Despilfarro de
escándalo/ISAÍN MANDUJANO
Revista
Proceso # 1939, 28 de diciembre de 2013
Durante
2013, el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, gastó 10 millones de dólares en
promover su imagen. Hace unos días ocurrió el momento más grotesco de ese
dispendio: Su primer informe de labores se publicitó hasta en el Distrito
Federal y Estado de México. A días del 20 aniversario del levantamiento
zapatista y en medio de una crisis de deuda, el pevemista asegura que las
críticas que ha recibido son sólo una cortina de humo y que utilizó el dinero
sólo porque ya estaba presupuestado.
TUXTLA
GUTIÉRREZ, Chis.- El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, realizó uno
de los mayores dispendios publicitarios de los últimos años. Seis días antes de
su primer informe de labores, realizado el jueves 19, cientos de anuncios de la
revista Cambio –publicación que incluía una serie de artículos apologéticos–
inundaron las calles no sólo de Chiapas, sino del Estado de México, el Distrito
Federal y otras entidades del centro del país.
A
20 años del levantamiento zapatista que sacudió al estado y al país entero,
Velasco se anunció en autobuses, parabuses, casetas telefónicas,
espectaculares, en calles, carreteras y edificios, en Facebook, Twitter,
YouTube y otras páginas electrónicas, en periódicos –impresos y electrónicos,
locales y de circulación nacional–, en cines, parques y plazas… Así, el
gobernador de uno de los estados más pobres y endeudados de la República pagó
para difundir su rostro en las entidades con los mayores padrones electorales.
Velasco,
sin embargo, rechaza que tenga pretensiones presidenciales: “Ya lo dije una vez
a Proceso y lo vuelvo a repetir: A mí que me den por muerto para el 2018. Y si
no es así me pueden calificar de mentiroso. Yo no aspiro a ser candidato
presidencial, como tanto especulan”.
El
repudio y la ilegalidad
Hace
año y medio nació en las redes sociales el colectivo #QuitaUnAnuncio, que
convoca a retirar publicidad electoral de espacios públicos y vigilar a los
políticos y funcionarios que la colocan.
“La
propaganda política invade nuestro espacio común no sólo en tiempos de campaña,
ahora de forma permanente. Esto representa la contaminación del entorno y un
gasto frívolo. En el caso de funcionarios en ejercicio, supone además una
promoción personal prohibida por la Constitución y una erogación de carácter
inmoral que contrasta con las grandes necesidades sociales en nuestro país”,
manifiesta Jesús Robles Maloof, miembro de ese colectivo y del organismo
Propuesta Cívica.
La
acción de Velasco, explica, incluso motivó la elaboración de una guía de acción
ciudadana para buscar sancionarlo:
“Guía
para interponer quejas contra la publicidad colocada fuera de Chiapas por
Manuel Velasco, que llegó al poder como abanderado de una coalición
PVEM-PRI-Panal.
“Paso
1. Localiza la propaganda. Anota los datos de ubicación y, si puedes, toma una
fotografía. (En el caso de los previos en el cine, funciona de igual manera.
Anota cine, día y horario de la función.)
“Paso
2. Llena el formato que hemos propuesto e imprímelo, si lo puedes llevar
personalmente. (También puedes enviarlo por correo.)
“Paso
3. Ubica la Junta Distrital del IFE que corresponda. (Si no estás seguro puedes
acudir o llamar a la Junta más cercana. También puedes enviar tu queja por
correo electrónico.)
“Paso
4. Sube una foto de la queja o la propaganda a las redes sociales, invitando a
toda persona a sumarse a esta acción.”
Para
Robles Maloof, “es un deber cívico establecer los límites de la acción y gasto
de los gobernantes, así como vigilar que se cumplan”.
De
acuerdo con el párrafo quinto del artículo 236 del Código Federal de
Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe), Velasco Coello está
realizando “propaganda personalizada”, que además difunde fuera de su estado.
La
colocación de ese tipo de anuncios viola también el párrafo quinto del artículo
228 del Cofipe. Éste establece que “el informe anual de labores o gestión de
los servidores públicos, así como los mensajes que para darlos a conocer se
difundan en los medios de comunicación social, no serán considerados como
propaganda, siempre que la difusión se limite a una vez al año en estaciones y
canales con cobertura regional correspondiente al ámbito geográfico de
responsabilidad del servidor público y no exceda de los siete días anteriores y
cinco posteriores a la fecha en que se rinda el informe. En ningún caso la
difusión de tales informes podrá tener fines electorales ni realizarse dentro
del periodo de campaña electoral”.
Además,
contraviene el párrafo 7 del artículo 134 constitucional, que indica: “La
propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como
tal los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades
de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno,
deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de
orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes,
voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor
público”.
