El caso de Huitzilac/Fred Álvarez
Código Topo # 49 de Excélsior, 1 de octubre de 2012
El caso Tres Marías pudo causar un grave daño a las relaciones diplomáticas de México y EU, pero lo que se creyó una “emboscada”, quedó calificado como una “confusión”
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La mañana del viernes 24 de agosto de 2012, Jesús Hoods Garner y Stan Dove Boss–presuntos agentes de la CIA, así como el capitán Fabian Molina Yera, de la Secretaria de Marina, fueron aparentemente confundidos con delincuentes por policías federales por lo que fueron perseguidos y recibieron múltiples impactos de armas de fuego.
Las balas de los rifles de asalto que se incrustaron en el Toyota Land Cruiser de ocho cilindros, matrícula diplomática BCM-242, penetraron el blindaje número siete e hirieron a los estadunidenses; el marino tuvo sólo leves heridas, fueron atendidos en un hospital de Cuernavaca.
En un radio de 200 metros del sitio donde quedó la camioneta se contabilizaron al menos 40 casquillos percutidos de calibres 7.62 y 5.65, de los que usan los rifles de asalto AK-47, y AR-15
Pudieron salvar la vida gracias a que iban en un vehículo blindado y a la intervención oportuna de otros policías federales que controlaron la tensa situación, una vez que hablaron con los ocupantes e informarles que eran empleados de la embajada de Estados Unidos y un empleado de la Marina, fue entonces cuando un agente gritó a sus compañeros una señal en clave. Entonces dejaron de encañonarlos.
Después llegaron al lugar un grupo de marinos y elementos de la Secretaria de la Defensa Nacional, quienes de acordonar la zona.
Según el periódico Reforma la camioneta diplomática recibió 150 impactos de bala y por lo menos en 20 ocasiones fueron detonadas las armas que utilizaron los agresores. Participaron en los hechos 20 personas y ocho vehículos.
No me quiero imaginar que hubiera sucedido si dichos agentes diplomáticos hubieran sido liquidados. La presión hubiera sido de mucho peso, sobre todo en estos momentos de transición: recordemos la presión diplomática que tuvo México en 1985 por la tortura y asesinato de Enrique S. Camarena agente de la DEA, infiltrado en los carteles de la droga.
El asesinato fue atribuido a Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, los capos de aquella época, quienes supuestamente tomaron represalia contra Camarena por el hallazgo y desmantelamiento del rancho El Búfalo, en Chihuahua, donde se registró el mayor aseguramiento de mariguana en la historia, que ascendió a más de seis mil toneladas. Por cierto, fue acusado de estar involucrado en el crimen Rubén Zuno Arce, cuñado del ex presidente Echeverría y recientemente fallecido en una cárcel de EU.
Washington cuida muy bien a sus agentes en el exterior y más si son miembros de la Agencia central de Inteligencia (CIA); tanto que ni siquiera declararon ante la autoridad ministerial, una vez atendidos de sus heridas se fueron a los EU donde se encuentran sanos y salvos.
II. ¿Qué pasó en Huitzilac?
¿Realmente hubo una confusión por persecución del delito?
O ¿fue una emboscada como afirmó en un principio –y no ha cambiado la versión- la oficina de la embajada de EU en México el 24 de agosto?
¿Hubo negligencia o falta de capacitación de nuestros policías?
¿O hay complicidad con el crimen organizado como se ha especulado en algunos medios?
¿O son simples errores, como lo dijo el almirante secretario?
¿Dónde quedo el protocolo del uso de la Fuerza obligatorio para todos los policías federales? ¿Por qué iba de civil el capitán de Corbeta?
¿El uso excesivo de la fuerza se debió a que los agentes de la policía federal pensaban que el vehículo que perseguían era de secuestradores?
¿No vieron las placas diplómaticas?
Si fue así, ¿dónde quedaron los cursos de policía científica que han recibido?
Es evidente que los agentes federales han pasado los duros exámenes de control de confianza, pero no han leído, o no saben cuándo, cómo y en que momento se debe usar la fuerza tal y como lo marcan los protocolos establecidos.
Lo que es una realidad “es que no pueden admitirse esos hechos y se están investigando absolutamente y con todo rigor”, dijo categóricamente Felipe Calderón ante el embajador de EU, Anthony Wayne.
Todo apunta por la información hasta hoy conocida que fue un “incidente” y no una emboscada como se dijo en el comunicado de la oficina del embajador Wayne.
III ¿Son agentes de la CIA, DEA, del Pentágono?
Fue una de las preguntas clave.
Hay muchas más sin respuesta claras. Por ejemplo: ¿Qué hacían Jesús Hoods Garner y Stan Dove Boss en México?
Algunos medios hicieron una revisión en la página web de la cancillería y se detecto que ninguno de los dos está registrado como personal diplomático estadunidense acreditado en México; sin embargo, el Departamento de Estado informó que ambos trabajan en su embajada en el DF.
No está claro si sólo capacitaban a marinos en el campo conocido como “El Capulín”, o “sólo iban en calidad de visita de los cursos de adiestramiento que ahí se imparten”, como lo dijo un comunicado de la Marina. Hay confusión y a veces contradicción en los comunicados.
En tanto, Scott Stewart, vicepresidente de la firma de inteligencia Stratfor ha dicho que los agentes eran de la CIA y que descarta que haya sido un accidente: “sobre todo si se confirman los reportes de que los agentes federales utilizaron rifles AK- 47, que no es su arma de rutina. Eso a mí me dice que no era un trabajo regular".
En el mismo sentido reporteó Jesús Aranda (La Jornada, 28 de agosto de 2012). Son de la CIA “confirmaron fuentes oficiales cercanas a la investigación, las cuales agregaron que el ataque tuvo lugar después de que los agresores vieron de cerca a los ocupantes del vehículo diplomático.”
¿Son agentes de la CIA? le preguntan reporteros al almirante secretario Francisco Saynez y responde que él sepa, no. “Lo que tenemos registrado es que son funcionarios de la embajada que estaban en observación.
“De la CIA no puedo asegurar, porque hay veces en que unos dicen que son de la DEA o de la CIA, (pero agrega para salir de dudas) será cuestión de preguntar a la propia embajada.”
La secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinoza, les dijo a los senadores que no les puede dar detalles sobre el personal acreditado de ninguna embajada en México. “Es, por razones obvias y razones de seguridad, imposible que yo pueda compartir con ustedes esta información” Sin embargo, la canciller agregó que esa información si puede ser compartida con legisladores integrantes de la Comisión Bicameral de Seguridad nacional, que todavía no se instala.
Ahora bien, no debe espantarnos que sean agentes de la CIA.
Una vez el director de las 16 agencias de investigación de EU, John D. Negroponte dijo que tenían en el mundo a 100 mil agentes infiltrados.
Hace un año- 7 de agosto- un reportaje del periódico The New York Times señaló que un grupo de menos de 24 elementos de la CIA, del Pentágono y de la DEA trabajaban dentro de una base militar en el norte de México ayudando al gobierno mexicano en la recolección de inteligencia y en el diseño de operaciones antinarco”.
Entonces en un comunicado difundido por la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional, que entonces encabezaba Alejandro Poiré, aseguró que el personal extranjero que labora con México en materia de combate al narcotráfico “no lleva a cabo ninguna labor operativa ni porta armas”.
Aunque Poiré no hizo referencia a lo publicado por el Times, el comunicado aclara que “por consideraciones de seguridad nacional, el gobierno federal no se pronunciará sobre la veracidad o el contexto de la información publicada sobre estos esfuerzos (de cooperación antinarco)”.
Po cierto, por alguna razón -que se desconoce, aunque la procuradora Marisela Morales lo justifique-, los diplomáticos no declararon ante el Ministerio Público Federal como lo mandata la ley. Hoy, ambos se encuentran sanos y salvos en territorio estadunidense.
De hecho, ésa fue una de las preguntas que le hizo la senadora Ninfa Salinas Sada (PVEM) a la canciller Patricia Espinoza en su comparecencia en el Senado, el jueves 13 de septiembre.
La respuesta de la canciller fue: “Las investigaciones están a cargo de la Procuraduría General de la República. Nosotros no tenemos los detalles de estas investigaciones.
Sé que en unos días estarán por aquí mis colegas los miembros del gabinete de seguridad, y me imagino que esa será una oportunidad para abordar este tema.”
En efecto, la investigación está a cargo de la PGR que inicio la averiguación previa AP/PGR/MOR/TV/611/1/2012; también colabora en la investigación la Unidad de asuntos internos de la Policía Federal, y la embajada de EU en México también está metida: “La Embajada coopera de manera estrecha con las autoridades mexicanas y asistirá en todo lo posible”, reza el comunicado del 24 de agosto.
¡Y por encima de ellos el periodismo de investigación está haciendo su trabajo!
IV No hay todavía ninguna conclusión, pero:
Hay 12 policías federales que se encuentran arraigados por 40 días. Están acusados por los delitos de homicidio en grado de tentativa, daño en propiedad ajena, lesiones, abuso de autoridad y uso indebido de la función pública, pero a partir de las investigaciones se determinará si existen otras responsabilidades.
No hay motivos para el arraigo, a menos que se encuentren elementos de vínculos con la delincuencia organizada.
Llama la atención que una de las primeras declaraciones públicas fueran del ombudsman nacional, Raúl Plascencia, quien dijo que el ataque pudo tratarse de una “acción orquestada” en que los oficiales cometieron excesos.
Es evidente que no hay justificación alguna para ese tipo de usos excesivos de la fuerza. Sólo basta leer el protocolo del acuerdo 04/2012, publicado en el DOF el 24 de abril de 2012, en el que se señalan claramente las bases normativas generales para el uso de la fuerza pública por las instituciones policiales, por lo que todo apunta pues –de acuerdo a los comunicados oficiales- a que se trató de una confusión de un “incidente” que no “emboscada” y que –eso sí- en dado caso de que los policías hayan hecho uso excesivo de la fuerza serán castigados.
Señala un comunicado de SSP: “en caso de comprobarse el uso excesivo de la fuerza, la falta de seguimiento en los protocolos de actuación o complicidad con el crimen organizado, se aplicarán las medidas y sanciones correspondientes.
No se tolerará ninguna acción contraria a ley y a los principios que rigen nuestra institución.”; Y aunque varios medios publicaron que se trató de una agresión directa, de una emboscada como fueron las primeras versiones, las cosas han ido tomando su lugar.
El domingo 2 de septiembre – 10 días después de los lamentables hechos-, Luis Cárdenas Palomino, jefe de la División de Seguridad Regional de SSP, emitió un posicionamiento, y ante una pregunta expresa en una conferencia de prensa aprovechó y dio la versión de la equivocación y del uso excesivo de la fuerza.
Dijo: “En el caso Tres Marías, Octavio, tengo que decir, que es una investigación que está llevando la PGR, que lo que nosotros tenemos acreditado es que es lo que hacían los elementos en Tres Marías; que era una investigación de secuestro, que llevaban que un secuestro se había perpetrado horas antes, a que los muchachos estuvieran allá a las ocho de la mañana (la hora que ocurrieron los hechos) y nosotros estamos acreditando qué es lo que hacían ahí y qué fue lo que sucedió, y estamos en espera de lo que diga la PGR, que es la que actualmente lleva las investigaciones.”
No dio más detalles. Después, la SSP emitió un comunicado en los términos de la declaración.
Ese mismo domingo, el almirante secretario Francisco Saynez fue entrevistado al término de la ceremonia del Sexto Informe de Gobierno del presidente Calderón — ¿Hubo errores?– le preguntaron.
—Pues tal vez sí hubo errores, esperemos que nada (grave), por supuesto; entiendo que hay errores, pero nada malintencionado; sin embargo, se deben revisar los procedimientos y ver en qué se falló y castigar, por supuesto, claro que sí (castigar esos errores).
— ¿Los confundieron? ¿Dicen que (los federales) estaban investigando un secuestro?
—Probablemente estuvieran investigando un secuestro. Pienso que todo eso que dice oficialmente la Policía Federal debe ser cierto, pero tiene que comprobarse en los hechos, en los testimonios que haya y en el lugar donde sucedieron esos hechos. La investigación está a cargo de la PGR.
Dos días después, el 4 de septiembre, le preguntan a Alejandro Poiré, secretario de Gobernación sobre el caso, y responde en el mismo sentido:
“Creo que más allá de las distintas versiones periodísticas, preliminares que se estén dando respecto a los hechos (…) es indispensable que sea la propia investigación de la PGR la que nos lleve a las conclusiones respecto a lo que ocurrió esa mañana (…)
“Y tanto las autoridades de la propia SSP como todos, estamos interesados y comprometidos a que si existió alguna violación normativa, alguna violación a los mecanismos y protocolos de uso de la fuerza o por supuesto alguna ley, ésta sea sancionada y castigada con la severidad que corresponde, porque ésa es la garantía de que cualquier irregularidad será sancionada, no solamente en este caso, sino en cualquier caso que pudiese llegar a presentarse.”
