40
Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública
Ciudad
de México, a 30 de agosto de 2016..
-MODERADOR:
Para moderar los trabajos de esta Sesión, escuchemos la intervención del
maestro Álvaro Vizcaíno Zamora, Secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de
Seguridad Pública.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Con su autorización,
señor Presidente.
Buenas
tardes, Gobernadora y Gobernadores, miembros del Gabinete de Seguridad,
invitados especiales, representantes de la sociedad civil y medios de
comunicación.
Señoras
y señores:
De
conformidad con el registro de asistentes, se encuentran presentes la mayoría
de los integrantes del Consejo.
Por
lo que informo a usted, señor Presidente, que existe quorum para celebrar la
40ª Sesión Ordinaria del Consejo Nacional de Seguridad Pública.
Me
permito someter a la consideración de las y los integrantes del Consejo el
Orden del Día y el Acta de la 39ª Sesión del Consejo Nacional de Seguridad
Pública, celebrada el 18 de diciembre de 2015, mismos que les fueron entregados
de forma previa para su aprobación y se encuentran en sus carpetas de trabajo.
Los
que estén a favor de su aprobación, sírvanse manifestarlo levantando la mano.
Gracias,
señoras y señores.
El
Orden del Día y el Acta de la 39ª Sesión han sido aprobados.
Para
desahogar el siguiente punto, informo a las y los integrantes del Consejo
Nacional que el Secretariado Ejecutivo ha presentado su informe y ha recibido
los informes de las Comisiones Permanentes y Conferencias Nacionales que
integran este sistema.
Dichos
informes se encuentran en sus carpetas de trabajo, por lo que consulto a las y
los integrantes del Consejo Nacional si están de acuerdo en tenerlos por
presentados, expresándolo levantando su mano.
Gracias.
Se tienen por presentados los informes correspondientes.
Como
Sexto Punto del Orden del Día, hará uso de la palabra el Secretario de
Gobernación, licenciado Miguel Ángel Osorio Chong.
-SECRETARIO
MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG: Señor Presidente de la República, licenciado Enrique
Peña Nieto; señor Presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República,
de la Cámara de Diputados.
Presidente
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Saludo
a la Gobernadora, Gobernadores y al Jefe de Gobierno.
A
los Consejeros Ciudadanos e integrantes del Gabinete, a funcionarios y
representantes de la sociedad civil.
Señoras
y señores.
En
primer lugar, quisiera pedir su entendimiento a todos nuestros invitados,
particularmente de la sociedad civil, por el retraso en el inicio de esta
sesión, debido a que la reunión previa con la Gobernadora, con los Gobernadores
y el Jefe de Gobierno se realizó por más de dos horas, para poder llegar a
estos acuerdos que hoy se someterán a consideración de todas y de todos.
Gracias
por su comprensión.
Hace
poco más de tres años y medio, el Presidente de la República convocó a sesión
extraordinaria de este Consejo con el objeto de construir una relación de
corresponsabilidad para la seguridad, la justicia y la paz que demanda nuestro
país.
A
partir de ello, el Gabinete de Seguridad se abocó a diseñar y poner en marcha
una estrategia que permitiera hacer frente a la crisis de inseguridad, en un
país profundamente lastimado por años de repunte de la delincuencia y la
violencia.
Por
ello, el Presidente de la República hizo de su atención integral una prioridad
nacional, una prioridad que desde este Consejo se ha abordado con una respuesta
de Estado y un esfuerzo conjunto.
Una
prioridad nacional que ha implicado poner la política, es decir, las
herramientas del acuerdo y la coordinación, al servicio de la seguridad.
Esta
nueva visión, señor Presidente, ha permitido concretar resultados en dos
principales vertientes:
En
la operativa. Por primera vez el Gabinete de Seguridad diseñó y puso en marcha
mecanismos de coordinación permanentes entre la Federación y las entidades para
actuar con estrategia y prontitud en un plano de corresponsabilidad.
Aunado
a ello, se implementaron acciones para al apoyo subsidiario de las Fuerzas
Federales a los gobiernos locales, particularmente aquellos con una situación
de debilidad institucional.
Hoy,
las y los mexicanos pueden tener la certeza de que ninguna, absolutamente
ninguna entidad federativa está sola en la tarea de hacer frente a la
delincuencia.
El
objetivo ha sido y es uno: garantizar, más allá de distingos políticos, la
seguridad de los ciudadanos, ahí, donde se ha visto mermada su tranquilidad.
Al
tiempo que las Fuerzas Federales actuaron con sentido de urgencia para velar
por la seguridad de las comunidades, se crearon y fortalecieron instituciones
clave en esta función de Estado, es claro que más allá de atender coyunturas,
la mejor apuesta al futuro que podemos hacer es la de consolidar instituciones
fuertes, confiables y eficaces.
Tal
es el caso, por ejemplo, de la creación y puesta en operación de la División de
Gendarmería de la Policía Federal y de la Comisión Nacional Antisecuestro, o
del esfuerzo sin precedentes para transitar al Sistema Penal Acusatorio y, con
ello, a una impartición de justicia más pronta, eficaz y más respetuosa de los
derechos de las personas.
Ello
permitió que en los primeros dos años de la Administración se contuviera de
manera notable la tendencia creciente de la violencia criminal a nivel
nacional, y que el país regresara, incluso, a tasas de homicidios de hace siete
años.
No
obstante, este importante avance, hay que señalarlo, hay que hacerlo
puntualmente, en meses recientes este fenómeno ha repuntado en algunas regiones
del país.
También
es necesario decir que dicho repunte se explica, en gran medida, al crecimiento
de los delitos locales.
Esta
situación apunta a uno de los grandes retos aún pendientes del país: la urgente
construcción de un modelo que permita atender desde lo local, oportuna y
eficazmente, las causas de la inseguridad.
En
ese plano, donde hoy es prioritario fortalecer las capacidades, es en ese lugar
para generar espacios y reducir la delincuencia.
Es
en lo local donde la función de seguridad debe contar con mejores herramientas
y recursos para cerrar el paso a la impunidad.
En
tanto esto sucede, y como usted ha instruido, desde el Gabinete de Seguridad se
ha planteado un conjunto de medidas para la atención focalizada del fenómeno
delictivo en los estados y municipios, donde se presentan los más altos índices
de violencia.
En
congruencia con lo anterior, hoy se propondrán diversos acuerdos dirigidos a
consolidar los procesos de fortalecimiento institucional, realizados con un
enfoque particular en el plano local.
De
estos acuerdos, si me lo permiten, quisiera destacar los siguientes:
Primero.
Se pondrán a consideración de este Consejo un acuerdo para concretar la entrada
en operación del número único de atención a emergencias 911. Ello será posible
gracias a la adopción de mecanismos de coordinación entre autoridades estatales
y federales para la respuesta a las solicitudes de los ciudadanos.
Asimismo,
se propondrá implementar a nivel nacional una campaña de difusión dirigida a la
sociedad para promover el adecuado de este número en el país.
Segundo.
Se propondrá un acuerdo para designar al Secretariado Ejecutivo del Sistema
Nacional de Seguridad Pública como responsable de las acciones correspondientes
al Ejecutivo Federal para la consolidación del nuevo Sistema de Justicia Penal.
Hay
que apuntar que la tarea no ha concluido con su entrada en operación, sino que
es clave continuar los esfuerzos, tanto en lo Federal como en lo estatal, para
su evaluación y mejora permanente.
En
este objetivo será fundamental que la y los gobernadores coadyuven en el
perfeccionamiento del sistema a través de los órganos implementadores.
Tercero.
Se propondrá un acuerdo para dar un nuevo impulso a la política de prevención
social de la violencia y la delincuencia, a través del diseño de un modelo que
garantice el funcionamiento homologado de los centros estatales de prevención
del delito. Una política sostenible de seguridad requiere que se combata la
pirámide delictiva desde sus bases.
