Una sorprendente llamada papal al Padre
General de los Jesuitas/FA
· Buon Giorno, sono il Papa Francesco, vorrei parlare con il Padre Generale.
Publicado
en La Silla Rota, viernes 15 de marzo de 2013.
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· Buon Giorno, sono il Papa Francesco, vorrei parlare con il Padre Generale.
Una de las primeras cartas que recibió
Jorge Mario Bergoglio, como papa Francisco fue la de su exjefe el Prepósito
General de la Compañía de Jesús, Adolfo Nicolás Pachón S.J quién le expresó la
alegría de los jesuitas su elección como el sucesor de pedro.
Dice la misiva:
“En nombre de la Compañía de Jesús doy
gracias a Dios por la elección del nuevo Papa, Cardenal Jorge Mario Bergoglio
S.J., que abre para la Iglesia una etapa llena de esperanza.
Todos los jesuitas acompañamos con la
oración a este hermano nuestro y le agradecemos su generosidad para aceptar la
responsabilidad de guiar la Iglesia en un momento crucial.
El nombre de "Francisco" con que
desde ahora le conocemos, nos evoca su espíritu evangélico de cercanía a los
pobres, su identificación con el pueblo sencillo y su compromiso con la
renovación de la Iglesia. Desde el primer momento en que se ha presentado ante
pueblo de Dios ha dado testimonio de modo visible de su sencillez, su humildad,
su experiencia pastoral y su profundidad espiritual.
"Es rasgo distintivo de nuestra
Compañía ser un grupo de compañeros (...) unido con el Romano Pontífice con un
vínculo especial de amor y servicio" (NC 2, n. 2). Por ello, compartimos
la alegría de toda la Iglesia al tiempo que deseamos renovar nuestra disponibilidad
para ser enviados a la viña del Señor, conforme al espíritu de nuestro voto
especial de obediencia, que tan particularmente nos une con el Santo Padre (CG
35, D.1, 17).
P. Adolfo Nicolás S.J, Superior
General, firmado.
Y luego lo insólito una llamada telefónica.
El Papa Francisco tomo personalmente el
teléfono y habló a la oficina del prepósito general Adolfo Nicolás Pachón SJ,
su exsuperior.
Le contestó el teléfono el portero de la
oficina en Roma quien nunca esperó recibir una llamada telefónica del mismísimo
papa Francisco.
El hecho ocurrió la mañana de este viernes
y según el relato del director mundial del apostolado de la Oración, Claudio
Barriga Dominguez SJ,- difundido por la agencia ACI-, enviado por
correo electrónico a las comunidades y amigos de los jesuitas en todo el mundo,
en la casa de Roma se vivieron momentos intensos con la inesperada llamada.
El portero respondió al teléfono. Le dicen
que tiene una llamada desde Santa Marta, y escucha una voz suave y serena:
-Buenos días, soy el Papa Francisco, quisiera hablar con el Padre General.
El portero respondió frio: -¿De parte de
quién?
El papa Francisco entendió que el joven
portero italiano no le creía –como es normal-, y le repite dulcemente: -No, de
verdad, soy el Papa Francisco, ¿y usted cómo se llama?"
En ese momento, el empleado responde con
voz titubeante.: -Me llamo Andrés
Y La respuesta fue un: -¿Cómo estás,
Andrés?
-Yo bien, disculpe, ¡sólo un poco
confundido!
-No te preocupes- le dice amablemente el
papa-, por favor comunícame con el Padre General, quisiera agradecerle por la
hermosa carta que me ha escrito.
El portero de inmediato le dice: -Disculpe,
Su Santidad, lo voy a comunicar.
-No, no hay problema; yo espero lo que sea
necesario, respondió el papa Francisco.
El joven portero, Andrés, entregó el
teléfono al hermano Alfonso, secretario privado del Padre General Adolfo
Nicolás y quién incrédulo concretó la siguiente conversación:
Alfonso: -¿Hola?
El papa -¿Con quién hablo?
-Soy Alfonso, secretario personal del Padre
General, respondió el secretario.
El papa -Soy el Papa (Francisco), quisiera
saludar al Padre General, para agradecerle la bonita carta que me envió
El secretario particular todavía incrédulo:
-"Sí, un momento", pero antes le dice al haber reconocido su voz:
-¡Santo Padre, felicidades por su elección, aquí estamos todos contentos por su
nombramiento, estamos rezando mucho por usted!
-¿Rezando para que yo vaya para adelante o
para atrás?, bromeo el Bergoglio.
-Naturalmente para adelante, le responde
Alfonso mientas caminaba hacia el Padre General.
El papa: les responde con una risa
espontánea, muy de él.
Dice el padre Barriga que “aturdido con la
impresión, el hermano ni siquiera golpeó a la puerta de la oficina del Padre
General y entró hasta él, quien lo miró sorprendido. Extendió la mano con el
teléfono inalámbrico y le dice: ¡-es el papa!
El papa Francisco agradeció cordialmente a
su ex superior por su carta. El Padre General le dijo que le gustaría verlo
para saludarlo. Francisco e respondió que va a dar instrucciones a su
secretario para que eso pueda ser lo más pronto posible, y que del Vaticano le
irían a avisar.
