Las columas politicas, hoy 20 de julio de 2016..
Bajo Reserva/El Universal
Después del choque entre los gobiernos de la República y de la Ciudad de México por el tema ambiental, el presidente Enrique Peña Nieto y el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, se encontraron en un evento oficial. Al concluir un foro organizado por Isabel Miranda de Wallace, don Miguel Ángel salió al paso del Presidente. El gobernante local había estado serio, distante, incluso cuando la presidenta de Alto al Secuestro regaló un pastel y cantó Las Mañanitas a Peña Nieto, quien este miércoles celebra su cumpleaños, Mancera siguió ese momento con los puños sobre la mesa y apenas aplaudió. Entonces, salió al paso de Peña y estrechó su mano para despedirse. Hubo un contraste de imágenes, primero sonrisas y de repente rostros serios, alargados, endurecidos.
l#
Rozones/La Razón
- Quien tuvo un festejo inesperado por su cumpleaños 50, que celebra este miércoles, fue el Presidente Enrique Peña ayer en un hotel capitalino. Y es que la presidenta de la asociación Alto al Secuestro, Isabel Miranda de Wallace, le llevó pastel y hasta pidió a todos los asistentes que cantaran “Las Mañanitas”.
#
Confidencial/El Financiero
Las 50 primaveras en Toluca
El presidente Peña Nieto celebrará hoy su cumpleaños número 50 en su estado natal, pues estará de visita en Toluca. Allí se verá si, como ayer, se salva de morder el pastel que le llevó Isabel Miranda de Wallace. El senador Roberto Gil Zuarth, durante el foro internacional “Equidad para las víctimas en el debido proceso”, ya se frotaba las manos: “¡qué le muerda!”, canturreaba; “capaz que lo empuja Presidente”, soltó Isabel Miranda. El mandatario, precavido, mejor no hizo caso.
#
#
EL ASALTO A LA RAZÓN | Carlos Marín
Milenio
“Pastelazo”
La fundadora de Alto al Secuestro no pudo escoger peor circunstancia ni momento menos oportuno para felicitar a Enrique Peña Nieto por su cumpleaños 50.
Qué bochorno: la señora la regó, y no por haberse anticipado un día en felicitarlo, por llevarle pastel ni tararear “Las mañanitas”, sino porque redujo drásticamente la seriedad e importancia que mereció el foro internacional al que ella misma había convocado.
El tema de la reunión merecía delicadeza: Equidad para las víctimas en el debido proceso.
En vez de atajar el halago caballerosamente, Peña se dejó llevar y, con palabras de una formalidad propia de su lastimada investidura (afirmó que partiría el pastel con el deseo de que a México le vaya a todo dar), dio por concluido lo que por fortuna no terminó en un bochornoso reventón.
cmarin@milenio.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario