Lunes 30 de abril de 2012
PRESIDENCIA DEL CIUDADANO SENADOR JOSÉ GONZÁLEZ MORFÍN
11:43 horas. Solicito a la Secretaría informe a la Asamblea, el resultado del cómputo de asistencia de las señoras y señores senadores.
-EL C. SECRETARIO RENÁN CLEOMINIO ZOREDA NOVELO: Señor presidente, compañeras y compañeros senadores, de acuerdo al registro electrónico, se han acreditado para estar en esta sesión un total de 67 senadoras y senadores.
En tal virtud, hay quórum, señor presidente.
-EL C. PRESIDENTE GONZÁLEZ MORFÍN: Se abre la sesión solemne, convocada para este día lunes 30 de abril de 2012.
El orden del día está disponible en sus escaños, para su información.
El acta de la sesión anterior se encuentra publicada en la gaceta del Senado de este día.
http://www.senado.gob.mx/index.php?ver=sp&mn=2&sm=3&f=2012/04/30/1
En consecuencia, consulte la Secretaría a la Asamblea, en votación económica, si se aprueba.
-EL C. SECRETARIO ZOREDA NOVELO: Consulto a la Asamblea, en votación económica, si el acta de la sesión anterior es de aprobarse.
Aprobada el acta, senador presidente.
-EL C. PRESIDENTE GONZÁLEZ MORFÍN: Conforme a nuestro acuerdo aprobado para esta sesión solemne, daremos ahora paso a la presentación de cuatro iniciativas que se desprenden de los foros “Detener la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes”.
Y que tienen también la oportunidad de la conmemoración del Día del Niño.
Al final de la presentación de dichas iniciativas, se les dará el turno correspondiente.
En consecuencia tiene la palabra, la senadora Martha Leticia Sosa Govea, para presentar los siguientes proyectos de decreto a nombre propio y de las senadoras Claudia Sofía Corichi, Ludivina Menchaca, Emma Larios, María Serrano, Margarita Villaescusa, Eva Contreras, Blanca Judith Díaz Delgado y Norma Esparza.
Perdón, uno, por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones del Código Penal; y otro, proyecto de decreto por el que se reforman los artículos 3, 7 y 10 de la Ley General de Educación.
Adelante, senadora Sosa.
-LA C. SENADORA MARTHA LETICIA SOSA GOVEA: Gracias. Con su venia, señor presidente.
Compañeras y compañeros senadores: Con base en los compromisos que el Senado mexicano ha venido asumiendo, a través de su delegación en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, y en virtud de los esfuerzos que se llevan a cabo para prevenir la explotación sexual en contra de los niños y protegerlos de este flagelo, se implementaron una serie de acciones tendientes a abordar el análisis de la temática, entre ellas, la realización de cuatro foros regionales y un evento de conclusiones, denominada “Detener la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes.
Cabe destacar que se logró identificar significativamente el trabajo legislativo que se requiere para proporcionar la certeza jurídica que permita atender, combatir y sancionar ilícitos de esta naturaleza en contra de los niños.
Por lo que una servidora, en conjunto con las senadoras integrantes de la subcomisión para la Protección de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, que forma parte de la comisión de Atención a Grupos Vulnerables, presentamos a la consideración de esta soberanía, el siguiente proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones del Código Penal Federal.
Partiendo de la premisa, de que se trata del instrumento jurídico que sirve como marco para que las entidades federativas regulen las conductas tipificadas como delito, así como la urgente necesidad de establecer los tipos penales que afectan directamente a nuestros niños, se busca homologar dichos términos y penalidades, lo que permita la unificación de los mecanismos que puedan sancionar y erradicar estos delitos de manera sólida y eficaz.
En base a la reciente reforma constitucional, publicada el 12 de octubre, mediante la que se estableció, que en todas las decisiones y actuaciones del Estado, se velará y cumplirá con el principio del interés superior de la niñez.
Es preciso, compañeros legisladores, modificar el artículo 6 del Código Penal Federal, que actualmente lo establece como interés superior de la infancia.
Así como una serie de artículos en diversos párrafos, que establezcan el punto de partida para la unificación de criterios y términos, de cómo el endurecimiento de las penas, se deben fomentar para frenar este tipo de delitos.
En esta iniciativa que presentamos, abordamos el artículo 201, que establece el delito de corrupción de menores de 18 años, que sanciona la inducción al consumo habitual de bebidas alcohólicas o sustancias tóxicas; con una pena, que actualmente se tiene de cinco a diez años.
Proponemos elevar esa sanción, a una pena de diez a 15 años. Y para el caso de la inducción, a la mendicidad, con fines de explotación, comisión de algún delito, asociación delictuosa o la realización de actos de exhibicionismo corporal o sexuales, que actualmente es de cuatro a nueve años de prisión; proponemos elevarla de ocho a 14 años.
En el artículo 202, proponemos que la sanción se aplique a los padres, que aprueben o permitan que sus hijos sean víctimas de estos delitos.
En el artículo 206, que sanciona el lenocinio, con una pena de dos a nueve años de prisión. Con nuestra iniciativa estamos proponiendo una pena de ocho a 15 años; y que se duplicará cuando este delito se cometa en contra de personas de 18 años y personas que no tengan la capacidad para comprender el significado del hecho o la capacidad para resistirlo.
Por otra parte, debido a que se
identificado un patrón recurrente de estas conductas al interior del seno
familiar, se ha considerado agregar un artículo 206 bis, para establecer que
cuando este delito sea cometido por los padres, alguno de ellos o el tutor de
la víctima, la pena sea aumentada al doble.
En el mismo sentido, compañeros legisladores,
se propone modificaciones que eleven las penas que actualmente se aplican para
el caso de los delitos que se cometen en contra de personas menores de 18 años,
y menores de 12; así como el abuso sexual o la violación, en el que se incluye,
que cuando el delito sea cometido en contra de personas menores de 18 años, o
que no tengan capacidad para comprender el significado del hecho o la capacidad
para resistirlo, en estos casos, cuando se presenten lesiones u homicidio, la
pena será duplicada.
Finalmente, en el artículo 336, sobre
el caso de quiénes, sin motivo justificado, abandonen a sus hijos o a sus
cónyuges sin recursos para atender sus necesidades de subsistencias. Se propone
elevar la pena a un mes a cinco años de prisión, por un año a cinco años de
prisión.
De tal modo que con estas
modificaciones, reformas y adiciones al Código Penal, se busca desalentar,
combatir y sancionar estas prácticas en contra de la niñez mexicana.
Senador presidente, senadores de esta
cámara, como la senadora Emma Larios no está presente, me voy a permitir hacer
mención, brevemente, a la iniciativa de ella, tomando el tiempo que le
corresponde.
La senadora Emma Larios, en conjunto
con las senadoras integrantes de la subcomisión para la Protección de los
Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, asimismo, con las senadoras Eva
Contreras y Norma Esparza, presentan iniciativa con proyecto de decreto que
reforma y adiciona los artículos 3, 7 y 10 de la Ley General de Educación.
En la misma idea de armonizar el marco
jurídico, con el principio del interés superior de la niñez.
Por lo que reconociendo la importancia
y la urgencia de integrar este principio, en los programas y políticas
gubernamentales, relacionados con la infancia, se estimó prioritario atender
estas modificaciones en materia de educación, como en este caso que tiene que
ver con el artículo tercero. En el que se establece la obligación del Estado, a
prestar servicios educativos para que toda la población pueda cursar la
educación preescolar, primaria y secundaria.
Por ello mismo, durante dicho período,
se incluye como parte de las obligaciones del Estado, velar y cumplir con el
principio del interés superior de la niñez.
Finalmente, respecto del artículo
décimo, en dicho ordenamiento, mediante en el que se establece que la educación
que imparte el Estado, así como sus organismos descentralizados o particulares
que cuenten con autorización, constituyen un servicio público, y de acuerdo con
la reforma constitucional, de octubre pasado, se ha estimado necesario establecer
en la fracción VII de este artículo, que las instituciones del Sistema
Educativo Nacional, impartirán la educación atendiendo el principio del interés
superior del niño. Así con estos esfuerzos, esperamos fortalecer y mejorar el
marco jurídico en la materia en la búsqueda de la protección de los derechos de
las niñas, niños y adolescentes.
Hoy que celebramos el Día Internacional
del Niño creemos que las legisladoras esta Sexagésima Primera Legislatura
estamos cumpliendo con poner en la mesa los marcos jurídicos que debemos
adecuar para la protección de los mismos.
Muchísimas gracias. (Aplausos)
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Muchas gracias, senadora Sosa Govea…
-LA C. SENADORA DOLORES DEL CARMEN
GUTIERREZ ZURITA: (Desde su escaño) Presidente.
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN: Sí.
Sonido en el escaño de la senadora Gutiérrez Zurita.
-LA C. SENADORA DOLORES DEL CARMEN
GUTIERREZ ZURITA: (Desde su escaño) Gracias, presidente.
Quisiera solicitar la autorización de
mis compañeras, que están presentando esta iniciativa, si me permiten signarla
junto con ellas.
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN: Con
mucho gusto. Estoy seguro que no tienen ninguna de ellas inconveniente, y
tomamos cuenta con mucho gusto, senadora.
Tiene ahora el uso de la tribuna la
senadora Ludivina Menchaca Castellanos para presentar a nombre propio y de las
mismas senadoras, de todos los grupos parlamentarios, un proyecto de decreto
que adiciona un capítulo IX al título octavo del Código Penal Federal.
-LA C. SENADORA LUDIVINA MENCHACA
CASTELLANOS: Gracias, presidente.
Muy buenos días, compañeras y
compañeros:
En virtud de que esta iniciativa se
encuentra publicada en la Gaceta del Senado del día de hoy, pues lo que
solicito, señor presidente, que se inserte integralmente al Diario de los
Debates.
Bueno, en el marco del Día del Niño
queremos felicitar a todos los niños y las niñas de nuestro México, así como a
todas aquellas personas que siguen conservando su espíritu de niños. Este 30 de
abril presentamos esta iniciativa que tiene como propósito atender una de las
violaciones más severas a los derechos de las niñas, niños y adolescentes, que
es la explotación y el abuso sexual infantil.
Un estudio realizado por la red
internacional “Fin de la Prostitución, Pornografía y Trata de Niñas, Niños y
Adolescentes con Fines Sexuales” ubica a nuestro país como principal productor
de pornografía infantil en el mundo. Se estima que en 2010 alrededor de 20 mil
niñas, niños y adolescentes fueron utilizados en México en prácticas de
prostitución, pornografía, turismo sexual y tráfico de menores con fines de
explotación.
La ONU estima que la producción y
distribución de imágenes pornográficas criminales abusando de niñas, niños y
adolescentes podrían representar un negocio hasta de 20 mil millones de dólares
por años, y que uno de los mayores puntos débiles de la lucha contra la
pornografía por Internet u otras plataformas de comunicación es que todavía
esta conducta no es tipificada.
Lo que también ha venido a favorecer el
que el primer encuentro entre los pedófilos y pederastas con sus víctimas se dé
precisamente a través del Internet, y no hay que dejar al lado que unos 750 mil
pedófilos en el mundo están conectados permanentemente en la red.
En México la explotación sexual de
niñas, niños y adolescentes a través de Internet ocupa el tercer lugar en la
lista de delitos cibernéticos, sólo antecedida en el mundo virtual por los
fraudes y las amenazas.
El acoso sexual infantil a través de la
Web es un escenario que se ha propagado rápidamente en los últimos años, las
redes sociales, los foros, la mensajería instantánea y otros programas por
Internet son el instrumento por el medio en el cual el delincuente o el
acosador establece un vínculo fuerte con la víctima menor de edad y mediante el
cortejo o el engaño logra que se desnude frente a la pantalla o la cámara de su
computadora y mediante la imagen captada puede continuar involucrando al menor
en una diversidad de situaciones que atentan contra sus derechos humanos y
contra su seguridad, por supuesto.
Teniendo presente que en nuestro
sistema jurídico no hay una norma penal que sanciona esta forma de abuso
sexual, virtual la presente iniciativa de ley tiene por objeto tipificar una
serie de conductas que haciendo uso de las nuevas tecnologías de la información
atentan contra la identidad sexual de niñas, niños y adolescentes.