Por
ello, proponemos que desde el plano local y a través de esos centros se
emprendan esfuerzos integrales y sostenidos para detectar y atender
adecuadamente las causas sociales de la inseguridad.
Con
acuerdos como estos, señor Presidente, el Consejo Nacional de Seguridad Pública
busca fortalecer desde diversos frentes y en todos los niveles, las capacidades
institucionales del Estado, en favor de un México más seguro.
El
diseño federal de nuestra República obliga a la acción concurrente y
corresponsable de las autoridades de todos los órdenes en el cumplimiento de
una de las tareas, de las funciones esenciales del Estado: brindar seguridad a
los ciudadanos.
Desde
el Gobierno de la República, por su instrucción, no hemos dejado de estar
presente el Gabinete, con la presencia siempre de sus titulares: del Secretario
de la Defensa, del Secretario de la Marina, de la Procuradora General de la
República, del Comisionado Nacional de Seguridad, del Secretario General del
CISEN y, por supuesto, de su servidor.
Por
eso, conforme a sus instrucciones, las instituciones federales han empleado
todas sus capacidades, sin escatimar, ni condicionar apoyos, para combatir el
fenómeno delictivo a lo largo y ancho de la geografía nacional.
No
obstante, estos esfuerzos, reitero, es urgente el fortalecimiento de las
capacidades locales.
Cada
orden de Gobierno, desde el ámbito de sus competencias, está llamado a actuar
con sentido de urgencia para implementar acciones inmediatas y consolidar
políticas de largo plazo a trascender coyunturas y calendarios políticos para
fortalecer la seguridad de la población.
A
las comunidades afectadas por la delincuencia no les interesa, ni
circunscripciones, ni divisiones de competencias. Por ello, el justo reclamo de
la sociedad por mayores condiciones de seguridad debe ser respondido con
acciones serias, integrales y con visión de Estado.
De
lo que hagamos en el presente depende en gran medida que en esta materia el
futuro inmediato del país sea distinto y mejor del pasado reciente.
Bajo
su liderazgo, señor Presidente, seguiremos actuando con altura de miras,
trabajando para la construcción y consolidación de un México con una seguridad
duradera y una justicia efectiva.
Gracias
por su atención.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor Secretario.
En
términos de lo expuesto por el señor Secretario de Gobernación, se somete a la
consideración de las y los integrantes del Consejo Nacional que las entidades
federativas, en coordinación con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional
de Seguridad Pública establezcan las acciones necesarias para operar el Número
Único de Atención de Llamadas de Emergencias 911, con base en los siguientes
ejes:
Primero.
Establecer los procedimientos de coordinación entre órdenes de Gobierno y las autoridades
e instancias públicas y privadas competentes, conforme al plan de
implementación establecido.
Y,
segundo, desarrollar campañas de difusión para que la población conozca las
etapas y fechas de entrada en funcionamiento del Número Único de Emergencias
911 en cada una de las entidades, así como para promover un uso consciente y
responsable del mismo.
Asimismo,
el Consejo Nacional toma nota de que el mandato constitucional para la
existencia de la Secretaría Técnica del Consejo de Coordinación para la
Implementación del Sistema de Justicia Penal es perentorio, por lo que el
Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública será
responsable de la consolidación del Sistema de Justicia Penal, en coordinación
con las instancias competentes.
En
este sentido, se somete a su consideración aprobar que el Consejo Nacional
instruya al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública
para que funja como enlace operativo e integrante de la instancia tripartita,
coordinadora, de la consolidación del Sistema de Justicia Penal.
Quienes
estén a favor de aprobar los acuerdos mencionados, les solicito expresarlo
levantando la mano.
Los
acuerdos han sido aprobados.
A
continuación, para atender el séptimo punto del Orden del Día, cedo el uso de
la palabra al doctor Juan Manuel Carreras López, Gobernador del Estado de San
Luis Potosí.
-GOBERNADOR
JUAN MANUEL CARRERAS LÓPEZ: Buenas tardes.
Señor
Presidente de la República, licenciado Enrique Peña Nieto; señores Presidentes
de las Cámaras de Diputados y de Senadores del Congreso de la Unión; señor
Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia.
Señores
Secretarios de Estado e integrantes del Gabinete de Seguridad; señora
Procuradora General de la República, señor Presidente de la Comisión Nacional
de Derechos Humanos.
Señora
y señores Gobernadores.
Consejeras
y Consejeros ciudadanos.
Representantes
de los medios de comunicación.
Señoras
y señores:
Generar
entornos que favorezcan la convivencia y seguridad ciudadana de manera
cotidiana es un compromiso que nos convoca a todos los niveles de Gobierno y a
toda la sociedad.
El
éxito en reducir el delito a su mínima expresión depende, no sólo de la suma y
la coordinación de las corporaciones de seguridad pública, sino también de la
activa participación de la sociedad en este objetivo.
Nuestro
país cuenta con la Ley General para la Prevención Social de la Violencia y la
Delincuencia, que establece las bases de coordinación intergubernamental para
definir y promover un conjunto de políticas públicas, programas y acciones,
orientadas a reducir factores de riesgo que favorezcan la generación de
violencia y delincuencia, así como a combatir las distintas causas y factores
que se generan por ella.
Asimismo,
contamos con un programa de prevención social de la violencia y la delincuencia
con participación ciudadana, que es uno de los 10 programas con prioridad
nacional, aprobados por este Consejo Nacional.
Además,
señor Presidente, las entidades federativas reconocemos su interés en otorgar
mayores apoyos a la prevención de la violencia y la delincuencia.
En
los últimos cuatro años, el Gobierno de la República ha invertido más de 13 mil
millones de pesos en programas de prevención, que han favorecido a todas las
entidades federativas.
Los
gobiernos locales constituimos un eje de primordial importancia por la cercanía
a las problemáticas que enfrentan nuestras comunidades, nuestras regiones.
Por
ello, desde 2012 se promueve la creación y el fortalecimiento de los Centros
Estatales de Prevención Social.
Inclusive,
a partir de 2015, el Programa de Nacional de Prevención Social de la Violencia
y la Delincuencia con participación ciudadana se redefinió, incorporando como
uno de sus objetivos, el desarrollo de las capacidades en las instituciones
locales para el diseño de políticas públicas, destinadas a la prevención social
de la violencia y la delincuencia con participación ciudadana en temas de
seguridad pública.
Todos
los estados hemos hecho esfuerzos y avances en la materia, pero tenemos que
fortalecer e integrar mejor estos esfuerzos para avanzar más rápido y con mayor
eficacia en la prevención del delito y la violencia, evitando esfuerzos
aislados o dispersos.
Las
entidades federativas debemos asegurar que cada uno de estos Centros Estatales
de Prevención Social cumplan con su responsabilidad de articular la política
pública en la materia de atención a las necesidades de su entorno, y se diseñen
programas de atención especial para grupos vulnerables, como las niñas, niños,
adolescentes, jóvenes y mujeres, bajo un esquema de operación coordinado entre
órdenes de Gobierno y con apego a protocolos homologados para un adecuado
funcionamiento.
Por
ello, y éste es mi planteamiento a este Consejo Nacional de Seguridad Pública,
propongo se acuerde la realización de cuatro acciones específicas para la
consolidación y avance de las políticas públicas en esta materia.
Primero.
Que se realicen diagnósticos regionales y estatales para identificar áreas de
oportunidad y atender oportuna e integralmente las acciones en materia de
prevención social de la violencia y la delincuencia.
Segundo.
Que se impulse un modelo homologado para los Centros Estatales de Prevención de
la Violencia y la Delincuencia, de manera que podamos replicarlo en todas las
entidades federativas, mejorando a las mismas.
