicanos que necesita esa contribución.
Y en ello no hay discusión, estamos plenamente de acuerdo. La autoridad tiene el deber, no sólo el deber, también el derecho de exigir ese cumplimiento.
Y aún en ese cumplimiento, amigas y amigos, si de la observación misma que todos podemos hacer se demuestra que a pesar del esfuerzo que se realiza, la regulación existente refleja que ese esfuerzo no es parejo o que genera inequidades o que genera privilegios; me parece que lo razonable y lo responsable del Gobierno, y me atrevería a decir, de todos, es corregir esos desequilibrios y corregir esas inequidades.
Porque no podemos exigirle más a una PyME de cinco empleados, que hace un esfuerzo enorme para pagar su Impuesto Sobre la Renta, que a una empresa que puede, verdaderamente, con su fuerza, tener una estructura corporativa que le permita, al final, hacer una contribución significativamente menor.
El señalamiento no es que se esté evitando o contrariando la ley. Eso lo entiendo perfectamente.
Por eso, mi reconocimiento a quienes pagan conforme a la ley. Pero el esfuerzo que tenemos que hacer es que si el marco regulatorio genera inequidades tiene que corregirse, y eso es, precisamente, lo que debemos hacer.
Sé muy bien que la exigencia de los mexicanos es acabar con privilegios, acabar con regímenes de excepción. Sé muy bien que la exigencia de quienes contribuyen es que todos contribuyan. Y sé muy bien que la exigencia del contribuyente es que el Gobierno utilice bien y honestamente, con eficiencia hasta el último de los centavos que recaude.
Y en eso sé que tenemos mucho que hacer. Pero en eso estamos avanzando y seguiremos avanzando a este camino.
Ahora bien, amigas y amigos, hay, desde luego, en nuestro país una enorme libertad de expresión. Una libertad que nos ha costado mucho, muchísimo construir. Una libertad, amigas y amigos, que es de los bienes más preciados que tenemos los mexicanos.
Y yo me honro de haber contribuido en muchos años de autoritarismo a luchar porque existiese esa libertad. Y ahora, como Gobierno, precisamente por ello, no sólo avalo, sino propongo que ensanchemos esa libertad de expresión.
En los últimos meses y semanas, ha habido todo tipo de expresiones acerca del Gobierno. Muchas muy justificadas y muy merecidas. Otras, a mi juicio, simple, sencillamente no tan justificadas, pero todas absolutamente respetables.
Y pienso también que en esa libertad el Gobierno no sólo tiene derecho, sino el deber, un deber con los ciudadanos de explicar sus decisiones.
Bienvenida la expresión libre y bienvenido el debate. Y dentro del debate, también entendamos todos, que más allá de nuestras diferencias, existe un amplísimo campo de coincidencias que es donde, verdaderamente, se construye la capacidad de acuerdo y de entendimiento.
El Gobierno Federal, por mi conducto, reitera que siempre, siempre estarán abiertas las puertas del Gobierno para el diálogo y el entendimiento.
Mi convocatoria es a que las diferencias naturales y, yo diría, deseables, que hay en una sociedad democrática, se puedan ventilar y dirimir con responsabilidad; que se puedan verdaderamente resolver por la vía del diálogo y el acuerdo, que se puedan verdaderamente expresar con la libertad de la cual nos preciamos los mexicanos.
Y mientras existan, precisamente, esos caminos abiertos al diálogo se verá con enorme claridad que son más, mucho más las coincidencias que nos unen que las diferencias que nos separan, y que dentro de tales diferencias están, desde luego, las diferencias legítimas de la defensa de los intereses, también legítimos, de personas, de empresas o de grupos.
Que eso lo entiende perfectamente el Gobierno, pero que el deber del gobernante es, y más en una hora tan crítica y tan importante, como la que vive México, hacer prevalecer el interés superior de la Nación por encima de cualquier interés particular; que siempre habrá, siempre estarán abiertos los anchos caminos del entendimiento para buscar soluciones.
Y como bien dijo aquí Valentín Díez Morodo, más allá de esas diferencias, más que ser tiempo de generar confrontaciones, primero está México.
En eso, amigas y amigos, en el ideal que compartimos de hacer de éste, el sector exportador, un sector próspero, un sector que gane, un sector que le vaya bien, un sector que genere empleos en México no podemos más que coincidir.
En el interés de que nuestra economía crezca, repunte con tasas fuertes, sostenidas no podemos más que coincidir. En el interés de que México sea el país próspero al que aspiramos, no podemos más que coincidir.
Busquemos esas coincidencias, conscientes de la gravedad de la hora que vive México y de la importancia de resolver de fondo los problemas que lo han debilitado, no años, sino décadas. El tiempo se agota, los recursos también.
Es la hora, amigas y amigos, de las decisiones, es la hora de cambiar y cambiar a fondo, lo he dicho y lo reitero.
Y en ese cambio a fondo construyamos el México que anhelamos. No será fácil, no será fácil porque implicará, como también he dicho, que cada quien ponga y ponga su parte. El Gobierno, tengan la certeza, pondrá su parte, está poniendo su parte.
Y una vez superada esta difícil circunstancia, esta coyuntura por la que nos ha tocado atravesar, verán ustedes que vendrán mejores días, mejores tiempos y alcanzaremos el anhelado sueño de hacer de nuestro México un país próspero, un país mucho mejor.
Enhorabuena por este Congreso y los invito a trabajar juntos por mejorar el sector exportador del país.