Las promoventes de esta iniciativa
consideramos que una de las conductas que debe ser sancionada es la relativa al
grooming o cortejo, que es el proceso mediante el cual una persona adulta se
gana la confianza precisamente de un menor a través del Internet, precisamente
con el fin de obtener concesiones de índole sexual, las que pueden ir desde la
obtención de imágenes que comprometan al menor, hasta el encuentro personal.
Por lo anterior, se propone sancionar
con siete a doce años de prisión, y de 500 a 20 000 días multa el que una
persona mayor de edad, haciendo uso de cualquier tecnología de la información,
busque y contacte a un menor de edad para concertar un encuentro con él a fin
de cometer una conducta de carácter sexual.
Y asimismo, se propone sancionar con la
misma pena al que a través del Internet, el teléfono o de cualquier otra
tecnología de la información y de la comunicación se capte o se utilice a
menores de edad o a personas que no tienen capacidad para comprender el
significado del hecho en espectáculos exhibicionistas con fines lascivos, sexuales,
sancionando así la inducción a la producción de la autopornografía.
Con estas propuestas estaremos
tipificando distintos delitos electrónicos que atentan contra nuestras niñas,
niños y adolescentes quienes en México presentan el 37% de una universo de 34.9
millones de internatuas. Y finalizo, presidente, amigas y amigos, haciendo un
exhorto a los padres de familia para que estén atentos a estas páginas y a los
programas que visitan nuestros hijos cuando utilizan el Internet, pues el
ayudarles a evitar conductas y riesgos siempre será la mejor herramienta para
evitar este tipo de delitos.
Esta iniciativa está firmada por las
senadoras Martha Leticia Sosa, Claudia Corichi, Ema Larios, María Serrano,
Margarita Villaescusa y la de la voz, Ludivina Menchaca.
Por su atención, muchas gracias.
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Gracias, senadora Menchaca. A continuación tiene el uso…
-EL C. SENADOR JUAN BUENO TORIO: (Desde
su escaño) Presidente.
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Diversos senadores desean suscribir las iniciativas que se han presentado, voy
a pedir a la secretaría que me ayude tomando nota, estoy seguro que mis
compañeras senadoras no tienen ningún inconveniente.
Voy a pedir que me ayude la secretaría
tomando nota de todas las compañeras y compañeros senadores que desean
suscribir las iniciativas que se han presentado. La última de ellas será
presentada, y tiene el uso de la tribuna, por la senadora Margarita Villaescusa
Rojo.
Es un proyecto de decreto por el que se
adiciona un tercer párrafo al artículo 7 de la Ley para la Protección de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
-LA C. SENADORA MARGARITA VILLAESCUSA
ROJO: Con su permiso, presidente.
Compañeras y compañeros senadores:
Erradicar la violencia es una exigencia
ética, y ante esta cuestión nos preguntamos ¿Qué es preciso hacer para que esta
sea eliminada y cómo podemos trabajar juntos para lograr una mejor convivencia
social?
No existe una distinción sustancial
entre la violencia en general y la violencia que se ejerce contra los menores
de edad. Es claro entonces que no es posible erradicar la segunda si persiste
la primera, y lo anterior por una razón evidente, en cualquier situación
generada por la ley del más fuerte los más débiles son las primeras víctimas y
las más numerosas.
La Organización Mundial de la Salud
define a la salud mental como un estado de bienestar en el cual el individuo es
consciente de sus propias capacidades que puede afrontar las tensiones normales
de la vida y puede trabajar de forma productiva y fructífera, así como de ser
capaz de hacer una contribución a la comunidad.
El informe nacional sobre violencia y
salud del 2006 establece que dos niños con menos de catorce años mueren cada
día a causa de la violencia en México. El Instituto Nacional de Estadística, Geográfica
e Informática registró un total de 677 muertes causadas por homicidios entre
los jóvenes de este grupo de edad…
Según el INEGI, el 56 por ciento de las
mujeres de entre 15 a 19 años que viven en pareja han sufrido al menos un
incidente de violencia en los últimos 12 meses.
Por otra parte, el DIF recibió en
promedio 4 casos de maltrato infantil por día en el Distrito Federal; en casi
la mitad de los casos o sea un 47 por ciento la responsabilidad fue de la
madre, en el 20 por ciento fue del padre, lo que significa que la familia que
debería de ser el lugar más seguro para proteger a los niños y niñas se puede
convertir en una zona de riesgo para ellos.
La UNICEF muestra preocupantes datos de
muertes violentas especialmente de adolescentes. Ante ello, se ha pronunciado a
favor de aumentar la inversión en todos los aspectos de la vida y el bienestar
de los adolescentes para evitar decesos, suicidios, el SIDA y la violencia como
las principales causas de muertes de adolescentes entre 15 y 19 años.
La Organización Mundial de la Salud
estima que cada año –y este es un dato muy importante y muy actual- se suicidan
en el mundo cerca de un 1 millón de personas. Esto representa la primera causa
de muerte violenta entre jóvenes de 15 y adultos de 34 años de edad.
Según datos de la Secretaría de Salud
del 2006 al 2008 se triplicó la cantidad de muertes violentas de adolescentes,
cada semana 15 adolescentes fueron maltratados, y se suicidaron. Esto nos
llevan a cuestionarnos cómo se sienten esas niñas y esos niños y esos
adolescentes para ver tan negra su vida y tomar un suicidio como opción; qué
trastorno mental no les ha sido diagnosticado a tiempo y tratado a tiempo para
evitar estas muertes anticipadas.
La OCDE estima que México ocupa el
primer lugar en violencia física, abuso sexual y homicidios de menores de 14
años entre los países que conforman dicha organización.
Asimismo, de acuerdo con estadísticas
de la Secretaría de Salud, del Hospital Psiquiátrico “Juan Narro” y de los
Servicios de Salud Mental de la UNAM, cada año aumentan el 30 por ciento los
intentos de suicidio de niños de entre 8 y 10 años, y de adolescentes de entre
15 y 17 años, de los cuales más de ,3000 logran su propósito, y esto es muy
lamentable.
Es así que el desafío es enorme en
cuanto a la construcción de políticas públicas que permitan:
1.- La posibilidad de la denuncia del maltrato infantil.
2.- Las políticas públicas para
protegerlos de la violencia física y psicológica que pueden causar graves
problemas emocionales en el desarrollo de la infancia y la adolescencia.
Lograr una mayor participación social
para mejorar su entorno familiar, escolar, social o de cualquier otro tipo.
El inicio de toda transformación social
parte necesariamente de la forma de consciencia colectiva, es por ello que
debemos tomar acciones eficaces de prevención y atención para lograr una salud
mental entre los menores de edad que comprendan acciones y campañas de
promoción y de prevención así como de detección e intervención de los
trastornos mentales y del comportamiento. Así como la coordinación de un
programa nacional dirigido a niñas y niños adolescentes donde participen de
manera articulada las instancias de salud, educación y desarrollo y asistencia
social.
En virtud de todo lo anterior esta
iniciativa con proyecto de decreto tiene como objetivo lograr como un derecho
de las niñas y niños y adolescentes el derecho a la salud mental, misma que
evite consecuencias físicas, cognoscitivas, emocionales que puedan repercutir
en miles de niños y jóvenes en el país, al tiempo de provocar alteraciones en
la conducta y el abandono escolar con las graves consecuencias sociales que
esto trae.
Es por ello que proponemos esta adición
al III párrafo del Artículo Siete de la Ley Para la Protección de los Derechos
de Niñas, Niños y Adolescentes, para que en el Programa Nacional para la
Atención de los Derechos de la Infancia y la Adolescencia se dé privilegio a
las acciones tendientes a fomentar la salud mental promoviendo prácticas de
respeto de los derechos de las niñas y niños en un ambiente de paz y armonía y
tolerancia como elementos básicos de la convivencia social a través de
actividades educativas, socioculturales, deportivas, recreativas y de salud
para el buen funcionamiento cognoscitivo, afectivo y conductual; así como el
despliegue óptimo de sus potencialidades individuales donde se incluyan
programas de prevención, detección e intervención.
Gracias a todos los que pusieron
atención a esta propuesta, creo que es muy importante proteger a los niños y
darles la intervención oportuna.
Gracias, Presidente.
(A P L A U S O S)
- EL C. PRESIDENTE SENADOR GONZALEZ
MORFIN: Muchas gracias, Senadora Villaescusa. Las iniciativas relativas al Código Penal y a la Ley Para la Protección
de Niñas, Niños y Adolescentes se turnan a Comisiones Unidas de Justicia y de
Estudios Legislativos Primera; y el proyecto de reformas a la Ley General de
Educación se turna a las Comisiones Unidas de Educación y de Estudios
Legislativos Primera.
Compañeras y Compañeros senadores:
Informo a ustedes que recibimos una solicitud de licencia del Senador Héctor
Miguel Bautista López para separarse de sus actividades legislativas a partir
del 30 de abril del 2012….)
Balance de las legislaturas LX y LXI
Senadora Leticia Jasso Valencia del Partido Nueva Alianza: Con su permiso, señor Presidente. Honorable Asamblea: Tengo el gusto de
hacer uso de esta tribuna, en lo que históricamente es el cierre del Segundo
Período de Sesiones Ordinarias del Tercer Año del Ejercicio Constitucional,
llego ante ustedes con la convicción de que las fracciones parlamentarias y los
senadores independientes hicimos nuestro mejor esfuerzo, teniendo como
referencias los altos intereses de nuestro país.
Aún así, debemos reconocer que mucho se
quedó en el tintero, pero no por falta de patriotismo, por falta de entusiasmo
ni malicia o comodidad, sino porque siempre habrá temas que serán motivos de
discusión en esta soberanía.
Toda obra humana es perfectible, y ello
me impulsa a hacer votos porque la siguiente legislatura logre lo que nosotros
no alcanzamos, porque hay que entender que la agenda nacional no puede ser
única y definitiva, sino móvil y cambiante como lo son las circunstancias que
mueven al país, las internas y externas, porque este siglo XXI ninguna nación es
totalmente independiente en el marco de un mundo globalizado.
No es disculpa afirmar que por la
crisis económica internacional México también tiene parte de sus problemas,
también debemos aceptar que algunos emergen de su pasado histórico.
Debemos reconocer que algunos otros sí
son generados por su relación con la economía internacional, como por ejemplo,
la crisis del campo que obedece a factores internos y externos o incluso a
desastres naturales auspiciados por el cambio climático.
Aún más, algunos se ha reproducido
últimamente como lo es el auge del tráfico de drogas y la delincuencia
organizada, debiendo qué manifestar que es una realidad, que si en el norte de
América no hubiera tanto mercado en el sur del continente no existiría tanta
producción para atender la demanda.
Desde luego, señoras y señores
senadores, nuestro papel no es salir a la calle a combatir la delincuencia,
pero sí lo es fortalecer al estado mexicano y a sus instituciones con un
trabajo legislativo que toque la médula de nuestros problemas.
Enfrentamos problemas en materia de
salud como el virus de la influenza, lo que debe de hacernos reflexionar para
adecuar el marco legal y fortalecer las medidas para la prevención, ya que no
debemos olvidar que somos 113 millones de mexicanos, según el último censo.
Justo es reconocer que a Sexagésima y
la Sexagésima Primera Legislatura logramos construir consensos a pesar de las
diferencias ideológicas de los grupos parlamentarios, hubo avances y
estancamientos, pero no retrocesos en la construcción de un país cada vez más
democrático.
Fuimos leales observadores y receptores
de las necesidades y los reclamos de una población cada vez más numerosa, que
reclama empleo, seguridad, alimentación, salud y educación entre otras tantas y
tantas necesidades.
Los aliancistas consideramos que los
trabajos desarrollados por estas Legislaturas integran un importante aliciente
en el marco regulador que permite los alcances que nuestro país requiere.
Cierto es que siempre habrá legislaciones
por actualizar, modificando o creando nuevas disposiciones que permitan la
óptima convivencia social, los senadores independientes apoyamos el trabajo de
los grupos parlamentarios para que se aprobaran las iniciativas entre las que
destacan, la Ley de Petróleos Mexicanos, la Ley para el aprovechamiento de
energía renovable y el financiamiento de la transición energética; Ley de la
Comisión Nacional de Hidrocarburos; Ley para el Aprovechamiento Sustentable de
Energía; la nueva Ley del Amparo; Ley General de Víctimas; Ley General para
Prevenir, Sancionar y Erradicar la Trata de Personas, Ley para la Protección de
Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas; Ley General de Cambio
Climático; Ley General de Protección Civil; Ley de Registro Nacional de Datos
de Personas Extraviadas o Desaparecidas, Ley de Firma Electrónica Avanzada; los
proyectos de reformas y adiciones a los artículos d24, 27, 40, 73 y 102 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La reforma a la fracción III del
artículo 109 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, que si bien, significó un
avance pudiera aspirar a la extensión total del impuesto a pensionados y
jubilados.
En el rubro educativo, el Partido Nueva
Alianza, refrenda su compromiso de garantizar que la educación debe ser laica,
gratuita y obligatoria, pero la gratuidad implica que las escuelas pública
cuenten con tarifas preferenciales en el pago de servicios, como son el agua y
la electricidad, propuesta que no llegó a concretarse, pero que confiamos que
en un futuro cercano que analice y se lleguen los consensos para su aprobación.
Igualmente la gratuidad implica que el
presupuesto de Egresos se logre aplicar por lo menos el 8 por ciento del
Producto Interno Bruto a este rubro, como lo marca la Ley General de Educación,
porque estamos convencidos que el desarrollo de un país se mide por los pasos
en que se avanza en la educación.
Estamos a favor de que México crezca en
todos los ámbitos, porque nuestro país es un país noble, con una situación geográfica
privilegiada, con gente trabajadora, y es por ellos y por nosotros, por las
futuras y presentes generaciones que debemos generar cambios estructurales que
permitan el progreso y desarrollo desde la zona rural más alejada hasta las
grandes urbes que tenemos en nuestro hermoso México.
Finalmente expresamos nuestro
agradecimiento al trabajo de los integrantes de los órganos de gobierno, la
Mesa Directiva y la Junta de Coordinación Política por agendar los trabajos y
escuchar la voz de los senadores independientes, a las Comisiones, que dieron
trámite y seguimiento, a nuestro trabajo legislativo, a todos y cada uno de los
compañeros legisladores, a todo el personal que labora en esta Honorable Cámara
de Senadores, quienes con su colaboración han hecho posible el trabajo
conjunto.
Fue un honor haber trabajado con todos
ustedes, y principalmente para los ciudadanos de nuestros estados y de nuestro
país, cumplimos, señores.
Muchas gracias.
Senador Ricardo Monreal (PT): Ya pusimos
orden, Senador Pablo Gómez, están pidiéndoles a todos los que no son senadores
que se retiren del recinto.
Ciudadanos legisladores, la sesión de
hoy, esta, la solmene no debe de ser una sesión más, esta es una sesión solemne
de clausura de esta legislatura, pero dada la vigencia de seis años de nuestros
cargos senatoriales, la pregunta obligada es cómo podemos calificar el
desempeño legislativo en este sexenio. Es decir, de ambas legislaturas.
Hay muchas maneras de abordar este
desempeño, la forma más elemental es utilizar un criterio cuantitativo,
determinar el número de iniciativas, compararlas con otras legislaturas, y
aunque es importante este comparativo y esta estadística legislativa, no deja
de ser sino un criterio muy elemental ya que no dice nada sobre la calidad, la importancia
y la efectividad de estas iniciativas, pudimos haber obtenido el récord
histórico de iniciativas presentadas y apoyadas, pero no haber cambiado ni un
centímetro el curso de la historia con ninguno de ellos.
Otro criterio cuantitativo es destacar
el número de reformas y modificaciones constitucionales impulsadas en que
ciertamente fuimos prolijos, pero tampoco nos dará luces sobre la
trascendencia, si es que la hubo, el paso por este Congreso de la Unión.
Parchar la Constitución no es precisamente
una obra legislativa que se pueda presumir, sobre todo si se carece de una ruta
de largo alcance, de una visión integral de reforma y si los parches carecen de
pegamento social, que es la aprobación ciudadana.
Seis años de imponerse mayorías
groseras en modificaciones constitucionales que profundizaron un proyecto
económico neoliberal que se resisten en seguir aplicando el PRI y el PAN; un
proyecto económico que ha permitido el saqueo de los recursos públicos y
lamentablemente una tolerancia casi complicidad a la corrupción de Estado
institucionalizada, tolerada y promovida por el gobierno y sus principales
personeros y defensores.
Delincuentes de cuello blanco que no
han sido tocados, todavía hoy en el Estado de Coahuila y muchos otros se padece
la impunidad de éstos hombres que incluso aquí defendieron el PRI y el PAN como
impolutos y honestos, y que no eran sino verdaderos ladrones que afectaron las
finanzas del país, que se mantienen y se mantendrán en la impunidad todavía
unos meses, hasta cuando llegue el cambio verdadero.
Casi seis años han transcurrido después
del fraude electoral que permitió la usurpación de la Presidencia de la
república, seis años de imponer un modelo económico y un modelo político.
El pueblo de México no olvidará esta
afrenta, nunca olvidará este trayecto de tiempo en la historia, porque los
resultados que se observan y se padecen no pueden ningún mexicano consciente,
libre de ataduras ideológicas o políticas, incluso económicas, no puede
negarlo.
Más de 60 mil muertos en esta guerra
estúpida que ahora nadie quiere aceptar su corresponsabilidad.
Desde un principio la izquierda la
cuestionó, el PRI y el PAN la avaló, pero la contienda permite entre ellos dos
que ahora se niegue.
Esta Cámara permitió que se instauraran
figuras jurídicas ominosas que deben sentirse avergonzados los que las
aprobaron, el arraigo, el testigo protegido, todas estas figuras. Pero lo más
grave figuras que acentuaron y profundizaron la desigualdad y la pobreza.
Figuras jurídicas que permiten la persecución de movimientos sociales y
de criminalizar la protesta social. Y el Senado ha guardado silencio.
Hoy deberíamos estar elevando la voz, y
lo hago por la persecución absurda, injusta, criminal del gobernador de
Michoacán contra estudiantes indefensos, que lo único que afirmaban y luchaban
era tener espacios en casas de estudiantes para los pobres. Eso es lo que
quiere el PRI finalmente, gobiernos corruptos, represores, gobiernos que
protegen al crimen organizado, pero son implacables con los estudiantes.
Y qué decir del patrimonio, esta
Legislatura permitió el saqueo, permitió el que ahora absolutamente pueda ser
privatizado a través de las figuras denominadas “PPS”, asociaciones públicas
privadas, el instrumento más pernicioso en la historia de este país, en donde a
partir de su aprobación puede privatizarse todo. Hoy hay un anuncio y se
sienten orgullosos porque van a poderse privatizar cárceles.
Nosotros nos opusimos y hoy se sienten
contentos, inauguran cárceles para jóvenes en lugar de crear universidades para
jóvenes.
Un saqueo enorme provocado por leyes
que aquí aprobó la mayoría del PRI y del PAN.
Se endurecieron penas y sanciones y no
se atendió la causa que origina la práctica de conductas antijurídicas, seis
años de inmundicia y de decadencia política.
Se renunció por este Senado y de
acuerdo con la Constitución es quien vigila la política exterior, de manera
exclusiva, se renunció a vigilar y a ejercer el mandato constitucional de ser
un vigilante escrupuloso de la política exterior y se permitió, se aprobó por
la mayoría que nos representaran diplomáticamente en países importantes del
mundo políticos corruptos, mediocres, incapaces. Eso se permitió, la diplomacia
mexicana convertida en un refugio de políticos corruptos exiliados del propio
sistema.
Yo no me siento satisfecho. Es más, me siento triste, pero seguiremos
siendo de oposición.
Yo no sé cómo se puede decir que hemos
cumplido. ¿Con qué hemos cumplido?
Por qué se sienten tan alegres, si la
gente nos va a recordar como, es más, creo que está mejor calificado los
policías de tránsito de Tultitlán, que es una corrupción y una pesadilla pasar
por ahí. Algún día vayan en un carro con placas de provincia y es una
pesadilla. Bueno, pues ese policía de Tultitlán puede estar mejor calificado
que un senador.
O bien conforme al criterio de
evaluación ciudadana, compañeros y compañeras legisladores, no quisiera
recordarles, pero tengo que hacerlo, llevamos seis años reprobados o pasando de
panzazo entre 4.5 y 6 máximo. Están mejor calificados los jueces de Barandilla
de San Fernando Tamaulipas.
Por cierto la mayoría de los ciudadanos
sigue ubicando como la obra de arquitectura e ingeniería constitucional más
trascendente de esta Cámara, este nuevo edificio y su costo paranoico este
edificio.
Es también dudosa, muy dudosa la
cantidad derogad y la calidad de la
obra.
El nuevo edificio del Senado, sólo
superado en opacidad de indignación ciudadana por la Estela de Luz que se
encuentra paradójicamente en la misma avenida de Reforma. Sé que algunos no
estarán de acuerdo conmigo, los respetaré porque deseo que hagan lo mismo con
mi posición, es un balance negativo.
Le pediría al senador presidente, que
ha sido tolerante, en mi tiempo y no quiero tampoco abusar en esta última
sesión, debe de entenderme, ciudadano presidente que las últimas sesione los he
dejado tranquilos y no he estado abordando la tribuna, entonces me he esforzado
un poco hoy por quitarles un poco de tiempo, pero le pediré que pueda plasmar
íntegro este documento.
Amigos también dejo en esta
legislatura, aún del PRI, aún del PAN, en lo individual tuve conversaciones que
me sorprendieron muy en el fondo, pero sé que no todos pueden ser calificados
de manera general, no lo voy a hacer, a todos les tengo respeto, es simplemente
mi posición política. Muchas gracias. (Aplausos).
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Gracias, senador. Como lo ha solicitado, el documento quedará insertado íntegro
en el Diario de los Debates.
Se concede ahora el uso de la tribuna
al senador Dante Delgado, del grupo parlamentario Movimiento Ciudadano.
-EL C. SENADOR DANTE DELGADO: Senador
presidente, compañeras y compañeros senadores, llegamos al término de esta
legislatura con algunas satisfacciones, aunque con un número enorme de
pendientes que mantienen en duda al Poder Legislativo de manera directa ante la
ciudadanía, y de manera general con la historia del país.
En otras palabras, el cumplimiento de
nuestro deber como legisladores ha estado por debajo de los afanes y las
demandas nacionales, ni siquiera podríamos decir que logramos lo que fue
política y democráticamente posible, ciertamente no todo el esfuerzo es
perdido, pero sí buena, muy buena parte de lo positivamente logrado fue a pesar
de los acuerdos populares partidocráticos, en este Senado y en la Cámara de
Diputados o con las intervenciones de los poderes fácticos.
El grupo parlamentario de Convergencia,
y hoy de Movimiento Ciudadano, llegó en 2006 con un clara mandato de la
ciudadanía, defender las causas de las mayorías, mitigar la dolorosa
desigualdad que agobia a México; avanzar hacia la democracia, lograr una
sociedad incluyente igualitaria, influir en la transformación de la vida
pública del país.
Lamentablemente ¿qué se ha logrado?
¿Qué cambio económico se ha logrado en materia fiscal, en materia de
prestaciones sociales? Y la respuesta es que nos hemos convertido en
solapadores de la ineficacia gubernamental, de un modelo económico que no ha
sido suficiente para atender las necesidades del país.
Y se le ha querido cargar a la clase
trabajadora, sus demandas la hicieron otras legislaturas en materia del Seguro
Social, ahora ustedes, la mayoría mecánica del PRI y del PAN sacaron lo que se
llama la reforma del ISSSTE con la nueva Ley de esa institución, que sepultó el
principio solidario de seguridad social en el país, y que fue objeto de que
millones de mexicanos en la parte final de su vida laboral tuvieran magras
expectativas.
Ustedes votaron las iniciativas
propuestas desde el Ejecutivo Federal en materia fiscal, creando el Impuesto
Empresarial de Tasa Unica, el IETU, que atenta en contra de pequeñas y medianas
empresas, el Impuesto de los Depósitos en Efectivo que grava a los pequeños
ahorradores sin resolver el problema de la informalidad y, por supuesto,
aumento a las gasolinas, que es un atentado contra la pobre economía nacional,
porque aumentaron sus impuestos, tuvimos entonces que la Reforma Fiscal
aprobada, hecho con simple ánimo recaudatorio y no estimularía la economía
nacional, y mucho menos beneficiaría a las clases más vulnerables.
Hoy lo reiteramos, y nos vimos otra vez
frente a verdades fiscales a medias, y con propuestas inequitativas y adversas
para el desarrollo nacional, y qué decir de la Reforma Electoral que hoy
todavía tantos dolores de cabeza le ocasionan a nuestras débiles instituciones
democráticas, lo advertimos entonces y no se hizo caso, se cerró el acceso a
las candidaturas ciudadanas y se pervirtió el sistema de medios de comunicación
al secuestrarlo por parte de la partidocracia y distribuírselos entre ellos,
cancelando cualquier posibilidad de competencia política.
Y qué decir de la actitud del Ejecutivo
Federal, que habiendo tenido por mandato constitucional el derecho de vetar
esta ley electoral regresiva, la promulgó, y dos años después envía una
supuesta reforma política profunda en la que plantea lo que en esta tribuna
había defendido nuestra fracción parlamentaria, las candidaturas ciudadanas.
Y qué tragedia ver que los mismos que
se opusieron a ella levantaban la voz para aprobarla, para plantearla, para
reformar un artículo que no se tenía que reformar como el 35 constitucional,
que ya da el derecho de votar y ser votados, pero que no hacía ninguna reforma
en el 41 constitucional, que es el que le permite la viabilidad de las
candidaturas ciudadanas que actualmente ese artículo cancela cualquier
posibilidad de acceso a radio y televisión, que no sea a través de los partidos
políticos.
Y que decir de la reforma que cancela
la posibilidad de la revocación del mandato a las autoridades incompetentes a
los que no cumplen en todos los niveles de gobierno, municipales, estatales,
federales, en todos los poderes de la unión....
(Sigue 7ª parte)…en todos los niveles
de gobierno, municipales, estatales, federales, en todos los poderes de la
unión, porque se agravia la libertad individual.
Hemos sostenido que requerimos más
sociedad y menos gobierno, y nosotros aquí hemos venido alentando el
crecimiento paquidérmico de la ineficiente aparato burocrático federal y de los
aparatos estatales, es decir, es decir, de los órganos electorales, federal,
estatales, los tribunales locales, electorales y federales que tanto le cuestan
al país, y tampoco resuelven en la vida democrática del país.
Y en materia de seguridad de justicia,
nosotros planteamos, desde el 2003, una reforma integral en la que se plantea
quitarle el monopolio de la acción penal al Ministerio Público y dársela al
ciudadano.
Que cualquier mexicano pueda presentar
sus acciones de defensa legal directamente de los jueces, como pasa en materia
civil, mercantil, fiscal, administrativa, incluso electoral.
¿Por qué se evite el Ministerio
Público? porque son los instrumentos de control político de los ejecutivos
estatales y de los ejecutivos federales, y porque ya se acostumbraron al poder
meta constitucional, por eso hay un gato pardismo, donde el PRI y el PAN, que
se alternan acciones de gobierno, lo único que quieren tener son los
instrumentos represivos para lastimar a la sociedad y no para orienta el
legítimo derecho a la justicia, que sigue añorando y esperando esta sociedad.
Y en materia de justicia ¿Dónde
habíamos llegado? La atrocidad de haber permitido, de manera directa, el
allanamiento de morada, y qué bueno que se levantó la sociedad para evitar este
atropello que ya había cometido este Senado de la República, con el voto en
contra nuestra, por cierto.
Amigas y amigos:
La materia de seguridad y justicia ha
sido para brindar un paraguas de impunidad a los órganos del estado
incompetentes, ineficaces, que ejercen abuso de poder e impunidad, y ha sido
para agraviar a los ciudadanos en lo particular.
Todas nuestras reforman han sido para
darle un manto de protección a las burocracias incompetentes y para restarle
derechos a los ciudadanos. En eso consisten nuestras reformas.
Suscribo aquí lo dicho por Ricardo
Monreal, cuando habla de lo que se llamó: “El derecho ciudadano a ser
escuchado, de ser atendido”, y que no fue más que una acción regresiva para
llevarlo al arraigo.
Dicen: “Elevamos a nivel constitucional
el derecho a la inocencia”, así lo decían los spot de la Cámara de Diputados.
Hicimos todo lo contrario.
Ya la Constitución establecía: “Las 72 horas
o la posibilidad de prórroga al doble de tiempo para acreditar tu inocencia”,
pero ahora no. Autorizamos nosotros los 40 días, y además del doble del tiempo.
¿Para qué? Para darle mayores elementos a las autoridades incompetentes, y para
lastimar más al ciudadano.
Y ¿Qué decir, en materia de deuda
pública?
Y ¿Qué decir del pago o de los
intereses de FOBAPROA?
Y ¿Qué decir del crédito y la banca de
desarrollo, que tanto han limitado al país?
Ustedes autorizaron la comisión de
largo nombre, y se lo voy a decir para que no se les olvide: “Comisión Especial
para Determinar las Causas del Bajo Financiamiento para el Desarrollo y del
Elevado Monto de la Deuda Pública y sus Instrumentos, precisar
responsabilidades y proponer acciones correctivas con el objetivo de alentar el
crecimiento del mercado interno y promover el desarrollo del país”.
Hicimos 3 libros, y juntos, el PAN y el
PRI, aquí, inexplicablemente terminaron la Iniciativa que se estuvo elaborando
con la participación de muchas personalidades, que alentó las compañeras
Senadoras María de los Angeles Moreno; Yeidckol Polevnsky, con el equipo que
nosotros conformamos, y no hubo banca de desarrollo. ¿Saben por qué? porque no
le convenía a la Secretaría de Hacienda, porque quieren frenar que no haya
bancos estatales.
Qué tragedia que aquí mismo en esta
misma legislatura no hayamos defendido el derechos de los mexicanos a tener
crédito barato a niveles en que lo tienen esa banca extranjerizada en sus
propios países de origen.
Y decían: “Que el Banco de México no
tiene facultades? Claro que las tiene, y no intervino.
Y no sé si ustedes estuvieron
pendientes de las declaraciones, hace unos días, de hecho Banorte, que se está
quejando, precisamente, de eso, de cómo la banca extranjerizada capitaliza sus
finanzas.
Y ¿Saben cuál es la tragedia? El nuevo
Director General de esa institución bancaria, por cierto la única nacional que
queda, era el anterior Gobernador del Banco de México.
¿Por qué se tuvo que dar cuenta de ello
estando al frente de una institución bancaria, y no como tenía que ser cuando
desempeñaba el cargo de Gobernador del Banco de México?
Y aquí se dijo en esta tribuna, y aquí
se explicó que se cobran 200 diferentes comisiones a los usuarios del crédito
mexicano, y se le da privilegio a Hacienda sobre las necesidades de la
sociedad.
¿Qué no nos damos cuenta que falta de
crecimiento del país ha sido porque no hay recursos para la inversión?
Y qué decir de la entrega del
patrimonio nacional. Fue el Frente Amplio Progresista el que defendió en contra
de la Iniciativa perversa enviada por el Ejecutivo Federal, en el que quería la
privatización de PEMEX, que es uno de los únicos instrumentos como palanca de
desarrollo que le quedan al país.
Y qué decir de la manipulación de los
medios de comunicación cuando quieren plantear que PETROBRAS es el modelo a
seguir, cuando sucedió todo lo contrario.
En PETROBRAS, vinieron a México a
aprender en el Instituto Mexicano del Petróleo, es el mismo instituto al que
hoy tenemos casi liquidado, porque prefieren dar contratos a empresas
trasnacionales.
Y allá ¿Saben qué hicieron? Crearon la
Universidad del Petróleo. Y hoy nos presumen lo que es la banca de desarrollo
de Brasil.
¿Saben en dónde vinieron a aprenderlo?
Aquí a México, a Nacional Financiera.
Referente a la prisa que llevan por
terminar, por cierto en sesiones muy Light, en las que hubo duraciones de una
hora y media o de dos, no sé por qué hoy la prisa del Presidente, hoy el
pendiente que tenemos con la sociedad nacional es enorme, y basta dar algunas
pinceladas, que no provienen de lo que nosotros decimos, sino de INEGI, de los
cuadros comparativos de la OCDE, en donde los niveles de productividad en
México están por los suelos, los niveles de pobreza por los cielos, el nivel de
salario digno para sostener a las familias es inexistente, la pobreza
galopante.
Y ¿Qué hemos hecho en el campo? Un
abandono total.
En estos 3 libros se demostró que el
Producto Interno Bruto destinado al campo era del 8 por ciento, y ahora es del
2 por ciento. Ahí encontramos las causas de la migración, el abandono al campo;
ahí encontramos las causas de la falta de soberanía alimentaria, por eso
tenemos que importar, de manera relevante, los alimentos que consumimos los mexicanos.
Todos esos son los pendientes que deja
esta Legislatura.
Claro que tenemos satisfacciones, la
oportunidad de haberlos tratado a ustedes, muchos buenos amigos.
La tragedia del país, es que las
decisiones legislativas no se toman aquí. Se toman por grupos cerrados, por
grupos de interés, en donde las bancadas, solamente cumplen los acuerdos y
siguen hundiendo al país. Yo sé, en estricta conciencia, en un voto íntimo, en
la profundidad de la valoración del trabajo y del compromiso con la Patria,
muchos de ustedes saben que han votado en contra de sus propias convicciones.
Y tan es así, que el IETU que
fue aprobado aquí y en la Cámara de Diputados, por el PRI, hoy, en momento
electorales, piden que desaparezca; sin tan fácil era no haberlo creado.
Esas son las contradicciones de este
país.
Un México, en el que es más importante
lo que se dice que lo que se es; esa es la tragedia de México; es parte de la
perversión política; de la perversión económica; de la perversión financiera;
de la perversión de la seguridad pública; de la perversión de la moral pública.
Por eso, puede decirles, que en lo
personal, sé que dejamos muchos pendientes. Reconozco el trabajo de todas y
todos de ustedes en comisiones. Y sé, que lo que se hizo bien, está para la
salud de la República.
Ésa era nuestra obligación. No se trata
de venir a enumerar lo que se hizo bien. Debemos insistir, en lo que se hizo
mal; tenemos que existir en lo que se dejó de hacer; porque cuando una camisa
está sucia, no queda una parte limpia, la camisa es limpia y lo que se advierte
son las manchas; y el problema es que nosotros, dejamos muchas manchas en la
prenda de la dignidad de nuestra Patria.
Les deseo éxito en el desempeño de sus
actividades profesionales. Envío para ustedes y sus familias, un saludo
respetuoso y que adviertan que las diferencias no son con las personas; las
diferencias se dan en función de un modelo de desarrollo que queremos para
nuestro pueblo.
Y hoy ustedes siguen insistiendo en más
de lo mismo. Crean mesas de la verdad, para asuntos insubstanciales, y no se
pronuncian sobre los grandes temas nacionales, que tenemos que cambiar, para
que en esta Patria se preserve la paz, la armonía.
Si nosotros no nos damos cuenta que ése
es el gran riesgo, no tendremos visión para seguir sirviéndole a México.
Muchas gracias, por su tolerancia,
presidente. (Aplausos)
Arturo Escobar y Vega, del grupo
parlamentario del PVEM: Hoy hace casi seis años, comenzamos nuestros encargos
llenos de energía y por supuesto llenos de anhelos. Habíamos comprometido
nuestra palabra con la sociedad, para que en los siguientes meses y años se nos
exigiera, el cumplimiento de todas y cada una de las propuestas que como
candidatos y nuestros candidatos le propusimos al país.
Así fue como llegó la época de trabajar
para transformar las promesas, en una realidad nueva para nuestro México.
En esta legislatura se presentaron,
más-menos, más de 2800 iniciativas, y más de 150 instrumentos internacionales.
No obstante lo bondadoso de estas
cifras, de las cuales son de dominio público, también tenemos que reconocer,
que estamos todavía muy lejos de salir con números o activos que podamos
presumir a la sociedad.
No tengo la menor duda, que en
comparación con la 58 y 59 legislatura del Senado, fuimos mucho mejores, mucho
más productivos y con reformas de mucho mayor calado que ellos.
No tengo la menor duda, que en
comparación con las colegisladora de las 60 y 61, fuimos mucho más exitosos en
el trabajo de construcción de iniciativas y de construcción de acuerdos.
Sin embargo, sin embargo, creo que
todavía, en comisiones de este Senado, hay instrumentos legislativos de enorme
valor, que lamentablemente no tuvimos el talento para construir acuerdos y
convertirlos en ley.
Debemos de recordar que hace
aproximadamente seis años en el entorno político en que nos encontrábamos,
México estaba absolutamente dividido. Un proceso electoral y movimientos
ciudadanos en las calles, mostraron su gran inconformidad con las entonces
instituciones de nuestro país, y su realidad precaria en varios aspectos:
pobreza, inseguridad y corrupción.