Darío
Ramírez, director del organismo Artículo 19-México, repudió la campaña
mediática. “¿Por qué la propaganda de Manuel Velasco en el DF? Increíble el
cinismo e irresponsabilidad en el gasto público”, escribió en su cuenta de
Twitter y de inmediato anunció el envío de una serie de preguntas para conocer
el gasto en publicidad por parte del gobierno chiapaneco, apoyándose en la Ley
de Acceso a la Información Pública.
Sin
embargo, recordó que en el Informe 2012 realizado por Artículo 19 y Fundar,
Chiapas fue de los estados más opacos. De hecho, toda la información sobre
publicidad gubernamental fue declarada en reserva.
“Es
necesario solucionar el uso discriminatorio, opaco y desvirtuado de la
publicidad oficial y el derroche de recursos públicos que se deriva de esto. La
publicidad oficial –es decir, la compra de espacios en los medios por parte de
los gobiernos– debería tener un uso limitado y regulado”, puntualizaron
Artículo 19, Fundar, Alianza Cívica y otras organizaciones civiles en un
informe del 23 de noviembre pasado.
La
campaña de Velasco llamó incluso la atención del Subcomandante Marcos, quien le
dedicó una postdata en su más reciente comunicado, el domingo 22: “El
autodenominado ‘gobernador’ de Chiapas, México, ha declarado solemnemente que
su administración ‘se ha apretado el cinturón’ con un programa de austeridad.
Como muestra de su decisión, se ha gastado más de 10 millones de dólares en una
campaña publicitaria nacional que no por masiva y costosa es menos ridícula… e
ilegal.
“Pero
como algunos medios se llevan su tajada, el ‘imberbe’, ‘inexperto’ e ‘inmaduro’
empleado de un negocio que ni es partido ni es verde ni es ecologista ni es de
México (bueno, ni él es gobernador, así que para qué detenerse en detalles) es
ahora, en las páginas y segmentos de la misma prensa que lo atacaba por
‘niñato’, un ‘hombre de Estado’ que no gasta en su promoción personal, sino ‘en
atraer turismo a Chiapas’.
“Sí,
mi buen, ya las agencias turísticas lanzan el turipaquete ‘Conozca al Güero
Velasco’, en plan ‘all included’, que viene con un kit con anteojeras para no
ver a los grupos paramilitares, ni la miseria y el crimen que pululan en las
principales ciudades chiapanecas (Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de las Casas,
Comitán, Tapachula, Palenque), en una entidad donde se supone que los indígenas
sean los pobres, no los mestizos.
“Si
el gran ladrón, (el exmandatario) Juan Sabines Guerrero, pagó millonadas a los
medios para simular gobierno donde sólo hubo despojo, el actual junior de la
política local paga más porque ha aprendido, del actual titular del Ejecutivo
Federal (creo que se llama Enrique Manlio Emilio… ¿no? ¿ya ven lo malo de no
tener cuenta en tuiter?), que se puede pasar de una averiguación judicial a una
lista de candidatos presidenciales para 2018 con sólo algunas decenas de
millones de dólares, un buen Photoshop y una telenovela rosa”.
Ni
lo ven ni lo oyen
En
el Congreso de Chiapas sólo los diputados del PAN y del PRD (seis, de un total
de 41) se atreven a cuestionar la campaña mediática de Velasco Coello. Las
fracciones del PRI y el PVEM, con 29 legisladores, respaldan a cabalidad las
acciones del gobernador chiapaneco.
Alejandra
Soriano Ruiz, dirigente de la fracción parlamentaria del PRD, y Mirna Camacho,
de la panista, critican el contraste entre el discurso de Velasco, quien
prometió austeridad, y la embestida mediática.
Roxana
Gordillo, de Movimiento Ciudadano, y Sonia Catalina Álvarez, del PT, se
abstienen de hacer comentarios que las comprometan.
El
PRI, liderado por Neftalí del Toro, y el PVEM, encabezado por Emilio Salazar,
avalan todo lo que el mandatario propone. Los diputados de estos partidos no
sólo convalidan y aplauden el gasto en imagen, sino que también aprobaron todas
las iniciativas de reforma del gobernador. De hecho, el jueves 26 le dieron
entrada a su paquete fiscal, que con toda probabilidad será aprobado sin
cuestionamientos.
Velasco
le pidió al Congreso del Estado un presupuesto de 78 mil 61 millones 572 mil
475 pesos para 2014. Esto significa 12 mil millones de pesos más de lo ejercido
en 2013.
En
el rubro de comunicación social el gasto de 2013 fue de 129 millones 434 mil
606 pesos. Para 2014 plantea menos de la mitad: 62 millones de pesos. Pero ni
aun ante estas altas cifras Velasco ve dispendio en su promoción. Asevera que
el rechazo que ha concitado dicho gasto es una cortina de humo: “Se debe hablar
de los problemas que realmente nos deben ocupar y preocupar, y no distraernos
con esta cortina de humo”.