Tres.
Se fortalezca la asignación de recursos en los tres órdenes de Gobierno,
focalizando su destino acciones específicas de protección de la niñez, la
juventud y las mujeres.
Y
cuarto. Se promueva la participación de las instituciones académicas del país,
así como de la sociedad civil, en la evaluación de los programas federales y
estatales, que contribuya a la prevención social de la violencia y la
delincuencia, y al mejoramiento de la calidad de vida de la sociedad.
Por
su atención, muchas gracias.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor Gobernador.
Conforme
al orden del día, corresponde el uso de la voz a la maestra María Angélica
Garnica Sosa, invitada permanente de la sociedad civil a este Consejo.
-MTRA.
MARÍA ANGÉLICA GARNICA SOSA: Gracias.
Señor
Presidente; integrantes del Consejo Nacional; invitados de la sociedad civil.
Los
retos para atender las preocupaciones de la población en materia de violencia e
inseguridad son inmensos y complejos.
El
deterioro de la convivencia social, la naturalización de la violencia, la falta
de una cultura de la legalidad, la corrupción, la impunidad, son fenómenos multicausales
y resultado de muchos años de gestación, por lo que es claro nos llevará mucho
tiempo revertir estos fenómenos.
Pero
hoy celebro que tengamos la oportunidad de repensar la seguridad pública a
partir de la prevención.
Socialmente
hay una convicción unánime: la seguridad pública, la estrategia de seguridad
pública falló y se debe cambiar.
Frente
a eso la alternativa es la prevención, es la única vía que permite de manera
viable y sostenible atender de fondo las causas que están originando la violencia
y la delincuencia en nuestro país.
No
señalaré los errores en materia de seguridad y me centraré en proponer un
decálogo de la prevención para México, el cual considera:
Uno.
Urge hacer realidad la perspectiva de transversalidad que plantea el PRONAPRED,
para lo que se requiere integrar y coordinar acciones entre la SEP, la SEDATU,
INMUJERES, CONAVI, IMJUVE, CONADIC, secretarías de movilidad de los estados,
entre otros.
Dos.
Focalizar y establecer prioridades de atención para todos los municipios, pero
especialmente para aquellos con alta incidencia delictiva.
Tres.
Guiar la integración de los centros de prevención y la elaboración de los
programas en la materia, a nivel estatal y municipal, para lo que se deben dar
directrices básicas y enfoques prioritarios.
Hagamos
a un lado las improvisaciones que tanto nos han costado.
Cuatro.
Proporcionar, desde el centro nacional, modelos, estrategias y proyectos
innovadores para las niñas, niños, mujeres, jóvenes, policías, población
penitenciaria, entre otros.
Cinco.
Se requiere evaluar las acciones en materia de prevención e identificar
experiencias exitosas para su réplica en otros ámbitos territoriales.
Seis.
Se necesita profesionalizar a los servidores públicos a cargo de la prevención
en todos los niveles de gobierno.
Siete.
Integrar un sistema de información geográfico con datos sobre incidencia
delictiva, violencia hacia las niñas y las mujeres, violencia escolar, consumos
de riesgo, personas desaparecidas, inseguridad en el transporte y acciones en
materia de prevención.
Ocho.
Se requiere incorporar la participación de diversos actores en el desarrollo y
evaluación de las políticas de prevención, así como en el codiseño de
estrategias de transparencia y de datos abiertos.
Nueve.
Es urgente vigilar y evaluar el uso de los recursos públicos, destinados a la
prevención, a través de observatorios o verificaciones en campo.
Y
diez. Para todo esto tenemos dos instancias fundamentales que requieren
coordinar acciones: uno, es el Centro Nacional de Prevención del Delito y
Participación Ciudadana del Secretariado Ejecutivo, y la Subsecretaría de
Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación.
Este
decálogo de la prevención para México busca ser una base para conducir las
acciones aisladas hacia un modelo integral de prevención a nivel nacional.
Sin
duda, el camino para sanar el tejido social en nuestro país es largo y sinuoso.
Y todos, todos, debemos participar en su recuperación.
Pero
corresponde al pleno de este Consejo y a cada uno de sus integrantes dar
respuestas claras y contundentes a los habitantes de este país para garantizar
su seguridad.
Señor
Presidente:
Necesitamos
fortalecer y mejorar el uso de los recursos públicos en materia de prevención.
Y es indispensable agilizar los mecanismos de coordinación fiscal que
garanticen la llegada de los recursos federales a los estados y municipios en
materia de prevención.
Señores
Gobernadores:
En
este marco, a ustedes les quedan dos tareas: que es crear o fortalecer los
Centros Estatales de Prevención, de acuerdo con el punto que se aprobó
anteriormente; e integrar sus programas de prevención.
No
tengamos dudas, ninguna. Las acciones de prevención, hoy, son el futuro de
nuestros niños, nuestras niñas, los jóvenes y las mujeres.
Así
de importante es. Y no podemos postergar la construcción de ese futuro.
Todos
tenemos tareas para lograr el México en paz y con seguridad que anhelamos.
Y
desde la sociedad civil aportaremos modelos y metodologías para atender de
manera integral y participativa la prevención social de la violencia.
Recordemos
que la sociedad civil es la principal fuerza para trabajar la prevención.
Y
créanme que tal vez sea la única manera y el único camino que permita el
encuentro, la reconciliación, la paz y la justicia que le debemos a tantas
familias que han sido víctimas de la violencia y la delincuencia en nuestro
querido México.
Es
cuánto.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, maestra María Angélica Garnica Sosa.
En
atención a lo expuesto por el señor Gobernador de San Luis Potosí y a la
consejera Angélica Garnica, se somete a su consideración que la Secretaría de
Gobernación, por conducto de la Subsecretaría de Prevención y Participación
Ciudadana, y el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad
Pública, consoliden la política pública en materia de prevención social de la
violencia y la delincuencia, con base en los siguientes puntos:
Elaborar
un diagnóstico de los Centros Estatales de Prevención del Delito, diseñar un
modelo homologado para su operación y funcionamiento; focalizar recursos de los
tres órdenes de Gobierno para la ejecución de programas dirigidos especialmente
a niñas, niños y adolescentes, jóvenes y mujeres, y conformar grupos colegiados
de carácter civil y académico en cada entidad federativa para supervisar y
evaluar los programas de prevención social, que sean financiados con recursos
públicos.
Quienes
estén a favor de aprobar este acuerdo, les pido manifestarlo levantando la
mano.
Gracias,
señoras y señores Consejeros, el acuerdo ha sido aprobado.
A
continuación, cedo el uso de la palabra al maestro Adrián Emilio de la Garza
Santos, Presidente Municipal de Monterrey y Presidente de la Conferencia
Nacional de Seguridad Pública Municipal.
-MTRO.
ADRIÁN EMILIO DE LA GARZA SANTOS: Muchas gracias.
Con
su permiso, señor Presidente.
Integrantes
de esta mesa.
Gobernadora.
Señores
Gobernadores.
Distinguidos
representantes de la sociedad civil.
Honorables
integrantes del Consejo Nacional de Seguridad Pública.
El
pasado viernes 26 de agosto, asumí la tarea de presidir la Conferencia Nacional
de Seguridad Pública Municipal.
El
día de hoy, ratifico mi compromiso de contribuir al fortalecimiento de la
política y las estrategias que a nivel nacional ha impulsado desde la
Presidencia de México el licenciado Enrique Peña Nieto, así como este Consejo
Nacional de Seguridad Pública, para seguir construyendo un país de leyes e
instituciones sólidas.
Mantener
el orden jurídico y el Estado de Derecho es una obligación de los gobiernos
democráticos y, desde luego, una de las demandas más sentidas de los mexicanos.
Particularmente,
en el ámbito municipal, estamos en mejores posibilidades de impulsar acciones
efectivas en el tema de la seguridad pública, en virtud de la cercanía que
tenemos con la gente y el conocimiento en nuestros entornos.
Nos
toca a los municipios, por ejemplo, intervenir y mediar entre los vecinos que
mantienen diferencias, que, en muchas ocasiones, aunque sean por motivos
menores, resultan largos y costosos para las familias.
Las
pugnas entre las personas son inevitables, pero una convivencia en armonía
depende de que existan mecanismos efectivos que resuelvan de manera rápida y
eficaz esas diferencias, antes de que ameriten la intervención de una autoridad
jurisdiccional.
Por
ello, la justicia cívica juega un papel relevante en la prevención y atención
de conflictos, pues establece reglas mínimas de comportamiento y de sana
convivencia.
Por
otra parte, sabemos que los entornos de legalidad son un factor de riesgo
porque promueven ambientes que infringen las leyes y normas con las que
pretendemos garantizar la convivencia pacífica de los ciudadanos.
Por
ello, impulsar y fortalecer en cada uno de los municipios la cultura de la
legalidad constituye un factor que incide en la prevención de la violencia y,
desde luego, contribuye a reducir los niveles de la impunidad.
Se
trata de construir, en el marco de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública
Municipal, un modelo que propicie una convivencia no violenta y basada,
precisamente, en el desarrollo de una cultura de legalidad a partir de
estrategias centradas en la mediación y en la conformación de redes ciudadanas,
que reconozcan derechos y obligaciones de los ciudadanos.
Sabemos
que diversas entidades federativas y municipios ya cuentan con ordenamientos
jurídicos, que regulan la convivencia armónica de las personas a través de
leyes o reglamentos de cultura cívica.
Sin
embargo, se requiere establecer criterios homologados que contribuyan a
supervisar y atender, de manera clara y eficaz, la convivencia diaria de las
personas, con la complejidad que esto conlleva.
Por
otra parte, aún prevalecen marcos jurídicos que regulan la convivencia social
desde una perspectiva que no corresponde a la realidad social que vivimos en el
Siglo XXI.
Por
ello, la propuesta es que trabajemos en el diseño y operación de un modelo
homologado que pueda ser utilizado por todos los municipios del país para
impulsar la cultura de la legalidad, el buen gobierno y la justicia cívica en
beneficio de todos los mexicanos.
Éste
es uno de los retos inaplazables que debemos enfrentar en el corto plazo y con
respeto pleno a la autonomía municipal. Contamos con el sustento legal que nos
brinda la Ley General de la Prevención Social de la Violencia y la
Delincuencia, y los apoyos que otorga el FORTASEG dentro del Programa de
Cultura de la Legalidad.
Es
nuestro deber promover políticas públicas innovadoras y efectivas en beneficio
de la sociedad, que consoliden el orden, la armonía y la paz que merecen y
reclaman los ciudadanos.
Muchas
gracias.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor Presidente Municipal.
Conforme
a lo expuesto, se somete a la consideración de este Consejo instruir a la
Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal para que en coordinación
con la oficina del Comisionado Nacional de Seguridad y el Secretariado
Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública elabore un modelo
homologado de justicia cívica y buen gobierno, que incluya una norma tipo,
perfiles y procesos de capacitación de operadores y programas de cultura de la
legalidad para los municipios de México.
Quienes
estén a favor de aprobar este acuerdo, sírvanse manifestarlo levantando la
mano.
Gracias,
señoras y señores Consejeros.
El
acuerdo ha sido aprobado.
A
continuación, hará uso de la palabra el licenciado Mario López Valdez,
Gobernador del Estado de Sinaloa.
-GOBERNADOR
MARIO LÓPEZ VALDEZ: Licenciado Enrique Peña Nieto, Presidente de los Estados
Unidos Mexicanos; señor Secretario de Gobernación; señor Presidente de la
Cámara del Senado; señor Presidente de la Cámara de Diputados; Presidente de la
Suprema Corte de Justicia; Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos
Humanos; señores miembros del Gabinete de Seguridad; señora Gobernadora;
compañeros Gobernadores; Jefe de Gobierno; señoras y señores integrantes e
invitados del Sistema Nacional de Seguridad Pública:
Muy
buenas tardes a todos.
Es
para su servidor un honor tener la oportunidad de participar en esta
Cuadragésima Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública y hacer algunos
comentarios en cuanto a temas cruciales para el fortalecimiento del Sistema
Nacional de Seguridad, y que me permito exponer para su amable consideración.
Sin
duda, en tiempos recientes hemos registrado avances, y de esa experiencia a
través de aproximaciones sucesivas, podemos extraer lecciones que nos permitan
mejorar la eficiencia y eficacia en la provisión de la seguridad, un bien
básico para la ciudadanía.
Precisamente
ayer, a nuestro Presidente, durante su estancia en Mazatlán, le hacía un
comentario. Que la realidad, pese a contratiempos, realidades y a muchas
resistencias, estamos mucho mejor que en la percepción.
Estoy
seguro de que, si seguimos avanzando en las metas y objetivos que nos hemos
propuesto, vamos a mejorar esa percepción, al tiempo que seguimos mejorando
nuestra realidad.
Sobre
el primer tema que hago referencia, el relativo a la aprobación de los
lineamientos del certificado único policial, cabe destacar que ya se han
elaborado, de acuerdo con lo establecido en la ley.
Cuál
es su objetivo.
Es
certificar que el personal de las instituciones policiales, de procuración de
justicia y del sistema penitenciario tenga el perfil, los conocimientos, la
experiencia, las habilidades y aptitudes para el desempeño de sus funciones.
Todo ello en atención a lo establecido en la Ley General del Sistema Nacional
de Seguridad Pública.
Estos
lineamientos son el resultado de un trabajo interinstitucional y reconocemos el
aporte de todas las entidades e instituciones que en este esfuerzo
participaron.
Contamos
ahora con un instrumento que tiene alcances específicos en seguridad pública,
en procuración de justicia y en un sistema penitenciario.
Por
lo que se refiere al segundo tema, específicamente la actualización del
programa rector de profesionalización, debemos reconocer que es el principal
instrumento de la política pública en materia de capacitación para los
elementos de las instituciones policiales, de procuración de justicia y del
sistema penitenciario del país.
Con
la entrada en vigor del Sistema Penal Acusatorio se han generado nuevas
necesidades de capacitación, ajustes a los perfiles existentes e inclusión de
otros nuevos, como el de la policía en funciones de seguridad procesal, la
justicia penal para adolescentes, la ejecución de sanciones penales y la
vigilancia y seguimiento de medidas cautelares, entre otros.
Es
necesario, además, diseñar nuevos perfiles, a fin de fortalecer el sistema
penitenciario nacional, ya que actualmente el programa rector sólo contempla la
malla curricular para oficiales de guarda y custodia.
El
tercer asunto al que hago referencia es al proyecto de reforma legislativa, que
actualiza el marco jurídico en materia de información y control vehicular.
Hay
que decir que la ley en la materia, la Ley del Registro Público Vehicular, a
casi 12 años de su aprobación, presenta insuficiencias notorias. Los objetivos
del Registro Público Vehicular no se cumplen cabalmente.
No
hay sustento legal para exigir información a quien no la envíe, no regula a
entidades federativas y sujetos obligados respecto a la colocación de
engomados. Está sustentado en una ley federal obsoleta, que no considera
totalmente la distribución de competencias, y actualmente 20 entidades
federativas no han logrado una implementación integral del Registro Público
Vehicular.
De
ahí que este Registro deba contar con un nuevo marco jurídico, que permita
coadyuvar con una información oportuna para una mejor operación y toma de
decisiones en materia de seguridad, garantizar legalidad para la adquisición y
uso de vehículos que circulan en territorio nacional, garantizar identificación
y control vehicular oportunos y regularizar la procedencia y estancia legal de
los vehículos.
De
ahí la conveniencia que el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de
Seguridad Pública elabore, a partir de estas consideraciones, un proyecto de
reforma legislativa que permita la actualización de este marco jurídico.
Finalmente,
hay necesidad también de actualizar los criterios generales de administración y
ejercicio del Fondo de Aportaciones a la Seguridad Pública para simplificar el
proceso de reprogramación de recursos Federales.
El
ejercicio de estos recursos ha sido siempre una de las tareas importantes que
realizamos, ya que, a través de su adecuada aplicación, logramos alcanzar las
metas definidas para el cumplimiento de estrategias y prioridades nacionales en
esta materia.
Debemos
buscar mecanismos que mejoren los procesos que involucran el ejercicio de
recursos, de ahí que sea importante la actualización de los criterios generales
que fueron aprobados en la pasada sesión ordinaria del Consejo.
Esta
actualización permitirá a entidades e instancias Federales competentes
simplificar y facilitar el proceso para reprogramar recursos asignados y
convenidos en los ya conocidos convenios y anexos técnicos.
Así
podemos dirigirlos a prioridades nacionales en Seguridad Nacional que sean
claves en nuestras entidades, lo que, sin duda, influirá en el cumplimiento de
metas, normativa vigente y principalmente en el bienestar de la ciudadanía, que
demanda mejores condiciones de seguridad y justicia.
Muchas
gracias por su atención.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor Gobernador.
Conforme
a lo expuesto por el señor Gobernador de Sinaloa, se someten a su consideración
los siguientes acuerdos:
Primero.
Aprobar los lineamientos para la emisión, desarrollo e implementación del
certificado único policial, cuyo cumplimento estará a cargo de los tres órdenes
de Gobierno.
Segundo.
Conformar un grupo de trabajo interinstitucional bajo la coordinación del
Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública para actualizar
el programa rector de profesionalización.
Tercero.
Instruir al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública a
elaborar un proyecto de reforma que actualice el marco jurídico a las
necesidades actuales en materia de información y control vehicular con las
aportaciones de las instancias públicas y privadas competentes.
Y
cuarto. Aprobar la actualización de los criterios generales para la
administración y ejercicio de los recursos del Fondo de Aportaciones para la
Seguridad Pública de los Estados y del Distrito Federal, el FASP, para el
ejercicio fiscal 2016 y subsecuentes a efecto de que se simplifique el proceso
de reprogramación de recursos Federales.
Quienes
estén a favor de aprobar los acuerdos mencionados, les solicito manifestarlo
levantando la mano.
Gracias,
señoras y señores consejeros. Los acuerdos han sido aprobados.
Conforme
al orden del día, cedo el uso de la palabra al maestro Renato Sales Heredia,
Comisionado Nacional de Seguridad.
-COMISIONADO
RENATO SALES HEREDIA: Con su permiso, señor Presidente de la República.
Muy
buenas tardes tengan todas y todos ustedes.
A
continuación, me permito presentar a la consideración de las y los consejeros
los siguientes cuatro puntos para mejorar la provisión de seguridad a la ciudadanía.
El
primero se refiere a la Estrategia Interinstitucional para la Implementación de
la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes. Con
la publicación de dicha ley nacional, el pasado 16 de junio, se busca proteger
el interés superior del adolescente y su formación integral, privilegiando las
medidas alternativas de solución de conflictos y las sanciones no privativas de
libertad.
Para
la implementación de dicha ley es necesario iniciar los trabajos que conduzcan
al establecimiento de autoridades administrativas especializadas, el diseño de
protocolos en la atención de adolescentes en conflicto con la ley, la
profesionalización de los operadores, y de manera paralela, focalizar el
destino de recursos del FASP, FORTASEG, PRONAPRED, del ejercicio fiscal 2017
para orientarlos a este rubro.
Por
ello, se propone a este Consejo la conformación de un grupo de trabajo
interinstitucional integrado por la Procuraduría General de la República, la
Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana, el Sistema Nacional de
Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, el Secretariado Ejecutivo
del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Comisión Nacional de Seguridad.
El
segundo tema se refiere a la elaboración de un modelo homologado de unidades de
Policía Cibernética. El Programa Nacional de Seguridad Pública 2014-2018
estableció como una de sus estrategias detectar y atender oportunamente los
delitos cibernéticos.
Entre
las principales líneas de acción consideradas en el tema, se encuentran: el
impulso a la modernización del marco jurídico, el fortalecimiento de las
capacidades e infraestructura de las instituciones, la creación de unidades
especializadas, el diseño de protocolos de operación homologados y el
desarrollo de un modelo de Policía Cibernética Estatal.
La
creación de un modelo homologado para las unidades permitirá conjuntar
esfuerzos entre los ámbitos de gobierno estatal y Federal.
El
tercer tema tiene que ver con la actualización y homologación de procesos
regulatorios en materia de seguridad privada.
La
regulación de los servicios de seguridad privada es una tarea compartida que
implica la participación coordinada de los tres órdenes de Gobierno.
Regulada
de manera efectiva y responsable, la seguridad privada representa una
contribución a la provisión de seguridad para los ciudadanos.
Por
esta razón, la agenda de seguridad privada se incorporó a los trabajos de la
Conferencia Nacional de Secretarios de Seguridad Pública.
Este
marco ha permitido el desarrollo de un trabajo conjunto con las entidades
federativas para armonizar los procesos regulatorios en los ámbitos estatal y
federal.
Para
continuar con estos esfuerzos se propone la creación de un grupo de trabajo
para impulsar la reforma al marco jurídico, a fin de armonizar los procesos
regulatorios a nivel nacional y establecer las bases de coordinación para el
registro único de empresas, personal y equipo de seguridad privada, así como
acciones de verificación y certificación del personal y de las empresas e
instituciones que brindan dichos servicios.
El
cuarto, y último tema que se pone a consideración, contempla la elaboración de
registros biométricos para identificar a las personas privadas de la libertad
mediante huellas dactiloscópicas, fotografías con calidad biométrica e iris
ocular.
Durante
la Trigésima Octava Sesión de este Consejo se acordó consolidar el Registro
Nacional de Información Penitenciaria.
En
cumplimiento a dicho acuerdo la Conferencia Nacional del Sistema Penitenciario
acordó la elaboración de los referidos registros biométricos que permitirán contar
con una herramienta adicional para la administración de las instancias que
conforman el sistema penitenciario nacional, además permitirá eliminar la
posibilidad de duplicidades, registros incorrectos, homonimias, y será útil
para implementar acciones preventivas y de vinculación con investigaciones
vigentes relacionadas con hechos delictivos pasados.
Cabe
además destacar que el registro biométrico potenciará las capacidades del
Registro Nacional de Información Penitenciaria, integrado a la Plataforma
México.
Es
cuánto. Muchas gracias por su atención.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor
Comisionado.
A
continuación, corresponde el uso de la voz a la doctora Elena Azaola Garrido,
invitada permanente de la sociedad civil a este Consejo.
-ELENA
AZAOLA GARRIDO: Buenas tardes.
Agradezco
mucho la oportunidad que me brindan para poder expresar estas palabras.
Quisiera
colocar sobre la mesa de este Consejo un tema que tradicionalmente ha sido
ignorado o relegado, no obstante que tiene una importancia decisiva para poder
avanzar en los grandes retos que hoy enfrenta nuestro país en materia de
seguridad: Me refiero a la situación de los adolescentes que han cometido
delitos graves.
Recientemente
he tenido la oportunidad de recorrer prácticamente todas las entidades del
país, con el propósito de escuchar de viva voz sus testimonios y así poder
entender su situación y comprender qué es lo que los llevó a involucrarse en
actividades delictivas.