Afortunadamente, sin duda, y hay que
reconocerlo, ha habido grandes avances en estos temas. Hicimos una reforma
electoral, que independientemente que no generó, en su totalidad, consensos
absolutos, hoy, sin duda, es un instrumento que está aprueba y genera mayor
certidumbre, que las reglas con las que competimos en el año 2006.
Dicho lo anterior, creemos en mi
partido vehementemente, que debemos tomar aquello como experiencia, y como
experiencia digo lo ocurrido en el 2006, especialmente durante la campaña y
después de la campaña, para evitar como políticos que nuestra sociedad se
vuelva a dividir, como se dividió.
Tenemos que ser responsables, tanto en
el discurso como en la propuesta.
El 2 de julio va a amanecer. Y México
mantendrá sus problemas, sus retos, sus obstáculos; por supuesto sus amenazas.
Pero más importante que todo, tendremos una vez más, como clase política, la
oportunidad de conciliar a nuestro país.
Respetando el principio más importante
de la democracia: el respeto de la decisión de las mayorías.
No podemos tomar protesta, como
servidores públicos, para respetar la ley y la Constitución; y por otro lado,
no asumir con responsabilidad las decisiones de las mayorías.
Recordemos amigos, que los discursos de
enfrentamiento, descalificación y desgarro al adversario, únicamente llevan a
la división de la sociedad.
Y estoy convencido, que todos y cada
uno de ustedes, no quieren repetir la historia de 2006.
Este Senado ha tenido un espíritu
reformador desde el primer día. Inclusive recuerdo, en esos primeros meses, la
iniciativa del senador Beltrones, para constituir la ley de la reforma del
Estado.
Había desde el inicio ganas y voluntad
de transformar las instituciones. Por supuesto que hubo un marco, en materia,
por ejemplo, de justicia penal; donde inclusive reformamos la Constitución, que
no tengo la menor duda, en el mediano plazo va a ser un instrumento legislativo
de ejemplo; que nos permita que tanto la autoridad administrativa, Ministerio
Público, como el Poder Judicial tengan mejores y mayores instrumentos para
darle a México: justicia, paz, tranquilidad y libertad.
Estoy convencido, también, que en el
año 2008, perdimos la oportunidad de hacer una gran reforma energética.
Y recuerdo lo que acabo de decir.
Cuando tomamos protesta para respetar la Constitución, y especialmente respetar
lo que las mayorías definieran, en este órgano legislativo, en ese año 2008, no
permitimos que una mayoría se pronunciara para reformar Petróleos Mexicanos y
convertirlo en una empresa moderna, competitiva, que rindiera .en una empresa
moderna, competitiva, que rindiera cuentas, y que realmente fuera una palanca
de desarrollo para nuestro país, y que realmente fuera el instrumento que
permitiera a los mexicanos que esa riqueza que tenemos en materia energética se
traduciera a una mejor calidad de vida.
En ese espacio del 2008 ganó la
minoría, no gano la mayoría; pero no tengo la menor duda que pertenezco a una
generación de políticos que hay en todos los partidos, repito, que hay en todos
los partidos, y más tarde, pronto, que nunca, habremos de darle a México una
transición energética que convierta en realidad el anhelo de que aquello que
tenemos, de recursos naturales, nos va a permitir darnos un verdadero
bienestar. Y que la premisa que Petróleos Mexicanos es para todos los mexicanos
sí se convierta en realidad.
Quiero detenerme y felicitar a la
Comisión de Medio Ambiente del Senado de la República, ya que en números
preliminares ha sido la comisión más productiva del Senado de la República, un
especial reconocimiento a sus dos presidentes en estas dos Legislaturas:
senador Jorge Legorreta y el senador Francisco Agundis, así como todo el equipo
técnico de la Comisión.
Quiero agradecer y destacar la
aprobación de la Ley de Responsabilidad Ambiental, no tenemos la menor duda que
una vez que la Colegisladora la dictamine y el Presidente la publique será el
instrumento legislativo más relevante en la historia de México en materia de
medio ambiente.
Quiero agradecer y reconocer, y le pido
al presidente les podamos dar un aplausos a todos los colaboradores del Senado,
trabajadores. Ahora sí que sin ustedes no seríamos nadie.
Muchas gracias. (Aplausos)
Quiero agradecer a mis compañeros
integrantes de la Junta de Coordinación Política. Al senador Manlio Fabio
Beltrones a quien reconozco como ser uno de los políticos más destacados de
este país, sin su presencia este Senado no hubiera aprobado muchas de las cosas
que hoy nos enorgullecen.
¡Felicidades, señor senador! (Aplausos)
Quiero reconocer al senador González
Morfín por su siempre diligente, por su siempre honesta respuesta representando
al partido en el Gobierno y a la mayoría en este órgano legislativo.
Quiero reconocer a Dante Delgado, al
senador Ricardo Monreal, independientemente de las diferencias siempre
estuvieron ahí para dar un buen consejo. Ha sido un orgullo poder trabajar con
ustedes, senadores. (Aplausos)
Quiero, en lo particular, y como un
pronunciamiento personal, agradecer a tres senadores, tres senadores que en mi
opinión si hubiera reelección legislativa tendrían que quedarse por simples
resultados, por su forma de ser, por la forma que construyen acuerdos, por su
talento, por su conocimiento técnico de muchos temas: al senador Francisco
Labastida Ochoa, espléndido senador y un caballero de la política; al senador
Ricardo García Cervantes, que desde el año 2000 lo conozco y representa lo
mejor de la clase política mexicana; y a quien considero el mejor abogado del
Congreso Mexicano, al senador Tomás Torres. (Aplausos)
Quiero terminar subrayando y
agradeciendo a mi grupo parlamentario. Les agradezco profundamente todo su
apoyo, confianza y lealtad. Compartir estas dos legislaturas con ustedes ha
sido una de las experiencias más gratas de mi vida. Mi profundo y eterno
reconocimiento a mi bancada.
Muchas gracias. (Aplausos)
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Gracias, senador Escobar y Vega.
Tiene ahora el uso de la tribuna el
senador Carlos Navarrete Ruiz, del Grupo Parlamentario del Partido de la
Revolución Democrática.
-EL C. SENADOR CARLOS NAVARRETE RUIZ: Gracias,
senador presidente.
Compañeras senadoras; compañeros
senadores:
Hoy en esta Sesión Solemne estamos
terminando los trabajos del último período ordinario de sesiones, y en la
realidad, aunque terminamos hasta agosto, también estamos terminando nuestra
actuación en dos legislaturas. Todos sabemos que el próximo primero de julio
los mexicanos, los electores, vamos a elegir al titular del Poder Ejecutivo, a
quinientos diputados federales, a ciento veintiocho senadoras y senadores que
van a ocupar los escaños que nosotros ahora ocupamos en esta Cámaras.
En estas dos legislaturas es mi
convicción, y es la sensación que hay en el país en muy diversos sectores, la
Cámara de Senadores se ha reafirmado como una Cámara reformadora, y eso es
necesario subrayarlo. No es el Senado la Cámara de los conservadores, no es el
Senado la Cámara que cierra sus puertas al debate, ni que actúa de manera
conservadora para no avanzar en los temas fundamentales que tiene que discutir.
Esto ha sido posible porque en estos
seis años de trabajo legislativo, en medio de intensos debates parlamentarios,
reconociendo la pluralidad que ha llegado para quedarse, y con pleno respeto a
las opiniones y posiciones políticas de los grupos parlamentarios y de cada
senador y senadora en particular, fuimos capaces de reformar leyes y reformar a
la propia Constitución con la mayoría calificada que se requiere para hacer
viable a nuestro país y para seguir avanzando en el objetivo, aún no logrado,
pero necesario, de que México sea un país donde las leyes estén bien hechas por
los legisladores; pero además se respeten por quienes tienen que aplicarlas.
Cuando asumimos el cargo el 31 de
agosto de 20006 todos recordamos cuál era el clima político que existía en
nuestro país. Había polarización, reclamos en las calles, incertidumbre sobre
el resultado electoral de la elección presidencial y una enorme insatisfacción
por la calidad del proceso que eligió al Presidente de la República.
Los tres partidos de la izquierda
mexicana ocuparon en esta Cámara la representación que nos dieron más de 12
millones de electores con la bancada más numerosa de su historia, 36 senadores
y senadoras de la República. Desde un inicio una pregunta estuvo presente entre
los legisladores de izquierda, ¿Cómo actuar de la mejor manera para
corresponder a quienes nos habían otorgado su confianza para representarlos?
Las senadoras y senadores del PRD
siempre tuvimos clara la respuesta, había que actuar con energía para defender
nuestros puntos de vista, con firmeza para defender principios y nuestro
programa legislativo, y también con inteligencia para hacer valer la
representación de tantos millones de mexicanos en el trabajo legislativo.
Desde un principio rechazamos la
posibilidad de convertirnos en un grupo parlamentario marginal, y actuamos en
consecuencia para hacer valer nuestra opinión, nuestras propuestas, nuestra
presencia política. Cuando se tiene acceso a la tribuna del Senado para
argumentar siempre he dicho que no hay necesidad de gritar; cuando se tienen
propuestas y argumentos para presentar en las comisiones no hay por qué adoptar
sólo una actitud de denuncia; cuando se pueden comunicar ideas, fijar
posiciones políticas ante los medios de comunicación no se debe callar ni bajar
la voz.
Es cierto, muchas reformas no las
compartimos, y defendimos nuestros puntos de vista para terminar votando en
contra de la mayoría parlamentaria, ese es el juego en el Congreso.
Se gana cuando se construye una mayoría
parlamentaria, se pierde cuando se queda en una minoría, pero en ambas
situaciones el PRD hizo valer sus argumentos, su programa, sus convicciones. Lo
hicimos aquí, en la tribuna del pleno, lo hicimos en las comisiones, lo hicimos
en los órganos de gobierno, y cuando votamos en contra, argumentamos por qué lo
hacíamos, pero aceptamos cuando la mayoría parlamentaria se conformaba de otra
manera.
En otras ocasiones construimos mayorías
parlamentarias y no fueron pocas las ocasiones en que las propuestas de las
legisladoras y legisladores del PRD fueron aceptados por otros grupos
parlamentarios, pudimos convences, pudimos proponer, pudimos ser constructores
de dictámenes con mayoría y demostramos, con una bancada como la del PRD, con
la calidad de sus miembros podía lograr dictámenes mayoritarios por el bien del
país.
Por eso, en todo este período exigimos
pleno respeto a nuestra representación, por eso ocupamos 14 presidencias de
comisiones; por eso asumimos responsabilidades en la Mesa Directiva, en la
Junta de Coordinación Política, en el Instituto “Belisario Domínguez”.
Por eso fue posible que se notara la
calidad y la experiencia de las senadoras y senadores del Grupo Parlamentario
del PRD que hoy, y es enormemente satisfactorio, al término de las dos
legislaturas los integrantes de mi bancada son respetados y valorados por
integrantes de todas las bancadas de este Senado.
En momentos críticos, hay que decirlo
también con claridad, el Senado abrió sus puertas para el debate público, para
los foros de consulta, y para las diversas expresiones de la sociedad.
Así sucedió en las reformas que
impulsamos para superar el ambiente de polarización después de la elección
presidencial, y con la Reforma Electoral que hicimos después, que todavía
muchos poderes fácticos no nos perdonan.
Así pasó en el debate energético y en
la Reforma de PEMEX donde el Senado escribió una de las páginas más intensas en
su vida legislativa; así pasó en la emergencia por las consecuencias de la
crisis financiera mundial; en el apoyo a las medidas sanitarias durante la
epidemia de Influenza H1N1; así pasó en el tratamiento legislativo que le dimos
al drama de los padres que perdieron a sus hijos en el incendio de la Guardería
ABC; en la actuación del Senado para rechazar la Ley SB1070 de Arizona en la
interlocución con el Movimiento por la Paz Con Justicia y Dignidad en el
Castillo Chapultepec; en la aprobación de la Ley de Víctimas, que es un orgullo
de este Senado, y que a la izquierda, particularmente la debe de llenar de
orgullo por haber cumplido ese compromiso ;en la participación que tuvimos en
la Reforma Constitucional Sobre los Derechos Humanos.