Entrevistado
vía telefónica, el mandatario estatal admite que sí gastó los 10 millones de
dólares en publicidad citados por Marcos, pero matiza: Asegura que la partida
fue solicitada por su antecesor y que no toda se usó para promover su imagen.
De ser así, expone, no hubiera quedado nada para el gasto corriente de los
trabajadores de comunicación social ni para otras campañas propagandísticas.
Manifiesta
además que la revista Cambio promovió su edición con una imagen suya que no es
reciente, y sostiene que él no tiene nada que ver con su difusión masiva.
También se dice dispuesto a enfrentar las demandas o quejas que se deriven del
manejo de su campaña propagandística ante las instancias correspondientes.
Velasco
se jacta de que ya ha logrado todos los cargos de elección popular que hubiera
querido. Hijo del exgobernador Manuel Velasco Suárez, ya fue diputado local y
federal, además de senador. Por lo tanto, agrega, no piensa seguir los pasos
del presidente Enrique Peña Nieto. “Ya se los dije una vez, a mí denme por
muerto para el 2018.
“Si
bien tengo una novia que vive de la industria del espectáculo, para nada busco
o pago con dinero del erario local para salir en esas revistas.”
Crisis
histórica, gasto inaudito
El
jueves 19, al rendir su informe, el gobernador dijo que comenzó su gestión “en
medio de la peor crisis financiera que haya enfrentado cualquier gobierno en la
historia de Chiapas”. De entrada, afirmó, “tuvimos que hacer frente a una deuda
bancaria cercana a los 23 mil millones de pesos, que comprometió nuestra
capacidad de pago. Y en una situación inédita, 71 municipios se declararon
oficialmente en quiebra”.
Según
recordó, México no creció como se tenía proyectado, lo que impactó la economía
de Chiapas. Por eso se vio obligado a tomar decisiones “que si bien no eran
populares, sí eran las correctas para que Chiapas tuviera viabilidad
financiera”.
A
decir de Velasco, hoy su gobierno ya tiene “bases sólidas y la capacidad
financiera para poder pagar los sueldos y los aguinaldos en tiempo y forma”. Y
se ufanó: “Logramos que Chiapas obtuviera ya una calificación positiva por
parte de las agencias calificadoras Fitch y Moody’s”.
Pero
el economista y experto en finanzas públicas de la Universidad Autónoma de
Chiapas Jorge Alberto López Arévalo revira: “No hay cuentas alegres que
presentar. Hay recesión, no hay creación de empleos, hay despidos y eso lo
siente el chiapaneco de la calle. Lo siente el de la tiendita que vende menos,
el constructor que construye menos, el agricultor que tiene resultados
negativos, etcétera. Eso no se puede borrar con la publicidad”.
Velasco,
abunda López Arévalo, ha demostrado “mucha incapacidad” para transparentar los
datos de la deuda y obtener buenos resultados. “Chiapas sigue siendo como
Disneylandia: Todo muy bonito en el discurso, pero está construida de cartón.
Los cimientos son muy frágiles. Hay que trabajar en reformas estructurales, ya
que la casa está bastante desordenada y con una clase política mediocre. El
despilfarro exhibido para proyectar su imagen es de lo más frívolo que se ha
visto en la entidad. Ni Sabines llegaba a tanto. Mucho me temo que al cabo de
los cinco años que faltan del gobierno de El Güero estemos peor”.
Y
argumenta su pronóstico: Chiapas es la entidad más pobre del país y tiene los
peores indicadores sociales, así que no posee ni genera las condiciones para
liquidar la deuda. Para que las tuviera debería crecer y generar riqueza, pero
no lo está haciendo. Los ingresos estatales son irrisorios, por lo que toda la
entidad depende del presupuesto federal.
“Si
a Chiapas le quitáramos las dos muletas que la hacen caminar: el gasto público
a través de las transferencias y participaciones federales y el gasto privado a
través de las remesas, nos quedaría la dimensión real de una economía
devastada, con niveles de pobreza equivalentes o superiores a algunos países
del África subsahariana. Lo peor del caso es que el gasto público no ha servido
ni ha sido utilizado para el crecimiento económico ni para el desarrollo de la
entidad, sino para el enriquecimiento de una élite, que desde Juan Sabines
Guerrero, por lo menos, se compone de una juniorcracia frívola y torpe en su
gran mayoría.
“Es
ínfimo lo que Velasco Coello pudo informar. Desde mi punto de vista es el
séptimo año de Sabines, pero sin él. No es posible que los recursos públicos
del estado más pobre de México sean despilfarrados en anuncios publicitarios de
quien, hasta ahora, ha demostrado incapacidad. Es un gobierno paralizado y sólo
con algunas ocurrencias”, remata el académico.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario