Lo único que está pendiente es la entrega del título de concesión, respondió el Instituto Federal de Telecomunicaciones a las declaraciones del presidente en mañanera..
Luego de que el presidente López Obrador aseguró que su gobierno renovará la concesión a Telmex de Carlos Slim, el Instituto Federal de Telecomunicaciones aclaró que la prórroga de concesión de Teléfonos de México fue otorgada, por el organismo autónomo en 2016 y no hay forma de negarla.
En un comunicado, el regulador precisó que el pasado 1 de diciembre de 2016, el pleno del Instituto resolvió, conforme a sus atribuciones constitucionales, aprobar la solicitud de la prórroga de concesión presentada por Telmex por 30 años a partir del 11 de marzo de 2026, tras acreditar que cumplió los supuestos previstos en la ley para este procedimiento.
Mañanera del jueves 21 de 2021
Víctor Buendía, para Vittor Blogs y México Informa, de YouTube.
Hablando de concesiones, señor presidente, ¿usted considera que por la política neoliberal el país quedó rezagado en conectividad de internet? Prácticamente ahorita a lo mejor no podríamos tener el 100 por ciento de conectividad en algunos municipios o estados del país. Le comento esto porque usted en el 2023 va a tener la oportunidad de retirar una concesión a un empresario, al empresario Carlos Slim, la concesión de Telmex.
Y sobre todo comentarle si será una decisión fácil o difícil, porque sinceramente, como usted a veces lo ha comentado, que ha andado rondando el país, usted comenta que a veces no cuenta con el servicio de internet para poder realizar algunas situaciones.
¿Será algo difícil, señor presidente, retirar esta concesión en el 2023 o será nuevamente otorgada para el…?
PRESIDENTE : No, no va a ser difícil si se trata de, en efecto, revisar lo de la concesión, si se vence el plazo y se puede retirar o refrendar, es decir, que continúe.
Eso lo vamos a analizar en su momento, pero no hay interés en retirar concesiones, lo que sí vamos a buscar es que se mantenga un compromiso social, porque en el caso del internet, como el caso de la industria eléctrica en otros tiempos… Y es a lo que nos quieren regresar, dicen que nosotros estamos representando el pasado, pero no, quienes representan el pasado son los que quieren seguir dominando México y oprimiendo al pueblo.
En el caso de la electricidad es muy interesante la historia, de cómo no estaban electrificados los pueblos porque eran empresas privadas las que predominaban en el sector eléctrico, a lo que nos quieren regresar, a los que nos regresaron, pero afortunadamente se dio el cambio, porque ya después de que no intervenía el sector privado en la industria eléctrica ahora tienen el monopolio prácticamente del mercado eléctrico.
Las grandes empresas, corporaciones comerciales, que ya se ha dicho aquí, los Oxxos, todo eso, no le compran energía a la Comisión Federal de Electricidad, ellos supuestamente producen su propia energía, con subsidios, y pagan menos que lo que pagan los usuarios en México, las familias.
Entonces ¿qué pasaba cuando el gobierno del licenciado Adolfo López Mateos en los años 60?
No estaba electrificado el país y el presidente, a través de su secretario de Hacienda, Antonio Ortiz Mena, les dijo a estas grandes empresas: ‘Ustedes no van a electrificar los pueblos, porque no les va a resultar rentable, porque ustedes buscan el negocio, pero el Estado tiene una responsabilidad social y el que los pueblos se electrifiquen significa progreso y justicia, o progreso con justicia. Entonces, como ustedes no van a poder electrificar, vamos a ponernos de acuerdo y les pagamos por sus empresas’.
Así fue, hubo indemnizaciones y se nacionalizó la industria eléctrica, y a partir de ahí comenzó un plan de electrificación de todos los pueblos y hoy México, gracias a eso, tiene el servicio de energía eléctrica hasta en los pueblos más apartados. El porcentaje que queda sin electrificar es mínimo, pero esto comenzó en los años 60 del siglo pasado, estamos hablando de 60 años.
Bueno, eso que se avanzó comenzó a tener un retroceso, porque en la Constitución quedó establecido de que la distribución de la energía eléctrica correspondía exclusivamente a la nación, a la Comisión Federal de Electricidad, la generación y la distribución.
Con Salinas cambiaron eso, utilizando una ley secundaria y empezó la privatización y empezaron a cerrar plantas de la Comisión Federal de Electricidad y lo que buscaban, y es el propósito todavía, era quebrar por completo, arruinar a la Comisión Federal para que todo el mercado de la industria eléctrica quedara en manos de particulares, de empresas, sobre todo extranjeras, españolas, en particular empresas que sobornaron a funcionarios corruptos, que se los llevaron a trabajar. El caso de las empresas españolas, que a la secretaria de Energía de Felipe Calderón se la llevaron de empleada, al mismo Felipe Calderón se lo llevaron al Consejo de Administración.
Esas empresas españolas contrataban a exministros, no solo en México, en España, en todos lados, y a expresidentes. O sea, es un mecanismo de soborno para tener influencias y acaparar el mercado, vender la luz a precios elevadísimos, como está sucediendo en España, estas empresas están vendiendo la luz carísima, y era el modelo que deseaban continuar imponiendo en México.