¡Increíble!
Y es que desde que san Ignacio de Loyola
fundó la orden en 1534, nunca un jesuita había asumido el papado.
Eso si los jesuitas han sido un ejercito
que siempre han estado al servicio del papa, aunque algunos papas los han
tratado muy mal; hubo uno -Clemente XIV- que simplemte suprimió la Compañía en
1773 , cuarenta u un años después fue restituida por Pío VII.
Hay que precisar que los jesuitas, aparte
de los tres votos normales de cualquier religioso -pobreza, castidad y
obediencia-, emiten un cuarto voto de obediencia absoluta al papa.
Vale le pena leer lo que piensa un jesuita
por el nombramiento de Jorge Mario Bergoglio como papa Francisco.
-Los jesuitas siempre han sido un ejército
al servicio del Papa. Ahora que uno de ustedes es el Santo Padre, ¿qué
significado tiene para la Compañía?, le pregunta el reportero del Vatican
Insider al jesuita Antonio Spadaro.
-Es cierto, la espiritualidad de Ignacio
nació para estar al servicio del Papa como figura universal. Pero él, ahora, es
Pedro, es la guía de la Iglesia universal, tendrá una visión del mundo que toca
esta vocación de los jesuitas, pero es la Compañia la que se pondrá a su
servicio.
-Tal vez usted no, pero para muchos también
fue una sorpresa la elección del nombre: ¿por qué un Papa jesuita opta por
Francisco?
- El primer motivo es la elección del
cardenal Bergoglio, ahora Papa Francisco, de hacer de la pobreza el centro de
su vida y de su vocación. Lo ha demostrado en su estilo de vida, que conocen
muy bien sus fieles de Argentina, como la costumbre de usar el metro.
-Además de esta importancia de la
pobreza, ¿hay algún otro motivo para la elección de este nombre?
-Claro, es el alma misma de la
experiencia de los jesuitas. Francisco es la raíz de la vocación de Ignacio. Al
leerlo quedó deslumbrado. San Francisco es el modelo de nuestro fundador, es el
fundamento de su conversión.
-¿Quién es Bergoglio, qué Papa será
Francisco?
-Su estilo es claro, su
espiritualidad es la de la sencillez y de la pobreza. Pero fue el “provincial”
de la provincia argentina de jesuitas, guió una gran arquidiócesis como Buenos
Aires, por lo que no hay duda de que tiene una gran capacidad de gobierno. Me
imagino un papado que apuesta por lo esencial, caracterizado por el llamado a
la pobreza evangélica y la importancia de Dios como centro de la vida.
Viene de un continente en ebullición,
pero lleno de enormes recursos y energías. Una tierra que ha tenido que
afrontar desafíos enormes, como las dictaduras. Bergoglio representa la
experiencia de una Iglesia muy viva y joven, un pulmón espiritual para el
catolicismo, precisó.
(Antonio Spadaro es director de la revista
“Civiltà Cattolica”: Marco Bardazi es reportero del Vatican Insider)
Los jesuitas hoy:
La Compañía de Jesús es una Orden Religiosa
de la Iglesia Católica, fue fundada por San Ignacio de Loyola en 1540 –aprobada
por Paulo III- . A lo largo de su vida, ha sufrido muchos avatares, entre
otros, fue suprimida por el Papa Clemente XIV en 1773 y más tarde restituida
por el Papa Pío VII en 1814.
Hoy se encuentra extendida por 127 países
en los que 17, 637 jesuitas trabajan por la evangelización del mundo, en
defensa de la fe y la promoción de la justicia, en permanente diálogo cultural
e interreligioso.
Es la más numerosa de la congregaciones
masculinas en cuanto a número de miembros, junto con los salesianos y los franciscanos.
El anuario de hace dos años tenía registrados a 17, 906, jesuitas de los cuales
17,737 son sacerdotes, 1, 535 Hermanos, 2, 850 estudiantes y 784 novicios.
Están distribuidos en 127 países a través
de 85 provincias
En México hay poco más de 400 jesuitas.
Hace cuarenta años los jesuitas llegaron a
tener más de 36 mil miembros en todo el mundo; la disminución en el número de
vocaciones, algo muy común en la mayoría de las congregaciones, sin embargo en
esas fechas hubo un ascenso imparable de otras corrientes como el Opus Dei y
los Legionarios de Cristo.
El jefe de los jesuitas hoy es Adolfo
Nicolás Pachón S.J. (Villamuriel de Cerrato, Palencia, 29 de abril de 1936).
El 19 de enero de 2008 fue elegido como el trigésimo Prepósito General de
la Compañía de Jesús sucediendo a Peter Hans Kolvenbach S.J.. Recibe el titulo
oficial de Prepósito General de la Compañía de Jesús -en latín: Præpositus
Generalis-.
Se suele referir a él como Padre General.
Debido a que, supuestamente, los Jesuitas eran una gran e influyente orden
religiosa en la Santa Sede, esta posición ha recibido el apelativo de Papa
negro
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