El lunes 10 de septiembre se hizo una reconstrucción detallada de los hechos. Participaron más de una docena de agentes estadunidenses y mexicanos; entre ellos peritos de la PGR y del gobierno de EU. Incluso se bloqueó el acceso a la comunidad Fierro del Toro.
El 17 de septiembre la comisionada de la policía federal, Maribel Cervantes Guerrero, informó que 51 elementos federales han sido citados a comparecer en el caso, y que ellos (la SSP) han entregado la documentación que acredita las investigaciones relacionadas con el secuestro de Salvador Vidal Flores Pérez, registrado en esa misma zona, horas antes de los hechos.
En efecto, el testimonio de Vidal Flores, secuestrado el jueves 23 de agosto en Tres Marías, desmontó la versión inicial de la emboscada y el intento de homicidio contra los agentes diplomáticos.
Al parecer Vidal Flores puso una denuncia ministerial y dio las señas del vehículo utilizado para el plagio. Se trata de una camioneta azul marino que coincidía con el vehículo en el que viajaban los agentes diplomáticos y el capitán de la Marina.
Un día después, el 18 de septiembre se celebró en Washington DC la Cuarta Reunión del Grupo de Alto Nivel de la Iniciativa Mérida México-EU.
Dicho Grupo es la instancia de seguimiento a nivel gabinete que se reúne desde 2008.
Encabezaron las delegaciones la canciller Patricia Espinoza y la secretaria de Estado Hilary Clinton. El cónclave permitió hacer un balance del estado que guarda la instrumentación de la Iniciativa Mérida y la cooperación contra la delincuencia transnacional en su conjunto, desarrollada en torno a las cuatro áreas estratégicas acordadas por los gobiernos de México y EU.
Al término de la reunión se emitió una declaración conjunta, y después se convocó a los medios de comunicación.
En el marco de la rueda de prensa alguien preguntó por los hechos de Huitzilac.
La respuesta en español de la canciller Espinoza fue “desde un primer momento el gobierno de México ha señalado que lamenta profundamente ese incidente (incident) y al mismo tiempo reitera la disposición y el interés del gobierno de México de continuar con una investigación exhaustiva.”
Señaló que esa investigación debe "aclarar los hechos" y "ejecutar las sanciones que sean aplicables a aquellos que sean encontrados responsables de acciones indebidas o fuera de la ley".
En su turno, Hilary Clinton sostuvo: (en inglés) “ And we regret any incident of violence wherever it occurs – inside Mexico…” (Lamentamos cualquier incidente de violencia en cualquier lado que ocurra, dentro de México, o en las fronteras, o dentro de nuestro propio país. Continuaremos trabajando de cerca para investigar estos incidentes trágicos y tratar de llegar a conclusiones sobre quiénes son los responsables y se les presente ante el sistema de justicia para que respondan a sus actos).
Así las cosas. Esperemos que dice la PGR. Es evidente que el tema se abordó en la reunión del grupo de alto nivel en Washington DC.
Quizás quienes si tengan información privilegiada sean los legisladores integrantes de la Comisión Bicamaral de Seguridad nacional que se concretará en unos días. Hay que estar pendientes de lo que dice el periodismo de investigación.
Lo que es evidente es que la Armada de México se ha ganado la confianza de las agencias norteamericanas, incluso participaron “en los ejercicios navales Partnership of the Americas 2012”, que se llevaron a cabo del 4 al 16 de septiembre de 2012, en la Base Naval de Mayport y el Campo Blanding, en Florida (DOF, 17 de septiembre). Asimismo –aunque no se dice públicamente- percibo que Washington ha perdido la confianza en la policía federal; fue curioso que a pocos días de los lamentables hechos se anunciará la cancelación de un proyecto con recursos de iniciativa Mérida.
*
Los comunicados oficiales:
1.-COMUNICADO
Fechado el 24 de agosto y emitido por las secretarias de Marina y de Seguridad Pública, informan:
“A las 08:00 horas, un vehículo diplomático de la Embajada de Estados Unidos de América recibió múltiples impactos de bala en el tramo carretero Tres Marías- Huitzilac de parte de personal de la Policía Federal que se encontraba en la zona realizando labores de persecución del delito.
“Los hechos se registraron cuando dos funcionarios de la Embajada de Estados Unidos de América, en compañía de un elemento de la Secretaría de Marina, que se dirigían a una visita a instalaciones de la Armada de México en el cerro de El Capulín, municipio de Xalatlaco, fueron alcanzados, al ingresar en un camino de terracería aproximadamente a cuatro km. De la carretera libre México-Cuernavaca, por un vehículo cuyos tripulantes les mostraron armas de fuego por lo que el conductor del vehículo diplomático, maniobró para evadirse y reingresar a la carretera, momento en el cual los tripulantes del vehículo agresor abrieron fuego sobre el vehículo diplomático.
“Momentos después otros tres vehículos se sumaron a la persecución y realizaron disparos con armas de fuego contra el vehículo de la embajada de EU.
“El elemento de la SEMAR a bordo del vehículo agredido, alertó al personal de la Armada de México que se encontraba en las instalaciones de El Capulín para prestar apoyo, llegando éstos una vez que había concluido la agresión, acordonando el sitio. Al lugar se dieron cita también elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Policía Federal.
“El personal de la Policía Federal que participó en estos hechos comparece ante el Agente del Ministerio Público de la Federación, para esclarecer los hechos y, en su caso, deslindar responsabilidades.
“Hasta el momento se reportan las dos personas de la embajada de EU, quienes fueron trasladados bajo el cuidado y resguardo de la Policía Federal a un centro hospitalario, con heridas que no ponen en peligro su vida. El elemento de la Secretaría de Marina se encuentra con contusiones leves.
“Se ha establecido comunicación permanente con la embajada de los Estados Unidos en México, con el objetivo de brindar las facilidades logísticas requeridas y el apoyo necesario al personal herido.”
