Nada es imposible/FRANCESC MIRALLES
El País Semanal, 29/01/2012
El ser humano necesita agarrarse a verdades absolutas, encontrar
seguridades en un mundo siempre cambiante. En estas creencias monolíticas se
basan las grandes religiones, que no permiten cuestionamiento alguno de su
dogma, pero también la ciencia y la economía han padecido el mismo mal.
Pensamos que ciertos pilares jamás se moverán de sitio... hasta que el edificio
entero se viene abajo y nos damos cuenta de que la realidad es algo muy
distinto de lo que habíamos creído.En este artículo veremos cómo la verdad -cualquier verdad- es provisional
como la vida misma. Es únicamente un punto de apoyo que nos sirve hasta que una
verdad nueva sustituya a la vieja. También en nuestra vida personal nos
aferramos a creencias limitadoras como aquellos que, hace unos siglos,
afirmaban que la Tierra era plana. Antes de nada, hagamos un poco de historia
de las verdades provisionales de la ciencia.