Todos estos temas y todos estos
acontecimientos forman parte ya de nuestra historia personal y de la historia
del Senado de la República.
Sería prolijo enumerar en esta
intervención las reformas legales y constitucionales que este Senado aprobó, y
sólo quiero subrayar que se lograron avances sustanciales en materia de
economía, de derechos humanos, de justicia, de reforma política, de política
exterior, de derechos sociales, así como los temas que pudimos legislar en
materia de educación, de salud y de cultura.
Este Senado también ejerció sus
facultades en la ratificación, en el nombramiento de cargos diplomáticos y de
órganos del Estado Mexicano.
Pero, compañeras senadores y senadores:
Estoy consciente que cuando se culmina
una gestión llena los momentos del balance y éste siempre es visto desde
ópticas y valoraciones diferentes, lo entiendo bien, desde dentro del Senado y
desde fuera de él, quienes son críticos permanentes de la labor del Congreso
suelen subrayar todas las reformas que no se hicieron, y colocan en segundo,
tercer plano lo que el Congreso legisló.
Los legisladores podemos caer en la
visión contraria, sólo subrayar la labor que realizamos, lo cierto es que este
Senado de la República realizó una gran tarea reformadora, pero también dejo
asignaturas pendientes; éstas últimas, y sólo para subrayar algunas, hay que
destacar que nunca pudimos legislar en materia de radio y televisión, porque
los poderes fácticos existen y se sienten y actúan.
Tampoco pudimos terminar el tema de
justicia miliar, del fuero militar por las mismas razones, por cierto.
Nos faltó una reforma política más
completa integral, nos faltó la profundización de la Reforma de Petróleos
Mexicanos.
No pudimos concretar la reforma fiscal
integral que el país requiere desde hace varios años y que todavía hoy sigue
pendiente, y será materia de la próxima Cámara de Senadores.
Sí, son temas importantes que no fuimos
capaces de abordar y consensar, y que hay que reconocerlo como parte de lo que
no pudimos lograr.
Quiero terminar esta intervención agradeciendo
profundamente a las senadoras y senadores de mi Grupo Parlamentario del PRD por
su confianza otorgada y ratificada para coordinar a este grupo estos seis años.
Con respeto a la libertad de cada uno
para expresar sus opiniones, incluso con la decisión que tomamos de respetar el
voto en consciencia pudimos mantener la unidad del Grupo Parlamentario del PRD.
Con el reconocimiento a la experiencia
y aportación de cada quien, logramos hacer un grupo con influencia y peso en la
conducción del Senado con actitudes de compañerismo y solidaridad cumplimos la
gran responsabilidad de representar a los electores que votaron por nosotros en
el 2006.
También quiero agradecer y reconocer un
hecho que no pasó inadvertido a la opinión pública ni a los medios de comunicación.
Muchos acuerdos parlamentarios y
consensos políticos fueron posibles en el Senado por el respeto y
reconocimiento que se construyó en el trato diario de los coordinadores de los
grupos parlamentarios.
Con estilos personales diferentes, con
trayectorias distintas, cada quien representando posiciones políticas diversas,
luchando por influir en las decisiones, con tonos diferenciados que reflejan la
propia personalidad de cada quien, los coordinadores parlamentarios pudimos
construir una relación de respeto mutuo, de cumplimiento de la palabra otorgada
y de claridad en lo que podíamos avalar o no podíamos avalar.
Esta, señoras senadoras, señores
senadores en estos seis años fue la Cámara de los políticos profesionales que
saben honrar los compromisos y respetar a los adversarios, y esto en los
tiempos que vivimos no es cosa menor.
Reconocimiento también especial merecen
los profesionales de la comunicación que nos acompañaron estos años, hombres y
mujeres de la prensa escrita y electrónica que difundieron lo que ocurrió en
cada sesión, en cada reunión, en cada debate, el Senado también debe estar
orgulloso de la fuente informativa que realizó su mejor esfuerzo en la tarea
profesional.
El 31 de agosto próximo estará
sesionando aquí
la próxima legislatura, las senadoras y
senadores de la república que sean elegidos el primero de julio les va a
corresponder continuar la tarea que nosotros en los hechos culminamos ahora,
aunque terminemos nuestra gestión hasta agosto.
Tengo la plena confianza de que los electores
mexicanos sabrán elegir con inteligencia y esperanza y que la pluralidad, que
hoy es una fortaleza del Congreso no podrá ser eliminada.
Confío que las próximas senadores y
senadores mantengan….
(Sigue 11ª. Parte)… que las próximas
senadoras y senadores mantengan firme el pulso para garantizar la plena
independencia del Senado, ya logramos el equilibrio de poderes, ya lo gramos
que en el Senado no mande el Presidente de la República en turno, sea del
partido que sea, ya logramos una relación de equilibrio y respeto con el Poder
Judicial, ya logramos que aquí los senadores actuemos con cabeza propia, ya
logramos que los gobernadores no tengan bancadas personales, ya logramos que
aquí se decida con libertad, conciencia con cada uno de nosotros, ojalá que en
la próxima legislatura confirme y ratifique esto.
Hoy compañeras y compañeros senadores,
al terminar estas sesiones ordinarias, se puede decir, desde esta Tribuna, con
toda claridad, gracias a los mexicanos que nos enviaron a representarnos.
Las senadoras y senadores del PRD hemos
cumplido con la encomienda que nos dieron, sin que olvidemos nunca la enorme
satisfacción de haber actuado en esta Cámara del Congreso con dignidad, con
orgullo, con convicción, lo que hemos hecho estos seis años, estoy seguro,
ninguno de nosotros ni de nosotras lo podrá olvidar nunca.
Muchas gracias por su atención.
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN: Muchas
gracias Senador Navarrete.
Tiene ahora el uso de la tribuna el
Senador Manlio Fabio Beltrones Rivera, del Grupo Parlamentario del Partido
Revolucionario Institucional.
-EL C. SENADOR MANLIO FABIO
BELTRONES RIVERA: Con su permiso, presidente.
Honorable Asamblea, al igual que mis
amigos quienes me antecedieron en el uso de la palabra, con gran orgullo y
atendiendo la responsabilidad que nos encomendada, acudimos a este corolario de
la Sexagésima Primera Legislatura, el que concluye un periodo, como bien se
dice aquí, de retos y de intenso trabajo político, que ha sido un honor
compartir con todos y cada uno de ustedes.
En lo personal, considero una enorme
distinción el pertenecer al Grupo Parlamentario del PRI a lo largo de estos
seis años y también el presidir la Mesa Directiva y la Junta de Coordinación
Política del Senado.
Y con esas responsabilidades
interactuar con los compañeros legisladores de todos los partidos en un
ambiente, como bien lo hemos visto, no exento de pasión, pero en el que
prevalecieron siempre la cordialidad y el respeto mutuos, porque nos identificó
el compromiso de legislar a favor del interés general.
La intensidad de los debates que han
tenido lugar aquí, junto con las diferencias ideológicas y políticas que nos
distinguen, no ha sido obstáculo para la convivencia y el acuerdo
parlamentario.
Difícilmente podíamos concebir que
después de la alternancia política, la forma de comunicación entre los poderes
de la unión pudieran ser las mismas, en particular cuando los gobiernos
divididos nos obligan a la adopción de una dinámica de trabajo que corresponda
a nuestra pluralidad y a construir una forma moderna de dialogar y de
comunicarnos.
Ya se ha dicho, pero no podemos dejar
de recordar una vez más el momento de instalación del Senado, cuando veíamos de
una elección controvertida y de una polarización política que parecía
irreductible. Muchos pensaban que marchábamos hacia la confrontación y la
ruptura, y no era para menos, el propio fallo del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación reconoció que la elección estuvo en riesgo, fueron
tiempos y situaciones que realmente nos propusimos evitar que se repitieran.
De ahí que nuestra primera tarea fue
pensar en la estabilidad y el diálogo, en el marco apropiado para ello que son
las leyes y las instituciones, fuimos capaces primero de instalar el Congreso y
cumplir nuestros deberes con responsabilidad democrática para aportar a la
gobernabilidad mediante el diálogo la negociación y la construcción de
acuerdos.
Por todo ello, en noviembre del 2006 impulsamos una Ley para la reforma
del Estado que algunos les parecía excesiva, decían: “Es una Ley para reformar leyes que en realidad es una ley convocatoria
con las garantías suficientes para permitir a todos los actores, aún aquellos
que no se reconocían en legitimidad o estaban enfrentados en otros tiempos,
sentarse en una mesa de diálogo y con las posiciones de todos a la vista
avanzar hacia la construcción de una agenda nacional.
Esos fueron los primeros pasos hacia
una reconciliación que nos permitiera superar una ruptura que parecía
ineludible.
Nuestra decisión fue que debíamos
superar el encono, pero también resolver las cuestiones que nos habían llevado
a esa irrepetible situación.
Con base en ese principio del diálogo
democrático es que impulsamos y aprobamos en el 2007 como bien se ha dicho
aquí, una reforma electoral y un nuevo modelo de comunicación política puesto a
prueba en la elección federal intermedia del 2009 en donde tuvimos resultados
democráticamente aceptados, no obstante la intensidad de las campañas y el
nuevo modelo de comunicación política puesto a prueba que por cierto hoy sigue
en su segunda gran prueba en las elecciones del 2012.
También y a partir de la construcción
de ese puente de diálogo construimos una reforma al sistema de pensiones y
evitamos un colapso financiero que hubiera puesto en riesgo inmediato a los trabajadores
en retiro y a sus familias.
Asimismo impulsamos una reforma del sistema de seguridad y Justicia
Penal que nos permitirá transitar del presunto culpable a la presunción de
inocencia.
Fuimos más allá y aprobamos una reforma profunda en materia de derechos
humanos, establecimos en el nivel constitucional, la vigencia de los derechos humanos aún a aquellos establecidos en los
tratados internacionales firmados por nuestro país.
Dotamos a la Comisión Nacional de
Derechos Humanos de la facultad de investigación anteriormente reservada a
Suprema Corte de Justicia de la Nación; regulamos la suspensión de garantías
con un piso esencial de derechos que no pueden ser suspendido por ningún motivo
y que sólo puede ser temporal con la supervisión de la Suprema Corte.
Establecimos un procedimiento
unistancial para el caso de expulsión de extranjeros que violen la restricción
constitucional para intervenir en asuntos internos nacionales y en consonancia
con este espíritu expedimos una nueva Ley de Migración, que reconoce para todo
migrante en nuestro país el más alto estándar de respeto a los derechos
humanos.
Establecimos también una nueva época en
la impartición de justicia en nuestro país con la reforma constitucional y
actualización a la histórica institución del amparo y también con las acciones
colectivas, hecho inédito en el país.
Hemos impulsado una nueva Ley de Amparo, que reconoce efectos generales
a la declaración de inconstitucionalidad de leyes así como el interés de
terceros interesados en la promoción del juicio de garantías.
Hemos impulsado también una reforma
política que hoy podemos decir que ha sido aprobada en ambas Cámaras y se
encuentra en proceso de refrendo por las legislaturas de los estados, con base
en ella le estamos devolviendo poder a los ciudadanos, pues podrán participar
directamente en las elecciones con figuras de las candidaturas llamadas
independientes; dispondrán de la facultad de iniciativa popular para el impulso
a proyectos de ley, y se estableció el recurso de referéndum en temas de
trascendencia constitucional entre otros importantes avances.
También tras una amplia consulta
nacional en la que participaron expertos académicos, profesionales, empresarios
e integrantes de la sociedad civil, del Gobierno y de los propios partidos
aprobamos la modernización de Petróleos Mexicanos, dotándole de autonomía de
gestión, una dirección corporativa con consejeros profesionales independientes,
normas internas que le proveen proveen
flexibilidad presupuestal.
Sí es cierto, nos hizo falta una
reforma de segunda generación, insistir más en construir una verdadera empresa
como Petróleos Mexicanos, tarea impostergable, sobre todo si queremos tener
mejores resultados.
En materia de ingresos y seguridad
pública al Ejecutivo Federal, se le aprobaron todas las leyes que solicitó. No
sin modificaciones que las hicieran viables, posibles y salvaguardaran los
derechos fundamentales.
Fue así que también se aprobó la Ley de Extinción de Dominio, se le dieron facultades de arraigo, de intervención de comunicaciones y
de cateo en flagrancia, con la debida supervisión de jueces de control. Todo
ello a la Procuraduría General de la República.