2. COMUNICADO:
Después hubo un comunicado de la PGR Boletín 291/12-, que dice: “En relación con el incidente registrado en el kilómetro 50+500 de la carretera federal México-Cuernavaca en las inmediaciones de Huitzilac, Morelos, donde dos funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en México y un elemento de la Secretaría de Marina Armada de México, resultaron heridos cuando el vehículo en que viajaban recibió múltiples impactos de bala, se informa:
“El Ministerio Público federal acompañado de peritos en balística, criminalística de campo, fotografía forense, dactiloscopia, ingeniería y arquitectura, continúa las diligencias para esclarecer los hechos.
“Entre estas diligencias, se encuentran las declaraciones de 12 agentes de la Policía Federal puestos a disposición de la autoridad ministerial, pertenecientes a la Unidad Operativa de Seguridad Preventiva (Estación Tlalpan) de esa corporación y de varios testigos de los hechos.”
3.- COMUNICADO DEL EMBAJADOR DE EU EN MÉXICO, 24 DE AGOSTO
“Esta mañana, dos miembros del personal del gobierno de Estados Unidos y un capitán de la Marina Armada de México se dirigían en un vehículo de la misión diplomática hacia una instalación de entrenamiento cuando fueron emboscados por un grupo de individuos.
“El vehículo intentó escapar, fue perseguido y sufrió daños considerables. Los pasajeros solicitaron la ayuda de las fuerzas armadas de México, las cuales respondieron. Se trasladó del lugar a los dos pasajeros estadunidenses heridos, se les atendió médicamente y su condición es estable. El capitán de la Marina Armada de México no sufrió lesiones serias.
“El gobierno de México ha reconocido que miembros de la Policía Federal estuvieron involucrados y dispararon contra el vehículo de la embajada de Estados Unidos.
“El gobierno mexicano ha iniciado una investigación y detenido a miembros de la Policía Federal involucrados.
“El gobierno de México ha indicado que se realizará una investigación completa y exhaustiva de este incidente.
La embajada ha estado cooperando de manera estrecha con las autoridades mexicanas y asistirá en todo lo posible.”
4.-COMUNICADO DE LA MARINA:
169/2012, fechado el 28 de agosto, sólo hace referencia para precisar que el capitán de la Marina no conducía la camioneta en la que viajaban dos diplomáticos estadounidenses como lo publicaron los medios:
“En relación a la información difundida sobre el incidente del día viernes 24 de agosto de 2012 en inmediaciones de Tres Marías, Morelos, en el que un vehículo de la embajada de Estados Unidos fue agredido, la Secretaría de Marina desmiente categóricamente que el capitán de la Armada de México fuese conduciendo dicha unidad, toda vez que el elemento de esta institución tenía la función de enlace y traductor, por lo que requería operar equipos de comunicación.
“• Con base en las propias declaraciones del Capitán de la Armada de México quien viajaba con dos ciudadanos norteamericanos que ocupaban los asientos delanteros del vehículo, se puntualiza lo siguiente:
“• Los ciudadanos norteamericanos iban en calidad de visita de los cursos de adiestramiento que ahí se imparten.
“• El capitán de la Armada de México no conducía el vehículo diplomático. Al momento de la agresión se encontraba en el asiento trasero pidiendo auxilio por su teléfono celular.
“•La unidad fue conducida en todo momento por uno de los ciudadanos norteamericanos.
“•Durante el ataque, los impactos de arma de fuego lograron romper el blindaje, causando asimismo las heridas a los tripulantes norteamericanos, quienes viajaban en la parte delantera del vehículo.
“Lo anterior, a fin de contribuir a mantener informada a la opinión pública, toda vez que serán las autoridades competentes las que determinen el resultado de las investigaciones.”
5.-DE LA SSP
El 17 de septiembre se emite un nuevo comunicado de la SSP: Boletín de Prensa No. 348:
“Con relación a las acciones que la Policía Federal realiza en apoyo a las investigaciones de la Procuraduría General de la República tras los hechos ocurridos el pasado 24 de agosto en el tramo carretero Tres Marías- Huitzilac, Morelos, esta institución ha entregado la documentación que acredita las investigaciones relacionadas con el secuestro del señor Salvador Vidal Flores Pérez, funcionario del Instituto Nacional de Antropología e Historia, registrado en esa misma zona, horas antes de los hechos.
“Dicha documentación incluye la solicitud de apoyo a la Policía Federal, la denuncia ministerial presentada ante la Procuraduría General de Justicia del estado de Morelos, así como las órdenes de investigación a los oficiales de la Estación de Tlalpan de la Policía Federal.
“Desde el inicio de la indagatoria la Policía Federal ha recibido un total de 21 requerimientos diversos de la PGR, los cuales se han cumplido en su totalidad en tiempo y forma.
“El día de los hechos la Policía Federal auxilió a las personas heridas trasladándolas a un hospital a la ciudad de Cuernavaca, Morelos, a fin de que recibieran atención médica oportuna y los 12 elementos presuntamente involucrados fueron puestos a disposición de inmediato.
“En total, 51 elementos federales han sido citados a comparecer, los cuales se han presentado a declarar puntualmente en las fechas que fueron requeridos, incluidos los 12 efectivos que se encuentran actualmente bajo arraigo.
“Con ello, se acredita el compromiso indeclinable de la Policía Federal por esclarecer puntualmente estos hechos y coadyuvar con una pronta y expedita acción del Ministerio Público de la Federación en el deslinde de responsabilidades.
“En caso de comprobarse el uso excesivo de la fuerza, la falta de seguimiento en los protocolos de actuación o complicidad con el crimen organizado, se aplicarán las medidas y sanciones correspondientes.
Es importante enfatizar, que en este caso en particular, como en otros casos en los que se han visto relacionados efectivos de la Policía Federal en la comisión de alguna conducta presuntamente delictiva, siempre ha existido el compromiso permanente de sancionar al elemento, o en su caso, ponerlo a disposición de las autoridades ministeriales competentes.
“Para mayor precisión, de diciembre de 2006 a la fecha, han sido puestos a disposición de las autoridades ministeriales por presuntos actos delictivos tanto del fuero común como del federal, un total de 459 elementos para el deslinde de responsabilidades y 50 han recibido sentencia condenatoria.
“Lo anterior forma parte del compromiso permanente para consolidar una Policía Federal que haga realidad los principios constitucionales de legalidad, honradez, eficiencia, profesionalismo y respeto a los derechos humanos. Con esto se reitera el compromiso de la Secretaría de Seguridad Pública federal de proteger y servir a la comunidad.”