Por eso es esta iniciativa que enviamos de reforma eléctrica.
Bueno, eso es regresar al pasado, si actuáramos quedándonos cruzados de brazos. No, nosotros lo que queremos es que ya no sigan robando, tan sencillo como eso.
Y dicen que se va a ir la inversión. No se van. ¿Saben?, el planteamiento que les estamos haciendo en la ley, en la reforma constitucional: que el Estado se quede con el 54 por ciento y la iniciativa privada con el 46.
¿Saben cuánto es el 46 por ciento del mercado de México?
Es toda la electricidad que se consume en Argentina, en un país de 50, 60 millones de habitantes. Entonces deberían de estar agradecidos nada más que no tienen llenadera, se quedaron con la mala costumbre de robar a manos llenas.
Porque no es una expropiación, no es una nacionalización, es decir, necesitamos nosotros fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad porque, si no, no vamos a poder garantizar precios justos en la energía eléctrica, tiene que haber orden. La política se inventó, entre otras cosas, para poner orden en el caos, y esa es la función del Estado.
Entonces, el sofisma, todo ese engaño de que había que desaparecer al Estado y que todo quedara al mercado, pues fue una tomadura de pelo, eso es para quienes se creyeron todo ese plato de mentiras; pero ya estamos en otro tiempo, eso ya no funciona y quieren mantener lo mismo.
Bueno, el caso de la telefonía, regresando a tu pregunta, si se garantiza de que se va a prestar el servicio y que es una empresa mexicana, que eso también importa, y hay también algo que puedan aportar, por ejemplo, en el caso de la conectividad para el internet, claro que refrendamos la concesión.
INTERLOCUTOR: Le hago este comentario, señor presidente, porque, bueno, yo sé que existen muchos usuarios, yo soy un usuario también, se lo tengo que decir abiertamente, de esta compañía.
Como usted sabe, yo vengo de Texcoco, ahí hay todavía algunas zonas que están desprotegidas por el servicio y el pretexto de la compañía es de que, como usted lo comenta, no le interesa invertir en algunos pueblos aledaños a Texcoco porque pues no es rentable por el dinero de invertir en la infraestructura; de hecho, Telmex es quién provee la infraestructura a las otras empresas que entraron al mercado.
Entonces, le quiero hacer una pregunta sensata, porque yo sé que usted es un hombre de ideales: ¿está dejando ya usted su lucha, presidente, que usted tenía en esos años en 1990, junto con el ingeniero Cárdenas, de levantar la voz, y decir que no se expropiaran estos bienes del Estado?
PRESIDENTE: No, es que estoy pensando lo mismo de siempre. Yo tengo una característica: siempre escribo, llevo 30 años o más escribiendo libros, entonces ustedes pueden saber muy bien qué pensaba hace 30 años y qué pienso ahora y se van a encontrar de que no he sido incongruente. Entonces en este caso vamos a actuar de manera consecuente, pero tenemos que entender que existe una nueva realidad.
Nuestros adversarios, hasta el Proceso, que andan buscando desesperados cómo justifican de que somos lo mismo, de que es igual. ‘Toda la nueva política o la Cuarta Transformación se va a poner a prueba con la concesión a Telmex’, palabras más palabras menos, eso es lo que plantea Proceso.
De una vez les digo: Vamos a hacer lo que más le convenga a la nación, no vamos a caer en extremismos. A lo mejor en el periodismo se puede el extremismo, dar bandazos y se tocan los extremos, la extrema derecha y la extrema izquierda; en la lucha nuestra, no. Nosotros lo que queremos es que las cosas mejoren en beneficio de nuestro país y hacerlo de manera pacífica, y no imponer nada, convencer, persuadir.
Se trata de una empresa que entregó Salinas de Gortari. Claro que yo estuve en desacuerdo, ¿por qué?, porque yo no estoy a favor de la política privatizadora; tan es así que, no hemos dado concesiones, no es lo que pasó en el periodo neoliberal que entregaban concesiones para el petróleo, para la industria eléctrica, para la minería, entregaron casi todo el territorio nacional. Esto es distinto, el tiempo que llevamos nosotros es diferente y nos va a tocar resolver esto.
Y no tengo ningún problema de consciencia, es: a ver, ya está, ¿qué hacemos?, ¿revocamos la concesión -a ver, se lo dejamos de tarea a la gente- revocamos la concesión y el Estado se hace cargo o, que eso es lo que yo pienso- se mantiene la concesión buscando que haya compromisos en beneficio de la población, ya sea en tarifas o ya sea que se amplíe la red para que tengamos internet todos y llegar a un acuerdo? Eso es lo que va a estar en cuestión.
Yo no soy partidario, o sea, quizá si me hubiese tocado a principios del gobierno a lo mejor sí, como lo estamos haciendo con los bancos. Como parte de la política privatizadora no dejaron ni un banco, dejaron un banquito, que ni sabe la gente cómo se llama o cómo se llamaba.
INTERLOCUTOR: Era Bansefi.
