Vivirnos
La
quiero porque tiene una orquídea
en los ojos tristes
porque
se levanta ausente de mí
y
me recuerda
y
yo me ayunto a su piel y la acaricio
me
toco en la guitarra su canción
esa
canción que hacía que ella por ella misma
caminara
sin
necesitarme
sin
pedirme una mano
sin
mis ojos
ahora
no puede respirar si del aire de mi aire
no le doy
si
mis latidos no laten
ella
no puede hacerse a la comida ya sin mí
no
sale a la calle sin decir gordito ahorita vengo
voy
por las tortillas
no
me tardo
me
espera con la luz encendida debajo de las sábanas
y
cuando llego vuela de un aire a otro aire
brilla
en la oscuridad como luciérnaga
se
adelgaza y se agranda como un resorte vivo
la
quiero porque a veces pienso que soy yo mismo
y
a veces cuando va de visita con amigas
o
la saluda aquel muchacho que la quiere aún
o todavía
lo mismo da
yo
me descarno me rasguño me deshueso
y
eso que pienso a veces
eso
de que yo soy ella y ella yo conmigo
lo
confirmo.
Rogelio Guedea (1974-). Poeta,
novelista y traductor originario de Colima.
Licenciado
en Derecho por la Universidad de Colima y Doctor en Letras por la Universidad
de Córdoba, España, fue becario del
Fondo para la Cultura y las Artes y director de la colección de poesía El pez
de fuego.
Actualmente
es columnista de varios periódicos mexicanos y profesor de la Universidad de
Otago en Nueva Zelanda.
Ha
recibido premios con las obras "Mientras olvido" Premio Internacional
de Poesía Rosalía de Castro
en
2001; "Razón de mundo" Premio Nacional de Poesía Amado Nervo en 2004;
"Fragmento" Premio Nacional de Poesía Sonora en 2005, y "Kora" Premio
Adonáis en 2008.
Como
antólogo ha publicado Los decimonónicos, antología poética colimense del siglo
XIX; Árbol de variada luz, antología de
poesía mexicana 1992-2002 y A contraluz, poéticas 2005.
En
el año 2009 obtuvo el Premio Memorial
Silverio Cañada por su novela Conducir
un tráiler.
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