El caso Tres Marías pudo causar un grave daño a las relaciones diplomáticas de México y EU, pero lo que se creyó una “emboscada”, quedó calificado como una “confusión”
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La mañana del viernes 24 de agosto de 2012, Jesús Hoods Garner y Stan Dove Boss–presuntos agentes de la CIA, así como el capitán Fabian Molina Yera, de la Secretaria de Marina, fueron aparentemente confundidos con delincuentes por policías federales por lo que fueron perseguidos y recibieron múltiples impactos de armas de fuego.
Las balas de los rifles de asalto que se incrustaron en el Toyota Land Cruiser de ocho cilindros, matrícula diplomática BCM-242, penetraron el blindaje número siete e hirieron a los estadunidenses; el marino tuvo sólo leves heridas, fueron atendidos en un hospital de Cuernavaca.
En un radio de 200 metros del sitio donde quedó la camioneta se contabilizaron al menos 40 casquillos percutidos de calibres 7.62 y 5.65, de los que usan los rifles de asalto AK-47, y AR-15
Pudieron salvar la vida gracias a que iban en un vehículo blindado y a la intervención oportuna de otros policías federales que controlaron la tensa situación, una vez que hablaron con los ocupantes e informarles que eran empleados de la embajada de Estados Unidos y un empleado de la Marina, fue entonces cuando un agente gritó a sus compañeros una señal en clave. Entonces dejaron de encañonarlos.
Después llegaron al lugar un grupo de marinos y elementos de la Secretaria de la Defensa Nacional, quienes de acordonar la zona.
Según el periódico Reforma la camioneta diplomática recibió 150 impactos de bala y por lo menos en 20 ocasiones fueron detonadas las armas que utilizaron los agresores. Participaron en los hechos 20 personas y ocho vehículos.
No me quiero imaginar que hubiera sucedido si dichos agentes diplomáticos hubieran sido liquidados. La presión hubiera sido de mucho peso, sobre todo en estos momentos de transición: recordemos la presión diplomática que tuvo México en 1985 por la tortura y asesinato de Enrique S. Camarena agente de la DEA, infiltrado en los carteles de la droga.
El asesinato fue atribuido a Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, los capos de aquella época, quienes supuestamente tomaron represalia contra Camarena por el hallazgo y desmantelamiento del rancho El Búfalo, en Chihuahua, donde se registró el mayor aseguramiento de mariguana en la historia, que ascendió a más de seis mil toneladas. Por cierto, fue acusado de estar involucrado en el crimen Rubén Zuno Arce, cuñado del ex presidente Echeverría y recientemente fallecido en una cárcel de EU.
Washington cuida muy bien a sus agentes en el exterior y más si son miembros de la Agencia central de Inteligencia (CIA); tanto que ni siquiera declararon ante la autoridad ministerial, una vez atendidos de sus heridas se fueron a los EU donde se encuentran sanos y salvos.
II. ¿Qué pasó en Huitzilac?
¿Realmente hubo una confusión por persecución del delito?
O ¿fue una emboscada como afirmó en un principio –y no ha cambiado la versión- la oficina de la embajada de EU en México el 24 de agosto?
¿Hubo negligencia o falta de capacitación de nuestros policías?
¿O hay complicidad con el crimen organizado como se ha especulado en algunos medios?
¿O son simples errores, como lo dijo el almirante secretario?
¿Dónde quedo el protocolo del uso de la Fuerza obligatorio para todos los policías federales? ¿Por qué iba de civil el capitán de Corbeta?
¿El uso excesivo de la fuerza se debió a que los agentes de la policía federal pensaban que el vehículo que perseguían era de secuestradores?
¿No vieron las placas diplómaticas?
Si fue así, ¿dónde quedaron los cursos de policía científica que han recibido?
Es evidente que los agentes federales han pasado los duros exámenes de control de confianza, pero no han leído, o no saben cuándo, cómo y en que momento se debe usar la fuerza tal y como lo marcan los protocolos establecidos.
Lo que es una realidad “es que no pueden admitirse esos hechos y se están investigando absolutamente y con todo rigor”, dijo categóricamente Felipe Calderón ante el embajador de EU, Anthony Wayne.
Todo apunta por la información hasta hoy conocida que fue un “incidente” y no una emboscada como se dijo en el comunicado de la oficina del embajador Wayne.
III ¿Son agentes de la CIA, DEA, del Pentágono?
Fue una de las preguntas clave.
Hay muchas más sin respuesta claras. Por ejemplo: ¿Qué hacían Jesús Hoods Garner y Stan Dove Boss en México?
Algunos medios hicieron una revisión en la página web de la cancillería y se detecto que ninguno de los dos está registrado como personal diplomático estadunidense acreditado en México; sin embargo, el Departamento de Estado informó que ambos trabajan en su embajada en el DF.
No está claro si sólo capacitaban a marinos en el campo conocido como “El Capulín”, o “sólo iban en calidad de visita de los cursos de adiestramiento que ahí se imparten”, como lo dijo un comunicado de la Marina. Hay confusión y a veces contradicción en los comunicados.
En tanto, Scott Stewart, vicepresidente de la firma de inteligencia Stratfor ha dicho que los agentes eran de la CIA y que descarta que haya sido un accidente: “sobre todo si se confirman los reportes de que los agentes federales utilizaron rifles AK- 47, que no es su arma de rutina. Eso a mí me dice que no era un trabajo regular".
En el mismo sentido reporteó Jesús Aranda (La Jornada, 28 de agosto de 2012). Son de la CIA “confirmaron fuentes oficiales cercanas a la investigación, las cuales agregaron que el ataque tuvo lugar después de que los agresores vieron de cerca a los ocupantes del vehículo diplomático.”
¿Son agentes de la CIA? le preguntan reporteros al almirante secretario Francisco Saynez y responde que él sepa, no. “Lo que tenemos registrado es que son funcionarios de la embajada que estaban en observación.
“De la CIA no puedo asegurar, porque hay veces en que unos dicen que son de la DEA o de la CIA, (pero agrega para salir de dudas) será cuestión de preguntar a la propia embajada.”
La secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinoza, les dijo a los senadores que no les puede dar detalles sobre el personal acreditado de ninguna embajada en México. “Es, por razones obvias y razones de seguridad, imposible que yo pueda compartir con ustedes esta información” Sin embargo, la canciller agregó que esa información si puede ser compartida con legisladores integrantes de la Comisión Bicameral de Seguridad nacional, que todavía no se instala.