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Bansefi, que ahora es el Banco del Bienestar y que va a ser un banco muy importante, porque va a tener cerca de tres mil sucursales, donde no llegan los bancos comerciales.
Nos costó trabajo conseguir la autorización, porque ¿ustedes creen que a los del Banco de México les gusta el que haya un banco fuerte del Estado? No, si ellos se formaron en la idea de la privatización, si lo que más afectó del modelo neoliberal fue el que les lavaron el cerebro, con todo respeto, y lo único que aprendieron fue a que era mejor el sector privado que el sector público y que había que diluir al Estado y dejar todo al sector privado. Entonces nos costó, incluso en Hacienda, aquí adentro, porque fueron 36 años de política neoliberal.
Bueno, ya empezamos, pero tenemos que operar dos mil 700 sucursales. Vamos a tener como tres mil en todo el país para que la gente pueda tener cerca un banco.
Porque es lo mismo del internet y lo mismo de la industria eléctrica, o sea, ¿por qué no hay bancos en los pueblos?, porque pues no les es rentable a los banqueros, les puede resultar más rentable vivir de las comisiones que cobran, no el servicio bancario, entonces por eso lo tiene que hacer el Estado.
Pero bueno, de las dos mil 700 sucursales que tenemos que construir llevamos construidas alrededor de mil 500, y eso que contamos con los ingenieros militares, pero vamos a tenerlas listas operando, porque se requiere también que haya comunicación de internet, que no es un asunto fácil porque no hay internet en el 80 por ciento del territorio nacional, es un gran atraso, son de las cosas que tenemos que resolver, entonces, a finales del año que viene tenemos que tener operando las dos mil 700 sucursales.
Y requerimos cuando menos un año o dos para fortalecer la operación y dejarlas bien, porque -toco madera- ayer se reunió Claudio X. González y el de la Comparmex ya para llamar a que nos van a quitar el gobierno en el 24. Ya vamos de gane porque antes decían que nos iban a ganar en la revocación del mandato el año próximo, pero ya se arrepintieron, ahora va a ser hasta el 24. Pero bueno, imagínense si estos llegan, desmantelan todo; entonces, necesitamos dejar consolidado el Banco del Bienestar.
Entonces, no es un asunto fácil, lleva tiempo, son cambios incluso de mentalidad, es estar formando nuevos cuadros, servidores públicos que estén pensando en el interés general, que estén pensando en los negocios públicos, no que estén pensando en la corrupción, no que estén pensando en los negocios privados, no que sean empleados de las grandes corporaciones, de las empresas, que tengan emoción social, que le tengan amor al pueblo, que tengan convicciones, que tengan ideales, que tengan principios, que sean honestos. Eso es la transformación, entonces todo eso lleva.
Ahora, imagínense si yo en el 23, 2023, decido: se expropia, o no se expropia, no se renueva la concesión, la vamos a manejar nosotros la empresa. Pues no son tamalitos de chipilín.
Y que me van a medir si somos neoliberales o no. Por eso no me preocupa, yo tengo mi consciencia tranquila, yo sé lo que le conviene al país y sé también que son procesos que se tienen que ir dando poco a poco.
Yo quisiera avanzar más, no puedo porque fue mucho tiempo de atraso, de saqueo, pero además de manipulación, muchísimo tiempo. Afectaron dos generaciones, en las universidades públicas, hasta la UNAM se volvió individualista, defensora de estos proyectos neoliberales, perdió su esencia de formación de cuadros, de profesionales para servir al pueblo.
Ya no hay los economistas de antes, los sociólogos, los politólogos, los abogados, ya no hay derecho constitucional, ya el derecho agrario es historia, el derecho laboral, todo es mercantil, civil, penal, todo es esto.
Entonces, sí fue un proceso de decadencia, afortunadamente se tiene esta oportunidad de sentar las bases para la transformación y, si es posible, consumar la Cuarta Transformación, pero es un proceso.
Tiene uno que remar contra la corriente. Pues esto que estamos hablando de los medios, los que antes callaban, que jugaban un papel para mediatizar, para tener desinformada a la gente, ahora los tenemos en contra.
A mí me da muchísimo gusto, realmente lo celebro, el que el pueblo esté tan despierto, o la mayoría del pueblo esté tan despierto porque, si no, no se podría hacer nada. Ahora sí que como decía Juárez: ‘Con el pueblo, todo; sin el pueblo, nada’.
¿Cómo enfrentamos a los grupos de intereses creados, a bandas de malhechores, pandillas de rufianes, corruptos, que se habían dedicado a saquear y se malacostumbraron y quieren de nuevo regresar a lo mismo? ¿Cómo avanzamos?
Con el apoyo de la gente, con el apoyo del pueblo, eso es lo que todos los días me da fortaleza y por eso me siento seguro, porque tengo ese escudo protector, mi ángel de la guarda, la gente que me dice: ‘Adelante’.
Así como me encuentro, uno, dos, tres, que me hacen muecas, me encuentro muchos que me dicen: ‘Adelante, estamos con usted’, y me desean lo mejor y bendiciones, y todo, pero muchísimas. Entonces, imagínense cómo no voy a estar al 100.
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