A diferencia de otros años en los que sí acudieron, esta vez no asistió el empresario Carlos Slim.
Norberto Rivera fue el encargado de dar la bendición a los alimentos; "jabalí", y había de beber de todo tipo, como en botica; tequila, whisky y ron.
Políticos,
los protagonistas en el cumpleaños de Chedraoui
Nota de Imelda García @imegarcia
ADN, Enero
18, 20142;
Actores
políticos del país se dieron cita, como cada año, en la celebración del
cumpleaños de monseñor Antonio Chedraoui, arzobispo de la Iglesia Ortodoxa para
México, Venezuela, Centroamérica y El Caribe.
La
celebración reunió a gobernadores, secretarios, funcionarios y empresarios que
arribaron a la zona conocida como Bosque Real en Huixquilucan, Estado de
México, para participar en el evento que se ha convertido en una de las
“pasarelas políticas” más importantes del año.
Primero,
una misa oficiada por el propio arzobispo Chedraoui en la catedral de San Pedro
y San Pablo, templo del que él mismo dirigió la construcción.
Pocas
figuras políticas arribaron a la ceremonia religiosa. Miguel Torruco,
secretario de Turismo del Distrito Federal, fue de los primeros en llegar; le
siguió Luis Castro, presidente del Partido Nueva Alianza.
A
media ceremonia religiosa hizo su arribo Marta Sahagún, esposa del expresidente
Vicente Fox, quien se sentó en las filas reservadas para los invitados
especiales y desde ahí siguió la ceremonia.
"El
arzobispo es mi amigo y venimos aquí a desearle muchas felicidades por su
cumpleaños", dijo Sahagún a su arribo. Al final de la misa, el propio
arzobispo Chedraoui le agradeció haber acudido a su celebración.
Durante
toda la misa no cesó el sonido de los helicópteros que, a algunos metros del
lugar, llegaban para dejar a algunos invitados que prefirieron llegar por aire
y no por tierra al lugar.
'LA
PASARELA'
A
unos metros de la catedral, una carpa aguardaba ya a los invitados de Chedraoui
para la comida. En el lugar, 300 mesas dispuestas para que 3,000 invitados
compartieran el pan y la sal con el festejado.
Al
lugar llegaron los gobernadores del Estado de México, Eruviel Ávila; de
Chiapas, Manuel Velasco; de Quintana Roo, Roberto Borge; de Hidalgo, Francisco
Olvera; y el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera.
También
estuvieron algunos miembros del gabinete presidencial: Juan José Guerra,
secretario de Medio Ambiente; Alfonso Navarrete, de Trabajo; y Enrique
Martínez, de Agricultura.
Brillaron
por su presencia los políticos priistas y no hubo panistas que acompañaran al
jerarca de la Iglesia Ortodoxa, como hicieran otros años.
Las
ausencias se notaron. A diferencia de otros años en los que sí acudieron para
el cumpleaños 82 de monseñor Chedraoui, en esta ocasión no asistieron a la
celebración del natalicio del religioso el empresario Carlos Slim o Raúl
Salinas de Gortari.
Sin
embargo, los abrazos entre los políticos que sí acudieron no se hicieron
esperar. El más prolongado fue el de Eruviel Ávila con Manuel Velasco; desde
que se encontraron en la mesa principal, ambos gobernadores estuvieron
platicando varios minutos de una forma muy cercana.
Más
tarde, Eruviel se quedaría rodeado de Chedraoui y de Norberto Rivera Carrera,
arzobispo primado de México.
La
mesa principal se conformaba de más de 50 lugares. Al centro, monseñor
Chedraoui, Eruviel Ávila y Norberto Rivera.
Manuel
Velasco fue colocado algunos lugares más lejos del sitio principal. Siete
sillas lo separaban del lugar principal de la mesa de honor.
A
la izquierda de Velasco, Alfonso Navarrete Prida comía con vehemencia, mientras
que a su izquierda Roberto Borge hacia lo propio.
Del
otro lado, apenas a dos sillas de Chedraoui, Miguel Ángel Mancera trataba de
entablar conversación con Hilarion Alfeyed, secretario de Relaciones Exteriores
de la Iglesia rusa, enviado especial de la Iglesia Ortodoxa para participar en
la celebración, pero que no habla español.
Mancera,
llegó en un helicóptero del Distrito Federal. En otra aeronave llegó también
Roberto Borge.
También
se dieron cita, Alfredo del Mazo, director de Banobras, y Daniel Karam,
exdirector del IMSS.
Más
tarde llegó también Aristóteles Sandoval, gobernador de Jalisco.
El
encargado de llevar el saludo del presidente Enrique Peña Nieto al festejado
fue Juan José Guerra Abud, secretario del Medio Ambiente, quien celebró el
poder de convocatoria del arzobispo.
"Como
parte de la comunidad libanesa -mis cuatro abuelos vinieron del Líbano-, sin
duda es un gusto ver cómo don Antonio ejerce un gran liderazgo moral no sólo
entre la comunidad libanesa, sino entre muchas comunidades de nuestro querido
país, México", dijo Guerra.
Una
vez que terminaron los saludos y mensajes, el cardenal Norberto Rivera fue el
encargado de dar la bendición a los alimentos.
"Damos
gracias a Dios por el establecimiento de las Iglesias orientales en nuestro
país, porque eso nos permite rezar en dos frentes", comentó.
"Al
ataque", gritó después de eso monseñor Chedraoui, para dar paso a que
todos consumieran sus alimentos.
Así,
en cada mesa dispuesta para 10 personas se colocaron platillos típicos de la
cocina libanesa y el plato principal, como ya es tradición en la celebración de
los cumpleaños del arzobispo, fue jabalí, que se servía en grandes platos de
barro de donde los comensales tomaban y compartían la comida.
Los
meseros iban de un lado a otro con bebidas de todo tipo: tequila, whisky y ron,
los más socorridos; mientras, una cantante de ópera amenizaba el momento de
tomar los alimentos.
Muy
pronto los gobernadores comenzaron a despedirse no sólo de monseñor Chedraoui,
sino de cada uno de los invitados a la mesa principal. Cada despedida era un
camino de ida y vuelta.
Tan
pronto como terminaron de comer, los invitados comenzaron a abandonar el lugar
y para las 18:00 horas ya se encontraba prácticamente vacío.
El
presidente Enrique Peña Nieto no acudió al evento a pesar de que le fue enviada
la invitación formal.
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