Se aprobó la Ley de Narcomenudeo y Atención de Adicciones, aprobamos la
legislación antisecuestro, se aprobó la Ley contra el Lavado de Dinero, se
reformó la Ley de la Policía Federal, se creó una fiscalía anticorrupción,
entre otras importantes legislaciones.
El gobierno federal entonces ha contado
oportunamente con las leyes que ha solicitado para rendir mejores cuentas a los
mexicanos en materia de seguridad en donde el legislativo ha cumplido en la
medida que le corresponde.
El Ejecutivo Federal, hay que recordarlo,
presentó ante el Senado de la República, durante los seis años de nuestro
periodo legislativo, 45 iniciativas de ley o decreto, de las cuales fueron
aprobadas 38, lo que representa una tasa de aprobación del 85 por ciento, en
consonancia con los compromisos asumidos también en el diálogo con el
Movimiento por la Paz, Justicia y Dignidad, construimos el consenso para
aprobar la Ley General de Atención de Víctimas que crea una entidad autónoma en
el Ejecutivo Federal, incluyendo la creación, la necesaria creación de un
registro nacional de víctimas.
Hace unos momentos la colegisladora
acaba también de aprobarla. Por lo cual esta ley ya es un hecho.
Con el intenso trabajo legislativo
realizados en estos seis años recordemos que hemos dado curso a 36 iniciativas
de reforma constitucional que han implicado la adición o reformas a 93
artículos de nuestra Carta Magna.
Cabe destacar que estas reformas no han
sido para menos, sino para actualizar y modernizar nuestro país, y
esencialmente para ampliar las libertades, la democracia y la permanente
búsqueda del bienestar y de la justicia.
Es así que en las proximidades de su
centenario, la nuestra es hoy una mejor Constitución.
Si hemos de referirnos a un posible
legado colectivo, emanado del trabajo legislativo desarrollado en la presente y
en la anterior Legislatura, sería que hemos demostrado que en la pluralidad y
la diversidad propias de una sociedad como la mexicana sí es posible construir
acuerdos parlamentarios y políticos a partir de lo que aquí se ha definido bien
por nuestros compañeros, de la actuación de un Senado moderno, reformador como
el que nos hemos propuesto consolidar.
No ha sido un camino fácil y ni ha
estado exento de obstáculos o menos entendidos, pero concluimos nuestra labor
plenamente convencidos de que por larga y sinuosa que parezca, la ruta de la
política democrática y pluralista siempre resulta mejor.
Hemos comprendido el significado
parlamentario de escuchar, de reconocer y conceder como las mejores armas y los
mejores recursos para impulsar las reformas institucionales que caracterizan
nuestra gestión legislativa y para procurar un mejor diálogo entre los poderes
que nos aleje de las controversias constitucionales y la judicialización de la
política.
En verdad que ha sido un trabajo legislativo
intenso y de gran calidad para fortalecer, modernizar nuestras instituciones y
sobre todo buscar nuevas instituciones que nos permitan hablarnos entre los
poderes para así evitar los conflictos dentro del país.
Nuestra labor buscó, estoy seguro,
abordar nuevos modelos de comunicación política para evitar que en estas
elecciones se presentaran problemas como los que vivimos en el año 2006. Es que
si fue necesario atender un nuevo modelo de procuración y administración de
justicia lo atendimos sin demora.
Si debíamos profundizar en la
observancia de los derechos humanos aportamos un modelo de respuesta apropiado
con la reforma constitucional al capítulo primero.
Si debíamos ampliar el acceso a la
justicia fuimos al modelo de una nueva legislación de amparo cuyas sentencias
tuvieran efectos para todos.
Y aportamos al fortalecimiento del
Estado mexicano resultados que estoy seguro habrán de alentar a muchos más a
proseguir en una labor legislativa sumamente pródiga en resultados.
Señoras y señores, esta nueva sede de
la soberanía popular y el pacto federal aspira, estoy seguro, a consolidarse
como un Senado de la República moderno y reformador, de puertas abiertas a la
expresión de la ciudadanía y a la representación de la pluralidad y la diversidad
nacional. Todo ello, estoy seguro, para consolidar su función institucional
como espacio de libertad y deliberación política donde se colegisla con visión
de estado para servir a los intereses de la nación.
Ningún tema por controvertido y
espinoso que pareciera fue ruido durante nuestro mandato como representantes
populares. Se escuchó la voz de la ciudadanía, se institucionalizó la
realización de foros y consultas sobre las más diversas materias y se asumieron
compromisos que se tradujeron en legislación y reformas institucionales.
Para ello fue necesario y estuvo
presente siempre el talento de nuestras amigas senadoras, nuestros amigos
senadores de todos los partidos políticos. Es que talento junto con clase
política, como también lo que es el conocimiento, generaron reconocimiento
entre todos y cada uno de nosotros al valor fundamental que cada uno de
nosotros le aportó al diálogo, a la legislación moderna a través del respeto
entre nosotros mismos y a nuestra forma de pensar.
La pluralidad hoy en el Senado sirvió
para alcanzar acuerdos, para admitir que nuestras diferencias enriquecen las
posibilidades de una legislación mejor, para que la experiencia de unos y otros
combinada nos diera la oportunidad de saber que todos nos necesitamos a todos y
que nadie puede ser excluido de lo que debe ser su planteamiento para buscar
que le vaya bien al país.
Saludo así a través del senador José González Morfin, al Grupo
Parlamentario del Partido Acción Nacional. Lo hago también a través del senador
Carlos Navarrete, un saludo al Grupo
Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática; a través de Arturo Escobar, al Grupo Parlamentario
del Partido Verde Ecologista; a través de Dante
Delgado al Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano; y a través de Ricardo Monreal al Grupo Parlamentario
del Partido del Trabajo. Saludo al senador Rafael
Ochoa y a sus correligionarios en el Partido Nueva Alianza. Saludo a todos
con el respeto que nos debemos y sobre todo con el reconocimiento que el Grupo
Parlamentario del PRI les hace a todos y cada uno de ustedes.
Es que concluir nuestra mandato
constitucional plenamente convencidos de que México tiene sin duda el capital
político, social y humano suficiente para salir adelante y recuperar el orden
público, el crecimiento sostenido, el empleo productivo y alcanzar la justicia
social, es una de las tareas y uno de los motivos que estoy seguro habremos de
seguir en cualquier lugar en donde nos encontremos.
Senadoras, senadores, con esa vivencia
y sobre todo con la mejor experiencia a
partir de mañana, donde quiera que nos encontremos sigamos en nuestro esfuerzo
colectivo y de servicio público para consolidar la grandeza de México y
alcanzar el objetivo compartido entre todos nosotros, que es construir una
nación más justa, más libre, y más solidaria. Muchas gracias. (Aplausos).
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN:
Tiene ahora el uso de la tribuna la senadora Gabriela Ruiz del Rincón, del
grupo parlamentario del Partido Acción Nacional.
-LA C. SENADORA GABRIELA RUIZ DEL
RINCÓN: Con su venia, señor presidente. Muy buenas tardes señoras y señores
senadores de la República, como un deber quiero, primero, agradecer a todo el
personal administrativo, auxiliar técnico, de seguridad y operativo que ha
hecho y hace posible que este Honorable Senado se consolide como una
institución digna del Estado Mexicano; gracias por su servicio, gracias por su
presencia.
Muy buenas tardes también a quienes nos
acompañan y nos hacen el honor de estar aquí con nosotros en este pleno
senatorial, en esta tarde de clausura de los trabajos ordinarios de esta
Sexagésima Primera Legislatura, pero sobre todo a quienes espero hayamos podido
servir y así haber estado a la altura de la confianza que depositaron en
nosotros a lo largo de estos seis años de labores legislativas; a todas y a
todos los mexicanos.
Tengo el honor, el gran honor de
presentar a nombre del grupo parlamentario de Acción Nacional, la conclusión de
seis años de trabajo de la Sexagésima y Sexagésima Primera Legislatura,
ciertamente ya se dijo aquí, no se puede presentar este balance, o se puede,
más bien, presentar este balance desde varios enfoques, pero imposible abarcar
todo con el tiempo acordado.
Sí, tres objetivos están en mí: el
valor y la responsabilidad republicana de muchos legisladores, de muchas
legisladoras con lo que la histórica Sexagésima Legislatura honramos el mandato
constitucional, de tomar protesta al Presidente de la República, hoy concluimos
un período legislativo más y con ello un “siglo” de nuestra democracia, el
saldo que arroja nuestro trabajo estará sujeto a múltiples interpretaciones.
Sería simplista afirmar que se hizo
poco en estas legislaturas, en ellas aprobamos, y ya se mencionaron muchas de
ellas iniciativas relevantes en materia de derechos humanos, medio ambiente,
educación; reformamos la Ley de Amparo, aprobamos reformas para fortalecer el
Código Penal.
Tenemos una ley que da garantías a la
protección de Datos Personales en posesión de particulares, un nuevo marco de
asociaciones público privadas para las acciones colectivas, y la Ley de
Migración es ya una realidad; y logramos que los jubilados y pensionados queden
exentos del impuesto sobre la renta.
La tarea legislativa ha sido compleja
en muchos ámbitos, en especial, en materia de seguridad. Mucho se discute sobre
los métodos, las formas, los participantes y los resultados obtenidos con las
acciones del gobierno federal, sin embargo esta soberanía, y ahí coincidimos,
fue solidaria con el Presidente de la República en los serios y fuertes
reclamos a los vecinos del norte sobre el armamentismo provocado con sus
acciones encubiertas, tanto de armas como de lavado de dinero.
Recientemente aprobamos la Ley para Proteger los Derechos de las
Víctimas, de esto delitos y la Reparación del Daño que hubiese sido
causado; iniciativas que también ya se han mencionado aquí, de Extinción del
Dominio, y la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de
Secuestro. También la Fiscalía Nacional Anticorrupción muy importante para
atacar el grave problema.
La variedad de los diversos frentes que
trabajamos reflejan el esfuerzo por responder a una realidad social cada vez
más compleja, que precisa de la acción legislativa para tener un marco jurídico
más fuerte.
Por otro lado, el tema de este recinto
parlamentario sin duda desató diferentes opiniones, unas negativas, otras
positivas, pero más allá de los juicios pronunciados debemos reconocer que la
construcción de este inmueble permitió hacer realidad la sede para el Senado de
la República, y nos ha permitido estar unidos grupos parlamentarios, oficinas
legislativas y administrativas, todos, todos reunidos aquí mismo.
Hemos escuchado posturas que han
contrariado el espíritu legislativo, porque perdieron de vista que ante todo
México es un país de instituciones a las cuales hay que honrar y por las cuales
hay que trabajar; y aun con el intenso trabajo realizado estos seis años es
preciso reconocer que no se avanzó lo suficiente en tres frentes particulares: La
Reforma Hacendaria, la Reforma Política, y las Reformas en materia de
Seguridad.
Estas reformas son inevitables y
queremos superar los tres grandes desafíos que afectarán a futuros gobiernos:
primero, asegurar la viabilidad financiera del Estado, fortaleciendo su
capacidad de recaudación.
Dos. Fortalecer la legitimidad de
nuestras instituciones, su representatividad y con ello la credibilidad del
discurso democrático.
Y tres. Fortalecer la capacidad del
Estado para enfrentar a la delincuencia organizada.
En materia de reforma política mi grupo
parlamentario insistió en impulsar lo que no se logró impulsar la reelección,
la reconducción presupuestal, la reducción del número de legisladores, la
segunda vuelta electoral y la eliminación del fuero constitucional; posiciones
todas ellas en un gran respaldo ciudadano que contar y que, por supuesto,
fortalecían a la democracia a favor de los ciudadanos.
Sin embargo, nuestra Colegisladora tuvo
otra opinión sobre ciertos temas y la reforma no avanzó lo necesario. Quedan
pendientes de aprobar reformas muy importantes en materia de seguridad, como el
fortalecimiento y reorganización de los cuerpos policiales, ordenamiento para
combatir el lavado de dinero, y una Ley de Seguridad Nacional.
Pero más allá de diferencias
partidistas y de cálculos políticos, debemos reconocer que las exigencias de la
lucha contra la delincuencia organizada y de asegurar una viabilidad financiera
del Estado, obligarán a la siguiente legislatura a aprobar reformas en esta
materia, no hacerlo le costará mucho al país, a las instituciones y a los
ciudadanos.