Pienso
que sólo si somos capaces de escucharlos con cuidado, estaremos en condiciones
de brindarles la atención especializada que con urgencia requieren.
Comenzaré
por compartirles muy brevemente la historia de Benito, uno de los cerca de
cuatro mil adolescentes hombres y mujeres que se encuentran privados de su
libertad en uno de los 54 centros de internamientos para adolescentes que
existen en nuestro país.
Benito
es un chico de 17 años, de origen indígena, que lleva dos años privado de su
libertad y a quien todavía le quedan siete años más para completar su
sentencia.
Cursó
hasta el primer grado de la secundaria y dice que sí le gustaba la escuela,
aunque tuvo que dejarla, dice que no tenía ni para comer.
Sobre
su infancia, relata: Yo nunca he tenido familia. A mí me adoptaron porque tuve
un accidente y mi mamá me abandonó en el hospital. Anduve en casas hogares y
luego me adoptó una familia. A mi papá lo mataron cuando yo tenía dos meses de
nacido. Y mi mamá se drogaba y se prostituía.
Yo
mejor dejé a la familia que me adoptó, para ir a apoyar a mi mamá, aunque mi
mamá nunca me ha apoyado. Al principio anduve solo en las calles y luego, desde
los siete años, me fui a trabajar en un rancho, pero como no me pagaban muy
bien, mejor me fui a robar.
Benito
fue acusado de robo con violencia y homicidio. Y él explica: Yo vendía drogas,
junto con mi primo. También robábamos tiendas, casas, nada más para el vicio,
por las pastillas que tomábamos nos daban ganas de robar, la droga nos la
regalaba un señor que nos quería enviciar.
Y
sobre el homicidio dice: Un señor nos compró marihuana, pero no quiso pagar,
entonces fuimos a su casa para que nos pagara, pero nos sacó un cuchillo, y mi
primo y yo lo matamos primero.
Aunque
ya lo habían detenido varias veces, la última vez que lo detuvo la policía lo
golpeó, Benito dice: Me ahogaban con una bolsa, me pegaban con un machete, me
dejaron la panza morada, me estuvieron golpeando como cuatro horas.
Hasta
aquí la historia.
En
el Centro de Internamiento donde se encuentra, no, todavía no, señala que la
atención que les dan le parece regular, sobre todo, porque no lo sacan de sus
dormitorios, lo que menos le gusta de ese centro es la comida y los golpes,
aquí nada más te dan de fregadazos, pero no te ayudan en nada.
Y
luego reflexiona: Algunos vienen a empeorar aquí, otros no, de repente se hacen
muchos pleitos, porque nos tienen todo el tiempo encerrados en las celdas y por
eso hay mucho estrés, a veces los custodios se sobrepasan, porque también ellos
se estresan.
Ellos
no saben lo que uno ha pasado, no piensan, nada más actúan, aquí se ahorcó hace
poquito un chavo que era amigo mío y eso me jaló a la depresión, el chavo se
colgó porque no venía su familia y siempre lo tenían encerrado.
Aquí
sí termina la historia.
Bueno,
después de haber escuchado 730 historias de adolescentes similares a las de
Benito, me atrevo a decir que no hicimos lo que tendríamos que haber hecho en
su momento para evitar que historias como ésta se repitan hoy en día por todo
el país.
Y
qué tendríamos que haber hecho.
En
primer lugar. Asegurar que cuando un niño o niña no cuente con los cuidados de
sus padres, pueda contar con un sólido sistema de protección para evitar que
quede en el abandono y qué más, asegurar que cualquier niño o niña que sufra de
abusos o malos tratos, reciba toda la atención y la protección que requiere.
Y
qué más.
Contar
con un sistema educativo que no eche fuera a los niños difíciles y con
problemas de comportamiento, sino que ponga en marcha de inmediato programas
especializados para retenerlos y que impida que estos niños abandonen la
escuela.
Y
qué más.
Saber
que los niños y niñas que han abandonado sus casas o que cuentan con débiles
lazos de protección por parte de su familia, son los más susceptibles de ser
captados por los grupos de la delincuencia organizada.
Y
qué más.
Pues
que cuando caen en manos de la policía sean tratados con respeto y humanidad si
queremos que ellos, a su vez, respeten a las instituciones y tengan una
experiencia de legalidad.
Y
qué más.
Pues
que cuando se les prive de su libertad sea para brindarles todos los elementos
y las herramientas que requieren para poderse reincorporar como personas
responsables, productivas y respetuosas de las normas sociales.
Para
terminar, quiero decirlo fuerte y con plena convicción, estos muchachos tienen
todas las posibilidades de rehabilitarse si les brindamos la atención
especializada y las oportunidades que requieren.
Los
invito, señores gobernadores, a hacerlo.
Numerosos
estudios han demostrado que la gran mayoría de los adolescentes que cometen
delitos abandonan estas conductas una vez que culmina su proceso de maduración.
Éste
es el curso natural de las cosas a menos que nos empeñemos en ignorarlos, en
abandonarlos o en negarles los derechos y las oportunidades que requieren.
Entonces,
sí, estaremos contribuyendo a arraigarlos en una carrera delictiva.
Muchas
gracias.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Muchas gracias, doctora Elena Azaola:
En
términos de lo expuesto por el Comisionado Nacional de Seguridad y la doctora
Azaola, se someten a su consideración los siguientes acuerdos.
Primero.
La conformación de un grupo de trabajo interinstitucional integrado por la
Procuraduría General de la República, la Oficina del Comisionado Nacional de
Seguridad, el Órgano Administrativo Desconcentrado, Prevención y Readaptación
Social, la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana, el Sistema
Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes y el
Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, con el objeto
de elaborar la estrategia para la implementación de la Ley Nacional del Sistema
Integral de Justicia Penal para Adolescentes.
Segundo.
La instrucción para que el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de
Seguridad Pública y la Oficina del Comisionado Nacional de Seguridad, por
conducto de Policía Federal, elaboren un modelo homologado de unidades de
policía cibernética y el proceso para su implementación.
El
modelo considerará el establecimiento de fiscales con capacitación
especializada bajo la coordinación de la Procuraduría General de la República.
Tercero.
La instrucción para que la Oficina del Comisionado Nacional de Seguridad
conforme un grupo de trabajo con las entidades federativas para realizar
acciones tendientes a la regulación y homologación de servicios en materia de
seguridad privada.
Cuarto.
La instrucción para que la Oficina del Comisionado Nacional de Seguridad, por
conducto del órgano administrativo desconcentrado, prevención y readaptación
social, y en el marco del fortalecimiento de la política nacional del Sistema
Penitenciario elaboren los registros biométricos para identificar a las
personas privadas de la libertad, incluyendo huellas dactiloscópicas,
fotografía con calidad biométrica e iris ocular.
Quienes
estén a favor de aprobar los acuerdos mencionados les solicito expresarlo
levantando su mano.
Gracias,
señoras y señores consejeros.
Los
acuerdos han sido aprobados.
A
continuación, conforme al Orden del Día, cedo el uso de la palabra al doctor
Eruviel Ávila Villegas, Gobernador del Estado de México.
-GOBERNADOR
ERUVIEL ÁVILA VILLEGAS: Muchas gracias. Buenas tardes.
Saludo
a los titulares de los Poderes de la Unión.
Y,
primeramente, quiero expresar el agradecimiento de los gobiernos locales,
integrantes de este Consejo Nacional de Seguridad, al señor Presidente de la
República, al licenciado Enrique Peña Nieto, por el respaldo que
permanentemente usted y a través de su equipo, del Gabinete de Seguridad, les
han brindado a los gobiernos locales.
