Los
hechos de Nochixtlán ¿pero qué necesidad?/ Fred Álvarez
La
mañana del domingo 19 de junio de 2016, 800 policías federales y estatales se
enfrentaron contra miembros y simpatizantes de la Coordinadora de Trabajadores
de la Educación (CNTE), luego de un intento de liberar un bloqueo en
Nochixtlán, Oaxaca. El balance preliminar fue de ocho personas muertas —siete
de ellos con armas de fuego—, y un centenar de lesionados, muchos de ellos
policías federales y locales.
¡Ninguno
de los muertos era profesor!
De
los más de 20 detenidos cuatro de ellos eran docentes.
La
primera información fue contradictoria, sobretodo de lo que había ocurrido, y
cómo había ocurrido.
Los
medios mostraron imágenes del uso de armas de fuego por parte de las fuerzas
del orden, la imagen contundente de la agencia AP le dio la vuelta al mundo.
Aunque
Raymundo Riva Palacio señala que la primera fotografía de federales armados la
tomó Jorge Arturo Pérez, de la agencia Cuartoscuro, entre las 10:15 y las 10:30
horas.
¡La
información se viralizó en las redes sociales!
Por
la tarde del domingo, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) difundió un
comunicado oficial donde informan cómo
ocurrieron los hechos. Dicen que la Policía Federal que participó en el
operativo “no se encontraba armada ni portaba tolete, y que hasta este momento
se tiene un saldo de 21 policías federales heridos, tres de ellos por arma de
fuego”.
Recuerdan
que “las agresiones por arma de fuego registradas provinieron de personas
ajenas a los bloqueos, quienes realizaron disparos contra la población y los
policías federales”.
Y
solicitaron “al gobierno del estado que se inicien las investigaciones
correspondientes para deslindar responsabilidades...”
No
se habló entonces de ninguna persona fallecida, ni de detenidos.
El
comunicado de la CNS contaminó todos los hechos.
Por
eso la noche del domingo, el gobierno federal y el de Oaxaca informaron que el
saldo de los enfrentamientos era de 6 personas fallecidas, 41 policías
federales heridos, y 53 civiles lesionados, además de 21 detenidos. Se confirmó
que la Policía Federal sí había utilizado armas, de acuerdo con su versión para
responder a agresiones.
Pasadas
las 13 horas del lunes 20 de junio, el Presidente de la Republica emitió una
serie de tuits lamentando los hechos, y a través de la red dio instrucciones
para castigar a los responsables, sobre todo para que en el marco de la ley, se
tomen las acciones necesarias para solucionar el conflicto.
¡Muy
lamentables los hechos!
El
martes 21 de junio un primer informe, a través de un comunicado de prensa, dice
que realizaron una serie de acciones, entre ellas:
“a)
Participar como observadores en las diligencias de las necropsias de 6
cadáveres.
b)
(proporcionar) atención y contención psicológica a familiares de 4 personas
fallecidas.
El
Ombudsman Nacional dijo que solicitará a las autoridades estatales y federales
sus informes de cómo ocurrieron los hechos, e identificar si hubo violaciones a
los derechos humanos y qué tipo de violaciones, sea de autoridades federales o
estatales".
La
clave para resolver conflictos no es el uso de la fuerza, sino del diálogo y
más diálogo. Se requiere con urgencia encontrar una salida inmediata al
conflicto por el que se generaron los hechos, tiene que ver con la reforma
educativa.
Por
ello, qué bueno que gobernación convocó a una mesa de diálogo con la disidencia
magisterial.
La
reunión ocurrió la noche del miércoles 23 de junio y duró 5 horas, hubo
resultados.
Por
la noche, el secretario Osorio dio una conferencia de prensa, después de la
reunión con la CNTE, y dijo que el encuentro fue “satisfactorio para las
partes, en el que nos pudimos escuchar, y por supuesto, nosotros a todos ellos.
Por eso es que se prolongó esta reunión.
El
aspecto fundamental fue avanzar en la solución del conflicto, en ver las
dificultades que se han presentado, y cómo poder lograr resolverlas.”
Se
acordó una nueva reunión para este 27 de junio a las seis de la tarde. Ahí
habrá una agenda para resolver cada una de las peticiones.
Qué
bueno que en este asunto, el cual lleva varios meses, haya intervención
política y no por parte de burócratas.
Qué
malo que se haga después de muchos bloqueos hasta que hubo muertos.
Los
hechos tendrán que esclarecerse y los responsables deberán recibir la sanción
que corresponda conforme a derecho, y darle una salida política al tema de los
profesores.
Por
cierto, todo mundo nos preguntamos ¿quién diablos disparó primero y de qué tipo
de armas salieron las balas?
¿Quién
diablos está detrás de esto?
Esperemos
que no hablen las armas, a nadie le conviene.
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