La lección, la lección que podemos
inferir del saldo de nuestro intenso trabajo legislativo es que la pluralidad
de nuestra democracia nos dice: que un solo partido, ninguna fuerza política
sola tiene por sí sola la capacidad para funcionar los problemas prioritarios
de nuestra agenda nacional.
Don Adolfo Christlieb Ibarrola decía:
“Que la tarea de forjar, de labrar una patria mejor y más generosa para todos,
no es de unos cuantos, reclama la presencia de todos los mexicanos. Por lo
tanto los acuerdos son necesarios para avanzar en la dirección que nos exige la
sociedad, diferirlos sería contribuir a desgastar más una democracia cuya
eficacia es puesta en duda por la desesperación social ante las diferencias
políticas”.
Más allá de estos momentos electorales,
que a veces nos impiden ver con la claridad, con la frialdad necesarias para
llegar a acuerdos, y más allá del partido que gobierne, el hecho claro que
debemos asumir nosotros y los futuros legisladores es que no transitaremos por
el camino de la solución de los problemas si no somos capaces de asumir una
visión de estado.
Mientras la lucha por el poder se
anteponga a la aprobación de los acuerdos, seguiremos inmersos en una especie
de eterno retorno político, donde legislaturas se van y legislaturas llegan sin
lograr a veces los avances que se marcan o que nos marca la sociedad, una
sociedad cada vez más informada, también más cansada, pero también más
organizada y que se hace escuchar con mayor intensidad cada día.
Compañeras y compañeros Senadores:
Termina un ciclo legislativo y se
acerca el de un período de gobierno, sin importar el signo ideológico
partidista.
Legisladores y Ejecutivo enfrentarán
los mismos problemas, con la misma pluralidad, y quizás con nuevos equilibrios
de fuerzas y renovados contrapesos políticos.
La fuerza de la democracia no se mide
por la capacidad opositora para rechazar Iniciativas que pretenden fortalecer
al Estado frente a los problemas que todos, todos reconocemos.
La fuerza de la democracia se mide, en
gran parte, con la responsabilidad de los partidos para dialogar, para negociar
y para lograr acuerdos, pero también se mide por la sensibilidad en la que se
procesan las demandas sociales y con la plena disposición de pagar costos
políticos por el bien superior de la nación.
El reto que tuvimos y tendremos en el
futuro inmediato es que los ciudadanos vean a los partidos y a sus legisladores
como la solución a sus problemas.
Si bien esta legislatura dio prueba
clara que se puede trabajar para tener un México mejor; dio prueba clara de la
calidad de sus legisladores, y se comportó a la altura de los desafíos a los cuales
se enfrentó. Sin embargo, queda todavía mucho camino por recorrer.
Hay que buscar, no sólo el avance
socioeconómico del país, sino también el avance político y democrático que dé
respuesta a todos los ciudadanos, independientemente de sus banderas electorales
o de sus tintes políticos.
Concluyo, amigas y amigos.
La Comisión Permanente del Congreso de
la Unión iniciará sesiones en las próximas horas, y serán sus integrantes
quienes den por finalizada oficialmente en agosto próximo esta Sexagésima Primera
Legislatura.
No obstante esta será la última ocasión
en que nos encontremos reunidos en este Pleno, en este Pleno en el que nos ha
tocado compartir juntos la enorme responsabilidad de dirigir los destinos de la
patria.
Estoy cierta que en algún momento nos
encontraremos con el mismo ímpetu, con el mismo ímpetu en nuestras
coincidencias, y con claridad en la verdad de nuestras legítimas diferencias.
Con responsabilidad y compromiso por la
patria, siempre. El reto ciudadano es aspirar a un mejor estar mejor, y la
Sexagésima Primera Legislatura; la Sexagésima y Sexagésima Primera Legislatura
podrán decir: que es insuficiente, pero quizás siempre lo serán, porque esto
es, esta tarea es como decimos los panistas: “Brega de eternidad”.
Muchísimas gracias. (Aplausos).
-EL C. PRESIDENTE GONZALEZ MORFIN: Muchas gracias a la Senadora Gabriela Ruiz.
Honorable Asamblea:
Es un honor para mí dirigirme a todos
ustedes en esta fecha tan significativa.
Hoy cerramos un ciclo de 6 años de
intenso trabajo a favor de México, un ciclo en el que el Senado de la República
se afianzó como una institución clave para la democracia y la vida pública de
nuestro país.
Cerramos hoy la Sexagésima Primera
Legislatura con un Senado más fuerte y un México que avance por la ruta de la
transformación.
Ya nuestros compañeros coordinadores de
los distintos grupos parlamentarios han hablado de los avances que hemos
conseguido como órgano legislativo.
Quiero simplemente --si me permiten--
hacer una breve recapitulación de los que a mi juicio son algunos de los más
importantes logros de estas 2 últimas legislaturas en áreas centrales del país.
En primer lugar logramos la aprobación
de leyes que serán fundamentales en la lucha de todos los mexicanos por
construir un país de paz con justicia, destacan entre ellas:
La reforma al sistema de justicia penal;
La reforma constitucional en materia de derechos humanos;
La reforma constitucional en materia de amparo, así como nuevas leyes
contra la delincuencia, como son:
La de Extinción de Dominio;
La de Combate al Secuestro;
La de Combate al Lavado de Dinero;
La Ley Contra la Trata de Personas, y
de manera muy reciente, la Ley General de Víctimas.
Vale la pena subrayar la importancia de
esta ley, ya que representa la posibilidad de que quienes han sufrido a causa
de la violencia criminal, puedan recibir una justa reparación del daño, así
como asistencia y protección de parte de las instancias del Estado.
Es, sin duda, un paso en la dirección
correcta para cerrar las heridas que el crimen ha causado a nuestra sociedad.
En segundo lugar, logramos la
aprobación de reformas que han dado un renovado impulso al crecimiento
económico de nuestro país, desde luego, hablo de las reformas fiscal y
energética, pero también se aprobó la nueva Ley de Asociaciones
Público-Privado, con la que se potenciará la construcción de infraestructura y
la nueva Ley de Competencia Económica que nos permitirá contar con mercados más
competitivos en beneficio de los mexicanos.
En tercer lugar, hubo logros
significativos en materia de derechos ciudadanos. Hablo, por ejemplo, de la
reforma al artículo 6º de la Constitución que garantiza el ejercicio efectivo
del derecho de acceso a la información, y también a la protección de datos.
La reforma en materia de acciones colectivas
que permite que los mexicanos nos podamos organizar para defender nuestro
derechos, y desde luego, la reforma política.
Gracias al compromiso democrático de
esta Cámara, la reforma aprobada por el Senado, incluyó temas fundamentales
como las candidaturas independientes, la iniciativa ciudadana, la consulta
popular.
Lamentablemente ha quedado pendiente el
tema de la elección consecutivo de legisladores y alcaldes, que dotaría a los
ciudadanos de una poderosa herramienta para permitir o castigar el trabajo de
sus representantes, como ocurre en las democracias más consolidadas.
El común denominador de todos estos
avances legislativos, ha sido la voluntad democrática; con voluntad democrática
esta legislatura estuvo dispuesto a sacudir inercias e impulsar cambios
fundamentales para la vida institucional de la Nación; con voluntad
democrática, las diferentes bancadas del Senado dieron muestra de que a través
del diálogo respetuoso, sí es posible arribar a consensos en los temas que más
preocupan a los mexicanos; con voluntad democrática, el Senado de la República
se consolida como una institución responsable, capaz de alcanzar acuerdos que
transforman a México.
Estoy convencido, de que la labor de
esta legislatura, ha sido un gran paso en la construcción del Poder
Legislativo, que México requiere para el siglo XXI.
En el que yo considero que debe de ser
un Poder Legislativo que cogobierne, no que obstaculice. Y que a la vez que
exige, cumpla cabalmente; un Poder Legislativo que no se asume como un mero
espectador crítico, sino como protagonista responsable y pleno en la conducción
del destino de nuestro país.
De cara al futuro veo dos grandes
retos:
El primero, es lograr una mayor
coordinación entre el Senado y la Cámara de Diputados.
Me parece que, sin descuidar el sano
equilibrio que debe existir entre ambas cámaras, es necesario, por el bien del
país, que tengamos una mejor alineación de objetivos y conciliación de
intereses al interior del Legislativo.
El segundo gran reto es, cerrar la
brecha que existe entre la ciudadanía y el Poder Legislativo, y para lograrlo
son indispensables tres elementos: más transparencia, más trabajo y mejores
resultados.
Más transparencia en el uso de los
recursos que nos confiere la sociedad, y en las razones para apoyar o bloquear
algunas iniciativas.
Más trabajo en las distintas comisiones
que conforman ambas cámaras, para desahogar los asuntos que urgen al país.
Y sobre todo, mejores resultados en la
aprobación de leyes, que nos permitan superar los enormes desafíos que
enfrentamos como nación.
Ya hemos dado los primeros pasos. Pero
aún hay mucho camino por recorrer, para dar a la ciudadanía un Poder
Legislativo a la altura de sus exigencias.
Amigas y amigos, senadores de la
República, el 5 de febrero de 1857, al clausurar la histórica sesión del
Congreso Constituyente, el gran liberal Francisco Zarco, dijo: —cito— “El
Congreso estimó como base de toda prosperidad y de todo engrandecimiento, la
unidad nacional y, por tanto, se ha empeñado en que las instituciones sean un
vínculo de fraternidad, un medio seguro para llegar a estables armonías” —hasta
aquí la cita—.
Tenemos que seguir trabajando para que
el Poder Legislativo se convierta en el espacio democrático por excelencia, en
el que el debate y la pluralidad sea la vía para fortalecer la unidad nacional.
Durante estos seis años, pudo constatar
que existen en México mujeres y hombres con esa altura de miras. Capaces de ver
más allá de los intereses inmediatos; capaces de proponer e impulsar cambios de
fondo en el beneficio de nuestro país.
A todos ustedes, a todas ustedes,
compañeras, compañeros senadores, les expreso mi gratitud y aprecio permanente
por estos seis años de experiencias imborrables; de trabajo conjunto en favor
de nuestro proyecto y casa común, que es México.
Finalmente, quiero, antes de finalizar,
agradecer muy especialmente a mis compañeros integrantes de la Mesa Directiva,
su experiencia, su apoyo en los trabajos; créanme que son invaluables; hicieron
muy amable el ejercicio de esta responsabilidad, la Presidencia de la Mesa
Directiva, la más honrosa responsabilidad que he tenido a lo largo de mi vida
política y que se las debo a todas y a todos ustedes.
Muchas gracias, a todos mis compañeros
de la Mesa Directiva.
No menos importante, quiero agradecer
muy sinceramente a todo el equipo de trabajo del Senado de la República. A todo
el personal de áreas que resultaron clave para la buena marcha de nuestra labor
legislativa.
Como la Secretaría de Servicios
Parlamentarios; la Secretaría de Servicios Administrativos; las secretarías
técnicas de las comisiones; en fin, a todas las mujeres y hombres comprometidos
con México que sirvieron con eficacia y diligencia al Senado de la República,
en estos años tan desafiantes para nuestro querido México.
Para todos ustedes, la gratitud y
reconocimiento mío, y de todas y de todos mis compañeros senadores.
Muchísimas gracias. (Aplausos)
Quiero pedir a todos los presentes, nos
pongamos de pie para entonar nuestro Himno Nacional.
(Todos de pie)
(Entonación del Himno Nacional)
(Gritan: ¡Viva México!)
(Contesta la Asamblea: ¡Viva!)
Solicito a los presentes permanecer de
pie.
(Todos de pie)
(Aplausos)
“Hoy, 30 de abril de 2012, la Cámara de
Senadores de la LXI Legislatura del Honorable Congreso de la Unión, declara
concluidos sus trabajos correspondientes al Segundo Período Ordinario de
Sesiones Ordinarias del Tercer Año de Ejercicio Constitucional”.
Se instruye a la Secretaría, participar
por escrito esta clausura, al ciudadano Presidente de la República; a la
Suprema Corte de Justicia de la Nación; a la Cámara de Diputados; a la Asamblea
Legislativa del Distrito Federal; así como a las legislaturas de los estados.
Se cita a los senadores que han sido
electos para integrar la Comisión Permanente, a que asistan a la instalación de
este órgano, hoy mismo a las 14:30
horas, en el salón que se ubica en este mismo inmueble, en el sótano uno.
Se levanta la sesión. (14:12 horas=)
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