Especialmente
el Secretario de Gobernación, el licenciado Miguel Ángel Osorio Chong; las
Fuerzas Armadas han estado respaldando a las entidades, inclusive haciendo a
veces tareas que son muy propias de los gobiernos locales, apoyándonos a
combatir delitos del fuero común, que en estricto sentido deberían ser tarea
local.
Le
reconocemos, señor Presidente, todo su apoyo.
Y
a las Fuerzas Armadas reconocerles todo su respaldo, al Ejército Mexicano, a la
Marina Armada de México, a la Policía Federal, nuestra eterna gratitud.
También
es importante reconocer que debemos fortalecer las entidades federativas
nuestras capacidades locales.
Quiero
saludar y reconocer a los representantes de la sociedad civil por hacer
propuestas muy importantes, por compartirnos reflexiones realmente relevantes,
que son útiles para mejorar en materia local, también en materia Federal.
Es
una muestra de que este Consejo Nacional de Seguridad escucha todas las voces y
recibe todas las propuestas, mismas que son atendidas.
Tomamos
nota, maestra Garnica Sosa, doctora Elena Garrido, de las propuestas que ustedes
han formulado.
Quiero
también saludar a mi compañera Gobernadora, Gobernadores, Jefe de Gobierno, y
especialmente reconocerles a los gobernadores que están a semanas o a meses de
concluir su mandato y que tal vez sea su última sesión en este Consejo de
Seguridad.
Agradecerles
su aportación, su contribución, sus propuestas, sus casos de éxito fueron
tomados en cuenta en esta mesa del Consejo Nacional de Seguridad,
particularmente al Coordinador de la Comisión de Seguridad y Justicia, el
Gobernador César Duarte, su labor de todos ustedes fue muy relevante, los vamos
a extrañar. Desde luego les agradecemos su gran aportación.
Y
ahora sí, y si me permite el señor Presidente de la República pasamos a hacer
cuatro propuestas muy, pero muy concretas.
Primero.
Lo relacionado a la aprobación de la norma para estandarizar las
características técnicas y de interoperabilidad de los sistemas de
videovigilancia de seguridad pública.
Hasta
ahora, hay que reconocerlo, el Sistema Nacional de Seguridad Pública no contaba
con un lineamiento que planeara las características que deberían tener los
sistemas de videovigilancia en el país.
Era
necesario contar con una norma para estandarizar las características técnicas
que permitieran la compatibilidad de los esquemas de videovigilancia.
Hoy
formalmente, y producto del trabajo del Secretario Ejecutivo de este Consejo de
Seguridad, se presenta esta norma que da inicio a la Red Nacional de
videovigilancia, para homologar también los servicios, la atención de llamadas
de emergencia.
La
norma fue hecha con la colaboración del Instituto Politécnico Nacional, nuestra
gratitud a esta gran casa de estudios que incorpora las mejores prácticas
nacionales e internacionales.
Por
poner un ejemplo, para determinar la ubicación y la altura de los postes para
la operación de los sistemas de videovigilancia se analizaron las condiciones
demográficas, delictivas, de actividad económica y de ordenamiento urbano.
La
norma referida incluye diseño de postes, cimentaciones, punto de monitoreo
inteligente, telecomunicaciones, sistemas de almacenamiento y gestión de
control y operación.
También
establece las bases para la interconexión entre municipios, estados e
instancias de seguridad del Gobierno Federal, contempla también las condiciones
de interconexión de sistemas de videovigilancia privados a los sistemas
públicos para optimizar tiempos de respuesta.
Por
ello es muy importante que este Consejo Nacional de Seguridad Pública apruebe
formalmente, en su caso, esta norma técnica e instruya su implementación a nivel
nacional.
Segundo
tema: Es relacionado a la nueva metodología para la evaluación de las bases de
datos criminalísticas y de personal de seguridad pública.
Por
ahora no contamos con una evaluación única de las bases de datos
criminalísticas y de personal a las que refiere la Ley General del Sistema
Nacional de Seguridad Pública.
Por
ello, en la sesión anterior de este Consejo Nacional se instruyó al
Secretariado Ejecutivo a desarrollar una nueva metodología para la evaluación
de las bases de datos criminalísticas y de personal de seguridad pública con el
propósito de mejorar la calidad de la información bajo criterios claros y
transparentes.
Esta
metodología se enriqueció con las aportaciones y comentarios de todos los
estados a través de las instituciones de seguridad pública, procuración de
justicia, así como con los C4 y C5 de los sistemas estatales de seguridad.
Esta
nueva metodología de evaluación permite la conformación de un Registro Nacional
de Personal de Seguridad Pública, un Registro Nacional de Información
Penitenciaria, un Registro Nacional de Armamento y Equipo, entre otros.
Esta
nueva metodología de evaluación ya está homologada con los ordenamientos
legales, con la política de seguridad pública basada en inteligencia,
coordinación y a la exigencia de una mayor participación ciudadana.
Con
esta acción, señor Presidente de la República, señora y señores Gobernadores,
con esta acción abonamos a la transparencia, ya que se vuelven públicos los
criterios y procedimientos de evaluación, lo que nos permitirá una mejor
rendición de cuentas ante la ciudadanía.
El
último tema, perdón, el penúltimo tema, es la revisión y, en su caso, la
adecuación del informe policial homologado.
De
acuerdo a la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública establece
que las instituciones policiales deben registrar en el Informe Policial
Homologado los datos de sus actividades de investigación para realizar un
análisis y registro de la información.
Esta
actividad permite crear una base de datos de Informe Policial Homologado, que
contribuye a sistematizar la información y puede ser de utilidad en las
investigaciones.
Sin
embargo, se identificó que la extensión y complejidad del formato de este
informe policial no es útil en las tareas propias de operación y despliegue
policial.
Por
esta razón se propone revisar y, en su caso, adecuar el formato de este informe
policial único para que cumpla con los fines de investigación en el marco del
protocolo nacional de primer respondiente del Sistema de Justicia Penal.
Cuarto
y último, es el relacionado a la elaboración de programas de trabajo en el
ámbito local, en el ámbito estatal, para el fortalecimiento en las áreas de
análisis, estadística, de las instancias de procuración de justicia y seguridad
pública.
El
Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública elaboró un
diagnóstico por cada entidad federativa que contiene hallazgos en materia de
visión y coordinación institucional, marco normativo, procesos, seguridad de
sistemas, recursos humanos, infraestructura y recursos materiales.
Es
un trabajo realmente muy profesional que debemos sacarle el mayor provecho.
Con
este diagnóstico se elaboró un modelo estándar de operación y un análisis por
entidad federativa y nos mostró que uno de los retos a los que debemos de hacer
frente es el fortalecimiento de las áreas de análisis y estadística de las
instituciones de procuración de justicia y de seguridad.
Es
necesario contar con programas de trabajo que establezcan acciones, plazos y
metas específicas para poderlos ejecutar en los próximos meses y en los
próximos años.
Señor
Presidente de la República.
Integrantes
de este Consejo Nacional de Seguridad.
Es
cuánto.
Y
están a su disposición estas propuestas.
Muchas
gracias.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Gracias, señor Gobernador.
Conforme
a lo expuesto por el señor Gobernador del Estado de México, se someten a la
consideración de este Consejo Nacional los siguientes acuerdos:
Primero.
La aprobación de la norma para estandarizar las características técnicas y de
interoperabilidad de los sistemas de videovigilancia para la seguridad pública
del país.
Segundo.
La aprobación de la nueva metodología para la evaluación de las bases de datos
criminalísticas y de personal de seguridad pública.
Tercero.
La revisión y adecuación del Informe Policial Homologado por parte del Secretariado
Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública en coordinación con la
Procuraduría General de la República y la Oficina del Comisionado Nacional de
Seguridad.