Ahora bien, no debe espantarnos que sean agentes de la CIA.
Una vez el director de las 16 agencias de investigación de EU, John D. Negroponte dijo que tenían en el mundo a 100 mil agentes infiltrados.
Hace un año- 7 de agosto- un reportaje del periódico The New York Times señaló que un grupo de menos de 24 elementos de la CIA, del Pentágono y de la DEA trabajaban dentro de una base militar en el norte de México ayudando al gobierno mexicano en la recolección de inteligencia y en el diseño de operaciones antinarco”.
Entonces en un comunicado difundido por la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional, que entonces encabezaba Alejandro Poiré, aseguró que el personal extranjero que labora con México en materia de combate al narcotráfico “no lleva a cabo ninguna labor operativa ni porta armas”.
Aunque Poiré no hizo referencia a lo publicado por el Times, el comunicado aclara que “por consideraciones de seguridad nacional, el gobierno federal no se pronunciará sobre la veracidad o el contexto de la información publicada sobre estos esfuerzos (de cooperación antinarco)”.
Po cierto, por alguna razón -que se desconoce, aunque la procuradora Marisela Morales lo justifique-, los diplomáticos no declararon ante el Ministerio Público Federal como lo mandata la ley. Hoy, ambos se encuentran sanos y salvos en territorio estadunidense.
De hecho, ésa fue una de las preguntas que le hizo la senadora Ninfa Salinas Sada (PVEM) a la canciller Patricia Espinoza en su comparecencia en el Senado, el jueves 13 de septiembre.
La respuesta de la canciller fue: “Las investigaciones están a cargo de la Procuraduría General de la República. Nosotros no tenemos los detalles de estas investigaciones.
Sé que en unos días estarán por aquí mis colegas los miembros del gabinete de seguridad, y me imagino que esa será una oportunidad para abordar este tema.”
En efecto, la investigación está a cargo de la PGR que inicio la averiguación previa AP/PGR/MOR/TV/611/1/2012; también colabora en la investigación la Unidad de asuntos internos de la Policía Federal, y la embajada de EU en México también está metida: “La Embajada coopera de manera estrecha con las autoridades mexicanas y asistirá en todo lo posible”, reza el comunicado del 24 de agosto.
¡Y por encima de ellos el periodismo de investigación está haciendo su trabajo!
IV No hay todavía ninguna conclusión, pero:
Hay 12 policías federales que se encuentran arraigados por 40 días. Están acusados por los delitos de homicidio en grado de tentativa, daño en propiedad ajena, lesiones, abuso de autoridad y uso indebido de la función pública, pero a partir de las investigaciones se determinará si existen otras responsabilidades.
No hay motivos para el arraigo, a menos que se encuentren elementos de vínculos con la delincuencia organizada.
Llama la atención que una de las primeras declaraciones públicas fueran del ombudsman nacional, Raúl Plascencia, quien dijo que el ataque pudo tratarse de una “acción orquestada” en que los oficiales cometieron excesos.
Es evidente que no hay justificación alguna para ese tipo de usos excesivos de la fuerza. Sólo basta leer el protocolo del acuerdo 04/2012, publicado en el DOF el 24 de abril de 2012, en el que se señalan claramente las bases normativas generales para el uso de la fuerza pública por las instituciones policiales, por lo que todo apunta pues –de acuerdo a los comunicados oficiales- a que se trató de una confusión de un “incidente” que no “emboscada” y que –eso sí- en dado caso de que los policías hayan hecho uso excesivo de la fuerza serán castigados.
Señala un comunicado de SSP: “en caso de comprobarse el uso excesivo de la fuerza, la falta de seguimiento en los protocolos de actuación o complicidad con el crimen organizado, se aplicarán las medidas y sanciones correspondientes.
No se tolerará ninguna acción contraria a ley y a los principios que rigen nuestra institución.”; Y aunque varios medios publicaron que se trató de una agresión directa, de una emboscada como fueron las primeras versiones, las cosas han ido tomando su lugar.
El domingo 2 de septiembre – 10 días después de los lamentables hechos-, Luis Cárdenas Palomino, jefe de la División de Seguridad Regional de SSP, emitió un posicionamiento, y ante una pregunta expresa en una conferencia de prensa aprovechó y dio la versión de la equivocación y del uso excesivo de la fuerza.
Dijo: “En el caso Tres Marías, Octavio, tengo que decir, que es una investigación que está llevando la PGR, que lo que nosotros tenemos acreditado es que es lo que hacían los elementos en Tres Marías; que era una investigación de secuestro, que llevaban que un secuestro se había perpetrado horas antes, a que los muchachos estuvieran allá a las ocho de la mañana (la hora que ocurrieron los hechos) y nosotros estamos acreditando qué es lo que hacían ahí y qué fue lo que sucedió, y estamos en espera de lo que diga la PGR, que es la que actualmente lleva las investigaciones.”
No dio más detalles. Después, la SSP emitió un comunicado en los términos de la declaración.
Ese mismo domingo, el almirante secretario Francisco Saynez fue entrevistado al término de la ceremonia del Sexto Informe de Gobierno del presidente Calderón — ¿Hubo errores?– le preguntaron.
—Pues tal vez sí hubo errores, esperemos que nada (grave), por supuesto; entiendo que hay errores, pero nada malintencionado; sin embargo, se deben revisar los procedimientos y ver en qué se falló y castigar, por supuesto, claro que sí (castigar esos errores).
— ¿Los confundieron? ¿Dicen que (los federales) estaban investigando un secuestro?
—Probablemente estuvieran investigando un secuestro. Pienso que todo eso que dice oficialmente la Policía Federal debe ser cierto, pero tiene que comprobarse en los hechos, en los testimonios que haya y en el lugar donde sucedieron esos hechos. La investigación está a cargo de la PGR.
Dos días después, el 4 de septiembre, le preguntan a Alejandro Poiré, secretario de Gobernación sobre el caso, y responde en el mismo sentido:
“Creo que más allá de las distintas versiones periodísticas, preliminares que se estén dando respecto a los hechos (…) es indispensable que sea la propia investigación de la PGR la que nos lleve a las conclusiones respecto a lo que ocurrió esa mañana (…)
“Y tanto las autoridades de la propia SSP como todos, estamos interesados y comprometidos a que si existió alguna violación normativa, alguna violación a los mecanismos y protocolos de uso de la fuerza o por supuesto alguna ley, ésta sea sancionada y castigada con la severidad que corresponde, porque ésa es la garantía de que cualquier irregularidad será sancionada, no solamente en este caso, sino en cualquier caso que pudiese llegar a presentarse.”