Y
cuarto. Que las entidades federativas elaboren los programas de trabajo correspondientes
para el fortalecimiento de las áreas de análisis y estadística de las
instancias de procuración de justicia y seguridad pública bajo la coordinación
y evaluación del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad
Pública.
Quienes
estén a favor de aprobar estos acuerdos, sírvanse a manifestarlo levantando la
mano.
Gracias,
señoras y señores Consejeros.
Los
acuerdos han sido aprobados.
A
continuación, conforme al orden del día, cedo el uso de la palabra al doctor
Miguel Ángel Mancera Espinosa, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México y
Vicecoordinador de la Comisión de Seguridad y Justicia de la Conferencia
Nacional de Gobernadores.
-DR.
MIGUEL ÁNGEL MANCERA ESPINOSA: Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes.
Licenciado
Enrique Peña Nieto, Presidente de la República.
Señor
Presidente de la Suprema Corte.
Presidente
de la Cámara de Diputados.
Señor
Presidente de la Cámara de Senadores.
Presidente
de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Integrantes
del Gabinete de Seguridad del Gobierno de la República.
Señora
Gobernadora y Gobernadores.
Señoras
y señores.
Amigas,
amigos de los medios de comunicación.
Hemos
sesionado y hemos conocido de muchas de las tareas pendientes aún en materia de
seguridad y de varias de las acciones a implementar en la misma.
En
esta lógica hemos coincidido también en la necesidad de poner especial atención
en el seguimiento de la evolución de la operación del nuevo Sistema de Justicia
Penal en nuestro país.
No
hay ninguna duda que ha sido un gran esfuerzo nacional, ha sido un gran
esfuerzo realizado por todas y por todos, por la sociedad, por las
instituciones, por los medios de comunicación.
Sin
embargo, hoy vemos que hay focos amarillos que nos urgen a revisar las nuevas
formas de intervención de la policía, los nuevos criterios judiciales, las
nuevas medidas precautorias distintas a la prisión preventiva, y si no cómo le
explicamos a la ciudadanía el famoso caso de la llamada puerta giratoria,
corremos el riesgo de generar la percepción o que no funciona el sistema o que
no estamos trabajando.
No
hay duda que debemos revisar el Código Nacional de Procedimientos Penales, hay
que actualizar normas en conflicto con los criterios de la Suprema Corte para
evitar impunidad, utilizar las nuevas tecnologías para evitar así la mínima
aplicación de la prisión preventiva, y que ésta se vuelva un peligro social.
Todo
implica un esfuerzo coordinado de método y, por supuesto, de aplicación de
recursos, debemos evitar a toda costa subejercicios en los municipios, debemos
ayudar a fortalecer capacidades de respuesta y de coordinación.
Por
supuesto, que tenemos varias tareas pendientes en la homologación, aquí ya se
han destacado muchas de ellas. Llamo, también, la atención la necesidad de
homologar los servicios periciales a nivel nacional.
Estamos
a tiempo de evitar que esa alerta amarilla pueda convertirse en un foco rojo.
Hoy
quiero, además, proponer dos acciones muy puntuales, dos modelos que pudieran
abonar a la consolidación de este Sistema Penal, producto del trabajo
coordinado en esta instancia y, por supuesto, con la CONAGO.
Uno.
El modelo homologado de unidades estatales de supervisión a medidas cautelares
y suspensión condicional del proceso, en lo que deriva de los artículos 105
Fracción 8ª, 164 y 176 del Código Nacional de Procedimientos Penales en donde
se prevé la existencia de la autoridad de supervisión de medidas cautelares y
de la suspensión condicional del proceso.
En
esta reforma al citado código publicada el pasado 17 de junio, se detalla que
esta autoridad tiene por objeto realizar la evaluación de riesgo del imputado
con propósito de que el juez de control cuente con elementos para, si es el
caso, decida la medida cautelar diferente a la prisión preventiva, o bien,
imponer ésta si existe un riesgo comprobable.
Llevar
a cabo el seguimiento de medidas cautelares y de la suspensión condicional del
proceso. En el caso de la autoridad encargada que ésta no fuera una institución
de seguridad pública, podrá auxiliarse de la instancia policial correspondiente
para el desarrollo de las funciones.
De
acuerdo con el último informe de la SETEC, existen 29 unidades de medidas
cautelares con características no homologadas, las cuales debemos revisar y,
por supuesto, adecuar para su correcto funcionamiento, así como para tener las
correctas evaluaciones de riesgo.
El
objeto de esta tarea es proporcionar a las partes información sobre evaluación
de riesgo y que la autoridad tenga acceso a sistemas y bases de datos del
Sistema Nacional de Información, además de contar con una base de datos para
dar seguimiento al cumplimiento de las medidas cautelares distintas a la
prisión preventiva, que se vuelven tan importantes en este momento de la
aplicación del nuevo sistema.
El
área de evaluación de riesgo debe proporcionar también información sobre
evaluaciones correspondientes al imputado y a la suspensión condicional de
proceso que se solicitara.
Las
entidades federativas y la federación deberán contar con un órgano encargado de
estas funciones, así se señala, así se mandata, lo que implica y nos implica
necesariamente definir un modelo homologado en cuanto a estructura y operación.
Y
punto número dos. Un modelo nacional de policía de seguridad procesal.
El
artículo 22 de la Ley Nacional de Ejecución Penal establece que la policía
procesal es la unidad dependiente de la Policía Federal o de las instituciones
de seguridad pública en las entidades federativas y tiene, entre sus funciones,
realizar traslados de personas procesadas y sentenciadas, prestar seguridad y
custodia a las personas privadas de su libertad en los recintos judiciales y
cumplir con mandamientos judiciales relacionados con personas sentenciadas y
quienes hayan obtenido libertad condicional, además de las que les confieran
las otras disposiciones aplicables.
Esta
policía es un eslabón fundamental muy importante en la cadena de custodia de
las pruebas para los llamados juicios orales, la definición del modelo nacional
de policía debe considerar que se establezcan atribuciones y necesidades
normativas, estructurales y operativas, que los elementos actúen conforme a
derecho, salvaguardando integridad de las partes, que cuenten con elementos
tácticos, con capacidades de reacción respecto a los derechos de imputados y
garantizar el efectivo manejo y resguardo de indicios.
Además
de considerar y eso creemos que vendría a abonar también en esta tarea, el
utilizar los medios electrónicos en las audiencias a fin de evitar los
traslados de las personas sujetas a proceso en las entidades.
Por
eso nosotros hacemos énfasis en esta otra necesidad de homologación, la que
tiene que ver con estos puntos muy concretos. Y por supuesto que nos deben
llevar a que estos focos amarillos se queden así y pudieran pasar a un mejor
panorama en esta aplicación del nuevo Sistema de Justicia Penal.
Es
cuánto.
Gracias.
-MTRO.
ÁLVARO VIZCAÍNO ZAMORA: Muchas gracias, señor Jefe de Gobierno.
En
atención a lo expuesto, se somete a su consideración que el Secretariado
Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Oficina del Comisionado
Nacional de Seguridad coordinen la elaboración de un modelo homologado de
unidades estatales de supervisión a medidas cautelares y suspensión condicional
del proceso, y un modelo nacional homologado de policía en funciones de
seguridad procesal.
Quienes
estén a favor de aprobar este acuerdo, les pido manifestarlo levantando la
mano.
Gracias,
señoras y señores Consejeros.
El
acuerdo ha sido aprobado.
A
continuación, solicito atentamente al señor Presidente de la República,
licenciado Enrique Peña Nieto, se sirva dirigir su mensaje como Presidente de
este Consejo Nacional y efectúe la declaratoria de los trabajos de esta
Cuadragésima Sesión Ordinaria del Consejo Nacional de Seguridad Pública.
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