El lunes 10 de septiembre se hizo una reconstrucción detallada de los hechos. Participaron más de una docena de agentes estadunidenses y mexicanos; entre ellos peritos de la PGR y del gobierno de EU. Incluso se bloqueó el acceso a la comunidad Fierro del Toro.
El 17 de septiembre la comisionada de la policía federal, Maribel Cervantes Guerrero, informó que 51 elementos federales han sido citados a comparecer en el caso, y que ellos (la SSP) han entregado la documentación que acredita las investigaciones relacionadas con el secuestro de Salvador Vidal Flores Pérez, registrado en esa misma zona, horas antes de los hechos.
En efecto, el testimonio de Vidal Flores, secuestrado el jueves 23 de agosto en Tres Marías, desmontó la versión inicial de la emboscada y el intento de homicidio contra los agentes diplomáticos.
Al parecer Vidal Flores puso una denuncia ministerial y dio las señas del vehículo utilizado para el plagio. Se trata de una camioneta azul marino que coincidía con el vehículo en el que viajaban los agentes diplomáticos y el capitán de la Marina.
Un día después, el 18 de septiembre se celebró en Washington DC la Cuarta Reunión del Grupo de Alto Nivel de la Iniciativa Mérida México-EU.
Dicho Grupo es la instancia de seguimiento a nivel gabinete que se reúne desde 2008.
Encabezaron las delegaciones la canciller Patricia Espinoza y la secretaria de Estado Hilary Clinton. El cónclave permitió hacer un balance del estado que guarda la instrumentación de la Iniciativa Mérida y la cooperación contra la delincuencia transnacional en su conjunto, desarrollada en torno a las cuatro áreas estratégicas acordadas por los gobiernos de México y EU.
Al término de la reunión se emitió una declaración conjunta, y después se convocó a los medios de comunicación.
En el marco de la rueda de prensa alguien preguntó por los hechos de Huitzilac.
La respuesta en español de la canciller Espinoza fue “desde un primer momento el gobierno de México ha señalado que lamenta profundamente ese incidente (incident) y al mismo tiempo reitera la disposición y el interés del gobierno de México de continuar con una investigación exhaustiva.”
Señaló que esa investigación debe "aclarar los hechos" y "ejecutar las sanciones que sean aplicables a aquellos que sean encontrados responsables de acciones indebidas o fuera de la ley".
En su turno, Hilary Clinton sostuvo: (en inglés) “ And we regret any incident of violence wherever it occurs – inside Mexico…” (Lamentamos cualquier incidente de violencia en cualquier lado que ocurra, dentro de México, o en las fronteras, o dentro de nuestro propio país. Continuaremos trabajando de cerca para investigar estos incidentes trágicos y tratar de llegar a conclusiones sobre quiénes son los responsables y se les presente ante el sistema de justicia para que respondan a sus actos).
Así las cosas. Esperemos que dice la PGR. Es evidente que el tema se abordó en la reunión del grupo de alto nivel en Washington DC.
Quizás quienes si tengan información privilegiada sean los legisladores integrantes de la Comisión Bicamaral de Seguridad nacional que se concretará en unos días. Hay que estar pendientes de lo que dice el periodismo de investigación.
Lo que es evidente es que la Armada de México se ha ganado la confianza de las agencias norteamericanas, incluso participaron “en los ejercicios navales Partnership of the Americas 2012”, que se llevaron a cabo del 4 al 16 de septiembre de 2012, en la Base Naval de Mayport y el Campo Blanding, en Florida (DOF, 17 de septiembre). Asimismo –aunque no se dice públicamente- percibo que Washington ha perdido la confianza en la policía federal; fue curioso que a pocos días de los lamentables hechos se anunciará la cancelación de un proyecto con recursos de iniciativa Mérida.
*
Los comunicados oficiales:
1.-COMUNICADO
Fechado el 24 de agosto y emitido por las secretarias de Marina y de Seguridad Pública, informan:
“A las 08:00 horas, un vehículo diplomático de la Embajada de Estados Unidos de América recibió múltiples impactos de bala en el tramo carretero Tres Marías- Huitzilac de parte de personal de la Policía Federal que se encontraba en la zona realizando labores de persecución del delito.
“Los hechos se registraron cuando dos funcionarios de la Embajada de Estados Unidos de América, en compañía de un elemento de la Secretaría de Marina, que se dirigían a una visita a instalaciones de la Armada de México en el cerro de El Capulín, municipio de Xalatlaco, fueron alcanzados, al ingresar en un camino de terracería aproximadamente a cuatro km. De la carretera libre México-Cuernavaca, por un vehículo cuyos tripulantes les mostraron armas de fuego por lo que el conductor del vehículo diplomático, maniobró para evadirse y reingresar a la carretera, momento en el cual los tripulantes del vehículo agresor abrieron fuego sobre el vehículo diplomático.
“Momentos después otros tres vehículos se sumaron a la persecución y realizaron disparos con armas de fuego contra el vehículo de la embajada de EU.
“El elemento de la SEMAR a bordo del vehículo agredido, alertó al personal de la Armada de México que se encontraba en las instalaciones de El Capulín para prestar apoyo, llegando éstos una vez que había concluido la agresión, acordonando el sitio. Al lugar se dieron cita también elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Policía Federal.
“El personal de la Policía Federal que participó en estos hechos comparece ante el Agente del Ministerio Público de la Federación, para esclarecer los hechos y, en su caso, deslindar responsabilidades.
“Hasta el momento se reportan las dos personas de la embajada de EU, quienes fueron trasladados bajo el cuidado y resguardo de la Policía Federal a un centro hospitalario, con heridas que no ponen en peligro su vida. El elemento de la Secretaría de Marina se encuentra con contusiones leves.
“Se ha establecido comunicación permanente con la embajada de los Estados Unidos en México, con el objetivo de brindar las facilidades logísticas requeridas y el apoyo necesario al personal herido.”
2. COMUNICADO:
Después hubo un comunicado de la PGR Boletín 291/12-, que dice: “En relación con el incidente registrado en el kilómetro 50+500 de la carretera federal México-Cuernavaca en las inmediaciones de Huitzilac, Morelos, donde dos funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en México y un elemento de la Secretaría de Marina Armada de México, resultaron heridos cuando el vehículo en que viajaban recibió múltiples impactos de bala, se informa:
“El Ministerio Público federal acompañado de peritos en balística, criminalística de campo, fotografía forense, dactiloscopia, ingeniería y arquitectura, continúa las diligencias para esclarecer los hechos.
“Entre estas diligencias, se encuentran las declaraciones de 12 agentes de la Policía Federal puestos a disposición de la autoridad ministerial, pertenecientes a la Unidad Operativa de Seguridad Preventiva (Estación Tlalpan) de esa corporación y de varios testigos de los hechos.”
3.- COMUNICADO DEL EMBAJADOR DE EU EN MÉXICO, 24 DE AGOSTO
“Esta mañana, dos miembros del personal del gobierno de Estados Unidos y un capitán de la Marina Armada de México se dirigían en un vehículo de la misión diplomática hacia una instalación de entrenamiento cuando fueron emboscados por un grupo de individuos.
“El vehículo intentó escapar, fue perseguido y sufrió daños considerables. Los pasajeros solicitaron la ayuda de las fuerzas armadas de México, las cuales respondieron. Se trasladó del lugar a los dos pasajeros estadunidenses heridos, se les atendió médicamente y su condición es estable. El capitán de la Marina Armada de México no sufrió lesiones serias.
“El gobierno de México ha reconocido que miembros de la Policía Federal estuvieron involucrados y dispararon contra el vehículo de la embajada de Estados Unidos.
“El gobierno mexicano ha iniciado una investigación y detenido a miembros de la Policía Federal involucrados.
“El gobierno de México ha indicado que se realizará una investigación completa y exhaustiva de este incidente.
La embajada ha estado cooperando de manera estrecha con las autoridades mexicanas y asistirá en todo lo posible.”
4.-COMUNICADO DE LA MARINA:
169/2012, fechado el 28 de agosto, sólo hace referencia para precisar que el capitán de la Marina no conducía la camioneta en la que viajaban dos diplomáticos estadounidenses como lo publicaron los medios:
“En relación a la información difundida sobre el incidente del día viernes 24 de agosto de 2012 en inmediaciones de Tres Marías, Morelos, en el que un vehículo de la embajada de Estados Unidos fue agredido, la Secretaría de Marina desmiente categóricamente que el capitán de la Armada de México fuese conduciendo dicha unidad, toda vez que el elemento de esta institución tenía la función de enlace y traductor, por lo que requería operar equipos de comunicación.
“• Con base en las propias declaraciones del Capitán de la Armada de México quien viajaba con dos ciudadanos norteamericanos que ocupaban los asientos delanteros del vehículo, se puntualiza lo siguiente:
“• Los ciudadanos norteamericanos iban en calidad de visita de los cursos de adiestramiento que ahí se imparten.
“• El capitán de la Armada de México no conducía el vehículo diplomático. Al momento de la agresión se encontraba en el asiento trasero pidiendo auxilio por su teléfono celular.
“•La unidad fue conducida en todo momento por uno de los ciudadanos norteamericanos.
“•Durante el ataque, los impactos de arma de fuego lograron romper el blindaje, causando asimismo las heridas a los tripulantes norteamericanos, quienes viajaban en la parte delantera del vehículo.
“Lo anterior, a fin de contribuir a mantener informada a la opinión pública, toda vez que serán las autoridades competentes las que determinen el resultado de las investigaciones.”
5.-DE LA SSP
El 17 de septiembre se emite un nuevo comunicado de la SSP: Boletín de Prensa No. 348:
“Con relación a las acciones que la Policía Federal realiza en apoyo a las investigaciones de la Procuraduría General de la República tras los hechos ocurridos el pasado 24 de agosto en el tramo carretero Tres Marías- Huitzilac, Morelos, esta institución ha entregado la documentación que acredita las investigaciones relacionadas con el secuestro del señor Salvador Vidal Flores Pérez, funcionario del Instituto Nacional de Antropología e Historia, registrado en esa misma zona, horas antes de los hechos.
“Dicha documentación incluye la solicitud de apoyo a la Policía Federal, la denuncia ministerial presentada ante la Procuraduría General de Justicia del estado de Morelos, así como las órdenes de investigación a los oficiales de la Estación de Tlalpan de la Policía Federal.
“Desde el inicio de la indagatoria la Policía Federal ha recibido un total de 21 requerimientos diversos de la PGR, los cuales se han cumplido en su totalidad en tiempo y forma.
“El día de los hechos la Policía Federal auxilió a las personas heridas trasladándolas a un hospital a la ciudad de Cuernavaca, Morelos, a fin de que recibieran atención médica oportuna y los 12 elementos presuntamente involucrados fueron puestos a disposición de inmediato.
“En total, 51 elementos federales han sido citados a comparecer, los cuales se han presentado a declarar puntualmente en las fechas que fueron requeridos, incluidos los 12 efectivos que se encuentran actualmente bajo arraigo.
“Con ello, se acredita el compromiso indeclinable de la Policía Federal por esclarecer puntualmente estos hechos y coadyuvar con una pronta y expedita acción del Ministerio Público de la Federación en el deslinde de responsabilidades.
“En caso de comprobarse el uso excesivo de la fuerza, la falta de seguimiento en los protocolos de actuación o complicidad con el crimen organizado, se aplicarán las medidas y sanciones correspondientes.
Es importante enfatizar, que en este caso en particular, como en otros casos en los que se han visto relacionados efectivos de la Policía Federal en la comisión de alguna conducta presuntamente delictiva, siempre ha existido el compromiso permanente de sancionar al elemento, o en su caso, ponerlo a disposición de las autoridades ministeriales competentes.
“Para mayor precisión, de diciembre de 2006 a la fecha, han sido puestos a disposición de las autoridades ministeriales por presuntos actos delictivos tanto del fuero común como del federal, un total de 459 elementos para el deslinde de responsabilidades y 50 han recibido sentencia condenatoria.“Lo anterior forma parte del compromiso permanente para consolidar una Policía Federal que haga realidad los principios constitucionales de legalidad, honradez, eficiencia, profesionalismo y respeto a los derechos humanos. Con esto se reitera el compromiso de la Secretaría de Seguridad Pública federal de proteger y servir a la comunidad.”
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